PARLAMENTO EUROPEO 2009 - 2014 Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria 28.2.2012 DOCUMENTO DE TRABAJO sobre los preparativos para la Cumbre Río+20 - Reunión interparlamentaria de comisiones del Parlamento Europeo y de los Parlamentos nacionales Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria DT\893910ES.doc ES PE483.726v01-00 Unida en la diversidad ES PREPARATIVOS PARA LA CUMBRE RÍO+20 DOCUMENTO DE REFERENCIA 21 de marzo de 2012 Parlamento Europeo Sala 2Q2 de las 11.00 a las 16.30 horas La reunión interparlamentaria de comisiones sobre los «Preparativos para la Cumbre Río+20» se dividirá en dos sesiones. La primera sesión estará dedicada a un debate sobre «Un marco institucional para el desarrollo sostenible». En la segunda sesión los debates se centrarán en «Una economía ecológica en el contexto del desarrollo sostenible y la erradicación de la pobreza». La siguiente información y documentación de referencia debe servir de guía y orientación para el debate. 1. El camino hacia Río+20 En 1987, la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (CMAD) aprobó un informe titulado «Nuestro Futuro Común» (también conocido como el informe Brundtland) que define el desarrollo sostenible como «un desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades». El informe reafirma que el medio ambiente y el desarrollo son inseparables y deben ser tratadas como una sola cuestión. En junio de 1992, la primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (CNUMAD), celebrada en Río de Janeiro, aprobó un programa para el medio ambiente y el desarrollo en el siglo 21: «Agenda 21: Un programa de acción para el desarrollo sostenible», incluyendo la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente. Por primera vez se abordó el estilo de vida de la civilización actual en el Principio 8 de la Declaración de Río. La urgente necesidad de un cambio profundo en los patrones de consumo y de producción fue ampliamente reconocida, de manera expresa, por los líderes de los distintos Estados. La Agenda 21 reafirmó también que el desarrollo sostenible está delimitado por la integración de tres pilares: económico, social y ambiental. En 1993, la CNUMAD instituyó la Comisión sobre el Desarrollo Sostenible (CDS) para hacer un seguimiento de la aplicación de la Agenda 21. En 2002, diez años después de la Declaración de Río, se convocó en Johannesburgo una conferencia de seguimiento, la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible (WSSD), para renovar el compromiso mundial con el desarrollo sostenible. La conferencia aprobó el Plan de aplicación de Johannesburgo (PAJ) y encargó a la CDS la tarea de llevar a cabo un seguimiento de la aplicación del desarrollo sostenible. El 24 de diciembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución por la que se acordaba celebrar en 2012 la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (CNUDS), ampliamente conocida como «Río+20». La PE483.726v01-00 ES 2/7 DT\893910ES.doc Conferencia Río+20 tiene tres objetivos: asegurar un compromiso político renovado en favor del desarrollo sostenible, evaluar los avances logrados y las deficiencias de aplicación en el cumplimiento de los compromisos asumidos y hacer frente a los nuevos desafíos que están surgiendo. La Conferencia se centrará en los dos temas principales siguientes: - el marco institucional para el desarrollo sostenible - La economía ecológica en el contexto del desarrollo sostenible y la erradicación de la pobreza 2. La EU y Río+20 En marzo de 2010 la Comisión Europea adoptó la «Estrategia de la UE 2020» para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador, que fue aprobada por los Jefes de Estado y de Gobierno de los países de la UE en junio de 2010. El documento establece objetivos concretos que deben alcanzarse en la próxima década en áreas como el empleo, la educación, el uso de la energía y la innovación, a fin de superar el impacto de la crisis financiera y relanzar el crecimiento económico de Europa. Como parte de sus principales objetivos para 2020, la UE quiere avanzar hacia una economía sostenible, eficiente en la utilización de los recursos y con generación de emisiones de carbono. La Comisión, entre otras cosas, ha adoptado una hoja de ruta sobre la eficiencia en la utilización de recursos, una hoja de ruta para una economía baja en carbono para 2050, y un plan de eficiencia energética. La Cumbre de Río+20 ofrece una oportunidad para lograr este objetivo a nivel mundial y también una plataforma para hacer avanzar la agenda que la UE tiene desde hace tiempo para mejorar la gobernanza mundial. En junio de 2011, la Comisión Europea adoptó una Comunicación sobre «Río+20: hacia la economía ecológica y la mejora de la gobernanza». La Comunicación define objetivos y acciones específicas sobre los dos temas interrelacionados de la conferencia. En la comunicación se planifica la manera («qué, cómo y quién») de llevar a cabo la transición a una economía ecológica y se proponen acciones específicas que podrían ser desarrolladas a nivel internacional, nacional y regional. En el Consejo de Medio Ambiente de octubre de 2011, se adoptaron las Conclusiones del Consejo sobre la Cumbre Río+20 («hacia un desarrollo sostenible gracias a una economía ecológica y la mejora de la gobernanza»). Los Ministros de Medio Ambiente acordaron que la transición hacia una economía ecológica tiene un gran potencial para promover el crecimiento sostenible a largo plazo, crear puestos de trabajo y, por consiguiente, erradicar la pobreza. En las conclusiones se subraya que los principales resultados operacionales de Río+20 deben incluir una «hoja de ruta de la economía ecológica» con metas y acciones específicas a nivel internacional, así como un paquete de reformas que conduzcan a fortalecer la gobernanza ambiental internacional. A finales de septiembre de 2011, el Parlamento Europeo aprobó una Resolución sobre la elaboración de una posición común de la UE ante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20). Los diputados observan que, a pesar de los progresos hacia el desarrollo sostenible realizados desde la Cumbre de Río de 1992 y la Cumbre de Johannesburgo de 2002, siguen existiendo importantes lagunas en la aplicación y aún no se han cumplido muchos compromisos de la comunidad internacional; DT\893910ES.doc 3/7 PE483.726v01-00 ES 3. Discusiones iniciales en los preparativos de Río+20 En marzo de 2011, se pidió a todos los Estados miembros de las Naciones Unidas, a las organizaciones relevantes del sistema de las Naciones Unidas y a las partes interesadas pertinentes que, en noviembre de 2011, hicieran aportaciones y contribuciones por escrito a la Secretaría, para su inclusión en un texto recopilatorio que sirvió de base para la preparación del borrador cero del documento final. A mediados de enero de 2012 se publicó el borrador cero del documento final, titulado «El futuro que queremos» y se celebraron discusiones iniciales en Nueva York finales de enero. El borrador incluye un compromiso renovado de los jefes de Estado y de Gobierno con el desarrollo sostenible, una determinación de perseguir la economía ecológica en el contexto del desarrollo sostenible y la erradicación de la pobreza, y una afirmación de su determinación de fortalecer el marco institucional para el desarrollo sostenible. 4. - Documentos relevantes COM(2011)363, Comunicación sobre «Río+20: hacia la economía ecológica y la mejora de la gobernanza», Comisión Europea, Junio de 2011. Conclusiones del Consejo sobre «Río+20: hacia un desarrollo sostenible gracias a una economía ecológica y la mejora de la gobernanza», octubre de 2011. Resolución sobre la elaboración de una posición común de la UE ante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20), Parlamento Europeo, septiembre de 2011. Presentación de la UE al UNDESA, NOVIEMBRE DE 2011. Borrador cero del documento final titulado «El futuro que queremos», enero de 2012. Fuentes: itio Internet de la Conferencia Río+20; sitio Internet de la Comisión Europea; sitio Internet del Consejo de la Unión Europea; sitio Internet del Parlamento Europeo. PE483.726v01-00 ES 4/7 DT\893910ES.doc ANEXO - Resumen de las principales ideas de la Comisión Europea, el Consejo y el Parlamento Europeo a. Comisión Europea - Comunicación sobre Río+20 En junio de 2011, la Comisión Europea adoptó una Comunicación sobre «Río+20: hacia la economía ecológica y la mejora de la gobernanza». La Comunicación define objetivos y acciones específicos sobre los dos temas interrelacionados de la Conferencia. En la comunicación se planifica la manera («qué, cómo y quién») de llevar a cabo la transición a una economía ecológica y se proponen acciones específicas que podrían ser desarrolladas a nivel internacional, nacional y regional. Estas son las tendencias clave: 1. Invertir en recursos esenciales y capital natural («qué»). Estos son: agua, energía renovable, recursos marinos, biodiversidad y servicios de los ecosistemas, agricultura sostenible, bosques, residuos y reciclaje. Estos sectores sustentan el modo de vida de millones de personas y pueden ayudar a aliviar la pobreza. Podrían convertirse en áreas de futuro crecimiento económico y mercados globales. 2. Combinar instrumentos reguladores y de mercado («cómo»): ecotasas, supresión de subsidios perjudiciales para el medio ambiente. movilización de recursos financieros públicos y privados, inversión en capacitación y empleos verdes. Es necesario desarrollar indicadores que reflejen un sentido más amplio de progreso (tanto ambiental como social) y que pueden funcionar junto al PIB. 3. Mejorar la gobernanza y fomentar la participación del sector privado («quién»): reforzar y racionalizar las actuales estructuras de gobernanza internacional (por ejemplo, revalorizando el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)). También es esencial una participación y un compromiso mucho mayores de las empresas y la sociedad civil. b. Conclusiones del Consejo sobre Río+20 En el Consejo de Medio Ambiente de octubre de 2011, se adoptaron las Conclusiones del Consejo sobre «Río+20:hacia un desarrollo sostenible gracias a una economía ecológica y la mejora de la gobernanza». Los Ministros de Medio Ambiente acordaron que la transición hacia una economía ecológica tiene un gran potencial para promover el crecimiento sostenible a largo plazo, crear puestos de trabajo y, por consiguiente, erradicar la pobreza. En las conclusiones se subraya que los principales resultados operacionales de Río+20 deben incluir una «hoja de ruta de la economía ecológica» con metas y acciones específicas a nivel internacional, así como un paquete de reformas que conduzcan a fortalecer la gobernanza ambiental internacional. Reiteran asimismo que Río+20 debe contribuir a reorientar los actuales modelos de crecimiento. En lo que concierne al marco institucional para el desarrollo sostenible (MIDS), el Consejo pide coherencia en todo el sistema de las Naciones Unidas y una reforma ambiciosa. El Consejo subraya además la necesidad de fortalecer la gobernanza ambiental a nivel internacional como parte de una reforma más amplia del MIDS. Según el Consejo, los fondos para aplicar las políticas de desarrollo sostenible deberán DT\893910ES.doc 5/7 PE483.726v01-00 ES proceder de fuentes diversas, tanto públicas como privadas Además, las conclusiones incluyen referencias a una utilización más eficaz de los recursos existentes, a la movilización de los recursos disponibles y la identificación de fuentes innovadoras de financiación, y a la relevancia continuada de la ayuda oficial al desarrollo (AOD) como importante instrumento catalizador. Con objeto de cambiar el comportamiento, iniciar y facilitar decisiones responsables y apoyar la difusión de estilos de vida sostenibles, se deben promover actividades de sensibilización pública y reforzar las herramientas de gestión. El Consejo reconoce la importancia de las alianzas a todos los niveles en los principales sectores y áreas de la economía verde. c. Parlamento Europeo - Resolución sobre Río+20 A finales de septiembre de 2011, el Parlamento Europeo aprobó una Resolución sobre la elaboración de una posición común de la UE ante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20). Los diputados observan que, a pesar de los progresos hacia el desarrollo sostenible realizados desde la Cumbre de Río de 1992 y la Cumbre de Johannesburgo de 2002, siguen existiendo importantes lagunas en la aplicación y aún no se han cumplido muchos compromisos de la comunidad internacional. El Parlamento pide a la Comisión y al Consejo que velen por que la Cumbre de Río+20 Cumbre Río+20 no solo produzca declaraciones de buena voluntad, sino acciones concretas y objetivos cuantificables y formas de medirlos. Insiste en que una «economía verde» debe entenderse como el funcionamiento de toda la economía dentro de los límites de la sostenibilidad en lo que respecta a la biodiversidad, el mantenimiento de los servicios de los ecosistemas, la protección del clima y el uso de los recursos naturales. Se debe prestar más atención al capital humano, ambiental y natural, y afirma que el desarrollo sostenible es más que una simple economía ecológica. El Parlamento pide que se adopte a este respecto una hoja de ruta de la economía ecológica. También hace hincapié en que una economía ecológica debe centrarse en separar la actividad económica del uso de recursos y de la degradación del medioambiente. Los diputados reiteran que el concepto de «economía ecológica» que preconiza la Comisión no traerá automáticamente la prosperidad a los pobres ni logrará los ODM, a menos que las economías se gestionen adecuadamente, los recursos naturales se administren equitativamente y se garantice por igual el acceso a su distribución a las generaciones presentes y futuras. Subrayan la importancia de evaluar los recursos, el capital natural y los servicios de los ecosistemas a su valor real y piden el establecimiento de procesos contables para el capital natural y su integración en las estructuras económicas de contabilidad y en los procesos políticos de toma de decisiones. La resolución describe con mayor detalle acciones en el ámbito de una serie de recursos y del capital natural. Los diputados subrayan la urgente necesidad de abordar la cuestión de las subvenciones nocivas para el medio ambiente y de desarrollar y aplicar incentivos positivos para sacar provecho de la biodiversidad y conservarla; Piden a la Cumbre de Río+20 que ponga en marcha una serie de acciones coordinadas por países encaminadas a eliminar progresivamente para el 2020 todos los subsidios perjudiciales para el medio ambiente. El Parlamento destaca el papel de los instrumentos regulatorios y de mercado y pone de relieve en este contexto la PE483.726v01-00 ES 6/7 DT\893910ES.doc urgencia de abordar el impacto climático del transporte internacional marítimo y aéreo. Pide que se establezca a nivel internacional un impuesto sobre las transacciones financieras y subraya que las reformas fiscales destinadas a desplazar la carga fiscal del trabajo a la utilización de recursos y la contaminación puede ayudar a crear un resultado beneficioso tanto para el empleo como para el medio ambiente. La resolución hace hincapié en que la transición hacia una economía ecológica global requerirá inversiones financieras a gran escala. El dinero público por sí solo no será suficiente, y la financiación pública tendrá que apoyarse en una inversión privada mucho mayor. El Parlamento subraya la necesidad de promover nuevas tecnologías mejorando también el acceso a la financiación. Pide a la Cumbre Río+20 que recomiende la reforma de las estrategias de financiación existentes y que establezca nuevos sistemas de financiación y asociaciones entre el sector público y el privado cuando sea necesario. Los diputados consideran de suma importancia seguir capacitando a los ciudadanos para participar en la gobernanza medioambiental y pide que Río+20 aporte progresos para asegurar la aplicación mundial efectiva del Principio 10 de la Declaración de Río. Consideran que, tras aplicar durante más de diez años la Convención de Aarhus, la UE puede aportar una experiencia importante a los debates internacionales. La resolución reconoce que la innovación y la transferencia tecnológica son esenciales para hacer frente a los retos, pero subraya que el desarrollo tecnológico no puede ser la única solución para los problemas ambientales o para la erradicación de la pobreza. Apoya el Plan Estratégico de Bali de apoyo tecnológico y creación de capacidades y pide la creación de capacidad dentro del sistema de las Naciones Unidas para proporcionar información sobre nuevas tecnologías para integrar un concepto más amplio de sostenibilidad y promover el desarrollo sostenible de los productos y los procesos en todas las áreas. Los diputados piden estudios urgentes para desarrollar un nuevo conjunto de criterios de medición para medir los avances en materia de equidad y desarrollo sostenible; La Cumbre Río +20 debe ofrecer un modelo alternativo para medir el crecimiento y el bienestar «más allá del PIB», y el Parlamento pide la adopción de indicadores claros y mensurables que tengan en cuenta el cambio climático, la biodiversidad, la eficiencia de los recursos y la inclusión social. Por último, el Parlamento hace una serie de recomendaciones para mejorar la gobernanza del desarrollo sostenible, y reitera también su propuesta de crear un tribunal internacional del medio ambiente para que la legislación ambiental a nivel mundial se haga más vinculante y aplicable por ley, o por lo menos una autoridad internacional, como un ombudsman con competencias de mediación. DT\893910ES.doc 7/7 PE483.726v01-00 ES