LUnes 9 DE noviembre DE 2015 | 3 se refieran a la moral individual, y que es requisito para la intervención de la ley penal, que se afecten bienes jurídicos privados o colectivos, incluidos en el orden de la justicia, según el sentido aristotélico”, refiriéndose a la justicia legal, esto es, a la que hace al orden de la polis. De allí que se recuerde, con cita de Sampay, que en el proceso legislativo constitucional, al tratarse el art. 19, el general Pedro Ferré había propuesto que la fórmula dijese “a la moral y al orden público”, lo que fue corregido por la actual fórmula de “al orden y a la moral pública”, pues de lo contrario cualquier conducta que afecte a la moral individual podría ser prohibida por la ley penal. En definitiva, la cuestión se deriva, como quedara indicado, a “los criterios para calificar las acciones que afecten el orden y la moral pública” (Fallos, 308:1392, consid. 8º del voto del juez Petracchi), pero no en un sentido meramente empírico causal, sino normativamente evaluado de cara al modelo político y jurídico del Estado. El carácter público de esas conductas no depende simplemente de que el legislador las incluya en una norma o que resulten exteriorizadas por otros. Ya se dijo que para discernir los límites de esa esfera de privacidad no alcanza con determinar simplemente una incidencia externa de la conducta ejecutada. De hecho, buena parte de las conductas realizadas por el sujeto y que jurídicamente corresponden a su privacidad tienen alguna repercusión comunitaria, esto es, influyen en su rendimiento laboral, en su eficacia técnica, en su compromiso solidario, etc. En consecuencia, la determinación del sentido que tiene la afectación de terceros, el orden o la moral públicos depende, como se hizo notar antes, del orden de libertades que conforman los criterios filosóficos, éticos y políticos de la comunidad —su orden público—. El propio juez Petracchi advierte esta situación, al expresar que la existencia o no de un equilibrio entre la presencia de un Estado cada vez más omnipresente y el ámbito exclusivo que tienen los hombres para organizar su conducta determina la distancia entre sociedades democráticas y sociedades totalitarias. V. La distinción entre privacidad e intimidad, de cara al orden público penal La Corte Suprema ha explicado que el art. 19 de la Constitución “otorga al individuo un ámbito de libertad en el cual éste puede adoptar libremente las decisiones fundamentales acerca de su persona, sin interferencia alguna por parte del Estado o de los particulares, en tanto dichas decisiones no violen derecho de terceros” (Fallos: 315:1492). El artículo 19 de la Const. Nac. implica, en ese sentido, el punto de partida hermenéutico sobre el que se ha construido la labor de los tribunales respecto del carácter y extensión de ese orden privado de la persona, ajeno a las posibilidades de intervención pública y que, en consonancia con las exigencias del art. 18 de nuestro texto fundamental, agrega la noción de intimidad a ese núcleo básico, poniendo límites al poder estatal. Si bien en ocasiones la jurisprudencia y la doctrina se refieren de manera indiferenciada a esos dos aspectos fundamentales de la dignidad humana, lo cierto es que existen entre ambas nociones distingos que precisar. En la praxis jurídica se aprecia además que, mientras la noción emergente del art. 19 de la Const. Nac. opera decididamente sobre el campo de la determinación e interpretación de los injustos típicos —su legislación y aplicación—, la noción de intimidad, que sobre todo se infiere del art.18 de la Const. Nac., tiene su impacto predominante en el campo procesal, de la activa imputación de los hechos y su legitimación. artículo 19 de la Constitución Nacional que el resultante del artículo 18 y otras cláusulas, que establecen fórmulas similares, de los pactos de derechos humanos incorporados por el artículo 75, inciso 22 de la Constitución Nacional. El primero de los preceptos mencionados está dirigido a excluir de todo tipo de interferencia estatal aquellas acciones que en modo alguno afecten a terceros, es decir, que no generen efectos dañosos sobre otras personas. En la medida que esto último haya sido debidamente establecido, la prohibición de interferir en tal tipo de acciones es “absoluta”. De modo diferente, la jueza interpreta la protección acordada a los sujetos por el artículo 18 de la Const. Nac., pues éste “se refiere a la exclusión de terceros (los funcionarios públicos entre ellos) de ciertos ámbitos propios de la persona, a los que también se puede llamar “privados” o “exclusivos”. Por antonomasia, cae en esta categoría el domicilio o vivienda, pero también incluye el artículo 18 de la Constitución Nacional a los papeles privados y a la correspondencia epistolar. A diferencia de la protección asignada por el artículo 19 de la Constitución Nacional, la interferencia en estos ámbitos privados por parte de las autoridades públicas no se halla excluida de manera absoluta, sino que se la sujeta a determinados requisitos, tal como la orden de autoridad competente”. VI. Dos precedentes de la Corte Suprema que marcan la relación privacidad orden público En su voto del precedente “Baldivieso” la jueza Argibay ha distinguido la naturaleza de estas dos garantías: privacidad e intimidad. Así ha observado que “la intimidad o privacidad, entendida en sentido lato, se encuentra protegida por nuestro derecho vigente con desigual intensidad, según cuál sea el aspecto de la vida privada que se busca resguardar; no es el mismo tipo de aseguramiento el que provee el Como cierre de estas reflexiones y su efectiva dinámica jurisdiccional, pueden ponerse en relación dos fallos de la Corte que dan consistencia a buena parte del análisis precedente. Por un lado, estas consideraciones se aprecian en el contenido del principio de autodeterminación, incluso en aquellas situaciones más extremas, como son las relacionadas con el cuerpo, la vida y la salud. Así ha quedado explicitado por la Corte en el precedente “Albarracini Nievas”, donde la cuestión se relacionaba con vadas al propio individuo y cuyo conocimiento y divulgación por los extraños significa un peligro real o potencial para la intimidad. En rigor, el derecho a la privacidad comprende no sólo a la esfera doméstica, el círculo familiar y de amistad, sino a otros aspectos de la personalidad espiritual o física de las personas tales como la integridad corporal o la imagen y nadie puede inmiscuirse en la vida privada de una persona ni violar áreas de su actividad no destinadas a ser difundidas, sin su consentimiento o el de sus familiares autorizados para ello y sólo por ley podrá justificarse la intromisión, siempre la decisión de una persona, Testigo de Jehová, que había dejado expresada formalmente su voluntad de no recibir transfusiones de sangre y, ahora, sin poder manifestarse, el padre —contra las manifestaciones de la esposa del paciente— pretendía que los médicos concretaran esa medida para salvarle la vida. Al respecto, y en lo que aquí interesa, la Corte señaló que la posibilidad de aceptar o rechazar un tratamiento médico específico —por ejemplo por razones religiosas o espirituales— hace a la “autodeterminación y autonomía personal”, pues los pacientes “tienen derecho a hacer opciones de acuerdo con sus propios valores o puntos de vista, aun cuando parezcan irracionales o imprudentes”. Sólo cuando esa decisión no hubiera sido dada con pleno discernimiento o afectara directamente derechos de terceros, justificaría una resolución judicial contraria a esa voluntad. A su vez, y relacionando la cuestión con exigencias del orden público, la Corte Suprema si bien reconoce que los padres pueden elegir sin interferencias del Estado “el proyecto de vida que desean para su familia”, ello debe ser puesto en relación con el interés superior del niño, garantizado por la Convención sobre los Derechos del Niño. En el precedente “N.N.OU. V s/protección y guarda de persona”, del 12 de junio de 2012, donde se consideró la negativa de los padres a que su hijo recién nacido se sujetara al plan de vacunación exigido por la normativa estatal, quedó expresado que, más allá de la responsabilidad de los padres, es deber del Estado adoptar las medidas que considere necesarias para proteger o restablecer los derechos del niño en situaciones en que se vean vulnerados. En ese punto, un plan de vacunación oficial puede avanzar sobre las decisiones de los padres, pues no entra en colisión con el ámbito de privacidad al que remite el art.19 de la Constitución Nacional. l Cita on line: AR/DOC/3923/2015 { NOTAS } tonomía individual constituida por los sentimientos, hábitos y costumbres, las relaciones familiares, la situación económica, las creencias religiosas, la salud mental y física y, en suma, las acciones, hechos o datos que, teniendo en cuenta las formas de vida aceptadas por la comunidad están reser- que medie un interés superior en resguardo de la libertad de los otros, la defensa de la sociedad, las buenas costumbres o la persecución del crimen.” (considerando número 8). Seguro de garantía de los depósitos bancarios María Cecilia Lanús Ocampo SUMARIO: I. Hechos introductorios. — II. Nuestro sistema de seguro de depósitos “SEDESA”. — III. Alcances de la garantía. — IV. El nuevo artículo 10 del decreto 540/1995. — V. A modo de conclusión y reflexión. Es fundamental por nuestra historia trabajar en construir un sistema financiero sólido y solvente, como además un sistema de seguro de depósitos que debe ser, por sobre todas las cosas, creíble. Un sistema de seguro de depósitos contribuye a la estabilidad del sistema financiero y a la protección de los depositantes. Una interpretación por parte de los depositantes que infiera que sus depósitos han perdido seguridad en virtud de decisiones poco apropiadas puede a llegar hacer estragos. I. Hechos introductorios (1) Un sistema de seguro de garantía de los depósitos bancarios tiene como objetivo principal contribuir a la estabilidad del sistema financiero y proteger a los depositantes. Una “red de seguridad financiera es un conjunto de instituciones, procedimientos y mecanismos concebidos con el objeto de contribuir a mantener la estabilidad del sistema financiero y proteger la función de intermediación que desarrollan las entidades financieras y su papel en el sistema de pagos nacional. Específicamente busca reducir la probabilidad de quiebras de entidades financieras y, cuando a pesar de todo éstas ocurren, procura evitar el contagio a otras instituciones para salvaguardar la fortaleza del sistema (2)”. El Gobierno modificó recientemente, por medio del decreto 1653/2015, el decreto 540/1995 del Sistema de Garantía de los Depósitos Bancarios, la norma que establece cómo debe invertir el Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD). Es un hecho relevante para los depositantes, dado que estamos hablando de la composición de la cartera que asegura o es fuente de recursos para responder a los depositantes del sistema bancario local ante posibles problemas de insolvencia en los bancos. Fue creado en los tiempos de la crisis llamada “Tequila” ocurrida a fines de 1994, con la devaluación del peso mexicano, y que tendría sus efectos en nuestra banca local a inicios de 1995 (3). En respuesta a la crisis de confianza desatada y su efecto contagio en el sistema financiero argentino. Argentina en aquel entonces integraba la lista de países emergentes. Como señala Arnaudo y otros (4), Argentina era vista como similar a México (5): el “efecto contagio de la crisis mexicana (provocó una suba del riesgo país, la declinación del valor de las acciones, menor afluencia de capitales), sumado a la percepción de la sobrevaluación del tipo de cambio, las preocupaciones por el déficit fiscal y la reforma constitucional que permitía la re-elección del presidente pero por mayoría de votos (sistema electoral más exigente que el previo vigente), provocó dudas sobre si la Argentina fuera capaz de mantener vigente la Ley de Convertibilidad y desató una crisis de confianza que afectó a la economía del país y al sistema financiero en particular”. En esos tiempos la crisis bancaria se acentuaba y corría el riesgo de profundizarse, fundamentalmente ante la pérdida de confianza; muchos depositantes salieron del sistema y otros que no salían migraban sus depósitos hacia los grandes bancos habida cuenta que no existía un seguro de depósitos. En consecuencia los bancos de menor envergadura estaban con grandes problemas de solvencia y el sistema financiero en conjunto amenazaba su liquidez. Fue así que en abril de 1995 se creó por decreto 540/1995 el Sistema de Garantía de los Depósitos Bancarios de carácter obligatorio y oneroso para las entidades financieras, y otorgaba una cobertura limitada a los depositantes ($20.000 por depositante, luego se fue incrementando) para generar mayor confianza en el sistema. II. Nuestro sistema de seguro de depósitos “SEDESA” Seguro de Depósitos S.A. (SEDESA) es una Sociedad Anónima, creada con el objeto exclusivo de administrar el Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD). Los sistemas de Seguro de Depósitos fueron creados con la finalidad de generar confianza continúa en página 4 4 | LUnes 9 DE noviembre DE 2015 viene de PÁGINA 3 Entidad de parte de los consumidores en el sistema financiero, proteger los derechos de los depositantes y contribuir a la estabilidad financiera. El sistema desde su creación hace 20 años atendió 27 casos (6). Entidad Banco de Caseros S.A. Caja de Crédito Pavón Coop. Ltdo. Banco Unión Comercial e Industrial S.A. (BUCI) Banco Coopesur Coop. Ltdo. Nuevo Banco de Azul S.A. Asistencia 22/10/1996 Entidad en la asistencia Fideicomiso, sobre créditos de Banco de Crédito recuperación dudosa del Banco Argentino S.A. de Caseros S.A. Monto (millones de pesos) Pago de la garantía Ahorristas de Caja de Crédito Pavón Coop. Ltda. 11/02/1997 Adquisición parcial de depósitos Ahorristas del BUCI 23,69 08/05/1997 Fideicomiso, sobre cartera del BUCI Corp. Banca 94,23 28/02/1997 Fideicomiso, sobre cartera de Banco Credicoop recuperación dudosa del Banco Cooperativo Ltdo. Coopesur C.L. 08/05/1997 Préstamo convertible en obliga- Nuevo Banco ciones negociables Industrial de Azul S.A. 08/05/1997 Fideicomiso, sobre créditos de Nuevo Banco Indusrecuperación dudosa del Nuevo trial de Azul S.A. Banco de Azul S.A. Banco Platense S.A. 08/05/1997 Aporte no Reembolsable Préstamo convertible en obligaciones negociables 18/09/1997 Adquisición parcial de depósitos 23/12/1997 y 02/06/1998 Aportes no reembolsables 39,8 2 13 Ahorristas del Banco Crédito Provincial S.A. 16 5 71 7,8 62,76 20/03/1998 Adquisición parcial de depósitos Ahorristas del Banco Patricios S.A. 27,68 19/06/1998 Fideicomisos sobre créditos y sobre activos no crediticios Banco Mayo C.L. 97,32 23/10/1998 Fideicomiso sobre activos Citibank N.A., Sucursal Argentina Banco Almafuerte C.L. 26/11/1998 Fideicomiso sobre activos Grupo de bancos 60 Banco Israelita de Córdoba S.A. 11/02/1999 Fideicomiso sobre activos Grupo de bancos 60 Banco Mendoza S.A. 13/04/1999 Fideicomiso sobre activos Grupo de bancos 100 Cía. Financiera 23/05/2000 Luján Williams S.A. Fideicomiso sobre activos Banco Sudameris Argentina S.A. 26/12/2000 Fideicomiso sobre activos Grupo de bancos Banco Patricios S.A. Banco Mayo C.L. Mercobank S.A. 28/12/2000 04/05/2001 Caja de Crédito Varela S.A. 07/09/2001 Fideicomiso sobre activos Grupo de bancos Banco de Balcarce S.A. Caja de Crédito 23/11/2001 Floresta Luro Vélez Coop. Ltda. 350 3 100 30 Contrato de cesión de créditos Caja de Crédito y de gestión de cobranza con Cooperativa La Capital Caja de Crédito Cooperativa La del Plata Ltdo. Capital del Plata Ltdo. 1,7 18,9 2,60 indisponible Res. Jud. Aporte no reembolsable Banco de la Ciudad de Buenos Aires Préstamo mediante aporte a un fideicomiso constituido con cartera hipotecaria del Banco Galicia con participación de un conjunto de entidades Pago de la garantía a titulares de depósitos de cuentas sueldo Pago de la garantía a titulares de depósitos de cuentas sueldo Contrato de mutuo garantizado por dos fideicomisos constituidos con títulos públicos en moneda extranjera Contrato de transferencia de activos del BEO, de Columbia al FGD 12/06/2002 Scotiabank Quilmes S.A. 19/08/2002 17/10/2002 Banco de la Edificadora de Olavarría S.A. (BEO) Banco Velox S.A. 6,99 Banco Municipal de La Plata Mercobank S.A. Préstamo 21/03/2002 06/12/2002 Fideicomiso, sobre créditos de Banco Credicoop recuperación dudosa del Banco Cooperativo Ltdo. Argencoop C.L. Banco Argencoop Coop. Ltdo. 12/12/1997 Fideicomiso (participación sobre inmuebles) 0,66 20/10/2003 Sociedad Anónima del Atlántico S.A. (SADELA) Nuevo Banco de Entre Ríos S.A. Nuevo Banco Bisel S.A. Banco Empresario de Tucumán Coop. Ltdo. ex Banco Municipal de La Plata Tipo de operación 11/03/2002 15/05/2002 73,74 21/11/1996 08/05/1997 Banco de Crédito Provincial S.A. (BCP) Tipo de operación Banco de Galicia y Bs. As. S.A. Asistencia 13/02/2004 27/01/2005 y 22/03/2005 21/06/2005 Contrato de mutuo garantizado con títulos públicos en dólares estadounidenses transferidos a un fideicomiso Pago de la garantía a titulares de depósitos de cuentas sueldo Contrato de transferencia de activos de Sadela, del Banco Macro Bansud a SEDESA Capitalización de la entidad Capitalización de la entidad Entidad en la asistencia Banco de Galicia y Bs. As. S.A. Titulares de Cuentas Sueldos Titulares de Cuentas Sueldos Banco Comafi S.A. y Banco Bansud S.A. Columbia Cía. Fin. S.A. Nuevo Banco Industrial de Azul S.A. Titulares de Cuentas Sueldos Banco Macro Bansud S.A. Nuevo Banco de Entre Ríos S.A. Nuevo Banco Bisel S.A. Monto (millones de pesos) 200 21 14,19 0,24 190 22,69 tít. púb. VR; 27,00 en efvo.; y 5,30Boden a VR 31 0,28 8,21 190 132,48 03/11/2005 Aporte no reembolsable Banco Macro Bansud S.A. 56,5 04/12/2007 Aporte no reembolsable Banco de la Provincia de Buenos Aires 32,3 Por medio de la ley 24.485 (7) se creó el Sistema de Seguros de los Depósitos y se creó la constitución de la sociedad Seguro de Depósitos Sociedad Anónima (SEDESA) con el objeto exclusivo de ejercer las funciones de fiduciario del contrato de fideicomiso que oportunamente se celebre entre SEDESA y el Estado Nacional a través del Banco Central de la República Argentina (BCRA) para administrar el Fondo de Garantía de los Depósitos (conf. art. 1º de la citada norma). El capital social de SEDESA asciende a un millón de pesos, siendo de un peso el valor nominal de cada acción. Son accionistas de SEDESA, el BCRA, titular de 1 (una) acción clase “A” y las entidades financieras representadas por Caja de Valores S.A. como titular fiduciario de las acciones clase “B”, en virtud del contrato de fideicomiso suscripto entre las entidades financieras y Caja de Valores S.A. La participación en el fideicomiso que actúa como accionista de SEDESA surge de la proporción del aporte efectivizado por cada institución, respecto de los aportes recaudados de la totalidad del sistema, correspondientes a cada año calendario (8). 9,4 El artículo 1º de la ley 24.485 faculta al Banco Central a organizar y poner en funcionamiento el Sistema de Seguro de Garan- (3) “La crisis del Tequila se tradujo en una pérdida de reservas del 27% y en un proceso de retiro neto de depósitos, equivalente a un 18% del sistema desde diciembre 1994 hasta mayo 1995, es decir, de $ 45.600 millones el 20 de diciembre de 1994 a un mínimo de $36.800 millones el 12 de mayo de 1995, además de que muchos bancos entraron en crisis porque los depositantes particulares que en marzo 2003 salían del sistema se trasladaban hacia los grandes bancos habida cuenta que no existía un seguro de depósitos”. Conf. ARNAUDO, J; QUEROL, L. y PÉREZ, G. “Crisis del Tequila. Sus efectos sobre el sistema financiero argentino y sus normas prudenciales”; trabajo final de la Maestría en Dirección Bancaria, bajo la dirección Prof. Martín Lagos; p. 1, Universidad del CEMA, marzo 2003. (4) Recomiendo la lectura del exquisito trabajo para una mayor comprensión del tema, puede encontrarse en: www.ucema.edu.ar /posgrado-download/tesinas2003/ MDB_Arnaudo.pdf (5) “México contaba con un sistema cambiario de flotación sucia, es decir que su Banco Central intervenía en el mercado para mantener el valor de la divisa dentro de las bandas de flotación establecidas. Debido a las presiones sobre el tipo de cambio y la constante pérdida de reservas, el 20 de diciembre el gobierno elevó el techo de la flotación en un 15%, empero al día siguiente el ministro de Hacienda anunció la eliminación del sistema de bandas para entrar en un sistema de libre flotación. El Banco Central de México vendió u$s 1.700 millones en un día y los títulos tía de los Depósitos creado mediante esa misma ley, como un seguro limitado, obligatorio y oneroso, que tiene por finalidad cubrir riesgos de los depósitos bancarios, en forma subsidiaria y complementaria al sistema de privilegios y protección de depósitos establecido en la Ley de Entidades Financieras, sin comprometer los recursos del Banco Central de la República Argentina ni del Tesoro Nacional. SEDESA es una sociedad constituida de acuerdo a la ley 19.550 y modificatorias; la sociedad está sujeta al control del BCRA, el que tendrá la facultad de dictar normas reglamentarias respecto de la operatoria de la misma (ello conf. art. 21 del Estatuto Social). Su objeto es ejercer las funciones de fiduciario que oportunamente le encomiende el Estado Nacional o el BCRA. A tales fines, y sin que implique limitación, dicha sociedad tiene plena capacidad jurídica para ejercer los derechos y facultades otorgados por la ley 24.485 y decretos 540/95, 1292/96 y 32/01 (conf. art. 3º). En sus comienzos tenía por objeto exclusivo: a) la administración: administrar como fiduciario los bienes que son de propiedad del Estado Nacional, en tanto se mantenga el régimen de garantía de los depósitos para las entidades financieras y, en general, cumplir con las obligaciones y ejercer los derechos es- { NOTAS } Especial para La Ley. Derechos reservados (Ley 11.723) (1) “Un sistema de seguro de depósitos es aquel sistema que permite asegurar a un depositante el reintegro parcial o total de su depósito en caso de problemas en la entidad financiera donde lo haya efectuado. El mismo forma parte de toda una red de protección que ha sido necesario articular alrededor de los bancos debido al papel esencial que estos cumplen en la economía, a la repercusión que sus eventuales problemas pueden acarrear, y a las características mismas de los bancos”. (JAIME, José C.,, SEDESA Simposio I, Abril de 1999). (2) GUERRERO, R. y otros, “Redes de seguridad financiera Aspectos conceptuales y experiencias recientes en América Latina y el Caribe”, BID, 2010, p. 3. de deuda cayeron en un 3.4%. La devaluación causó efectos como la inflación, disparada de las tasas de interés, colapso de la actividad económica, los servicios de deuda en moneda local y extranjera aumentaron al mismo tiempo que los indicadores de capitalización de los bancos se desmoronaron”, Op.cit. p. 7. (6) Fuente: www.sedesa.com.ar (7) Del 12/04/95 la ley 24.485 sanciona la ampliación de atribuciones del BCRA, modificaciones de la Ley de Entidades Financieras que tienen origen en el decreto 290/95. Y se crea el Sistema de Seguro de Garantía de los Depósitos Bancarios (8) Conf.: www.sedesa.com.ar/index.php/es/ LUnes 9 DE noviembre DE 2015 | 5 tablecidos en todo contrato de fideicomiso que celebre el Estado Nacional u otra persona jurídica de jurisdicción nacional; y b) de inversión: invertir los recursos del FGD en condiciones similares a las indicadas para la colocación de las reservas internacionales de divisas del BCRA previéndose que a ese fin la sociedad tiene plena capacidad jurídica para adquirir derechos, contraer obligaciones y ejercer los actos que no sean prohibidos por las leyes o por el estatuto (conf. art. 3º). Asimismo, por medio de los decretos 540/95 y 1292/96 (modificatorio del 540/95) se reglamentó la organización y puesta en funcionamiento del sistema; es así que en su oportunidad se delegó en el Ministerio de Economía, Obras y Servicios Públicos la aprobación del acta constitutiva y los Estatutos Sociales de SEDESA que tiene como socios al BCRA con una acción y a un fideicomiso constituidos por las entidades autorizadas que deseen participar en la proporción que para cada una determine el BCRA en función de los aportes efectivizados al Fondo de Garantía de los Depósitos (conf. art. 2º del decreto 1292/96). El decreto establece que es el Banco Central la autoridad de aplicación del sistema, quedando facultado para dictar las normas interpretativas y de aplicación que resulten necesarias (conf. art. 22). Como así también que los gastos de funcionamiento de la sociedad serán los estrictamente necesarios para operar y deberán ser sufragados con los ingresos del F.G.D. (artículo 3º); así como el modo en que serán invertidos los recursos del F.G.D. y sus rendimientos; y el deber de SEDESA de informar mensualmente al público y a la Superintendencia de Entidades Financieras y Cambiarias (SEFyC) el saldo del F.G.D. (artículo 10). Posteriormente el decreto 1292/96 (modificatorio del decreto 540/95) dispuso —entre otros puntos— la celebración de un contrato de fideicomiso entre SEDESA y el Estado nacional, a través del BCRA a fin de administrar el FGD; como así también que, por las funciones propias del BCRA y su carácter de autoridad de aplicación del régimen, era pertinente transferir al BCRA la titularidad de la acción de SEDESA correspondiente al Estado Nacional (artículo 1º). Dicho decreto se incorporó el art. 10 bis al decreto 540/95, en el que —en síntesis— se prevé que las operaciones que SEDESA podrá realizar con los recursos del FGD, quedando las decisiones en esa materia en cabeza de un Comité Directivo, cuya constitución se dispuso en la misma norma y que está integrado por un representante del BCRA y por vocales representantes de las entidades financieras aportantes al F.G.D. Del Contrato de Fideicomiso surge que las partes convienen en celebrar el convenio, el que se regirá por el decreto 540/95 y sus modif., las cláusulas del contrato y supletoriamente por el Título I de la ley 24.441. El fiduciante —el Estado Nacional, representado por el BCRA— transmite la propiedad fiduciaria de los bienes al fiduciario —SEDESA— con el objeto de administrar el FGD en beneficio de los depositantes del sistema financiero (cfr. cláusula primera). Sobre la retribución el contrato —coherente con el decreto 540/95— establece que el fiduciario no recibirá compensación al- guna por su actuación como tal y que sus gastos de funcionamiento serán los estrictamente necesarios para operar y serán sufragados con los ingresos del FGD (cfr. cláusula segunda). SEDESA mensualmente comunica en el Boletín Oficial el saldo disponible de los recursos del Fondo de Garantía de los Depósitos, el que a la fecha es de casi veinte mil doscientos millones de pesos (9). diarios de las partidas enumeradas en el punto 5.1., registrado en el segundo mes inmediato anterior. A estos fines el Banco de la Nación Argentina se ajustará a lo dispuesto en el segundo párrafo del artículo 6º del decreto 540/95 (texto según decreto 1292/96 — artículo 3º). Cuando los depósitos a plazo fijo en dólares estadounidenses del sector privado no financiero del país sean aplicados a la suscripción de Letras Internas del Banco Central de la República Argentina en dólares estadounidenses, el aporte normal será equivalente al 0,015%. A esos efectos, para su cálculo deberá considerarse el promedio mensual de saldos diarios de la posición neta de dichas Letras, correspondientes al segundo mes inmediato anterior. (Conf. Punto 2, Com. “A” 5710). III. Alcances de la garantía IV. El nuevo artículo 10 del decreto 540/1995 El sistema garantiza hasta $350.000 por persona, cuenta y depósito. En la materia debemos recurrir, para conocer los alcances de la garantía, al texto ordenado de las normas sobre aplicación del Sistema de Seguro de Garantía de los Depósitos que puede consultarse en la parte normativa de la web del Banco Central. El decreto 1653/2015 contiene solamente dos artículos. El primero, destinado a modificar el artículo 10 del decreto 540, del 12 de abril de 1995, (10) que contiene las condiciones en que deben ser invertidos los recursos del FGD; y un segundo, estableciendo su vigencia a partir de su publicación (11). Por su parte el fiduciario debe llevar un adecuado registro de todas las operaciones que realice, debiendo rendir cuentas al BCRA, a su requerimiento (cfr. cláusula decimosegunda). Así encontramos que la cobertura que ofrece el sistema alcanza (Conf. Punto 5.1., Com. “A” 5710) a los depósitos en pesos y en moneda extranjera constituidos en las entidades participantes bajo la forma de: Cuenta corriente; cuenta a la vista abierta en las cajas de crédito cooperativas; caja de ahorros; plazo fijo; cuenta sueldo/de la seguridad social, básica, gratuita universal y especiales; inversiones a plazo y saldos inmovilizados provenientes de los conceptos precedentes. Por su parte quedan excluidos (conf. Punto 5.2., Com. “A” 5710): los depósitos a plazo fijo transferibles cuya titularidad haya sido adquirida por vía de endoso, aun cuando el último endosatario sea el depositante original; imposiciones que ofrezcan incentivos o retribuciones diferentes de la tasa de interés y, en su caso, al importe devengado por aplicación del “CER”, cualquiera sea la denominación o modalidad que adopten (seguros, sorteos, turismo, prestación de servicios, etc.); depósitos en los que se convengan tasas de interés superiores a las de referencia, que son difundidas periódicamente por el BCRA por medio de las Comunicaciones “B”, determinadas sumando dos puntos porcentuales anuales al promedio móvil de los últimos cinco días hábiles bancarios de las tasas pasivas que, para los depósitos a plazo fijo y los saldos de cuentas a la vista (caja de ahorros y cuenta sueldo/de la seguridad social) de hasta $ 100.000 (o su equivalente en otras monedas) surjan de la encuesta que realiza el BCRA, excepto que se trate de depósitos a plazo fijo en pesos concertados a la tasa de interés fija mínima a que se refiere el punto 1.11.1 normas sobre “Depósitos e inversiones a plazo”; depósitos de entidades financieras en otros intermediarios, incluidos los certificados de plazo fijo adquiridos por negociación secundaria; depósitos efectuados por personas vinculadas, directa o indirectamente, a la entidad según las pautas definidas en el punto 2.2. secc. 2. normas sobre “Fraccionamiento del riesgo crediticio”; depósitos a plazo fijo de títulos valores, aceptaciones o garantías y saldos inmovilizados provenientes de depósitos y otras operaciones excluidas. Los flujos que integran el fondo provienen de los aportes de las entidades financieras que destinan mensualmente al FGD, en un aporte normal equivalente al 0,06% de su promedio mensual de saldos El artículo 10 establece la forma en que serán invertidos “los recursos del Fondo de Garantía de los Depósitos; así, a partir de ahora, serán invertidos en: títulos públicos nacionales, sean en moneda nacional o extranjera, en un porcentaje de su cartera no superior a la proporción de los depósitos en moneda local en el total de depósitos a la vista, y a plazo del sistema financiero, y en activos externos elegibles para las inversiones de las reservas internacionales del país. La administración de las inversiones del FGD tendrá como objetivo la preservación del capital en inversiones de alta liquidez, con los máximos rendimientos posibles condicionados a la preservación del capital, la transparencia y el control en su administración. Los rendimientos del FGD formarán parte del mismo y serán reinvertidos en las mismas condiciones. Mensualmente SEDESA, Seguro de Depósitos S.A. informará al público el saldo del FGD y a la SEFyC la composición de las inversiones y el saldo del citado Fondo”. Para comparar en su anterior redacción establecía que los recursos del FGD serían invertidos en condiciones similares a las fijadas para la colocación de las reservas internacionales de divisas del Banco Central. El BCRA autorizaba hasta un 50% de los bienes que componen el FGD se invierta en títulos públicos nacionales. Los rendimientos del FGD formarán parte del mismo y serán reinvertidos en las mismas condiciones. Mensualmente SEDESA informará al público y a SEFyC el saldo del FGD De los considerandos del decreto se lee que “se solicitó al BCRA que evalúe si existe necesidad de actualizar las condiciones en que deben ser invertidos los recursos del FGD” y que entendió conveniente readecuar la estructura de inversiones del Fondo. Y que, en atención a los cambios económicos operados, resulta apropiado permitir la inversión de los recursos en moneda extranjera y nacional, de manera que continúe fortaleciéndose dicho Fondo en beneficio de los ahorristas, teniendo asimismo en consideración la composición de los depósitos garantizados (!). Desde el punto de vista de los procedimientos es llamativo —al menos— que sea el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas al parecer el que insta y solicita a la propia autoridad de aplicación del sistema (léase BCRA) la medida que se llevó adelante. Como puede leerse en opiniones de expertos, que la norma —tan sensible— se modifique y compela al directorio de SEDESA (responsable en la administración) invertir en los próximos meses unos $ 8000 millones aproximadamente en títulos públicos. Ello, según idóneos en la materia, en oportunidad que el Gobierno habría virtualmente agotado su capacidad de financiamiento a través de otros organismos, (léase ANSeS, Lotería Nacional y el Banco Central) (12). V. A modo de conclusión y reflexión Es fundamental, por nuestra historia, trabajar en construir un sistema financiero sólido y solvente, como, además, un sistema de seguro de depósitos que debe ser por sobre todas las cosas creíble. Un sistema de seguro de depósitos contribuye a la estabilidad del sistema financiero y a la protección de los depositantes. Una interpretación por parte de los depositantes que infiera que sus depósitos han perdido seguridad en virtud de decisiones poco apropiadas puede a llegar hacer estragos. Medidas como la que comentamos debieran adoptarse evaluando los riesgos en mayor profundidad. Se podrá argumentar a favor que, mientras se refleje en la composición de activos cierta proporcionalidad atento a los depósitos, y existiendo un prestamista de última instancia, la medida no es para preocuparse; no obstante se pasará de activos que seguramente no eran papeles de deuda, a sí serlo. Por su parte en tiempos de Basilea I, II y III el rol de un prestamista de última instancia (un banco central) (13) es una “última” instancia y que, ante las corridas de iliquidez, ésta sea prevenida por la actuación de un Seguro de Depósitos cuyo único y exclusivo objeto (se dice objetivo de interés público) es la protección de los depósitos del público; y que corra a resguardar las necesidades de liquidez antes de que se provoque la crisis e incluso antes de que actúe el BCRA como última instancia fue una creación sumamente valiosa en el contexto de nuestro sistema financiero. Se necesitan de recursos adecuados, transparentes y que los factores que integran y hacen al sistema de protección de depósitos deben ser, por sobre todas las cosas, coherentes con el resto del sistema. No se trata de un compartimento estanco; es justamente un sistema de instituciones (BCRA, SEFyC, SEDESA, C.O., LEF, Entidades Financieras, etc.). Finalmente, he apuntado que M. Friedman en “Programa de estabilidad monetaria” señaló: “el suceso monetario más importante después de 1933 fue el establecimiento del Seguro Federal sobre Depósitos Bancarios. Lo hace no proporcionando una fuente de liquidez a los bancos una vez que se ha iniciado la corrida, sino eliminando cualquier razón para que se inicie una corrida”. l Cita on line: AR/DOC/2891/2015 MAS INFORMACIÓN Lanús Ocampo, María Cecilia, “Actualidad en derecho bancario y financiero”, LA LEY 05/08/2015, 10. Ribera, Carlos E., “Contratos de cuenta corriente bancaria y caja de seguridad en el nuevo Código”, LA LEY, 2015-C, 1139; Enfoques 2015 (julio), 83. Parducci, Diego Martín, “Contratos bancarios con consumidores y usuarios”, Sup. Esp. Nuevo Código Civil y Comercial de la Nación. Contratos en particular 2015 (abril), 241. { NOTAS } (9) Al 30 de junio de 2015 $20.196.027.363, publicado B.O del 24/06/15 (10) Artículo 1º. Sustitúyese el Artículo 10 del Decreto Nº 540 del 12 de abril de 1995 y sus modificatorios, el que quedará redactado de la siguiente manera: “Artículo 10.- Los recursos del Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD) serán invertidos en: títulos públicos nacionales, sean en moneda nacional o extranjera, en un porcentaje de su cartera no superior a la proporción de los depósitos en moneda local en el total de depósitos a la vista y a plazo del sistema financiero; y en activos externos elegibles para las inversiones de las reservas internacionales del país. La administración de las inversiones del Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD) tendrá como objetivo la preservación del capital en inversiones de alta liquidez, con los máximos rendimientos posibles condicionados a la preservación del capital, la transparencia y el control en su administración. Los rendimientos del Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD) formarán parte del mismo y serán reinvertidos en las mismas condiciones. Mensualmente SEDESA informará al público el saldo del FGD y a la SEFyC la composición de las inversiones y el saldo del citado Fondo”. (11) Art. 2º: El presente decreto entrará en vigencia a par- tir del día de su publicación en el Boletín Oficial. (12) Conf. www.lanacion.com.ar/1819449-toman-fondos-dela-garantia-de-depositos-para-financiarse. “Y busca además que ese organismo parezca en los próximos días como oferente en la plaza cambiaria local, toda vez que —para poder comprar los bonos (aun los que adquiera en dólares)— debería desprenderse de los dólares que atesora, ya que las operaciones con títulos en el mercado doméstico se hacen y liquidan en pesos. En este sentido podría ser un intento para lograr fondos con los que cancelar el vencimiento del Boden 15, en dos meses. “Debe ser uno de los objetivos de esta medi- da”, sospecha Fausto Spotorno, economista del Estudio Ferreres & Asociados. (13) El término “PUI” (prestamista de última instancia) fue usado por primera vez en épocas de la banca Baring refiriéndose al Banco de Inglaterra y los primeros antecedentes teóricos para la constitución de un prestamista de última instancia fueron estudios de Thorton (1802) y Bagehot (1873), con el fin de resolver problemas de iliquidez transitoria en el sistema financiero. Ellos propusieron la necesidad de que el Banco Central acuda en ayuda de los bancos comerciales en dificultades y provea de liquidez al sistema.