60 L`HOSPITALET-4

L’OPINIÓ
4
L’HOSPITALET
14 D’ABRIL DE 1998
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LA FIRMA
EDITORIAL
DIÁLOGO SOCIAL A FAVOR DEL EMPLEO
MANTENER LOS
EDIFICIOS DE L’H
El acceso a una vivienda es una de las
cuestiones que más preocupa a los ciudadanos, especialmente a los jóvenes ya que
para ellos supone su emancipación del núcleo familiar. Una vez logrado este objetivo, cada cual mantiene su vivienda en función de gustos y posibilidades, sin embargo, su aspecto y ‘seguridad’ exterior entran
en nuestros cálculos en pocas ocasiones.
Unas veces por desconocimiento, otras por
falta de medios, pocas comunidades de vecinos se plantean la conservación y mantenimiento de sus fachadas, tejados y patios.
El convenio que han firmado Ayuntamiento
y Generalitat pretende potenciar este tipo
de reformas. El Consistorio, la administración más cercana al ciudadano, recogerá
las solicitudes de los particulares y comunidades de propietarios interesados, y la Generalitat encargará y subvencionará los informes técnicos. El edificio en cuestión debe
haber sido construido antes de 1960, para
dar prioridad a los inmuebles más antiguos,
y debe reunir viviendas plurifamiliares.
La situación del parque de viviendas de
L’Hospitalet no es igual en toda la ciudad.
Algunos barrios concentran la mayor parte
de los edificios con más de 38 años de antigüedad. Es el caso de Collblanc, la Torrassa, Centre, Santa Eulàlia, Pubilla Casas y
la Florida que reunen el 85 por ciento de
los 3.000 inmuebles construidos antes del
60 en L’Hospitalet, motivo por el que también tendrán prioridad para acogerse a los
beneficios del convenio. Conservar y mantener los edificios contribuye a mejorar el aspecto de la ciudad, pero, lo que es más importante, incide directamente en nuestra seguridad, como vecinos del inmueble y como peatones.
Cándido Méndez
Secretario General de la UGT
En los últimos meses hemos asistido a un hecho insólito en
Europa: las revueltas de los trabajadores sin empleo. Este
hecho, aunque situándolo en sus justos términos, no puede
dejar de pasar inadvertido y sitúa en el centro de la actividad
política y social el problema del desempleo como prioridad
principal. En un contexto donde las grandes cifras macroeconómicas no dejan de insistir en que la economía va viento en popa, baste recordar la última que indica que España
creció el 3,3% en 1997, y si a ello sumamos los beneficios
empresariales o de los bancos, es fácil deducir el famoso
eslogan gubernamental.
Los sindicatos, no obstante, estamos haciendo el esfuerzo de situar el debate de política económica de este país
en el hecho que el crecimiento económico no se traduce en
crecimiento en el empleo. O planteado de otra forma, ¿qué
fin tiene el crecimiento económico si ello no redunda en
más empleo? Las cifras son elocuentes. Nuestra tasa de
actividad es del 47%, mientras en Europa está en el 60%,
en el tercer trimestre de 1997 creció el empleo, pero menos
de lo esperado, y aumentó el paro de larga duración. A tenor de estos datos ¿fue 1997 el tan cacareado “año del
empleo”?
Los sindicatos hicimos el año pasado el esfuerzo de
negociar el Acuerdo para la Estabilidad en el Empleo, con
el objetivo de reducir drásticamente la temporalidad. Los
resultados han sido positivos, en menos de un año se ha
triplicado el número de contratos indefinidos. Este ejemplo
debería seguirse en las políticas de empleo. Los sindicatos
UGT y CCOO propusimos, tras la cumbre de Luxemburgo y
siguiendo sus indicaciones, elaborar un Pacto por el Empleo en España que sea capaz de generar los mecanismos
adecuados en lo que se refiere a formación, inversiones
públicas, nuevos yacimientos de empleo, medidas para el
reparto del trabajo y la reducción de la jornada laboral, etc.
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PERSONAL E INTRANSFERIBLE
EL VERDADERO ROSTRO DE LE PEN
Enric Sopena
Periodista
Manuel Valls, un catalán que es el portavoz del primer ministro galo, Lionel Jospin, escribía en El Periódico de Catalunya (29.3.98) acerca del escandaloso pacto regional entre la derecha republicana y la extrema derecha de JeanMarie Le Pen. Valls recordaba una consigna de los años
30: “Antes Hitler que el Frente Popular”. Es lo que sucedió,
a la postre, en la España de 1936, tras el triunfo electoral
del Frente Popular. La derecha tenida por templada –la
CEDA y la Lliga– prefirió la sublevación militar que combatir
a Manuel Azaña o a Lluis Companys en el terreno de la
política democrática.
Acostumbrada a gobernar en muchas regiones, la derecha integrada por el gaullista RPR y la liberal UDF no
aceptó el veredicto de las urnas y, allá donde pudo, recurrió al envenenado auxilio del Frente Nacional. Las consecuencias de semejante ‘emparejamiento’ han sido nefastas tanto para el RPR –aunque éste haya salvado mejor la
cara– como para la UDF, de modo que la derecha clásica
atraviesa una crisis sin precedentes. Es el precio, por ahora, de haber vendido su dignidad a cambio de un plato de
lentejas servidas por el partido heredero de la siniestra Francia de Vichy. Los miles y miles de franceses que el 28 de
marzo salieron a las calles de 25 ciudades denunciaban el
rostro verdadero de Le Pen: el retorno al fascismo y la práctica cotidiana del racismo.
A propósito del actual panorama francés, parece pertinente formular, al menos, dos reflexiones en forma de pregunta hechas desde España. 1.¿Dónde se refugia aquí políticamente la extrema derecha sociológica? 2.¿Modificará
con urgencia Jordi Pujol sus relaciones privilegiadas con
Jaques Blanc, presidente del Languedoc-Roussillon? Como
no es una cuestión teológica, no parece que el caso se
resuelva con esta simple confesión de Blanc a La Vanguardia: “Pujol conoce que yo no he vendido mi alma”.
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CIUTADANS
Diari Informatiu de la Ciutat
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Aquesta publicació no s’identifica
necessàriament amb les opinions
expressades pels seus col·laboradors i columnistes.
L’HOSPITALET publica a
cada número l’opinió d’alguns dels nostres conciutadans a l’entorn dels temes
més diversos. Els entrevistats, als quals agraïm la seva col·laboració, són triats a
l’atzar.
Quin tipus
de lectura li
agrada?
Antonio Neyra
Antonio Peña
Cristina Ortega
agent de seguretat
empleada del sector tèxtil
metal·lúrgic
Generalment llegeixo llibres i el
diari cada dia. Especialment, els
llibres són novel·les però també
llegeixo algun assaig. Cada dos
mesos començo algun llibre i ara
estic llegint El secreto de la pirámide. Sóc soci del Círculo de Lectores i sempre trobo algun llibre interessant. La premsa del cor no la
miro ni com a entreteniment.
No tinc gaire temps per llegir però, com que el que més m’interessa és distreure’m, compro la revista Pronto cada setmana. Les xafarderies dels famosos m’agraden,
però també llegeixo alguna novel·la
especialment de suspens, del tipus
d’Agatha Christie, una cada sis mesos. Els best sellers m’agrada més
veure’ls al cinema que llegir-los.
Els llibres m’agraden molt, des que
anava a l’institut; principalment
de novel·la històrica, perquè vull
aprendre per mitjà dels llibres que
m’expliquen històries basades en
la realitat. Les novel·les fantàstiques també m’agraden però menys.
Ara estic llegint El soberano del cielo. Gengis Kan de Pamela Sargent.
També llegeixo el diari cada dia.