Universidad Autónoma de Entre Ríos Facultad de Ciencia y Tecnología Profesorado de Biología Cátedra: Evolución Equipo de cátedra: Medrano, Jonathan Quiroga, Martin Integrantes: Heinrich, Jesica Kranewitter, MIcaela Seling, Jaquelina Trabajo práctico Nº 4 Evolución de los homínidos Fecha de entrega: 28 de mayo de 2014 Trabajo Práctico Nº 4: Exposición de un tema a elección. Objetivos: *Fortalecer actitudes de trabajo en grupo. *Buscar, analizar, clasificar y organizar información de distintas fuentes. Modalidad: Grupos de a dos personas. Contenidos teóricos necesarios para desarrollar el práctico: Historia de la vida en la Tierra. De los procariotas a la condición eucariótica. Ayer y hoy de la teoría endosimbiótica. Diversidad biológica durante la evolución: los dominios moleculares y los reinos eucarióticos. La explosión del Cámbrico. Evolución de los vertebrados. Evolución humana. Actividades: 1) En comisiones, elabore una ponencia en base a revisión bibliográfica sobre uno de los siguientes temas: a. Explosión del período cámbrico. b. Registro fósil. c. Evolución de los homínidos. 2) Exponga frente a la clase al resto de los alumnos sobre la temática abordada y relaciónela con otros conceptos evolutivos como, en especial con los papeles que jugaron estos conceptos en las teorías evolutivas. 2 Introducción: Mediante un lento proceso evolutivo, hace unos 40 millones de años, entre los mamíferos empezaron a desarrollarse animales pequeños, de hábitos nocturnos y que vivían casi todo el tiempo en los árboles, eran los primates. A esta especie pertenecieron varios grupos de animales que luego evolucionaron de manera diferente. Algunos dieron lugar a distintos tipos de simios, como el chimpancé y el gorila, otros (hace alrededor de 4 millones de años) se convirtieron en una nueva familia, poseedores de una característica muy particular, la de caminar erguidos. Ellos fueron los HOMINIDOS. La evolución continuó hasta originar al género HOMO, una de cuyas especies es hoy la del humano actual. Las explicaciones científicas y racionales surgen a partir del siglo XIX, momento en el cual el científico inglés Charles Darwin, publicó El origen de las especies (1859), donde desarrolló su teoría de la evolución y una década después publicó El origen del hombre. Demostrando, con escaso registro fósil, la existencia de un proceso de selección natural que rige la permanencia o desaparición de toda especie sobre la tierra, incluyendo a la especie humana. La nueva teoría propuesta, enuncia tres hipótesis que representan un importante punto de partida para la investigación de nuestros orígenes como especie: 1) Los seres humanos son descendientes de algún animal parecido a los monos antropoides. 2) Ello no supone que hayamos evolucionado a partir de los chimpancés y los gorilas, sino más bien que, en algún momento del pasado, compartimos con ellos un antecesor común. 3) Los humanos habían evolucionado en África, por la escasa evidencia y por la simple razón de que este era el lugar de origen de los grandes monos. Las evidencias aportadas por los fósiles fueron obligando a aceptar la gran antigüedad del hombre, su parentesco con los simios y la existencia de especies humanas menos desarrolladas que las modernas, pero seguramente emparentadas con el hombre actual. Proceso de hominización: Algunos sostienen que (hace aproximadamente 6 millones de años) las selvas que existían en el este africano comenzaron a desaparecer debido a cambios climáticos relacionados con la fijación de la península de la India al continente asiático y el nuevo escenario geográfico impedía la llegada de los vientos húmedos del Océano Índico a la costa africana. La selva dio paso a la sabana, hábitat caracterizado por la escasa presencia de árboles y por altos pastizales que lo cubren todo. Fue entonces que algunos de los primates que allí vivían se vieron obligados a modificar sus hábitos alimenticios para poder sobrevivir a los cambios con que la naturaleza los desafiaba. Ya no podían vivir de la recolección de frutos de árboles, ahora debían recorrer los campos para proveerse de otros alimentos, como raíces, tubérculos e insectos. Pero, como contrapartida, en tierra eran presa fácil de los depredadores 3 carnívoros que fácilmente se acercaban a ellos sin ser vistos, ayudados por la altura de los pastizales. Entonces, para sobrevivir, se vieron obligados a erguirse sobre sus miembros traseros. El andar erguido les permitía poder mirar por encima de los pastizales, al tiempo que les facilitaba soportar los rigores del sol con menos intensidad que los cuadrúpedos. La cabeza, al estar más alejada del suelo, recibía brisas más frescas mientras que una menor superficie corporal quedaba expuesta a los rayos solares. La marcha bípeda permitió liberar las manos para la recolección de frutos y para cortar y despedazar la carne de animales muertos (incorporación de carne a la dieta), ya no necesitaba de mandíbulas fuertes que antes cumplían la función de las manos. Paulatinamente, el maxilar inferior retrocede, dándole al cráneo una forma más redondeada en la que había más espacio para alojar un cerebro más grande. Estos cambios se dieron a lo largo de muchas generaciones, en un lento y paulatino proceso, llamado HOMINIZACIÓN. Este proceso implica diversos cambios en el género Homo desde sus primeros exponentes hasta el ser humano actual, es la progresiva adquisición de las características que acabaron diferenciando a los homínidos del resto de primates. Los científicos creen que las líneas de evolución de las personas y de los chimpancés se distanciaron hace entre cinco y siete millones de años. Esta separación no se detuvo ya que la especie del ser humano continuó derivando en nuevas ramificaciones y otras especies, de las cuales la única que subsiste en la actualidad es el mencionado Homo sapiens. Las características propiamente humanas son: • La marcha bípeda - Esta forma de locomoción provocó una serie de modificaciones imprescindibles: una columna vertebral con cuatro curvaturas, que permite que el centro de gravedad del cuerpo describa al andar casi una recta, una pelvis ancha la pelvis (capaz de soportar el peso de todo el esqueleto y esto implica que y debió ampliarse el canal del parto para poder parir crías con el cráneo cada vez más grande), una rodilla que puede doblarse en un solo sentido, un hueso del talón alargado y un pulgar del pie (más corto) y alineado con el resto de los dedos de los pies. La marcha bípeda permitió liberar las manos, que se convirtieron en instrumentos muy sensibles, capaces de manipular los objetos de forma muy precisa. En la mano humana, destaca el pulgar, que es alargado, puede rotar con bastante libertad y puede oponerse al resto de los dedos de la mano. Además, el bipedismo permitió una ampliación del campo de visión y menor radiación solar, permitiendo soportar mejor la insolación y recorrer largas distancias para alimentarse. • La cara y los dientes - Disminución gradual del tamaño de la cara y de los dientes. Todos los grandes simios están dotados de enormes caninos (colmillos) que destacan del resto de los dientes. A medida que avanzamos en el proceso de hominización, observamos que los caninos van reduciéndose de tamaño. Además, los dientes que sirven para masticar (premolares y molares) han ido disminuyendo su tamaño progresivamente. Estos cambios provocan una disminución del tamaño de la cara y de las mandíbulas. La cara de los primeros antepasados del ser humano era grande y estaba situada al frente del cráneo. A medida que los dientes se redujeron y el cerebro aumentó, la cara disminuyó y varió su posición; 4 así, la cara de los seres humanos actuales está situada debajo, no delante, del cerebro. Otros rasgos: en el ser humano actual destacan la nariz y el mentón en el perfil de la cara. • Tamaño del cerebro - La marcha bípeda se adquirió mucho antes de que comenzara el aumento del volumen del cerebro. La mayoría de los seres humanos actuales tiene una capacidad craneal entre 1.300 y 1.500 cm 3. En el transcurso del proceso de hominización, el volumen de la masa cerebral se ha multiplicado más de tres veces. El aumento del tamaño del cerebro y de su complejidad (aumentando las circunvoluciones) ha permitido la evolución cultural y técnica del ser humano. • La adquisición del lenguaje articulado - Paralelamente al desarrollo del cerebro, el lenguaje articulado permitió transmitir información concreta de modo instantáneo. Fue un instrumento perfecto para la evolución cultural del ser humano, que le ha llevado a controlar el planeta, adaptando el entorno a sus necesidades. Para permitir el habla, en el hombre surgieron modificaciones en las vías respiratorias. La laringe está en posición más baja que en el chimpancé. También hubo una “especialización” de algunas partes del cerebro en zonas que se relacionaron directamente con la función del habla. Se hicieron permanentes los rasgos que, en especies evolutivamente más antiguas y emparentadas, eran sólo caracteres de los animales jóvenes: cuello largo, ortognatismo (cara chata), gran volumen del cerebro, redondez de la cara, dientes pequeños, ausencia de protuberancia en las cejas, delgadez de los huesos del cráneo, relativa ausencia de pelo en el cuerpo, ausencia de pigmentos en algunos grupos y ausencia de rotación del dedo pulgar. Las hembras humanas perdieron el período del estro. Las relaciones sexuales se convirtieron en permanentes. Aparecieron dos nuevos ciclos biológicos que no tienen las otras especies: niñez y adolescencia. Favorecieron la coexistiencia de los procesos: de maduración nerviosa y cerebral y de educación y socialización. Todas estas características se fueron adquiriendo poco a poco, como consecuencia de la evolución y la selección natural. La evolución, probablemente no se diera de forma lineal. No ocurrió que de una especie se evolucionó a otra. Es muy probable que varias especies de homínidos coexistieran. Homínidos: Según algunos autores, un homínido es aquel que pertenece a la Familia Hominidae. Sin embargo, otros autores consideran que dentro de esta familia también deben incluirse a los grandes antropomorfos actuales, y realizar una subdivisión a nivel de Subfamilias: Ponginae y Homininae. Hoy sabemos, gracias a la evidencia aportada por la genética molecular que, desde el punto de vista estrictamente biológico, esta clasificación tampoco sería correcta. Nosotros compartimos con los chimpancés un antepasado común que no lo es de gorilas y orangutanes. Por eso es preferible la definición de homínido que incluye a todas las especies fósiles que aparecieron en nuestra línea evolutiva después de la divergencia del chimpancé. 5 Así, el término homínido nos incluye tanto a nosotros como a nuestros antepasados. Es el nombre científico utilizado para identificar a los primates de posición erguida y marcha bípeda. Reino Animal Filo Cordados Clase Mamíferos Orden Primates Súperfamilia Hominoidae Familia Homínidos Subfamilia Ponginae Género Pongo Homininae Género Gorilla Pan Homo Australophitecus Paranthropus La cuna de la humanidad: Los primeros homínidos aparecieron en África y desde allí colonizaron todo el mundo. 6 Principales homínidos Ardipithecus ramidus: Significado: “Ardi” significa “tierra” y “Rami” significa “raíz” en lengua afar y "pithecus" significa “mono o simio” en griego, Ardipithecus ramidus se traduciría como “simio terrestre que está en la raíz de nuestro árbol”. Vivió en el Este de África, los restos más antiguos son de hace 5,2 millones de años y se encontraron en Etiopía. Eran bípedos y se alimentaban de vegetales (frutos y brotes tiernos de hojas). Tenían una altura de 1,20 metros y un peso de unos 50 kg. Su capacidad craneal era menor a la de los Australopitecos (350 cm3). Las características de A. ramidus indican que era un homínido: La abertura de la parte inferior del cráneo, a través de la cual pasa la médula espinal foramen magnun, se localiza en una posición avanzada cómo se encuentra en los humanos, en los simios el foramen magnum se encuentra en una posición más posterior al cráneo (característica asociada a la locomoción bípeda). Presentaban caninos y molares con esmalte dental fino, a diferencia resto de los homínidos que presenta el esmalte dental grueso. El espesor del esmalte de los dientes está relacionado con el tipo de dieta; a un esmalte fino, como el de A. ramidus, los chimpancés y demás monos actuales, se le atribuye una funcionalidad en la ingestión de frutas y bayas (dieta blanda). El esmalte grueso que presentan los demás homínidos conocidos se relaciona con un cambio hacia una dieta más abrasiva. Los molares son pequeños comparados con otros homínidos y los caninos son más pequeños que los de los chimpancés y gorilas, pero mayores que los homínidos posteriores. Australopithecus (Eslabón perdido) “Australo” significa “del Sur” y “pithecus” significa mono o simio”, por lo que Australopithecus significa “mono del Sur”. Hace aproximadamente 4 millones de años, en el Este del continente africano, en la sabana, aparecieron estos primeros homínidos. Su volumen cerebral era reducido (alrededor de 500 cm3) poseían una frente estrecha y grandes molares. Eran en su mayoría pequeños y delgados, con una talla de 1,20 a 1,40 metros de estatura (las hembras medían alrededor de 1 m y pesaban unos 30 kg y los machos medían 1,50 m y pesaban alrededor de 45 kilos). A pesar de vivir aún en lo árboles, eran bípedos y vegetarianos, se alimentaban de frutos y hojas. No fabricaban herramientas. 7 Con el tiempo, algunos se extinguieron mientras otros evolucionaron hacia el género homo. Entre ellos se destacaron: Australopithecus ramidus, 4.4 millones de años. Australopithecus afarensis, 3.8 a 3 millones de años, con mayor capacidad craneana, bípedo, aún vivía en árboles. Los restos más conocidos son los relacionados con el las huellas de Laetoli (Tanzania), unos 3,7 millones de años de antigüedad, y el esqueleto casi completo de una hembra a la que sus descubridores llamaron Lucy. Lucy fue encontrada en 1974 en la región de Hadar (Etiopía). Australopithecus africanus, 3 a 3.3 millones de años, con una capacidad craneana de 470/500 cm3, marcha bípeda y erguida. Australopithecus boisei, 2.3 a 1.4 millones de años, capacidad craneana de 530 cm3, fabricaban utensilios de piedra. Australopithecus aethiopicus, 2.7 a 2.3 millones de años, capacidad craneana de 410 cm3. Australopithecus robustus, 2 a 1.5 millones de años, capacidad craneana de 530 cm3, dientes pequeños, dieta vegetariana y carnívora Los Australopitecus al ser bípedos liberaron las patas delanteras, lo que les permitió utilizarlas con mayor frecuencia; eso condujo a desarrollar el pulgar oponible generando así la posibilidad de agarrar con precisión y fuerza las cosas. La columna vertebral dejó de presionar sobre la base del cráneo, permitiendo que éste se desarrollara, al aumentar el cráneo aumentó la masa cerebral, y por lo tanto la inteligencia LOS HOMÍNIDOS: (Género Homo) Se incluyen en el género Homo todos los antepasados directos del ser humano. Para incluirlos en este grupo una condición fundamental es la fabricación de herramientas, una de las características que permiten diferenciarnos del resto de los animales. A partir de los australopithecus, surgieron los homo, hace alrededor de 2.5 millones de años. Nosotros, pertenecemos a la última especie de este género. Homo habilis: Su nombre significa “habilidoso, mañoso” Los restos más antiguos datan de hace unos 2,5 millones de años. Se han encontrado fósiles de Homo habilis en numerosas regiones de África. Su característica física más notable es el aumento del cerebro, que pasa de 450(Australopithecus) a 600-800 cm3. Su tamaño corporal era pequeño, alzaban entre 1, 10 y 1,40 metros. 8 Fue la primera especie en poseer la capacidad humana de fabricar instrumentos (elaboración y uso de herramientas de piedra), por lo tanto, se le considera el primer representante del género Homo. Al principio se alimentaron de carroña (restos de animales muertos cazados por otros animales) y luego consiguieron cazar animales de pequeño tamaño, con lo que su dieta se volvió omnívora y su adaptación a otros hábitats fue más fácil. Coexistió con el Australopithecus y el siguiente eslabón, el Homo Erectus. Homo georgicus: Los fósiles se han datado en 1,8 millones de años. El tamaño del cerebro se ha calculado entre 600 y 680 c.c. y tenían una estatura de 1,5 m. Ésta es la primera especie de homínido más antigua encontrada fuera de África. Se han encontrado en Dmanisi (Georgia). De ahí deriva su nombre, que significa “homínido de Georgia”. Los restos más antiguos son de hace 1,8 millones de años y se han encontrado en Dmanisi (Georgia). Su cerebro era un poco mayor que el de Homo habilis (entre 600 y 700 cm3). Parece ser que salieron de África siguiendo a los animales que habían emigrado hacia el Norte. Las herramientas que fabricaban no eran muy diferentes de las fabricadas por los Homo Habilis. Presentaba características como: doble quilla sagital, ausencia total o parcial de mentón, palmas de las manos orientadas hacia el frente (presunta adaptación a la vida arborícola), proporciones entre brazos y piernas muy modernas. Aparenta ser un homínido adaptado a altas y frías latitudes. Su dieta era carnívora (a pesar de que su dentición no es especializada) y las evidencias de que se trataba de un auténtico cazador y no un simple carroñero son muchas. Homo erectus: Erectus significa “que camina erguido”. Habitaron en Asia oriental (China, Indonesia). Los restos más antiguos son de hace 1,8 millones de años. Era completamente bípedo. El volumen craneal era muy variable, aumentando a lo largo de su dilatada historia. Tenía una capacidad mayor que la del Homo habilis. Los primeros restos que se encontraron del Hombre de Java muestran una capacidad craneal de 850 cm3, mientras que los que se encontraron posteriormente llegan a los 1100 cm3. Presentaba un mayor dimorfismo sexual que en el hombre moderno. Era muy robusto y tenía una altura elevada de hasta 1,80 m. Sus producciones en piedra eran más sofisticadas, destacándose la construcción de hachas de mano utilizadas para la caza Aprendieron a conservar 9 el fuego, con todas las ventajas que esto suponía (luz en la oscuridad, calor, posibilidad de cocinar alimentos y ahuyentar a los animales, etc.). Fue una especie muy bien adaptada al entorno o tal vez no tuvieron la competencia de otras especies de homínidos y sobrevivieron durante casi 2 millones de años. Se extinguieron hace unos 100.000 años, con la llegada de homínidos mejor adaptados. Homo ergaster: “Ergaster” significa “trabajador”. Los restos más antiguos se han encontrado también en el Este de África y son de hace 1,8 millones de años. Su tamaño y peso eran mayores que los de Homo habilis y Homo georgicus (medían entre 1,50 y 1,80 m y pesaban entre 60 y 70 kilos). Su cerebro también era mayor (entre 800 y 1000 cm3). Su cara era más parecida a la del ser humano actual. Este homo trajo consigo una forma nueva de tallar la piedra, que consistía en núcleos tallados por las dos caras denominados bifaces, se trata de una técnica que perduraría muchísimo tiempo debido a su gran utilidad. Se especializaron en la caza de herbívoros en la sabana africana y fueron los únicos homínidos que sobrevivieron en ese hábitat. Su mayor tamaño cerebral les dio ventajas organizativas y también les permitió mejorar la técnica de elaboración de herramientas hace 1,5 millones de años. Comenzaron a fabricar herramientas especializadas siguiendo siempre un mismo patrón: bifaces, picos, hendedores, raederas, etc. Además conservaban las herramientas e incluso las llevaban consigo y las retocaban. Su supervivencia indica una mayor capacidad organizativa y el uso de un lenguaje más complejo. El homo ergaster poseía una nariz que humedecía y calentaba el aire, además su cuerpo sin pelo le permitía expulsar el calor en forma de sudor. Estos homínidos ya se comunicaban entre sí. Homo antecesor: “Antecessor” significa “explorador”. Tienen una antigüedad de unos 900.000 años. Se han encontrado restos de Homo antecessor en Europa. Su tamaño era similar al nuestro: entre 1,65 y 1, 85 metros de altura, al igual que su peso, que oscilaría entre los 60 y 90 kg. Poseía un aspecto muy humano. Su cerebro tenía entre 100 y 1.200 cm3 Fabricaban instrumentos rudimentarios. Eran omnívoros y practicaron el canibalismo, es decir, se alimentaron de otros homínidos de su misma especie. 10 No se sabe por qué, tal vez formaba parte de un ritual o simplemente lo hicieron para alimentarse. Homo heidelbergensis: Surgió hace más de 600 000 años. Eran individuos altos que tenían 1,80 m de estatura y muy fuertes (llegarían a 105 kg), de grandes cráneos que median 1350 cm³, muy aplanados con relación a los del hombre actual, con mandíbulas salientes y gran abertura nasal. Se trata de la primera especie humana en la que es posible detectar indicios de una mentalidad simbólica. Su nombre científico deriva de la proximidad de la ciudad de Heidelberg (Alemania) al lugar donde fueron hallados los primeros fósiles, lo que subraya el hecho de que se trata de los primeros homo que alcanzaron las estepas del centro y norte de Eurasia. Produjeron herramientas de piedra con mayor precisión. Las piedras utilizadas por el Homo heidelbergensis también servían para construir armas. Aparecen aquí las lanzas con puntas de primera piedra probablemente utilizadas para la caza. Eran omnívoros, fabricaban herramientas especializadas, se cubrían con pieles, lo cual indica que vivían en un clima frío, y aprendieron a hacer fuego. Enterraban a sus muertos y en las tumbas se han encontrado algunos objetos que pueden ser asociados a un ritual, lo que indica un avance notable en el pensamiento de carácter simbólico. Homo sapiens neanderthalensis: “Sapiens” significa “inteligente” y “neanderthalensis” significa “de Neanderthal”, el lugar donde se encontraron los primeros fósiles de esta especie. Vivieron fundamentalmente en Europa, aunque también se han encontrado restos en Próximo Oriente y en Asia Occidental. Los fósiles más antiguos son de hace unos 200.000 años los más recientes, de hace unos 25.000 años. Su capacidad craneana alcanzaba los 1.600 cm3 esto es, semejante al hombre moderno, pero con la salvedad de que era mucho menor la cantidad de circunvoluciones que poseía su cerebro. Su configuración era robusta y musculosa, y su estatura era superior a la de sus antecesores, alcanzando 1,70 metros; su mandíbula era de fuerte contextura con grandes dientes; sus manos eran largas, y su nariz más bien chata y carnosa. Fueron los primeros en enterrar a los muertos y en cuidar a los enfermos. Enterraban a los muertos con una especie de rito, debido a esto se cree en el inicio de una cultura religiosa, en particular por el esmero puesto en la inhumación del cadáver: se cavaba un foso en cuyo piso se colocaban piedras y 11 ramas de pino; luego se depositaba el cuerpo en posición fetal para, finalmente, depositarle flores silvestres. De acuerdo con las investigaciones arqueológicas de la prehistoria humana, el Homo sopiens neanderthalensis habría ido el primero en producir el enterramiento de sus muertos; e, incluso, algunos admiten la posibilidad de la existencia de necrópolis. Eran más robustos que el ser humano actual. Probablemente esto se debiera a que vivían en un clima frío y la grasa corporal era una ventaja para la supervivencia. Realizaron instrumentos de piedra muy especializados, lo que demuestra que tenían un alto nivel tecnológico y desarrollaron cierta capacidad artística con la realización de objetos de adorno. Parece ser que tenían dificultades para pronunciar correctamente algunas vocales (la a, la i y la u), lo que se convirtió en una desventaja a la hora de comunicarse y organizarse de forma eficiente cuando otra especie de homínido entró en competencia con ellos. Los neandertales coexistieron con los sapiens. Homo sapiens sapiens: Los fósiles más antiguos se han encontrado en Etiopía y datan de hace unos 160.000 años. Se extendieron por toda África hace entre 150.000 y 100.000 años. Después salieron de África y se extendieron por Europa y Asia, desplazando a las otras especies de homínidos (Homo erectus y Homo sapiens neanderthalensis). También colonizaron América y Oceanía: A Oceanía llegaron navegando en barcas de bambú a través de la Plataforma de la Sonda hace unos 40.000 años, cuando el nivel del mar era más bajo. A América llegaron desde Asia caminando a través del Estrecho de Bering, que se encontraba congelado (una especie de puente de hielo: puente de Beringia) hace unos 15.000 años. Eran similares al ser humano actual. Su mejor capacidad comunicativa y organizativa les permitió adaptarse a todos los hábitats y convertirse en la única especie de homínidos que sobrevive en la actualidad. Con ellos el estilo de vida, la cultura y la tecnología se transformaron completamente (es precisamente ahora cuando aparecen las primeras lanzas diseñadas para ser arrojadas). También se cuentan entre sus inventos el arco y la flecha, innovación que pudo tener lugar en algún punto del norte de África o del Oriente Medio, territorios de exuberante vegetación habitados por animales salvajes de gran tamaño a los que era más seguro matar guardando las distancias. Inicio el arte rupestre, logro la revolución agropecuaria y desarrollo las primeras grandes civilizaciones. Es la especie que domina el mundo hasta la actualidad. 12 Bibliografía: -Alvarez del Villar, J. 1977. “Los cordados, origen, evolución y hábitos de los vertebrados”. Cecsa, México -Anónimo. “El proceso de hominización”. Visto en: essinclases.blogspot. com.ar/p/el-proceso-de-hominizacion-la.html. http://social- -Anónimo. “Proceso de hominización”. Visto en: http://roble.pntic.mec.es/fpef0013/pr ehistoriapara principiantes/Hominizacion.html. -Anónimo. Visto en: http://educacionyhumanidades.files.wordpress.com/2014/03/el -proceso-dehomin i zacic3b3n.pdf. -Aula de filosofía. 2009. “Ruta de distribución de los homínidos”. Visto en: http://4. B p.blogspot.com/Se4ERaD6nhg/TV0gxTZHFGI/AAAAAAAAABQ/PS_6Y2RCKZU/s 1600/evolhum.jpg. -Contexture. 2010. “DARWIN, la teoría Del Origen de las especies y el proceso de hominización”. Visto en: http://www.siemprehistoria.com.ar/2010/02/darwin-la-teori a-del-origen-de-las-especies-y-el-proceso-de-hominizacion/comment-page-1/ -Rasines Pedro. 2013. “La evolución humana”. Visto en: http://mirincondelabahia.wo r dpress. Com/2013/12 /01/la-evolucion-humana-unavision-actualizada-anoviem bre-de-2013/ - Meinardi, E. y A. Revel. 2000. “El origen del hombre y su evolución”. Aique, España. 13