Charles W. Johnson Español 430, 11:50 a 13:05 (Revisado) 14 de abril 2000 Palabras: 313 Lo bueno de la ciudad Muchos contestarían esta pregunta con quejas contra la ciudad y por esas razones dirían que es mejor el campo. Es seguro que hay muchos problemas en la ciudad: el ruido, los suburbios peligrosos, algunas partes feas, etcétera. Sin embargo también existen muchas cosas buenas y por lo bueno prefiero la ciudad al campo. Por ejemplo, los ciudades son centros gigantescos de población y por eso ofrecen mucho a sus ciudadanos. Si viviera yo en el campo, tendría miles de problemas encontrando empleos, universidades buenas, transportación conveniente y tiendas para ir de compras. También es la ciudad un centro de cultura: hay museos, orquestas, teatros y mucho más que no se podría encontrar en el campo. Los que prefieren el campo dicen que a la ciudad le falta mucho la belleza natural del campo. Estoy de acuerdo pero también creo que se gana mucha belleza de otro tipo cuando se va a la ciudad. Me encanta la arquitectura de las grandes ciudades como Chicago, Nueva York y París y sus parques y otros espacios lindísimos como el «Riverwalk» en San Antonio o el Parque Central en Nueva York. ¿Y dónde se encontraría la belleza maravillosa dentro del Louvre, el Prado o el Guggenheim sin que se vaya a las ciudades? Dicen también que es peligrosa la ciudad y vivir allí es exponerse a robo, violación o asesinato. Sin embargo en emergencia, la ciudad es más segura que el campo, porque tienen la policía, los bomberos y hospitales allí mucho más dinero, gente y equipo. Si necesitara yo cirugía de corazón o la protección de la policía, me salvarían los servicios de la ciudad «peligrosa». Es seguro que se puede vivir muy bien en el campo, y que hay muchas razones para preferir el campo a la ciudad. Sin embargo no debe olvidársenos que la ciudad nos importa mucho. Si las dejara se perdería mucho.