Una población es un grupo de organismos de la misma especie que viven en la misma área. Por ejemplo, todos los robles de un bosque forman una población. Todos los ciervos del mismo bosque forman una población diferente. Todas las personas de una ciudad también forman una población. Las poblaciones pueden cambiar con el tiempo. Pueden agrandarse o hacerse más pequeñas. Cuando el tamaño de una población cambia, puede afectar el tamaño de otra población. Imagina una población de halcones y una población de ratones en un bosque. Los halcones comen ratones para obtener alimento. ¿Qué sucedería si la población de ratones se agranda? Habría más alimento para los halcones. Por lo tanto, más halcones sobrevivirían y se reproducirían. Con el tiempo, la población de halcones también se agrandaría. Supongamos que la población de halcones sigue agrandándose. La población de ratones se haría más pequeña porque tantos halcones se comerían a los ratones. Gradualmente, habría menos ratones para que los halcones coman. Por lo tanto, menos halcones sobrevivirían, y la población de halcones finalmente se haría más pequeña también. A veces, los cambios en el tiempo hacen que las poblaciones se agranden o se hagan más pequeñas. Si hay sequía en una pradera, hay menos agua para los pastos. Sin agua suficiente, la población de pastos se haría más pequeña. Las poblaciones de cebras y gacelas que comen los pastos podrían hacerse más pequeñas. Tal vez no puedan hallar alimento suficiente para comer. Las sequías también pueden hacer que se sequen los arroyos. Cuando un arroyo se seca, muchos de los organismos que viven en él mueren. Las poblaciones de cangrejos de río y peces pequeños se harían más pequeñas sin agua suficiente. Nutrias, mapaches y garzas se alimentan de cangrejos de río y peces pequeños. Las poblaciones de estos animales también podrían hacerse Poblaciones cambiantes más pequeñas cuando los arroyos se secan porque tienen menos alimento para comer.