EXTERNO AU 300/97 Índice AI: AMR 34/36/97/s 16 de septiembre de 1997 Temor por la seguridad GUATEMALA Marlon García, fotógrafo del Equipo de Antropología Forense de Guatemala (EAFG) Otros defensores de derechos humanos Los defensores de los derechos humanos y los familiares de víctimas de violaciones de dichos derechos cometidas en el pasado que intentan averiguar cuál fue la suerte corrida por esas víctimas siguen sufriendo intimidaciones y amenazas de muerte. El último incidente tuvo lugar el 10 de septiembre de 1997 en el Hotel «Vista al Lago», en El Estor, departamento de Izabal, donde se alojaban unos miembros del Equipo de Antropología Forense de Guatemala (EAFG) y de la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Guatemala (FAMDEGUA). Según los informes, unos individuos desconocidos llegaron al hotel e insistieron en que el fotógrafo Marlon García fuera a hablar con ellos. Cuando éste se negó, ellos insistieron aún mas, hasta que intervinieron unos miembros del EAFG, de FAMDEGUA y de las Brigadas Internacionales de Paz. Esto se produjo poco después de que comenzara la exhumación de una fosa común que contenía los restos de quienes, según se cree, fueron víctimas de la matanza de Panzós; esta matanza tuvo lugar el 29 de mayo de 1978 en la localidad de Panzós, en Alta Verapaz, y en ella al menos 100 indígenas kekchi murieron a manos del ejército. En junio de 1996, Carlos Federico Reyes López, otro antropólogo forense y miembro del EAFG, fue amenazado en un autobús en Ciudad de Guatemala cuando un individuo no identificado le colocó una pistola contra las costillas y le dijo que dejara de andar por ahí con ciertos amigos, porque era peligroso. Una semana después, volvió a ser amenazado. Unos meses antes de estos incidentes, Carlos había participado en la exhumación de una fosa común en la que se habían hallado los restos de 19 personas, entre ellas seis niños. Durante la excavación en 1994 y 1995 de unas fosas comunes en Las Dos Erres, en el departamento de El Petén, en el norte del país, los miembros de FAMDEGUA y del EAFG tuvieron que contar con protección policial después de que alguien arrojara piedras contra el tejado de sus alojamientos temporales y disparara con ametralladoras al aire. Las Dos Erres fue escenario de una matanza en 1982 en la cual, según los informes, murieron 350 personas. En otro incidente, unos miembros de FAMDEGUA que visitaban las comunidades de Palestina y La Libertad, en El Petén, en julio de 1997, fueron intimidados por ex miembros de los Comités Voluntarios de Defensa Civil (CVDC). INFORMACIÓN GENERAL Tras los centenares de matanzas de civiles perpetradas por el ejército guatemalteco durante las operaciones de contrainsurgencia a fines los años setenta y principios de los ochenta, miles de cadáveres, la mayoría de campesinos mayas, fueron arrojados sin identificar a fosas comunes clandestinas. Durante muchos años resultó prácticamente imposible llevar a cabo exhumaciones en Guatemala por temor a las represalias contra los familiares de las víctimas. Las primeras exhumaciones, realizadas en remotas regiones de montaña a fines de los ochenta y principios de los noventa, se caracterizaron por lo inadecuado de sus procedimientos, por las denuncias de que se estaban eliminando pruebas de los enterramientos secretos y por los intentos de secuestro y las amenazas contra quienes pedían que se llevaran a cabo las exhumaciones. Los jueces que trataron de ordenar exhumaciones también recibieron amenazas, y muchos de ellos se vieron obligados a abandonar sus investigaciones. Entre 1988 y 1991, las organizaciones de derechos humanos presentaron ante los tribunales peticiones para que se exhumaran 17 fosas comunes. Sin embargo, durante ese tiempo sólo se realizaron ocho exhumaciones. Las 2 autoridades militares restaron importancia a los cementerios clandestinos afirmando que se trataba de enterramientos de guerrilleros muertos en combate por el ejército o por patrullas civiles. Las autoridades civiles, incluido el gobierno actual, no han demostrado la voluntad política de emprender investigaciones serias sobre las «desapariciones» y las ejecuciones extrajudiciales. ACCIONES RECOMENDADAS: Envíen telegramas, mensajes de correo electrónico, fax, cartas urgentes o cartas por vía aérea en español o en su propio idioma: -expresando preocupación por la intimidación contra Marlon García; -pidiendo que se tomen medidas inmediatas para garantizar su seguridad y la de otros miembros del EAFG y de FAMDEGUA; -pidiendo que el incidente que tuvo lugar el 10 de septiembre de 1997 se investigue de forma inmediata y exhaustiva y que los responsables comparezcan ante los tribunales. LLAMAMIENTOS A: COPIAS DE SUS LLAMAMIENTOS A: S.E. Álvaro Arzú Irigoyen Presidente de la República de Guatemala Palacio Nacional 6ª Calle y 7ª Avenida, Zona 1 Guatemala, GUATEMALA Telegramas: Presidente, Guatemala, Guatemala E-mail: [email protected] Fax: +502 221 4537 Tratamiento: Sr. Presidente Lic. Jorge Mario García Laguardia Procurador de los Derechos Humanos Procuraduría de los Derechos Humanos 12 Avenida 12-72, Zona 1 Guatemala, GUATEMALA Fax: +502 238 1734/251 7769 Lic. Héctor Hugo Pérez Aguilera Fiscal General de la Nación Ministerio Público 6ª Avenida 3-11, Zona 4 Guatemala, GUATEMALA Telegramas: Fiscal General, Guatemala Tratamiento: Señor Fiscal Guatemala, Licda. Marta Altolaguirre Comisión Presidencial Coordinadora de la Política del Ejecutivo en Materia de Derechos Humanos (COPREDEH) 13 calle 15-33, Zona 13 Guatemala, GUATEMALA Fax: +502 334 1615/334 1407 FAMDEGUA Sres. 9a. Calle «A» 3-56 Zona 1 Guatemala, GUATEMALA y a los representantes diplomáticos de Guatemala acreditados en su país. ENVÍEN SUS LLAMAMIENTOS INMEDIATAMENTE. Consulten con el Secretariado Internacional o con la oficina de su Sección si van a enviarlos después del 28 de octubre de 1997.