168098. VI.1o.P.263 P. Tribunales Colegiados de Circuito. Novena Época. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXIX, Enero de 2009, Pág. 2766. LIBERTAD PROVISIONAL BAJO CAUCIÓN CONCEDIDA POR EL JUEZ DE DISTRITO DENTRO DEL TRÁMITE DEL INCIDENTE DE SUSPENSIÓN. DEBEN SUBSISTIR SUS EFECTOS AUN CUANDO SE HAYA RESUELTO EL JUICIO DE AMPARO PRINCIPAL (ARTÍCULO 20 CONSTITUCIONAL ANTES DE LA REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN DE 18 DE JUNIO DE 2008). Del texto de los artículos 20, apartado A, fracción I, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 136, párrafo séptimo, de la Ley de Amparo, se colige que en el trámite del incidente de suspensión el quejoso puede obtener el beneficio de la libertad provisional bajo caución ante el Juez de Distrito que conozca del juicio de garantías, siempre y cuando dicha medida no se haya solicitado previamente a la autoridad responsable y se colmen los requisitos establecidos tanto por la Ley Fundamental, como por la ordinaria, ya sea federal o local. Luego, cuando el Juez de Distrito concede el citado beneficio, sustituye al del proceso, en tanto que para su concesión o negativa, debe observar las mismas reglas y cumplir los requisitos estatuídos en el citado artículo constitucional, así como en la legislación que la autoridad responsable deberá aplicar para su pronunciamiento. Sin embargo, la circunstancia de que se otorgue el beneficio en el incidente de suspensión, no implica que dicha prerrogativa constitucional quede sin efectos por haberse resuelto el juicio de amparo en lo principal, en virtud de que la naturaleza jurídica de la libertad provisional bajo caución es diferente a la de la suspensión, pues mientras la primera es una garantía constitucional, que permite al inculpado permanecer fuera del centro de reclusión preventiva en tanto se le sigue proceso penal y surte sus efectos el tiempo que éste dure (siempre que no se actualice alguna causa grave de revocación prevista en la legislación), la suspensión del acto reclamado, regulada por la Ley de Amparo, permite que las cosas se mantengan en el estado en que se encuentran a la promoción del juicio de garantías, preservando su materia durante su trámite, impidiendo la consumación de violación de garantías, y perdura hasta que se resuelva el juicio constitucional. En esas condiciones, si el beneficio de la libertad caucional opera durante el proceso, deben subsistir sus efectos aun ante la resolución del juicio de amparo principal; considerar lo contrario ocasionaría que el beneficiado tuviera que solicitar nuevamente, ante el Juez de la causa la libertad provisional bajo caución, aunado a que el daño originado con tal determinación, sería imposible de reparar en la sentencia constitucional, pues no existe disposición alguna que establezca que en dichas resoluciones el juzgador tenga la obligación de tomar en consideración los proveídos que pudieran emitirse en el incidente de suspensión. PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL SEXTO CIRCUITO. Queja 36/2008. 16 de octubre de 2008. Unanimidad de votos. Ponente: José Manuel Vélez Barajas. Secretaria: Silvia Gómez Guerrero. Nota: Esta tesis contendió en la contradicción 359/2009 resuelta por la Primera Sala, de la que derivó la tesis 1a./J. 135/2009, que aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXXI, marzo de 2010, página 573, con el rubro: "LIBERTAD PROVISIONAL BAJO CAUCIÓN CONCEDIDA DENTRO DEL INCIDENTE DE SUSPENSIÓN. SIGUE VIGENTE AUN CUANDO SE HAYA RESUELTO EN DEFINITIVA EL JUICIO DE AMPARO PRINCIPAL (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO 20, APARTADO A, FRACCIÓN I, DE LA CONSTITUCIÓN GENERAL DE LA REPÚBLICA ANTERIOR A LA REFORMA -1- 168098. VI.1o.P.263 P. Tribunales Colegiados de Circuito. Novena Época. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXIX, Enero de 2009, Pág. 2766. PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 18 DE JUNIO DE 2008)." -2-