PUEB LO S Y CULTURAS Las c reencias, los mitos , las leyendas , las c ostumbres y todo aquello que s e refiere a los proc esos s oc ioc ulturales, de los más antiguos pueblos de la Tierra, s e trans vas an, se aculturan y se mantienen a través de los diferentes territorios y del trans c urs o de s iglos y milenios . E gipcios , Súmeros , As irios, Caldeos , A cadios , Fenic ios , M edos , P ers as, Indios , C hinos, Creto-mic énic os, Griegos y Romanos , participan, unos antes y otros después de similares mitologías , c reenc ias, supers tic iones , ritos , c eremonias , dios es , religiones, ideas c osmogónic as, c antos y danzas . O riente y O ccidente c ons tituyen una misma expansión c ultural y racial que parte hace más de 19 mil años de la mes eta de P amir, del I ndu-Kuch, Solimán, Zagros , riberas del río I ndo y el Himalaya, formidable gigante del P laneta T ierra. T odo es e c onocimiento mitológico y simbólico es llevado, en la mente de incontables oleadas de indo-arios y de protoarios que s e dirigen en migrac iones horizontales , tanto hac ia el oes te, bifurc ados en dos grandes líneas humanas , denominados c omo indo-árabes e indo-germanos y por el otro, hac ia el este, bajando a la I ndia, al c entro del As ia y al sudes te de ese mis mo y extens o c ontinente. T oda la actual Rus ia, M edio O riente, el norte de África y E uropa has ta el A tlántico, es poblada por los dos primeros desplazamientos humanos que hemos menc ionado. A llí quedan, en la dinámic a de la etnología y la his toria, para milenios des pués , atravesar el Atlántic o y llegar a las tierras de Albania o de los Dios es Blancos , en los frágiles bajeles de fenicios, griegos , c artagineses , romanos , druidas, celtas , vikingos y es pañoles. C uando estos navegantes mediterráneos y europeos nórdicos llegan al Continente Blanc o, a la famos a Albania que quedaba después de la mitológic a A tlántida, encuentran en esos territorios pobladores de origen protoario as iátic o que han entrado por el estrecho de Bering, desde el milenio XV y provienen de las mes etas c entrales de la actual C hina y del s udeste as iátic o. Las viejas c ulturas euromediterráneas y as iátic as han pas ado al Continente Blanc o por dos vías diferentes , pero llevadas por pueblos s imilares. Toda es a s abiduría de idéntico origen, s ignifica que la inc ons is tente división entre occidentales y orientales , no tiene razó n de s er. En Albania antigua o en A méric a ac tual, el c onoc imiento s imbólic o y mitológico de las Esc uelas Primordiales y del Hermetismo, produ jeron un idéntico fenómeno s oc io-c ultural. T oda es a s abiduría fue ates orada por mayas , aztecas , toltec as , navas , c hibc has , incas , diaguitas , quilmas, c alc haquíes , c omec hingones y s anavirones . P ara ciertos es tudiosos , es te c onocimiento s e denominaba hiperbóreo , de las voces griegas, hiper o arriba, muy alto y bóre o o boreal, que equivale a norte . Q uienes habitaban es as regiones ártic o-polares, eran cas ualmente los hiperbóreos . E sta leyenda polar, tiene s u trasfondo explic ativo en los pueblos nórdic os que habitaban las regiones ubicadas al norte y al s ur del círc ulo ártic o des de épocas remotas y que, por razones de c lima y de dis tancia, tenían poc a c omunic ac ión y c onoc imiento c on los pueblos eroasiáticos ubicados más al sur. As imismo, los grupos humanos de A mérica Central c onocían que s us lejanos ances tros , c on más de 5mil años de antigüedad, habían e ntrado a A lbania por es a región norte del c ontinente, donde el estrecho de Bering s epara las dos masas c ontinentales y, en sus largos inviernos , quedan unidos por el hielo y multitud de is las e is lotes que facilitan el pas o de migrac iones humanas . Los hiperbóreos entonc es , no serían otros que es os pueblos protoarios as iáticos , pasando por las tierras heladas del norte, rumbo a los climas más benignos del sur norteameric ano o de A mérica Central. C uando florecen las viejas civilizac iones indígenas del C ontinente de los Dioses Blanc os , sus sabios tienen referencias tradicionales , e incluso esc ritas, que al norte habían exis tido hombres, antepas ados s uyos , provenientes de otros territorios , que s e dis persaron por el s ur en dos grandes y definidas c orrientes inmigratorias: la de los A ndidos que s iguió el curs o de3 la c ordillera homónima y la de los C aribes o A mazónic os , que s iguieron la c os ta o las adyac enc ias del O céano Atlántic o. E stos grupos humanos as iáticos traían su cultura del P aleolític o s uperior y sus c reencias ances trales van quedando en los nuevos pueblos y en inc ontables generac iones . Las s oc iedades que s urgen en Albania o Améric a, son herederas de toda es a mitología protoaria que ec los iona en los grandes movimientos indígenas del norte, del c entro y del sur americ ano, extendiéndos e c on mayor o menor intens idad, pero c on las mis mas bas es c ulturales, des de Alas ka has ta la Tierra del Fuego. C ordialmente. E.M.