EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Capítulo 1: Mahan y premoniciones del poder mundial. El propósito de la lectura es conocer y dar a conocer cómo ha ido evolucionando la importancia y estabilidad de los estados unidos a lo largo del tiempo, como es que ha sido participe en la lucha de la política mundial y por el poder global, motivo de alerta para ciertos países, creando así alianzas para evitar el derrocamiento de otras potencias. Hace énfasis en el realismo, en donde se plantea que la búsqueda por el auto-interés nacional y el poder son la fuerza móvil en el mundo. Considerando a Mahan como uno de los principales representantes del realismo, su doctrina fue distinguida por la manera en como el orden de poder nacional obstruía en los asuntos del ser, argumentaba que el entrenamiento militar y la expansión naval eran el mejor seguro para la seguridad nacional. 1.- El impacto inicial del poder mundial. En el siglo XIX, estados unidos se había convertido en un poder mundial. Las naciones industriales más poderosas fueron barridas en competencia por la riqueza industrial, mercados extranjeros y colonias en Asia, África y el pacifico, las coaliciones se fueron formando, la rivalidad naval fue creciendo intensamente. Con el proyecto de Bismarck, propusieron apuntalar la posición vulnerable americana con un entendimiento anglo-americano naval y político en el atlántico, el pacifico (donde propusieron la anexión de Hawaii) y en centro américa (donde advocaron a un canal bajo construcción y control exclusivo americano). embargo, no todos los americanos estaban de acuerdo con esta decisión. 2.- El sentido de seguridad y aislacionismo. Sin EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Los americanos no estaban preocupados con el impacto de las políticas mundiales en su autointerés nacional, ya que estaban convencidos de que el progreso americano era debido al resultado de mantenerse fuera de estos. Algunos expansionistas propusieron la auto-preservación, pero fue desaprobada por defensores de la preparación militar, ya que en la guerra hispano-americana surgió pánico en la línea costera del este. Los nacionalistas apoyaban la expansión militar y naval, justificado por la salvación de la civilización anglo-sajona, el cumplimiento del destino manifiesto. Los oponentes a la expansión eran el senador Arthur P. Gorman, el representante William S. Homan, y Carl Shurz, decían que el aislacionismo tradicional americano podría estar amenazado por alguna intervención extranjera. 3.- La reputación de un realista. Alfred Thayer Mahan, representante del realismo político, lanzó su campaña de vida para educar al pueblo americano en la lección de grandeza nacional, decía que necesitaban una marina mercante protegida por una flota naval suprema en orden para competir con éxito en las luchas de altamar en mercados y colonias. Analiza la necesidad de poder en las relaciones internacionales, refiriéndose a colonias, marina mercante, bases estratégicas y una flota naval masiva. Sus obras utilizaban un lenguaje mundial de poder político y proveyó una persuasiva relación para el imperialismo resurgente. 4.- Ideales y autointerés en el mensaje de Mahan. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Mahan es de visión realista porque analizó la base de autointerés de una conducta nacional pero con reputación de egoísta nacional extremo porque predicaba la doctrina de imperialismo con una fuerza sin igual para muchos americanos que compartían su punto de vista. Sus obras no pueden ser entendidas en términos simples de antítesis entre el autointerés nacional y los ideales supranacionales. Todos sus ensayos hablaban de una conciencia de influencia profunda de ideales hacia el comportamiento nacional. aunque mantenía que el conocimiento solido de la ciudadanía de mantener intereses nacionales era la única estable para una política exterior providencial, sin ignorar la parte moral sentimental. 5.- ¿Auto preservación o presunción? Es importante reconocer que el interés nacional que apelaba a nombre de la defensa estaba más cerca de engrandecimiento que de auto-preservación. Uno de los intereses más vitales que mantenía la nación era la incansable búsqueda de mercados mundiales. su política naval estaba diseñada para defender la marina mercante y los puestos de avanzada estratégicos que esta búsqueda requería; el control americano de los mares podría ser interpretada como defensa de interés nacional. El mejorar el valor de las rutas marítimas comerciales y militares en el pacifico, dirigió a Mahan a impulsar la anexión de Hawaii como una indispensable llave para su defensa, argumentaba que la adquisición facilitaría la construcción de un canal ístmico y la posición de la defensa naval de ese puesto. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Desde su perspectiva, las naciones deberían o expandirse o retrogradarse, él no podía reducir lógicamente la auto-preservación a solo protección del Status-quo. 6.- Mahan y el público americano. Los americanos compartían algo del egoísmo nacionalista de Mahan, pero no coincidían con la racionalidad de auto-interés nacional, ya que apuntaba hacia las implicaciones del status americano como una potencia, pero los americanos no veían una razón para renunciar al aislacionismo, que aparentemente les había servido muy bien. Mahan denigró el aislacionismo porque era inconsistente con la expansión americana en la política mundial, era un grave impedimento el crecimiento del país, cuando el destino señalaba hacia el exterior, veía que la expansión cambiaría radicalmente las relaciones americanas con el resto del mundo. No solo el interés de ciudadanos individuales, el de los estados unidos como nación están atados a regiones más allá del mar. El interés va más allá de lo que el pueblo quiera o decida, los líderes actúan con la justificación de hacer las cosas por y para el pueblo, sin embargo no siempre son en beneficio de estos. Capitulo 2: la primera cruzada El propósito de autor es explicar como la cruzada de ideales de los norteamericanos se han utilizado a su conveniencia dependiendo de las situaciones en ese momento vividas. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Fue la guerra Americana-Española que dio a los americanos consciencia acerca de su poder en el mundo. La relación del origen de la guerra de América con España tuvo consecuencias importantes. El excepcionalísmo americano se reforzó, la idea de que una mano no visible o una fuerza impersonal (geografía o economía) determina el curso de las naciones. América empieza la guerra no sin una calculación realista de la ventaja nacional, pero en gran parte como una cruzada de ideales para liberar los cubanos de las cadenas imperiales españolas. Una guerra para salvar a los cubanos del despotismo, corrupción, crueldad, de lo sucio de las enfermedades y la barbarie del general “Butcher”. Basto con una explosión de un barco americano “Maine” en el puerto Havana con la pérdida de 260 americanos para que se precipitara una guerra. Después de años hay poca evidencia creíble de que los españoles fueron quienes los provocaron. Aunque en el momento no tenía mucha importancia para los americanos averiguar. El incidente prendió la chispa del Chavismo. La guerra Americana-Española fue relativamente rápido. En menos de una década más tarde, americanos perdió sus intereses sobre la situación en Cuba. América entra en un entorno de enfrentamientos ideológicos. Por una parte McKinley en su mensaje anual de 1897 era la voz de la mayoría: no hablo de una anexión forzosa, puesto que para nuestro código de moralidad seria una agresión criminal. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Y por otra los empresarios en busca de nuevos mercados, de oportunidades de inversión se opusieron de aspectos egoístas de las empresas hasta que se tuvo la adquisición de las Filipinas. Los políticos nacionalistas veían en una guerra para liberar a cuba como una oportunidad para promulgar su programa de gloria nacional. “El destino ha escrito la política para nosotros” “la ley americana, el orden americano, la civilización americana y la bandera americana se plantarán así mismos en las costas, pero por esas agencias de dios”. Los filipinos eran incapaces de gobernarse solos. El crecimiento del sentimiento anti-imperialistas en los dirigentes políticos prometen que por lo menos avergonzar Destiny aunque no o pudieran detener. Estas protestas de moral coludieron con algunos Realistas. A lo mejor: antiimperialistas, y americanos en general habían puesto las apuestas muy altas, pero estaban en un juego nuevo y una vez que estaban en ellos era demasiado tarde para no cumplir. La vista del interés propio de una nación para los imperialistas: una afirmación positiva del poder nacional de acuerdo con el destino manifiesto. Antiimperialistas lo toman como sabiduría de los antepasados, una exaltación de la razón y amor, una versión hacia la violencia. La primera cruzada de América dio pocas evidencias de la estabilidad el propósito nacional asociado con la madurez de la posesión del poder del mundo Capítulo 3: La respuesta realista al poder mundial. I.- Cambios en el ambiente político de América. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. En estos tiempos los ciudadanos americanos, muy distantes de sus intenciones originales y contrario a sus aspiraciones tradicionales, han adquirido compromisos estratégicos lejos de su hogar, alterando por completo la distribución de poder en el mundo. De ahí que el objetivo del autor en este capítulo es dar a conocer la nueva posición internacional de la nación que se imprimió en la consciencia de un gran número de hombres, filósofos, políticos y publicistas, notablemente aquellos cuyos esfuerzos concentrados coincidieron con el curso de la historia, así que sea o no que la gente americana comprendiera su nueva posición en el mundo, los gobernantes y hombres de Estado de las otras grandes naciones de la tierra rápidamente sintieron la fuerza de un nuevo peso en las escalas del poder internacional; y su ajuste al alterado balance ejerció un impacto inmediato sobre las condiciones del ambiente internacional de América. Los puntos importantes consisten en lo siguiente: El autor nos afirma que fue Gran Bretaña la primera en reaccionar a la nueva balanza de poder. Enfrentada al declive de su histórica superioridad naval en los angostos mares europeos y del este Atlántico y habiendo encontrado sus propiedades foráneas amenazadas por recién llegados a la escena del agrandamiento colonial, no podía permitirse a un competidor, pero necesitaba gravemente un aliado, pero Francia poseía designios el Valle del Nilo, Alemania se convertía rápidamente en un gran rival naval y colonial. Rusia amenazaba la frontera india y las esferas de influencia inglesas en China. Sin embargo más allá del factor Gran Bretaña o el Lejano Oriente en la ecuación del poder, el ascenso de Alemania y los Estados Unidos en desarrollo industrial, la fuerza militar, y el espíritu nacionalista estaban destinados a generar una sospecha y EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. sobre todo rivalidad. No es extraño que la sospecha y la rivalidad se convirtieran en una señal de agresividad cuando América impulsó su dominio hasta las puertas de China. Se dice que la actitud oficial de Alemania hacia los Estados Unidos durante la guerra estaba gobernada por el deseo de prevenir cualquier golpe a los principios monárquicos, o a cualquier cambio adverso al balance del poder colonial. II.- Hay y el reacercamiento anglo-americano. Se afirma que ningún americano estaba tan profundamente dedicado al reacercamiento anglo-americano como el Secretario de Estado John Hay. Creía que “la característica más indispensable de nuestra política exterior debería ser un entendimiento amigable con Inglaterra”. Sin embargo, John Hay, sin desviarse de su curso trazado hacia la unidad anglo-americana, hizo lo mejor de las corrientes favorables de la fortuna nacional. Así pues, mientras fuere Secretario de Estado, Hay pudo lograr negociaciones indispensables a la arbitración de Alaska, lo cual le dio a Estados Unidos una línea costera ininterrumpida en Alaska. Se ganó el título claro de la Isla de Tutuila, en Samoa, con el excelente muelle de Pago Pago. A través del tratado Hay-Pauncefote, se ganó el derecho de construir y defender el canal interoceánico, así pues completando el primer requerimiento primerio de la post-guerra para América, mientras al mismo tiempo se aceleraba la retirada de la marina británica del Caribe, para la sustitución de incontestada supremacía americana. Se debe destacar que para el grupo de Realistas y devotos expansionistas, los logros de Hay parecían ser las señales explícitas de la Providencia EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. confirmando las lecciones de Mahan; pues, de acuerdo a Mahan, uno de los requerimientos primarios de una política exterior sabia era un cordial entendimiento con Gran Bretaña, basado en el reconocimiento mutuo de el hecho de que ambos pueblos eran dependientes del mar para el bienestar nacional y, por virtud de la separación geográfica entre sus rivales, exentos de la carga de las grandes armadas terrestres. Estas dos naciones, razonó, eran “tan parecidas en tradiciones heredadas, hábitos de pensamiento, y puntos de vista de derecha, que la injuria de uno no ha de ser anticipada de la predominancia del otro en un cuartel en el que sus intereses también predominan”. La visión del orden mundial de John Hay en realidad acompasaba aún más que una entente mundial anglo-americana. Le hubiera gustado incluir a Alemania ya a Rusia en un gran designio para estabilizar la existente distribución del poder, y llamaba a un alto a la carrera por el comercio y el armamento. Pero la oportunidad de lograr tal meta se escapó sostenidamente al tiempo que las relaciones anglo-alemanas disminuyeran en gran medida. III.- Teoristas realísticos de las relaciones exteriores americanas. Había algo acerca de los nuevos problemas y responsabilidades de América que estimulaban reflexivas imaginaciones a tomar profundos puntos de vista de su nueva posición en la política mundial y formular los principios subyacentes de las relaciones internacionales que determinaban los dramáticos cambios en la distribución del poder. Los puntos de vista de los tres teoristas de la política americana extranjera, Henry Adams, su hermano Brooks, y H.H. Powers, son de particular interés al ilustrar una respuesta realística al ascenso de América al poder mundial. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Se señala que Brooks Adams creía que la tendencia de los organismos políticos era hacia la combinación y la concentración. Los organismos económicos y más vigorosos estaban destruyendo a aquellos menos activos y más dispendiosos a un ritmo tan alto que “parecía ser que el momento llega en que dos grandes sistemas competidores serán enfrentados el uno al otro, y la lucha por la supervivencia comenzará”. Como lo veía Brooks, la lucha por la supervivencia tomaría lugar entre naciones de poderes terráqueos y naciones de poderes marítimos. Es importante mencionar que H.H. Powers, un profesor ocasional de economía, cuyo interés principal yacía en el tranquilo campo del arte, se mostraba tan preocupado como los Adams con la influencia de la fuerza en las relaciones internacionales. En la teoría de Powers, la fuerza se manifestaba a través de una lucha Darwiniana por la supremacía racial, trabajando su inexorable lógica a través de la competencia de siempre crecientes agregados de naciones, y produciendo, inevitablemente, la síntesis definitiva de la humanidad Principalmente entre estas condiciones se encontraba la desintegración del balance del poder en Europa. Esta situación, razonó, resultaría eventualmente en el ascenso de una sola potencia. Si los Estados Unidos se mantenían apartados y aislados, un poder Continental, probablemente bajo la dominancia rusa, emergería. Este poder dictaría términos al mundo; su civilización tendería a volverse universal. Solo una política de “precavida pero energética auto-afirmación” por parte de la raza anglosajona podría prevenir esta eventualidad. IV.- Roosevelt y el reto al aislacionismo. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. Sin duda una característica del enfoque de Roosevelt a la política exterior es que cuando la guerra entre Japón y Rusia estalló, inmediatamente emprendió el calcular su relación con la ventaja nacional. Al principio se había dispuesto a favor de cualquier plan que debilitara el agarre de Rusia sobre Manchuria, y así proteger la Puerta Abierta. Esta política reflejaba su gran consideración por la potencial influencia civilizadora de un Japón victorioso, pero también estaba inspirado por los miedos de la marina y expertos en asuntos orientales concernientes a las restricciones de Rusia sobre las empresas comerciales americanas en Manchuria, las cuales creían que eran parte de la meta general de dominar a todo el Norte de China. Sin embargo, Roosevelt comenzó a desconfiar de Japón casi tanto como Rusia cuando comenzó a darse un festín con los frutos de la victoria; y desde el punto de vista del interés a largo plazo de América en preservar el balance del poder en Asia, estaba igual de ansioso en restringir tanto al primero como al segundo. De hecho, prefería una larga, cansada guerra que dejaría a ambos poderes en la posición de antagonistas mutuos, con ningún poder capaz de o tan ansioso de ganar predominancia sobre el otro. Como lo dice el autor, los esfuerzos de Roosevelt a inducir a otras naciones a jugar al forjador de paz fueron un rotundo fracaso; aparentemente, él era ignorante de las complejas concurrencias de la intriga diplomática y el designio estratégico que imposibilitaba este acuerdo. Sin embargo, al final, el cansancio de tanto Japón como Rusia, aunado con el relativo desapego de los Estados Unidos, dispuso a los beligerantes a aceptar a Roosevelt mismo como un forjador de paz. Y así, aunque a regañadientes, se decidió a aceptar la invitación secreta de un Japón aparentemente victorioso a que actuara como mediador; y a EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E. buen tiempo el Jinete Áspero logró reunir a los delegados de las naciones contendientes en el la Base Naval de Portsmouth, New Hampshire, donde presentó a sus contemporáneos con el novedoso espectáculo de una crisis de política mundial con centro en el suelo americano, y que se revolvía alrededor del Presidente de los Estados Unidos. Nos menciona el autor que el motivo principal de Roosevelt al intervenir parece haber sido el deseo de prevenir una guerra europea, la cual creía que pondría en peligro el liderazgo mundial estadounidense, posiblemente arriesgando su paz y probablemente destruyendo sus planes por un balance de poder en el Lejano Oriente, donde el apoyo a una paz moderada por parte de Alemania e Inglaterra era esencial. Lo que está claro es que la firma de la Convención de Algeciras en Abril, 1906, señaló el punto más alto del involucramiento deliberado de Estados Unidos en las fatigas de la política internacional hasta que la guerra que Roosevelt se había empeñado en prevenir estalló con toda su furia ocho años después, y convirtió a Estados Unidos en un asociado armado del entente anglo-francés, el cual Roosevelt buscaba preservar. Cabe mencionar que el tema más significativo acerca de su intervención en las crisis europeas y del Lejano Oriente es que un Presidente americano tomo un serio interés en las manifestaciones de poder absoluto y auto-interés de las relaciones internacionales, y actuó vigorosamente sobre el principio de que la ventaja nacional estaba atada a regiones más allá del mar, donde, bajo ciertas circunstancias, los Estados Unidos pudieran tomar acción propia. EXPOSICION 2: “IDEALES Y AUTO-INTERÉS EN LAS RELACIONES EXTERIORES DE AMÉRICA”. AUTOR: OSGOOD, ROBERT E.