Las epífitas son muy numerosas. Y el proteretum adquiere gran

Anuncio
OBSERVACIONES GEOBOTÁNICAS EN COLOMBIA
79
Las epífitas son m u y numerosas. Y el proteretum a d q u i e r e gran
desarrollo, en algunas estaciones tan considerable, a m e r c e d de
la horizontalidad, altura y h u m e d a d , que c o n s t i t u y e una facies
turbosa de la misma asociación. E n ella se forman montículos
d e turbera (de Sphagnum),
en los cuales se encuentran
además
especies de las e n u m e r a d a s en una asociación con ésta relacionada (pág. 1 1 4 ) {Geranium,
Plagiocheilus,
etc.). E s t a facies del
s o t o b o s q u e turboso es el tránsito a la facies del m i s m o tipo del
Espeletietum.
R e a l m e n t e , las g r e x del caulirrosuletum y del acan-
torrosuletum c o r r e s p o n d e n también a un tipo de tránsito.
En esta asociación de b o s q u e o fruticosa se nota una cierta
coincidencia en porcentaje de simorfias c o n las societates d e
Weinmannia,
Hesperomeles
y derivadas, en t o d a s las cuales la
existencia de muchas epífitas es general, así c o m o de un proteretum desarrollado. P e r o la facies turbosa del individuo de asociación estudiado es el que mejor representa el b o s q u e de páram o , al que s u c e d e n las formaciones de Espeletia,
las de prado y
de turbera, con sus variantes, q u e por otra parte entran en mosaicos más o m e n o s c o m p l e j o s en las alturas andinas.
Cuadro 14*.
En L a s Mesetas (también Cordillera Central) las formaciones
arbóreas más elevadas son las mismas d e Hesperomeles,
o en co-
nexión c o n ellas consocietates de otras especies antes subordinadas, p e r o que en los límites altitudinales del b o s q u e ganan
terreno a su primitiva dominante. Estas e s p e c i e s son, principalmente: Vaccinium
floribundum,
ciliata,, Escallonia,
Senecio vaccinoides,
chyotum strigosum,
Hesperomeles ferruginea
sis,
y forman
matorrales
Gaultheria
Bolivarii,
Rapanea
Miconia ligustrina,
y Baccharis
Bratolimen-
espesos más o menos altos, hasta
3.800 metros de altitud (cuadro I4¿»). L o s últimos arbolillos que
observé (de unos d o s metros) eran ejemplares de Senecio
T r a b . del M u s . Nao. de Cieñe. Nat. de Madrid.—Ser. Bot., núm. 37.—1934.
vacci-
Descargar