Any 36, núm. 1, Diumenge Segon després de Nadal, 4 de gener de 2015 El Verb en el Pròleg de l’evangeli de sant Joan Novament avui el Pròleg de l’Evangeli de Joan, talment se’ns proposi acollir les paraules que tan altament ens introdueixen en la profunditat última del NADAL. “En el principi”, “tot”, “res”: paraules que ens posen en relació amb la immensitat i la totalitat de la vida. Perquè en Ell hi ha la Vida. El Verb, donador de vida, no ha vingut a portar una nova teoria religiosa o un millor sistema de pensament, sinó que ha comunicat vida: “He vingut perquè tingueu vida i vida en abundància” (Jo 10,10). Jesús planta la seva tenda enmig dels homes, és a dir, en el centre del cor de tot home o dona.: en la meva carn, en la teva, respira el Senyor de la vida, i des d’ara jo camino en el món portant en mi el cromosoma de Déu. Ell ha volgut unir-se amb la inconsistència de la pols de la terra de la qual Adam fou plasmat. Déu no es mereix, s’acull. EPIFANIA: L’evangeli de Mateu ens mostra el camí que porta a l’adoració, i la immensa joia en trobar Jesús. Ajudem els infants a descobrir que el gran regal és JESÜS. La Missa de la vigília de Reis: a les 20’15 Dilluns, 5 de gener, la missa de vigília de Reis serà excepcionalment a les 20’15h, per tal que els infants puguin participar-hi després de l’arribada dels Reis a Sarrià. I dimarts, 6 de gener les misses com un diumenge. És festa de precepte. Misses: a les 8’30, 10, 11’30, 13 i 20’15h. ADORACIÓ AL SANTÍSSIM SAGRAMENT. Perllongant l’adoració dels Reis, el dimecres 7 de gener retornem a l’ Adoració, a la Capella del Santíssim, des de les 8’30 del matí a les 20h del vespre, en torns d’una hora. MISSA D’ANIVERSARI PER LA ROSA DEULOFEU. Coincidint amb l’onzè aniversari del traspàs de la que fou Delegada Diocesana de Joventut, el proper dimecres dia 7 a les 19 h a la parròquia de sant Agustí tindrà lloc una missa en record seu. Mn. Manel, que la conegué tant profundament i que gaudí de la seva amistat hi participarà. El procés de beatificació va endavant en la fase diocesana, que s’obrirà oficialment dintre de poc, la qual cosa significa que les declaracions preliminars, entre les quals la de Mn. Manel, han arribat al seu terme final.. . ESTEL DE NATZARET. Avui 28 de desembre, i els dies 3, 4, 10 i 11 del gener de 2015 a les 17’30h. HORARI Missa: Feiners: 8:00, 10:00 i 20:15. Dissabtes i Vigílies de festa:: 19,15. Diumenges: 8.30, 10:00, 11:30, 13:00 i 20:15. Confessions: dies feiners de 8:45 a 10:00 i de 19:45 a 20:00, i un quart d’hora abans de les Celebracions dominicals. Despatx Parroquial: dilluns, dimecres i divendres, de 17:30 a 20:00 (exceptuant festes i vigílies de festa). Càritas Parroquial: (entrant per c/ Arquitecte Mas, 3). Dimecres, de 17:00 a 19:00. Tel: 93 203 03 39. Adreces: Rectoria i Despatx parroquial – c/ Rector Voltà, 5. 08034 – Barcelona. Tel: 93 203 09 07. Centre Parroquial – c/Pare Miquel de Sarrià, 8. Tel: 93 203 97 72. Web: www.parroquiasarria.net. Mail: [email protected] Francesc a les famílies: “Un fill és un miracle que canvia la vida! El papa Francesc es va reunir diumenge passat, 28 de desembre, amb milers de families europees, que van voler celebrar amb el Papa argentí la festa de la Sagrada Família, a l’aula Pau VI. En un clima acollidor i festiu, l’encontre va tenir lloc amb motiu del desè aniversari de l’Associació de Famílies Nombroses d’Itàlia. Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días! Antes que nada una pregunta y una curiosidad. Decidme: ¿a qué hora os habéis despertado hoy? ¿a las seis? ¿a las cinco? ¿y no tenéis sueño? ¡Pero yo con este discurso os hare dormir! Estoy contento de encontraros en ocasión de los diez años de la Asociación que reúne en Italia a las familias numerosas. ¡Se ve que vosotros amáis la familia y amáis la vida! Y es bello agradecer al Señor por esto en el día en el cual celebramos la Sagrada Familia. El Evangelio de hoy nos muestra a María y José que llevan al Niño Jesús al templo, allí encuentran a dos ancianos, Simeón y Ana, que profetizan sobre el Niño. Es la imagen de una familia “alargada”, un poco como son sus familias, donde las diversas generaciones se encuentran y se ayudan. Habéis venido con los frutos más bellos de vuestro amor. La maternidad y la paternidad son dones de Dios, pero recibir este don, maravillarse de su belleza y hacerlo resplandecer en la sociedad, esto es vuestra tarea. Cada uno de vuestros hijos es una creatura única que no se repetirá nunca más en la historia de la humanidad. Cuando se entiende esto, es decir que cada uno ha sido querido por Dios, ¡nos quedamos sorprendidos de cua grande es el milagro de un hijo! ¡Un hijo cambia la vida! Todos nosotros hemos visto – hombres, mujeres – que cuando llega un hijo la vida cambia, es otra cosa. Un hijo es un milagro que cambia una vida. Vosotros, niños y niñas, sois precisamente esto: cada uno de vosotros es un fruto único del amor, venís del amor y crecéis en el amor. ¡Son únicos, pero no solos! Y el hecho de tener hermanos y hermanas les hace bien: los hijos y las hijas de una familia numerosa son más capaces de la comunión fraterna desde la primera fase de la infancia. En un mundo marcado frecuentemente por el egoísmo, la familia numerosa es una escuela de solidaridad y de convivencia; y estas actitudes luego son un beneficio para toda la sociedad. Vosotros, niños y jóvenes, sois los frutos del árbol que es la familia: serán frutos buenos cuando el árbol tiene buenas raíces – que son sus abuelos – y un buen tronco – que son sus padres – Decía Jesús que todo árbol bueno da frutos buenos y que todo árbol malo da frutos malos (cfr. Mt 7,17). La gran familia humana es como un bosque, donde los árboles buenos traen solidaridad, comunión, confianza, ayuda, seguridad, sobriedad feliz, amistad. La presencia de las familias numerosas es una esperanza para la sociedad. Y por esto es muy importante la presencia de los abuelos: una presencia preciosa sea por la ayuda práctica, sea sobre todo por el aporte educativo. Los abuelos cuidan en sí los valores de un pueblo, de una familia, y ayudan a los padres a transmitirlos a los hijos. En el siglo pasado, en muchos países de Europa, han sido los abuelos los que han transmitido la fe: ellos llevaban a escondidas al niño a recibir el bautismo y transmitían la fe. Queridos padres, os estoy agradecido por el ejemplo de amor a la vida, que vosotros cuidáis desde el concebimiento hasta el fin natural, a pesar de todas las dificultades y lo pesado de la vida, y que lamentablemente las instituciones públicas no siempre os ayudan a llevar adelante. Justamente vosotros recordáis que la Constitución Italiana, en el artículo 31, exige una atención especial a las familias numerosas; pero esto no encuentra un adecuado reflejo en los hechos. Se queda en las palabras. Deseo pues, pensando también a la baja natalidad que de hace tiempo se registra en Italia, una mayor atención de la política y de los administradores públicos, a todo nivel, con el fin de dar la ayuda prevista para estas familias. Cada familia es célula de la sociedad, pero la familia numerosa es una célula más rica, más vital, y el ¡Estado tiene todo el interés de invertir en ella! Sean bienvenidas las familias reunidas en Asociaciones – como esta italiana y como aquellas de otros países europeos, aquí representados – y sea bienvenida la red de asociaciones familiares capaces de estar presentes y visibles en la sociedad y en la política. San Juan Pablo II, en este sentido, escribía: «las familias deben crecer en la conciencia de ser protagonistas de la llamada política familiar y deben asumir la responsabilidad de transformar la sociedad: diversamente las familias serán las víctimas de aquellos males que se han limitado a observar con indiferencia» (Exh. Ap. Familiaris consortio, 44). El compromiso que las asociaciones familiares desarrollan en los diversos “foros”, nacionales y locales, es propio aquel de promover en la sociedad y en las leyes del estado los valores y las necesidades de la familia. Bienvenidos también los Movimientos eclesiales, en los cuales vosotros miembros de las familias numerosas estáis particularmente presentes y activos. Siempre agradezco al Señor al ver a papás y mamás de las familias numerosas, juntos a sus hijos, comprometidos en la vida de la Iglesia y de la sociedad. Por mi parte os acompaño con mis oraciones, y os encomiendo bajo la protección de la Sagrada Familia de Jesús, José y María. ¡Queridos amigos, queridos padres, queridos jóvenes, queridos niños, queridos abuelos, buena fiesta a todos vosotros! Cada una de vuestras familias sea siempre rica de ternura y de la consolación de Dios. Con afecto os bendigo. Y vosotros, por favor, continuad rezando por mí, que yo soy un poco el abuelo de todos. ¡Rezad por mí! Gracias.