288 BOLETÍN DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA son pobres masas en Salas, mezcladas con mica blanca, y en ellas alg-unos cristales pardo obscuros. En las cercanías de Mérida (Badajoz) hay pequeñas masas y cristalinos en terreno granítico, y otras indicaciones vagas se han hecho respecto á casiteritas de Extremadura, que no son suficientes para juzgar si se trata de una prolongación de la zona estannífera principal ó si solo de manifestaciones aisladas. En la sierra de Guadarrama también se .conocen, aunque pequeños, algunos yacimientos de estaño. Prado dio como seguro el de Hoyo de Manzanares en la provincia de Madrid, con algunos cristalitos, en el granito, y como dudoso uno de el Escorial. Vagamente cita la casiterita de la provincia de Valladolid el profesor é ingeniero Naranjo, dato que merecería comprobarse. .. .En las zonas oriental y meridional son muy escasos hasta ahora los hallazgos de mineral de estaño. Debemos á Massart noticias de los yacimientos en el distrito de Cartagena y de ellos uno explotado en la mina San Isidoro, formando una masa que medía 2 m. de potencia en el afloramiento pero que se reducía á algunos centímetros á los 60 m. de profundidad. El mineral consistía en una casiterita concrecionada con ganga de baritina y cuarzo; en otro yacimiento más insignificante estaba asociada á galena. Se ha citado sin detalles el mineral que nos ocupa de la provincia de Jaén, de la cual hay un ejemplar con cuarzo desprovisto de procedencia precisa en la Universidad de Sevilla, y sólo consiste en porciones pequeñas sin ninguna circunstancia especial. Por último, con duda le han mencionado algunos mineros como de la provincia de Murcia, y en la colección del reputado ingeniero D. Pablo Ochayta Martínez, figuraba un ejemplar teniendo por localidad Sierra de Bacares, que debe referirse á dicha provincia; pero, al menos por lo que se refiere á otras citas de la misma, M. Petig-aud dice con razón que proceden de haberse tomado por casiterita rocas anfibólicas impregnadas de hierro oxidado, con granate ú otras sxibstancias, aparte de que la confusión puede' haberse hecho en ocasiones intencionalmente con propósitos fraudulentos. Producción.—Como hemos dicho, es indudable que los anti-