30 LATERCERA Lunes 16 de noviembre de 2015 Nacional RR Consejeros Regionales de La Araucanía sesionan en la calle en contra del centralismo y la falta de atribuciones. FOTO: MARCELO CARRASCO Las expectativas no cumplidas que dejó la primera elección de consejeros regionales R A dos años de haber sido votados por la gente, y en el inicio de un proceso descentralizador, piden más autonomía para su gestión. Ximena Bertin “Se nos han generado muchas expectativas, pero finalmente quedamos en puras palabras y los avances son muy mínimos”, señala taxativo Manuel Millones, consejero regional por Valparaíso, al cumplirse, mañana, dos años desde la primera elección directa y popular de los consejeros regionales, junto con los sufragios para Presidente y parlamentarios, en 2013. Si bien fueron creados en 1993, hasta esa fecha eran elegidos por los concejales. “Fuimos elegidos para representar los intereses ciudadanos, pero en definitiva no tenemos capacidad de decisión en la inversión regional. Sólo votamos a favor, en contra, o con alguna modificación, los proyectos de iniciativa del intendente”, acusa el consejero porteño. A su juicio, desde la creación de la figura, hace 22 años, la falta de mayores atribuciones radica en que “han primado criterios políticos, sin convicción, y que reflejan la arraigada cultura centralista de los partidos, que no quieren R Acusan deficiencias “de forma y fondo” que limitarían su rol, como representantes de los intereses ciudadanos a nivel regional. soltar el poder”. Millones también habla con conocimiento de causa, como integrante de la ex Comisión Asesora Presidencial para la Descentralización, que recogió en diálogos ciudadanos, durante siete meses y en cada región, lo que la sociedad esperaba en materia de representación local. Allí, en esa recopilación, el consenso parecía estar en entregar mayores atribuciones a los consejeros, quienes, en algunos casos, lograron más votos que los parlamentarios. Los consejeros electos vo- tan los proyectos que en un 80% postulan los municipios para ser financiados por el gobierno regional. “Podrían ser actores aún más importantes en el desarrollo local si la ley se los permitiera”, apunta Mario Olavarría, presidente de la Asociación de Municipalidades de Chile (Amuch). “Desde que fueron electos no se percibe un cambio en la relación con los municipios, pero sí reconocemos que hoy tienen una mayor vinculación con las organizaciones sociales y un trabajo horizontal que beneficia la representación de los ciudadanos”, destaca el mismo Olavarría. Y si bien una ley corta, aprobada el año pasado, mejoró la dieta mensual de los consejeros, de $ 670 mil a $1.340.000, aún no cuentan con el apoyo técnico que contrapese el aparataje de los intendentes para fiscalizar que los recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional se estén gestionando de forma adecuada. “Si hacemos un paralelo entre un core y un parlamentario, tenemos a cargo un territorio mucho más amplio que ellos, y contamos con recursos que equivalen a lo que percibe sólo uno de sus asesores”, plantea el presidente de la Asociación Nacional de Consejeros Regionales (Ancore), Marcelo Carrasco. Para el dirigente, se trata de contar con apoyo técnico para ejercer su labor, y emparejar el terreno ante otros cargos de elección. “Tenemos que renunciar un año antes si queremos participar en alguna elección parlamentaria. En cambio, los congresistas pueden seguir en su cargo. Y somos los únicos a los cuales nos descuentan por inasistencia, no teniendo dedicación exclusiva. Y a pesar de ello, somos una amenaza electoral”. Los core explican que aún falta que el Ejecutivo defina cómo se financiarán estos gobiernos regionales, más autónomos, y donde los consejeros debieran tener un rol más preponderante. “El gobierno aún no ha enviado la ley de rentas, y esta ley, así como el traspaso de Corfo, Serviu e Indap, es clave para que el core sea el espacio de las políticas regionales con valor agregado”, plantea Esteban Valenzuela, ex presidente de la Comisión de Descentralización. “Lo positivo es que como son electos tienen legitimidad, aunque su poder sea bajo”, advierte Valenzuela. Inversión regional Los disímiles niveles de ejecución presupuestaria (ver infografía) son un indicador de cómo se gestionan los fondos a nivel de cada gobierno regional. En el extremo sur, en Magallanes, sólo se ha ejecutado un 54,9% de los recursos, superando a Atacama, afectada por los aluviones. “Eso pasa acá por el clima, la construcción se paraliza en invierno y se reactiva a fin de año, pero nos miden con la misma vara y eso no es adecuado. Si no cumplimos, se nos castiga. Lo que realmente necesitamos es flexibilidad en la gestión de nuestro recursos”, explica Ramón Lobos, presidente del Consejo Regional de Magallanes. Al otro extremo está Biobío, que lidera el cumplimiento, donde se destaca “la fluida relación que tenemos con el intendente, para planear la inversión regional. Eso lo rescato porque en otras regiones no se da”, dice Eduardo Muñoz, presidente Consejo Regional Biobío.b