COMPENDIUM Atención telefónica Las llamadas en espera Julio Allué Veterinario En el anterior artículo vimos las bases para ofrecer una adecuada atención telefónica. Ahora veremos cómo hacerlo en una situación concreta como son las llamadas en espera. Visítanos en www.petfanmx.com CompendiumVet.com/ Mayo 2009/ Compendium: Eduación Continua para Veterinarios® www.shutterstock.com Educación Continua para Veterinarios COMPENDIUM Educación Continua para Veterinarios Cuando nos vemos en la necesidad de poner a una persona en espera suele deberse a que estamos desbordados por otras tareas que desempeñemos al mismo tiempo (contestación a otras llamadas, atención a pacientes o propietarios, etc.). Para que los nervios no inhiban nuestra capacidad de actuación y alteren nuestro saber estar, podemos seguir los pasos siguientes, que además ayudarán a evitar a los clientes las sensaciones negativas asociadas a la espera. 1 Preguntar al interlocutor si podemos ponerle en espera La espera supone un inconveniente para quien llama (imaginemos el coste que puede significar una espera larga para alguien que llama desde un teléfono móvil), por lo que debemos siempre pedirle permiso antes de retener su llamada. Habrá ocasiones en las que el cliente no desee o no pueda esperar, así que no asumamos que estará dispuesto a hacerlo. 2 Aguardar su respuesta Cuando no esperamos a su contestación, es posible que lo que el cliente escuche por su auricular sea algo parecido a “Centro Veterinario Animales, un momento por favor, clic, así que no debemos sorprendernos si al recuperar la llamada, molesto, ha colgado. En caso de que esté de acuerdo en esperar, démosle las gracias antes de ponerle en espera. Si no lo está, preguntémosle si podemos devolverle la llamada en cuanto sea posible, si desea dejar algún mensaje o si podemos pasarle con otra persona que pueda atenderle. 3 Comunicar el motivo de la espera Muchos clientes soportan mejor la espera si se les indica cortésmente el motivo de la misma, encontrándola más llevadera si se pueden formar una imagen mental de lo que está sucediendo mientras tanto en el centro veterinario. El tiempo que se tarda en responder o las palabras que se emplean cuando se contesta pueden crear una impresión permanente sobre nuestro interlocutor Visítanos en www.petfanmx.com CompendiumVet.com/ Mayo 2009/ Compendium: Eduación Continua para Veterinarios® COMPENDIUM Educación Continua para Veterinarios Ofrezcamos toda la información que sea pertinente, tal como se refleja en estos ejemplos: • “La respuesta a su pregunta me llevará un momento, ya que he de consultarla con el veterinario”. • “Necesitaré unos segundos para recuperar su ficha de la base de datos”. • “Precisaré unos momentos para telefonear al laboratori”. • “Si me lo permite, en unos segundos finalizo la llamada que tengo por la otra línea y le podré atender correctamente”. 4 Indicar la duración aproximada de la espera Ayudaremos a disminuir la incomodidad del cliente. Si estimamos que el retraso pueda ser mayor de lo que cabría considerar razonable, no debemos tener ningún reparo en preguntarle si prefiere que le llamemos tan pronto como nos sea posible, solicitándole un número de teléfono donde localizarle. Otra alternativa es sugerir a nuestro interlocutor llamarle a una hora determinada, cuando pueda estar disponible. Algunas fórmulas válidas según la duración de la espera son las siguientes: • Espera corta (menos de 1 minuto): “Me llevará unos momentos.” • Espera larga (entre 1 y 3 minutos): “Se lo puedo decir en dos o tres minutos, ¿desea esperar o prefiere que le llame en cuanto tenga la información?” • Espera muy larga (más de 3 minutos): en este caso lo mejor es pedir al interlocutor su número de teléfono e indicarle que le llamaremos en cuanto tengamos la información. Cuando un cliente permanezca en espera durante un periodo de tiempo largo es aconsejable recuperar su llamada cada medio minuto, aproximadamente, e informarle de la situación, para que no sienta que nos hemos olvidado de él. 5 Agradecer a los clientes su espera Cuando volvamos a retomar su llamada. Es una muestra de cortesía imprescindible tras la espera. Visítanos en www.petfanmx.com CompendiumVet.com/ Mayo 2009/ Compendium: Eduación Continua para Veterinarios® COMPENDIUM Educación Continua para Veterinarios Cosas que no se deben hacer NUNCA al teléfono Podemos elaborar una lista con los siguientes puntos y colocarla cerca del teléfono: Mantener dos conversaciones a la vez Las conversaciones con dos líneas son difíciles de seguir para uno mismo, y además confunden al interlocutor telefónico y a la otra persona implicada, ya que ninguno sabe realmente a quién nos estamos dirigiendo. Cubrir el micrófono Debido a la sensibilidad de los teléfonos actuales, los comentarios que hagamos serán perfectamente audibles para quien esté al otro lado por mucho que nos esmeremos en tapar el micrófono (se puede hacer la prueba). En su lugar, utilicemos el botón de puesta en espera. Discutir No favorece en absoluto las relaciones entre el cliente y el centro veterinario, y además la discusión puede ser escuchada por otras personas presentes en la sala de espera, que sólo oirán nuestras frases. Comer Contestar con la boca llena es un signo de muy mala educación. Además, con la amplificación de sonido que presentan los teléfonos actuales, el ruido de masticación llegará hasta el interlocutor claramente. Mostrar excesiva familiaridad Especialmente para las personas que puedan estar en la sala de espera, puede resultar embarazoso e incómodo escuchar cómo conversamos con familiaridad o incluso amistad con alguien por teléfono. Alargar las llamadas Una conversación de larga duración puede bloquear posibles llamadas entrantes, quizá alguna de ellas de urgencia. Si es necesario interrumpir a un cliente conversador, podemos improvisar excusas como: “disculpe, pero nos acaba de llegar un animal con una emergencia...”.