En los últimos años, el Perú ha experimentado un considerable avance en la inclusión de nuevos segmentos de la población en el sistema financiero. En el año 2013, se promulgó la Ley que promueve el dinero electrónico para la inclusión financiera en el país, causando que diversos reguladores trabajen en medidas complementarias para la implementación de esta ley. Debido a esto y a otros avances en materia regulatoria, es que el Perú ha sido nombrado – por segunda vez consecutiva – por The Economist Intelligence Unit, con su informe anual “Microscopio Global 2015: Análisis del entorno para la inclusión financiera” como el país con el ambiente más favorable en el mundo para desarrollar una inclusión financiera; evaluando las reformas dadas y el progreso de la misma a través de los años. Sin embargo, aún solo 30% de la población peruana tiene una cuenta de ahorros en una institución financiera, porcentaje inferior al promedio regional de 51%. Además, al 2014, únicamente el 11% de los peruanos indicó tener un crédito de una institución formal, y a pesar de la expansión de la distribución de agentes bancarios, hay todavía un porcentaje importante de distritos en el país sin presencia de puntos de atención, concentrados mayormente en áreas rurales y de mayor pobreza. Al 2014, la cifra de distritos con al menos un punto de atención llegaba solo a ser 954. Con todo esto, no cabe nada más que decir, que hay un largo camino por recorrer, con aproximadamente 10 millones de peruanos por incluir en el sistema financiero. En el 2015, el Gobierno Peruano desarrolla una Estrategia Nacional de Educación Financiera – ENIF, estableciendo un plan de acción para lograr que el acceso, uso y calidad de los servicios financieros mejore en los próximos años. Entre sus metas se establece que, al 2021, el 100% de la población viva en distritos con presencia del sistema financiero; el 75% de adultos con al menos una cuenta en alguna entidad financiera; y una multiplicación por 5 de los pagos electrónicos por habitante. En el marco del esfuerzo nacional por avanzar sostenidamente hacia altos niveles de inclusión financiera se decidió explorar también nuevos canales y oportunidades para ofrecer y acceder a servicios financieros. Entre ellos destaca el uso de la extendida red de telefonía móvil del país donde ya hoy se cuenta con más líneas móviles que personas. La propuesta: Modelo Perú y Bim Bim es una billetera electrónica, manejada desde el celular, que permite a sus usuarios hacer depósitos, realizar transferencias de dinero, retirar sus fondos e incluso recargar el saldo del celular, todo esto durante esta primera etapa del proyecto. Con Bim, todos los Peruanos que poseen un celular (+ del 90% de la población) -cualquier tipo de celular, no necesariamente un smartphone- será capaz de realizar transacciones de dinero sin la necesidad de acercarse a un banco o a una institución financiera, ni abrir una cuenta en una de estas. Bim responde a la primera etapa del llamado Modelo Perú, un esfuerzo de largo alcance orientado a lograr procesos de inclusión financiera a partir del desarrollo del canal digital a través de teléfonos móviles (en particular de gama baja). La iniciativa de Modelo Perú tiene como objetivo lograr procesos sostenidos y sostenibles de inclusión financiera a partir del uso de dinero electrónico a través de los teléfonos móviles. Para ello ha propuesto tres etapas en su desarrollo. La primera, es el desarrollo de un canal digital que opere desde cualquier teléfono móvil (en equipos básicos, pre pago e incluso sin saldo). Se trata de tomar ventaja de la simplicidad que el canal electrónico de pagos ofrece para que sea consecuentemente, de fácil uso (adopción) para los usuarios finales. Para lograr este primer paso, es decir lograr poner dinero y transar con él desde y hacia teléfonos móviles, se trabaja de manera conjunta con los principales y la mayoría de instituciones de dos industrias clave para el desarrollo de Bim en Perú: la industria financiera y la de telecomunicaciones, logrando que una de las más importantes características de Bim sea la interoperabilidad, tanto entre los 34 emisores financieros enlazados a Modelo Perú, como entre compañías de telecomunicaciones – tres de las cuatro compañías en el país -, las cuales se encargan del manejo de información entre celulares. Esto, hace que Modelo Perú sea un caso particular, donde la de interoperabilidad se vuele un espacio de cooperación entre competidores con un fin común: la inclusión financiera. Para lograr que Bim salga al mercado, los reguladores (Superintendencia de Banca, Seguros y AFP, Banco Central de Reserva del Perú, y el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones, OSIPTEL) han jugado un papel central, adaptando y creando regulaciones sobre la base de la Ley de Dinero Electrónico para facilitar el proceso. La segunda etapa para Modelo Perú, una vez que tengamos el canal operando, es desarrollar un ecosistema de pagos digitales, donde Bim pueda ser utilizado como parte de la vida cotidiana de las personas, ya sea en instituciones que remuneren a sus trabajadores mediante Bim, o en las compras y pagos que requieran los usuarios en pequeñas ciudades alejadas del sistema financiero o en áreas remotas del Perú. Se trata de desarrollar la idea de que el dinero electrónico es más eficiente en costos y tiempo, y sobre todo, más seguro, que el efectivo. El desarrollo de un ecosistema de pagos digitales permitirá ganar eficiencia en la economía de los usuarios y en la economía peruana. Favorecerá procesos de formalización y sobre todo generará información. Esta información derivada del perfil transaccional de los usuarios de Bim permitirá a las entidades financieras crear nuevos productos y servicios financieros para estos nuevos clientes, y es ahí donde lograremos la tercera etapa del Modelo Perú, lograr la inclusión financiera. Algunas características de Bim El proceso de desarrollo de Bim se enfocó en hacer de este modelo lo más simple posible, a través de una plataforma USSD. Así, los usuarios de la billetera electrónica solo deben tener su DNI a la mano al momento de abrir su cuenta, crear una contraseña segura, y elegir la institución financiera o “emisor” que cuidará su dinero. Es así como Bim reduce costos de tiempo y dinero, con relativamente tarifas bajas en las transacciones (desde S/ 0.50 hasta S/ 2.00 para transferir dinero y S/ 1.50 para el retiro de dinero de la billetera móvil), comparadas con aquellas aplicadas por las instituciones bancarias. Sin embargo, debido a las regulaciones del sistema Bancario, y para prevenir consecuencias negativas colaterales, el límite de cada transacción es de 2,000 soles Peruanos, y el límite de dinero que el usuario puede tener en su billetera puede ser hasta de 4,000 soles Peruanos, ambas cantidades precisamente adaptadas al público objetivo de Bim. En las dos primeras semanas desde su lanzamiento, cerca de 35 mil peruanos han abierto su Bim, número que supera las expectativas de mercado para esta plataforma. Hoy, Modelo Perú trabaja con 9 emisores de dinero electrónico: Banco Financiero, Interbank, Caja Sullana, Credinka, Crediscotia, Banco de Crédito del Perú (BCP), GMoney, Banco GNB y BBVA Banco Continental, quienes respaldan la iniciativa poniendo de lado las diferencias y competencia entre sí, para lograr algo común para el bienestar del país. En los próximos meses se unirán a este grupo 21 emisores adicionales de dinero electrónico. Adicionalmente, Bim cuenta hoy con una red nacional de cerca de 6.000 agentes en total que permiten a los usuarios de Bim, depositar y retirar dinero de sus cuentas. Red que antes de mitad del año llegará a más de 13 mil puntos de atención. La meta es llegar a los 5 millones de clientes en 5 años. La segunda etapa de esta iniciativa desarrollará una aceptación más diversificada, entre los “Bimers”, quienes desde julio de este año podrán pagar sus compras, transporte y servicios asociados a Bim desde su billetera móvil. Así también, los pequeños, medianos y grandes negocios que integren Bim en sus métodos de pago, encontrarán eficiencia operativa, disipando los costos del manejo de efectivo, relacionados principalmente al dinero falso y la falta de efectivo para entregar vueltos de dinero. Es así, como a través de Bim, se contribuirá a la mejora en diferentes aspectos de vida de los clientes como: (i) la reducción del riesgo relacionado al manejo de efectivo; (ii) el costo de oportunidad que se asume hoy en día al hacer trámites en realizar transferencias de dinero y (iii) generando un registro de flujos de dinero, basado en transacciones electrónicas, que finalmente mejorará el acceso de los clientes de Bim a crédito formal. El camino recorrido… El camino para lograr el desarrollo de una plataforma interoperable y un producto como Bim ha sido largo. En los tres últimos años se ha logrado, a partir de un grupo de trabajo en la Asociación de Bancos del Perú – ASBANC, el desarrollo primero de un proyecto colectivo de la banca privada, para luego convertirlo en un proyecto de la industria financiera, incorporando a la iniciativa al principal banco público (Banco de la Nación) y a las entidades microfinancieras reguladas. Al largo del 2014 se tomaron acuerdos clave para definir lo que sería Modelo Perú: interoperabilidad en tres niveles (entre billeteras de todos los participantes, entre operadores de telefonía y entre puntos de atención al público, los agentes), marca común, para facilitar el proceso de adopción y educación financiera y el objetivo final de lograr procesos masivos de inclusión financiera. Acuerdos ratificados por todos los socios, más de 30 entidades financieras de distinto tipo. Por el lado de la operatividad de la plataforma, se convocó a más de 20 compañías globales de tecnología para el desarrollo de la misma, con el resultado de una firma de contrato con Ericsson, la compañía elegida, en este mismo año. El papel de Ericsson en el proyecto es de administrar las billeteras de los 9 emisores que se sumaron a esta iniciativa en primera instancia. En 2015 para implementar Modelo Perú y lanzar Bim se crea una empresa, Pagos Digitales Peruanos, que brindará el servicio de operación de la cuentas de dinero electrónico de los emisores que trabajen con Bim. Otros actores han tenido un papel fundamental en el desarrollo de Bim, siendo una de ellas, Glenbrook. La reconocida consultora fue un actor clave para determinar un modelo de gobernanza ideal para el óptimo desarrollo de las iniciativas de pagos digitales. Asimismo, Better Than Cash Alliance, con su contribución permanente de asesorías en temas de tecnología, estrategia de producto y red de aceptación, permite que el proyecto se mantenga en contacto con diferentes foros globales relacionados a las finanzas digitales y pagos electrónicos. Finalmente, el Fondo Multilateral de Inversiones – FOMIN, confirmó su colaboración con Modelo Perú en julio de 2015, para dar soporte a actividades de educación financiera y desarrollo de ecosistemas de pago. Estas estarían enfocadas a mujeres de bajos recursos, jóvenes, comercios y agentes corresponsales. Es con todo esto, que al lograr la tan deseada inclusión financiera, más personas podrán tener un mejor manejo de su capital, un financiamiento formal para sus negocios, y entre otras cosas necesarias para mejorar su calidad de vida, tanto en lo profesional, como en lo personal, acercándonos cada vez más a reducir la desigualdad y la pobreza en el Perú. En resumen: Es una iniciativa de la industria financiera peruana a favor de la inclusión financiera. Es una iniciativa de colaboración entre entidades financieras: colaborar para competir, mediante una marca común: Bim. Genera un nuevo canal transaccional, basado en el uso de teléfonos móviles (opera en el más simple, prepago, incluso sin saldo). Trabaja con 3 de las 4 operadoras de telefonía móvil (y la cuarta viene pronto) Se orienta preferentemente a atender sectores excluidos del sistema financiero. Se trata de competir con el uso del efectivo, se trata de ofrecerles una nueva herramienta. Bim tu socio en el celular. Apuesta por el desarrollo de todo el ecosistema de pagos digitales incorporando nuevos actores, educando financieramente e informando continuamente, generando capacidades financieras, integrando el sistema tradicional con este nuevo canal. Todos están invitados a sumarse. Opera en base a una solución de nivel mundial: EWP de ERICSSON. Si desea más información, visite: www.mibim.pe y www.pagosdigitalesperuanos.pe (*) Carolina Trivelli es economista, investigadora en el Instituto de Estudios Peruanos y Gerente General de Pagos Digitales Peruanos S.A. Fue Ministra de Desarrollo e Inclusión Social en Perú, entre 2011 y 2013. María José Pinto es asistente de proyectos en el Centro de Estudios Financieros de ASBANC ¿Quiere aprender más sobre inclusión financiera en Perú? Visite nuestro mapa interactivo y explore Perú.