EL PRIMER GAUDÍ Sus inicios en el Barrio Gótico Mireia Yañez, Amanda Dacosta, Florencia Vigilante, Anna Sanz, Javier Martínez, Hilda Pérez, Ivana Tijanic EL PRIMER GAUDÍ SUS INICIOS EN EL BARRIO GÓTICO Antoni Gaudí, gran arquitecto, símbolo de la Barcelona modernista. Sus obras, un emblema de la ciudad. La Sagrada Familia, el Parc Güell, la Pedrera, Casa Batlló: todas ellas en el Eixample. Ninguna asociación —a excepción de las farolas de la Plaza Real— del arquitecto con el Barrio Gótico, que es, de hecho, donde da sus primeros pasos como artista. «La originalidad consiste en retornar al origen» dijo Gaudí. En esta idea se basa la guía que presentamos: en devolver al Barrio Gótico de Barcelona los inicios, el origen del arquitecto. Fue allí donde comenzó a entablar relaciones con instituciones y artistas para generar contactos, promocionarse y obtener sus primeras oportunidades profesionales. En ellas ya se plasma la esencia de su genial arquitectura modernista y donde vivió la transformación de su ideología religiosa. Así, esta guía está pensada para aquellos que ya conocen el trabajo más emblemático de Gaudí y/o para quienes quieran ahondar en sus inicios y descubrir algunos rasgos más personales del arquitecto. Foto de: www.gaudi-home.cat Un repaso por su vida En este proceso fue fundamental su contacto con Eusebi Güell, quien terminó siendo uno de sus mejores amigos y su principal mecenas. Gaudí nunca contrajo matrimonio y su religiosidad fue incrementándose con el paso del tiempo. En 1883 recibió el encargo de continuar las obras de la Sagrada Familia, proyecto al que se dedicó hasta su muerte, acaecida en Barcelona el 1926. Su legado está marcado por cuatro grandes pasiones: la arquitectura, la naturaleza, la religión y el amor a Cataluña; pasiones que cultivó y fortaleció en el Barrio Gótico. Si bien el lugar de origen de Antoni Gaudí sigue siendo incierto, se estima que nació en Reus o Riudoms en el año 1852. De niño, debido a enfermedades que lo aquejaban, pasó largas temporadas en el campo, donde captó las imágenes y las formas de la naturaleza que luego aplicaría en sus obras, de fuerte sello personal. A los 16 años se trasladó a Barcelona para estudiar arquitectura. Allí se incorporó al movimiento de la Reinaxença (Renacimiento) y llegó a convertirse en el máximo representante del modernismo catalán. 1 Contexto histórico, social y económico de la época en la Barcelona de 1888 fueron también decisivos en ese renacer de la ciudad. Una ciudad que buscaba nuevos proyectos de crecimiento y reinterpretación de estilos en arquitectura. Fue una época de reconstrucción en la que Gaudí dejó su huella y el Barrio Gótico se constituyó tal y como lo conocemos hoy en día. A finales del siglo xix, después de la degradada situación del patrimonio a causa de la desamortización en España —proceso de expropiación de bienes y tierras de la Iglesia por parte del gobierno para su posterior venta— surgió en Cataluña un deseo de recuperación lingüística, cultural, política y de patrimonio que recibió el nombre de Renaixença. Esta corriente nacionalista no fue la única transformación de la época. El auge de la burguesía industrial catalana que participó como mecenas en el florecimiento del modernismo y la oportunidad de proyección internacional debido a la Exposición Universal La creación del Barrio Gótico El Barrio Gótico, o Barrio Neo-Gótico, era conocido como el Barrio de la Catedral. Sin embargo, a finales del siglo xix comienza la puesta en valor o recuperación del pasado monumental que se inició con la Renaixença y con el 2 MAPA DEL RECORRIDO 3 auge de los nuevos sistemas de producción industrial. La primera transformación de la ciudad sucedió en extramuros —proyectada por Ildefons Cerdà y donde más patente está la huella de Gaudí— y en las décadas centrales del siglo xx fue el turno del Barrio Gótico. En ese momento no existía la división de barrios actual, sino que La Ribera, el Gótico y el Raval formaban una sola ciudad (Barcelona) y el Eixample estaba por crear. La ascensión política de la burguesía catalana y la proyección internacional que generó la Exposición Universal llevaron a un ideario: crear una imagen de marca Barcelona que atrajera flujos de capital, turistas y nuevas inversiones. Y esa imagen pasaba por transformar la monumentalidad histórica. Promocionar la ciudad no era posible con un centro histórico degradado y sin atractivo como era entonces. Nace, pues, la creación del barrio y la «marca-ciudad» con la reconstrucción, el traslado y la amortización de construcciones neomedievales. Se produce así la monumentalización del centro histórico fruto del marketing de la burguesía del poder. RECORRIDO Carrer del Call: primer estudio de Gaudí Foto de Florencia Vigilante Su primer estudio en la ciudad En el año 1878, Antoni Gaudí recibió el título de Arquitecto de la Escuela Provincial de Arquitectura de Barcelona de la “Llotja”, lugar en el que se han formado ilustres alumnos como Picasso o Josep Llimona. Este hecho marcó la radicación definitiva del artista en la ciudad. Al licenciarse estableció su primer estudio en la calle del Call, número 11, 3º piso (en el mismo edificio donde se ubicaba la sociedad de ingeniería Padrós & Borràs), según afirma Josep María Tarragona Clarasó, biógrafo de Gaudí. Allí diseñó su tarjeta profesional, de caligrafía modernista y comenzó a proyectar algunas de sus geniales obras. PRIMER ESTUDIO EN LA CIUDAD (Actualmente viviendas) C/ del Call, 11, 3º piso. Jaume I L4 4 Cómo una vitrina te puede cambiar la vida: Guantería Comella Esteban Comella, propietario de una lujosa guantería ubicada en la calle Avinyó número 5 de Barcelona, encargó a Gaudí una vitrina para exhibir sus productos en la Exposición Universal de París de 1878. El artista diseñó una original estructura que revelaba ya algunos de sus rasgos como arquitecto: los materiales naturales de madera, hierro y vidrio, coronada con metales en formas vegetales, en cuyo interior se distribuían los guantes en estanterías. La vitrina despertó gran expectación entre los visitantes y el establecimiento Comella recibió una medalla de plata en la exposición. Uno de los admiradores de esta estructura fue el industrial catalán Eusebi Güell i Bacigalupi, quien insistió en conocer a su creador al volver a Barcelona. El joven Gaudí y el empresario fueron presentados por Comella en el taller de carpintería de Eudald Puntí, lugar frecuentado por el arquitecto. Entre ambos se consolidó rápidamente una amistad e iniciaron una relación profesional muy fructífera en la que Güell fue su mejor mecenas. Amor por la naturaleza En 1879, Gaudí ingresó en la Asociación Catalanista de Excursiones Científicas y se convirtió en unos de sus miembros más activos. La institución, fundada en 1876, se proponía conocer, proteger y recuperar el patrimonio medieval catalán, que se encontraba en una situación crítica luego del proceso de desamortización española de la primera mitad del siglo XIX. La vitrina que le ayudó a saltar a la fama Fuente: www.elcaprichodegaudi.com GUANTERÍA EUSEBI COMELLA (Actual zapatería Toni Pons) C/ Avinyó, 5 Jaume I L4 5 La sede de la entidad era un piso de alquiler ubicado en calle Paradís número 10 (donde continúa el Centro Excursionista de Cataluña, aunque hoy se encuentra en proceso de mudanza). Allí se organizó un pequeño museo arqueológico con aportaciones de los socios, en el que se encontraban los capiteles del Templo de Hércules. Poco después de su fundación se produce la escisión del centro, creándose la Asociación de Excursiones Científicas Catalana y la Asociación de Excursiones Científicas la Catalanista. Gaudí fue elegido vocal de la Junta Directiva de la Catalanista, cargo que ostentó durante 1879 y 1880, pero también participó en algunas expediciones de la Catalana. Se han podido documentar salidas científicas a Granollers (1879), Vilafranca y Olesa de Bonesvalls (1880), Poblet (1882), Rosselló (1883), Gerona y Sant Feliu de Guíxols (1889), según el arquitecto e historiador Joan Bassegoda. Si bien entre ambas instituciones existía una fuerte competencia, en 1890 volvieron a fusionarse para crear el Centro Excursionista de Cataluña. Entrada la década de 1890, el nombre del artista dejó de figurar en estas entidades. La Plaza Real Foto de Florencia Vigilante El arquitecto sale a la luz con las farolas de la Plaza Real Fruto de las desamortizaciones ya mencionadas desaparecieron muchos de los edificios religiosos de Barcelona, entre ellos, el antiguo convento de los capuchinos. En el solar que quedó en esa zona se urbanizó la actual plaza Real, a cargo del arquitecto Francesc Molina, quien concibió un espacio lujoso con la finalidad de enaltecer al monarca de la época, Fernando VII. En esa plaza se encuentra uno de los primeros aportes de Gaudí a la ciudad: las farolas que diseñó en el año 1879 y que generaron una gran atención de la opinión pública. El encargo, realizado por el Ayuntamiento de Barcelona, llegó al arquitecto tras haber colaborado como delineante de Josep Fontserè en la reja de entrada y la cascada del Parque de la Ciudadela (1875-1876). Centro excursionista de Cataluña Foto de Florencia Vigilante CENTRO EXCURSIONISTA DE CATALUÑA C/ Paradís, 10; Tel. 932 562 122 www.cec.cat Horario: L a V de 9h a 13h y de 16.30h a 21.30h Jaume I L4 6 Las farolas, de seis brazos, son de fundición de bronce y hierro forjado sin pintar sobre una base de piedra, con formas marítimas y con una decoración en la parte superior del casco alado Las farolas en perspectiva Foto de Florencia Vigilante La Masonería Estas farolas son una obra asociada a la Masonería de la que se cree el arquitecto era seguidor. En ellas, simbólicamente, aparece la estrella de seis puntas que es sello de Salomón o escudo de David, constituido por la fusión armónica de dos triángulos, uno con el vértice hacia arriba y el otro hacia abajo, y que fueron usados frecuentemente por Gaudí. No es extraño pensar en su vinculación Masónica si analizamos su entorno: Josep Fontseré, quien le ofrece colaboración, era masónico. Reus, su ciudad de origen, era un foco masónico y la Masonería era casi inherente en la ciudad de finales del XIX y suponía una fuente de grandes contactos. FAROLAS DE LA PLAZA REAL Pl. Real Liceu L3. del dios Mercurio y dos serpientes enrolladas en el brazo central. Creó también farolas de tres brazos, que finalmente fueron colocadas en el Pla de Palau en 1890. Estas características de diseño de formas sinuosas y orgánicas y el uso de materiales naturales y desnudos serán exportadas a futuras obras. 7 En palabras de Gaudí Tertulias entre artistas en el Café Pelayo Exponemos un pequeño extracto de la memoria de obra de las farolas de la Plaza Real, escrito por Antoni Gaudí y publicado en el libro de Joan Bassegoda i Nonell «El Gran Gaudí”, 1989: Gaudí participaba en la vida cultural y política de la ciudad a través del Ateneo Barcelonés y del grupo de La Renaixença del Café Pelayo. Más tarde pasará a formar parte del Círculo de Artistas de Sant Lluc, que tendrá sede en el Restaurante Els 4 Gats. «Candelabro. Apuntes descriptivos del proyecto de candelabros de grupo para plazas y paseos de la ciudad de Barcelona, Entre 1883 y 1888, era en el Café Pelayo donde se comentaban novedades de arte o literatura, impresiones de expediciones realizadas con el Centro Excursionista, el descubrimiento de ruinas arqueológicas y las lecturas de libros y noticias de periódicos, dando como resultado las páginas de la revista La Renaixença. Al café acudían todos los intelectuales de Barcelona y fue donde Gaudí conoció y entabló relaciones con algunos de sus mejores amigos, como el doctor Santaló o el músico Lluís Millet. (...) Hacer un candelabro de noble sencillez sin raquitismo, dando a cada parte la importancia que requiere y sujetándolo a cumplir estrictamente las necesidades con cuyo objeto ha sido creado: se ha seguido con un deber de formalidad la mayor franqueza en el uso de los materiales, dejándoles completamente vista su estructura y disposición, no pudiendo admitir, en absoluto, que una capa de color intentara la ilusión de materiales y objetos que no existen y que la intemperie se encarga continuamente de hacer desaparecer, mostrando el verdadero material a semejanza de la desnudez del mendigo vista entre harapos”. (...) Las tertulias del Café eran de marcada tendencia anticlerical, los componentes llegaron a llamar a gritos “llanuts”, “ovejas”, a los fieles que pudieran entrar como relata Josep Pla en sus textos. Ese carácter anticlerical de Gaudí, que puede ser vinculado a la masonería, se transformará posteriormente en su conversión a la fe cristiana. Volante propagandístico del Café Pelayo Fuente: Barcelofilia.blogspot.com.es CAFÉ PELAYO (Actual Hotel Monegal) C/Pelayo, 62 esq. Canaletes. Plaça Catalunya L1, L3 8 Palacio Güell: una obra clave Palacio Güell actualmente Foto de Florencia Vigilante El Palacio Güell (1886-1890), ubicado en la Rambla de Barcelona, está considerado como el primer gran encargo que recibió Gaudí por parte de su mecenas Eusebi Güell. La obra fue declarada monumento histórico artístico por el Estado Español en 1969 y patrimonio mundial por la UNESCO en 1984. El edificio destaca como un gran ejemplo de la corriente modernista y por su innovadora concepción de la luz y del uso de los espacios. El arquitecto introdujo allí planteamientos muy personales y originales que serán su carta de presentación para futuras obras: formas expresivas y el empleo de materiales tradicionales como piedra, madera, cerámica, vidrio y el famoso hierro forjado que ya usó en las farolas de la Plaza Real. Este trabajo de Gaudí recibió gran publicidad en la prensa de la época y lo catapultó para llegar a ser la gran figura que es. «Sin el Palau no existiría Gaudí», afirma al respecto Gueilburt, escultor y estudioso del arquitecto. PALACIO GÜELL C/ Nou de la Rambla, 3-5 Tel. 934 72 57 75 www.palauguell.cat Horario: Invierno de L a D de 10h a 17h30 Verano de L a D de 10h a 20h Liceu L3, Drassanes L3 9 Fachada del Palacio Güell Foto de Florencia Vigilante Círculo Artístico de Sant Lluc: arte, religión y nacionalismo En 1899 Antoni Gaudí se afilió al Círculo Artístico de Sant Lluc, sociedad artística de corte rígidamente católico y catalanista fundada en 1893 por el obispo Josep Torras i Bages y los hermanos y artistas Josep y Joan Llimona, entre otros. Gaudí pasó a ser un devoto creyente y participó en misas y procesiones del Corpus Christi. Con los hermanos Limona mantendrá Gaudí una excelente relación de amistad y colaboración como veremos más adelante. El Círculo nació para promover el ideal de un arte comprometido, con rigor, alejado de posturas bohemias de la época y en sintonía con convicciones religiosas. En él se organizaban conferencias para promocionar la producción artística de sus socios, había sesiones de apuntes al natural con modelo, se conversaba sobre arte y se leían revistas internacionales de la biblioteca. Antigua sede del Circulo Artístico de Sant Lluc Fuente: Circulo Artístico de Sant Lluc Si bien Gaudí comenzó a participar de la institución cuando esta tenía sede en la calle Boters número 6, ya en 1903 el Círculo se trasladó a la Casa Martí, que antes había acogido Els 4 Gats. En este sentido, este bello edificio, ubicado en la calle Montsió número 3, fue proyectado por Josep Puig i Cadafalch, miembro activo del Círculo. RESTAURANTE ELS 4 GATS (Antigua sede Círculo Artístico de Sant Lluc) C/de Montsió, 3; Tel 933 02 41 40; www.4gats.com Horario: Lu a Do de 10h a 1h Plaça Catalunya L1, L3 10 Sin embargo, dada la confesionalidad catalanista del Círculo, con el inicio del franquismo fue obligado a cerrar sus puertas en julio de 1936. Después de un largo periodo de inactividad y de varias iniciativas de reapertura, se configuró nuevamente en 1951. Fue en 1952 cuando, bajo su protección, nació el grupo Amics de Gaudí, en conmemoración al centenario del nacimiento del arquitecto y después de su muerte en 1926. Este grupo fue el encargado de reivindicar su obra y de evitar que se derribaran edificios. Els 4 Gats en la actualidad Foto de Amanda Dacosta Iglesia de Sant Felip Neri o el rostro de un santo En 1902, cuando la fama y el buen nombre del arquitecto iban en aumento, su amigo Joan Llimona lo escogió para representar su rostro en una obra ubicada en el crucero de la Iglesia Sant Felip Neri. El edificio, de estilo barroco pero austero, fue construido en 1750, y los impactos de metralla de su fachada atestiguan el paso de la Guerra Civil. Específicamente, en la pintura San Felipe Neri en la consagración de la Santa Misa, la fisonomía del Santo es la de Antoni Gaudí. Pero la amistad entre los artistas no es el único motivo por el cual podemos apreciar su rostro en esta iglesia: es conocido que el arquitecto acudía a misa cada tarde en este templo. El Círculo Tras la muerte de Gaudí, el Círculo Artístico de Sant Lluc tuvo un papel importante en la exposición homenaje realizada en la Sala Parés, ya que todos los «discípulos espirituales» del arquitecto eran socios de la institución (como Joan Bergós i Massó y Bernardí Martorell i Puig, entre otros). Estos artistas mantuvieron viva la memoria de Gaudí con artículos y conferencias, como así también con la continuación de las obras de la Sagrada Familia. Paralelamente a estos últimos años, y también en los siguientes, Gaudí trabajará en sus obras más conocidas que ya forman parte del Eixample, relegando el barrio Gótico a estas anécdotas que hemos querido recuperar. 11 Joan Llimona Joan Llimona i Bruguera (Barcelona, 1860-1926) fue un pintor catalán que estudió en la Escuela Llotja de Barcelona y se siguió formando en Roma con su hermano, el escultor Josep Llimona. Su gran sentimiento religioso fue transmitido a su obra con importantes decoraciones murales como la cúpula del Monasterio de Montserrat (1898), la cúpula de la iglesia de los Carmelitas de Vic o la que nos ocupa, la pintura en el crucero de la Iglesia de Sant Felip Neri en 1902. Junto a su hermano fundó en 1893 el Círculo Artístico de Sant Lluc. configuró nuevamente en 1951. Fue en 1952 cuando, bajo su protección, nació el grupo Amics de Gaudí, en conmemoración al centenario del nacimiento del arquitecto y después de su muerte en 1926. Este grupo fue el encargado de reivindicar su obra y de evitar que se derribaran edificios. Sant Felip Neri Fuente: Ana Mª Férrin, Gaudí, de piedra y fuego, Ed. Jaraquemada, Barcelona, 2001 IGLESIA SANT FELIP NERI Pl. Sant Felip Neri, 5. Horario: L a V 19h. Do 9h, 11h, 19h (misas) Jaume I L4 Iglesia Sant Felip Neri Foto de Florencia Vigilante 12 El trabajo más emblemático de Antoni Gaudí, símbolo del modernismo catalán en Barcelona, está casi exclusivamente vinculado al barrio del Eixample. Sin embargo en el Gótico es donde comenzó a perfilarse como arquitecto y persona. Fue allí donde funcionó su primer estudio, entabló relaciones con artistas y clientes como Eusebi Güell, y donde se afilió a Instituciones culturales, religiosas y sociales. lo que le permitió posicionarse como la gran figura que terminará siendo. Así planteamos un recorrido que pretende devolver al barrio Gótico el origen del genial arquitecto y descubrir una de sus facetas más desconocidas.