LUIS VARGAS TORRES Por: Nelson Estupiñán Bass Luis Vargas Torres, de padre colombiano y madre esmeraldeña, nació en Esmeraldas el año 1.855. Sus estudios secundarios los realizó en un colegio religioso de Quito. Dedicado al comercio en Guayaquil, impulsado por su espíritu progresista, liquida su negocio y va a Panamá, donde pone a las órdenes del General Eloy Alfaro su capital y su persona, para la iniciación de la lucha contra la dictadura de Ignacio de Veintimilla. En enero de 1.883 vuelve al Ecuador. Tras un audaz asalto toma la ciudad de Esmeraldas y comunica el triunfo a Alfaro, quien, llegado a nuestro país, asume el poder como Encargado del Mando Supremo de la República. Esta es la primera victoria del bizarro soldado romántico, que, de haber sobrevivido, hubiera sido el segundo Presidente liberal ecuatoriano. Después de la toma de Guayaquil, el mencionado año, Alfaro le concede el grado de Coronel. Derrotadas las fuerzas liberales, Vargas Torres cubre la retirada de Alfaro hacia Colombia. En noviembre de 1.886, en la primera fase de la invasión al Ecuador, toma Catacocha se apodera de Loja, en un ataque temerario, el 2 de diciembre, pero el 7, junto a sus huestes, tras la reconquisto de la capital austral por el Coronel Antonio Vega, cae prisionero. Ya está de Presidente de la República el conservador José María Plácido Caamaño, llegado al poder en una especie de rifa. Esmeraldas fue, desde la irrupción del negro africano en 1.553, un chisporreteante bastión de la libertad ecuatoriana. Ello explica el grito libertario de la Provincia de las Esmeraldas el 5 de Agosto de 1.820, la elección de Juan Montalvo a la convención veintemillista en 1.877, la subida de Vargas Torres al retablo de la gloria y la revolución del Coronel Carlos Concha Torres (1.913- 1916.) Fue fusilado en Cuenca el año 1.887