CAPÍTULO 4 FLUIDIZACIÓN AL VACÍO 4.1 Aspectos generales A pesar del gran potencial que tiene la fluidización como proceso industrial, muchos sectores han perdido interés en él ya que trabajan con productos que son inflamables o se degradan térmicamente con facilidad. Una forma de evitar esto sería reduciendo la temperatura del sistema y éste es precisamente el propósito principal de reducir la presión en el lecho fluidizado. Kunii y Levenspiel [1], gracias a la investigación que se ha realizado, resumen los efectos de la temperatura y la presión sobre el comportamiento del lecho fluidizado de la siguiente manera: -εmf aumenta ligeramente (1-4%) aumentando la presión de operación. También se observa que aumenta al aumentar la temperatura con partículas finas. -umf decrece con un aumento en la presión. Esto es poco visible en sistemas con partículas finas, pero el efecto se hace significativo con partículas grandes (dp > 360 µm). La velocidad mínima de fluidización puede ser razonablemente predicha por las ecuaciones 3.10 y 3.13. 51 52 Kozanoglu et al. [19] encontraron que el reducir la presión afecta de manera positiva también la difusión en el sistema sólido-gas en el caso de partículas porosas, incrementando la velocidad de secado, a pesar de disminuir la capacidad de transporte del medio. Esto no se observó en partículas compactas ya que la difusividad efectiva no es sensible a la variación en la presión. Asimismo, encontraron que se podía obtener una velocidad de secado mayor y un grado de humedad final menor si se aplicaba menor grado de vacío (incremento de presión) en el período de velocidad decreciente de secado. Esto es congruente con los resultados de Arnaldos et al. [20]. Estos estudios son importantes ya que agregan un aspecto positivo a la aplicación de presiones bajas. Otro fenómeno importante, reportado por Germain y Claudel, citado por Kozanoglu et al. [21] es la coexistencia de una capa superior fluidizada y una capa inferior fija. Esto fue observado también por Kusakabe et al. (citado por Kozanoglu et. al. [21]) cuando la caída de presión y la presión absoluta de operación eran de la misma magnitud. Esto concierne cuando se deseen tiempos de proceso similares. 4.2 La velocidad mínima de fluidización Como se dijo anteriormente, ya se sabe que la presión tiene un efecto inverso sobre la velocidad mínima de fluidización. Utilizando las ecuaciones empíricas para demostrar esto no se obtienen resultados satisfactorios, como lo hacen notar Kozanoglu et al. [22]. En ese trabajo citan a Llop et al. [8], que considerando la influencia de la presión en la trayectoria media libre de las partículas y la viscosidad (por medio del grupo adimensional 53 Knudsen Kn) desarrollaron las fórmulas para la predicción de la velocidad mínima de fluidización: ⎡⎛ Z ⎞ 2 Ar ⎤ ⎟⎟ + ⎥ = ⎢⎜⎜ ⎢⎣⎝ 3.5C1 ⎠ 1.75C1 ⎥⎦ Re mf 1/ 2 − Z 3.5C1 (4.1) donde Z y C1 son constantes definidas como: 1 C1 = Z= (4.2) ε φ 3 mf 1 Knp 1 + Q2 C3 Q1C 2 (4.3) donde Q1, Q2, C2 y C3 están definidas como Q1 = 72 cos 2 ψ (4.4) Q2 = 45π 32 cos 2 ψ (4.5) C2 = C2 = 1 − ε mf φ 3 ε mf φ2 1 ε φ 2 mf siendo ψ el ángulo intersticial de las partículas. (4.6) (4.7) 54 Valores para las constantes fueron propuestas por él y por el que propuso las ecuaciones, la tabla 4.1 las resume. Tabla 4.1 Valores para las constantes [22]. Tipo de Autor Partìcula Q1 Q2 C1 C2 C3 Kozanoglu Redonda 150 9.2 10.47 15.43 3.91 et al. Puntiaguda 180 11.05 8.79 15.15 3.89 Ambas 165 10.13 9.56 15.29 3.90 Redonda 150 9.2 16 11 5.5 Puntiaguda 180 11.05 10 7.5 6 LLop et al. Llevando su estudio más adelante, sustituyen los valores obtenidos para las constantes en la ecuación obteniendo dos nuevas ecuaciones: Re mf 2 ⎡⎛ ⎤ ⎞ 0 . 982 ⎟ + 0.0546 Ar ⎥ = ⎢⎜ ⎢⎜⎝ Knp + 0.0155 ⎟⎠ ⎥ ⎣ ⎦ 1/ 2 − 0.982 Knp + 0.0155 (4.8) para partículas redondas (φ > 0.8) y para partículas puntiagudas (0.5< φ ≤ 0.8): Re mf 2 ⎡⎛ ⎤ ⎞ 1 . 397 ⎟ + 0.0650 Ar ⎥ = ⎢⎜ ⎢⎜⎝ Knp + 0.0158 ⎟⎠ ⎥ ⎣ ⎦ 1/ 2 − 1.397 Knp + 0.0158 (4.9) Estas ecuaciones no predicen adecuadamente el valor de la velocidad mínima de fluidización, haciéndolo siempre por debajo de los valores experimentales obtenidos. Esto 55 se debe a que aunque se considera un efecto más, aún siguen existiendo otros fenómenos: cargas electrostáticas, burbujeo, etc. LLop et al. [8] mencionan que los patrones de flujo que suceden en lechos al vacío pueden ser muy diferentes a aquellos que ocurren en lechos normales, de tal manera que el régimen hidrodinámico ya no es laminar sino que es reemplazado por un flujo deslizante. Sin embargo, ellos encontraron asimismo que el comportamiento hidrodinámico del lecho fluidizado al vacío es muy parecido a aquél observado en los lechos a presiones ambiente y mayores. En su investigación ellos obtienen con las ecuaciones valores muy cercanos a los experimentales y las prueban con datos experimentales a presiones elevadas obteniendo buenos resultados también. Por esto es que ellos concluyen que las expresiones 4.10 y 4.11 son ecuaciones generalizadas para la determinación de la velocidad mínima de fluidización: Re mf 2 ⎡⎛ ⎤ ⎞ 0 . 909 ⎟ + 0.0357 Ar ⎥ = ⎢⎜ ⎢⎜⎝ Knp + 0.0309 ⎟⎠ ⎥ ⎣ ⎦ 1/ 2 − 0.909 Knp + 0.0309 (4.10) para partículas redondas (φ > 0.8) y para partículas puntiagudas (0.5< φ ≤ 0.8): Re mf 2 ⎡⎛ ⎤ ⎞ 1 . 9 ⎟ + 0.0571Ar ⎥ = ⎢⎜ ⎢⎜⎝ Knp + 0.0492 ⎟⎠ ⎥ ⎣ ⎦ 1/ 2 − 1 .9 Knp + 0.0492 (4.11) Debe observarse que la diferencia entre las relaciones 4.8, 4.9 y la 4.10 y 4.11 son sólo los valores de las constantes. Arnaldos el al. [20] probaron la relación 4.10 contra sus resultados experimentales y obtuvieron desviaciones del 3% y 12% para mijo y partículas de vidrio respectivamente. 56 4.3 Posibles implicaciones por el uso de vapor sobrecalentado Como ya se ha mencionado, una de las características principales de la fluidización al vacío es la reducción de la temperatura de operación. La temperatura de saturación para el vapor a presión atmosférica es de 100ºC, lo cual puede considerarse como una temperatura elevada. Esto es aún mayor cuando sabemos que tenemos que utilizar una temperatura mayor para obtener vapor sobrecalentado. Ahora, en la tabla 4.2 se listan diferentes temperaturas de saturación del vapor de agua para las presiones absolutas: Tabla 4.2. Temperaturas y presiones de saturación para el vapor de agua Presión [kPa] Temperatura [ºC] 100 99.62 80 93.5 60 85.94 40 75.87 20 60.06 10 45.81 Como se puede ver, la reducción de la presión impacta grandemente en la temperatura de saturación que afecta la temperatura de operación. En la utilización del vapor sobrecalentado debe tomarse en cuenta que los riesgos de explosión no existen debido al ambiente sin oxígeno, así que sólo debe tomarse en cuenta la 57 degradación de los productos. Se observa que un nivel considerable de vacío es el que hace posible la aplicación del vapor sobrecalentado al secado a los alimentos. Taechapairoj et al. [2] desarrollaron un estudio de secado en un lecho fluidizado utilizando vapor sobrecalentado, utilizando arroz como partícula. Ellos reportan un aumento considerable en la velocidad mínima de fluidización de la partícula (de 1.65 m/s con aire a 2.6 m/s con vapor) que atribuyen a la baja densidad y viscosidad del vapor en comparación con la del aire en las condiciones estudiadas.