Señores Parlamentarios Amigos todos Es con gran satisfacción personal e institucional que asumo el honor de trasladarles a todos ustedes nuestra más cordial bienvenida a la República Dominicana en nombre del Presidente de la Cámara de Diputados, Honorable Lic. Abel Martínez, quien por razones de fuerza mayor no está hoy con nosotros, en nombre del pleno de congresistas que conforman nuestra Cámara de Diputados, y en el mío propio. Al ocupar la República Dominicana, en estos momentos, la Presidencia del CARIFORUM, me permito saludar calurosamente, en nombre de los Honorables Parlamentarios de la Región del Caribe aquí reunidos, a nuestros colegas europeos Especial bienvenida extendemos, también, a los señores Copresidentes de la Asamblea Regional Parlamentaria y al señor Mohamed Ib Chambas, Secretario General del Grupo África, Caribe y Pacifico y al equipo que le acompaña, y a todos los colegas y amigos aquí presentes. La celebración en nuestro país de esta 9na Reunión Regional de la Asamblea Parlamentaria (ACP-UE), cumple con el mandato que en tal sentido se desprende del Acuerdo de Cotonu, heredero de los precedentes Lome, firmado entre la Unión Europea y los países ACP, el cual otorga a las representaciones parlamentarias de los países miembros la importante tarea de evaluar, discutir y recomendar políticas y acciones que fortalezcan la ambición común de fortalecer nuestro partenariado. Este conclave es de suma importancia para aquellos que creemos en la importancia del Grupo ACP y en las especiales relaciones que mantenemos con la Unión Europea, aliado fundamental de nuestros países en la lucha contra la pobreza, el desarrollo económico y social a través de la cooperación al desarrollo y el comercio, la buena gobernanza y la prevalencia de los derechos humanos y el estado de derecho en todos nuestros países. Esta 9na Asamblea Parlamentaria constituye, además, una nueva ocasión para los representantes legítimos de los pueblos del Caribe de mostrar la voluntad política de promover nuestra integración, al tiempo que constituye un testimonio adicional de nuestra decisión de incrementar y fortalecer nuestro partenariado con nuestros amigos de la Unión Europea. Puede afirmarse, que en los casi 40 años de vínculos especiales entre las dos regiones se han producido resultados mutuamente positivos. El diálogo político permanente, la cooperación al desarrollo para erradicar la pobreza y enfrentar los desafíos y amenazas medioambientales, los efectos de la crisis financiera, la promoción del desarrollo sostenible, constituyen aspectos en los que es posible mostrar resultados, aunque, al mismo tiempo, son áreas en las que se evidencian grandes vulnerabilidades y amenazas. Luego de la adopción por la Comisión Europea de la EU-Caribe Partenariado para el Crecimiento, Estabilidad y Desarrollo en el año 2006, ambas regiones han dado un paso mas adelante diseñando y aprobando en el año 2012 la nueva Estrategia Conjunta EU-CARIBE, la cual está llamada a potenciar aún mas nuestros vínculos, al abarcar como puntos esenciales de nuestras relaciones, los siguientes temas, a saber: a) La integración regional y la cooperación con el gran Caribe; b) La Reconstrucción y apoyo institucional a Haití; c) El cambio climático y los desastres naturales; d) El crimen organizado y la seguridad; e) La acción conjunta en los foros bi-regionales y multilaterales en los temas de la agenda global. Sin embargo, este marco prometedor se pone sobre la mesa en el mismo momento en que ocurren situaciones que provocan confusión e incomprensiones entre nosotros. Me refiero a dos temas de suma importancia, a saber: a) La nueva propuesta de política de cooperación de la Unión Europea plasmada en su Comunicación de año 2012: Incrementando el impacto de la política de la Unión Europea: una Agenda para el Cambio, mediante la cual se escogerán determinados países para concentrar su apoyo externo usando el criterio de la diferenciación y la supuesta graduación de algunos países que, se nos dice, ya pueden continuar de manera autónoma su desarrollo económico y social, pues han alcanzado una masa critica de capital y de bienestar social que se lo permitirá como al parecer es el caso de los países del Caribe. Somos países de renta media. Ya somos ricos. No tenemos pobres. No somos vulnerables. Ya somos iguales. Y nosotros no lo sabíamos!!!! Con esa política, si finalmente se aprueba en el Parlamento Europeo, la mayoría de los países del Caribe serán borrados de la lista de aquellos que reciben fondos provenientes del Fondo Europeo para el Desarrollo (FED). Para el periodo 2014-2020 se acabarían los Planes Indicativos Nacionales (PIN). Y sin embargo, aunque con salir a las calles de nuestros países el panorama es diferente, es el reciente Informe del Banco Mundial sobre Indicadores Mundiales del Desarrollo, quien se encarga de mostrar los resultados de una encuesta que demuestra que es en los países catalogados como de renta media en los que reside el 72% de los pobres. Es de esperar que en el diálogo que tendremos con nuestros colegas europeos, este tema pueda ser debatido y, sobre todo, que de el surja el compromiso de contribuir a la revisión de esta nueva visión de la política sobre el desarrollo. b) El segundo tema que nos inquieta es el que se refiere al hecho de que se nos dice que el comercio es la clave para fomentar el desarrollo. Que la cooperación debería concentrarse en apoyar los esfuerzos para saber comerciar con economías abiertas y competitivas. Nosotros creemos en eso. El futuro va por ahí. Por eso firmamos y ratificamos el EPA con la Unión Europea el cual, poco a poco, se abre camino y esta llamado a promover empleo y crear riquezas para beneficio de nuestras gentes. Sin embargo, nunca antes los pocos productos que podemos exportar al mercado europeo se han visto tan hostigados y amenazados con medidas técnicas y barreras no arancelarias. Basta con observar la amenaza que pesa sobre el azúcar y la eliminación de las cuotas, sobre el banano que ya se consumo la erosión de las preferencias y los fondos de las medidas de compensación no llegan, con el cacao y los nuevos niveles de cadmio permitidos, con el tabaco y la nueva regulación para el mercado europeo que esta a punto de someterse al parlamento Europeo. El impacto social negativo que estas medidas tendrán en nuestros países serán devastadoras: quiebra de empresas, aumento del desempleo y de la marginalidad social, etc. Ya veremos. Y decimos ya veremos porque tememos que esto sea una tendencia que también afecte las posibilidades de colocar nuestros pocos productos en el mercado europeo y disminuyan también por ese lado nuestras posibilidades de crecimiento y desarrollo. Para terminar, debo decir que, como caribeños, somos y nos sentimos socios de Europa; que los vínculos políticos que nos unen, cimentados en nuestra historia y en los valores que compartimos, hacen fuerte nuestra alianza y capaces de promover de manera conjunta el desarrollo, el bienestar y la vida democrática y pacifica de nuestras sociedades y de nuestros ciudadanos. Que el Caribe desea la paz, la justicia y el estado de derecho, base de toda convivencia humana. Deseo el mayor de los éxitos en nuestros trabajos y les invito a disfrutar, durante su estadía en nuestro país, de la amistad, el cariño y la hospitalidad que brinda el pueblo dominicano a todo el que nos visita. Muchas gracias.