RELIQUSS: LOS ARCHIVOS PERDIDOS. PIRATAS. En el interior

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RELIQUSS: LOS ARCHIVOS PERDIDOS.
PIRATAS.
En el interior de un barco mercante, se encontraba descansando en su camarote
el capitán de ese navío, el día anterior había sido bastante tranquilo y él tomaba
su merecido descanso, no faltaba mucho para llegar a su destino, donde él
deseaba reunirse con su amada familia, serpentinamente el estruendo de una
explosión causo que despertara de su sueño, - ¡¿qué demonios?! - grito el
sorprendido corcel.
La puerta del camarote se abrió repentinamente, se trataba de un joven grumete, ¡Capitán, nos atacan! -, el capitán pudo ver la desesperación del joven tripulante.
- ¡¿Qué está ocurriendo?! – exigió el capitán.
- S-señor, son p-piratas… dispararon un cañón y ahora la proa esta en llamas – el
joven grumete se encontraba temblando del miedo.
- ¡¿Que carajos hace ese vigía?!, ¡¿Cómo fue que no los vio?! – el capitán de
inmediato empezó a ponerse su saco.
- ha-había mucha neblina, era imposible ver a distancia -.
El capitán tomo su sable con su boca y lo guardo en su funda, salió del camarote
enfurecido, en la cubierta del barco pudo ver a su tripulación correr de un lugar a
otro, algunos se colocaban en los cañones, preparándolos, otros buscaban
cubetas para verter agua en la parte frontal que estaba en llamas -¡Rápido!,
¡tenemos que apagar el incendio de inmediato!, ¡ustedes dos, tomen la manquera
contra incendios!, ¡ya ordene que bombearan agua para la presión!, ¡así que
muevan sus traseros!”, el primer oficial gritaba órdenes a la tripulación, cuando
este vio al capitán de inmediato camino hacia él, - ¡señor ya di las ordenes
correspondientes a la tripulación! – el primer oficial se dirigió al capitán de forma
seria y disciplinada.
- Parece que los viejos hábitos de la armada no han cambiado – dijo el capitán
sonriendo, pero de inmediato tomo una actitud más seria, - ¿Qué está ocurriendo?
-.
- Bueno señor, parece que nos encontramos con piratas, sin duda aprovecharon
que la neblina era inusualmente espesa hoy para seguirnos, solo escuchamos los
disparos de los cañones, por lo tanto nadie pudo divisar de donde provenían, solo
uno impacto, así que probablemente fueron disparos de prueba, para ver donde
estábamos, y el fuego sin duda delato nuestra ubicación -.
- Lo bueno es que el recubrimiento impide que el barco se queme – dijo el joven
grumete viendo como el incendio era finalmente apagado.
- ¡Todos atentos a los destellos!, ¡tenemos que ver donde se ocultan los piratas! –
toda la tripulación se movilizo a los diversos puestos del barco, todos estaban
atentos, finalmente varios destellos surgieron entre la neblina.
- ¡Piratas a babor! – grito uno de los marineros antes de que varias explosiones en
el agua salpicaran a todos, uno de los proyectiles chocaron con el castillo de popa,
causando un nuevo incendio.
- ¡Timonel!, ¡quiero que vires el barco en posición de disparo!, ¡artilleros preparen
los cañones! ¡El resto lucharemos!– todos los ponis abordos corrieron a sus
puestos, los tripulantes tomaron sus armas entre espadas y rifles de un aspecto
extraño.
De entre la neblina pudieron divisar la sombra de un barco, los artilleros
dispararon los dos cañones, los proyectiles impactaron y pudieron ver las flamas
de que causaron los proyectiles incendiarios.
- ¡Quémense malditos herejes! – grito uno de los marinos.
La tripulación vitoreaba a los artilleros, los proyectiles deberían de causar que el
barco enemigo se cubriera en llamas en poco tiempo. Varias detonaciones
causaron que la tripulación quedara en silencio y todos corrieran para buscar
refugio, varios proyectiles de metralla causaron estragos entre los tripulantes, el
capitán estaba atónito al ver lo que había pasado.
- S-se supone que eso debió causar que el barco enemigo se cubierta en llamas -,
el capitán temblaba de miedo.
Finalmente pudieron divisar la nave enemiga, un barco de mayor envergadura que
el que ellos abordaban, la cantidad de cañones demostraban que era un barco de
guerra.
- Cabrones, tienen un barco de la armada – dijo el primer oficial impresionado.
El barco se acercó, sus intenciones eran claras, los piratas querían abordar.
Varios piratas saltaron aferrados a cuerdas, el sonido de disparos cubrió el lugar,
de los rifles y pistolas de ambos bandos salían proyectiles cubiertos de fuego, que
al impactar en sus objetivos causaban serias quemaduras y en algunos casos
incendiaban al objetivo.
El barco mercader se convirtió en un desesperado campo de batalla, la tripulación
luchaba para tratar de expulsar a los atacantes, pero estos los superaban en
número, uno a uno los marinos terminaron muertos o prisioneros de los piratas.
- ¿Qué raro, porque no simplemente acaban con todos nosotros? – dijo el primer
oficial asustado.
- Buscan esclavos – el capitán sudaba bastante, el sostenía su sable con su boca
y arremetió contra un joven pirata cortándole el cuello.
- ¡Capitán! – los dos oficiales vieron como el joven grumete había terminado
encadenado por un par de piratas, estos lo arrastraban junto con varios jóvenes
marinos de la tripulación. Vieron con horror que no solo se trataba de la nave
pirata artillada, estaban rodeados por varias naves de menor tamaño, típicas de
las tribus de asaltantes, ahora estaban completamente rodeados.
- Antes que el primer oficial pudiera hacer algo, recibió un disparo en su lomo que
causo que terminara en el suelo.
El capitán horrorizado levito su pistola y disparo a un pirata, y antes que pudiera
hacer algo más, juna cadena se enrollo en su cuello causando que fuera arrojado
al suelo.
- Muy bien, ¿que tenemos aquí? -, era una voz burlona, cando el capitán pudo
mirar hacia arriba, vio a un sucio semental gris oscuro levitar una pistola la
apuntaba directo a su cabeza.
- Hola cabrones de mierda, veo que ahora son nuestros prisioneros, me alegra
saber que su barco transportaba estos finos productos, ¡mis chicos podrán comer
y beber durante semanas! – el líder de los asaltantes observo a su banda de
asaltantes gritar en son de victoria, - la carga de su barco es valiosa, y su patético
barco pasara a ser parte de la flota de los River Raiders, pero ustedes, igual nos
darán ganancias, serán buenos esclavos… no agradezcan, gracias a nosotros
podrán ver el resto del mundo, el cual será un infierno -, todos los asaltantes rieron
a carcajadas.
La tripulación de barco mercante fue conducida a lo profundo de la nave pirata, ahí
pudieron ver a otros desafortunados esclavos, probablemente capturados de algún
pequeño pueblo, la mirada de ellos al ver a los marinos fue de absoluta
desesperación, les esperaría una vida de esclavitud en un verdadero infierno, y
nunca jamás volverían a ver su hogar.
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