El coronel Francisco Bolognesi - Actividad Cultural del Banco de la

EL CORONEL
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·EL CORONEL
Francisco Bolognesi
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APUNTES
BIOGRAFIGOS
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Documentos relativos á la heroica defensa de Arica
el 7 de Junio de 1880
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LlBRERIA FRANCESA CIENTIFICA ~ALLAND
E. ROSAY
EDITOR
CALLE DE LA MERCED, 632 y 634
1905
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PROPIEDAI;l RESERVADA
SR. CORONEL FRANCISCO BOLOGNESI
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FRANCISCO BOLOGNESl
En la ciuded de los Reyes del Perú, en
" ocho de Noviembre de mil ochocientos diez
"y seis. Yo el Dr. Dn. Francisco Jabier de
s , Echegue
Infrascrito Dignidad de Dean
"de esta Iglesia Catedral de Lima; EX-LI"CENTIA
P ARROQUI, en esta parroquia
del
Señor San Sebastian, Esorcise, bautise pu" se Oleo y Crisma, a Francisco, niño Espa.:' ñol de edad de cuatro días; hijo legítimo
" de Dn. Andrés Boloñesi, natural de la ciu"dad de Génova, y de Da. Juana Cervantes,
" natural de Areqtiipe; Abuelos Paternos, Dtt.
"José Boloñesi, y Da. Benita Cemperelle,
"Abuelos Msiternos Dn. Geronimo Cervan"tes, y Da. María Teresa Pacheco ; fué su
padrino el Señor Mnrques de Montemira
"Conde de Váldessella, Caballero de Iagren
"Cruz Colorada y Mariscal de Campo de
" los Reales Ejércitos, fueron testigos el Pres"vitero Teniente de Cura Rector de esta di~"eha parroquia Dn.José Buenaventura Sa1"daña, Dn. Francisco Lopes Vidaurre,y Dn.
"José Genero Peres Presvitero
ho-tü.eu"pre. - FRANCISCO JAV!E E ECHAGUE.
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" Quemaré el {¡ltimo cartucho", repetirá
con entusiasmo el viajero, cuando, desde los
cristales de la rada de Arica, contemple elalto Morro, mas que majestuosa tumba, radiante pináculo de gloria, donde la inmortalidad ha escrito en primer término el nombre de
¡FRANCISCO
BOLOGNESU
" Quemaré el último car tuchos'; l~epetiiiA
quien quiera que bañe el espíritu: en las tradiciones patrias; quien quiera que venere las
cenizas de sus antepasados;
quien quiera
que, repercutiendo en la conciencia la voz de
la naturaleza, tenga por escudo el derecho y
por lema la justicia;
" Quemaré el último cartucho", épica vulgaridad, como califica esta frase el eminente escritor Ricardo Palma, ha sido y será
la más sublime síntesis del más levantado
patriotismo;
la breve, enérgica, elocuente
fórmula de la grandiosa resolución de aceptal' con serenidad y júbilo los sacrificios todos en aras de la honra de la Patria.
-6.
" Quemaré el último cartucho", palabras
que son la magnífica apoteósis de Bolognesi,
y que deben ser también las únicas de su epitafio, para que la presente y las póst reras
generaciones vean en ellas, como profícua
'enseñanza, el luminoso compendio de una
historia infortunada y de una gloria sin lí•
mrtes.
Al recordar la jornada de Arica, y con ella
al primero de sus héroes, bien pudiéramos repetir 10 que el poeta de Ricaurte dijo:
o
•
'.
"Vivió para la América un segundo;
. Para su gloria lo que viva el mundo."
Porque, en efecto, para explicar la grandeza de Bolognesi, basta el recuerdo del sacrificio consumado en el "Morro";
y sus palabras'; que la muerte confirmó, y que las olea':'
das del tiempo llevarán de eco en eco á .todos lbs ámbitos del mundo v á las futuras
edades, son el precioso resumen de una exis<tenciatque hoy constituye el orgullo de su
Patria y de su raza, y á la cual consagramos
estos ligeros rasgos, como una muestra de
Íntimo cariño, de gratitud inmensa, de admiración- eterna.
o
••
E14de Noviembre de 1816, cuando, entre
las sombras de dominación extraña, despun-
o
-7taban los primeros albores de la independen,
cia del Perú, nació en Lima," en la cuadra 1. a
de Caylloma (antes de Afligidos) Francisco
Bolognesi, meciéndose en honrada cuna, que ~
formaron un digno hijo de la siempre artística y entusiasta Italia; y una matrona
dis.
tinguida de la histórica ciudad del Misti.
, Desuerte que la infancia de Francisco
Bolognesi se desarrolla entre los grandes
acontecimientos que agita~fr4~América
latina, recibiendo, por COJi'Siguiente,
ci\,~la pri-,r mavera de su vida, c~grato:x fecundojrocío
que debíallevarlo más tarde'[á .las'cumbres
i'Y
de la gloria, haciéndose desdeluego digüo de
la época en que pudo escuchar las pal~bras
, c1e",Patria libre Ó independiell~e.':
A los ocho años de edad, y cuando :-'a conocía los e1e11l.CllÚ)S'
de la instrucción rima":
ria, fué llevado por sus padres á Ar".luipaí
.~.
.donde fijaron su-residencia.
".
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En esta úl tima-ciudad, después ~e completar su primera 1:J;tstrncción,pasó.Jde inter.no al Colegio Seminario, en el que p¡;5cosaños
después concluia los ~JJrsos corresjlondieutes
á la instrucciónmedi\.) distinguiéndose 'con
frecuencia en el éstudid;Pe las mátemáticas ..
No había llegado aúnalos di~~y seis años,
cuando su padre tuvo á bien.dedicarlo á la
carrera del comercio, pasando en consecuencia del Seminario á una de las .casas más
.
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fuertes de aquella ciudad, la de los señores
Lebris y Violler, donde en poco tiempo, merced á intachable conducta y disposición especiaI;pudo, grangearse el cariño y la estimación de los jefes de la casa.
Ni mucha detención,. ni mucho esfuerzo
fueron menester para que el joven Bolognesi llegara á posesionarse elela lengu a france, sa; y era tal su inteligencia, y eran tales sus
aptitudes, que no tardó en alcanzar justa reputaciónde un buen Tenedor de libros.
,
.
Hácia el año ,de 1840, dejó la casa elecomercio en que ha sta entonces había servido,
para dedicarse á los negocios mercantiles
por su propia cuenta.
Poreste tiempo, tuvo oportunidad dedal'
una prueba inconcusa de su distinguido valor y de su constante y decidida inclinación á
la carrera elelas armas, llamando con justicia la atención de sus amigos, y aún la de militares que no le conocían.
Disputábanse el mando de la República
los Generales- Castilla y Vivanco, y sus ejércitos se encuentran y luchan en el Carmen
Alto, á inmediaciones de Arequipa.
-9-
Bolognesi sin participación en la política
militante, sin grado ni colocación alguna, no
pudo resistir al impulso de su curiosidad juvenil, y cediendo á su natural inclinación, se
lanza al campo ele batalla, porque quiere,
porque desea saber como se combate, como
se triunfa.
Frío espectador, tiene la temeridad de colocarse en el espacio que separa á los ejércitos, y discurriendo tranquilo, entregando á
su observación, pasea 'por la zona peligrosa.
No impunemente se acerca á la región de la
muerte; una bala le quita e! sombrero, y
otra hirió el caballo en que montaba.
Terminada la batalla entró á Arequipa
con el ejército triunfante del General Castilla, felicitándosele por sus amigos como á
uno de los vencedores.
El valor y la serenidad de Bol ognesi le
conquistaron ardientes simpatías entre los
jefes de! ejército, que. le instaron á dejar el
comercio, abrazando la carrera militar. El
mismo General Castilla le ofreció la alta clase de Teniente Coronel de Ejército, que de
buen grado aceptara Bolognesi, si á ello no
se opusieran la familia" c01(los:ruegos, y el
deber con sus compromisos de 'comercio.
-
-10 .
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T uva que renunciar, pues, y renuncio a se"
guir por el camino que le ofrecía deferencia
tan marcada, -camino que era el objeto de
sus ensueños, su constante y mayor aspirad
ción ; pero el deber estaba de por medio, y
resonando como siempre poderosamente en
su espíritu, dió irrecusable prueba de su resolución para el sacrificio. Desdeñó con pesar, pero con entereza, las halagadoras' insinnaciones deinc1uc1able conveniencia, j si-
guió ocupado en sus asuntos ·comerciales.
La honorabilidad de su reputación se ha ...
bía acentuado de manera tan notoria, que
llegó á asociarse á los respetables capitalis ...
tas del Cuzco, señores Peña, Nadal y Garrnerrdia, formando con ellos' una empresa destinada á explotar las hermosas y ricas montañas deCarabaya. Internóse con este mo'tivo, en distintas épocas, en los puntos
más difíciles y peligrosos ele aquellas regiones, venciendo con su arrojo caracteristico
los más serios obstáculos de una: naturaleza
abrupta, y descubriendo parajes á los cuales
antes que él no había llegado explorador alguno.
Habiendo salido de-la montaña y dirigídose al Cúzco con el objeto de acarrear las-
- 11-
vituallas y elementos indispensables á los
cascarilleros que había dejado en el interior
de aquellas comarcas, tuvo noticia de que
su dependiente Backus, y los peones que á
'sus órdenes estaban, habían sido asesinados
por los salvajes.
Tal emergencia, que contrariaba sus propósitos y malograba sus esfuerzos, no llegó,
empero, á intimidar su espíritu templado.
Con más vigor aún y empeño infatiga-ble, enganchó á otros trabajadores, y unidos á estos una pequeña fuerza proporcionada por la autoridad, volvió al interior de la
montaña, reconquistando palmo á palmo el
camino recorrido, hasta llegar al rnismo sitio en que se encontraba acopiada gran cantidad de cascarilla, conseguida en distintas
expediciones anteriores, y que al fin logró
extraer en medio de esfuerzos, privaciones é
incesante lucha.
Hácia la mitad de 1853 regresaba Fran. cisco Bolognesi á la ciudad de Arequipa y al
seno de su familia. En esa época, las relaciones internacionales con Bolivia no eran las
que pretende la perfecta armonía que siempre conviene, apoyada en la justicia, á la
existencia de los pueblos vecinos; y orgarii-
- 12-
zándose la Guardia Nacional en Arequipa,
fué nombrado Bolognesi Zc'Tefe de uno de los
Regimientos de Caballería en aquella ciudad.
Poco tiempo después, estimando contraria á sus ideas.la conducta del Gobierno de
Echenique, no trepidó en tomar parte activa
en la revolución que estalló en Arequipa el 7
de Enero de 1854 .
•
Puesto el General Castilla á la cabeza de
la revolución, Francisco Bolognesi emprendió con él la campaña, dirigiéndose al Cuzco
por la ruta de Cotahuasi, ~omo 2." Jefe del
Batallón" Libres de Arequipa."
Al organizarse e] Ejército en el Cuzco para emprender la marcha sobre la capital- de
la República; el General Castilla necesitaba
de un hombre de condiciones especiales para
el manejo de los caudales del Ejército; y sabiendo que Francisco Bolognesi tenía las aptitudes requeridas para el puesto, le instó á
nombre de la Patria para que dejara la colocación que tenía en el Batallón .1 Libres", y
se hiciera cargo de la contabilidad con el título de Comisario General del Ejército Libertador. Bolognesi, á pesar suyo, no pudo
desatender las exigencias del General Castilla, y, en consecuencia, siguió en el curso de
la campaña con el carácter de Comisario General del Eiército.
Después del t.riunfo de la Palma, y habien-
do presentado sus cuentas, que' obtuvieron
la aprobación más completa y satisfactoria,
fué nombrado edecán del Gobierno Provi-·
•
sorro.
Más tarde, cuando en 1856 estalló en el
Norte la revolución Vivanco, Erancisco Bolognesi salió de Lima como 2.° Jefe de uno de
los cuerpos que á órdenes del GcneralLayseca, marcharon á sofocar esa revolución.
Poco después, el General Castilla salió de
Lima á la cabeza de un respetable ejército,
para que unido á las fuerzas del General
Layseca, combatiera en el más pronto término á las del General Vivanco, que, con
este motivo, emprendieron su retirada sobre
Piura.
En el curso de la campaña, Francisco Bolognesi, ya Teniente Coronel, fué nombrado
-
Ll. -
y se hizo cargo, por enfermedad de su hermano el Coronel don Mariano Bolognesi, del
Escuadrón Artillería Volante, y así continuó, como artillero, hasta la campaña y sitio
de Arequipa (1857-58), en cuyo asalto final
atacand o bizarramente la trinchera de "Santa Rosa", el más fuerte y el último de los baluartes que le quedara á los denodados de-fensores de la ciudad, fué derribado delcaba110 por una bala que le-atravesó el muslo de
la pierna izquierda.isacándole inmediatamente ele combate.
-
Rest ablecid.o el orden y electo Presidente
Constitucional de la República el Gran Mariscal don Ramón Castilla, comisionó éste
al ya Coronel don Erancisco Bologriesi para
que fuera á Europa con el objeto de comprar arrnarrien to.Per'111aneció Bolognesi en
Europa dos años, tiempo que supo consagrar á la vez que al desempeño de su irnpor.tante comisión, al perfeccionamiento de sus
conocimientos militares, dedicándose con especial solicitud y de-manera que le enaltece,
al estudio de la artillería.
Fué el resultado de la comisión la mejor
y la primera a.rtillería rayada, que sirvió al
Perú, aún en el desastre de San Francisco, y
en las batallas de Tarapacá y Tacna,
~ 15 -',
Rl Gobierno del General Pezet, cuando se
iniciaba la guerra C011España, comisionó
también al Coronel Bolognesi para adquirir
en Europa artillería de costa; y mediante su
actividad, inteligencia y esfuerzos, logró enviar oportunamente
los famosos cañones
Blakely que sirvieron para alcanzar el t riunfoel 2 de Mayo de 1866, cornb e n el que
obtuvieron igual honra 1)01', .·f'denu'edo ven.
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cedores y vencidos.
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Desde su regre"p~e ~U1'0~~ en 1868 hasla 1878, obtuv~anas
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ciones, ya con1,sS/jefede t1~4:1'~10s cuetl\OS de
Artillería, y~;én calidag..lde Comandante Gc•.
neral del arjna, ya etf
fin en otros
puestos,
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desenipeñá~i:101os t~'c1oscon aquella labotiosidad que l~.. era c~rácterística, con su 11011.
radez 110to iila , con su lealtádinquebrafüa
ble, ~lereeier&\~ p.4r S,:lS.:Cl·viciosy,ap~itrdes
la mas alta con.SltlyraClOl1de los GobleJ¡nos,
el aprecio y la d't~inción de SU'S-c01;lpañl~ros,
y el cariño y respe~ .•..
de
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Nombrado el Gener~)"nuenc1í~e11~879, al
comienzo de lá. guerra con C_h~1i,para- organizar corno General
en Jefe ..~~Ejércitoque
de.
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j¡
- 16bía 'oper-ar en el departamento
de Tarapacá,
y conocedor dicho General de los honrosos
antecedentes v relevantes cualidades del Coronel Francisco Bolognesi, se apresuró á pedir al Gobierno se le pusiera á SL1S órdenes.
Accedió el Gobierno á la solicitud del Gene. 1'-.::11 Buendía, y se dirigió con éste al Sur el
mencionado Jefe.
Al organizarse las fuerzas en Iquque, se
. le confirió al Coronel Francisco Bologuesi el
mando ele la 3.a División, compuesta de los
batallones"
Guardias de Arequipa" y "2.°
Ayaeueho ", á cuyo frente le cupo asistir al
desastre de San Francisco, para contribuir
bien luego, con notable pericia y distingnida
bizar'ria, á obtener la espléndida victoria de
Tarapacá.
~
En medio de las fatigas y consiguientes
penalidades á unacampañaclesgraciadá,
que
só 10 tu va el glorioso paréntesis del27 de Nov iernbre de 1879, nada pudo turbar la habitual circunspección de Bolognesi, ni la afabilidad de su trato, ni la distinción de sus maneras.
Siempre sereno, siem-pre modesto,
siempre sufrido, fué constante ejemplo de la
más exacta disciplina.
Bravo sin jactancia, é instruido sin pretensión, supo cumplir con su deber, siempre
......17 -
con el mismo afán, con la misma complacencia, ora se encontrase entre las comodidades
de la ciudad, ora al escaso abrigo del improvisado toldo, ora en la desnudez horrible del
desierto.
Reconcentrado en Arica el Ejército del
General Buendía, y puestas las fuerzas que
10 formaban á las órdenes del Contra-Almirante Montero, sufrieron en elpurso del tiempo algunas modificaciones eh
su-organiza.
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cion.
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El 3 de Abril de 18801 fecha dn que el
Contra-Almirante
Mont9fo con§tituyó su
Cuartel General en Tq,Cll~, se 1e/~ncómendó
al Coronel Francisco B:q1egq,esfla Gobernación de la plaza de Arica ..';:;,.'
.:
0-;'
"Nunca olvidaremos, d~e un distjnguido
escritor, la actitud asurnidá; por el Coronel
Bolognesi, desde que tomó N.osesión de su
puesto. Resuelto á defender ¡~osición que
se le confió á todo trance, atraj~á'SÍ
á todos aquellos que podían ayudarlo\~p s~:tpropósito. Activo, apesar de que sus encaneci.
dos cabellos indicaban su avanzada edad,
todo 10 emprendió, sin arredrarse por Iaies,
casés de tiempo y su absoluta falta de elementos. Así hemos visto á ese digno ancia,
no organizar sus brigadas para que ca~a
,
,• .
J-
r-r-
18 -
cuerpo, cada batería, se sirviera con independencia; formar dos partidas de caballería
para vigilar el Norte y el Sur; mejorar el alimento de la tropa, subiendo á libra y media
su ración de carne, y, sobre todo, pensar de
una manera seria, en los medíos de resistencia. "
. Quedaba pues Bolognesi, en el lugar que
le estaba reservado para su muerte pero también para su gloria, con poderoso elemento
personal es cierto, porque con él estaban los
'Moore, y los Za va1a, los Ugarte y los Saenz
Peña, los La-Torre y los Blondel, los Inclan
y los Varela, Espinosa y Lagomarsino, Arias,
Bustamapte, Cornejo, O'Doriovan, y, en fin,
otros distinguidos perua.nos que, formando
pequeño grupo, realizaban empero la preciosa alianza del Ejército, la Marina y la GuardiaNacional, estrechados por una aspiración común, en torno del pabellón peruano,
para levantar, como levantaron muy alto,
con su valor y con su sangre el nombre y la
honra de la patria.
,
o
DesprovistacomO se, hallaba la plaza de
Ari~~.c1~sérios elementos materiales pan~ su
deferisa ; custodiada por guarnición diminuta, 'era su destino conocido, toda vez que
burlase la victoria el valor v los esfuerzos del
Ejército de Tacna.
,
-
- 19-
Sabíalo Bolognesi, y no 10 ignoraba ninguno de sus camaradas. Así cuando e126 de
Mayo, alcanzaba el ejército de Chile definitivo triunfo sobre el Ejército Aliado, Bolognesi y los suyos conocieron una vez' mas el
sacrificio que les aguardaba, y distantes de
concebir la jdea de abandonar la plaza, renovaron con' el enérgico acento de firme re- /
solución, los
votos que ya habían formuladd
"
- .=-:..-:... --desde el 24 de Mayo en Junta de Q.,,~l.~H'1e
sostener la plaza á tod?:'.~·~~_~;ace~faro
las funestas conseCUenCH}s.
~ una l#ha f;de-./
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slgua.?',
¡:¡ , ~ ¿; •
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Por esto, cuando.elMayor Sal'Vo se d.+resentó ante Bolognesi, com~"'par\~111ent;l'¡tlil~
del Ejército sitiador', i,uvitando 'áJla c3;~~tulación deTa plg..za,puG,lo escuchaj en último
término; de los labios q,el héroe l~s p}'Íl,?t)bras
"quemaré hasta .elúltimo cartueho ,",' ;~,
y el 7 de Junio de 1880, muriÓ Fl!an~isco
Bolognesi, teniendo al océano, cotljt.6La-Rosa
y Tararnona, por testi~o ~e'~~
~q~?e~a .... r
Descansa en paz ¡oh héroe ! (¡rue10~resplandores' de tu gloria ilurriinenallPerú.en la
senda de la reparación y d~l progreso. ;
• r
•
-
.
.
• .
I
's
•
,
.,
.
1
- 20Parte del Teniente Coronel D. Manuel C. de La Torre
JEFE DEL DETALL DE LA PLAZA DE ARICA.
JefatuI'a del Detall de la Plaza
y Ilaterlas de AI'jea
Abordo del "Liinari", rlrica, Junio 9 de 1880.
Señor Secretario de Estado en el Despacho de Guerra.
Sr. S.
Después del resultado desgraciado de nuestras
armas en el combate librado el 26 del mes pasado
en los altos de Tacna, la plaza de Arica, cuya custodia había sido encomendada á la diminuta y mal
armada fuerza de nacionales, que aparece en el estado adjunto, quedó sometida á un estrecho asedio de mar y tierra por fuerzas infinitamente superiores á las nuestras.
El valiente Coronel Bolognesi, Jefe de la Plaza,
no recibió ni al siguiente día del 26, ni nunca, propio ni comunicación oficial alguna, que, dando á
conocer el estado en que había quedado nuestro
Ejército, y el punto á que se retiraba, le indicara
la norma de conducta que debía seguir la Plaza de
Arica, y las determinaciones, combinaciones ó planes que se proponían adoptar el Director de la Guerra ó nuestro General en Jefe.
Sólo se supo que Tacna había sido tomado; y
desde luego, se mandó imposibilitar el uso de la
vía férrea, y se emprendió los trabajos de defensa
de lícito empleo en la guerra, que acrecentaran en
algo el poder de las fuerzas defensoras.
.
Resuelta en Junta de Guerra la defensa de la
Plaza, en' obedecimiento de una orden del sellar General Montero, dada con fecha 24, para el caso de
un fracaso de nuestro Ejército en Tacna, y determinado el plan de defensa, cada uno de los Jefes y
secciones de las fuerzas terrestres y marítimas ocuparon sus puestos, resueltos todos á un sacrificio
-- 21 seguro; pero de profícuos resultados en la convicción de que se seguía un plan bien meditado, y de
segura salvación para el honor y los intereses de la
Patria.
Muchos propios se hicieron al General Montero, sin obtener contestación alguna.
Estábamos á oscuras, pero todos resueltos á
la defensa hasta el último trance, para dar tiempo
de operar á nuestras fuerzas del Norte.
En esta situación, apareció en la manana del
día 29 un escuadrón de caballería enemiga, que
practicó el reconocimiento de la quebrada de Chacalluta, la que se retiró una hora después.
El día 2 á las 6 a. m. aparecieron de nuevo tres
escuadrones y poco después dos trenes, que conducían crecido número de fuerzas.
Continuó desde ese día el tráfico activo de trenes, y una serie de exploraciones de la caballería,
sobre las colinas y cerros de Chacal1uta y Azapa,
que dominan la Plaza; hasta que el 5 apareció en
la madrugada, poderosa artillería, estacionad.a en
los puntos más vecinos y dominantes.
A las 6 a. m. de ese día recibió el Jefe de la Plaza un parlamentario del General en Jefe del ejército
chileno, por el cual, manifestando una deferencia
especial á la enérgica actitud de la Plaza, expresaba su deseo d~ evitar la efusión de sangre, que creía
estéril y de ningún resultado patriótico para sus
defensores, atendida la excesiva superioridad de las
fuerzas marítimas y terrestres con que se hacía el
asedio.
EIJefe de la Plaza, previo acuerdo de una juuta
de Jefes de las fuerzas defensoras, cuya unánime
opinión fué consecuente á la determinación adoptada en días anteriores, de hacer la defensa hasta
'el último trance, despidió al parlamentario señor
don juan de la Cruz Salvo, dándole por contestación para su General: que, agradeciendo el acto de
deferencia, la determinación de las fuerzas de Arica
era quemar el último cartucho ..
Un momento después de retirado el señor Parlamentario, á las 9 a. m. la artillería Krupp, situa-
- 22da en las alturas de Chacalluta y Azapa, principió
un nutrido fuego á bomba sobre nuestras Baterías
del Norte y del Este, el cual era contestado sobre
los puntos á que podían alcanzar nuestros cañones. Duró este bombardeo, con un pequeño intervalo, hasta las 4 h. 30 m. p. m. sin que los pocos
tiros caídos en la población, ni los recibidos por
nuestras baterías hubieran ocasionado daños de
consideración.
El día 6 á las 12 h. 50 m. p. m. principió de
nuevo el fuego de las baterías enemigas de tierra,
al que se adunó, poco tiempo después, el de mar,
por el "Loa", "Magallanes", "Covadonga" y "Cochrane. "
Un tiro de la batería "San José" acalló los fuegos eleuna batería de cuatro canones, la más baja
de las nue había colocado el enemigo.
Las baterías "Santa Rosa" y "2 de Mayo", el
"Morro!' ;y el "Manco-Capac", que abandonó sn
fondeadero y salió al encuentro del "Cochrane",
contestaron los fuegos del mar,
.
Terminó el combate á las 4 h. 30 m., hora en
que la batería de "San José" obligó á la retirada al
regimiento "Lautaro" que se apoximó por la parte Norte hasta el baradero del "Wa.teree."
.
El resultado de estajornada nos fué favorable;
pues.el "Cochrane" recibió una bomba de á 70 del
"Morro" que le produjo incendio y algunas bajas;
y la "Covadonga" recibió dos balazos sin que por
nuestra parte hubieran averías de consideración.
En este día, todas las haterías y fuerzas, así como el "Manco Capac" cumplieron dignamente su
deber, manifestando ánimo, entusiasmo y ardimiento, merecedores de un grande aplauso.
.
A las 6 p. m. el Ingeniero senor Teodoro Elmore, que en días anteriores había sido hecho prisionero en Chacalluta, se presentó al Jefe de la Plaza
con el carácter de parlamentario, para inquirir de
él si se'hallaba dispuesto á entrar en arreglos, cu- .
biert;o como se hallaba ya el honor nacional y el de
las fuerzas defensoras, con los dos días de combate
habidos.
rr:
23-
El Jefe elela Plaza de acuerdo con la Junta se
negó á reconocer al señor RImare con carácter de
parlamentario, .y le despidió, indicándole contestar: que solo estaba dispuesto á recibir parlamentarios en forma y con arreglo á las prescripciones
militares elelcaso.
Ocupados estaban los puestos de defensa en la
noche del 6 al 7, en la forma siguiente: 8.' división
. á la defensiva de las baterías del Norte yla 7.a á la
.de las baterías del Este, distantes, casi tres millas
una de otra división.
La noche fué ·completamente oscura, y á las
5 h. 30 m. de la mañana, cuando aun no había luz
para distinguir los objetos á un kilómetro de distancia, un cañonazo de las baterías del Este, al que
siguieron otros, anunciaron la proximidad elelenemigo por ese flanco. Pocos momentos después,
rompió seel fuego de fusilería, y trabóse reñido combate.
Media hora después de trabado el combate, el
J efe elela Plaza, que veía aumentarse excesivamente las fuerzas que atacaban por el Este, mientras
que nuestras filas disminuían rápidamente por las
bajas que ocasionaba el nutrido fuego enemigo, y
que veía distantes todavía las fuerzas que ernprendían ataque por el Norte, dispuso viniese en auxilio la 8." división.
_ Llegaban á paso de trote á las faldas del
"Morro" los batallones "Iquique" y "Tarapacá",
que formaban la expresada división, cuando, arrolladas nuestras fuerzas del Este por el excesivo número de las que atacaban por ese lado, se replegaban ya sobre los parapetos de "Cerro Gordo."
A gran esfuerzo, jadeantes, llegaban á la altura del "~.1orro" el Teniente Coronel don Ramón Zavala, á la cabeza de medio batallón del ~'Tarapacá" y el Teniente Coronel D. Roque Saenz Pena,
la cabeza de medio batallón del "Iquique", rompiend o con bravura sus fuegos sobre el enemigo,
que ya coronaba la altura del "Cerro Gcrdo", y lo
flanqueaba al mismo tiempo por los lados del Este
y del Oeste, con otras fuerzas.
- 24En esta situación, se replegaron sobre los parapetos del "Morro" los· medios batallones del
"Iquique" y "Tarapacá", con los restos c1ela 7."
división para hacer allí el postrer esfuerzo, mientras que los medios batallones que aun no habían
tenido tiempo para llegar, fueron dispersados bajo
el mortífero fuego de "Cerro Gordo."
Palmo á palmo y con empeñoso afán, fueron
defendidas nuestras posiciones hasta el "Morro" ,
donde nos encerró y redujo á unos pocos, el dominante y nutrido fuego del enemigo por una hora.
Eran las 8 h. 59 m. de la mañana, cuando todo estaba perdido; muertos casi todos los Jefes,
prisioneros los que quedaban, dos únicos, y arriada por la mano del vencedor nuestra bandera.
En tansupiemos
momentos, volaron casi todos los polvorines, y pudo inutilizarse algunos cañones del "Morro"; mientras que las baterías del
Norte atacadas ya por el regimiento "Lautaro" y
algunos escuadrones, á quienes habían tenído alejados, volaron también sus polvorines y reventaron todos sus cañones.
Perdida toda esperanza, el "Manco-Capac"
que, con las baterías del Norte había protejido
nuestra izquierda, hizo proa al "Cochrane"; y, desengañado c1eno poder hacer su postrer tiro al enemigo, su comandante, -con serenic1acl y acierto, le
echó á pique, para no dar ese nuevo elemento c1e
poder á las fuerzas marítimas c1eChile.
Han sucumbido en la lucha los Coroneles don
Francisco Bolognesi, donjuan G. Moore, don Alfonso Ugarte, c1onJoséJ. Inclári, don Justo Arias
y Aragüez, don Mariano E. Bustamante, los Tenientes Coroneles don Ricardo O'Donovam. don
Ramón Zavala, don Francisco Cornejo y don Benigno Cornejo, los Sarjentos Mayores don Armando Blondel, don Felipe Zela y don Isidoro Salazar
y muchos señores Oficiales. Qu<'dan heridos algunos, y prisioneros los demás, de toc1o lo cual encontrará USoadjunta una relación detallada.
Atacaron por la parte del Este los regimientos
c1elínea 3.° y 4.° fuertes de 1200 plaz-as cada uno,
-
25 ..:....
y el batallón "Bulnes", sirviendo de reserva el
"Buin" y por el Norte el regimiento "Lautaro", toda la artillería y caballería; más de siete mil hombres.
Numerosa es la mortandad por nuestra parte
que se calcula en la mitad de las fuerzas defensoras.
No es mucho menor la del enemigo.
Adjunt.os" encontrará también USo los partes
que han pasado algunos Jefes de cuerpo y baterías,
que elevo originales con el del monitor "MancoCapac."
Es esta señor Secretario la relación fiely á grandes rasgos de los hechos ocurrídos, desde el 26 del
pasado hasta el 7 del presente, en lo que se relaciona con la Plaza de Arica, y de los cuales he creído
de mi deber, por muerte del Jefe de la Plaza, dar á
USoeste parte, para que llegue á conocimiento de
S. E. el Jefe Supremo de la República.
Al hacerlo, omito apreciaciones y recomenda
ciones, dejando al País y al Supremo Gobierno la
calificación de los hechos, cuyos detalles daré en
circunstancias más propicias.
Quiera Dios y la Patria aceptar el sacrificio de
tantas víctimas, de tantos patriotas de corazón,
como un holocausto ofrecido en aras del honor
Nacional para la salvación del país, y pluguiera á
la Divina Providencia, por tanta sangre vertida
generosamente, que nuestro Gobierno sea siempre
bien inspirado; y retemplado el valor, la fe y el entusiasmo en nuestro pueblo, que, una vez por todas, debe mostrarse unido y viril hasta ver realizados sus nobles propósitos .
•
Dios guarde á_USo
Sr. S.
MANUEL
C.
DE LA TORRE.
- 26REEACION
.
DE EOS SENORES JEFES
. MUERTOS
OFICIALES
y
PRISIONEROS,
'
Y HERIDOS QUE COMPONÍAN LA COMANDANCIA GENERAL DE LA PLAZA DE ARICA.
-
.
.
Coronel Jefe Superior . D. FraneiseoBolognesi
Ricardo Iturbe
Capitán Ayudante
Ped.lo Ureta
Teniente
Id.
Aurelio Cárdenas
Id
Id.
N. Munar
Sub-Teniente Id;
, .
Muerto.
Prisionero
Herido
Muerto
Id.
Arica, Junio 12 de 1880.
RICARDO ITURBE.
'
, *.
**
RELACION
DE LOS SENORESJEFES
y OFICIALES DEL DETALL
LA PLAZA, QUE COMBATIERON EL DÍA
o'"
7
DE
DEL ,PRESENTE MES.
•
TenienteCoronél
D. Manuel C. de la Torre; prisionero en eh
Morro..
'
.
Sarjcnto Mayor
.ClaudioEstrada
.
id.
id.
Id;
grdo.
Miguel Barrios, prisionero en una casa.
Capitán
Trinidad O1arte'
id. en el campo
Id. .
Exequiel L. Vela
id. en una casa.
Id.
Daniel Corzo.iherido en las baterlas del
Norte. ,
_ . Enrique Valdez, prisionero en las baterías
Id., .
del Norte.
Id.' '·.grdo.
Manuel Lira
'id. en una casa.
Teniente
'
J osé Pascual Valdivia, id. en el Mono.
Id.
<,
Gregorio·Alvarez,
id. en el N:
Sub-teniente
',Francisco Montoya
id. en una casa.
Id.
"',
....::··.~iprianol-{uiz,.murió.
'
Id.
'7 , Emilio
Miñán, prisionero en una casa.
.'
Aríca, Junio 10 de 1880.'
CLAUDIO ESTRADA.
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- 28-
Parte de la Comandancia de la Batería
del "Morro"
Aduana eleArica, Junio 7 de 1880.
Sr. Teniente Coronel Jefe del Detall de la Plaza.
S. T. C.
Por muerte de los SS. Coronel Jefe de esta Plaza, D. Francisco Bolognesi, y capitán de Navío Comandante de esta batería, D. Juan G. Moore, tengo el honor de participar á U. los acontecimientos
ocurridos en ella durante la batalla de esta mañana.
A las 5 h. 30 a. m. se sintieron hacia las baterías del Este, tiros de fusil, y poc<?después un fuego graneado seguido por disparos de artillería: inmediatamente se tocó zafarrancho de combate; y
como-la retaguardia del "Morro" no estuviese defendida, semandó la primera compañía á órdenes de
su capitán, D. Cleto Ma.rtínez, á los parapetos de
"Cerro Gordo", y el resto de la gente se distribuyó
dotando las tres piezas de artillería y cubriendo'
las trincheras de retagtiardia, pues los buques enemigos estaban á muy larga distancia, 10 que hacía
esperar no se hiciese uso de la ar tilleria de la cortina. Como la claridad aún dudosa, no permitía
distinguir claramente los objetos á la distancia de
las baterías del Este, no fué posible romper los
fuegos de artillería sobre ese punto hasta que se
observó, que desde su recinto
inmediaciones se
hacía fuego sobre nosotros: rompimos entonces los
fuegos, primero á bomba y después á metralla, sobre la gente que descendía y circundaba esa ciudadela, al mismo tiempo que se hacía también un nutrido fuego de fusilería. En estas circunstancias, se
vieron subir por las faldas del "Morro",
dos batallones nuestros que venían desde las baterías del
Norte, á la vez que Ud. replegaba, ·para hacer fuego sobre "Cerro Gordo", á todas las gentes que
venían en retirada de las baterías
del Este; pero
.
é
-
29 -
como aquellas, fatigadas por la larga marcha que
hacían al trote y por la pendiente de la subida, no
podían venir oportunamente á la cima del cerro, á
pesar del empeno que ponían, instados por sus valientes jefes, que hacían esfuerzos inauditos para
conseguirlo, lograron solo hacer subir, cada una
de ellas, medio batallón de la derecha, mandados:
el de "Iquique", por ·sucomandante el Teniente Coronel D. Roque Saenz Peña, y el de '<T'arapacá.",
por su comandante el Teniente Coronel D, Ramón
Zava1a; los medios batallones de la izquierda no
hicieron probablemente su ascención, porque fueron flanqueados y cortados por el enemigo, que
avanzaba por el Este y dominaba el "Cerro Gordo." Los medios batallones de la derecha, unidos
á la tropa que se replegaba, compuesta de algunos
grupos respectivamente mandados por el Teniente
Coronel D. Ricardo O'Donovan, el Sarjento Mayor.
D. Armando Blondel, idem D. Jerónimo Salamanca, Capitán D. C1eto Martínez, y otros que no recuerdo, sostuvieron los fuegos protejidos por la
gente del " lVIarra " que cubría los parapetos y los
cañones de ese sitio, hasta que, arrollados por el
número, se replegaron á las trincheras en donde se
hizo una tenaz resistencia, de la que resultó muerto el valeroso comandante Zavala.
Como la resistencia se hacía imposible, porque
nuestra tropa, así como la de los demás cuerpos
que tenían "Chassepot",
estaban desarmados,
pues los rifles se habían inutilizado á consecuencia
de la debilidad del percutor, producida por el uso
del espiral; y por otra parte, como la artillería era
ineficaz por la corta distancia é inclinación del terreno que ocupaba el enemigo, ordenó el señor Capitán de Navío D. Juan G. Moore, que se reventaran los cañones y que la tropa hiciera fuego en retirada, replegándose hacia el.recinto de la batería.
En consecuencia, se reventó el cañón de "V orus' ,
que estaba situado en la parte superior del polvorín; no pudiendo hacerse 10 mismo con los otros;
porque sus dotaciones, que cubrían los trincheras,
estaban diezmadas, hallándose el condestable y
~ 30los cabos de cañón heridos unos y muertos otros.
Mientras tanto, la tropa que tenía su rifle en estado de servicio, seguía haciendo fuego, hasta que los
enemigos invadieron el recinto haciendo descargas
sobrelospocos que quedábamosallí; en esta situación llegaron á la batería, el señor Coronel D. Francisco Bolognesi,] efe de la Plaza, Coronel D. Alfonso
Ugarte, Ud., el Teniente Coronel D. Roque Saenz
Peña, que venía herido, el Sarjerrto Mayor D. Armando Blondel y otros que no recuerdo; y como
era inútil toda resistencia, ordenó el señor Comandante General que se suspendieran los fuegos, 10
que no pudiendo conseguirse de viva voz, el señor
Coronel Ugarte fué personalmente á ordenarlo {t
los que disparaban situados al otro lado del cuartel, en donde dicho jefe fué muerto, Al mismo tiempo el que suscribe, por orden del señor Capitán de
Navío comandante de esta batería, ordenó al capitán D. Daniel Nieto que reventara todos los canones de la batería, y como no se encontraban los cabos de cañón, dicho capitán personalmente, logró
atorar el "Vavasseur", por no poderse reventar á.
consecuencia de haberse introducido la bomba explosiva sin mecha, y cargó convenientemente uno
de los "Parrott' '; mas, como estábamos dominados por el enemigo, no pudo continuar esta faena
y se replegó hacia el asta de bandera con la poca
gente que tenía y el Sargento Mayor Blondel, en
donde murió este jefe.
A la vez que tenían lugar estos acontecimientos, las tropas enemigas disparaban sus armas sobre nosotros, y encontrándonos reunidos los seúores Coronel Bolognesi, Capitán de Navío Moore,
Teniente Coronel Saenz Peña, Ud., el que suscribe
y algunos oficiales de esta batería, vinieron aquellos sohre nosotros y, á pesar de haberse suspendido los fuegos por nuestra parte, nos hicieron descargas de las que resultaron muertos el señor Coronel Comandante General de la Plaza D. Francisco Bolognesi y señor Capitán de Navío D. Juan G.
Moore, habiendo salvado los demás por la presencia de oficiales que nos hicieron prisioneros. En es-
- 31. ta situación se oyó una explosión producida por el
cañón "Parrott" que reventaba en ese momento,
cuando ya los enemigos habían arriado nuestro
pabellón é izado en su lugar una banderola chilena;
esta operación se practicó mucho después de ser el
enemigo dueno de la batería, pues por algún tiempo permaneció izada tiuestra enseña nacional, flameando en su asta, á la vez que la chilena se hallaba colocada sobre el parapeto de la cortina.
Al relacionar los hechos que anteceden, me es
satisfactorio hacer presente á D., que cumpliendo
con los deberes de peruanos y de militares, hemos
defendido palmo á palmo y hasta su límite con el
mar, el terreno cuva guarda y defensa nos estaba
encomendada; y que hemos sido vencidos por el
número de tropa y por la superioridad de elementos.
Apesar de que á D. le consta, creo no deber
omitir el decirle que de toda la fuerza que entró en
combate, defendiendo las baterías, solo cayeron
prisioneros sobre el "Morro", ocho jefes, veinte y
seis oficiales y ciento sesenta y dos individuos de
tropa de todos los cuerpos combatientes.
De la dotación de esta batería, murieron además del comandante Moore, el capitán D. Cleto
Martínez, teniente D. Tomás Otoya, sub-teniente
D. Francisco Alláu ; también supongo muerto al
capitán D. Adolfo King, que estaba herido, cuyo
paradero no he podido saber á ·pesar de las muchas diligencias que al efecto se han hecho. Hay heridos: teniente 1." graduado D. Miguel Espinosa,
teniente D. Emilio de los Ríos, id. D. Torihio Trellez,
id. D. Abelardo Calderoni, Francisco de Paula Ramírez (levemente) y el paisano voluntario D. Gustavo Monteri. De la gente no obstante que hemos
tenido muchos muertos y heridos, no puedo precisar el nombre y número de todos, por la imposibilidad de averiguarlo en mi condición de prisionero,
y me reservo hacerlo, cuando pueda reunir los datos necesarios, así como la lista de los individuos
de tropa prisioneros.
o
~. 32
Adjunto una relación de los jefes y oficiales
de esta batería, que han asistido á esta jornada,
con especificación de su condición actual.
.
.
DiO!í> guarde á U. S. T. C.
M.1.
Baterías
RELACION
ESPINOZA.
del Morro.
DE LOS JEFES y OFICIALES QUE ASISTIERON Á LA BA-
TALLA DEL DÍA. 7 DEL PRESENTE
Y CONDICIÓN EN QUE_SE EN
CUENTRAN HOY.
Capitán
Id.
Id.
Id.
Teniente
de
de
de
de
Navío
Corbeta'
Artillería
G. N.
1. de Artille·
ría de Marina
Capitán de G. N.
Id. de Id.
Teniente 1.0 graduado
Id. de Id.
Id. de Id.
Id. de Id.
Id. de Id.
Id. de Id.
D. Juan G. Moore
- Manuel 1. Espinoza
- Cleto Martínez
- Adolfo King
Muerto
Prísionero
Muerto
Se ignora
-
Prisionero
Daniel Nieto
Juan García yZegarra
Ricardo S. Pimentel
Miguel Espinoza
Guillermo E. Gamboni
Pedro P. Portillo
Tomás G. Otoya
Lorenzo del Carpio
Francisco P. Ramírez
Id.
Id.
Herido
Prisionero
Id.
Muerto
Prisionero
Herido levemente
Id. de Id.
- Manuel F. Romero
Prisionero
Id. de Id.
~ Emilio de los Ríos
Herido
Id. de Id.
- Manuel A. Díaz
Prisiouero :
Id. de Id.
- Toribio Trelles
Hei ido
Id. de. Id.
- Juan W. Prieto
Prisionero .
Id.. de Id.
- Alberto Calderoni
Herido
Teniente 2.0 graduado - Manuel Gómez Cara.vedo Prisionero
Sub-Teniente de G. N. - Manuel A del Pozo
Id.
Id.
de Id.
- Francisco Alláu
Muerto
Id.
de Id.
- Ruperto Ordenes
Prisionero
Id.·
de Id.
- José G. Malina
Id.
Id.
de Id.
- Manuel A. Portocarrero
Id.
Id.
de Id.
-.Emi1io Brito Alarco
Id.
Agregado
- Gustavo Montervi
Herido
Arica, Junio 7 de 1880.
DANIEL NIE'ro.
- 337'.' División. - Parte del Coronel D. Mar<celinoVarela
Tacna, Agosto 10 de 1880.
Señor Secretario
Guerra.
de Estado
en el Despacho de
s. S.
Por muerte del benemérito señor Coronel, Comandante General de la 7.adívisión del primerejército del Sur, D. José Joaquín Inclan, y ya algo restablecido de mis heridas, me apresuro á dirigir á
USo el presente oficio, á fin de que llegue por su digno órgano á conocimiento de S. E. el]efe Supremo
de la República, dando cuenta de los sucesos ocurridos en la acción de guerra que tuvo lugar en el
puerto de Arica, el 7 de Junio último, en cuanto á
lo que tiene relación con las fortificaci:nes del Este,
hecho pr'inc]. al de los acontecimientos; sintiendo
sobre manera no haberlo verificado antes par el
mal estado de mi salud.
A las 7 p. m. d-l día 6, ocupó la división estas
posiciones que par su turno en el servicio le correspondían; situáne1::se en el primer fuerte los batallones "Granaderos de Tacna" y "Cazadores de
Piérola, haciendo un total de 420 hombres mas ó
menos entre ambos cuerpos; y en el segundo el de
"Arresano"s de Tacna." que yo comandaba, con una
fuerza disponible de 387.
Media hora despues fuimosllamados porel Jefe
de la Plaza señor Coronel D. Francisco Bolognesi,
los señores Comandantes Generales de división y
baterías, primeros Jefes de cuerpo, el Comandante
del monitor "1\1ancb-Capac", el Jefe del Detall de
la Plaza y los de las divisiones. Constituidos en
. junta de guerra, el] efe de la Plaza nos hizo saber
que el ingeniero D. Teodoro Elmore, que. en días
anteriores hahía sido hecho prisionero en ChacalIuta al cumplir su comisión y que en ese momento
se encontraba presente, hahía venido cama parla. .
mentado, mandado par el jefe superior de las fuer-
- 34zas dispuestas para el ataque. Entonces el expresado señor Elmore nos manifestó en pocas palabras el objeto de su comisión, que no era otro (reasumiendo), "que en vista de 10 estéril de nuestra
resistencia, . se nos aconsejaba la rendición." Después de una lijera discusión, se acordó contestar al
señor Elmore, que no teniendo carácter oficialninguno, no era posible atender á nada de 10 que propusiese; pero que estábamos dispuestos á recibir
un parlamentario oficial, suficientemente autorizado y que hiciese proposiciones que estuviesen de
acuerdo con el honor militar y las leyes de la guerra, con 10 que concluyó el acto, despidiéndose al
señor Elm ore y c1irigienelonos cada uno á nuestros
puestos.
A las 3 a. m. me dirigí al primer fuerte, y como
jefe de la línea en dícha noche, ordené al seiror Coronel D,Justo Arias y Aragüez, primer jefe de "Granaderos" y al Teniente Coronel D. Francisco Cornejo del de "Cazadores de Piérola", que á las cuatro moviesen sus cuerpos y los colocasen en los parapetos, permaneciendo de pié con arma en mano,
hasta que amaneciera. En ese instante llegó allí
el señor Coronel Comandante General de la divi, sión y puse en su conocimiento la orden que acababa de dar, la que habiendo sido aprobada por dicho
jefe, regresé árni puesto á tomar la misma medida.
En efecto, á la hora indicada moví el ba,tallón Y lo
coloqué con arreglo á la anterior disposición, á la
que se debió que no hubiésemos sido sorprendidos;
pues sin embargo de que lo dicho al señor Elmore
hacía esperar la venida de un nuevo parlamentario, creí necesario tomar una medida de precaución
contra cualquier asalto eleparte del enemigo.
La noche era completamente oscura, al extremo que ni las avanzadas que se habían colocado á
vanguardia de nuestra línea de tortificación, pudieron notar la aproximación del enemigo. En estos
mon1.entos vino á la bateria el señor Comandante
General y encontró todo dispuesto para resistir el
ataque. A las cinco mas ó menos, cuando principiaban los primeros albores de la mañana, notamos
.
.
- 35en medio de una densa niebla una línea negra que
apenas se distinguía, la que examinada con prolijidad, conocimos que era una fuerza enemiga formada en batalla la que por su extensión calculamos
que pasaba de 1,000 hombres y que se encontraba
á una distancia de. 700 á 800 metros, y por consiguiente al-alcance de mi armamento Peabody.
Inmediatamente solicité el permiso del señor
Comandante General para mandar romper los fuegos, 10 que se verificó siendo contestado en el aeta
C011 un nutrido fuego de parte del enemigo, sosteniéndose por ambas partes con el mayor encarnizamiento durante media hora. El enemigo principió á avanzar C011 su triple fuerza á paso de carga
por nuestro frente, á la vez que otra fuerza considerable trepaba una colina que dominaba por completo nuestro flanco derecho á distancia de 200
metros mas ó menos, amenazando por este movimiento estrecharnos en un círculo de fuego. Entonces, ya disminuida considerablemente la fuerza de
mi mando, pues quedaba reducida á 100 hombres
escasos, fué preciso abandonar la posición y em-prender la retirada sobre el Morro, con arreglo á
órdenes anticipadas que teníamos del Jefe de la
Plaza, para que de cualquier punto que sufriéramos un contraste, 110S replegásemos sobre esa batería, corno el último baluarte de nuestra defensa ..
Fué en estos momentos, en los que el señor Coronel Inclan y algunos otros oficiales encontraron
una gloriosa muerte. Emprendimos pues la retirada, mas en el largo trayecto de más de milla y
. media que tuvimos que recorrer, seguidos de cerca
por el enemigo, fueron casi diezmados estos restos.
En estas circunstancias, el primer fuerte resistía heroicamente; cuando de improviso vimos á 10
lejos la explQsión del polvorín, quedando sepultadosen una nube de fuego y humo casi la totalidad
de los combatientes y muchos de los enemigos, que
engolfados con la idea de su próxima victoria, se
habían lanzado sobre la batería. Según informes
que he recibido, el polvorín fué incendiado por un
joven de 16 años llamado Alfredo Maldonado. Allí
- 36perecieron los denodarlos jefes, Coronel D. .justo
Arias y Aragii.ez, el Teniente Coronel D. Francisco
Cornejo, los Sarjentos Mayores D. Felipe Antonio
Zela, y muchos capitanes y subalternos,
cuyos
nombres consigno de algunos de ellos en1a relación
adjunta.
. Al llegar á "las inmediaciones de los primeros
parapetos del M arra, encontramos parte del batallón "Iquique" que con su denodado jefe, Teniente
Coronel D. Roque Saenz Peña, trepaba la rápida
pendiente, muy fatigada la 'tropa; hasta tomar posesión de una pequeña altura, alIado Sur, en momentos en que el enemigo con fuerzas considerables coronaba la eminencia denominada
"Cerro
Gordo", dominando á 300 metros la posición ocupada por el "Iquique", rompiéndose los fuegos por
ambas 'partes.
Una vez. apoderados con mi escasa fuerza de
uno de los primeros parapetos
mandé también
romper el fuego, protejiendo en cuanto me era po. sible al pequeno grupo del "Iquique",
cuando caí
súbitamente bandeado por una bala. Levantado
con alguna dificultad me retiré sobre la batería en
busca de la Ambulancia, quedando en el puesto mi
2: y 3.° Teniente Coronel D. Manuel Francisco
Chocano y Sargento
Mayor D. Luis Armando
B10nde1, el de igual clase, perteneciente al detall de
la división D. José Pozo, el Capitán graduado D.
Luis Benavides, Ayudante del señor Comandante
General, los Capitanes D. Juan Cáceres, Ayudante
mayor del cuerpo de mi mando, el de artillería D.
Felipe Julio Rospigliosi, y algunos otros señores
oficiales.
.
No habiendo encontrado á la Ambulancia en el
Morro, como 10 creía, y viendo que arrojaba mucha sangre, me dirigía al hospital acompañado de
los capitanes Cáceres y Rospigliosi, que me habían
seguido por el mal estado en que me encontraba;
más al llegar á la población hallamos casi todas
las calles adyacentes á dicho establecimiento ocupadas por el enemigo que hacía un fuego nutrido
en todas direcciones. Siendo imposible llegar al
!
- 37hospital por esta causa, me hice conducir
mi alo[amiento
donde diez minutos después fuí hecho pri•
sionero.
Tal vez fué en estos supremos instantes, cuan<1.0 tuvo lugar la sangrienta "hecatombe en la que
fueron víctimas de su ardor patriótico mis valientes compañeros de infortunio Bolognesi, Moore,
Ugarte, Zavala, O'Donovan, Blonde1 y otros ilustres peruanos, cuyo sacrificio recordará con lágrill1as la posteridad.
.
".'v.;;
Me es sumamente sensible no poder acompañar al presente oficio las relaciones nominales exactas de los muertos y heridos de la división; porque
en mi condición de herido y prisionero me ha sido
imposible tomar todos los datos á este respecto;
pero adjunto las de aquellos de que tengo perfecto
conocimiento y cuyos nombres recuerdo.
Esta es señor Secretario la fiel narración de este hecho de armas tan desgraciado como honroso
para la República.
Dios guarde á USo- S. S.
. J\1ARCELlNO V ARELA.
á
***
RELAcrON
NOMINAL DE LOS SEÑORES JEFES y OFICIALES MUERTOS EN EL COMBATE DE ARICA EL 7 DE JUNlO ÚLTIMO, PERTENECIENTE Á LA 7.a DIVISIÓN DEL PRIMER EJÉRCITO DEL SUR•
.
Coronel
Id. graduado
D. José Joaquín Inclán, Comante General.
- Justo Arias y Aragüez, Lcr.jefe de "Grana.
•
deros de Tacna."
Teniente Coronel - Francisco Cornejo Ler.jefe de "Cazadores
de Piérola."
Id.
- Ricardo O'Donovan, jefe del detall.
Sarjeuto Mayor
- Luis Armando Blondel.Ber, jefe de "Arte- .
Id.
Id.
Capitán
Id.
Id.
Id.
Id.
sanos de l'acna."
- Felipe Antonio Zela, 2.° jefe de "Granaderos de Tacna."
.
- Jenaro Visearra, 2." jefe de "Cazadores de
Piérola."
- Manuel B. Lara, "Artesanos de Tacua."
- Ordoncr Vargas, "GranaderosdeTacna."
- M. Espinoza,
id.
- M. Izusquiza,
id.
- Pedro Correa,
id.
- 38Teniente
Id.
Id.
Id.
Id.
Su b-teuiente
Id.
Id.
Id.
Id.
Id.
D.
_
_
_
_
_
_
_
_
_
-
Federico Basadre, "Artesanos Oh Tacna."
Vita 1i211"l-lpcerra, "Granaderos deTacna"
Esteban Gilés,
id.
Ric. rd o B rredo, "Cazadores de Piérola"
Guillermo Si\ntana,
id.
Armando Basadre, "Artesanos de T'acua"
Nestor Birne, . "Granaderos de Tacna:"
Ricardo Tclles Mora,
id.
Gil Lizardo Zeballos,
id. Aurclio Gomes García
id.
T ulio Berrios
id.
- Noé Picoaga,
Id.
Teniente Ayudante Mayor _ Arístides Sologuren
id.
id.
Tacna, Agosto 18 de 1880.
J'vlARCELINo
V ARELA.
Esta relación es incompleta, porque el jefe que la
suscribe no conocía el personal de la ..fícíalidad de los batallones "G¡-anaderos de Taena" y "Cazadores de Piérola.'
A mas de los muertos pertenecientes á la División, tengo
cono irniento del Sub-teniente de artillerta don Lizardo Pedraza del T nspector del Resguardo don Manuel Jersi y del Capitán
iridcfiui.Io don Manuel Moyano.
NOTA -
Batallón 'fArtesanos de Tacna" No. 29
R. P.
Comandancia del
',
Batalfón s" A¡'tesa:nos,dc.Tacna" .No.~29
Arica, Junio 8 de 1880.
Señor Teniente Coronel Jefe del Detal de la Jefa tura Superior de la plaza.
Tengo el honor de poner en conocimiento de
U. que encontrándose elBatallón que se expresa en
la primera Batería del Este el 6 del corriente de
resguardo de dicha Batería, á las 51i2 a. m. del
día siguiente, se dió aviso que una gran parte del
eiército invasor chileno, se encontraba á sus inmediaciones, inmediatamente que fueron avistados
se rompieron los fuegos: el medio Batallón de la
derecha que se hallaba entre los parapetos de la
expresada Batería, contestó con el mayor entusiasmo á los fuegos del enemigo, y el otro medio
•
- 39batallón salió á situarse á la derecha paracontener la fuerza enemiga que avanzaba por allí; de
esta manera se trabó un reñido combate, hasta
que no habiendo sido posible continuar resistiéndonos, por que siendo el número del enemigo cuatro veces mayor, fué rodeada la Batería, de donde
tuvimos que retirarnos, haciendo fuego en retirada
hasta el Morro, en donde combatimos hasta las 9
menos un minuto a. m., hora en que fué tomado
el morro por los enemigos; haré notar á U. que al
retirarnos de la batería tué muerto en ella el senor
Coronel Comandante General de la División don
José Joaquín Inclán, y herido en el hombro derecho
el señor Corone11er. •Tefe del cuerpo, don Ma.rceli•
no Varela, y que además fueron muertos y hendas
el Jefe y oficiales que constan de la relaeión adjunta.
Al terminar el presente parte, seame permitido
recomendar á U. para que á su vez lo haga ante el
Supremo Gobierno, á los señores jefes, oficiales é
individuos de tropa, que se puede decir que milagrosamente han salvado, pues todos ellos á disputa pelearon hasta donde les fué posible, tomando
para ello los rifles de los soldados que morían en
el combate; muy largo sería repetir á U. el heróico
comportamiento
que han .observado en un combate tan desigual por nuestra parte.
Dios guarde á U.-El 2."Jefe.
MANUEL
F.
CHOCANO.
Parte ele la 8.a División
Comandancia Gcnel'al de la sa. Divisl6n
Arica Junio 7 de 1880.
Señor Teniente Coronel Jefe del Detall de la F laza
y Baterías de Arica.
S. T. C.
Cumplo con el deber de dar parte á USo del hecho de armas que tuvo lugar en el día de la fecha,
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y de la actitud asumida por el Batallón de mi
mando y la División á que pertenece.
La noche del 6 del corriente, me encontraba
con mi Cuerpo sirviendo de avanzada y de defensa
á las Baterías del Norte, distribuidas las Compañías en los distintos parapetos que llegan hasta la
punta denominada "El Chinchorro".
La noche pasó sin otra novedad que una descarga hecha por la avanzada que tenía á unos doscientos metros del parapeto en que Iiabía situado
las Cornpanías 1." y 2.', siendo dirigida dicha descarga sobre una pequeña partida de caballería enemiga, que se había ya retirado cuando me trasladé á la avanzada.
.
Este incidente me hizo redoblar la vigilancia
hasta el momento en que vino personalmente el
señor Cornarrte General de la División, Coronel
don Alfonso Ugarte, y me dió orden de moverme
inmediatamente y situar mi fuerza en los parapetos que ocupan la prolongación Este del Morro.
Retiradas todas mis avanzadas é incorporadas las Compañías que se hallaban situadas en
los otros parapetos, apenas formado el Batallón
sentí un disparo de cañón en las Baterías del Este
que fué seguido de un nutrido fuego de fusilería; el
combate ha ora comenzado siendo las 5 1/4 a. m.,
pudiendo todavía á favor de la oscuridad distinguir en el horizonte el fogonazo de las descargas
de fusilerIa.
Avaneé con mi Batallón á paso de trote desde
el Chinchorro, y después de cruzar esta larga distancia, emprendí con gran esfuerzo de mi tropa ya
iatigada, el ascenso del cerro que en ese momento
se encontraba bajo los fuegos' enemigos; contraje
mi acción al medio Batallón de la derecha, para
impedir que contestase los fuegos,- encargando de
la izquierda á mis dos Jefes subalternos, por que
era imposible recorrer todo el flanco del Batallón
que marchaba en hileras por el estrecho desfiladero del Morro.
r:",' El 'medio Batallón
de la derecha subió 'en efecto sincorrtest.ar un tiro y soportando :e1nutrido
- 41fuego del enemigo; á la cabeza de él coroné el cerro
en el momento mismo en que el señor Comandante
Zavala hacía otro tanto por mi izquierda con medio Batallón "Tarapacá."
El enemigo no me dió tiempo de ocupar los
parapetos, pues se hallaba tan próximo y sus fuegos eran tan vivos, que tuve que contestarlos desde el primer momento en que mi medio Batallón·
escaló el cerro.
Allí se combatió con toda decisión; los fuegos
fueron sostenidos por el medio Batallón "Tarapacá", por la derecha del "Iquique''-, y por restos
de "Granaderos" y "Artesanos de Tacna".
Ya nuestras bajas hacían difícil la resistencia;
la izquierda del "Iquique" que mandé buscar, se
había ocupado de contestar los fuegos enemigos y
había sido cortada por éste en la falda misma del
cerro, la mitad del "Tarapacá"
había corrido
igual suerte, y el enemigo estaba á veinte pasos.
La oficialidad y tropa del medio Batallón que
logré subir estaba ya diezmada; los tres Jefes subalternos no pudieron seguirme, y yo me hallaba
herido desde el principio del combate, de un balazo
en el brazo derecho que me permitió sin embargo
mantenerme á caballo hasta los últimos momentos en que tuve que abandonarlo por serrne ya imposible darle dirección; fué entonces que nos reunimos con USo los señores Coroneles don Francisco
Bolognesi y don Guillermo Moore, cayendo á nuestro lado estos dignos Jefes atravesados por el plomo de una fuerte descarga.
..
Habían ya caído los señores Coroneles Ugarte
y Bustamante, como también el Teniente Coronel
.don Ramón Zavala, quedando el que firma como
Comandante General de la División 8."
Es en este carácter que me 10 da la fatalidad y
un encadenamiento de desgracias terribles, que
elevo á USo el presente' parte con el del Batallón
"Tarapacá", ofreciendo elevar oportunamente la
relación de las bajas habidas en la División .
. Dios guarde á USoS. T. C.·
ROQUE SAENZ PEÑA.
- 42Comandancia
del Batallón "Tarapacá"
No. 23
Arica, Junio 7 de 1880.
Señor Teniente Coronel 1er. Jefe del Batallón
"Iquique" y Comandante General de la 8.División.
S. T. C.
Por muerte del 1.° y 2.° Jefe del expresado, tengo el honor de dirijirme á USo con el fin de partidparle todo 10 ocurrido en el combate que tuvo lugar en la manana de hoy.
Situados como nos eñcontrábamos ayer tarde
en la línea de defensa comprendida entre la derecha
del Batallón "Iquique", y el Panteoncito, recibimos orden del señor Coronel Comandante General
de la División, á las cinco más ó menos de la mañana, de retirarnos de este puesto y que pasáramos á ocupar el Morro; al efecto emprendimos
nuestra marcha cuando sentimos la detonación de
dos cañonazos disparados de las Baterías del Este,
y segundos despues, un nutrido fuego de fusilería;
inmediatamente ordenó el1er. Jefe del cuerpo la
marcha al trote. En el trayecto encontramos al
señor Teniente Coronel Jefe del Detall de la Plaza
que nos ordenó ocupar "Cerro Gordo"; nuestra
marcha se hizo entonces más veloz y momentos
después rompieron los fuegos sobre el enemigo que
en gran número ocupaba ya las alturas, no obstante avanzamos cuanto fué posible manteniendo
un reñidísimo combate que dió por resultado un
'crecido número de bajas de nuestra parte yIa
muerte del 1.0y 2.°Jefe.
En este moínento recibió el que suscribe orden,
del señor Coronel Jefe de la Plaza de replegar la
fuerza sobre los parapetos del Morro, donde se
continuó el combate hasta las 9 a. m. inás á menos
en que fué tomado dicho fuerte por la fuerza invasora.
.
Por la relación adjunta se impondrá USo de
los
señores Jefes y Oficiales muertos, heridos •y pri•
sroneros en estajornada.
,
-- 43 Cumplo con un deber de justicia haciendo presente á USo el digno y valeroso comportamiento
de los señores 1. y 2."Jefes del Cuerpo, cuya muerte lamentaremos siempre, lo mismo que la decisión
y entusiasmo de los Oficiales y tropa.
Lo que comunico á USo en cumplimiento de mi
deber.
Dios guarde á USo
0
GERóNIMO SALAMANCA.
COMANDANCIAGENERAL DE LA 8." DIVISIÓN
Comandante
General, Coronc1 D. Alfonso Ugarte, murió.
Jefe del Detall, Coronel grd"
-- Mariano E. Bustamante
id.
Ayudante-Teniente
-- José Lino Barbachan,
prisionero.
Amanuense-Subteniente
-- Manuel A. Chamarra.
(no
asistió por estar en Tacna
en comisión desde el 24 del
pasado.)
Agregado-Capitán
-- Daniel Corzo, herido y prisionero.
Arica, Junio 10 de 1880.
J OS~ LINO BARBACHAN.
--1er. EJERCITO DE OPERACIONES
DEL SUR
Batallón "Tarapacá" No. 23.
RELACION NOMINALDE LOSSEÑORESJEFES y OFICIALESQUESE
• ENCUENTRANPRISIONEROSEN ESTA PLAZA,PERTENECIENTES
AL EXPRESADO.
Sargento Mayor
Capitán
Id.
Id.
Id.
Capitán graduado
Id.
Teniente
Id.
Id.
Id.
D. Gerónimo Salamanca, Ser. jefe.
- Antonio Lobato.
-- Eduardo Velarde,
-- Benigno Vargas.
-- José Chocano.
-- Evaristo Peñaranda.
-- Evaristo Candiote.
- Juan Garland, herido.
-- Marcos Górnez,
- Osear Navarro.
-- Manuc1 LIaza y Abrille.
-44D. Domingo Martinez.
- Julio C. Morrtalvun
Sub-teniente
Id.
Id.
Id.
- Chisthiam Henke.
- Gaspar
Loayza.
RELACION
NOMINALDE LOS SENORES JEFES y OFICIALES QUE
HAN MUERTO EN EL COMBATE QUE TUVO LUGAR EN ESTA
PLAZA EL 7 DEL PRESEN'I'E.
•
Teniente Coronel
Teniente Corone! grad"
Teniente
Id.
Id.
Snb-teniente
Id.
Id.
Id.
D. Parnón A. Zavala, ler. jefe.
- Benigno Cornejo, 2." id.
- Federico Berastain, Ayudante
- Sim6n Grados.
- Pedro Helrnes.
- Alejandro Moripor t.
- Eleodoro Zevallos.
- Aníbal Chavez.
- Ram6n B. Osario.
mayor
Arica junio 10 de 1880.
GER6NIMO SALA~IANCA,
Ba ta ta.Hón "Iquique" No. 33.
RELACION DE LOS SEÑORESJEFES y OFICIALES MUERTOS, HERIDOSY PRISIONEROS,TO¡\IADOSEN ARICA, EN EL COMBATEDEL
7 DE JUNIO DE 1880.
Muertos.
Sargento
Mayor
Teniente
Id.
Id.
Sub-teniente
Id.
Id.
D. Isidoro Salazar.
Vicente Almontc.
Enrique Hernandez.
Manuel S. Ara.
Elías Loayza.
Vicente Rodó.
Francisco Rodrígucz.
Heridos.
Teniente
Coronel
D. Roque Saenz Peña, 1er. jefe del cuerpo
• •
pnSlOnero.
- David Cuellar.
- José de la A. Nacarino.
Capitán
Teniente
Prisioneros.
Sargento
Mayor
Id.
Capitán
D. Lorenzo P. Infantas,
Manuel M. Zevallos,
- Manuel Burgos.
3er. jefe.
4.
id.
y
Capitán
Id.
Id.
Id.
Capitán graduado
Teniente
Id.
Id.
Id.
Id.
Su b-tenientc
Id.
Id.
Id.
Iel.
Iel.
Iel.
re,
Id.
Id.
Id.
45 ,-
D. Victor V. Oca.rnpo.
Teodoro Robellat.
- Federico F. Helena.
- David Eyzaguirre.
- Guillermo Bello.
Eduardo Vera.
Manuel Aduvire.
Ernesto Murga Aduvire.
Abelino Leon.
- Aquilino Soto ..
Cipriano Pinto.
Manuel Ra.mírez,
- Germán Zevallos.
- Juan de la C. Maldonado.
Ricardo Zavala.
Federico Flores.
Emilio Ro bert,
Federico G. Castilla.
Manuel Lagos.
Augusto Smith.
Francisco de P. Veliz.
Arico, Junio 10 de 1880.
LORENZOINFANTAS.
RELACION DE LOSSEÑORESJEl<'ESy OFICIALESDE LASBA1'ERíAS
DEL ESTE, QUE COMBAl'IERONEL 7 DEL PRESENTEMES,CON
EXPRESIÓNDE PRISIONEROS,HERIDOSY MUERTOS.
Tenicnte Coronel1er. jefe D. Medardo Cornejo, prisionero.
Sarjento Mayor
2.° iel. - Ferrnín S. Nacarino. muerto.
Id.
3er. iel. - Ismael Meza. herido.
Capitán Ayudante Mayor - Felipe S. Rospigliosi, prisionero.
Alférez Sub-ayudante
.- Lizardo Pedraja, muerto.
Capitán
- Juan P. Ramírez, muerto.
Teniente 2.
Nernecio Bonhome, muerto.
Id.
. Antonio Moreno, muerto.
Id.
Manuel Seroj,
id.
Alférez
Adolfo Chur1iza, prisionero.
Id.
Francisco Ga virid,
id.
Id,
Eusebio Napurí, muerto.
Id,
Enrique Zapata,
id.
Id.
- José Belaunde,
id.
Id.
- Manuel Moyana,
id.
Arica, j unio 10' ele 1880.
·M. CORNEJO.
Q
-
- 46Parte del Comandante del "Manco Capac"
Al ancla, Arica, Junio 6 de 1880.
Comandancia
del Moni,tor "Maneo.Capac"
Señor Coronel Jefe de la Plaza.
S. C.
Tengo el honor de poner en conocimiento de
USo que habiendo notado á h. 30 m.p. m. del día
de hoy, que después de rotos los fuegos en tierra
por parte del enemigo sobre los fuertes de la Plaza,
el trasporte "Loa" artillado con un cañón de gran
alcance, se ponía también en movimiento á la vez
que el resto de los buques bloqueadores en número
de seis, avivaban sus fuegos, mandé activar inmediatamente las de este monitor y poniéndole en
son de combate, me preparé á zarpar del fondeadero. Hízele así, en efecto, á 2 h. 45 m., cuando el
"Loa" hacía sus primeros disparos sobre la playa.
El "Cochrane" después de haberse puesto en
movimiento seguido de las corbetas "Magallanes"
y "Covadonga" que proseguían al trasporte en sus
disparos, se mantuvo aguantando
en el centro de
la bahía y como á 2,500 m. de este monitor.
Franco éste de la defensa que lo rodea; goberné sobre el enemigo á fin de acortar la distancia:
romRiendo los fuegos sobre el "Cochrane", que
fueron contestados sucesivamente por aquel, sin
poder seguir haciendo los disparos de una hora de
cañoneo más ó menos, por la distancia que nos separaba, pues se alejó á toda fuerza de máquina
de N. á S.
.
No tardaron en retirarse los demás buques enemigos, habiendo recibido algunos certeros disparos del "Morro" que produjeron al parecer un incendio en el "Cochrane."
Durante la acción, no ha ocurrido novedad alguna en el buque de mi mando, complaciéndome
en asegurar á USo que el entusiasmo de los tripulantes del monitor, ha sido digno de la noble actitud de la Plaza. A las 4 h. p. m. volví á ocupar
- 47mi primitivo fondeadero; todo 10 que .participo á
USo conforme á ordenanza.
Dios guarde á USo
J OSE
SANCHEZ
LAGOMARSINO.
Comandancia dcl MOllitOl' "Manco·Capac"
Abordo del "Itata", Arica, Junio 7 de 1880 .
•
•
Señor Jefe de la Plaza.
Tengo el honor de poner en conocimiento de
USolos acontecimientos tenidos lugar á bordo del
Monitor de mi mando, con motivo del ataque á
esta plaza en la madrugada de hoy por las fuerzas
_chilenas. A las 6 h. a. m. me pa.rticipó el oficial de
guardia que por las baterías del Este se sentía un
tiro de cañón, proseguido después por otrbsy111uy
en luego por fusilería: acto contínuo dispuse el Monitor en son de combate y zarpé del fondeadero,
pues noté que varios de los buques bloqueadores
venían de afuera á la bahía. Ya de día me apercibí
que fuerzas nuestras abandonaban
las Baterías
del Norte para reforzar á las que ya por "Cerro
Chuño" y "Cerro Gordo" venían del Norte haciendo fuego en retirada; y que al mismo tiempo
un cuerpo de fuerzas enemigas atacaban por canto
de playa las Baterías de "San José".' Comprendiendo que este punto necesitaba protección, goberné en esa dirección haciendo algunos disparos,
hasta haher hecho dispersas esas fuerzas.
Desqués de esto me apercibí que se hacía general el combate en el "Morro", viendo volar á la
vez los polvorines de las Baterías del Norte: me
disponía entonces á gohernar al Sur, á donde fuera preciso prestar protección, cuando algunos tiros al parecer de cañón y nutrido fuego de fusilería
del "lVlorro" sohre el Monitor, así como el ver reemplazada la bandera peruana con la chilena, me
hicieron comprender que la plaza de Arica en su
último haluarte estaba perdida.
- 48Colocado en tan "excepcioual situación, puse
proa á los buques enemigos que aguantados afuera de! puerto no parecían acercarse apesar de
nuestra actividad. No obstante continué afuera,
disponiendo que en oportunidad se rompiesen válvulas, tubos, etc
V se alistase la cámara de dinamita que se tenía preparada en la sección de
proa manteniendo á toda la gente en sus puestos
de combate á fin de que si el "Cochrane" nos atacaba en combinación con los otros buques hubiera
lugar de defender el Monitor hasta volarlo 6 hundirlo antes de que cayese en poder del enemigo:
preocupación fundada atendiendo á su imposible
condición para operar á distancia y por la falta
de calderas casi inutilizadas á consecuencia del
trabajo continuo de los últimos días de! aseclio de
la plaza, así como también por razón del combate
del día anterior.
Efectivamente, resuelta la sumersión del Monitor, las instrucciones dadas al ler. Ingeniero
D. Thomas Colquhovm y demás ingenieros como
también al Guardia Marina Leguía; la misión dada para la Cámara de proa al Teniente Saldías y
Guardia Marina Vidaurre y las demás en sus
puestos á los Tenientes Smith, Asin y Alférezde
Fragata señor Bueno; como las encomendadas en
el sollado á los Tenientes Pizarro y Taboada y demás guardias marinas, fueron tan regularmente
cumplidas, tan enérgicamente llevadas á efecto
que nadie abandonó sus puestos de combate hasta
que e! agua hubo invadido la máquina, sollado,
cámaras y Santa Bárbara. En este estado ordené
la salvación de los tripulantes comenzando por la
guarnici6n en los botes y lanchas á vapor, tomando un oficial e! mando de cada bote. Concluida
que fué esta operación y no encontrando nadie más
eh cubierta, me embarqué en e! bote más inmediato.
No habían trascurrido aun cinco minutos,
cuando el "Manco Capac" que por tanto tiempo.
fué el respeto de Arica á pesar de su calamitoso estado, que tantos momentos de gloria tuvo ocasión
- 4.9-
de dar al País, volaba y se hundía con sus pabe-·
nones al asta y tope de su torre, fuera del puerto
y en el centro de la bahía, después de haber cumplido su misión y de haber visto sucumbir á Arica:
esta plaza que con tan noble y digna resolución
había resistido tantos días de asedio,
Mientras tanto, ordené á los oficiales de-la lancha torpedo "Alianza" que aprovechando de su
andar y poco blanco, forzasen el bloqueo llegando
á MolIendo 6 al Callao si era posible para aprovechar siquiera este importantisimo elemento.
Al salir por el Norte fué perseguida por el "Cochrane" y "Loa" que le hacían algunos disparos,
perdiéndose muy pronto. de vista. Entretanto con
los botes que conducían los tripulantes del "Manco Capac", nos dirijimos al vapor "Itata" á donde
fuimos recibidos como prisioneros.
En honor al patriotismo y á la justicia me parece llegada la ocasión de recomendar á la consideración del Gobierno y de la Nación, la moral y
austera conducta de la dotación que me obedece
durante la cruda campaña en que ni la desnudez
ni privaciones de todo género en las excepcionales
condiciones del Monitor, aminoró jamás su decisión y empeño por cumplir del mejor modo posible
el sagrado deber de defender la Patria.
Lo que comunico á USo conforme á Ordenanza.
Dios guarde á US.-S. J. de la P.
JasE SANCHEZ LAGOMARSINO.
RELAcrON
DE LOS SEÑORES JEFES Y OFICIALES DE LA COMAN, DANCIA GENERAL DE LA 7.a DIVISIÓN QUE SE HALLARON EN EL
COMBATE DEL 7 DEL PRESENTE.
Coronel, Comandante General, D.JoséJoaquínlnc1án,
muerto'
Teniente Coronel D. Ricardo O'Donovan, muerto.
Sarjento Mayor, agregado, D.] osé Pozo, prisionero en el Morro.
Capitán Ayudante, p. Luis Benavidcs,
id.
id.
Arica, Junio 10 de 1880.
Jod Pozo.
- 50 BRIGADADE ARTILLERÍADEL NORTE
Prisioneros.
D. Juan R. Ay1l6n.
Teniente Coronel
Sarjento Mayor
Manuel Martínez, herido.
Id.
graduado - Augusto C. Soto.
Id:
id.
Nicanor García Goytizolo.
Capitán
Manuel Masías.
Teniente
Mariano Salcedo.
Id.
- Andrés Medina.
Id.
F. ancisco Segura.
Id.
Luis Guensol1en.
Id.
Manuel Rivadcneira.
Id.
Enrique Cuadros.
Sub-teniente
- Gustavo Puente.
Id.
- Juan V. Ortiz.
Id.
- Samue1 Cesio,
Id.
- Baldornero P. de Zela.
Id.
- José Laguna.
Arica, Junio 12 de 1880.
MANUEL 1. MASfAS.
RELACION DE LOS SEÑORES]EFES y OFICIALESDEL BATALL6N
"GRANADEROSDE TACNA" NÚM.31 EN DEFENSADE LA 2." naTERfA DEL ESTE, EN EL COMBATEDEL DÍA7 DEL PRESENTE
EN ESTAPLAZA.
Coronel
Sajt. Mayor
Id. gradId.
Id.
Capitán
Id.
Id.
Teniente
Id.
D.
-
e:
Id.
Id.
Id.
Id.
Id.
Sub-teniente
Id.
Id.
Id:
, -
Id.
Id.
Id:
-
Justo A.'y Aragüez, ler.jefe muerto en la batería.
FelipeAntonioZela,
2." id. id.
id.
Tomás Chocano
3er. id. id.
id.
Miguel Espinoza
id.
id.
Juan' Isusquiza
id.
id.
Ordoner Vargas
id.
id.
Pedro Correa
id.
id.
Felipe S. Leon
id.
id.
Esteban Giles
id.
id.
Manuel Emilio Barreda, prisionero bajando el
Morro ..
Vitaliano Becerra,
muerto en la batéría.
Aristides Sologuren
herido
id.
Asencio DeRivera
muerto
id.
Mariano Benavides
id.
id.
Manuel Márquez
prisionero en el euartel.
Manuel Tellez
muerto en la batería.
Julio C. Berrios
id.
id.
Aureliano G. García
id.
id;
Arcadio Palza prisionero bajando la id.
Noé Picoaga
muertoenlaid.
Nestor Birne
íd.
id.
Ricardo Tellez Mora
id.
id.
Sub-:teniente
Id;
.Id.
Id,
D. Teobaldo Arias
Miguel Or tiz
prisionero
muerto
id.
id.
- Lizardo Zeballos
- Carlos Murph
Arica, Junio
enla batería
id.
id .
id.
10 de 1880.
M. EMILIO E. BARREDA.
NOTA - El Teniente
te, por haberse quedado
D; Pedro Cáceres no asistió al combaenfermo en e! hospital de estaPlaza,
RELACION NOMINALDE LOS SENORESJEFES y OFICIALES HERIDOS EN EL COMBATEDE ARICA EL DíA 7 DE JUNIO ÚLTIMO,
PERTENECIENTES Á LA 7." DIVISIÓNDEL lar EJÉRCITO DEL SUR;
Corone! graduado
Capitán
Id.
[d.
Tacna,
D. Marcelino
Varela, 1er. jefe de "Artesanos
de Tacna."
- O1egario Julio Rospigliosi
Id.
- Pedro J. Vidaurre
Id.
- Manuel QueJopaüa
Id.
Agosto
10 de 1880.
MARCELINO VARELA.
NOTA - El jefe que suscribe no tiene conocimiento
de los demás heridos por haberlos llevado inmediatamente
á Chile.
Parte de la Comandancia de la La:ncha Torpedo
"Alianza"
Abordo del "Itata", Arica, Junio 11 de 1880.
Señor Jefe de la Plaza:
S. C.
A consecuencia de los acontecimientos desarrollados en la madrugada del día 7 del presente mes,
en que el Ejército chileno atacó á nuestras fuerzas
y baterías de este puerto, recibí orden del Capitán
de Fragata Comandante del Monitor "Manco Capac" don José S. Lagomarsino, me pusiera en movimiento con la Lancha Torpedo "Alianza" de mi
cargo, la que estuvo lista á las 6 h. a. m., desde
cuya hora me concreté al auxilio y protección del
Monitor.
- ~2Como por instantes sucesivos se fué notando
nuestra pérdida en tierra, yen vista de nnestra derrota por completo á las 8 h. 20' a. m., estando el
Monitor "Manco-Capac" en movimiento y fuera
del fondeadero, note que su Comandante, oficialidad y demás tripulación, se embarcaban en sus
embarcaciones, separándose del Monitor, á cuyo
hecho presté mis auxilios remolcando algunos botes para sacarlos fuera del peligro; y una vez
. abandonado el Monitor, por momentos se veía
sumerjirse.Io que aconteció á las 8 h. 42 m. (a. m.)
En vista de la desaparición del Monitor y sin
esperanzas de nada, resolví de acuerdo con la oficialidad que dotaba la Lancha, y además con la
indicación del Comandante del "Manco-Capac",
zarpar con dirección al Callao, corriendo .corno era
~atural todas las emergencias de una peligrosa salida, por hacerlo á presencia de la' Escuadra Chilena bloqueadora, cuya salida hicimos á las 9 h.
[a. m.], con un fogonero más de la dotación que
solicité de los del Monitor, el cual se me dió. Desde
este momento fuimos perseguidos y atacados vivamente por el blindado "Cochrane" y Trasporte
de guerra "Loa" con toda clase de armas de guerra; el primero hasta casi el paralelo del Morro de
Sama, de donde regresé á este puerto á las 12 h.
[m.], y continuó el segundo atacándonos hasta
una milla al S del cabo Picatá donde baramos y
explosionamos la Lancha sobre rocas, por no poder continuar navegando, por haberse inundado
las paredes del cilindro que cubría la caldera [Serpentín], y haberse puesto este en estado de fundición; 10 que no permitía trabajar en la hornilla á
los fogoneros que por varias veces salieron con sus
vestidos incendiados.-En esta grave y difícil posición y con el enemigo que nos cortaba el rumbo,
distinguimos un humo por la proa que se reconoció ser enemigo, y por un segundo acuerdo que hice con la oficialidad de la Lancha, atendiendo además á las razones que me dieron los dos Ingenieros sobre 10 que acontecía, me manifestaron la imposibilidad de poder continuar el viaje, por el mo-
-
58 -"
tivo antes expuesto acerca de la caldera, resolvimos únicamente, abandonar la Lancha, d~jándola
como ya llevo dicho antes; y emprender nuestra
marcha por tierra sobre Moquegua á las 3 h. 45'
[p. m.], haciendo rumbo O. NO. de la playa para
dominar la cima del cerro del cabo Picatá, de donde notamos se hacía un desembarque para perseguirnos; lo que ocasionó redoblar nuestra marcha
y esfuerzos en aquella tarde y toda la noche sobre
la planicie de aquella cadena de cerros, cargándonos al NO., hasta las 9 h. 40' [a. rn.] del día siguiente ocho, que llegamos á distinguir la línea férrea y telegráfica de Pacocha á Moquegua en la
pampa de Salinas, y deseosos de tomarlas para
tener ya un camino seguro Y no un eventual como
el que habíamos hecho anteriormente, apresuramos nuestra marcha; estábamos ya al finalizar la
citada pampa sobre el lado de Moquegna; era la
1h. 25' [p. rn.], cuando notamos nos venían al encuentro en rumbo opuesto, dos oficiales montados,
otro en seguida y más atrás una fuerza de infantería que al paso y trote, luego nos dieron alcance,
pidiéndonos las armas que conducíamos; con tan
desgraciado encuentro, fuimos conducidos á un
campamento de fuerzas chilenas, que se hallan acantonadas al término de la antes expresada pampa.
A las 4 h. 30' [p. 111.], bajo de custodia, nos
ccmdujeron por el tren á Pacocha, menos el fogonero Aúrelio Díaz, que por orden del Jefe de aqu"e11a
fuerza quedó en Salinas; y embarcados en el vapor
"Itata" y trasportados á este puerto, donde hasta
la fecha permanecemos.
No dejaré de manifestar á Ud. en cumplimiento
de mi deber la buena acojida y atenciones que hemas recibido de los Jefes y oficiales de las fuerzas
chilenas estacionadas en la pampa de Salinas.
Lo que tengo el honor de poner á la inteligencia de Ud. para que por el conducto respectivo, se
digne Ud. elevarlo al conocimiento, del Supremo
Gobierno, para los fines consiguientes.
Dios guarde á Ud.
MANUEL FERNANDEZ DAVILA.
.
.
-54 Lancha Torpedo "Alianza"
l{ELACION
NOMINAr, DE LA DOTACIÓN DE LA EXPRESADA, HECHA PRISIONERA EN PAMPAS DE SALINAS EN TRÁNSITO PARA
MOQUEGUA EL DÍA 8.
Comandante Teniente 2.° don Manuel Fernández
Dávila.
Alférez de Fragata, don David Flores.
Guardia marina, don Juan de Mora.
Maquinista 2.°, don Clodomiro González.
Idem 4.° don Carlos Carranza.
Cabo de Fogonero, don José Montero.
Tdem Idem, don Aurelio Díaz.
Fogonero, don Franklin Espen~~r.
NOTA.-El Fogonero Franklin Espenser fué to.
mado á última hora de la dotación del "Manco
Capac",
Vapor "Itata"
V. B. -
al ancla, Arica Junio 12 de 1880.
M.
DAVILA.
DAVID
FLORES .
•
Pal'te de la Capitanía del Puerto
--
Abordo del vapor "Itata" ,Arica,Junio 10 de 1880.
Señor Teniente Coronel Jefe del Detall de la Plaza.
S. T. C.
Tengo el honor de poner en conocimiento de
-, Ud. 10 ocurrido en mi dependencia en el combate
del 7 del presente.
Al amanecer se sintieron descargas de fusilería
y cañón por la parte del Este, y habiéndome constituido en el muelle, viendo que era inútil la guardia existente en ese puerto, la mandé unirse á un
cuerpo, en donde, evidentemente podía prestar servicios más importantes, y en lugar de esta armé
algunos individuos de la dotación de esta Capitanía, los que junto con la gente de la Isla, que desde
-55el día anterior se puso á mis órdenes, estuvieron
guarneciendo el muelle y playa inmediata hasta
que habiendo visto izado en el Morro el pabellón
Chileno, y haciéndose desde esa batería, fuego nu.trido sobre nosotros, del que fué muerto el marinero Antonio Suárez, ordené que toda la gente se
fuera á unir con la del Monitor "Manco Capae";
poco después fuí hecho prisionero por el coronel
chileno don Manuel Bulnes. Lo anterior es cuanto
tengo que decir á Ud. en cumplimiento de mi deber.
Dios guarde á Ud.
EDUARDO
RAYGADA.
RELACION
NOMINAL DE LOS JEFÉS y OFICIALES SOBREVIVIENTES
Á LA HER6ICA DEFENSA DE LA PLAZA DE ARICA EL 7 DE JUNIO
DE 1880, FORMADA EN VIS'!'A DE DISTINTAS PUBLICACIONES.
Prisioneros en Cllile.-PUe7'ZllS de la, Plaza,
Jetuturs. y Detall de la, Plaza,
Jefe del Detall, teniente coronel Manuel C. de la
Torre.
Sargento mayor graduado, Miguel Barrios.
Ayudante de la Comandancia General, capitán D.
Ricardo I'turbe.
Capitán, Daniel Corzo [herido].
Idem Trinidad Olarte.
Idem Ezequiel Ve1a.
Idem graduado, Manuel Lira.
Teniente, José Valdivia.
Idem Gregario Alvarez.
Subteniente, Manuel Mendoza.
Inspector de gúardia civil, Emilio Milán.
Idem idem Francisco M ontoya.
Idem idem Teófilo Aguilar,
Comandancia general de la 7." división. - Sargento Mayor graduado José Pozo.
Teniente, Luis Benavides.
Comandancia General de la 8. a división. - Teniente, don José L. Barbaehán.
'-
156 -
Baterías del "Morro"- Segundo comandante, capitán de corbeta, Manuel 1. Espinoza.
Capitán, Daniel Nieto.
Idern Juan García y Zegarra,
Idern Ricardo Pimente1.
TenienteJuan W. Prieto.
Idem Manuel A, Díaz,
Idem Alberto Calderoni ( herido).
Idem Francisco de P. Ramirez, idern .
.Idem Lorenzo del Carpio.
Iden Manuel Romero.
Idem Pedro Portillo. .
Idem Toribio Trelles ( herido ).
Idem Guillermo Gamboni.
Teniente 2. o graduado de la Armada, Manuel Gomez Caravedo.
Subteniente, Manuel A. del Pozo.
Idem Roberto Ordoner.
Idem Emilio Brito Alarco.
Idem Manuel A. Portocarrero.
Idern Gabino Molina.
"Baterías del Este". - Primer jefe teniente coronel, Medardo Cornejo.
_
Tercer Jefe Sargento Mayor, Ismael Mesa (herido).
Capitán Felipe J. Rospigliosi.
Subteniente Adolfo Chuliza.
Idem Francisco Gaviria.
"Baterías del Norte" .-Primer
jefe teniente coronel, Juan Pablo Ayllón.
Segundo idem sargento Mayor, Manuel Marti~ nez (herido).
Sargento Mayor graduado, Augusto C. Soto.
Idem Nicanor García Goytizolo.
Capitán, Manuel S. Masias.
Teniente; Mariano Salcedo.
Idem Andrés Medina.
Idem Francisco Seguín.
Teniente graduado, Luis Gensollen.
Idem idem Manuel Rivadeneira.
Jdem idem Enrique Cuadros.
Subteniente, Gustavo Puente.
- 51Idem Juan F. Ortiz.
Idem Baldomero Pardo de Ze1a.
Idem Samuel Cossio,
Idem J osé Laguna .
•
Bstallán "Tara,pBJcá" N,: 23.- Tercer Jefe, sargento mayor, Gerónimo Salamanca.
Capitán, Antonio Lobato.
Idem Eduardo Velarde.
Idem José Chocano.
Ldern Benigno Vargas.
Idem Evaristo Peñaranda.
Idem Juan Garland (herido).
Capitán graduado, Evaristo Candiote.
Teniente, Marcos Gomez.
Idem Manuel Llosa v Abril.
Idem Osear Navarro.
Subteniente, Domingo Martinez.
Idem Christhiam Henke.
Idem Julio C.Montalvan.
Idem Luis Cossio .
. Idem Gaspar Loayza.
Ba.tallón "Artesanos de Tnctis" N» 29. - Primer
jefe, coronel graduado, don Marcelino Varela
( herido ).
Segundo idem teniente coronel, Manue1F. Chocano.
Sargento mayor graduado Ruben Rivas.
Capitán, Ignacio del Castillo.
Idem Olegario J. Rospigliosi ( herido).
Idem Juan Cáceres,
Idem Pedro J: Vidaurre (herido).
Capitán graduado, José M. Ayl1ón.
Teniente, José Escobar.
Idem Sebastián Céspedes (herido).
Idem José Quelopana idem.
Teniente,Benigno Velazco.
Idem Manuel Cortavitarte.
Idem Juan de D. Soto.
Subteniente, Mariano P. Acevedo.
Idem Enrique Vanee.
Idem]oséM. Rodrigues (herido).
.
.
- 58Idem Manuel A. Belande.:
Idem Leonidas Arriaga (herido).
Idem MarianoSerpa,
.
Bsitallán "Grsuuideros de Tncna" N.· .1.- Teniente, Pedro Cáceres ( enfermo en el hospital).
Idem Manuel E. Barreda.
Teniente graduado, Manuel Marquez.
Idem idem Teobaldo Arias.
Idem idem Arcadio Palza.
Subteniente, Casimiro Marino .
. Batallón "'Lquique N. o 33.
Primer jefe, teniente
coronel Roque Sanz Peña (herido).
Tercer jefe, sargento mayor Lorenzo P. Infantas.
Cuarto idem sargento mayor graduado, Manuel
M. Zevallos ( enfermo).
Capitán Manuel Burgos.
Idem Víctor B. Ocampo.
Idem Teodoro Rebollat,
Idem Federico F Helena.
Idem David Eizaguirre.
Idem David Cuellar (herido).
Capitán graduado, Guillermo Bello.
Teniente, José de la A. Nacarino (herido).
Idem Eduardo Vera.,
Idem Manuel Aduvire.
Idem Ernesto M. Aduvire.
Idom Avelino León.
Idem Aquilino Soto.
Subteniente, Cipriano Pinto.
Subteniente Manuel Ramirez.
Idem Germán Zevallos.
Juan de la C. Maldonado.
Federico Flores.
Emilio Robert.
Idem Ricardo Salazar.
Manuel Lagos.
Idem Augusto R. Smith.
Idem Francisco Velez.
Batallón "Piérols Sñ de mayo".·Capitán graduado, Miguel Revello (herido).
"Teniente, José B. Santana ..
Subteniente, Leonardo Sotomayor.
- 59-
Diversas dependencias de la, plaza.-
Capitanía del
don Eduardo
Puerto.c-- Capitán de fragata
Raygada.
.
T'orpedista don Rodolfo Smit.
Parque General del Ejército, Jefe,' capitán de corbeta graduado, Germán Paz;
Teniente Mariano Monda.
H()spital.-~Conttalor,
sargento mayor, Claudia
Estrada.
Subprefectura. - Subprefecto, Federico J. Sosa.
Ayudante, subteniente j uan R. Vargas.
,.
Escuadrón' 'Lluta,' capitán Enrique Valdez.
Sin colocación, capitán graduado, don Alejandro
.
Bustamante.
Teniente, don José G. Ramires.
Subteniente, don Luis Vargas.
.
Msestrsnze. - Jefe, Sargento mayor José M. Prado.
Maestro mayor de carpinteros, José Sanchez,
Idem de armeros, José Heredia. .
Idem de carroceros, Raymundo Martinez.
Idem de Herreros, Abel Carbajal.
Carrocero, Pedro Prado, id. Santiago Blanco ..
Ayudante ·de herreros, Francisco Quintana, Nicolás Bravo.
.
MARINA
.Monitor "Manco Capee"
Comandante. capitán de fragata, don José Sanchez Lagomarsino.
Segundo
idem, capitán de corbeta, Rórnulo G. Ti,
zon.
Tenientes primeros graduados, Bernardo Esmith,
.T osé S, Pizarra.
Teniente 2.° Juan E. Taboada .
. Tenientes segundos graduados, Eulogio S. Saldías, Nicanor Asín.
Alferez de fragata, Ramón E. Bueno.
Guardiamarinas : Carlos Leguía, Carlos Barandiarán, Luis B. Arce, Felipe Aleorta, Juan
Mulgruw, Francisco Escurra Vidaurre.
- 60-
Oficial de guarnición, Subteniente, Daniel Durán,
Máquina: primer maquinista, Tomás Colquhoun,
segundo id. Anibal Alayza, tercero id. Manuel
Hidalgo, Toribio Villalobos, Alcibiades Maldonado, cuarto idern Tomás Bonar.
Ayudante de máquina, Manuel D. Salas.
Calderero, José Zavaleta.
LANCHA TORPEDO "ALIANZA"
Teniente 1.0, Manuel EiDávila
Alférez de fragata, David Flores.
Guardia marina, Juan de Mora.
Segundo maquinista
don Clodomiro González,
4.° id. Carlos Carranza.
En la tropa se han contado vivos 354 individuos.
De los que aparecen en la lista que antecede, fallecieron estando prisioneros en Chile los siguientes:
7 de Julio de 1880, Teniente don José Quelopana.
7 de Agosto de id. segundo maquinista Anibal
Alayza.
12 de Diciembre de id. capitán graduado, don Manuel M. Ayllón.
23 defebrero de 1881, Teniente don Andrés Medina.
21 dejulio de 1881, Teniente Coronel don Juan
Pablo Ayllón .
. En la mañana del 2 de Junio fueron tomados
prisioneros por el enemigo, .en Chacalluta, el ingeniero de primera clase, don Teodoro Elmore y el
Teniente don Pedro Ureta después de haber hecho
volar por medio de dos minas, una fuerza de caballería chilena que llegó á ese sitio; el segundo fué
herido gravemente al tomarlo, y después murió
en Lima á consecuencia de sus heridas.
Además de los anteriores, . existen vivos y no
fueron hechos prisioneros -por haber escapado de
caer en manos del enemigo, los siguientes:
Segundo Jefe del batallón "Iquique", sargento ma- '
yor don Isidoro Salazar.
Ayudante de la Comandancia General, Teniente
don Aurelio Cárdenas.
-- GlTEFES QUE FORMARON
EL CONSEJO DE GUERRA
QUE
DETERMINÓ
LA DEFENSA DE LA PLAZA DE ARICA, POR UNANIMIDAD DE VOTOS, EL
28
DE MAYO DE
1880
Á LAS
8 DE
LA NOCHE.
Comandante General de las fuerzas y baterías de
Arica, Coronel D. Francisco Bolognesi, murió.
Jefe del detall de id., Teniente coronel D. Manuel
C. de la Torre.
Comandante General de la 7" división, Coronel D.
José Joaquín Inc1án, murió.
Comandante General de la 8.' división, Coronel D.
Alfonso Ugarte, murió,
J efe del detall de la 7." división, Teniente coronel
D. Ricardo O'Donova.n, murió.
Jefe del Detal de la 8." división, Coronel D. Mariano E. Bustarnante, murió.
Primer jefe del batallón "Artesanos de Taena",
Coronel D. Marcelino Varela, herido.
Primer jefe del batallón "Granaderos de Tacna",
Coronel D. Justo Arias y Aragüez, murió.
Primer jefe del batallón "lquique", Teniente coronel D. Roque Saenz Peña, herido.
Primer jefe del batallón "Tarapacá",
Teniente coronel D. Ramón Zavala, murió.
Comandante de la batería del Morro, capitán de
navío, D. Juan G. Moore, murió.
Comandante de la batería del Norte, Teniente coronel D. Juan P. Ay1l6n.
Comandante del monitor" Manco Capac", Capitán
de fragata D. José Sánchez Lagomarsino.
RELACIÓN GENERAL DE LOS JEFES Y OFICIALES MUERTOS Y HERIDOS EN LA DEFENSA DE LA PLAZA DE ARICA EL 7 DE JUNIO
DE
1880.
MUERTOS
Coronel D. Francisco Bolognesi, Comandante General de la plaza.
Coronel D. José Inc1án, Comandante General de
la 7." División.
Coronel D. Alfonso Ugarte, Comandante General
de la 8." División,
Capitán de Navío, D. Juan Guillermo Moore, Comandante de la batería del Morro.
-. 62- -.
Coronel graduado D. Justo Arias y Aragiiez, l.cr
Jefe del batallón "Granaderos de Tacna" Numero 31.
Coronel graduado, don Mariano E. Bustamante,
Jefe del detall de la 8." División.
Teniente Coronel, don Ricardo O'Donovan, Jefe
del detall de la 7." División,
Teniente Coronel, don Francisco Cornejo, ler. Jefe
del batallón "Piérola."
Teniente Coronel, don Ramón Zavala ler. Jefe' del
batallón "Tarapacá".
Teniente Coronel graduado, don Benigno Cornejo,
2. o Jefe del batallón "Tarapacá."
Sargento Mayor, don Armando Blondel,3er. Jefe
del batallón" Artesanos de Tacna N.o 29.
Sargento Mayor, don Felipe Antonio Zela, 3er. Jefe del batallón "Granaderos de Tacna" N° 31.
Sargento Mayor, don Genaro Vizcarra 3er, Jefe
del batallón' "Piérola"
.
Sargento Mayor, don Ferrnín F. Nacaríno 2.° Jefe
de las baterías del Este.
.
Sargento Mayor graduado don Tomás Chocano,
del batallón "Granaderos de Tacna'<N." 31.
Sargento Mayor graduado don Miguel Espinoza.
Id.
"
"
" Juan Isusquiza.
Capitán, don Manuel D. Lara del batallón "Arte
sanos de Tacna.'
Capitán don Ordoner Vargas, del batallón Granaderos de Tacna ".
.
Capitán Pedro Correa, del batallón "Granaderos
. de Tacna.,' '
Capitán don Cleto Martinez, batería del Morro.
Id
" Adolfo King,
id.
. id.
Id
"
Juan P. Ramirez, batería del Este.
Capitán graduado don Felipe S. León del batallón l 'Granaderos de Tacna.".
Teniente 1.0 graduado, clan Miguel Espinoza, batería del Morro.
Teniente, don Clodomiro Bustamante del batallón "Artesanos de Tacna";
Teniente, don Abel Zela del batallón "Artesanos
de Tacna,
- 63'Teniente don José Soto, del batallón "Artesanos
de Tacna.
'Teniente don Federico Basadre.
id.
" Esteban Giles, "Granaderos
de Tacna".
~
Teniente don Vitaliano Becerra,
id.
id.
Id.
"Ascencio
B. Rivera, id.
id.
Id.
" Mariano Benavides, id.
id.
Id.
" Arístides Sologuren, id.
id.
Iel.
" Manuel Pozo, del batallón "Piérola"
Id.
"J osé Soto,
id.
Id.
,. Ricardo Barreda,
id.
Id.
" Andrés Beláunde,
id.
Id.
" Rufino Vargas,
id.
Id.
" Federico Verastain, batallón "Tarapacá, Ayudante Mayor.
Teniente don Simón Grados, batallón "Tarapacá"
Id.
" Pedro Helmes,
id.
Id.
" Vicente Almonte, id. "Iquiquc N.o33.
Teniente " Enrique Hernandez,
id.
id.
Id. . ,,' Manuel S. Aro.
Id.
" Tomás G. Olaya, batería del Morro.
Id.
" Emilio de los Ríos.
Teniente 2. o de la Armada, don Nemesio Bounhumen, batería del Este.
, Teniente 2.0 don Antonio Moreno.
Id.
" Manuel Terry .
. Subteniente, D. N. Miner, ayudante de la Comandancia General de la plaza.
Subteniente don Cipriano Ruiz, detall de la plaza.
Id.
" Armando Basadre batallón de "Arte. sanos de Taena."
.
Subteniente, donjuan].
Alay, abanderado, "Artesanos de Taena."
Subteniente don Manuel Telles, "Granaderos
de'
Tacna."
,
Subteniente don Julio C. Barrios.
Id.
Aureliano G. García.
"" Noé Picoaga.
Id.
Id.
"Nestor
Birne.
Id.
" Ricardo Telles Mira.
Id.
" Miguel Ortíz.
-64S ubteniente don Lizardo Zevallos,
Id.
"Cárlos
Murphi.
Id.
"Isatas
Medina, batallón "Piérola"
Id.
" Guillermo Santana,
Id.
" Alejandro Montfor, batallón "Tarapaca. '"
.
Subteniente don Eleodoro Zevallos,
Id.
" Anibal Chavez,
Id.
" Ramón B. Osario.
Id.
" Elías Loayza, batallón "Iquique"
Id.
"Vicente Rodó.
Id:
" Francisco Rodriguez.
Id.
'" Federico G. Castilla.
Id,
" Francisco Alláu, batería del Morro.
Alférez de Artillería, don· Lizardo Pedraza, subayudante, batería del Este.
Alferez don Eusebio Napure, Enrique Zapata, José Belaunde. Manuel Moyana.
~
HERIDOS
Coronel, Marcelino Varela, ler. Jefe del batallón
"Artesanos de Tacna".
Teniente Coronel, Roque. Saenz Peña, ler. jefe del
batallón "Iquique."
Sargento Mayor, don Manuel Martinez, 2.° jefe de
las baterías del Norte.
Sargento Mayor, don Ismael Mesa, 3er. Jefe de las
. baterías del Este,
.
Capitán, don Daniel Corzo ayudante de la jefatura del detall.
Capitán, don Pedro J. Vidaurre, batallón "Artesanos de Tacna."
Capitán, don Olegario J, Rospigliosi.
Id.
"Miguel Revello, batallón "Píérola."
Id.
" David Cuellar,,,
"Iquique."
Teniente, " José Quelopana, '.'Artesanos Tacna."
Id.
"Sebastiári
Céspedes. id.
id.
Id.
" Juan Garland, ba.tallon Tarapacá.
Id.
"J osé de la A. Nacarino batallón "Iqui.
que."
Teniente, don Francisco de P. Ramirez, batería del
Morro.
- 65Teniente don Toribio Trelles, batería del Morro.
Id.
" Alberto Calderoni, id.
id.
Subteniente, donJosé M. Rodriguez, batallón "Artesanos de Tacna' '.
.
Subteniente, don Leonidas Arriaga, batallón "Artesanos de Nacna".·
.
NüTA.- El teniente don José Quelopana, murió á consecuencia de sus heridas en Valparaíso, en
la condición de prisionero en el hospital.
--+7~-<~'
--
IMPORTANTE DISGUSION
EN QUE SE CONFIRMAN LAS PALABRAS DE nOLOGNESI
"QUEMARE
EL
ULTIMO
CARTUCHO"
EXPOSIClON DEL CORONEl CHilENO D. J. C. SALVO
El distinguido escritor peruano D. Ricardo Palma, tan ventajosamente conocido en el mundo literario por la exhuberancia de su imaginación, ha
pintado con mágicos colores un incidente de la
guerra del Pacífico en que me cupo alguna parte, y
como autor me veo obligado á rectificar ciertos'
detalles en que parece confundirse la exactitud de
los hechos con las galanuras de la fantasía, porque mi silencio contribuiría, á que los historiadores peruanos, que acaso en estos momentos se ocupan de redactar las páginas que han de trasmitir
á las generaciones venideras la narración fiel de .
los sucesos de la guerra, extraviarán el criterio de
su país al apreciar un incidente que reviste cierta
importancia histórica. Estamos aún muy cerca de
los hechos para que la poesía ó la novela puedan
idealizarlos, como quisiera el patriotismo, sin herir
la verdad del relato que puede oírse de viva voz á
testigos presenciales. Mi intento al hacer esta rectificación no es en manera alguna deprimir las glorias militares de nuestros enemigos de ayer, al contrario me complazco en reconocerlas y estimando
cuanto vale el mérito de sus jefes más conspicuos
como Grau, Bolognesi, Moore, Espinar y otros.
66 Hecha esta salvedad voy á mi propósito.
El senor Palma ha escrito el episodio de la intimación de rendición que el ejército chileno hizo á
la plaza de Arica, antes de tomarla al asalto el 7
de]unip de 1880 en El Comercio de Lima y lo ha
reproducido La Epoca de Santiago en su número
de 23 de los corrientes, donde lo he leído.
Hé aquí los hechos tal como pasaron:
Introducido el que esto escribe, con las formalidades de estilo, á la sala de despacho del comandante en jefe de la plaza de Arica, (antes de tomarla) Coronel Bolognesi, como parlamentario del Ejército chileno, fuí recibido por él, con la más esquisita cortesía en el umbral de una sala amueblada
con una sencillez esencialmente militar, donde después de retirarse los señores jefes que me acompañaban, me invitó á tomar asiento en un sofá, sentándose al mismo tiempo á mi lado.
El señor General en jefe del ejército chileno, le
dije, me envía á decir á Ud. que desea evitar en
cuanto de él'depende la efusión de sangre y espera
que le sea entregada la plaza para no verse en la
dura necesidad de asaltarla.
Para el caso de que
esta proposición sea aceptada, estoy facultado
ampliamente para otorgar condiciones honrosas
á las armas peruanas.
Después de meditar un instante aquel venerable anciano, de aspecto bondadoso, me dijo:
Ud. como militar, debe comprender los deberes que nos impone la defensa de una plaza sitiada;
y yo, obligado por ellos, y apoyado en los elementos de defensa con que cuento, no puedo rendirla
sin que medie algún combate que salve el honor de
las armas.
Paréceme señor Coronel, añadí, que el honor
militar no impone sacrificios inútiles; y tal sería la
resistencia de Arica, cuyos· defensores son una
fracción del ejército vencido ayer por nuestras armas en Tacna; que si fuera otro ejército, tal vez
se hubiera creído en mi campamento que era escusada mi misión, y no tendría yo el honor de presentar á Ud. nus respetos. Por otra parte son co-
-
67-
nacidos en el ejército chileno los elementos defensivos con que cuenta la plaza.
El senor Bolognesi continuó discurriendo sobre
variantes del mismo tema, ya enalteciendo la importancia de los elementos con que contaba, ó
bien ponderando el gran contingente de sus fuertes
convenientemente artillados, sus trincheras, la batería flotante del "NIanco-Capac" etc. Y en cuanto
concluyó me puse de pie, diciéndole:
Considero terminada mi misión, senor Coronel.
Parece que Ud. se molesta, contestóme con
tranquilidad, parándose tambien de su asiento.
De ninguna manera, repliqué. Le he propuesto
.Ia rendición de la plaza y Ud. me dice que no le es
posible entregarla sin que pr :ceda algún combate
para salvar el honor de las armas. Muy bien; será
Ud. servido.
.
-Me ha dicho Ud. que estaba facultado para
acordar las condiciones de la rendición. ¿ Podría
Ud. dármelas á conocer?
-Creo inútil tratarlas.
El debate de las condiciones á que debe someterse una plaza rendida
supone la aceptación de la idea; y Ud. me ha dicho
que no la acepta sin combate, luego no depende de
10 oneroso de las condiciones la no aceptación.
Si mal no he comprendido, mi misión sería más
oportuna después de iniciado el ataque; pero ellono
sería posible. Lanzadas nuestras tropas irán al fin.
Después de una breve pausa, el Coronel añadió:
Desearía tener una conferencia.con mis jefes subalternos, si pudiéramos disponer del espacio de
tiempo que media entre esta hora (serían las ocho
de la mañana) y las dos de la tarde, y en tal caso
me encargaría de dar una contestación definitiva
al General chileno, si es que la misión de Ud. no se
repite.
.
Me es imposible, repliqué, deferir á su deseo,
porque, atenta la situación de los beligerantes, la
pérdida de momentos podría ser de grave trascendencia. El General solo espera mi vuelta para rom.per los fuegos sobre la plaza.
Entonces, continuó, perrnítarne ver si es posi-
-
68 -
ble reunir los jefes que estén más inmediatos para
. que ellos oigan á Ud. Y Ud. á ellos, á fin de ver modo de armonizar estos propósitos.
Aun cuando me parece escusada la entrevista
con los demás jefes, añadí: la acepto por complacer á Ud. Puedo disponer de media hora más.
Se dirigió á la puerta y después de dar algunas
órdenes, volvió á sentarse á mi lado en el mismo
sofa que ambos ocupábamos. Luego, aprovechando los pocos minutos que precedieron á la llegada
de los jefes, me habló sobre lo penoso de la campaña, sobre-lo poco que apreciaban los hombres ajenos á nuestra profesión la magnitud de los sacrificios del soldado, no sin haber hecho algunos elogios benévolos á la artillería chilena, á cuya habilidad, según él, se debía mucha parte en el-éxito de
algunas jornadas. Se expresaba con facilidad y
con un acento tan simpático como reposado.
Pué interrumpido el Coronel por los jefes que
fueron-entrando uno á uno, yél, presentándomelos
por sus nombres y rango militar .
. En seguida reseñó nuestra conferencia, dando
alguna amplitud á las observaciones queme había
hecho insistiendo en su negativa, aunque en términos• más acentuados que los que había empleado
conmigo.
Pedíle que me permitiera aducir algunas palabras referentes á explicar el fin humanitario que el
ejército chileno se proponía con aquella misión,
porque la situación tan ventajosa en que 10 colocaban sus victorias, sobre todo la reciente de Tacna, le daban una superioridad moral y material de
qne no queria abusar. Agregué que siendo conocido por el general en jefe de nuestro ejército el
contingente que defendía la plaza, no quería que
el surco de sangre que ya separaba á las dos naciones fuese tan ancho que no les permitiera darse
la mano cuando cesara el fragor de las batallas.
Que estos propósitos eran los únicos que habían
determinado al general á la misión que yo desempeñaba, y que no habiendo habido jactancia al
concebirlos no habría desdoro en aceptarlos.
é
- 69El Coronel pidió entonces á los señores presentes que manifestasen su opinión sobre si había interpretado su voluntad al contestar negativamente á la intimación que se le hacía. El señor Moore
fué el primero en afirmar que así era 10 acordado
y 10 mismo fueron diciendo uno á uno los demás.
en iguales ó parecidos términos. Recuerdo que un
Comandante Latorre, abogado, según supe después, al emitir su opinión dedujo un ar-tículo previo concebido así: "El señor parlamentario
sabe
que nosotros dependemos del Gobierno que reside
en Lima, por consigniente, allá debe dirijirse su
proposición; á nosotros solo nos toca obedeeer 10
que se resuelva en la capita1."
En esta alegación de bajo foro, que no contesté, se me presentó el abogado bajo la presión
.
del militar. El día del asalto se confirmó mi juicio,
cuando llamado por este mismo señor y otros de
sus compañeros, acudí al Morro para salvarlos
de una situación que ellos creían extrema, y sobre
todo cuando le exigí al mismo que recorriéramos
el muelle para que me indicara el punto en que
ardía la mecha de un torpedo de dinamita destinado á hacerlo volar.
Con esto se dió por termitiada, la conferencia.
Me retiré después de saludar á todos y fuí acompañado hasta la puerta por el Coronel Bolognesi,
donde nos despedimos con toda cortesía.
Luego vendándome la vista los "mismos señores
queme habían introducido, partimos en busca de mi
escolta que había quedado en las afueras del pueblo.
. He aquí los sucesos tal como constan de mi diario de campaña y de mis recuerdos, que los entrego
á la consideración de los que se interesen por conocer los detalles de incidente sin comentario alguno.
El señor Palma verá que el distingnido y valeroso defensor de Arica, Bolognesi, no empleó al
menos en mi presencia la frase retumbante y vulgar "quemaré el último cartucho", ni menos cometió la descortesía de volverme la espalda con
brusquedad, ni tampoco yo la majadera insistencia de que se reconsiderara la negativa.
.
-
70 ..:...
Si el escritor limeño al dar un tinte expartano
á la conducta de Bolognesi para idealizar su figura en la historia de su patria, 10 hubiese hecho en
Jos límites exactos de 10 sucedido, nada habría tenido que observar; pero tal como se presenta en
el artículo á que me refiero se confunde un poco la
realidad con la fantasía. -.
Santiago, Agosto 25 de 1885.
J. C. SALVO.
.
Respnesta de Ricardo Palma
-,
El señor Coronel delejército chilenoD. J. de la
Cruz Salvo, ha tenido á bien publicar en El Mercurio de Valparaíso.run
artículo rectifica.torio del
que escribí en-el folleto-que, el 28 de Julio dió á luz
la Sociedad .Administradora de la Exposición. Estimando los corteses elogi'Qs con que me favorece
··.el s~ñor S~~vo, paso á c~nt~~tarle, sin propósito se
errtiende ue sostener polémica que para tal poema,
ni las atenciones de mi empleo ni mi salud decaida
me dejan ,.ca\n,po.
.
\
Entre Ianarracióri que hacb, el señor Salvo de
la conferencia' de Arica y la qt!,e yo hice, no hay
otra diferencia sino la de que ~quel1a es larga y
minuciosa, y la-mía lacónica y sSntética como cuadraba á la índole .literaria de nli trabajo. No veo,
pues, el objeto de Iá-rectificacién en esa parte. Con
distintas palabras, en el fondo, el seúor Salvo y yo
hemos escrito 10 mismo.
Pasemos a] único punto serio.
.
Niega el señor Salvo que en la respuesta dada por
. el Coronel Bolognesi aljefe parlamentario hubiera habido la frase" quemaré el último cartucho."
Muertos en el combate casi todos los jefes peruanos
que asistieron á la junta de guerra, con excepción
elelos Comandantes Roque Saenz Peña, Marcelino
Vare1a y E. Latorre, apelo al testimonio de estos.
El Comandante Saenz Peña la ha consignado en el
bril1ante artículo que há pocos meses publicó en
Buenos Aires.
- 71Por el mes de Junio de 1880, toda la prensa
del Perú se ocupó de la histórica frase, y los diarios
de Chile la reprodujeron.
El mismo Bolognesi, en
sus últimos cablegramas y documentos oficiales, la
expresaba. Recientes están .los hechos, y aquella
era la oportunidad en que el ser or Salvo tan celoso hoy, á los cinco años de la conferencia, por salvar la verdad histórica, debió haber escrito la rectificación que mi pobre artículo le ha inspirado.
En cuanto al calificativo de vulgares que el señor Coronel Salvo dá á las palabras del inmortal
batallador del Marra de Arica, perrnítame que le
niegue competencia para tan decisivo fallo. Así como las obras del espíritu se juzgan sólo con el espíritu, así como los arranques del patriotismo se
aprecian con el corazón y no con la cabeza, se siente y no se discute. En la proclama de Nelson de
Trafalgar: - La Inglaterra esperó que todo buen
inglés cumpliera con su deber-no puede caber mas
llaneza. El famoso j Qui il mourut! de Corneille en
los Horacios, es una exclamación de encantadora
sencillez. En un soldado de la educación militar
de Bolognesi, nada más natural ni menos rebuscado que su respuesta -quemaré el último cartucho.
i Benditas envidiables vulgaridades las que alcanzan á revestir la expléndida -grandeza de la
epopeya!
Lima, Setiembre 16 de 1885.
RICARDO PALMA.
;
. ***
Sr. Coronel D. J. C. Salvo. - Santiago.
Lima, Setiembre 18 de 1885.
Sr. Coronel:
Cumpliendo mi artículo del 16, en respuesta á
las rectificaciones que se dignó Ud. hacer á mi escrito sobre el heroico Bolognesi, quiero refrescar su
memoria, copiando unas pocas líneas de la página
·1,125, tomo 3.° de la Historia de la Guerra del Pacífíco, pqr Benjamín Vicuña Mackenna, tomo impreso en Chile á fines de 1881.
- 72,
DiGeel historiador chileno:
"Llegado el parlamentario
fi la preser ca del
"jefe. de la plaza, la conferencia fué breve, c:ign2. y .
" casi solemne de una y otra parte. EntaI116sE';:1
"siguiente diálogo, que conservamqg en el papel
"desde una época muy inmediata á su 'verificación
"y que, por esto mismo, fielmente copiamos.
"
L~oig:<¿ á Ud., se~""'r, dijo Bolognesi, (,o',! voz
,compl
ameT1.t~
_.~~tranquila.
.
-,
. ," ~ñor, .c0nfustó &'8:1+0, el C?eneral en :jeic. del
"eJere ro chileno deseoso de evitar derramo unen"to in til de sal gre, .despues de vencido enTacna .
"el g leso del ej rcito ·'a.;liado~e envía á p.rlir la
r'
'
~
"rendi\i~n¡d~.es~a p~a.zd"euyo¡~,.re"ursos,
el:'l~()1l1"bres, Ylvclfes y 1pull~elOnes~
conoée .. "
"Té\1gb:jdebel!~s sagrados, repuso el gr.i;cr la"dor dé'i?-. !aza~.;y -}os cUlp;p1iré\','quemn',r1c el
"último
ucho~l'\·
\.
\
.
'~I}p~á&~fs.est;\i¡~cu!?plida l'i\i mi'B.i6~,',1ijo el
"par1améllt~101e~ltandose,
eté,
'
.
.
. En la plt~ti.a,lh27-,
pone el:. se1191' '."¡cuiin
Mackenna unl n~
letra d~~e:.'\. '.. _
'' La esc~\/y el~c!1.a!dg'-Q ;.dela ilstln1~Cl(:n de
"Anca, n..os fu~reJe1d~?~
eM~yort§ah~)
p,. les
"pocos días de:'~u l.feg-ada.;,fl.SVti~go,~n .J~\mü ele
" 1880, condueié dh
gIta a""a:~~sl>_~1,slOr,~r08
"de Tacna y del, orro, y1€l ~..§Gcpt;l'S~rv2.Ut\) con
" d l fid l'd
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't,. ~ . . . ......•..
.
,
to a a ,e Id~ _ e un cale(h>:-._~:o~,"\;;7'
~;' .. ~.
Ya vera Ud': s, or Coroneí,\:~O::~!?'t·~,cnc,
to ~r; romance ni (l'~~o pávulo á,
.imz\ginacion, como ha teitido Ud. la a;prabl1iª'a7!'fl<ctffi.r
cª .
~~:~J~
en~
m'ir~~a
no pronuncio la vulgaT't~ad de "qtl~rn ·'e d (,.1t~mo
cartucho" , en tal caso, a~éti.dosc:...,a:.:" j~~ñá'
1'(:.1.ckenna y desdeñando otros íi1:fofii1ésy aun documerrtos oficiales, sería Ud: y no yo el inventor (le
esa (para mí y para el sentimiento patriótico i bellísima y épica vulgaridad.
Con sentimiento de personal estimación; soy
de Ud., señor Coronel, muy atento servidor.
RICARDO PA~MA.