¿Alguna vez… has tenido un accidente en el coche de un amigo? no has ido a trabajar después de una noche de juerga? te has inyectado drogas en una fiesta? ¿Alguna vez… has regateado en un mercado marroquí? has tomado un plato de saltamontes en Tailandia? te has hecho un piercing o un tatuaje después de una noche sin dormir en Goa? Hepatitis C ¿Corres riesgo? Si has contestado “c”, puede que corras riesgo La hepatitis C: respuestas a preguntas ¿Qué es la hepatitis C? La hepatitis C es un virus que puede causar daños al hígado. A diferencia de las hepatitis A y B, no existe una vacuna para protegerse contra la hepatitis C, pero es posible obtener un tratamiento eficaz. ¿Cómo se contrae la hepatitis C? La hepatitis C se transmite a través de la sangre. El virus se propaga principalmente por medio del contacto con la sangre de una persona que ya tiene hepatitis C. No es posible contagiarse a través de contactos normales como dar la mano, abrazarse, besarse, o compartiendo inodoros o baños, platos, tazas o utensilios de cocina. La hepatitis C puede transmitirse de las siguientes maneras. Al compartir utensilios para inyectarse drogas, incluso si sólo se hizo una o dos veces, o hace mucho tiempo. A través de una transfusión de sangre (antes de septiembre de 1991) o productos sanguíneos como factores de coagulación (antes de 1986). Todas las bolsas de sangre en el Reino Unido son comprobadas para verificar que no contienen hepatitis C. La hepatitis C también puede transmitirse de las siguiente formas, aunque éstas son menos frecuentes. De una madre con hepatitis C a su bebé, antes o durante el parto. Mediante relaciones sexuales sin protección (sin un preservativo o condón) con alguien que ya tenga el virus. Existe una forma de tratamiento farmacológico que, como media, resulta eficaz en más de la mitad de las personas tratadas. Al hacerse un tatuaje, perforarse las orejas o recibir un tratamiento de acupuntura con instrumentos no esterilizados. ¿Qué puedo hacer si tengo el virus? Durante un tratamiento médico o dental en el extranjero en un país donde la hepatitis C es común y no se esterilizan adecuadamente los instrumentos. Al compartir cuchillas de afeitar o cepillos de dientes contaminados con la sangre de alguien afectado por el virus. Consulta con tu médico o enfermera si piensas que has entrado en contacto con el virus de cualquiera de las formas mencionadas anteriormente. ¿Cuáles son los síntomas? La mayoría de personas infectadas con el virus de la hepatitis C no presenta ningún síntoma durante muchos años. Pero incluso si no tienes síntoma alguno, tu hígado puede estar sufriendo daños graves y puedes transmitir el virus a otras personas. ¿Cómo me puede afectar el virus a largo plazo? En aproximadamente una de cada cuatro personas infectadas con hepatitis C, el virus desaparece de forma natural. Sin embargo, la mayoría de las personas que lo contraen se verán afectadas durante mucho tiempo y corren el riesgo de sufrir daños hepáticos graves (cirrosis) con el paso de los años. En algunas personas, la cirrosis puede resultar en un cáncer de hígado o en una insuficiencia hepática. ¿Dónde puedo hacerme las pruebas? Tu médico de medicina general puede proporcionarte una prueba que indicará si padeces de hepatitis C. Organismos para el tratamiento de drogodependencias y clínicas de salud sexual (denominadas a veces clínicas urogenitales) también pueden ofrecer análisis. ¿Existe un tratamiento? Si tienes el virus, deja de beber alcohol o reduce la cantidad de alcohol que consumes. Ésta es la medida más importante para reducir el daño a tu hígado. ¿Cómo puedo evitar infectarme o transmitir el virus a otras personas? No empieces a inyectarte drogas. Si puedes, deja de inyectarte drogas. Si no puedes dejar de inyectarte drogas, no compartas nunca los utensilios relacionados con la inyección, como por ejemplo las agujas, las jeringuillas u otros objetos que puedan estar contaminados con sangre. No ayudes a otros a inyectarse drogas. Si deseas ponerte en contacto con un servicio confidencial de información y asesoramiento sobre drogas (abierto las 24 horas del día), acude a FRANK. FRANK es una línea de asistencia telefónica que forma parte de la campaña nacional contra las drogas y tiene como objetivo dar consejos y ayudar a cualquier persona afectada por las drogas o que desee información al respecto. Llama al 0800 77 6600 o visita www.talktofrank.com Si estás pensando en hacerte agujeros en las orejas, ponerte un “piercing”, un tatuaje o someterte a un tratamiento de acupuntura, asegúrate de que todos los instrumentos, como por ejemplo las agujas y los recipientes de tinta, son estériles y sólo se utilizan una vez. Si tú o tu pareja sexual tenéis el virus de la hepatitis C, existe un pequeño riesgo de transmisión por vía sexual. Los preservativos reducen el riesgo y también pueden prevenir embarazos no deseados, HIV y muchas otras enfermedades de transmisión sexual. No compartas cuchillas de afeitar o cepillos de dientes, ya que éstos podrían tener restos de sangre. Si requieres tratamiento médico o dental en el extranjero, asegúrate de que todo el equipo médico utilizado está esterilizado o procede de un envase sellado. Solicita un tratamiento sólo cuando sea imprescindible. Si necesitas una transfusión de sangre, pide sangre que haya sido comprobada. Información y apoyo Si tienes alguna pregunta o preocupación, puedes hablar con tu médico, tu enfermera o llamar a la Línea de Información sobre Hepatitis C en el siguiente número: 0800 451 451. Teléfono de texto: 0800 0850859. También puedes visitar el sitio web sobre hepatitis C del NHS: nhs.uk/hepc