2 2 Málaga SÁBADO 13 DE DICIEMBRE DE 2008 SUR Aparcar gratis en las principales calles y barrios de Málaga ya es casi imposible Los vecinos de zonas como El Palo, el Centro y Huelin denuncian la proliferación de ‘gorrillas’ La zona azul y las plazas para residentes limitan aún más las posibilidades de encontrar un sitio IGNACIO LILLO MÁLAGA De vuelta a casa, en la prolongación de la Alameda, tras muchas vueltas, parece que el sufrido conductor ha encontrado un hueco donde dejar el coche. Su gozo sería completo de no ser por el individuo de aspecto desarrapado que corre en su busca y, a voces, parece querer PAGAR POR APARCAR Zonas de la capital donde es más habitual tener que pagar por estacionar el coche: Sare F 1.107 plazas: Distribuidas sobre todo por el casco antiguo, La Malagueta, el entorno del Puerto, Alameda, avenida Andalucía. Sare 30 minutos F 179 plazas: (Incluidas en las ante- riores). Ayuntamiento, mercado de Atarazanas, muelle de Heredia y su entorno, edificio negro, plaza de Babel, Hacienda, La Malagueta, Perchel, estación de autobuses, avenida de la Aurora. Aparcacoches reglados F Hospitales: Alrededores de Carlos Haya, Clínico y Civil. Entorno de los centros de salud. Descampados, zonas de aparcamiento sin Sare, alrededores de los estadios deportivos en días de partido. Aparcacoches ilegales F Calles concurridas: Centro (plaza de la Merced), entorno de la estación de trenes Vialia-María Zambrano, estación de autobuses, El Palo, Pedregalejo, Huelin, Perchel (alrededores de El Corte Inglés, avenida de Andalucía, La Canasta. Aparcamientos F Centro y mercados: 4.631 plazas, SARE. Es una de las fórmulas existentes para pagar por aparcar. / CARLOS MORET gestionadas por el Ayuntamiento. Los más concurridos se sitúan en el casco antiguo, plaza de la Marina, avenida Andalucía, Salitre, el mercado de Atarazanas, el de El Palo, Cruz del Humilladero, Carlos Haya y La Malagueta. ayudarle en la maniobra. «Todos los días le tengo que explicar que vivo allí y que no puedo estar siempre dándole dinero», suspira el hombre, mientras el otro se aleja jurando a voces por llevar las manos vacías. La escena es la misma que viven cada día miles de malagueños en prácticamente todos los barrios de la capital. Cuando no son los aparcacoches clandestinos, los conocidos como ‘gorrillas’, son los aparcacoches legales, el Sare o, directamente, los aparcamientos municipales o privados. Sea cual sea la salida, el caso es que, salvo un golpe de fortuna inesperado, ya no hay forma de aparcar gratis en ningún sitio. Las plazas para residentes limitan aún más las posibilidades de encontrar un sitio libre. El malestar de muchos ciudadanos es evidente, especialmente cuando se ven obligados a pagar por dejar el coche en frente de sus propios hogares. Aparcamientos públicos Las fórmulas de pago son varias, como también la cuantía. Junto con los aparcamientos públicos, el Sare depende directamente del Ayuntamiento de la capital. Según la Sociedad Municipal de Aparcamientos, existen algo más de 1.100 plazas, distribuidas sobre todo por el casco antiguo, La Malagueta, el entorno del Puerto, Alameda y avenida Andalucía. Aunque se cobra en función del tiempo de uso del espacio, lo habitual es abonar entre uno y tres euros. Dentro de este tipo existe una segunda tipología, el Sare 30, que tienen la limitación de parada a un máximo de treinta minutos y la obligación de obtener el ticket por un importe de 0,30 euros. Se sitúan en puntos como el Ayuntamiento, el mercado de Atarazanas, el muelle de Heredia, el edificio negro, la plaza Babel, Hacienda, La Malagueta, Perchel, la estación, la avenida de la Aurora y el centro comercial Larios. Una segunda opción son los aparcamientos públicos y privados con