08 TM MARTES 27.MAY.2014 HERALDO DE ARAGÓN GENTE EMERGENTE PEDRO BAPTISTA «MUY PRONTO PODREMOS CREAR TODOS LOS ÓRGANOS DEL CUERPO EN EL LABORATORIO» PREGUNTA ¿Cómo fue el proceso de crear un hígado en el laboratorio? RESPUESTA En primer lugar, conseguimos desarrollar una técnica para descelularizar el órgano, manteniendo el material no celular (colágenos y otras proteínas) en su lugar original. Generamos así un ‘esqueleto’ del hígado con su forma y arquitectura original. Después, sembramos este ‘esqueleto’ con células hepáticas en un biorreactor desarrollado para ello que permite a estas células generar tejido hepático humano en el laboratorio. P. ¿Cuándo se podrán hacer órganos que posteriormente puedan ser trasplantados en humanos? R. Ya hay órganos de bioingeniería trasplantados en humanos: vejiga, uretra, piel, vasos sanguíneos, etc. Estos órganos no son órganos sólidos, pero son una primera prueba de que estas técnicas funcionan en pacientes. Con respecto a los órganos sólidos, aún nos quedan muchos problemas por resolver y faltan unos 5 o 10 años hasta que sea posible trasplantar un hígado o un pulmón en un paciente. P. En un laboratorio ya se ha creado un hígado, un riñón, un corazón... ¿Qué será lo próximo? R. Muchos órganos sólidos ya se han hecho en laboratorio, pero faltan algunos como el páncreas, bazo, útero, etc. A muy corto plazo tendremos la posibilidad de hacer todos los tejidos y órganos que existen en el cuerpo por métodos de bioingeniería. P. ¿Qué otras aplicaciones pueden tener estos órganos de laboratorio? R. En el caso específico del hígado lo estamos usando para estudiar la biología de desarrollo y de las células madre hepáticas, enfermedades infecciosas del hígado (como la hepatitis o la malaria), estudios de metabolismo de las proteínas, hidratos de carbono, etc. También pueden ser utilizados en las pruebas de actividad y toxicidad de nuevos fármacos. P. ¿Qué ha traído hasta el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud a un portugués que ha desarrollado parte de su carrera en Estados Unidos? R. En primer lugar, mi novia, que está en Zaragoza haciendo su doctorado. En segundo, el doctor Ángel Lanas que apostó por mí y me LA MOTIVACIÓN DE REINVENTAR Y HACER LO NUNCA HECHO «Lo más importante que recomiendo a los jóvenes que quieren dedicarse a la investigación es que desarrollen el gusto por la ciencia, por lo que hacen en el laboratorio. Tienen que tener el deseo de reinventar y resolver problemas. En resumen, que tengan la motivación de hacer lo nunca hecho. Esto les ayudará en las muchas frustraciones que tendrán que afrontar en su carrera. Desde un punto de vista práctico, es importante empezar temprano. Les recomiendo que trabajen voluntariamente en algún laboratorio durante su etapa universitaria para que aprendan las técnicas de laboratorio. Después, si es posible, es crucial salir del país y trabajar en laboratorios de renombre internacional para tener contacto con la comunidad científica mundial y con la ciencia más puntera». Pedro Baptista, trabajando en su laboratorio del Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud.CARLOS MUÑOZ DE CERCA ■ Pedro Baptista nació en Portalegre (Portugal) hace 37 años. ■ Estudió Farmacia en la Universidad de Lisboa. ■ Su tesis doctoral se centró en la bioingeniería del hígado y desarrolló con su grupo de investigación el primer hígado humano hecho nunca en un laboratorio en el Instituto de Medicina Regenerativa del Centro Médico Baptista de la Universidad Wake Forest (Estados Unidos). ■ Actualmente es jefe de grupo de investigación en el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud (IACS) y el fundador del Laboratorio de Medicina Regenerativa y Bioingeniería de Órganos en el Centro de Investigación Biomédica de Aragón (CIBA). contrató con la ayuda de la Fundación Agencia Aragonesa para la Investigación y Desarrollo (ARAID). También fue un factor decisivo la oportunidad de constituir mi propio grupo en el Centro de Investigación Biomédica de Aragón (CIBA), que tiene mucho potencial. P. ¿En qué está trabajando aquí en estos momentos? R. Por una parte, continúo trabajando en el desarrollo del hígado humano de bioingeniería para que sea apto para el trasplante. También estoy empezando algunas nuevas líneas de investigación, como bioingeniería pancreática. P. ¿Cuál es el futuro de la medicina regenerativa? R. El futuro es muy prometedor. La capacidad para tratar enfermedades y curarlas es un cambio radical en el paradigma actual. Si dentro de unos años es posible generar órganos en el laboratorio para trasplantar y usar tratamientos terapéuticos celulares más eficaces, tendremos la posibilidad de ayudar a muchos pacien- tes con una medicina totalmente personalizada. P. Gracias a todos los avances que se producen en ese sentido, ¿hasta dónde podremos prolongar la vida humana? R. Aún no conocemos el verdadero potencial del organismo humano en este ámbito. Ya hay personas que llegan naturalmente hasta los 90 o 100 años, aunque muchas veces la calidad de vida ya no es la mejor. Es aquí donde podemos avanzar más, aumentando la calidad de vida. Teniendo la posibilidad de curar enfermedades degenerativas tendremos la posibilidad de no solo mejorar la calidad de nuestras vidas, sino también aumentarla en algunas décadas. P. Existen varios tipos de células madre, ¿cuál es, bajo su criterio, el más adecuado para su uso en medicina? ¿Deben ponerse límites éticos? R. En mi opinión, se debe usar siempre la célula mas adecuada para solucionar el problema que tengamos. Por ahora, la mejor solución disponible es el uso de células madre embrionarias, fetales o neonatales por su gran capacidad proliferativa. El problema son las consideraciones éticas. Personalmente, creo que tenemos que respetar todas las opiniones e intentar buscar nuevas soluciones. LUCÍA V. SEGARRA