ÉL, TIEMPO.—Boletín meteorológico del día 23 de mayo de 19S3, a las 18 horas.—En Madrid: Máxima, 19°; mínima, 8,5°.—En provincias: Máxima, 28° en Córdoba y Huelva; mínima, 4° en Segovia.—Tiempo probable en veinticuatro h o r a s : Toda España, seguirá el régimen de cielo nuboso y algunos aguaceros tormentosos. — Presiones barométricas: Máxima, 706,6; mínima, 703,3.—Vientos: N . ; fuerza, l . ~ C i e l o : Cubierto. CINCO EDICIONES DIARIAS Núm, 4.924 :: Precio: 10 céntimos el ejemplar. ALEMANIA •-^s cortos alcances, de doctor Schacht Por GEORG BERNHARD mo de'^si^'' ^°hacht, que fué íntiile k ¡~fl '"^'in y que después '»*«ttte '^'^ debió oaei exclusi*' «ooiairi^ ^^^^ amigo de la paz y íísij^^.^'^ooi-ata Hilferding su 4eiaRj°° P^'^a la presidencia «ítioa al *°'^'^s los centros baníi qu/'^'^^nes, ha sido la persoíos x,^.^^ ido ahora a los E s t a '^otifia.' '^°^° ^' hombre de tte j^^^a del Gabinete Hitler. E n ^•esiáej,.*^"''*°s tratados con el Hecto ^°Qsevelt, figura un ' ' ' % s '^^ Moratoria para los Aleaijpj ^^'"'•'culares concedidos a i'6tto^ ju' ^ ° " arreglo a este pro^ ÍP 1, "^^"ia quedaría releva• ^'_har.er pago alguno d u r a n t e «5 y después amortizaría fl , '^'^ascurso de veinticinco '*5 deudlas particulares de *'**«alel°^ y de sus E m p r e s a s in- esto debiera bastar p a r a todo banquero expeirimentado, porque siempre es verdad el dicho que se atribuye a uno de los Rotschild franceses. Habiéndole rogado uno de sus clientes que le indicara u n a colocación completaments o e ^ r a y que al mismo tiempo produjera a su capital altos intereses, respondióle: "Señor mío, puede usted colocar su dinero de modo que pueda usted dormir tranquilo; puede ta.mbién colo:arlo de modo que le produzca mucho; pero nadie ha encontrado todavía el modo de invertir su capital de manera que se logren las dos cosas a la vez." SegTaramente los banqueros extranjeros han consegnido grandes ganancias durante cierto tiempo; pero desgraciadamente se han dormido demasiado. Lo que Alemania demanda hoy a s u s acreedores no es o t r a cosa, en el fondo, que la trasfarmación de los amüguos créditos a corto plazo en préstamos a plazo largo, Se trata, a decir verdad, de rep a r a r u n a falta grave cometida al aceptar los créditos. Y quien tiene en primer lugar la responsabilidad de esta failta es el propio do:tor Schacht, que se ha esforzado ahora en obtener en Nueva York y en Washington lo que él mismo había impedido con todas sus fuerzas que se verificase cuando hubiera sido cosa fácil procur a r a Alemania créditos a largo plazo. D u r a n t e los años de 1926 y 1927, y aun en p a r t e de 1928, se podía disponer en el mercado de Nueva York de recursos al parecer inagotables, y de todas partes se hacían a Alemania ofertas de créditos a largo plazo. Sabemos hoy que tales facilidades no eran e:i el fondo otra cosa que u n a especie de inflación proveniente de que a Nueva York afluían demandas del mundo entero a causa de las deudas internacionales. Sabemos igualmente que a causa de su superabundancia a p a r e n t e , los Estados Unidos debían entonces conceder grandes créditos a E u r o p a , porque sólo gracias a esos créditos podían ser saldadas las deudas de E u r o p a a Norteamérica. particulares de **»roa ¿. '^^''''^eponde d i s c u t i r ^Hsftjj. ? 'as condiciones en que %i p^^^ una moratoiria de esta "^'¿d[te''° ^^ principio se verán "ítuau^ ^ ac&ptar lae peticiones "iJai^ig • porque la moneda ger^ e s•6sión i i ^ ' ^ ^ ya se halla, sin esta sometida a u n a prueba %•las '5i!tativa^'*P°''"t^ble a causa de las '.' Sutil • '^^' nuevo Gobierno pa\ Sg'^'^.'^far trabajo a los para"^'Ma ^'^'^ '"Uy seriamente a m e ^etabltR^?* "^^Miandas más consi^•tra^. ^ íondos procedentes del ^ 5 ^ ! J ^ r O . I^p^ ^,loria r„lOo /-^^-rn No ,queda, pues, otro * íe" Al '°^ acreedores extranje'"oíg - ^ ^ ' " a n i a que ceder de un \ oor • ^^'"'' porque en defini^ &bsf,i'^^'"'^" ^' riesgo de quedarSj-jjj '^'nente sin nada. •"Sí Sftv^ ^et-osímál que las misíhag ^ras manifestaciones he'StRacu'^'* e-l mundo bancario in^9«aci "^^ durante las últimas ne"". L,, "^® vuelvan a oírse de nues^, ""^Proches no son completai g , "^justificados. Los direc'''Stiu ^ v'*^ Bancos alemanes de*6ttif , *"'"-'• que no se pueden inf.írc^^'^,créditos procedentes del '** iíiri? '"'ernacional en eimpre• / " " s tríales tr y comerciales. P e "^ectoí-esde los Bancos exf'"^'ían ''"^ ^l^ora acusan, se enXT,. ", *u la mismia eituación :-]^'lmar E k d a l , personaje del E n consecuejicia, las ofertas he• _-^salvaje", de Ibeen, que só'.Wa! * ^°^ demás el respeto a chas a Alemania no eran solamente u n a generosidad, sino que reve^'\^ °oniia alemana no h a evo- labají en cierto modo exigencias de í'-íio v °' ^'n embargo, en u n es- la lógica. E n Alemania, los indusJjlj^ .''"^éticamente cerrado. Las triales, los Estados y las organizaN ^ ' ^ " ^ de las E m p r e s a s ale- ciones públicas de todas clases Noo¡ , liquidaciones de los manifestaban hallarse eji disposiJ*s a ,*'!*»ianes, h a n sido acoesi- ción de aceptar esos créditos. ^ W 7 ° s . Muchos directores de Ofrecíanseles éstos a largo plazo. ^tija "e los Estados Unidos, de Los Estados y los Municipios hu¿ S r L ^ ^ Inglaterra h a n estado bieran podido c o n t r a t a r emprésti'Je oíd ^^^uencia en Berlín. tos consolidados y las E m p r e s a s ¿f 50s ¿ personalmente los dis- industriales obligaciones en canti'^ haj,^ ^^t^oa personajes que hoy dades considerables. E n t o n c e s fué «'^'*^ba7,.''^'''^'''í° los puestos que cuando intervino el doctor Schacht, ., "Sil sxpresába.nse, en los dis*>1 tj! "JUs" ^ ' ^ ® " a los banquetes, presidente de la Reichsbank. P r o ta' "^^"Ttii hibió la aceptación de créditos exX, ^i I '^°^. ''^uy oiptimistas acer- tranjeros a largo plazo mientras k,•%i *ni situación económica de el E s t a d o no diera expresamente i "San" • ° aunque estos gran- su autorización; hizo n o m b r a r u n a tL^Oa o'?'*'"°s no hubieran ©chacomisión especial encargada de ¡^6n,,i^*^<ia sobre la situación y eventualmente de 'líiie ^ . ^'etnana, había u n a co examinar ¡J''a(^^^°__podían ignorar: el tipo aceptar todas las proposiciones de t^**>'é5q"**''^'atoe,nte elevado dei empréstitos. E s t a comisión ejerció i '^W^K '^^^'^^ obtenido du.ran- su cometido coa tal rigor, que con"snaijvo p a r a los créditos tando con que no conseguirían su ii.y^ plazo y la diferenoia ex- deseo, muchos servicios que ha% i^^n*-e g r a n d e existente b r í a n aceptado de buena g a n a '¿S del mercado créditos extranjeros, no se atreV e l l.1,o ^condiciones g mismos y el tipo ale- vieron a manifestar siquiera sus *íica • '''*erés de los oredi cariois a corto plazo. Sólo (CONTINUA E N t A PAGINA 5.*) EDICIÓN DE MADRID Diario independiente fundado por D. Nicolás M. Urgoiti en 1917. Madrid, miércoles 24 de mayo de 1933 CRÓNICA DE PARÍS El Estatuto de El Consejo de Banco de Es- D a l a d i e r está dispuesto a ministros de nnaLa paña nana firmar el Pacto de los Cuatro E n ©1 Consejo de ministros de ayer se aprobaron ¡os E s t a t u t o s del Banco de España. Merced a estos Estatutos, modificados en consonancia con la nueva ley de Ordenación Bancaria, se p o d r á seguir u n a política coordinada entre el ministerio dé Hacienda y el Banco, lo que permitirá un desarrollo general m á s armónico de la política financiera general de la nación. Como es sabido, no siempre fueron acordes en estos aspectos las relaciones entre el Banco y el ministerio, por las discrepancia.s que surgían a menudo en ciertoi momentos y situaciones. Ahora se lleva u n a política unificada, y esto hace que se abra m a r c h a franca para seguir una unificación en la política financiera que debe desarrollarse por el ministerio con la colaboración del Banco de emisión. Los E s t a t u t o s que ayer se aprobaron son una consecuencia de las reformas que exigía la nueva ley de Ordenación Bancaria. P a r a la redacción de los Estatutos del Banco se nombró por la j u n t a de accionistas u n a Comisión compuesta de unos treinta miembros, la que designó una Subcomisión encargada de la redacción del proyecto de Estatutos. E s t a Subcomisión tuvo en estudio dos anteproyectos. Uno de la representación de accionistas y parte del Consejo del Banco, y otro de la representación del Estado. Los dos anteproyectos se discutieron ampliamente h a s t a que la Subcomisión encontró los puntos de coincidencia para presentar un anteproyecto único. Una vez obtenido el anteproyecto único, cuya elaboración h a costado varios meses, pasó al Consejo de Estado, que apenas h a hecho ninguna modificación, y después de este trámite, el Consejo de ministros, en su reunión de ayer, los aprobó definitivamente. Los nuevos E s t a t u t o s no difieren de los anteriores m á s que en aquellois puntos que fueron objeto de reforma por la ley de Ordenación Ba-ncaria. P o r primera vez ee encarga al Banco como misión específica la que tienen todos los Bancos de emisión: regular el cambio de la moneda, vigilarlo, cuidarlo. Se señala la misión concreta del Banco en política monetaria. Se h a reconocido la identidad de condiciones de los consejeros representantes del Estado, en su gestión, a la qiiH tenían y tienen los consejeros nombrado por la j u n t a general de accionistas. Se afianzan los derechos del Banco cuando exista g a r a n t í a p r e n d a r i a y el deudor lo sea también por otros conceptos, y hubiera necesidad de h a cerlos efectivos. Se determinan los nuevos conceptos de la c a r t e r a del Banco de España, que figuran en su activo, en virtud de disposiciones dadas a continuación de la ley. Sin duda los E s t a t u t o s no responden completamente a la evolución que han experimentado en estos últimos tiempos todos los Bancos de emisión; pero la Subcomisión y la Comisión juzgaron oportuno evitar el planteamiento de una serie de problemas complicadas y ss limitaron a reformar los antiguos Estatutos, ajusfándolos a nuevas disposiciones de la ley de Ordenación Bancaria, y que con la buena relación entablada ahora entre el ministerio de Hacienda y el Banco se pueda en lo sucesivo, sin discrepancia en lo fundamental, seguir una política unitaria, tan necesaria a u n a buena m a r c h a monetaJ ria y financiera." ' J-^ CATÁSTROFE BÚLGARA, por Kivero Gil 1t>ff^*'^"al del encuentro, el extremo izquierda del equipo búlgaro obstruccionista, ' ^^^e un gol g„ gy propia portería". (De los periódicos.) si es satisfactorio La declaración produce a l g u n o s incidentes en la Cámara.—El debate preparatorio De nuestro reda ctor-corresponsaÍ! P A R Í S 23 (11 n.).—Ha comenzado lo que en el P a r l a m e n t o se llama la "gra.n semana políticopresupuestaria", d u r a n t e la cual la C á m a r a y el Senado examinarán, casi sin interrupción, las diversas disposiciones del presupuesto de 1933, que debe ser aprobado antes del 10 de junio. E n la Cámara se abordó esta tarde el examen del presupuesto en segunda lectura, después de las modificaciones introducidas por el Senado. Los principales puntos de desacuerdo e a t r e ambas Asambleas se hallan, más bien que en el presupuesto propiamente dicho, en la ley de Hacienda, y se refieren a innovaciones introducidas por la C á m a r a en la aplicación riel régimen fiscal y a concesiones otorgadas en el funcionamiento de la escala de pensiones de combatientes y viudas de guerra, que h a r e chazado el Senado. P e r o los dos extremos de mayor importancia en torno a los que se plantearán animados debates son dos. El primero, el de la compresión del 5 por loo de todos los gastos que no sean la Deuda pública y la Defensa Nacional, y la reducción del 10 por 100 de todas las subvenciones. E s t a iniciativa del Senado h a sido rechazada por la Comisión de Hacienda de la Cámara. Se supone que el Gobierno insistirá p a r a que se adopte el punto de vista del Senado. El Sr. Daladier se expresa en términos de cordial cortesía, aunque dentro de un tono general, y no hace ninguna alusiÓJi a los puntos concretos planteados por los socialistas, como el del monopolio del petróleo y de la compresión del 5 por 100 en los gastos. El Presidente del Consejo a,firma su deseo de continuar inspirándose en los sentimientos que reflejaron las elecciones legislativas de mayo de 1932, y quiere que se mantenga sólida la mayoría de izquierdas. Confía en que será posible conciliar los puntos de vista de las dos Asambleas sobre los extremos litigiosos, y anuncia que planteará la cuestión de confianza en el momento oportuno, ' i l a carta, por su tono y su mesura, y a pesar de no contener apreciaciones detalladas, ha sido bien acogida por la mayoría del grupo socialista, que h a decidido no respander por escrito. La Delegación ejecutiva del grupo celebrará estos días varias conferencias con el jefe del Gobierno p a r a ver de g a n a r los obstáculos que dificultan el otorgamiento de los sufragios socialistas a la totalidad del presupuesto. El grupo será convocado con motivo de la última " n a v e t t e " entre la C á m a r a y el Senado, y h a s t a entonces los socialistas no a d o p t a r á n u n a actitud decisiva. M a ñ a n a se celebrará Consejo en el Palacio Nacional, bajo la presidencia, del jefe del Estado. Este Consejo es el ordinario correspondiente al tercer jueves del mes, según la costumbre establecida. El jefe del Gobierno h a r á la exposición general de la situación interior y exterior al Presidente de la República, y se someterán a la firm a de S. E. los proj'ectos y decretos pendientes de los distintos departamentos. LQ" nueva !ey Electoral y las elecciones parciales Ayer se volvió a comentar en el Congreso el propósito del Gobierno de llevar a las Cortes dentro de poco,? días el nuevo proyecto de ley Electoral. Según los que se creen enterados, e,3te proyecto, que nosotros anunciamos qué sería conciso, constará de cinco a-rtículos. Relacionándolo con este supuesto propósito del Gobierno, se decía también en el Congreso que dentro de poco tiempo el Gobierno convocará a elecciones parciales p a r a ocupar las vacantes qua en la actualidad existen en las Cortes, y que pasan de 20, entre defunciones, renuncias e incompatibilidades. -•^&*- Para comparecer en la vista por los sucesos del 10 de agosto CÁDIZ 24 (3 m.).—En el correo de hoy saldrán p a r a Madrid, con objeto de comparecer en la causa por los sucesos del 10 de agosto, el teniente coronel de la Guardia civil D. Pedro Romero y 61 coronel retirado del mismo Cuerpo D. Arturo Roldan, que se hallan en el castillo de Santa Catalina. I r á n conducidos por un comandante de la Guardia civil. (Febus.) COMENTARIO República española frente a América Méjico y P e r ú r e a n u d a n sus relaciones diplomáticas por obra de E s p a ñ a . E s t o merece un comentario. Vamos a hacerlo. Todavía nadie se h a dado cuenta exacta—ni en E s p a ñ a ni en América, ni en ningujia parte—hasta qué punto pueden modificarse las relaciones de la Península española con todo el mundo hispánico de más allá del m a r por el solo hecho de haberse establecido en E s p a ñ a la República. La Monarquía es p a r a los europeos una forma de gobierno tan digna como cualquiera otra. A la vista de todos existen las Monarquías constitucionales de Inglaterra. Holanda, Bélgica, que gozan de magnífica libertad efectiva, y en las cuales el Monarca es un personaje de adorno vitalicio y nada más. E n América no ocurre lo mismo. La idea monárquica en contemplada casi con horror. E n los Estados Unidos se ridiculizan la Monarquía y sus símbolos. E n la otra América se les abomina. Ellos representan, en concepto de los pueblos, aquellos años de puericia, en que vivieron día coloniales. Supone que todos los reyes son Fernando VII. E n nombre y por obra de F e r n a n d o VII sufi-ieron mucho, y en ese nombre odian toda reyedad. * E s verdad que han tenido y tienen tirajios como Gómez, el de Venezuela, y Machado, el de Cuba, que dan punto y raya a Fernando V i l . El mismo Sánchez Cerro, a quien u n a bala socialista quitó del medio, llevaba un camino en que iba a encontrarse con Gómez y con Machado, con Melgarejo, el bárbaro borracho del altiplano de Bolivia, y con Lilis, "la pantera negra del Caribe". P e r o estos mo"astruos no tienen el derecho de su parte. A cada día pueden ser sustituidos legalmente, y u n a bala justiciera, como en el caso de Sánchez Cerro y García Moreno, puede quitarlos del medio. Los pueblos los toleran por cobardes, no por obligación. Hay L a C á m a r a conti.núa reunida e n sesión nocturna. E n la celebrada esta t a r d e se registró un pequeño En la página 7: incidente entre los señores Marín y Daladier. Como el Sr. Marín alab a r a la gestión del ex ministro de Hacienda, Sr. Chéron, un diputado le dijo: "Sin embargo, derribaron ustedes al Sr. Chéron." E l señor Marín replicó: "Como haremos todo lo posible p a r a derribar UNAS HORAS EN AUSTRIA al señor Daladier si firma el P a c to de los Cuatro." E l presidente • del Consejo, que ac4ba de llegar a su banco, contestó: " H a s t a ahor a no me h a n apoyado mucho las derechas; pero de todas formas El presidente del Consejo, señor firmaré el P a c t o de los Cuatro." Daladier, h a dirigido u n a c a r t a al E s t a declaración, que figura en grupo socialista de la C á m a r a en el extracto del "Diario de Sesiocontestación a la que éste le hanes", fué hecha en medio de cierbía enviado p a r a exponerle el sento tumulto, y provocó interpretatimiento de los diputados colectivistas sobre la situación presu- ciones diversas. Interrogado más puestaria, después de los cambios tarde en los pasillos de la Cámara, efectuados por el Senado. La car- el Sr. Daladier manifestó: "He (De nuesiro redactor-corresponsal) exactamente: F i r m a r é el t a del jefe del Gobierno fué exa- dicho BREGENZ^MAYO.—Habíamos oído en acentúa su independencia, su línea minada por la Delegación ejecuti- Pacto de los Cuatro si es satisfacLindáu, en la margen alemana del divisoria, si no étnica y lingüístiva del grupo esta tarde, y no se torio." lago de Constanza, que se había ca en sus lineas generales, al meh a r á pública por ahora. ABAMBUKÜ declarado una especie de boicot nos psicológica, el nacionalsociaturístico a Austria en respuesta lista señala el ejemplo alemán y a la acogida hecha a los ministros hace volver la vista a esas diferenLa sesión de ayer y los progi-esos habiéndose acordado suprimir, con alemanes el domingo p.asado. E s - cias entre bávaros y prusianos, que del Pacto de los Cuatro han tal fin, las vacaciones de la As- tando en Lindáu era tentador pi- han desaparecido, por de pronto, creado u n a atmósfera de in- censión y Pentecostés. (Fabra.) sar t i e r r a austríaca p a r a compro- por decreto. El nacionalsocialista quietud. L a versión del P a c t o de los Cuatro bar los efectos de la amenaza he- austríaco tiene la misma caracteG I N E B R A 23 (12 n.).—Tres hecha por F r a n k . Y en Lindáu em- rística que el alemán. La que la en Londres chos han motivado esta t a r d e cierbarcamos unos cuantos periodis- hace temible. El fanatismo. E s t e L O N D R E S 23 (12 n . ) . P I o y se ta tensión e inquietud, que confanatismo le lleva hasta la negat r a s t a n con la confianza relativa h a recibido en esta capital la ver- tas de España. E l barco que nos lleva desde Lin- ción del enemigo. Cuando se le h a de estos días en Ginebra. L a difi- sión del Pacto de las Cuatro P o tencias. dáu h a s t a Bregenz va completa- bla a un nacionalsocialista auscultad con que los representantes El texto de este Pacto será exa- mente vacío. El dia es hermoso. tríaco de DoUfuss, de la socialdede la.3 cinco grandes potencias han minado m a ñ a n a por el Gobierno. llegado a una transacción sobre la Un dia hermoso navegando por el mocracia, de la Heimwehr, el cuestión de la discuísión de los ar- Parece ser que dicho texto h a sido lago de Constanza es algo por lo nacionalsocialista no cree en su juzgado como satisfactorio. (Fatículos de seguridad y material y cadáveres cual me siento hoy digno de ser existencia. Los cree el discurso del Sr. P a u l Boncour b r a ) han creado una atmósfera pesi- Optimismo en los círculos finan- envidiado. P r e g u n t o nada más lie- galvanizados. Esto es ya una condición p a r a el triunfo. gar: mista. cieros de Italia —¿Vienen así los barcos habiY no obstante, pensando en otras E l tercer hecho es la noticia dé ROMA 23 (12 n.).—El optimismo tualmente? que el Plan de los Cuatro avanzarespuestas espigadas así, en el ajeba rápidamente, cosa que h a crea- de los círculos políticos, debido a treo cotidiano de un pueblo, pare—No—nos dicen. do cierta a l a r m a entre los Esta- las últimas noticias internacionaSin embargo, de esto no pode- ce que, efectivamente, el Anschluss les, y más especialmente a la espedos de segunda categoría. —que p a r a el nacionalsocialista es Sin embargo, el Sr. Hénderson, ranza de una próxima firrna del mos concluir nada. No h a y n a d a firme en su propósito de llegar an- proyecto de Pacto de los Cuatro, que me cueste tanto como una ge- cosa descontada, a pesar del destes del 12 de junio a un resultado se h a extendido también a los neralización. El tiempo haeta ahora agrado que 1« produce a Mussolipositivo, espera poder empezer en círculos financieros, que han influí- ha sido malo. Hoy era, desde hace ni—no llegará nunca. Pero es breve en segunda lectura el exa- do favorablemente en la moneda algún tiempo, el primer dia sereno apariencia n a d a más. Sin ánimo de men de las proposicipnes_ inglesas, y en la R e n t a italianas. (Fabra.) sobre el lago. Sin embargo, la gen- generalizar, a lo cual no me autote a quien se pregunta asegura rizan unas horas en Austria, he •••^«••-.r**'^*'»***' que los barcos no vienen habitual- podido notar esto: El ministro de Estado espa- Sociedades obreras que ss rnente t a n vacíos. El principio de la Primero. Que la juventud es guerra turística está ahí. P a r a nacionalsocialista, y por consiseparan de la C. N. T. Austria puede ser un peligro. El guiente, partidaria del Anschluss. ñol, en Ginebra BARCEIXiNA 23 (12 n.). — E l ministro bávaro Esser nos decía (Añadamos a esto que la sociaWeG I N E B R A 23 (12 n.).—Esta mañ a n a ha llegado a Ginebra en el Sindicato del ramo textil y fabril que en la estadística del turismo mocracia no fué enemiga de él expreso de P a r í s el ministro de de géneros ds puinto de Mataró, austríaco los alemanes figuran con hasta que Hitler llegó al Poder. E s t a d o español, Sr. Zulueta, acom- formado por unos seis mil obreíO^s, el 70 por 100. En Salzburgo, el con- P e r o la socialdemocracia, aseguran pañado por el jefe de la Sección y el Sindicato de la metalurgia de tingente alemán llegó a ser del 82 los nacionálsociaUsitas de Bregenz, política de su departamento, señor la mi©ma población, en asambleas por 100. que no cuenta ya.) celebradas estos días, han acordaDousinague.' Segundo. Que el fenómeno del E n tierra austríaca no puede haA su llegada a Ginebra, el se- do por gran mayoría ds votos señor Zulueta fué recibido por el pararse de la C. N. T., constitu- cerse hoy más pregunta que la Anschluss está condicionado al feembajador de E s p a ñ a en París, s«- yéndoee en Sindicatos autónomos. opinión del pueblo respecto al nómeno económico. E n estos mo— ; — ^^»».— • mentos, Dollfuss y Hitler están deAnschluss. ñor Madariaga. Hablamos con unas veinte perso- cidiendo con sus decretos económiE l día del Sr. Zulueta Los paraguayos derrotan a nas elegidas al azar, paradas en la cos el problema político. El éxito G I N E B R A 23 (12 n.).—A las ñieí los bolivianos en el sector calle, sorprendidas en los, comer- de Hitler—si lo logra—repercutirá de la m a ñ a n a , el ministixi de F.scios, olafiificadas por ei aspecto, de forzosamente en Austria. Cada mitado español, Sr. Zulueta, tuvo un Herrera forma que íodas las edades y to- llón de obreros engranados en la cambio de impresiones con los das las clases sociales pudieran producción será una victoria en miembros de la Detegaoión espadar su opinión, Desde luego no A u s t r i a E l Ejército boliviano tuvo más de ñola. preguntamos a nadie que tuviera Como dato curioso aneto esta mil bajas A la.3 once de la m a ñ a n a , el seASUNCIÓN 23 (12 n.).—Un co- una representación oficial. IJOS respuesta dada con alguna freñor Zulueta, acompañado del señor Madariaga. asistió a la re- municado oficial paraguayo dice círculos oficiales no nos interesan. cuencia al austrianismo de Hitler E x a m i n a n d o todas laa respues- como factor que debiera ser deciunión secreta celebrada por la Me- que en u n a importante y dura basa de la Conferencia del Desarme, talla reñida en el sector de H e - tas se llega a estas conclusiones, sivo p a r a la simpatía en Austria. reuíiiión en la que se acordó alter- r r e r a , d u r a n t e la cual los paragua- que no tienen más valor que el "Hitler no es un austríaco. Si nar la diiecusión de los capítulos yos rechazaron quince ataques de la información directa recogida fuera austríaco, hubiera hecho aldel plan de desarme relativos a la consecutivos bolivianos, infirieron en el pueblo. go por Austria. Hubiera.conquista, seguridad y al material de gue- a éstos u n a g r a n derrota, en la E n Bregenz, el partido m á s fuer- do Alemania desde Austria en luque tuvieron m á s de mil muertos, rra. Por la tai-de, el minietro de Es- diezmando los paraguayos a los te es el nacionalsocialista. E n gar de querer conquistar al Austado español asisitió a la reunión 16." y 41.» regimientos bolivianos. Austria sabemos que no. I^as elec- tria desde Alemanda." ciones generales que se celebren de la Comis.ión general de la Con- (Associated Press.) ferencia del Desarme. dentro de un año noe dirán si en o t r a versión sobre las mil bajas Luego, el Sr. Zulueta celebró Esto, probablemente, no tiene un Austria se nos reserva el mismo bolivianas una larga y cordial entrevista con fenómeno que en Alemania y si, gran valor. P e r a está, hecho en tieASUNCIÓN 23 (12 n.).—Un coel jefe de la Delegación norteameal dar expresión numérica al mo- rra austríaca, en Bregeoz, a oriricana, Sr._ N o r m a n Davis. Tam- municado oficial afirma que "conllas de un lago maravilloso, donde bién celebró entrevistas con el pre- t i n ú a la terrible matanaa. Nos- vimiento hitlerista austríaco, nos en la misma agua azul se copian sidente del Consejo de la Sociedad otros hemos rechazado quince a t a - encontraremos con u n a mayoría de las Naciones y de<legado de Mé- ques del enemigo. Se han encon- El nacionalsocialista austríaco ope- márgenes igualmente encantadoras jico, Sr. Castillo Nájera. Final- trado mil cadáveres de un regi- r a con los mismos a r g u m e n t o s y que los hombres han acotado parm'ente, ee reunió con el jefe de la miento enemigo, que por lo visto s« mueve dentro del mismo círcu- tiéndolas entre Suiza, Alemania y DeJsgaciión de la Reípúblioa Ar- se h a b í a extraviado, y los hom- lo de ideas que el alemán. Cuando Austria, gentina en la Confereoicia del Des- bres perecieron de h a m b r e y sed". el auetríaco no nacionalsocialista G A R C Í A DÍAZ (United Press.) arme. (Fabra.) E l segundo punto se refiere al proyecto de Monopolio del P e t r ó leo, de i:ispiración socialista, y que fué desestimado por u n a gran mayoría de la Alta Cámara. La Comisión de Hacienda del Palais Bourbon h a hecho suyo de nuevo el proyecto inicial, que está apoyado por socialistas y radicales socialistas. Como en anteriores debates de tipo presupuestario, la actitud de los socialistas, que con ¡os radicales constituyen la mayoría, en la que se h a n apoyado los Gobiernos que se . han .'Mcedida desde junio de 1932, es objeto de comentarios y conjeturas. uease nuesira sección de anuncios por paiaüras MiüSiuiusniíiniiiiUütüaiiiiitiumi' Pa ra IOS austríacos Hit er es alemán siempre la esperanza y el derecho de sustituirlos. Razonan mal los pueblos americanos que odian la Monarquía, y, sin embargo, soportan déspotas m o n ó c r a t a s ; aunque m á s que e a razonamientos se funda su conducta en sentimientos hereditarios. * * • Buena o mala, esa realidad existe. Por eso cuaado la República faé proclamada en E s p a ñ a loa pueblos americanos todos, sin u n a sola excepción, exultaron. De r e pente, cayeron obstáculos y prejuicios seculares, y la enorme corriente de afección hacia la vieja m a d r e patria,, iniciada después d a la guerra hispanoyanqui, se h a desbordado. La República española, por instinto y por reflexióoi, h a obrado e n el mismo sentido, comprendiéndose comprendida. Apenas en loa desperezos de su a u r o r a dio u n paso audaz y eficiente en derecho constitucional y en pro de loa americanos resideite.s en EspañOt Con ello h a iniciado la Bepública una política americana que Eap a ñ a Jio tenía. E s decir, h a iniciado una política buena, y aquella de que E s p a ñ a venía sirviéndose, con evidente error, la r e p u dia. E n efecto, ¿en qué consistía la política americana de los m o n a r cas, sus ministros y P a r l a m e n t o s ? L a respuesta cabe en pocas lineas. La política americana de los monarcas españoles consistió d u r a n t e todo el siglo XIX en ponerse de parte de los Gobiernos europeos contra los pueblos americanos de su misma lengua y cultura. ¿Cómo pudo ocurrir ssmejanta absurdo? No sabemos; pero asi fué. Además, demostró siempre la Monarquía un cerril espíritu imperialista, que, al fin, la condujo a Santiago de Cuba y a Cavite, Bombardeó el Callao y Valparaíso, ocupó a Santo Domingo, invadió a Méjico. Y lo peor de todo y lo más suicida: estuvo siempre de p a r t e d a sus rivales en E u r o p a , contra sua hijos de América. (Estas p a ' a b r a s dulzonas y familiares no obedwací ?n este c a ía, COPIO en el caso d? la Í^X^^z cstólica, que las prodi,?a, a m e n tiras fentimentalesj obedecen s realidades, y no hay medio de evadirlas, aunque a veces choquen.). La República española h a comprendido las cosas de otro moda que la Monarquía. H a inaugurado, con respecto a América, una política virgen. La buena, la que envuelve en su seno el secreto deí porveair. Ayer dio la prueba con Méjico. Hoy, con Méjico y Perú. La reanudación de relaciones entre estas dos Repúblicas se deberá a E s p a ñ a . L a República e s pañola—tacto y buena fe—representa con elegancia el papel qua l9 corresponde. ¿ P o r qué todos loa conflictos americanos irían a r e solverse en Washington? A resaíverse, es un decir... A t r a t a r s e , qua a veces significaba embrollarse. Dígalo si no la Unión de las cinw co Repúblicas de Centroaméricar Guatemala, Salvador, Costa Ei-ca, Nicaragua y Honduras. C u a n t a s veces estuvo a punto de constituirse la Unión y fué el asunto & Washington, Washington, a quisa la desunión de n u e s t r a ciega ,Amérioa es lo que conviene, resolvió «I punto en provecho propio: desuniendo. Y esta política sagaz y b e n e í a c . tora de la E s p a ñ a republicana s« debe m á s a sus políticos que a sua diplomáticos; se debe principalmente a Madrid, al Gobierno da Madrid. Los antiguos embajadores sabemos lo que valían. De los nuevos, sólo uno parece que tiene el "quid divinum". En cambio, a los políticos les h a bastado pensar con generosidad y osadía. H a n acertado. B . BLANCO-rOWCBOJíA n^fc» E N GRANADA '" - !.,• En distintos lugares de la capital hacen explosión tre.s bombas GRANADA Zí (3 m . ) . ~ A espaldas del edificio dei periódico católico "El Ideal", en la calle d« Arrióla, en u n a pqjerta d« hiarro qu'e d a a los talleres, estalló u n a boímba de g r a n potencia, eo cuj'a. metralla habían colocado balines. Produjo pequeños desporfaotos. Poco después estalló otra en u a ángulo do la placet.-i del Qu'eeo, que cau.só grandes daños en los ediiflcios de los hospitales próximos. Cinco mánutos más tairde estalló Una tercera en un traeíormador e>¡éctrico próximo al puente d« Castañeda. Un g r a o tactor d« la ciudad quedó a oscuras. El alumbrado 66 restableció rá.pid«,m*nt«. E s t a explosdón causó muchos daños y gran a l a r m a e«n ®! t»atiro de Isabel la Católica, que quedó a cscura.s bi-aves moínentoe. El gobernador recorrió lís lugares de las explosiones. La Policía practica averiguaciones. Anuncio de La huelga de! hambro Los sindiicalistas detenidos coa motivo de la última huelga de !«. Confederación, que se hallan en la cárcel provincial, anuncian la huelg a del h a m b r e pai-a el dia 25 si no Se les pono en libertad, (Febus.)