EL MUNDO Y LA COLONIZACION (23732)

EL MUNDO Y LA COLONIZACION
LA TIERRA INCOGNITA DE AUSTRALIA
(...) La pérdida de las colonias norteamericanas había privado a la Gran Bretaña no sólo de
parte de su riqueza económica sino también de la posibilidad de establecer fuera de la
metrópoli su excedente de población, sobre todo sus presidiarios, que hasta entonces habían
sido transferidos al Nuevo Mundo en calidad de mano de obra barata.
Ante tal situación lo que Cook había descubierto en 1771 era como una llamada del cielo.
Allí se ofrecía una tierra idónea para el alojamiento de los presos, y tal vez podría sacarse,
además, un provecho económico, como el que habían sabido obtener los españoles y
portugueses de sus colonias sudamericanas. Se sabían muy pocas cosas de la nueva tierra,
pero dentro de lo posible estaba la existencia en ella de riquezas minerales. Sí era seguro
que ofrecía espacio y posibilidades de subsistencia a los penados indeseables de la
metrópoli.
Inglaterra decidió efectuar la prueba: el 13 de mayo de 1787 zarparon los primeros once
barcos, llevando deportados a bordo. El comandante de la flota era Arthur Phillip. (...) la
mayoría de los que integraban aquel transporte eran ladronzuelos, vagabundos y haraganes;
había también un grupo de condenados políticos, y en cuanto a las mujeres, casi todas eran
desterradas del país por el delito de prostitución.
El capitán Phillip llegó a la bahía de Port Jackson, descubierta por Cook, allí desembarcó y
le dio el nombre de Sydney cove, en honor al ministro británico del Interior, y allí nació la
actual Sydney; corría el año de 1788. Se descargaron los barcos, se levantaron las tiendas
para los soldados y los presidiarios. Luego fue izada la bandera de la Unión Jack, la primera
colonia sobre el suelo australiano había sido fundada...
...Bajo la vigilancia de los soldados, los presidiarios empezaron a conquistar la nueva
patria. (...) se carecía de las cosas más indispensables. Ya desde el primer momento había
que contar con los envíos de la metrópoli, y éstos se hicieron esperar mucho (...).
Después que en 1790 desembarcó la segunda expedición de penados, con la cual la
población de la colonia elevase a 3500, los colonos dispusieron por fin. En 1792, de un
rebaño conformado por veintitrés vacas once caballos, ciento cinco ovejas y veintitrés
cerdos y sembrado suficiente para que, cuatro años después de la fundación de Sydney,
estuvieran en capacidad de bastarse a sí mismos.
Fue uno de los oficiales del capitán Phillip quien puso los cimientos de la futura riqueza de
Australia: /a lana. John MacArthur, condenado y expulsado de ejército por comercio ilegal
de ron, dio en la idea de explotar las inmensas praderas de la nueva patria para la cría de
ovejas. El gobernador puso tierra a su disposición, y MacArthur se procuró ovejas
bengalesas y machos ingleses e inició la cría. En 1803 tenía un rebaño de 4000 ovejas, y
cuando expidió la primera lana a Inglaterra encontró una demanda enorme: ¡e | producto era
de primera calidad!
Desde entonces salía cada dieciocho meses de Sydney un barco cargado de lana con destino
a Inglaterra (...). Si hoy se esquilan en Australia ciento treinta millones de ovejas al año, se
debe a la inteligente ocurrencia y la iniciativa de un sencillo oficial inglés destituido.
Durante todo el tiempo que duraba su condena, los deportados trabajaban bajo vigilancia
de los soldados.
Una vez cumplida aquella, se les ofrecían dos posibilidades: o se buscaban un trabajo, o se
hacían ir un terreno, caso en el cual se convertían en colonos como los numerosos
inmigrantes voluntarios que iban arribando. Podían llegar a ser incluso funcionarios del
gobernador si habían observado buena conducta.
REPARTO DE UN CONTINENTE
…A comienzos del decenio de 1880cuando la arrebatiña de territorios estaba en su apogeo
y no cabía temer que las potencias extranjeras fueran expulsadas de África, Portugal
propuso la organización de una conferencia internacional para resolver las disputas
territoriales que habían surgido en África Central. La propuesta portuguesa fue adoptada
más tarde Bismarck. La conferencia se celebró en Berlín del 15 noviembre de 1884 al 26 de
febrero de 1885. El anuncio de la misma intensificó las diferentes acciones para
apoderarse de territorios africanos. La conferencia no trató seriamente del tráfico de
esclavos ni de los elevados ideales humanitarios en que supuestamente éste se inspiraba
(...).
El propósito inicial de la Conferencia aparentemente no era concertar un reparto general de
África. Sin embargo, la reunión concluyó disponiendo de sus territorios y estableciendo
"las normas que debían observarse en el futuro en relación con la ocupación de territorios
en las costas de África (...).
El concierto de las naciones de Europa se atribuía el derecho de sancionar el principio de
repartirse, conquistar y ocupar otro continente. No había precedente alguno en la historia
del mundo que justificara semejante osadía y tal fue el aspecto más importante que la
Conferencia de Berlín revistió para la historia de África.
(...) La atribución de territorios africanos tuvo lugar en la Conferencia misma y la cuestión
de asignaciones futuras está claramente implícita en sus resoluciones. En efecto, hacia 1885
estaban trazadas ya las líneas generales del reparto final de África".
EXPANSIÓN EUROPEA
“la explotación y el poblamiento de los territorios coloniales suscitaron amplios debates.
¿Colonias de explotación o de poblamiento? ¿Colonización a pequeña escala o explotación
por grandes empresas? ¿Liberalismo o proteccionismo? ¿Ayuda estatal o iniciativa privada?
Esta serie de alternativas dieron origen a menudo al enfrentamiento de intereses opuestos.
Infraestructura e inversiones: en todas partes, la primera condición —a veces motor
esencial de la iniciativa colonial— fue la creación de una infraestructura que permitiera la
explotación económica del territorio: puertos y ferrocarriles.
El tendido de la red ferroviaria colonial sustituyó los grandes trabajos europeos,
prácticamente concluidos en los años 1880-1890. Aseguraba, con enormes beneficios para
las empresas, el control del comercio exterior (...). Sin duda, todos los países nuevos
ofrecen grandes oportunidades. ...A las inversiones en los ferrocarriles se destinaron las
cantidades más altas de los capitales colocados en las colonias. En el período 1911-1935
fueron estimadas en 261.000.000 de libras en África negra y 127.000.000 en Asia (...).
Algunos de esos ferrocarriles se construyeron no tanto por consideraciones económicas
cuanto por preocupaciones estratégicas o políticas: los ejemplos más significativos en este
sentido son el proyecto El Cabo-EI Cairo y el transahariano francés.
La construcción y equipamiento de grandes puertos (a menudo alejados de los antiguos
centros de intercambio) fueron también patrocinados por las principales firmas coloniales
(...). Las inversiones necesarias para la creación de esta infraestructura fueron alimentadas
por los presupuestos coloniales, los empréstitos y los capitales privados (...).
Los presupuestos de los Ministerios coloniales tenían presentaciones muy diversas, con
repartos variables según las regiones. (...) De modo general, estos presupuestos no eran
muy elevados; proporcionalmente sólo representaban una pequeña parte de los gastos
nacionales. (...) Así los territorios coloniales hacían frente a su equipamiento en parte
gracias a los empréstitos (...). El origen de los capitales, su monto, la orientación del caudal
de las inversiones variaron según la época y la región. La nacionalidad de los capitales
dependía más de las circunstancias que de una elección política deliberada. En las colonias
francesas, la inversión oficial alcanzaba casi un 60%. Las inversiones oficiales
representaban menos de la mitad para los capitales ingleses, y menos de un tercio para los
belgas y portugueses (...).
Una parte importante de estas inversiones y de la actividad económica de los territorios
coloniales estaba controlada por algunos grandes bancos y firmas especializadas que
mantenían estrechos lazos con los medios políticos".
ÁFRICA BAJO LA DOMINACIÓN COLONIAL
"Nunca en la historia de África se habían producido con tanta rapidez tantos cambios como
durante el período que va de 1880 a 1935.
Por cierto que el fundamental y más trágico de esos cambios tuvo lugar entre 1890 y 1910,
lapso de veinte años en que se completaron la conquista y ocupación de casi todo el
continente africano por las potencias imperiales y el establecimiento del sistema colonial
(...).
La velocidad con que se desarrolló el drama fue sorprendente. Hacía 1880 sólo algunas
islas y pequeñas franjas costeras de África Occidental estaban bajo jurisdicción directa de
los europeos. En África del Norte sólo Argelia había sido colonizada por los franceses. En
África Central únicamente la franja costera de Mozambique y Angola estaban sometidas al
dominio portugués. Ni una pulgada de África Oriental había tado sometida al dominio
europeo. África del Sur era la única parte del continente donde el dominio extranjero no
sólo había logrado implantarse firmemente, sino que se había extendido profundamente
tierra adentro.
En suma, en 1880 algo así como 80% del continente africano seguía gobernado por sus
propios reyes o reinas, por sus jefes de clan o tribu, en sus propios reinos o en comunidades
de variada índole y magnitud. En el transcurso de los treinta años siguientes, esta situación
cambió de manera dramática. Hacia 1914 toda África, con excepción de Etiopía y Liberia,
se hallaba sometida al dominio europeo. (...) Frente a la invasión, la abrumadora mayoría
de las autoridades y dirigentes africanos la combatieron en forma vehemente y expresaron
su determinación de mantener su soberanía e independencia (...).
Pero los africanos no comprendieron que hacia 1880, gracias a la revolución industrial en
Europa y a los avances tecnológicos que acarreó, como la navegación de vapor, el
ferrocarril, el telégrafo y, sobre todo, el progreso de las armas de fuego, los viejos tiempos
del comercio libre y de la dominación política no oficial habían pasado, dejando paso a "la
era del nuevo imperialismo y de la rivalidad entre los monopolios capitalistas". Porque
ahora no era sólo el comercio lo que los europeos querían, sino también el dominio político
directo.
Por otra parte, los dirigentes africanos no lograron comprender que sus mosquetes estaban
totalmente pasados de moda y eran impotentes para hacer frente a los fusiles de repetición
de los europeos. Las consecuencias fueron trágicas. Todos los jefes africanos fueron
derrotados. Sólo Menelik II, rey de Etiopía, consiguió expulsar a los invasores italianos,
conservando su soberanía".
Taller
1. ¿Qué razones políticas y económicas motivaron a los ingleses a iniciar la
colonización de la desconocida Australia?
2. La colonización de Australia se realizó a finales del siglo XVIII y durante el XIX.
¿A qué atribuyes que el proceso se haya demorado tanto tiempo?
3. ¿Por qué en el la primer lectura se hace énfasis en la iniciación de la producción de
lana en Australia? ¿Qué repercusiones tuvo ese hecho para la economía australiana
actual?
4. ¿Qué efectos produjo la conferencia de Berlín en los países de Europa y en el
continente Africano?
5. ¿Por qué era importante la construcción de puertos y ferrocarriles en las colonias?
6. ¿Cuál era el origen de los dineros empleados para las construcciones en las
colonias?
7. ¿Qué factores económicos y políticos facilitaron el auge del colonialismo en África
después de 1880?
8. ¿Qué posición asumieron los reyes africanos ante la invasión europea? ¿Por qué no
pudieron enfrentar con éxito a los europeos?