¿Qué es el pensamiento distorsionado?

¿Qué es el pensamiento distorsionado?
Por Gillian Ferwerda
Usado con permiso
Un pensamiento — algo pequeño. Sin embargo, conduce a un sentimiento, a palabras, a
una perspectiva, una actitud, decisiones, acciones, un hábito, un estilo de vida, una
realidad y por último, un destino. Nuestros pensamientos son verdaderamente
poderosos; pueden dar forma a nuestra vida.
Sin embargo, a veces, nos sentimos fuera de control por nuestros pensamientos. Esto es
especialmente cierto para aquellos que luchan con preocupación, depresión, trastorno
obsesivo compulsivo, trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de estrés
postraumático, etc. Pensamientos se entrometen y entran a nuestras mentes, querer o
no. ¿Estamos fatalmente predestinados a ser víctimas indefensas frente a nuestros
pensamientos que corren galopantes? ¿Hay esperanza?
Esperanza
Hay esperanza, no sólo esperanza ligera como un vendaje en una herida profunda y
abierta, sino una esperanza basada en el carácter de nuestro Dios poderoso y amoroso.
Él es nuestra Roca, nuestro Redentor, y nuestra Refugio cuando nos sentimos asediados.
En primer lugar, nos creó y por lo tanto tiene el poder de recrear y restaurarnos. Y de
hecho, ha comenzado en Cristo. Cuando aceptamos a Cristo como nuestro Salvador, no
solo recibimos el perdón de los pecados tan grandes como esto es. También estamos
verdaderamente recreados como nuevos seres (2 Corintios 5:17) y estamos siendo
renovados a la imagen de Dios (Colosenses 3:10). Esto significa que Dios nos da nuevas
mentes — la mente de Cristo (2 Corintios 2:16). Y también recibimos nuevas voluntades
y nuevo poder para controlar nuestros pensamientos. El Espíritu Santo mismo está
obrando en la renovación de nuestras mentes (Romanos 12:1-2). Nuestra mente puede
convertirse más santo, puro, noble, y estar más en paz. ¡Esta es nuestra gran esperanza
de nuestro gran Dios!
¿Qué es el pensamiento distorsionado?
¿Qué es "el pensamiento distorsionado”? El pensamiento distorsionado es una
distorsión de la verdad. Es una manera de filtrar algunas cosas y aumentar otras. Si
alguna vez ha estado en una casa de diversión, se habrá visto a si mismo alargado,
agrandado, disminuido, retorcido, y distorsionada por los espejos. Pensamiento
distorsionado hace lo mismo con la verdad. Por ejemplo, muchos ven a Ronda como una
joven adepta, simpática, e exitosa. Pero ella siempre se está diciendo que es un fracaso,
no es capaz, etc. Su pensamiento distorsiona la verdad. Es incapaz de ver los dones y
habilidades que Dios verdaderamente le ha dado y se centra sólo en lo negativo.
Rosanna, por el contrario, distorsiona su pensamiento viéndose como la más sabia, la
que tiene todas las respuestas.
Romanos 12:3 “Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes:
Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más
bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le
haya dado”.
Digo lo siguiente con toda compasión y como alguien que también lucha contra el
pensamiento distorsionado. El pensamiento distorsionado es una forma de vivir una
mentira. Es rechazar o rebelarse contra Dios. Es formar nuestras propias realidades —
en pocas palabras, tratando de ser nuestros propios dioses (lo exploraremos más en la
siguiente sección). Al decir esto, tal vez parece duro cuando nos sentimos tan
impotentes. Sin embargo, esto significa que si no es de Dios, Dios nos ayudará a superar
y nos dará la victoria cuando nos dirigimos a él. Significa que está luchando por usted y
por la verdad. Él desea que experimentes la libertad.
Abajo se encuentra una lista de algunos patrones comunes del pensamiento
distorsionado:
 Blanco y negro – ¡Todo o nada, ahora o nunca! El pensamiento se encuentra
siempre en los extremos; no hay ninguna zona gris.
 Sí, pero – Se ignoran los aspectos positivos y se centra en los negativos.
 Adivinación de pensamientos – Se asume lo que la otra persona está pensando o
se lee en sus palabras o acciones sus propias presuposiciones.
 Predecir el futuro — Se cree que conoce el futuro, y generalmente es algo
negativo. Se pueden crear profecías auto cumplidas.
 Razonamiento emocional – Las emociones han vuelto rey en su vida. Dicta cómo
percibe las cosas, se juzga, actúa, etc.
 Etiquetar – Hace declaraciones de identidad basadas en acciones o percepciones,
tanto para sí mismo como para otros.
 Las declaraciones de deber – La carga legalista y pesada que a menudo surge de
un intento de vivir a la altura de otros o de nuestras propias expectativas.
 Sobregeneralizar – Uno o dos hechos o eventos se convierten en la base para una
conclusión; un par de cosas da color a todo.
 Catástrofe – Se exagera la probabilidad de que algo va a suceder, o exagera los
resultados (en su mayoría negativos) de algo.
¿De dónde viene el pensamiento distorsionado?
En primer lugar, es importante tomar en cuenta que el pensamiento brota del "corazón".
El corazón, en el sentido bíblico, es el centro de nuestro ser, nuestra esencia. Debemos
decidir en qué poner y fijar nuestros corazones, donde se encuentra nuestra lealtad y
nuestro amor — ¿es nuestro corazón orientado hacia Dios, hacia uno mismo o en el
mundo? Estamos en una gran guerra y debemos decidir dónde está nuestra lealtad. El
pensamiento distorsionado es sólo una batalla, una parte de esa guerra. Debemos
reconocer la centralidad del corazón porque eso dirige y controla nuestro pensamiento,
es donde reside nuestra mente, es lo que llena nuestras mentes, etc.
Sin embargo, el corazón no se gana ni se forma en un vacío. Hay influencias que dan
forma a nuestro corazón y a nuestro pensamiento:
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
Nuestra carne. Nuestra propia naturaleza carnal desea cosas que no son de Dios,
deja que el temor nos domine, o busca las formas de control. Podemos permitir
que nuestros corazones sean influenciados y formados por nuestra vieja
naturaleza, que significa nuestro pensamiento refleja la naturaleza vieja y del
mundo — que será distorsionada, ciega, y esclavizada. Pensamiento
distorsionado es a menudo una forma de protegernos y tratamos de controlar
nuestro mundo, confiando en nuestra carne en vez de en Dios.
Por ejemplo, Melissa anhela ser admirada y sentirse aceptada por otras; ella
disminuye el amor de Dios y se fija en cómo complacer a la gente. Esto da forma a
sus pensamientos — ella sobregeneraliza la opinión de sus conocidos y les
permite dictar cómo se siente acerca de sí misma. Se dedica a pensar en blanco y
negro — ella es bonita o no lo es, no hay ningún punto intermedio de reconocer
humildemente lo que Dios le ha dado. Ella hace catástrofe y adivina las mentes —
si su vecino no le hace un cumplido por su vestido nuevo, Melissa cree que el
vestido es horrible (aunque ella pensaba que era hermosa en la tienda) y que su
vecino debe pensar que ella es fea. Su pensamiento está influenciado por su carne
- necesidad de la aprobación de otros.

El mundo. Cuando nuestros corazones no estén completamente dedicados a Dios,
permitimos una influencia indebida del mundo en lugar de Dios y su verdad. No
hay ningún terreno neutral, se piensa de una manera piadosa o de una manera
mundana (Santiago 3:15-18; Santiago 4:4). Thomas Cranmer, un cristiano de
antaño, describió este proceso de la influencia mundial, cuando dijo que lo que el
corazón ama, la voluntad lo elige, y la mente lo justifica.
Volviendo a Melissa, ella permite al mundo (confabulado con su vieja naturaleza)
formar su corazón — su corazón anhela la popularidad y la alabanza del hombre.
Le encanta vestirse finamente y ser felicitada. Recorre las últimas revistas de
moda, llenando su mente con imágenes de modelos. Utiliza normas mundanas
para medir su belleza, aceptación, y valor. Los elogios de los demás son el tesoro
de su corazón. Esto, a su vez, da forma a su pensamiento — ella juzga a las menos
bonitas, las que visten menos de moda que ella. También, su pensamiento
evaluativo de sí misma se ha formado por su corazón: "Soy bonita. No soy bonita.
Nunca seré tan bonita como Jane. Mi nariz es demasiado grande. Tengo que
comprar un vestido nuevo para mantener mi popularidad. No se dio cuenta. No
soy bonita". Su mundo se ha conformado por su corazón y su pensamiento. No se
basa en la verdad, que es una niña preciosa de Dios, sin importar lo que otros
piensen de ella.

Física. Tenemos que reconocer que vivimos en un mundo caído y nuestra física
puede ser afectada. Las sinapsis del cerebro puede no funcionar bien y puede
señalar incorrectamente. Aquellos que sufren depresión, ansiedad o trastorno
pueden tener una vida difícil, pero no es una batalla imposible. El Espíritu nos
ayudará a controlar nuestros pensamientos, a llevarnos cautivos, y armonizar
nuestros pensamientos con los pensamientos de Cristo.
3

Satanás. Una influencia definitiva es la de Satanás, que capitaliza en la carne y en
sus debilidades. Él nos atrae con pensamientos y podemos morder el anzuelo,
permitiendo que nuestras mentes mediten en ellos, hasta aceptar su mentira
como la verdad.
Estas son las influencias, pero debemos darnos cuenta que a menudo elegimos pensar
de una manera distorsionada. No somos víctimas. Puede parecer imposible cambiar.
Podemos sentirnos indefensos. Pero comenzó con sólo un pequeño pensamiento. Nos
quedó la idea. Pensamos en ello otra vez. Y otra vez. Permitimos que permanezca en
nuestra mente. Meditamos en ello. Se convirtió en un hábito. Un pensamiento al cual
regresamos una y otra vez. Y comenzó a controlarnos y apoderarnos. Nos encontramos
esclavizados a lo que habíamos elegido libremente.
Sin embargo, esto significa que hay esperanza. En primer lugar, podemos arrepentirnos
y recibir el perdón por las formas en que hemos permitido que nuestras mentes sean
usurpadas, por como hemos elegido vivir en la mentira y caminar en la oscuridad, o
como hemos usado nuestras mentes en rebelión contra Dios. Segundo, significa que
podemos cambiar.
La lucha contra el pensamiento distorsionado
No somos víctimas indefensas — por el contrario, Dios está luchando por nosotros para
ayudarnos. Tenemos:
 A Dios mismo, en todas las tres personas, luchando por nosotros y
santificándonos (1 Tesalonicenses 5:23).
 Nuevas mentes, la propia mente de Cristo (1 Corintios 2:16).
 El Espíritu que está renovando nuestra mente (Romanos 12:1-2; Efesios 4:23;
Colosenses 3:10).
 Las armas con el poder divino de Dios para destruir fortalezas — el arraigado
pensamiento, las actitudes de pensamiento, las perspectivas habituales que
provienen de nuestra carne y del mundo (2 Corintios 10:4-5; Efesios 6:10-20).
 Esperanza, fe, y fuerza de Dios para perseverar en su poder (1 Tesalonicenses
2:16-17; 2 Tesalonicenses 3:5; Romanos 5:1-5; Santiago 1:2-4).
 Su poder que obra en nosotros (Efesios 1:18; Efesios 3:20-21).
 Su Palabra, sus promesas, y la verdad para ayudarnos (1 Peter 2 1:3-4).
Así que, si no somos víctimas indefensas de nuestros pensamientos, sino que tenemos
poder divino para destruir las fortalezas (como nuestro pensamiento distorsionado
habitual) (2 Corintios 10:4-5). ¿Cómo, entonces, debemos luchar contra el pensamiento
distorsionado?
Recuerde. En primer lugar, debemos conocer la verdad. Llenemos nuestras mentes con
la Palabra de Dios. Oremos el Salmo 119 y Salmo 19:14 por nosotros mismos. Pidámosle
al Espíritu que renueve nuestras mentes con la verdad (Romanos 12:1-2). ¿Cómo se
reconoce la distorsión? Por conocer lo bueno. Solamente cuando seguimos recurriendo a
la Palabra de Dios reconoceremos la verdad.
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Reconocer. En segundo lugar, reconozcamos el pensamiento como distorsionado, una
mentira, una trampa, o un pecado. Esto se aclarará cuando pensamos en la verdad, pero
es importante darle un nombre concreto.
Rechazar. Después de recordar y reconocer, rechacemos el creer el pensamiento
distorsionado. ¡Huyamos! (2 Timoteo 2:22). Encontremos formas de distraernos.
Debemos retirarnos de la situación que nos tienta a los pensamientos distorsionados.
Despojémonos de cosas que los perpetúan. Por ejemplo, Melissa tiene que deshacerse de
sus revistas de moda que están distorsionando su pensamiento. Corramos al Señor y
pidamos su ayuda.
“Reckon” o Considerar. Dado que pensamientos conducen a acciones, necesitamos
considerarnos como muertos a los pensamientos pecaminosos y esclavizantes.
Considerarnos muertos es decidir que lo que no es de Dios no nos define, y elegimos
vivir en la verdad de Dios y en su nueva vida. Tanto Ronda como Rosanna pueden
considerarse muertas a sus pensamientos distorsionados por no hablar de ellos en voz
alta. El pensamiento distorsionado de Ronda le impide intentar algo nuevo, "Siempre
fallo. No puedo hacerlo". Pero, ella misma lo puede considerar como muerto con su
propio pensamiento de la verdad, "Si Dios me ha llamado, él puede ayudarme a hacer
esto. No exige la perfección. Yo le puedo servir". Rosanna puede ceder de juzgar a otros.
Reposar. Muchas de las ideas distorsionadas provienen de una base de justicia por
obras y/o nuestros intentos de controlar.
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Pensar en "blanco y negro" es tratar de reducir el mundo a algo que podemos
controlar. El "Sí, pero" pensamiento proviene de la desesperación del fracaso,
cuando hemos basado nuestro valor en lo que hacemos y donde hemos fallado.
"Adivinación de los pensamientos" demuestra una preocupación central de cómo
se perciben las personas y nuestro intento de tratar de medir hasta sus
pensamientos.
"Predecir el futuro" es una manera de basar toda nuestra percepción en la
realidad de lo que hemos hecho en el pasado y en nuestros éxitos o fracasos.
"Razonamiento emocional" está permitiendo que nuestras emociones
mantengan influencia en lugar de Cristo.
Todos brotan del tratar de vivir en nuestra propia fuerza en lugar en la de Cristo.
Pidamos perdón a Cristo por cómo hemos rebelado contra él, y entonces descansemos
en Cristo. Es soberano sobre todas las áreas grises de la vida, y nos permitirá relajar
nuestro pensamiento "blanco y negro" y nuestro intento de controlar y entender. Su
aceptación solo por gracia nos permite enfrentar honestamente los fracasos (aceptación)
y humildemente recibir y estar agradecidos por nuestras fuerzas y éxitos (¡sólo por su
gracia!) que han estado distorsionados por las maneras de pensar distorsionados como
"Sí, pero," "sobregeneralizar," y "catástrofe". Su amor redentor que ha lavado nuestros
pecados y nos está renovando, combate el pensamiento distorsionado de "etiquetar".
Podemos descansar en Cristo.
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Reemplazar. Como aceptamos la verdad y descansamos en Cristo, podemos reemplazar
los pensamientos distorsionados. Los combatimos con poner nuestros pensamientos en
las cosas de arriba (Colosenses 3:1-4). Este pasaje de Colosenses es muy claro — nuestra
capacidad para establecer nuestros pensamientos en las cosas de arriba es por la obra de
Cristo - "YA QUE han sido resucitados con Cristo..." (Colosenses 3:1). Es porque
nosotros ya estamos descansando en Cristo, ya sentados con él en los lugares celestiales
(Efesios 2:6), que podemos fijar nuestra mente en las cosas de arriba, en lo que es puro,
santo, noble, justo, misericordioso (Santiago 3:17; Filipenses 4:8). Luchamos desde un
lugar de descanso, luchamos con su poder, no nuestro propio poder. Luchamos desde su
victoria. Y al igual que originalmente habíamos elegido para fijar nuestra mente en el
pensamiento terrenal y distorsionado que había llegado a esclavizarnos, así que con la
ayuda del Espíritu, nuestras mentes son siendo renovadas a ser como el suyo, puro y
libre.
Regocijarse. Finalmente, regocijémonos en las pequeñas victorias y alabemos a Dios por
su poder que vemos cambiándonos poco a poco. Esto nos ayudará a perseverar.
Anotemos en un cuaderno las pequeñas victorias que nos sirven para recordar lo lejos
que hemos venido y lo vemos ayudando a nosotros. No hay nada como alabanza para
expulsar los pensamientos oscuros, ciegos, y esclavizantes. Eso puede atestiguar muchos
de los salmos.
¿Qué es el sano pensar?
Por último, ¿qué es el sano pensar? A veces, podemos tener una idea falsa de que el
pensar sano es siempre ser feliz. No es ver el mundo a través de lentes color de rosa. Por
el contrario, pensamiento sano ve al mundo, a si mismo, y a otros con los ojos de Cristo.
Como Cristo, ve los pecados y las negativas de este mundo y le da tristeza. Sin embargo,
el pensar sano también ve a Dios obrando, providencialmente, detrás de las escenas
como el Señor soberano. Ve los puntos fuertes y los regalos que Dios ha dado a cada
uno. Pensamiento saludable se basa en la fe - percepción, no sólo la percepción de los
ojos o los oídos. Se sabe que hay una realidad mayor, un gran Dios trabajando en todo
momento. El pensar así se forma por este maravilloso Dios — este pensamiento surge de
su obra en nosotros. Cada una de las tres personas de la Trinidad — el Padre, Hijo, y
Espíritu — está ayudando a liberarnos de los pensamientos distorsionados para que
pensemos sus pensamientos santos y libres. Él mismo se ha comprometido a nosotros,
que somos para su alabanza y su gloria, en obras y en pensamientos (1 Tesalonicenses
5:23; Efesios 1:6, 12, 14).
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