Documentos para el análisis de la Historia de España LA ESPAÑA DE LA RESTAURACIÓN T. 10. EL RÉGIMEN DE LA RESTAURACIÓN La Constitución de 1876 (Doc.1) Don Alfonso XII, por la gracia de Dios, Rey constitucional de España; (...) sabed: Que en unión y de acuerdo con las Cortes del Reino actualmente reunidas, hemos venido en decretar y sancionar la siguiente Constitución (...) Art. 4.- Ningún español ni extranjero podrá ser detenido sino en los casos y en la forma que las leyes prescriban. Art. 5.- Ningún español podrá ser preso sino en virtud de mandamiento de juez competente. Art. 11.- La religión Católica, Apostólica, Romana, es la del Estado. La Nación se obliga a mantener el culto y sus ministros. Nadie será molestado en territorio español por sus opiniones religiosas, ni por el ejercicio de su respectivo culto, salvo el respeto debido a la moral católica. No se permitirán, sin embargo, otras manifestaciones públicas que las de la religión del Estado. Art. 13.- Todo español tiene derecho: De emitir libremente sus ideas y opiniones De reunirse pacíficamente De asociarse para los fines de la vida humana Art.18.- La potestad de hacer las leyes reside en las Cortes con el Rey. Art.19.- Las Cortes se componen de dos Cuerpos Colegisladores, iguales en facultades; el Senado y el Congreso de los Diputados. Art. 20.- El Senado se compone: 1º. De senadores por derecho propio. 2º. De senadores vitalicios nombrados por la Corona. 3º. De senadores elegidos por las corporaciones del Estado y mayores contribuyentes en la forma que determine la ley. Art. 27.- El Congreso de los Diputados se compondrá de los que nombren las juntas electorales, en la forma que determine la ley. Art. 50. La potestad de hacer ejecutar las leyes reside en el Rey Art. 51.- El Rey sanciona y promulga las leyes Art. 52. - Tiene el mando supremo del Ejército y Armada (…) Art. 75. - Unos mismos Códigos regirán en toda la Monarquía Comentario: Pertenece este fragmento a la Constitución de 1876, elaborada por una comisión de notables, antiguos parlamentarios y altos cargos, que presentaron el proyecto a unas Cortes elegidas por sufragio universal masculino, como se había establecido en la Constitución de 1869, última en vigor. Del análisis de sus artículos extraemos las características del Estado que va a configurar: a. Forma de gobierno: Monarquía constitucional (preámbulo) b. Soberanía: compartida (preámbulo y art. 18) c. División de poderes: No existe una estricta separación de poderes, al compartir el legislativo las Cortes y el Rey (art. 18, 20 y 51). Dichas Cortes son bicamerales (art. 19). El poder ejecutivo reside en el Rey (art. 50) d. Sistema electoral: Existen tres tipos de senadores: por derecho propio (altos cargos civiles, eclesiásticos y militares, además de la alta nobleza); por designación real y elegidos por los mayores contribuyentes (art. 20). La elección de los diputados será ----------------------------------------------------------------------------------- 1 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España e. f. g. h. i. regulada por una ley posterior (art. 27), por tanto, no se fija en la Constitución el tipo de sufragio. Derechos y deberes de los ciudadanos: libertad de imprenta, reunión y asociación (art. 13); además de la libertad de conciencia, aunque no de culto (art. 11). Se establece un Estado de Derecho (art. 4 y 5) Modelo territorial: Sólo encontramos en este fragmento la referencia a la unificación de códigos (art.75), por tanto al fin de los particularismos regionales Relaciones Iglesia/Estado: Estado confesional (art. 11), con mantenimiento del culto y clero por el Estado. Se tolera el culto privado de otras confesiones. Orden público: no se explicita en este fragmento Otros aspectos relevantes: Resulta significativa, en el preámbulo, la mención expresa al origen divino del poder real, entroncando en cierto modo con el Antiguo Régimen, que sirve para justificar la soberanía compartida. En el mismo sentido, se emplea la expresión “Cortes del Reino”, institución que, junto con la monarquía, Cánovas del Castillo consideraba consustanciales a la historia de España y superiores a cualquier Constitución. Además, se concede al monarca el mando supremo del Ejercito, buscando una vinculación entra ambas instituciones que ponga freno a los pronunciamientos militares y la intromisión militar en la vida política. Por tanto, esta Constitución recoge el programa político del liberalismo doctrinario defendido por los moderados, ahora agrupados en el Partido Liberal Conservador. Así, la soberanía nacional es sustituida por la soberanía compartida. Se conceden amplias atribuciones a la Corona, que comparte el poder legislativo y nombra a un tercio de los senadores, además de tener derecho de veto absoluto y ser quien convoca, suspende y disuelve las Cortes. De este modo, la separación de poderes no se respeta. La confesionalidad del Estado indica también el carácter conservador del texto. Los derechos y libertades no aparecen regulados en la Constitución, sino que se remite a leyes posteriores que, en muchas ocasiones los recortan; además, al no tener rango constitucional, pueden dejarse en suspenso. Tampoco establece la Constitución el tipo de sufragio. Esta ambigüedad es calculada, pues permite gobernar indistintamente a conservadores y liberales, quienes, en su alternancia en el poder, podrán hacer una interpretación más amplia o más restringida del texto constitucional. Observamos en este texto importantes semejanzas con la Constitución de 1845: soberanía compartida y amplias atribuciones concedidas a la Corona bicameralismo senadores por nombramiento real con carácter vitalicio derechos, aunque enunciados, no garantizados y cuyo desarrollo legal es posterior a la propia Constitución el sufragio no aparece determinado en la Constitución confesionalidad del Estado Antonio Cánovas del Castillo, el gran artífice de la Restauración presidía el gobierno en el momento de aprobarse esta Constitución, que se mantuvo vigente hasta 1931, aunque desde 1924 entraría en suspenso al comenzar entonces la dictadura de Primo de Rivera. El sistema político de la Restauración se basaba, además de en la Constitución de 1876, en el bipartidismo político y el turno pacífico en el ejercicio del poder. Se consiguió así eliminar el intervencionismo militar mediante pronunciamientos e integrar en el ejercicio del poder, y por tanto en el sustento del sistema, al conjunto de los liberales monárquicos, desde moderados a demócratas. Estas tendencias se agruparon en dos partidos. El Partido Liberal Conservador, presidido por Cánovas, se constituyó con moderados y unionistas; mientras que en el Partido Liberal Fusionista, bajo presidencia de Sagasta, se integraron antiguos ----------------------------------------------------------------------------------- 2 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España progresistas y demócratas. El país vivió la más larga etapa de estabilidad de su historia contemporánea y su constitución ha sido la que más años se ha mantenido en vigor hasta la fecha. Sin embargo, dicha estabilidad se basaba en la exclusión de los grupos opositores (republicanismo, nacionalismo y movimiento obrero) además de en el fraude electoral. Para que el sistema funcionara se sacrificó la democracia. Eran los propios líderes políticos los que pactaban su alternancia en el poder y fabricaban la mayoría parlamentaria indispensable para gobernar (el “encasillado”). Esto se lograba falseando las elecciones, para lo que era necesario el concurso de los “caciques”, quienes se encargaban de que se cumplieran los resultados previstos mediante la coacción, la compra de votos o el “pucherazo”. El analfabetismo y la red de clientelismo de una sociedad rural permitieron el funcionamiento del sistema hasta principios del siglo XX. El turnismo (Doc.2) Sátira periodística sobre el turno de partidos. Cánovas y Sagasta son, alternativamente, cocinero y cliente, pero a España siempre le toca ser la fregona. Comentario: Las viñetas muestran alternativamente a Cánovas (arriba) y a sagasta (abajo) dando cuenta de sus platos, mientras en la cocina, el rival prepara el “caldo gordo”, es decir, se presta al juego, hace la vista gorda ante el uso fraudulento del sistema electoral. Quien lava los platos siempre es España, esto es, el país, los ciudadanos, quienes no estarán realmente representados en las instituciones y quienes sufrirán, además, las consecuencias sociales y económicas de la corrupción y el clientelismo. ----------------------------------------------------------------------------------- 3 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España El sistema canovista se basaba en la alternancia política de los dos partidos dinásticos, Liberal y Conservador. Sólo manteniendo dicha alternancia las cosas permanecían en su sitio. El éxito de Cánovas consistió en integrar a los ahora llamados Liberales (antes progresistas y demócratas) que, al participar del poder político, renunciaron a los pronunciamientos militares y la revolución como vía política. El único problema era que todo el aparato institucional era fraudulento, sacrificando la verdadera democracia. Cánovas renovó a la Unión Liberal, su partido, integrando en ella a los antiguos moderados para formar, todos juntos, el Partido Liberal Conservador, defensor del liberalismo doctrinario. Su ideología partía de la defensa de la soberanía compartida, el sufragio censitario y los intereses de la oligarquía. Pero, para el buen funcionamiento del sistema, era preciso contar con una oposición que colaborara en el mantenimiento del mismo, apoyara a la restaurada monarquía y compartiera el ejercicio del poder. Esa oposición estuvo representada por el Partido Liberal Fusionista, en el que Práxedes Mateo Sagasta agrupó a progresistas, demócratas y republicanos moderados. Heredaron de aquellos al defensa de los derechos y libertades, incluido el sufragio universal masculino y el laicismo. El turnismo, consagrado por el Pacto del Pardo (1885), a la muerte de Alfonso XII, preveía la alternancia pacífica de ambos partidos. Cuando el partido gobernante se desgastaba por el ejercicio del gobierno o por disensiones internas, el rey encargaba la formación de un nuevo gobierno al partido hasta ese momento en la oposición, a la vez que disolvía las Cortes. El nuevo gobierno organizaba las elecciones legislativas que siempre ganaba por amplia mayoría. Para hacer esto posible, desde el Ministerio de Gobernación se distribuía a los gobernadores provinciales la lista con los candidatos que debían salir elegidos en cada provincia (“encasillado”). A su vez, el gobernador debía hacer llegar a los caciques locales dichos listados y este, utilizando su capacidad de presión, conseguía los resultados apetecidos. Normalmente no necesitaba recurrir a la violencia, pues era suficiente su poder para otorgar beneficios a cambio de votos o para amañar los resultados (“pucherazo”). Solo las ciudades escapaban a esta red de clientelismo y corrupción, pues allí era más difícil la dependencia del cacique. Por eso el voto urbano, sobre todo desde que se estableció el sufragio universal en 1890, era considerado más fiel a la voluntad popular y fue en este medio donde los republicanos consiguieron representación. En el campo, por el contrario, el analfabetismo y la dependencia económica de una población muy pobre, hicieron posible el buen funcionamiento de todo el engranaje. ----------------------------------------------------------------------------------- 4 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España T. 11. EL REPUBLICANISMO Y EL MOVIMIENTO OBRERO Programa fundacional del PSOE (Doc. 1) El Partido Socialista Obrero Español declara que su aspiración es: la abolición de todas las clases, es decir, la completa emancipación de la clase trabajadora, la transformación de la propiedad individual de los instrumentos de trabajo en propiedad colectiva, social o común. La posesión del poder político por la clase trabajadora. Y como medios inmediatos para la realización de este ideal, los siguientes: Libertades políticas. Derecho de asociación y legalidad de las huelgas. Reducción de las horas. Prohibición del trabajo de los niños menores de nueve años (...). Creación de escuelas gratuitas para la primera y segunda enseñanza y de escuelas profesionales en cuyos establecimientos la enseñanza sea laica (...). Justicia gratuita y jurado para todos los delitos. Servicio de armas obligatorio y universal (...) Madrid, 9 de julio de 1879 Comentario: En el programa fundacional del PSOE, de 1879, encontramos, en primer lugar, una declaración de intenciones o programa máximo, que expone los principios marxistas: Abolición de clases Socialización de los medios de producción Reclamación del poder político (dictadura del proletariado) El programa mínimo, calificado en el texto de “medios inmediatos”, expone, sin embargo, el que se convertirá en programa reformista: Mejoras laborales (reducción de jornada, derecho de huelga, regulación restrictiva del trabajo infantil) Mejoras sociales (reivindicaciones educativas, jurídicas, servicio militar universal, es decir, fin de la redención económica de dicho servicio) Derechos políticos (libertad de asociación, derecho de voto) El moviendo obrero, que había adquirido fuerza y organización durante el Sexenio Democrático, pasará a la clandestinidad tras el golpe de Pavía en 1874. Su lenta reconstrucción empezará a finales de esa década, aunque hasta 1881, con la mayor permisibilidad el gobierno de Sagasta, no saldrá a la luz. Desde entonces, y sobre todo desde 1887, con la Ley de Asociaciones, el movimiento obrero español irá consolidándose alrededor de las dos tendencias ideológicas, marxista y anarquista, que habían llegado a partir de 1868. El marxismo, minoritario en nuestro país frente al claro predominio anarquista, había sido difundido por Paul Lafargue, yerno de Marx, desde su llegad a España en 1871, expulsado de Francia tras los sucesos de la Comuna. En Madrid entró en contacto con un grupo de intelectuales y de obreros especializados (tipógrafos), que fundaron en ese mismo año la Asociación del Arte de Imprimir. Su expulsión de la Federación Regional Española en el congreso de Zaragoza de 1872, controlada por los anarquistas, llevó a ese grupo a constituirse en la “Nueva Federación Madrileña”, presidida por Pablo Iglesias. Sería el núcleo del que nació el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en 1879. ----------------------------------------------------------------------------------- 5 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España Los planteamientos organizativos del marxismo, enfrentado a todos los partidos burgueses, incluidos los republicanos, su búsqueda del voto obrero para hacerse un hueco en el Parlamento, su alejamiento de los anarquistas, además del escaso número de obreros industriales entre el proletariado español, explican su escasa difusión en sus primeros tiempos. Sin embargo, obtendrían su primer diputado, el propio P. Iglesias, en 1910 como resultado de la coalición electoral republicanosocialista. El reformismo hacia el que se orientaron dio lugar a la escisión comunista en 1921. Al contrario que los anarquistas, optaron por la lucha política y el moderantismo en sus reclamaciones, a la espera de que la clase obrera estuviese preparada para la revolución socialista. Su acción sindical fue canalizada a través de la Unión General de Trabajadores (UGT), creada en 1888 en el Congreso de Barcelona. Estrechamente vinculado el partido, el sindicato tuvo entre sus más destacados líderes a Julián Besteiro y a Francisco Largo Caballero, aunque su afiliación fue muy inferior a la anarquista (CNT). Encontró apoyo, además de en los obreros madrileños, entre los mineros, con núcleos socialistas en Asturias, Vizcaya y las cuencas mineras andaluzas de Riotinto y Linares-La Carolina. Presos de la Mano Negra (Doc. 2) Comentario: Muestra la imagen a los presos acusados de pertenecer a la sociedad secreta, de raíz anarquista, llamada la “Mano Negra”. Desarticulada en Jerez en 1883, a esta supuesta sociedad se culpo de una serie de asesinatos que habían tenido lugar en los alrededores durante ese año y el anterior. La Guardia Civil dijo haber encontrado pruebas de una supuesta organización revolucionaria de la que formarían parte varios militantes de la FTRE, (Federación de Trabajadores de la Región Española,) a los que se detuvo. Los centenares de detenciones en las provincias de Cádiz, Sevilla y Córdoba, consiguieron desarticular el movimiento obrero andaluz. Aunque los ----------------------------------------------------------------------------------- 6 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España hechos demostrados se limitaban a la participación de anarquistas en dos asesinatos, por motivos personales y sin motivación política, el proceso se extendió a todos los militantes, a los que se achacaron innumerables asesinatos, robos y secuestros, y por los que fueron ajusticiadas siete personas y otros cientos fueron expatriados a Filipinas. Pese a los signos de montaje de todo el proceso, llevado a cabo con fines políticos, la propia FTRE se desentendió de la defensa de sus afiliados y rechazó cualquier vinculación con delitos comunes. El desprestigio que esta campaña entrañó para los anarquistas, enfrentó a los anarcosindicalistas catalanes, partidarios de la lucha sindical, con los anarcocomunistas andaluces, más inclinados por la acción violenta. El anarquismo, mayoritario entre los obreros españoles desde la llegada de Fanelli en 1868, había salido de la clandestinidad en 1881, al refundarse en Barcelona la Federación de Trabajadores de la Región Española. Su negación de la lucha política hizo que se centraran en la acción sindical. Esta opción estaría representada primero por “Solidaridad Obrera”, periódico del que nació, en 1911, la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), el sindicato con más afiliación en España, sobre todo en Cataluña y Andalucía. Entre sus líderes, tras Anselmo Lorenzo, el relevo lo tomaron Salvador Seguí y Ángel Pestaña. ----------------------------------------------------------------------------------- 7 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España T. 12. REGIONALISMO Y NACIONALISMO Memorial de Greuges (Doc. 1) No tenemos, Señor, la pretensión de debilitar la gloriosa unidad de la patria española, antes por el contrario, deseamos fortificarla y consolidarla, pero entendemos que para lograrlo no es buen camino destruir la vida regional para sustituirla por la del centro, sino que creemos que lo conveniente es dar desarrollo a las diversas provincias de España. (…) Señor, se nos arrebató nuestro sistema administrativo para ser sustituido, primero por el castellano y hoy por una copia del francés. No podemos usar nuestra lengua más que en nuestros hogares. (….) Se intenta destruir nuestro derecho civil, base de la organización de la familia catalana y de nuestra propiedad (…) A base de trabajo y privaciones nuestros industriales han creado una industria española que ha alcanzado altísimo nivel. Esta industria viene siendo atacada (…) por medio del tratado con Francia y del proyecto con Inglaterra. ¿Cómo ha de competir nuestra industria, débil, con la más robusta británica? V. Almirall. Memorial de Greuges.1885 Comentario: Encontramos en el texto las bases del regionalismo catalán, expuestas por Valentí Almirall al rey Alfonso XII en 1885. Expresa el autor, desde una posición moderada y no separatista, las quejas que Cataluña hace al Estado centralista que nace con el liberalismo. Entre estas, la supresión de las particularidades organizativas y legislativas de que disponían algunos territorios peninsulares con anterioridad a la implantación del centralismo borbónico. Así, en el segundo párrafo hay una referencia directa a los Decretos de Nueva Planta, suprimidos por Felipe V tras la Guerra de Sucesión, y al centralismo de corte francés que se va a imponer a partir de los años centrales del siglo XIX (la Década Moderada, con la Constitución de 1845 y las medidas legales y administrativas que la acompañan). Del mismo modo, se expresa la queja por la postergación del catalán y la supresión del derecho civil particular de este territorio, base, dice, de la organización familiar y de la propiedad, cuya fragmentación por herencia se evitaba con la figura de “hereu”, o heredero único entre los payeses catalanes. Después de reivindicar el uso de la lengua vernácula, y la recuperación del derecho propio, hace Almirall una defensa del proteccionismo, como único medio de defender a la industria catalana de la competencia exterior. El regionalismo y nacionalismo surgió en España a finales del siglo XIX como reacción al modelo centralista del Estado liberal. El renacimiento cultural, propio del Romanticismo, con su exaltación del pasado y de las particularidades de cada pueblo, se manifestó en la reivindicación de la lengua y la cultura propias (Renaixença) y sirvió de base a las reivindicaciones políticas al considerar que aquellos signos de identidad configuraban una nación. Vemos en este fragmento del Memorial de Agravios las reivindicaciones propias del catalanismo, que unen a la autonomía política el proteccionismo económico. Almirall, heredero de la tradición federalista criticó duramente el caciquismo y, en general, el funcionamiento de la Restauración. Pero su regionalismo progresista y laico no encontró el eco que alcanzará Prat de la Riba una década después, desde posiciones más conservadoras que saben atraerse a la burguesía catalana. Primero Unió Catalanista (1891) y después la LLiga Regionalista (1901) conseguirán unir a los distintos grupos catalanistas para, en alianza electoral, desbancar en Cataluña a los partidos dinásticos, sobre tras la pérdida de Cuba en el 98 de la que se hace responsable a los políticos centralistas. ----------------------------------------------------------------------------------- 8 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España El proyecto territorial de Sabino Arana (Doc.2) Comentario: El mapa representa los llamados “territorios históricos”, reivindicados por Sabino Arana para la constitución de una Euskadi independiente, formada por las cuatro provincias “ocupadas” por el Estado español (Vizcaya, Guipúzcoa, Álava y Navarra) más las tres del territorio bajo acupación francesa (Lapurdi, Benafarroa y Zuberoa). El nacionalismo vasco fue obra de Sabino Arana Goiri, fundador del Partido Nacionalista Vasco en 1895. La formulación de su ideario, independentista, antiliberal y basado en la existencia de una raza vasca caracterizada por su religiosidad, se enmarca en un contexto histórico caracterizado por el fin de la foralidad en 1876 tras la tercera guerra carlista y por la industrialización. Con este última llegaron, sobre todo a Vizcaya, inmigrantes de las regiones limítrofes (“maketos”) que, para Araba, suponían un peligro para la pervivencia del pueblo vasco, que debía mantenerse puro, sin mezclar con esas gentes para no contaminar su raza, perder su lengua y su catolicismo, igual que a industria esteba contaminando sus verdes valles. Esta idealización del pasado preindustrial y el rechazo al marxismo que se extendía contre los obreros llegados de fuera son otros rasgos distintivos. No conseguirá este nacionalismo extenderse más que en ámbito rural y entre la pequeña burguesía, mientras que los industriales vascos se sintieron más próximos al régimen centralista de la restauración, cuyos intereses defendía mejor. Sólo con la incorporación de Ramón de la Sota, que modera el discurso para atraer a las clases medias, conseguirá mayor difusión el nacionalismo vasco, dentro del cual se distinguen dos corrientes, la moderada (autonomísta) y la sabinista (independentista) ----------------------------------------------------------------------------------- 9 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España T. 13. LA CAÍDA DEL IMPERIO COLONIAL Y LA CRISIS DEL 98 Tratado de París (Doc. 1) Art. 1. España renuncia a todo derecho de soberanía y propiedad sobre Cuba. Art. 2. España cede a los EEUU la isla de Puerto Rico y las demás que están ahora bajo su soberanía en las Indias Occidentales, y la Isla de Guam en el archipiélago de las Marianas. Art. 3. España cede a los EEUU el archipiélago conocido como las Islas Filipinas (...) Los Estados Unidos pagarán a España la suma de 20 millones de dólares dentro de los tres meses después del canje de ratificaciones del presente Tratado. Art. 9. Los súbditos españoles podrán permanecer en dicho territorio o marcharse de él, conservando en uno u otro caso, todos los derechos de propiedad. París, 10 de diciembre de 1898 Comentario: Encontramos en el texto las condiciones de la paz impuestas por Estados Unidos a España tras la derrota de ésta en la guerra del 98. Como vemos, España concedió la independencia a Cuba y vendió los restantes territorios a Estados Unidos por 20 millones de dólares. En realidad, Cuba permanecería militarmente ocupada por la nueva metrópoli hasta 1902 y, desde esa fecha y hasta 1934, la enmienda Platt a la Constitución cubana permitía la intervención estadounidense en defensa de sus intereses en la isla. Además, los estadounidenses arrendaron por 200 $ anuales Guantánamo como base naval, situación que se mantiene en la actualidad. Las inversiones en Cuba se multiplicaron y un acuerdo comercial otorgó condiciones preferenciales para los norteamericanos. Por su parte, Puerto Rico también fue ocupado y administrado militarmente hasta 1900, cuando el ejército fue sustituido por un gobernador civil nombrado por el presidente de EEUU, situación que no cambió hasta mediados del siglo XX, cuando dicho cargo empezó a ser electivo por los propios portorriqueños. En 1952 adquirió la actual condición de Estado Libre Asociado, lo que significa que pertenece a Estados Unidos sin formar parte de los mismos y sus habitantes tienen la ciudadanía estadounidense, pero no están representados en las instituciones federales ni participan en la elección del presidente norteamericano. En Filipinas, cuya burguesía mestiza había reclamado la independencia de España desde 1896 liderada por el médico José Rizal, la firma del Tratado de París dio lugar a un cambio de enemigo, comenzando entonces la guerra filipinoestadounidense hasta 1911, especialmente sangrienta. La independencia política la obtendrían en 1946, aunque el archipiélago siguió bajo control económico estadounidense. Para España, el Tratado supuso la perdida de los restos de su imperio colonial y su postergación, por tanto, en la política internacional. Además, de esta consecuencia territorial, las pérdidas humanas se elevaron en más de 50.000 muertos y varios cientos de miles de heridos. Las pérdidas económicas, aunque inicialmente muy importantes al desaparecer para España los ingresos que proporcionaba la exportación de azúcar, café o tabaco, además de perder el mercado colonial para las manufacturas españolas, se compensaron con la ----------------------------------------------------------------------------------- 10 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España repatriación de capitales hacia la Península. Desde el punto de vista político, aunque la Restauración se mantuvo como régimen, a partir de esta fecha comenzaría una serie de crisis sucesivas que conducirían a la dictadura de Primo de Rivera. Más evidente sería la crisis de conciencia nacional, las críticas a políticos y militares como responsables del desastre y el deseo de “regenerar” la vida nacional y acabar con los males del sistema, especialmente el caciquismo y la corrupción, lo que reforzaría a las fuerzas de oposición. Batalla de Santiago de Cuba (Doc.2) Comentario: Muestra el mapa la batalla de Santiago de Cuba del 3 de julio de 1898, en la que se enfrentaron las fuerzas españolas con las estadounidenses. Éstas bloquearon el puerto de Santiago, donde se había refugiado la armada española dirigida por el almirante Cervera quien, obedeciendo órdenes sacrificó la flota saliendo del puerto. Mientras, los combates de Caney y San Juan eran escenario de lucha entre ambos ejércitos. La desigualdad de fuerzas, por su número pero, sobre todo, por enfrentarse los barcos españoles de madera a los modernos acorazados norteamericanos, explican la brevedad de la batalla y la contundencia de la derrota que apenas supuso bajas para EEUU mientras que murieron unos 600 españoles y todos los supervivientes fueron hechos prisioneros. A este combate le había precedido dos meses antes (1 de mayo) la batalla de Cavite, en el Pacifico, en la que la flota española al mando del almirante Montojo ya había corrido la misma suerte frente a la bahía de Manila, perdiendo de este modo el control de Las Filipinas. ----------------------------------------------------------------------------------- 11 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja Documentos para el análisis de la Historia de España El enfrentamiento entre España y Estados Unidos tuvo lugar en el contexto de la Guerra de Cuba, que estalló con el Grito de Baire en 1895, teniendo a José Martí y su Partido Revolucionario Cubano como el principal motor del enfrentamiento. El conflicto había empezado, realmente, en la llamada Guerra Larga (1868-78) a la que había puesto fin la Paz de Zanjón, cuyo incumplimiento sirvió de detonante para la guerra definitiva. Los intereses opuestos, en lo político y económico entre cubanos y peninsulares estaban en la raíz del conflicto. En el rechazo por parte de España a conceder un régimen de autonomía política y en las duras medidas del capitán general, Valeriano Weyler, encontraron los Estados Unidos motivos que justificaran su ingerencia en nombre, supuestamente de la libertad y la democracia. Su interés por la isla se encontraba en motivos económicos y estratégicos, por eso, los norteamericanos, en proceso de expansión territorial, habían intentado comprar Cuba, sin éxito. El incidente del Maine les proporcionó una excusa para declarar la guerra a España, con los resultados que conocemos y que se saldaron, tras la firma del Tratado de París, con la pérdida del imperio colonial español. ----------------------------------------------------------------------------------- 12 2º Bachillerato. Curso 07/08 Gema Gómez Díaz-Caneja