El Autor de la Semana José Ángel Valente

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UNIVERSIDAD DE CHILE
-
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES
El Autor de la Semana
José Ángel Valente
Selección de Poesía
El Autor de la Semana - © 1996-2001
Facultad de Ciencias Sociales – Universidad de Chile
El Autor de la Semana - © 1996-2001
Facultad de Ciencias Sociales – Universidad de Chile
José Ángel Valente: Selección de Poesía
Selección y edición de textos:
© 2001 Oscar E. Aguilera F. ([email protected])
.
Se prohíbe la reproducción comercial de los textos presentados en la serie “El Autor de la
Semana”. Se autoriza la difusión a través de Internet de estos documentos, en otros sitios
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Oscar E. Aguilera F. [email protected]
UNIVERSIDAD DE CHILE - FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES
El Autor de la Semana
José Ángel Valente
(1929-2000)
José Ángel Valente, uno de los más importantes poetas contemporáneos nació en Orense, ciudad
de Galicia, en España el 25 de abril de 1929. Poeta con marcadas influencias de los poetas
místicos y metafísicos, admirador de San Juan de la Cruz, ejercitó también el ensayo y la prosa
poética.
En sus obras encontramos temas históricos, políticos y biográficos, con preocupado acento hacia
los explotados y el mundo exterior. A los 18 años publicó su primera obra: Romance de Fisterre y a
lo largo de su trayectoria ganó dos veces el premio de la Crítica; el primero en 1960 por su obra
Poemas a Lázaro y el segundo en 1980 por Tres lecciones de tinieblas. Antes, en 1955 obtuvo el
premio Adonais y en 1988 fue galardonado con el premio Príncipe de Asturias. Los estudiosos de
su obra han catalogado a Las palabras de la tribu (1971) uno de los ensayos literarios más bellos
que se han escrito.
Eterno inconforme y rebelde, abandonó su patria en plena dictadura militar franquista en 1954 y fue
juzgado en 1972 por el régimen de Francisco Franco en un Consejo de Guerra, por "supuestas
ofensas" hacia el Ejército de su país, referidas en su cuento El uniforme del general, incluido en el
libro El número trece; aunque Valente en ese entonces se encontraba residiendo en Ginebra,
Suiza.
Valente también trabajó para la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y para el organismo
destinado a la cultura y la educación la UNESCO y su última obra literaria fue Nadie, primera parte
de un poemario que dejó inconcluso, pues este gran autor falleció el 18 de julio de 2000 en una
clínica de Ginebra tras una larga y dolorosa enfermedad.
OTROS ANTECEDENTES BIOGRÁFICOS
El mismo año que ganó el Adonais salió para Oxford (1958) y trabajó en Ginebra como profesor y traductor de la
Unesco; después, a su regreso en 1986 se instaló en Almería. El escritor fue uno de los poetas más contundentes
del panorama literario español de los últimos 50 años. Alejado de los círculos literarios, Valente emprendió una
trayectoria que pasa por ser de las más coherentes de su generación.
José Ángel Valente llegó a Almería a mediado de los ochenta, se dejó seducir por esa tierra, y acabó cantándole
tanto como a su Galicia natal. De ese paisaje de Cabo de Gata, Valente escribió: "Las cañas dialogan con el viento.
Tienden largas cuchillas. Se defienden contra la violencia de la muerte. Las varas del agave suben al cielo, bordan
las nubes y la oscuridad. Después, vencidas, mueren para aguardar, como todos los muertos, un nuevo
nacimiento".
Se fue de Galicia, aunque el idioma materno quedó en él y volvió a despertar en 1980. Desde entonces, volvió a
escribir en gallego. El conjunto de sus poemas en gallego está recogido en un libro, Cántigas de Alén, publicado en
1996 en una edición bilingüe, con ilustraciones de Eduardo Chillida, por el Consorcio de Santiago.
Los restos de Valente, reposarán, sin embargo, en su tierra nata, en Orense y los 7.000 ejemplares de su biblioteca
serán donados a la universidad compostelana, que también va a crear con su nombre una cátedra de Poesía y
Estética.
Valente, que tiene publicada su obra poética en dos volúmenes Punto cero, 1953-1976, y Material Memoria, 19771992, y una antología bajo el título 'El fulgor', en Círculo de Lectores-Galaxia Gutemberg, sostiene que "los poetas
tiene que acostumbrase a no decir palabras, sino a oír lo que la palabra nos dice, es la palabra quien tiene que
hablar en nosotros".
Su obra, centrada en el exilio y el destierro, desprende una nostalgia palpable en sus poemas. Con su línea de los
años cincuenta, basada en la crítica moral y plasmada en la obra "Palabras a Lázaro" ganó el premio de la crítica
catalana. No obstante el estilo del artista fue cambiando. En la siguiente etapa fueron la filosofía y la mística los
protagonistas de sus escritos.
Bibliografía
Tres grandes ciclos poéticos:
1. Obra poética 1. Punto cero (1953-1976) que reúne su obra poética entre 1953 y 1976:
A modo de esperanza (1954); Poemas de Lázaro (1960); La memoria de los signos (1966); Siete presentaciones
(1967); Breve son (1968); Presentación y memorial para un monumento (1970); El inocente (1970); Treinta y siete
fragmentos (1971); Interior con figuras (1976).
2. Obra poética 2. Material memoria (1977-1992) escrito entre 1977 y 1992: Material memoria (1979); Tres
lecciones de tinieblas (1980); Mandorla (1982); El fulgor (1984); Al dios del lugar (1989); No amanece el cantor
(1992).
3. Fragmentos para un libro futuro, trabajaba con sus poemas de los últimos años y está sin publicar.
Algunas obras en prosa
Las palabras de la tribu(1971).
El fin de la edad de plata (1973).
Variaciones sobre el pájaro y la red y La piedra y el centro (1991).
©2001 Carmen Domingo
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
José Ángel Valente
Selección
El Temblor
La lluvia
como una lengua de prensiles musgos
parece recorrerme, buscarme la cerviz, bajar,
lamer el eje vertical,
contar el número de vértebras que me separan
de tu cuerpo ausente.
Busco ahora despacio con mi lengua
la demorada huella de tu lengua
hundida en mis salivas.
Bebo, te bebo
en las mansiones líquidas
del paladar
y en la humedad radiante de tus ingles,
mientras tu propia lengua me recorre
y baja,
retráctil y prensil, como la lengua
oscura de la lluvia.
La raíz del temblor llena tu boca,
tiembla, se vierte en ti
y canta germinal en tu garganta.
El Autor de la Semana ©1996-2001 Programa de Informática- Facultad de Ciencias Sociales
– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
1
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Noche Primera
Empuja el corazón,
quiébralo, ciégalo,
hasta que nazca en él
el poderoso vacío
de lo que nunca podrás nombrar.
Sé, al menos,
su inminencia
y quebrantado hueso
de su proximidad.
Que se haga noche. (Piedra,
nocturna piedra sola.)
Alza entonces la súplica:
que la palabra sea sólo verdad.
El Autor de la Semana ©1996-2001 Programa de Informática- Facultad de Ciencias Sociales
– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
2
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Oda a la Soledad
Ah soledad,
Mi vieja y sola compañera,
Salud.
Escúchame tú ahora
Cuando el amor
Como por negra magia de la mano izquierda
Cayó desde su cielo,
Cada vez más radiante, igual que lluvia
De pájaros quemados, apaleado hasta el quebranto, y quebrantaron
Al fin todos sus huesos,
Por una diosa adversa y amarilla
Y tú, oh alma,
Considera o medita cuántas veces
Hemos pecado en vano contra nadie
Y una vez más aquí fuimos juzgados,
Una vez más, oh dios, en el banquillo
De la infidelidad y las irreverencias.
Así pues, considera,
Considérate, oh alma,
Para que un día seas perdonada,
Mientras ahora escuchas impasible
O desasida al cabo
De tu mortal miseria
La caída infinita
De la sonata opus
Ciento veintiséis
De Mozart
Que apaga en tan insólita
Suspensión de los tiempos
La sucesiva imagen de tu culpa
Ah soledad,
Mi soledad amiga, lávame,
como a quien nace, en tus aguas australes
y pueda yo encontrarte,
descender de tu mano,
bajar en esta noche,
en esta noche séptuple del llanto,
los mismos siete círculos que guardan
en el centro del aire
tu recinto sellado.
El Autor de la Semana ©1996-2001 Programa de Informática- Facultad de Ciencias Sociales
– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
3
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Materia
Convertir la palabra en la materia
donde lo que quisiéramos decir no pueda
penetrar más allá
de lo que la materia nos diría
si a ella, como un vientre,
delicado aplicásemos,
desnudo, blanco vientre,
delicado el oído para oír
el mar, el indistinto
rumor del mar, que más allá de ti,
el no nombrado amor, te engendra siempre.
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– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
4
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
XXXV
De «El Fulgor»
La aparición del pájaro que vuela
y vuelve y que se posa
sobre tu pecho y te reduce a grano,
a grumo, a gota cereal, el pájaro
que vuela dentro
de ti, mientras te vas haciendo
de sola transparencia,
de sola luz,
de tu sola materia, cuerpo
bebido por el pájaro.
El Autor de la Semana ©1996-2001 Programa de Informática- Facultad de Ciencias Sociales
– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
5
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
El Crimen
Hoy he amanecido
como siempre, pero
con un cuchillo
en el pecho. Ignoro
quién ha sido,
y también los posibles
móviles del delito.
Estoy aquí
tendido
y pesa vertical
el frío.
La noticia se divulga
con relativo sigilo.
El doctor estuvo brillante, pero
el interrogatorio ha sido
confuso. El hecho
carece de testigos.
(Llamada de portera,
dijo
que el muerto no tenía
antecedentes políticos.
Es una obsesión que la persigue
desde la muerte del marido.)
Por mi parte no tengo
nada que declarar.
Se busca al asesino;
sin embargo,
tal vez no hay asesino,
aunque se enrede así el final de la trama.
Sencillamente yazgo
aquí, con un cuchillo...
Oscila, pendular y
solemne, el frío.
No hay pruebas contra nadie. Nadie
ha consumado mi homicidio.
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– Universidad de Chile. Edición y selección de textos Oscar E. Aguilera F. [email protected]
6
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
El Sueño
Por una espesa y honda
avenida de árboles que unen
en lo alto su copa y pesadumbre
el sueño avanza.
Abre sus grandes alas,
sus poderosos brazos
de lenta sombra y noche grande: cierra
contra todo horizonte.
En el centro del aire
cabecea un navío,
rodeado de enormes
territorios de sueño.
El sueño avanza: pone
su silenciosa planta
en el umbral de nuestra
transitoria vigilia.
Acaricia y golpea,
llama con voz suave
y entra como un río
de seguro poder.
El sueño halaga,
porfía y nos rodea,
hasta que al fin caemos
en su seno girando
como plumas, girando
interminablemente.
Ésta es la inerme paz, la sosegada
mentira de la sombra.
El sueño multiplica
su rostro en un espejo
sin fin: vértigo quieto, inmóvil
torbellino.
¡Gritad! Pero no; el grito
es también sueño. Ahora su dominio.
Potestad de la noche.
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7
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
El Cántaro
El cántaro que tiene la suprema
realidad de la forma,
creado de la tierra
para que el ojo pueda
contemplar la frescura.
El cántaro que existe conteniendo,
hueco de contener se quebraría
inánime. Su forma
existe solo así,
sonora y respirada.
El hondo cántaro
de clara curvatura,
bella y servil:
el cántaro y el canto.
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8
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Sólo el Amor
Cuando el amor es gesto del amor y queda
vacío un signo solo.
Cuando está el leño en el hogar,
mas no la llama viva.
Cuando es el rito más que el hombre.
Cuando acaso empezamos
a repetir palabras que no pueden
conjurar lo perdido.
Cuando tú y yo estamos frente a frente
y una extensión desierta nos separa.
Cuando la noche cae.
Cuando nos damos
desesperadamente a la esperanza
de que solo el amor
abra tus labios a la luz del día.
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9
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Poeta en Tiempo de Miseria
Hablaba de prisa.
Hablaba sin oír ni ver ni hablar.
Hablaba como el que huye,
emboscado de pronto entre falsos follajes
de simpatía e irrealidad.
Hablaba sin puntuación y sin silencios,
intercalando en cada pausa gestos de ensayada
alegría para evitar acaso la furtiva pregunta,
la solidaridad con su pasado,
su desnuda verdad.
Hablaba como queriendo borrar su vida ante un
testigo incómodo,
para lo cual se rodeaba de secundarios seres
que de sus desprecios alimentaban
una grosera vanidad.
Compraba así el silencio a duro precio,
la posición estable a duro precio,
el derecho a la vida a duro precio,
a duro precio el pan.
Metal noble tal vez que el martillo batiera
para causa más pura.
Poeta en tiempo de miseria, en tiempo de mentira
y de infidelidad.
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10
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Pato de Invierno
Por encima del agua helada
el patito se resbalaba.
Por encima del agua dura,
el patito de la laguna.
Por encima del agua fría,
el patito silba que silba.
Silba que silba se resbalaba
y en vez de llorar silbaba.
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11
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Ventana
La ventana
con vistas al desnudo
donde aún sobrenada un seno solitario,
se prolonga imposible la tristísima
longitud de una media abandonada,
y los gatos erráticos,
las pálidas botellas,
la lámpara encendida, moribunda señora,
en rigor para quién.
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12
José Ángel Valente: Poesía (Selección)
Homenaje a Rosalía de Castro
Se fue en el viento,
volvió en el aire.
Le abrí en mi casa
la puerta grande.
Se fue en el viento.
Quedé anhelante.
Se fue en el viento,
volvió en el aire.
Me llevó adonde
no había nadie.
Se fue en el viento,
quedó en mi sangre.
Volvió en el aire.
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José Ángel Valente: Poesía (Selección)
El bosque
To a green thought in a green shade.
Andrew Marvell
El espesor del bosque
su verde luz oscura,
la voz que llama adónde,
el borde, el límite
donde comienzan los senderos
que a su vez se entrecruzan
y se anulan hasta el súbito claro, repentino
lugar de un dios
que aquí se manifiesta
¿cuál dios?,
podríamos hacer en él nuestra morada,
en esta claridad,
al menos hasta el tiempo de las lluvias
para identificar aún nuestro camino
en la hierba pisada, para qué, jamás
podríamos volver, pues los senderos
se cruzan infinitos en el bosque,
me llama el bosque todavía
y la naturaleza madre me reduce,
me asume en sí, me devuelve a la nada.
El Autor de la Semana ©1996-2001 Programa de Informática- Facultad de Ciencias Sociales
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