El Economista digital Page 1 of 3 Julio 28, 2008 | Actualizado 25.7.2008 Edición impresa | Punto de vista Y si Doha nos trae una buena noticia ¿qué hacemos? Por Roberto Bouzas (*) » Volver » Imprimir Los resultados de la reunión ministerial de la OMC son, a dos días de la fecha prevista para su conclusión, más que inciertos. El director general, Pascal Lamy, tomó una decisión arriesgada al convocar a los ministros a Ginebra. Esta convocatoria hace presumir que confía en su capacidad para inducir a los miembros más reticentes para que la reunión termine como algo bastante cercano a un acuerdo. ión Entre los miembros más reticentes se encuentra la Argentina, que ha sostenido de manera insistente que los textos en discusión (especialmente el de acceso a mercados para productos manufacturados) son una base insatisfactoria para la negociación. El Gobierno Argentino ha subrayado que cualquier acuerdo deberá basarse en dos principios acordados al inicio de la Ronda: el principio de “reciprocidad menos que plena” para los compromisos de reducción arancelaria que asuman los países en desarrollo y el párrafo 24 de la Declaración Ministerial de Hong Kong que establece niveles de ambición equivalentes para las negociaciones en materia de agricultura y productos manufacturados. En Ginebra muchos apuntan a la Argentina como uno de los principales obstáculos para el cierre de la Ronda. Se sostiene que la posición de la Argentina ha sido incluso más refractaria a un acuerdo que la de Brasil, probablemente moderada por su responsabilidad de actor clave en la negociación. Pero cualesquiera sean las impresiones, resulta difícil admitir la idea de que la Argentina es capaz de bloquear por sí sola un acuerdo tan necesario para la vitalidad de la OMC como el que pondría fin a la Ronda Doha. Lo que ha demorado el cierre de la Ronda es algo bastante más complejo e influyente que la reticencia recalcitrante de un participante que difícilmente pueda considerarse un “deal breaker”. La reunión de esta semana dirá si esas resistencias (o ausencia de interés) son finalmente revertidas. En cualquier caso, ha de reconocerse que la posición de la Argentina no es fácil. Más allá de las cuestiones de principio que resulte legítimo y conveniente defender, una observación somera de nuestra realidad económica actual sugiere que los incentivos internos para firmar un acuerdo razonable son francamente mínimos. Un observador irónico podría incluso sostener que un acuerdo más favorable que el borrador actual en agricultura sería una fuente de más problemas para una Argentina que no consigue administrar de http://www.eleconomista.com.ar/punto_de_vista.php 28/07/2008 El Economista digital Page 2 of 3 más problemas para una Argentina que no consigue administrar de manera constructiva el shock positivo de precios de los productos agrícolas que la ha beneficiado en los últimos años. En este marco de incentivos distorsionados resulta natural que cualquier concesión en materia de acceso al mercado en productos manufacturados (donde la Argentina es un “pagador”) sea vista como un precio demasiado alto. No hay duda que esta estructura de incentivos está demasiado anclada en el presente y no presta suficiente atención a las oportunidades de largo plazo. Pero también es verdad que la dificultad para dar una respuesta adecuada a los dilemas del presente acorta sensiblemente el horizonte temporal de quienes deben tomar decisiones en las mesas de negociación. (*) Profesor de la Universidad de San Andrés e investigador principal del CONICET. » Volver » Imprimir Editorial La política y el mundo de la producción Economía La otra lucha del agro no es el Congreso sino en Ginegra Tema de la semana Pronostican una caída en los commodities Economía Sin cambios en la economía Economía Se acumulan más problemas por fallas en la gestión Negocios Sin cambios en la estrategia de servicios públicos Internacional Obama encanta a Europa que espera un cambio en EE.UU. Negocios La inflación pone un freno al consumo Finanzas La crisis subprime traerá muchos cambios Mercados Para todo lo que pasó fue una semana barata Contratapa No hubo superávit gemelos en el primer semestre del año Ernesto O'Connor 25.7.2008 Victoria Giarrizzo 18.7.2008 Adrián Ramos 11 7 2008 http://www.eleconomista.com.ar/punto_de_vista.php 28/07/2008 El Economista digital Page 3 of 3 11.7.2008 Fausto Spotorno 4.7.2008 Miguel Braun 27.6.2008 Rodrigo Alvarez 20.6.2008 Marina Dal Poggetto 13.6.2008 » Inicio » Última Edición » Contacto » Suscripción © Copyright 2003 - 2008 El Economista - Ciudad Autónoma De Buenos Aires - Argentina - » Contacto | Desarrollo SCh diseño http://www.eleconomista.com.ar/punto_de_vista.php 28/07/2008