Conferencia Internacional del Trabajo 85.a reunión 1997 Informe VI (1) \I Trabajo en régimen de.subcontratación Oficina Internacional del Trabajo Ginebra Conferencia Internacional del Trabajo 85.a reunión 1997 Informe VI (1) Trabajo en régimen de subcontratación Sexto punto del orden del dla Oficina Internacional del Trabajo Ginebra ISBN 92-2-309894-7 ISSN 025 1-3226 Primera ediclón 1995 Las denominaciones empleadas, en concordancia con la práctica seguida en las Naciones Unidas, y la forma en que aparecen presentados los datos en las publicaciones de la OIT no implican juicio alguno por parte de la Oficina Internacional del Trabajo sob~ela condición juridica de ninguno de los países, zonas o territorios citados o de sus autoridades, ni respecto de la delimitación de sus fronteras. Las referencias a firmas o a procesos o productos comerciales no implican aprobación alguna por la Oficina Internacional del Trabajo, y el hecho de que no se mencionen firmas o procesos o productos comerciales no implica desaprobación alguna Las publicaciones de la OIT pueden obtenerse en las principales librerías o en oficinas locales de la OIT en muchos paises o pidiéndolas a: Publicaciones de la OIT, Oficina Internacional del Trabajo, CH-1211 Ginebra 22, Suiza, que también puede enviar a quienes lo soliciten un catálogo o una lista de nuevas publicaciones Impreso en Suiza PCL Páginas CAP~TULO PRIMERO: Relaciones de empleo y relaczones de trabajo en régzmen de subcontrataczón Relaciones de empleo y relaciones comerciales El trabajo en régimen de subcontratación Los distintos tipos de trabajo en régimen de subcontratación Subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios Subcontratación de mano de obra Subcontratación interna y subcontratación externa Terminología Diversidad tipológica Sistemas triangulares con intermediarios Sistemas sin participación de tercero Sistemas mixtos CAPITULO 11: El contexto del mercado de trabajo Fuerzas impulsor as La extensión del trabajo en régimen de subcontratación Pros y contras del trabajo en régimen de subcontratación El punto de vista de los empleadores El punto de vista de los trabajadores Comparación de los puntos de vista de los interlocutores sociales CAP~TULO 111: Cobertura por la legulación general del trabajo y los tonvenlos colectzvos Doctrina jur isprudencial Legislación Cobertura por convenios colectivos Definiciones establecidas con fines estadísticos CAP~TULO IV: Reglamentaczón especzj%cadel trabajo en régzmen de subcontrataczón Legislación Prohibición o restricción legal Autorización del trabajo en régimen de subcontratación Inspección de trabajo Requisitos de información, consulta o negociación con los representantes de los tr abajadores Garantía de igualdad de trato respecto de los empleados permanentes de las empresas usuarias Exigencia de que los contratos entre subcontratistas y empresas usuarias especifiquen las condiciones de trabajo de los trabajadores subcontratados IV Trabajo en régimen de subcontratación Distribución de la responsabilidad legal del empleador en materia de salarios, condiciones de trabajo, seguridad y salud y seguridad social entre empresas usuarias, subcontratistas o ambas Derecho de la Unión Europea Normas europeas Jurisprudencia de la Unión Europea Fuentes extralegales Interacciones entre los interlocutores sociales Negociación colectiva V: Relaciones colectwas de trabajo CAP~TULO Derechos de sindicación y de negociación colectiva El derecho de sindicación El derecho de negociación colectiva Ejercicio de otros derechos colectivos Derechos de representación Acción directa El derecho de los trabajadores subcontratados a la acción directa contra los subcontratistas Restricciones sobre el recurso al trabajo en régimen de subcontratación durante las huelgas y los cierres patronales legales Acción directa encaminada a limitar la utilización de mano de obra subcontratada CAPITULO VI: Acción internacional Normas internacionales del trabajo Llamamientos a la acción en el plano internacional Conclusiones extraídas del examen de la legislación y la práctica nacionales Cuestionario ANEXO:Recopilación de conclusiones y resoluc~onessobre el trabajo en régimen de subcontrataclón, adoptadas en reuniones de las comisiones de industria de la OIT INTRODUCCION La subcontratación está adquiriendo cada vez más importancia en varios sectores de la economía de muchos países del mundo. A pesar de ello, no existe una definición unívoca e internacionalmente aceptada de la expresión «trabajo en régimen de subcontratación», que se suele usar para designar diversas modalidades de empleo que se apartan del contrato de trabajo clásico concluido entre un asalariado y una empresa. Esta falta de claridad conceptual da origen a interpretaciones contradictorias y entorpece la elaboración de dispositivos adecuados para proteger a los trabajadores que están en esta situación La tendencia a recurrir cada vez más al trabajo en régimen de subcontratación en distintos países y sectores económicos de todo el mundo exige un análisis más detenido de este fenómeno, a fin de evitar que los trabajadores sometidos a esta modalidad de empleo sean injustamente tratados La preocupación, repetidamente expresada, sobre las prácticas del trabajo en régimen de subcontratación ha llevado a la OIT a abordar el asunto con vistas a una posible elaboración de normas internacionales. En sus 258 " (noviembre de 1993), 259 a (marzo de 1994) y 262 " (marzo-abril de 1995) reuniones, el Consejo de Administración examinó informes sobre la legislación y la práctica relativas a este tema para evaluar la conveniencia de su inscripción en el orden del día de la Conferencia Internacional del Trabajo La Oficina indicó en esos informes que era preciso seguir investigando esta cuestión para reunir las informaciones necesarias y elaborar la base conceptual que le permitiesen apreciar las posibilidades de formular normas internacionales sobre el tema Para ello se aprobaron asignaciones de recursos complementarios y la Oficina emprendió un proyecto de investigación intensiva en veinte países de todas las regiones del mundo, con objeto de obtener una información comparada Se pidió un informe nacional a los países siguientes: Alemania, Argentina, Australia, Bélgica, Canadá, C6te d'Ivoire, Estados Unidos, Filipinas, India, Italia, Japón, Kenya, Malasia, México, Pakistán, Portugal, Reino Unido, Suecia, Tailandia y Venezuela Toda esta información estaba destinada a constituir la base de un nuevo informe sobre la legislación y la práctica, en el que figuraran indicaciones fiables sobre la posibilidad de preparar normas internacionales y sobre el contenido eventual de las mismas, a fin de someterlo a la reunión de noviembre de 1995 del Consejo de Administración Pero en su 262 "reunión (marzo-abril de 1995) el Consejo de Administración decidió inscribir el trabajo en régimen de subcontratación en el orden del día de la reunión (1997) de la Conferencia como punto técnico nuevo de elaboración de normas El presente informe se basa en los antedichos estudios nacionales y en otras fuentes de información El tema se examinará según el procedimiento de doble discusión establecido en el artículo 39 del Reglamento de la Conferencia, por lo que la Oficina ha elaborado el presente informe para preparar la primera discusión en la Conferencia. El informe no pretende haber examinado la legislación y la práctica en todos los países, pero se propone presentar un panorama bastante amplio de la legislación y la práctica 2 Trabaio en régimen de subcontrataczón actuales, con inclusión de la jurisprudencia de los órganos judiciales y arbitrales, que ejercen una gran influencia sobre la manera en que se tratan ciertas formas de trabajo en régimen de subcontratación Habida cuenta del gran número de paises examinados y de textos y decisiones de jurisprudencia consultados, las referencias han tenido que limitarse a los temas más importantes de la legislación citada, por razones de espacio El informe contiene un cuestionario, que se envía a los gobiernos con el ruego de que respondan detalladamente y sobre cuya base la Oficina, de conformidad con el párrafo 3 del artículo 39 del Reglamento de la Conferencia, elaborará un segundo informe, en el que indicará los principales problemas que requieren examen por parte de la Conferencia El informe consta de seis capítulos En el primero se examina el marco conceptual del trabajo en régimen de subcontratación, procurándose presentar una visión de conjunto del fenómeno, así como de su diversidad, de sus particularidades y de su complejidad En el capítulo 11 se sitúa el problema en el contexto del mercado de trabajo Su propósito es poner de manifiesto las causas y la extensión del recurso al trabajo en régimen de subcontratación, así como lo que esas modalidades de utilización de mano de obra suponen para los interlocutores sociales y la manera en que éstos las perciben El capítulo 111 examina en qué medida el trabajo en régimen de subcontratación está cubierto por la legislación laboral general y por los convenios colectivos, con especial referencia al grado en que los órganos judiciales asimilan a los trabajadores que están en esta situación a los asalariados «regulares» El propósito del capítulo IV es presentar, en lo posible, una visión sistemática de los diversos instrumentos de reglamentación, sea de fuente legal o extralegal, creados en los diversos países del mundo Examina también el papel desempeñado por las autoridades públicas en la reglamentación del trabajo en régimen de subcontratación Mediante un análisis de la legislación y la jurisprudencia de la Unión Europea, muestra cómo se ha procurado reglamentar, en el plano regional, determinadas cuestiones relacionadas con el trabajo en régimen de subcontratación, qué resultados se han obtenido y qué dificultades se han encontrado Los derechos de sindicación y de negociación colectiva han sido ampliamente reconocidos por muchos países, tanto en el plano nacional como en el internacional, como elementos fundamentales del mundo del trabajo El capítulo V examina el grado en que los asalariados en régimen de subcontratación disfrutan de esos derechos y algunos de los problemas prácticos que se plantean al respecto En el capítulo VI se examinan las normas internacionales actualmente existentes que versan sobre el trabajo en régimen de subcontratación, y se presentan propuestas acerca de la manera en que la Conferencia podría abordar la formulación de uno o varios instrumentos nuevos en esta esfera Las alternativas disponibles han de analizarse a la luz de las legislaciones y prácticas nacionales que se estudian en el informe En general, cuando se elaboran nuevas normas, es fundamental definir con cuidado su campo de aplicación. Esto es especialmente cier.to cuando el propósito es preparar un instrumento internacional sobre el trabajo en régimen de subcontratación, pues éste reviste formas variadas y presenta ambigüedades conceptuales Como el trabajo en régimen de subcontratación se sitúa en la frontera entre el derecho laboral y el derecho comercial, el futuro instrumento debería abordar con claridad los Introduceión 3 problemas que se plantean desde el punto de vista de la protección de los trabajadores interesados, a la vez que debería evitar las disposiciones que puedan obstaculizar indebidamente la actividad económica Ocurre a veces que tal o cual Estado Miembro tenga una legislación y una práctica conformes con las disposiciones fundamentales de un instrumento internacional, pero que no pueda ratificarlo ni aceptarlo de manera oficial a causa de divergencias relativamente poco importantes respecto de su redacción exacta Esas divergencias pueden versar sobre el ámbito de aplicación del instrumento (cuando no coincide en todo punto con el del instrumento), o sobre la definición del sector o sectores previstos, o sobre las modalidades de aplicación de los principios fundamentales Es patente que las dificultades de ese tipo deberían ser abordadas en la etapa de la redacción, para que puedan ser superadas sin que el instrumento pierda eficacia De ahí que el cuestionario invite a los Estados Miembros a indicar todas las particularidades de la legislación y la práctica nacionales que sean susceptibles, en su opinión, de crear dificultades en la aplicación de los instrumentos previstos en el presente informe, y a hacer propuestas concretas sobre la manera de superar esas dificultades. De conformidad con lo dispuesto en el párrafo 1 del artículo 39 del Reglamento de la Conferencia, el presente informe ha de llegar a los gobiernos dieciocho meses, por lo menos, antes de la apertura de la 85 "eunión de la Conferencia, la cual tendrá lugar en 1997. Para que la Oficina tenga tiempo de examinar las respuestas al cuestionario y de preparar el segundo informe que, de conformidad con lo dispuesto en el párrafo 3 del artículo 39 del Reglamento de la Conferencia, se ha de remitir a los gobiernos, a más tardar, cuatro meses antes de la apertura de la 85." reunión de la Conferencia, se invita a los gobiernos a velar por que sus respuestas lleguen a la Oficina Internacional del Trabajo, en Ginebra, no más tarde del 30 de junio de 1996 La Oficina señala a la atención de los gobiernos el párrafo 1 del artículo 39 del Reglamento de la Conferencia, en el cual se les solicita que consulten a las organizaciones de empleadores y de trabajadores más representativas antes de cumplimentar sus respuestas Los resultados de esas consultas deberán quedar plasmados en las respuestas de los gobiernos, a quienes también se les pide que indiquen cuáles han sido las organizaciones consultadas CAPITULO PRIMERO RELACIONES DE EMPLEO Y RELACIONES DE TRABAJO EN REGIMEN DE SUBCONTRATACION No hay unanimidad sobre el significado de la expresión «trabajo en régimen de subcontratación »..Esta y otras locuciones afines en que figura la palabra << subcontratación » se usan con diversas acepciones según los países para designar distintos tipos de relaciones entre determinadas empresas y ciertos trabajadores (muchas veces a través de intermediarios), en los que una de las partes, o ambas, procura apartarse de la relación de empleo normal.. RELACIONES DE EMPLEO Y RELACIONES COMERCIALES La relación de empleo normal se basa en un contrato de trabajo (explícito o implícito, escrito u oral) por el cual el trabajador se compromete a llevar a cabo determinadas tareas para el empleador y bajo su autoridad; el empleador se compromete a su vez a facilitarle los medios que necesite (recursos, máquinas, materiales, herramientas y locales), a pagarle por el trabajo realizado y a cumplir con todas las obligaciones a su respecto que imponga la ley De ordinario, esa relación es asimétrica. El empleador, a quien incumben las responsabilidades principales en materia de propiedad y de riesgos financieros, posee la autoridad para tomar las decisiones económicas y de organización relativas a la marcha de la empresa, con inclusión de la utilización de la mano de obra. En cambio, el candidato al empleo posee solamente, para ofrecer, sus capacidades personales y sus calificaciones profesionales De ahí que la dependencia económica y de organización se haya convertido en la característica principal de la relación entre empleador y asalariado Al mismo tiempo que establece las relaciones de empleo derivadas del hecho de que contrata a trabajadores para llevar adelante sus actividades, la empresa establece relaciones comerciales, por medio de contratos mercantiles, a fin de obtener de otras empresas los bienes y servicios que necesita con esa misma finalidad Esos contratos se celebran entre partes consideradas independientes y situadas en pie de igualdad, ninguna de las cuales se halla en una posición que justifique una protección jurídica especial que rebase la que la ley presta al principio de inviolabilidad de los contratos EL TRABAJO EN RÉGIMEN DE SUBCONTRATACI~N Las transformaciones económicas, tecnológicas y de organización que están produciéndose en el mundo han modificado considerablemente los mercados de trabajo Hasta ahora, la pauta clásica consistía en una relación de empleo que suponía un vínculo de subordinación de tipo « patrón-empleador », en el marco de una empresa determinada Hoy están surgiendo nuevas formas de utilización de mano de obra, 6 Trabajo en répzmen de subcontratación muchas de las cuales impugnan el modelo de empleo tradicional correspondiente al esquema de «una empresa, un empleador >> A menudo se sitúan fuera del marco jurídico clásico - el del contrato de trabajo -, a la vez que conservan una de las características importantes de la relación de empleo, a saber, la dependencia de los trabajadores respecto de las personas para las que trabajan En muchos países, ese tipo de relaciones existen desde hace ya mucho tiempo El concepto de trabajo en régimen de subcontratación parece referirse fundamentalmente a las relaciones (directas o a través de un intermediario) entre una empresa usuaria y determinados trabajadores, en las que: a ) la forma de la relación se caracteriza por la independencia y la autonomía de las partes; b ) la esencia de la relación es, sin embargo, asimétrica, pues los trabajadores se hallan en una situación de subordinación técnica y de organización respecto de la empresa usuaria. Dicho de otro modo, la expresión «trabajo en régimen de subcontratación» se aplica por lo general a situaciones en las que se confiere una forma comercial a una relación que es en el fondo análoga a una relación de empleo (o que, al menos, combina esos dos aspectos) Así ocurre, por ejemplo, en los siguientes casos: a ) cuando, para ejecutar sus tareas normales, una empresa contrata trabajadores por medio de intermediarios (distintos de los simples agentes de contratación, pues entonces se trataría manifiestamente de una relación de empleo) que conservan ciertos atributos del empleador (como el pago del salario) ; b ) cuando un empleador contrata a una persona o a un grupo de personas para llevar a cabo las labores normales de la empresa, pero procura darles la condición de contratistas o subcontratistas independientes que trabajan por cuenta propia Estas formas de trabajo en régimen de subcontratación preocupan sobre todo porque suscitan el temor de que los trabajadores interesados, que en el fondo se hallan en la misma situación de dependencia respecto de la empresa usuaria que los asalariados de ésta (aun cuando en la forma tengan la condición de subcontratistas comerciales o de asalariados de un subcontratista comercial), se vean privados de la protección prevista por la legislación del trabajo, o que las obligaciones que incumben a los empleadores en virtud de la ley sean transferidas de la empresa que está en mejor situación de respetarlas a un intermediario que lo está menos, Por «trabajo en régimen de subcontratación >> se entiende también la situación en que una empresa establece un contrato con otra para que ésta, en general a costo menor, produzca ciertos bienes o suministre servicios que normalmente produce o facilita la primera Aunque es patente el carácter comercial de ese tipo de relación, en ciertos países y ramos industriales se le ha prestado atención porque puede socavar la situación de los asalariados de la primera empresa o trasladar la producción de empresas estables y sólidas a otras que lo son menos y, por consiguiente, tienen menos probabilidades de estar en condiciones de cumplir las obligaciones contraídas con su personal. El presente informe examinará todos estos tipos de relación y los intentos hechos en distintos países para reglamentarlos LOSDISTINTOS TIPOS DE TRABAJO EN &GIMEN DE SUBCONTRATACI~N El trabajo en régimen de subcontratación es un fenómeno dinámico, polifacético y aún poco estudiado, de modo que es difícil establecer una clasificación clara de sus Relaczones de empleo y trabajo en régzmen de subcontratación 7 diversas modalidades..Pero, a efectos del presente informe, es preciso establecer una tipología preliminar e hipotética.. Los escasos estudios sobre el tema suelen dar. cuenta de dos tipos principales de trabajo en régimen de subcontratación : la subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios y la subcontratación de mano de obra..Pero entre esas dos clases bien diferenciadas de relaciones contractuales que implican el uso de trabajadores se sitúa una gran variedad de modalidades difíciles de clasificar dentro de una u otra de estas dos categorías y que poseen rasgos de ambas.. Subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios Con ar~egloa esta modalidad de trabajo en régimen de subcontratación, una empresa confía a otra el suministro de bienes o servicios, y esta última se compromete a llevar a cabo el trabajo por su cuenta y riesgo y con sus propios recursos financieros, materiales y humanos. Los trabajadores dedicados a esa tarea permanecen bajo el control y la supervisión de la segunda empresa (llamada subcontratista), que es también responsable del pago de los salarios y del cumplimiento de las demás obligaciones que incumben al empleador La empresa usuaria paga al subcontratista por el trabajo efectuado o por el servicio facilitado, y no en función del número de personas empleadas ni del número de horas trabajadas A la empresa usuaria lo único que le interesa es el producto terminado que le entrega el subcontratista, no la manera en que se realizó el trabajo ni quién lo hizo La subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios es, por naturaleza, sólo una actividad comercial legítima que está debidamente reglamentada por los principios generales del derecho mercantil Se consideran también como relaciones de subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios los acuerdos concluidos a ese respecto entre una empresa usuaria y un subcontratista que trabaja por cuenta propia y que actúa como una empresa establecida, solvente y legalmente reconocida Subcontratación de mano de obra En términos generales, hay este tipo de subcontratación cuando el objetivo único o predominante de la relación contractual es el suministro de mano de obra (y no de bienes ni de servicios) por parte del subcontratista a la empresa usuaria, la cual puede pedir a los interesados que trabajen en sus locales junto con sus propios asalariados o que lo hagan en otra parte, si la organización de la producción así lo requiere Hay muchas variantes de este fenómeno, pero todas se caracterizan por la ausencia de una relación de empleo directa y oficial entre la empresa usuaria y los trabajadores interesados Las personas contratadas están sujetas al control y la supervisión de la empresa usuaria. Esta remunera a los subcontratistas según el número de personas contratadas, no en función del producto acabado En general, el subcontratista negocia y fija los salarios directamente con los trabajadores, y está facultado para contratar y despedir, aun cuando a ese respecto la decisión final sigue siendo facultad de la empresa usuaria ' 8 Trabajo en régzmen de subcontratación A veces ocurre también que las empresas usuarias contraten directamente, esto es, sin intermediarios, los servicios de un trabajador o de un grupo de trabajadores para que lleven a cabo tal o cual tarea, por un precio determinado y no por un salario Esto se asemeja a la subcontratación de mano de obra, en la medida en que no se establece una relación de empleo, con todos los requisitos, entre las partes interesadas; los trabajadores de que se trata pueden estar fuera del campo de aplicación de las definiciones nacionales relativas a las personas empleadas por cuenta propia, puesto que no son propietarios de empresas establecidas, solventes y legalmente reconocidas A causa de su alto grado de flexibilidad e indeterminación, este tipo de contratación <<individual>> o << directa >) de mano de obra es muy difícil de clasificar, y a menudo hay que recurrir a los tribunales para que decidan si se trata de una verdadera relación de empleo o de una subcontratación de servicios Las discusiones acerca del trabajo en régimen de subcontratación y la preocupación por los trabajadores empleados con arreglo a las diversas modalidades de ese régimen suelen referirse a situaciones que corresponden tanto a la subcontratación de mano de obra como a la subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios, pero es patente que no todos los tipos de subcontratación redundan en el uso de mano de obra en régimen de subcontratación Cuando se considera el trabajo en régimen de subcontratación suele pensarse en la subcontratación de servicios (que en realidad puede ser muy difícil de distinguir de la subcontratación de mano de obra), y más raramente en la subcontratación de la producción de bienes Además, las formas de subcontratación que a ese respecto llaman la atención son, al parecer, las que se caracterizan por la dependencia de los trabajadores respecto de la empresa usuaria o por los perjuicios que la subcontratación ocasiona a los asalariados de esa empresa A veces se establece una distinción entre la subcontratación interna y la subcontratación externa, según que el trabajo se lleve a cabo (o que los servicios se presten) en las instalaciones de la empresa usuaria o en el exterior Aunque en ambos casos la relación entre la empresa usuaria y el subcontratista se basa en un contrato comercial, la subcontratación interna y la subcontratación externa no afectan del mismo modo a los intereses de los trabajadores. En la primera, lo que está en juego ante todo es la relación de empleo de los trabajadores en régimen de subcontratación y su situación respecto de las relaciones colectivas de trabajo. En la segunda, lo fundamental es la seguridad del empleo de los asalariados regulares de la empresa usuaria. Conviene señalar que en inglés los términos << contract labour >>, << contracting >> y << subcontracting >> son de uso corriente y con frecuencia significan lo mismo Por lo tanto, no se refieren necesariamente a formas de relaciones contractuales diferentes Sin embargo, en algunos países no tienen exactamente la misma acepción Por ejemplo, en el Reino Unido la palabra << subcontracting >> suele designar el suministro de competencias o servicios en materia de limpieza, seguridad, restauración o mantenimiento, así como ciertas tareas de oficina, mientras que la palabra << contracting >> se usa a menudo (aunque no siempre) en relación con la construcción y Relac~onesde empleo y trabajo en régzmen de subcontratac~ón 9 sectores conexos2..Pero en otros muchos países la única diferencia entre esas dos palabras radica en el hecho de que, tratándose de una subcontratación de varios niveles, el contrato concluido con el primer subcontratista se llama << contracting D y los siguientes <<subcontracting».De todos modos, en la legislación y la práctica laborales es más usual decir << subcontracting »..Por razones prácticas, en la versión en inglés del presente informe se utiliza la voz << subcontracting B (subcontratación) para designar todas las formas de contrato por las que un << contractor >> (o << subcontractor») se compromete a efectuar un trabajo para otras empresas o a facilitarles servicios. Al establecer una tipología del trabajo en régimen de subcontratación hay que prestar también atención a la manera en que esa forma de utilización de la mano de obra se relaciona con una amplia gama de formas de empleo << atípicas B que se están difundiendo rápidamente en el mundo, como son el trabajo a domicilio, ocasional, por conducto de agencias privadas de empleo, la cesión de trabajadores, etc La división esquemática entre la subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios y la subcontratación de mano de obra no abarca toda la gama de las modalidades existentes, las cuales no cor~espondensiempre con exactitud a una de esas categorías principales o poseen ciertas características de ambas Además, el problema se complica más aún por el hecho de que esas modalidades suelen aplicarse de manera oficiosa, es decir, sin intención de ajustarse a las formas y procedimientos contractuales oficiales El trabajo en régimen de subcontratación puede situarse en una relación triangular o bilateral En el primer caso, intervienen siempre los trabajadores contratados y la empresa usuaria Cuando interviene un tercero, hay dos posibilidades Puede tratarse de una empresa que efectúa un trabajo para la empresa usuaria o le facilita servicios con su propia mano de obra, de la cual es el empleador (subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios) Puede tratarse también de una persona o de un organismo que actúa en calidad de intermediario y cuya razón de ser es exclusiva o principalmente facilitar mano de obra a las empresas usuarias (subcontratación de mano de obra). Sistemas triangulares con intermediarios Intermediario individual El suministro de mano de obra por medio de intermediarios individuales es una práctica ya antigua en algunos sectores económicos, como la construcción, la agricultura y la industria.. Por ejemplo, en el sector agrícola de Chile hay unos agentes llamados enganchadores3, que actúan exclusivamente como intermediarios y reciben de la empresa usuaria (de la cual a veces son asalariados) una cantidad fija por cada trabajador que hayan reclutado, o que ponen a disposición de la empresa trabajadores para que lleven a cabo determinadas tareas y asumen cier.tas responsabilidades de gestión y de supervisión en relación con ellos, en particular el pago de los salarios. 1O Trabajo en régimen de subcontrataczón En algunos sectores económicos - construcción, agricultura y transportes de ciertos países africanos de expresión - francesa hay desde hace mucho tiempo un sistema particular llamado tdcheronnat4 Un tdcheron es una persona que se compromete con una empresa a llevar a cabo determinadas tareas o a facilitar ciertos servicios por un precio convenido Para ello, el tdcheron recluta la mano de obra necesaria y dirige el trabajo Según la clasificación propuesta líneas arriba, este tipo de actividad se asimilaría a la subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios Sin embargo, se distingue de ella por el hecho de que el tdcheron, que por lo general no posee los recursos financieros y materiales que se necesitan para llevar a cabo el trabajo, suministra exclusivamente la mano de obra De ahí que el tdcheronnat se asimile más bien a la subcontratación de mano de obra En algunos países de América Latina, por ejemplo en la Argentina y el Uruguay5, los talleristas son propietarios de pequeños talleres que fabrican productos para empresas y emplean para ello algunos trabajadores a domicilio La jurisprudencia de la Argentina considera al tallerista como trabajador a domicilio en relación con la empresa usuaria y como empleador respecto de los trabajadores que contrata Los talleristas están sindicados en la Argentina en su calidad de trabajadores a domicilio, pero actúan como empleadores por lo que se refiere a la remuneración de los trabajador es En el caso de estos tipos diversos de intermediarios, el problema de saber a quién han de incumbir las obligaciones legales del empleador con respecto a los trabajadores contratados resulta especialmente complicado, pues su estatuto jurídico es a menudo difícil de determinar Por una parte, pueden no tener una relación de empleo directa con esos trabajadores; por otra, el papel que desempeñan va más allá de la simple contratación y abarca a menudo ciertas funciones del empleador ,como la asignación y supervisión de las tareas y la fijación y el pago de los salarios De ahí que a veces sea difícil determinar quién es el empleador desde el punto de vista jurídico, lo cual tiene diversas consecuencias para la aplicación de la legislación del trabajo y de la seguridad social Agencias que facilitan mano de obra6 En otros casos, los trabajadores en régimen de subcontratación son asalariados de agencias, como las agencias de trabajo temporal o las agencias especializadas en la cesión de mano de obra7,cuya condición es distinta de las personas físicas o morales previstas inicialmente por el Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm. 96).. Estas últimas se limitan a poner a los trabajadores en relación con los empleadores y no tienen ningún vínculo de empleo con los trabajadores interesados ;tampoco tienen ninguna función de supervisión o de gestión respecto de ellos. Son simplemente intermediarias, lo cual deja a ambas partes libres de establecer o no establecer una relación de empleo. Sin embargo, las agencias de trabajo temporal desempeñan un segundo papel. Ellas mismas emplean trabajadores para ponerlos a la disposición de las empresas, por lo general, pero no siempre, de manera temporal.. El resultado es una relación triangular específica en la que los trabajadores que son asalariados de esas agencias se encuentran bajo la autoridad de la empresa usuaria, con la cual, sin embargo, no han firmado ningún contrato de empleo, Así, dependen no sólo de su empleador inmediato, es decir, la agencia, sino también de la empresa usuaria. Según el Código de Trabajo de Francia, una agencia o empresa de empleo temporal es toda persona Relaciones de empleo y trabajo en régzmen de subcontrataczón 11 física o jurídica cuya actividad consista exclusivamente en poner a título provisional a disposición de clientes a asalariados que contrate y remunere a tal efecto en función de ciertas calificaciones convenidas (véase L 124-1) Se encuentran formulaciones análogas a ésta en las leyes adoptadas recientemente sobre el particular en varios países : Suiza (1989), Suecia (l991), Luxemburgo y España (1994) En el Japón, la ley de 1985 sobre la gestión idónea de las agencias de trabajo temporal y la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores temporeros (Worker Dispatching Law), modificada en 1990, define el suministro de trabajadores temporales como el hecho de conseguir que un asalariado empleado por una persona trabaje para otra bajo la dirección de esta última, manteniendo su relación de empleo con la primera persona (artículo 2). La función que desempeñan las agencias de trabajo temporal en el mercado laboral sigue siendo un tema controvertido entre los universitarios y profesionales, tanto en el plano nacional como en la esfera internacional. Algunos consideran que constituye una actividad económica normal, llevada a cabo por empleadores con pleno derecho Otros, en cambio, juzgan que la relación de empleo que se da entre esas agencias y los trabajador es contratados es de naturaleza puramente formal, mientras que existe una relación real de empleo entre esos trabajadores y la empresa usuaria en la que la agencia delega su autoridad de empleador De hecho, la respuesta depende sobre todo de los criterios utilizados para delimitar el trabajo en régimen de subcontratación, concepto que ni la legislación ni la práctica han deslindado todavía claramente. Si hemos de juzgar por las formalidades que se prescriben en las corzespondientes disposiciones reglamentarias, estos tipos de actividad bien pueden considerarse como una subcontratación o, para ser más exactos, como una subcontratación de mano de obra, según se definió antes Sin embargo, también hay que tener en cuenta la autoridad considerable que la empresa usuaria posee sobre los trabajadores. Lo que es patente es que la situación de esos trabajadores no corzesponde a la modalidad tradicional de empleo ya descrita como G una empresa, un empleador ». Ahora bien, que se llame o no «trabajo en régimen de subcontratación B, lo importante es que estarelación de empleo «triangular >> se regule de forma satisfactoria para todas las partes interesadas: la empresa usuaria, la agencia y los trabajadores Sistemas sin participación de tercero También puede haber trabajo en régimen de subcontratación sin que intervengan intermediarios, cuando un trabajador o un grupo de trabajadores trabajan para una empresa usuaria sin que entre ellos y ella exista una relación oficial de empleo. Así ocurre con frecuencia cuando la parte subcontratante no es una empresa oficialmente reconocida, creada con arreglo a los requisitos legales Subcontratación individual Se produce cuando un trabajador concluye a título individual con una empresa un contrato comercial en debida forma o establece con ella una relación oficiosa para proporcionarle sus servicios..Ese subcontratista individual puede ser un trabajador por cuenta propia..Las principales características de su situación contractual son: i) no tiene una relación de empleo oficial con la empresa usuaria ; ii) puede trabajar para más de una empresa; iii) tiene más libertad y autonomia que un asalariado. Si se reúnen esas tres condiciones, se puede hablar de subcontratación.. 12 Trabajo en régimen de subcontratación En general, los trabajadores por cuenta propia se consideran, desde el punto de vista jurídico, como empresarios individuales independientes que establecen relaciones contractuales con una o varias empresas independientes a fin de efectuar para ellas tal o cual tarea o de prestarles ciertos servicios a determinado precio, en general por su cuenta y riesgo y utilizando sus propios recursos financieros, materiales e instrumentales Sin embargo, pueden plantearse problemas de protección social y jurídica cuando el trabajo es realizado por subcontratistas individuales cuya relación con la empresa usuaria difiere de la que existe entre empresas verdaderamente independientes Estos subcontratistas individuales pueden realizar ciertas tareas o suministrar determinados servicios de modo permanente o periódico para una empresa de la que dependen en mayor o menor grado Las empresas usuarias pueden ejercer también un control sobre los servicios que les facilitan esos subcontratistas, cuya relación con ellas, a pesar de su autonomía teórica, es muy cercana a la de la relación de empleo clásica. Hay muchas variantes de subcontratación individual, que difieren según la naturaleza de las labores realizadas o de los servicios prestados No hace falta que estén presentes todas las características del trabajo por cuenta propia que acaban de indicarse. En primer lugar, la subcontratación individual se lleva a cabo a menudo de manera oficiosa, sin que el interesado tenga la calidad de empresa debidamente establecida y reconocida. En segundo lugar, el único o el principal servicio suministrado a las empresas usuarias suele ser el trabajo del subcontratista, al cual se añaden unos cuantos recursos financieros, materiales o instrumentales. En tercer lugar, como sólo aportan su capacidad de trabajo, esos subcontratistas no sobrellevan el riesgo económico que supone la actividad en la que participan, o bien ese riesgo atañe únicamente a lo que ganan. Por último, pueden trabajar de manera permanente o periódica para una sola empresa y depender de ella en muchos aspectos importantes Esta dependencia se manifiesta con mucha claridad cuando la empresa usuaria ejerce su control y supervisión sobre las tareas realizadas o los servicios suministrados por los subcontratistas individuales. Aunque en principio son independientes, esos subcontratistas acaban con frecuencia por depender de la empresa y por hallarse en una situación muy próxima a la de la relación clásica de empleador-asalariado De ahí que no pueda considerárselos como empresarios individuales ni como asalariados, de modo que quizá no logren beneficiarse de la protección de la legislación del trabajo y de la seguridad social Trabajo en grupo o en equipo Trátase de una modalidad que se viene aplicando desde hace mucho tiempo en determinados sectores económicos como la agricultura, la construcción y el transporte de muchas partes del mundo Estos grupos, que suelen llamarse <<cuadrillas»,con frecuencia trabajan a destajo para las empresas usuarias y poseen cierta autonomía Sus jefes no pueden ser considerados como intermediarios, pues sólo son un miembro más de la cuadrilla, la cual se encarga de buscar trabajo y de negociar las condiciones del mismo y de la remuneración En muchos casos no reciben ninguna suma adicional y comparten la remuneración a partes iguales con los demás miembros del grupo A menudo, los trabajadores contratados no tienen una condición laboral determinada en relación con las empresas usuarias Sin embargo, a veces esos trabajadores se hallan amparados por la legislación laboral Por ejemplo, en la Argentina el texto codificado en 1976 de la ley sobre el relacione^ de empleo y trabajo en régimen de subcontrataczón 13 contrato de trabajo dedica el capítulo V del título 111 al contrato de grupo o de equipo. Este texto reconoce la existencia de una relación de empleo entre cada uno de los miembros de un grupo o equipo (cuadrilla) y la empresa usuaria cuando el contrato lo celebra un empleador con un grupo de trabajadores que, actuando por intermedio de un delegado o representante, se compromete a prestar servicios apropiados a la actividad del empleador.Considera también que el empleador tendrá respecto de cada uno de los integrantes del grupo los mismos deberes y obligaciones, dentro de los límites que imponen las clases de tareas que haya que efectuar y la composición del grupo. Si se conviene en que el salario sea colectivo, los miembros tendrán derecho a la parte que les corresponda según su contribución al resultado de la actividad. Cuando un trabajador deja el grupo o equipo, el delegado o representante deberá sustituirlo por otro, proponiéndolo a la aceptación del empleador cuando así lo requieran la índole de las tareas por efectuar y las calidades personales exigidas para formar parte del grupo El trabajador que se retire tendrá derecho a la liquidación de la parte que le corresponda por la tarea ya realizada. Los trabajadores contratados por el empleador para colaborar con el grupo o equipo no participarán del salario común y deberán convenir con el empleador las disposiciones relativas a- su remuneración (artículo 101). Sistemas mixtos Un sistema particular de trabajo en régimen de subcontratación, que combina la intervención de intermediarios y el trabajo por cuenta propia, se ha difundido en las industrias de la construcción y de la carne de Australiag La agencia Troubleshooters Available (del inglés troubleshoot, que significa intervenir para resolver un problema) es una de las primeras que lo aplicaron La agencia fue creada a mediados del decenio de 1970 para suministrar a la industria de la construcción subcontratistas independientes, es decir, trabajadores por cuenta propia, por períodos cortos Las actividades de las agencias de este tipo comprenden el suministro de trabajadores a los constructores, cobrándoles sus servicios Cuando una empresa usuaria necesita más trabajadores por un día, o por varios días o semanas o incluso meses, la agencia le facilita los trabajadores y le cobra el número de horas que éstos están presentes en la obra.. La agencia dispone de una reserva de trabajadores que poseen calificaciones variadas, desde los simples peones hasta los encargados de obra, aprovechables casi de inmediato Los trabajadores indican diariamente a la agencia cuánto tiempo han trabajado, y ésta les paga cada semana en función de las horas efectuadas. La empresa usuaria asigna las tareas a los trabajadores, pero una y otra parte tienen derecho a negarse a trabajar juntas Las cuestiones relativas a las normas de ejecución de la actividad soii responsabilidad de los trabajadores, no de la agencia Aunque éstos tienen que concluir con ella un contrato que estipula determinadas condiciones en relación con las obligaciones y responsabilidades legales, los trabajadores no son asalariados de la agencia, la cual tampoco se encarga de deducir el impuesto sobre la remuneración que se les paga Los trabajadores tienen que adquirir su propio seguro de responsabilidad civil El derecho a vacaciones anuales, a la licencia de enfermedad y a las vacaciones por antiguedad en el servicio que prevé el laudo arbitral de la industria queda expresamente excluido Los trabajadores aportan también los instrumentos básicos de su oficio 14 Trabajo en régimen de subcontratación Notas ' Para más detalles, véase E Epstein y J Monat: «La subempresa de mano de obra y su reglamentación », en Revista Internacional del Trabajo (Ginebra, OIT), vol 87, 1973, núms 5 y 6, págs 513-535 y 583-601, respectivamente P E Leighton: Contract labour in the UK Law andpractice, informe presentado a la OIT dentro del programa para la investigación del trabajo en régimen de subcontratación, mayo de 1995, pág 3 Para más detalles, véase L J Echenique: ~Labourcontracting in Chile's fruit agriculture», en P Egger y P Poschen (directores de la publicación) : Labour contracting and employment in construction, forestry, plantations and manufacturing (Ginebra, OIT), de próxima publicación Véase «Nuevos códigos de trabajo africanos :Menos tutela estatal y más flexibilidad», en la sección «Perspectivas» de la Revista Internaclonal del Trabajo (Ginebra, OIT), vol 114, 1995, núm 1, págs 93-102 Para más detalles, véase L Vega Ruiz : «El trabajo a domicilio: ¿Hacia una nueva regulación ?», en Revlsta Internaclonal del Trabajo (Ginebra, OIT), vol 111, 1992, núrn 1, págs 1-21 Este problema se trata con mayor detalle en 017: Revislón del Convenlo sobre las agenclas retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm 96), Informe IV (1) a la 85 a reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, Ginebra, 1997 Para más detalles, véase OIT: Elpapel de las agenciar de empleo privadas en el funcionamiento de los mercados de trabajo, Informe VI a la 8 1 a reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, Ginebra, 1994 Para un análisis de estos problemas, véanse S Ricca: «Coexistencia de empresas privadas de trabajo temporal y servicios públicos de empleo: efectos y problemas», en Revista Internacional del Trabajo (Ginebra, OIT), vol 101, 1982, núm 2, págs 157-171; A S Bronstein: «El trabajo temporal en Europa occidental: ¿Antagonista o complemento del empleo permanente?», en Revista Inteunaclonal del Trabajo, vol 110, 1991, núm 4, págs 485-507 ; R Blanpain (director de la publicación) : Temporary work and labour law of the European Community and Member Stater (Deventer, Países Bajos, Kluwer Law and Taxation Publishers, 1993), págs 6 y 7 ;OIT : Elpapel de lar agenclas de empleoprwadas , op clt ;ídem : Elpapel de las agencias de empleoprwadas en el funcionamiento de los mercados de trabalo, Informe de la Comisión de las Agencias de Empleo Privadas, Actas Provisionales núm 21 de la 81 "reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, Ginebra, 1994 Para más detalles, véase E Underhill y D Kelly: <04iminating traditional employment: Troubleshooters Available in the building and meat industries~,en Journal oj Industrial Relationr (Industrial Relations Society of Australia), vol 35, núm 3, septiembre de 1993, págs 398-423 CAPITULO 11 EL CONTEXTO DEL MERCADO DE TRABAJO Una de las características más acusadas de los mercados de trabajo contemporáneos en todo el mundo es su fragmentación Como resultado de ello, los modelos de empleo han empezado a multiplicarse. El antes mencionado modelo tradicional de relación de empleo a largo plazo entre un empleador y un empleado coexiste actualmente con una gran variedad de formas de empleo «fuera de la norma» o «atípicas» ' El fuerte incremento que se está observando en muchos países del mundo en la utilización de estas formas de relación de empleo, entre las que destaca la subcontratación de mano de obra, suele atribuirse tanto a factores de demanda como a otros relacionados con la oferta del mercado de trabajo Por lo que se refiere a la oferta, hay que mencionar en primer lugar los elevados niveles de desempleo que son característicos de muchos mercados de trabajo en todo el mundo Los desempleados que buscan empleo están cada vez más dispuestos a aceptar un empleo « atípico »,que con frecuencia es la única alternativa a su situación Los decisores laborales de muchos países, en su preocupación por reducir las cifras de desempleo, están cada vez más expuestos a derogar o modificar las restricciones actualmente existentes y a recurrir a modelos de empleo «fuera de la norma» para conseguir que los mercados de trabajo sean más acordes con el ambiente económico, cada día más dinámico y polifacético. También hay que tener en cuenta la evolución demográfica, que fomenta el vertiginoso crecimiento de la parte correspondiente a la oferta del empleo «atípico >> en los mercados laborales. El creciente número de trabajadores de edad y la cada vez mayor proporción de mujeres que se observa en muchos países contribuyen también a nutrir el recurso a modelos de empleo «fuera de la norma», que a veces son incluso más interesantes para los desempleados de estas categorías que la propia relación de empleo «dentro de la norma» Esta tendencia recibe un fuerte impulso del creciente número de demandantes de empleo que pertenecen a las generaciones más jóvenes y que, en muchos casos, no sienten preferencia alguna por el modelo tradicional de empleo, porque buscan precisamente todo lo contrario, es decir, unas formas menos instaladas de participación en la vida económica Por otra parte, este vuelco de las preferencias tiene que situarse en una perspectiva adecuada La mayor parte de los trabajadores, comprendidos los que se sitúan en las categorías mencionadas de casi todos los países, siguen prefiriendo un tipo de relación de empleo «dentro de la norma» que les permita acceder a la estabilidad laboral y vital La causa principal del aumento de los modelos de empleo en régimen de subcontratación radica, sin duda alguna, en el insistente impulso de la demanda 16 Trabajo en régimen de sub~ontratación Si pasamos, pues, a los factores que en el mercado de trabajo se relacionan con la demanda, conviene que examinemos en primer lugar algunas de las fuerzas impulsoras que contribuyen a la expansión de diversos modelos « atípicos » de empleo, entre los que se cuenta el trabajo en régimen de subcontratación La primera de estas fuerzas impulsoras es la ya mencionada tendencia que se observa en todo el mundo a una mayor flexibilidad, descentralización y especialización de la producción, así como a la aparición de nuevas tecnologías y modelos de organización del trabajo que se derivan de una competitividad cada vez mayor (tanto nacional como internacional), de la mundialización y de la creciente ebullición y mutua dependencia de los mercados económicos y financieros Las dificultades económicas que muchos países están tratando de salvar impulsan también a los empleadores a reducir los costos laborales, frecuentemente vinculados al empleo «dentro de la norma», por medio de un salto a los modelos «fuera de la norma ». Como resultado de ello, se está perfilando en muchas empresas una tendencia a adoptar la táctica de utilizar una fuerza de trabajo compuesta por un «núcleo» de empleados permanentes calificados, que se complementa con una mano de obra «periférica » constituida por trabajador es menos seguros y disponibles Los elevados niveles de desempleo que se dan en muchos países en los que se observa este fenómeno facilitan la ejecución de este tipo de estrategia La decadencia generalizada de las industrias manufactureras y la expansión del sector de los servicios contribuyen también a una expansión muy rápida de los modelos de empleo « dentro de la norma » No hay que olvidar tampoco la falta de mano de obra experimentada que se ha producido en varias industrias de algunos países y que se ha convertido en una importante fuerza impulsora de la migración por razones de empleo. Por ejemplo, en Malasia muchos trabajadores rnigrantes (cuyo número oscila entre un millón y un millón y medio, aproximadamente) trabajan en régimen de subcontratación2 Junto a estos factores objetivos, que contribuyen a la expansión de los modelos de empleo «fuera de la norma», se dan también algunos estímulos subjetivos que impulsan a los empleador es a servir se más del trabajo en régimen de subcontr atación. Los impulsos más frecuentes se dirigen a evitar lo que muchos empleadores consideran como una rigidez excesiva de la mano de obra y de la estrechez de la negociación legal y colectiva, que se han convertido en características fundamentales de los modelos de empleo «dentro de la norma» La propia naturaleza de la fuerza de trabajo implicada en las diversas formas de acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación varía según diversos factores, entre los que hay que contar el sector económico de que se trate y la situación del mercado de trabajo en cada país concreto Estas variaciones van desde unos trabajadores escasamente capacitados, tradicionalmente empleados en la agricultura, la construcción y las industrias de transporte, hasta los profesionales con una formación superior que prestan servicio en esferas especializadas como la consultoría jurídica, la contabilidad, ingeniería, publicidad, análisis y tratamiento de la información, etc El recurso al trabajo en régimen de subcontratación en los países industrializados y en desarrollo puede atribuirse a diferentes causas; por ejemplo, la disimetría producida por los diversos niveles de desarrollo económico y social, los casos concretos que hay que resolver en la organización del trabajo y la extensión de la protección social El contexto del mercado de trabajo 1'7 Hay pues, una gran variedad de factores que justifican el incremento de la utilización del trabajo en régimen de subcontratación, muchos de los cuales están relacionados entre sí Estos factores se dividen en dos categorías principales, que podríamos denominar catalizadores internos y presiones externas En el caso de los catalizadores internos, habría que mencionar en primer lugar los específicos de los procesos de producción actualmente existentes en muchas industrias Por ejemplo, la subcontratación externa de trabajo en la construcción, la silvicultura y las industrias relacionadas con las plantaciones, con sus niveles cíclicos de actividad, ha llegado a ser un elemento importante de la organización del trabajo, que permite aprovechar al máximo las actividades de producción. En segundo lugar, en muchos paises, ciertos empleadores han tratado de reducir los costos de producción concentrando sus recursos en las principales actividades empresariales (que podríamos llamar «nucleares ») y dando al exterior las actividades cperiféricas » para que sean ejecutadas por subcontratistas externos En tercer lugar, en todos estos fenómenos puede intervenir a veces el deseo de aumentar la seguridad en el empleo de los trabajadores permanentes que constituyen el «núcleo » de la fuerza laboral, dando al exterior en régimen de subcontratación los tipos de trabajo que, desde el punto de vista económico, son más vulnerables Por último, hay que tener en cuenta que puede haber la tentación de servirse del trabajo en régimen de subcontratación para eludir las obligaciones impuestas por la legislación laboral y por los convenios colectivos respecto a las condiciones de trabajo, comprendidos los horarios y la cobertura de la seguridad social Existen también determinados factores externos que fomentan el recurso al trabajo en régimen de subcontratación. Por una parte, las fluctuaciones de la demanda de productos y mercancías, que son características de todas las economías de mercado, si llegan a tener un grado muy elevado de incertidumbre, pueden inducir a los empleadores a recurrir al trabajo en régimen de subcontratación, porque pensarán probablemente que es necesario combinarlo con los trabajadores directamente empleados En efecto, algunos empleadores consideran que el trabajo en régimen de subcontratación es un elemento fundamental de la flexibilidad del mercado de trabajo, gracias al cual pueden adaptarse a un ambiente económico cada vez más competitivo y mundializado. Por otra parte, la escasa eficacia de las instituciones tradicionales del mercado de trabajo, como las agencias públicas de empleo, que no pueden responder adecuadamente a la necesidad intermitente de personal temporero de algunos ramos industriales (como la construcción, la silvicultura y las plantaciones), puede que sea también parcialmente responsable del creciente recurso al trabajo en régimen de subcontratación en las mencionadas industrias Cierto número de circunstancias sociales dejan también espacio para el trabajo en régimen de subcontratación en el mercado laboral. Tales circunstancias determinantes son distintas en los países industrializados y en los países en desarrollo Los trabajadores que tienen capacitaciones especializadas y que saben ponerlas a disposición de una demanda intermitente o interesada en contratos de duración determinada pueden encontrar ventajas en determinadas características del trabajo en régimen de subcontratación actualmente existentes en los países industrializados (como un mayor grado de autonomía económica y unas condiciones de trabajo más flexibles, sin olvidar la posibilidad de obtener mayores ingresos y de pagar menos impuestos) y, si están todavía lejos de la edad de jubilación, pueden pensar que todo ello contrapesa la falta de seguridad en el empleo y la escasez de prestaciones sociales 18 7rabajo en régzrnen de subcontrataczón Asimismo, en muchas zonas alejadas de los países en desarrollo el trabajo en régimen de subcontratación puede constituir el único medio para obtener un empleo retribuido.. Esto se aplica en general a muchos trabajadores no especializados o escasamente capacitados que tienen que hacer fiente a la situación de desempleo crónico y de subempleo que sigue existiendo en estos países. LA E X T E N S I ~ NDEL TRABAJO EN RÉGIMEN DE SUBCONTRATACI~N Actualmente, varias formas de trabajo en régimen de subcontratación se están utilizando en muchos sectores económicos de un gran número de países en todo el mundo, tanto en las economías industrializadas como en las que están en desarrollo y en los paises en transición. Esto se aplica tanto al sector privado como al público..En algunos sectores económicos, como la agricultura, el comercio al por menor y la construcción, el trabajo en régimen de subcontratación se ha practicado desde hace ya muchos años, pero en otros ramos industriales, tanto manufactureros como de servicios, como la industria textil, la industria del vestido, la silvicultura, los bares y restaurantes, las instalaciones petroleras en alta mar y los transportes interiores, el trabajo en régimen de subcontratación es todavía bastante reciente3,.También va en aumento en los nuevos sectores económicos en expansión, especialmente en las industrias que trabajan con una tecnología avanzada (por ejemplo, el teletrabajo). Históricamente, los subcontratistas de trabajo han desempeñado una fiinción de gran importancia en las plantaciones..La creciente tendencia a la utilización del trabajo en régimen de subcontratación en las plantaciones ha sido ya repetidamente observada por la Comisión del Trabajo en las Plantaciones de la OIT4.En 1990, un promedio del 12 por ciento del total de los trabajadores de las haciendas de plantación en Malasia se reclutaban por medio de subcontratistas de trabajo, pero esta cifra ascendía a un 35 y a un 38 por ciento, respectivamente, en las haciendas dedicadas a la plantación de aceite de palma y de cacao5. Los informes indican que el trabajo en régimen de subcontratación constituye una práctica corriente en las plantaciones de azúcar de la India y de Filipinas, así como en las plantaciones de cafe de Kenya6.En México, el suministro de mano de obra temporera para la recolección de café y de algodón se hace sobre todo a través de subcontratistas de mano de obra (enganchadores) que reclutan peones entre los migrantes indios7. En el Brasil, la subcontratación de mano de obra (suministrada por los empreteiros o gatos) es ampliamente practicada, según nuestros informantes, en los complejos agroindustriales intensivos que producen para la exportacións. En los Estados Unidos, los subcontratistas de mano de obra para las granjas proporcionan cerca de un 16 por ciento de todos los trabajadores agrícolas, pero en California y Florida pasan del 30 por ciento. Entre 1980 y 1990, el número de subcontratistas de mano de obra para las granjas se incrementó hasta un 20 por ciento y el número de trabajadores suministrados por ellos llegó a un 53 por ciento9. Se observa una tendencia parecida en la silvi~ultura~~. El trabajo en régimen de subcontratación en forma de trabajadores suministrados por intermediarios o por personas que habitualmente laboran por cuenta propia cuenta con una cuota verdaderamente aplastante de la mano de obra de Chile (donde asciende a casi un 100 por ciento), Finlandia (un 80 por ciento), Francia (un 60 por ciento), Indonesia y Malasia (ambos por encima del 50 por ciento), Suecia (un 70 por ciento), Reino Unido (por encima del 50 por ciento) y Estados Unidos (cerca de un 80 por ciento). Está El contexto del mercado de trabajo 19 aumentando rápidamente en muchos otros paises, como Alemania, Austria, Bélgica, Canadá y Hungría.. Los modelos de empleo en este sector han evolucionado bruscamente durante los últimos años. Las empresas de transformación de productos agrícolas se han i,etirado en su casi totalidad de actividades como el transporte de troncos y la recogida de cosechas, pasando estas labores a los subcontratistas. La mecanización de la recogida de cosechas ha facilitado también este cambio. Una gran variedad de modelos de empleo «fuera de la norma», que van desde el trabajo por cuenta propia a la subcontratación de mano de obra, han alterado de forma muy importante el cuadro del empleo en esta actividad económica. El trabajo en régimen de subcontratación se ha utilizado también intensivamente en las industrias extractivas de varios países, como la minerla y la industria petrolera. La incidencia del trabajo en régimen de subcontratación es realmente impresionante en las instalaciones que extraen petróleo en alta mar ' l . La construcción es una de las industrias en las que el trabajo en régimen de subcontratación ha tenido más amplia aceptación. En el Brasil, cerca de un 30 por ciento de los trabajadores de la construcción son asalariados sin contrato en regla, además de otro 30 por ciento registrado en calidad de trabajadores por cuenta propia. Se estima que éstos son en gran medida trabajadores subcontratados, tanto si han sido reclutados a través de los subcontratistas como si, nominalmente, son empleados por cuenta propia. A lo largo del decenio de 1980, la cuota de trabajadores por cuenta propia en el total de la fuerza laboral dedicada a la construcción aumentó en este país, pasando de un 23 a un 3 1 por ciento. En Malasia, la incidencia del trabajo en régimen de subcontratación en la industria de la construcción se estima en cifras que superan el 60 por: ciento del-total de la fuerza de trabajo de este ramo industrial. Alrededor del 50 por ciento de estos empleados subcontratados son trabajadores migrantes 12. En 1991, en el Reino Unido cerca de un 58 por ciento de toda la mano de obra de la construcción estaba compuesta por trabajadores por cuenta propia (que pasaban de un 3 1 por ciento en 1979), de los que se consideraba que más de dos tercios eran trabajadores nominalmente empleados por cuenta propia, según un informe del Gobiernoi3.. La subcontratación de mano de obra es muy corriente en el sector industrial. En la India, un 32,6 por ciento de los establecimientos industriales utilizó mano de obra en régimen de subcontratación durante el período 198.5-1986, frente a un 15,3 por ciento en 1973-197414..Se informa asimismo que la mano de obra subcontratada es mayoritaria en Hong Kong, entre los trabajadores de la construcción, los estibadores, los astilleros de construcción naval y de reparación de buques, así como en la industria textil y entre los trabajadores de la electrónica. Una de las encuestas indica que el 10 por ciento de las pequeñas y medianas empresas (con establecimientos que no suelen superar los cien empleados) se sirven habitualmente de trabajadores temporeros. Grupos de trabajadores dirigidos por un jefe de cuadrilla (pao tao, o jefe de subcontratación) pasan de un establecimiento a otro, según las necesidades del momento 15, En Malasia, una encuesta realizada entre los establecimientos industriales puso de manifiesto que la cuota de trabajadores en régimen de subcontratación era especialmente importante en las industrias de la madera (donde la mano de obra subcontratada asciende a un 20 por ciento del total en un 57,7 por ciento de los establecimientos), en los minerales no metálicos (un 41,l por ciento de los establecimientos) y en los metales elaborados, los metales básicos, la industria textil y el ramo de la alimentación (entre un 10 y un 15 por ciento de los establecimientos) 16. Otra encuesta, esta vez en el Pakistán, muestra que cerca de un 34 por ciento de la 20 Trabajo en régimen de subcontratación fuerza laboral total del amplio sector manufacturero de la provincia de Sind está compuesto por trabajadores en régimen de subcontratación En los servicios, comprendido el transporte, el trabajo en régimen de subcontratación parece haberse extendido mucho en los últimos decenios Por ejemplo, en los Estados Unidos, donde la reducción de costos y el montaje en el extranjero suele ser un recurso muy frecuente, el número de trabajador es temporeros y subcontr atados ha aumentado espectacularmente a lo largo de los últimos decenios, y hoy en día llega a ser de una cuarta parte del total de la fuerza de trabajo Los profesionales muy calificados representan cerca de un 24 por ciento de estos trabajadores temporeros, y entre ellos hay abogados, médicos, científicos, especialistas en informática y en auditorías financieras17 El número de personas que están trabajando para las agencias de suministro de personal ha pasado de 250 000 en 1975 a 1,9 millones en 1993, una tasa de crecimiento que es trece veces superior a la de la mano de obra empleada directamente 18. En Alemania, el número de trabajadores facilitados por estas agencias era de unos 140 000 en 199219 El cambio reciente que reviste mayor importancia para el desarrollo de la subcontratación en el sector público de algunos países en los que la política del Gobierno ha fomentado, y a veces incluso exigido, una «aceptación por parte del mercado» de determinadas funciones del sector público, consiste en la introducción de la subcontratación externa de funciones públicas por medio de una licitación en el mercado libre. En el Reino Unido, por ejemplo, algunas funciones del sector público están sujetas a licitación obligatoria en régimen de libre competencia (« Compulsory Competitive Tendering» - CCT) cuyo objetivo es la reducción del gasto público La ley de administración local («Local Government Act ») de 1988 exige que en estos casos la administración local actúe como un verdadero cliente y que opte, en general, por la propuesta del licitador más barato El personal habitual de la administración local también tiene que someterse a propuestas de licitación ante un subcontratista potencial. Como resultado de ello, la subcontratación se ha extendido más allá de los ámbitos que tradicionalmente mantenía en la administración, que solían ser la recogida de basuras, los bares y restaurantes de las oficinas, la limpieza, la construcción y el mantenimiento de los locales o del parque móvil, y actualmente se extiende ya a varias actividades especializadas, como la contabilidad, las cuestiones jurídicas, la arquitectura y las actividades administrativas Además de este proceso de licitación obligatoria, muchas organizaciones del sector público pueden participar en concursos voluntarios de licitación para otros servicios Así las cosas, era inevitable que los propios subcontratistas cambiasen de naturaleza y facilitasen una amplia gama de destrezas a través de una sola organización, comprendiendo en ellas su propia experiencia y capacidad de dirección (gestión de servicios) Algunas empresas de subcontratación han acabado por convertirse en empresas de gran volumen y complejidad, con gran éxito comercial Actualmente, se estima que un 54 por ciento de todos los contratos sometidos a este proceso en el Reino Unido han sido adjudicados al personal interno de la administración, pero se piensa que el valor de los contratos que ha ganado el sector privado asciende a 356 millones de libras esterlinas, con un beneficio mínimo de 92 millones de libras esterlinas al añoz0 Es, pues, evidente que el principal imperativo estratégico que induce a la subcontratación externa de los servicios públicos es de índole económica Su objetivo es no sólo ahorrar en los costos de la provisión de los servicios, sino también garantizar El contexto del mercado de trabajo 21 un servicio más eficiente y eficaz. De todos modos, los datos que tenemos muestran unos resultados bastante controvertidos. Es cierto que los contratistas facilitan en muchos casos servicios más baratos..Por ejemplo, en los Estados Unidos los ahorros derivados de la subcontratación externa de los servicios públicos ascienden, según los inhrrnes, a un 40 por ciento2'. En cambio, en otros casos los ahorros han sido escasos o nulos y la subcontratación ha sido incluso más cara que los servicios anteriores. Como se menciona en algunos estudios recientes de la OIT sobre el tema22, la subcontratación externa de los servicios públicos no suele presentar. problemas, a condición de que el servicio correspondiente esté claramente definido y bien controlado, se garantice la honradez del concurso y se mantenga un nivel suficiente de empleo y de condiciones de trabajo para los empleados afectados.. Pero suele ser bastante raro encontrar reunidas todas estas condiciones.. PROSY CONTRAS DEL TRABAJO EN RÉGIMEN DE SUBCONTRATACI~N El punto de vista de los empleadores Desde el punto de vista de las empresas usuarias, el recurso al trabajo en régimen de subcontratación es beneficioso porque aumenta la competitividad y la eficiencia de sus empresas La flexibilidad que permiten los acuerdos para el trabajo en régimen de subcontratación es uno de los factores más citados en el caso de la utilización de la fuerza laboral. Por una parte, el trabajo en régimen de subcontratación desempeña un papel impor.tante en las industrias que presentan niveles cíclicos de producción y fluctuaciones en la producción y la demanda, como la silvicultura, la construcción, las industrias petroquímicas y las plantaciones Por otra parte, el trabajo en régimen de subcontratación da a los empleadores la oportunidad de obtener el máximo rendimiento de la composición de la fuerza de trabajo, buscando un equilibrio adecuado entre el <<núcleo»y la «periferia>>de sus componentes, así como entre la mayor o menor capacitación de sus trabajadores. De todos modos, las posibilidades de este modelo flexible << núcleo-periferia»23de utilización de la mano de obra, en el que B facilitan la mayor flexibilidad funcional y los los trabajadores que forman el <<núcleo trabajadores << periféricos B contribuyen a la flexibilidad numérica, siguen siendo una cuestión muy discutida en la bibliografía sobre este tema24 Desde el punto de vista de los empleadores, se piensa que esta flexibilidad puede ayudar a reducir la factura salarial a medio o largo plazo. El trabajo en régimen de subcontratación puede contribuir a rebajar los costos salariales generales por la misma cantidad y calidad de trabajo. Se puede llegar a ello rebajando los costos salariales indirectos (reduciendo los pagos por seguridad social) o rebajando los costos salariales directos, y también disminuyendo los dos capítulos de gasto El aumento de la producción y la reducción de los gastos administrativos son otras dos razones que suelen aducir se con frecuencia para justificar el recurso a los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación. Sin embargo, existen también algunos inconvenientes potenciales del trabajo en régimen de subcontratación para las empresas usuarias, entre los que destaca la posibilidad de que los trabajadores estén menos capacitados y sean, en cambio, más inestables y menos dedicados a su trabajo, lo que afectaría negativamente tanto a la 22 Trabajo en régimen de subcontratación calidad como a la productividad; también puede ocurrir que surjan problemas de disciplina, y que la relación entre los trabajadores subcontratados y los empleados permanentes sea difícil, lo que no seria nada favorable para el ambiente de la empresa y tendría consecuencias muy negativas para los puestos de trabajo subcontratados Los intereses de los intermediarios que actúan en el ámbito del trabajo en régimen de subcontratación, cuando son legítimos, resultan también evidentes, puesto que la subcontratación de mano de obra constituye el «núcleo » de su negocio y les deja un beneficio que procede de los pagos que les hacen las empresas usuarias o los trabajadores Pero, para obtener mayores beneficios, algunos intermediarios cargan intereses cuando cobran las deudas de los trabajadores por algunos servicios que les han prestado, como el transporte, el alojamiento y algunos préstamos en forma de adelantos sobre el salario Estas prácticas parecen estar en contradicción con el Convenio sobre la protección del salario, 1949 (núm 95), que estipula que «se deberá prohibir cualquier descuento de los salarios que se efectúe para garantizar un pago directo o indirecto por un trabajador al empleador, a su representante o a un intermediario cualquiera (tales como los agentes encargados de contratar la mano de obra) con objeto de obtener o conservar un empleo» (artículo 9) El punto de vista de los trabajadores Desde el punto de vista de los intereses de los trabajadores sometidos a un régimen de subcontratación, cada uno de los acuerdos concretos de subcontratación puede tener ventajas o inconvenientes, y a veces las dos cosas al mismo tiempo. En una situación de exceso de mano de obra y de escasez de puestos de trabajo, los acuerdos de subcontratación pueden ser la única oportunidad que tengan los trabajadores para acceder al empleo Esta consideración compensa con frecuencia las posibles desventajas de la condición de empleado «fuera de la norma» Para determinadas categorías de demandantes de empleo que desean un tipo de trabajo menos rígido, el trabajo en régimen de subcontratación se ha convertido en un importante instrumento de flexibilidad que les permite hacer compatibles sus aspiraciones con las exigencias del mercado laboral Una de las ventajas que tiene el trabajo en régimen de subcontratación es que puede ser un buen camino para obtener un empleo fijo en las empresas usuarias. Cada vez más, las empresas prefieren recurrir a los trabajadores subcontratados por las agencias cuando tienen que cubrir puestos en su plantilla permanente, de modo que puedan evaluar la labor realizada antes de contraer obligaciones con un empleado Como ya se ha dicho antes, el recurso al trabajo en régimen de subcontratación se considera en ocasiones como un instrumento importante para aumentar la seguridad en el empleo de los asalariados permanentes de las empresas usuarias. Los trabajadores subcontratados se consideran a veces como una fuerza de trabajo «parachoques», de la que puede prescindirse fácilmente cuando disminuye la demanda del tipo de trabajo de que se trate. Para los trabajadores por cuenta propia, un atractivo importante de este tipo de régimen laboral es que con él pagan menos impuestos sobre la renta y evitan las deducciones salariales, percibiendo así un mayor salario neto que los que tienen un empleo tipificado «dentro de la norma» Pero la diferencial de «remuneración El contexto del mercado de trabajo 23 elevada » de la que disfrutan algunos trabajadores por cuenta propia disminuye cuando las empresas usuarias no cuentan en el precio acordado el valor de las prestaciones marginales, como pueden ser el seguro de enfermedad, las pensiones y las vacaciones que perciben en cambio los empleados de plantilla. El principal problema que se plantea en relación con el trabajo en régimen de subcontratación es si los trabajadores sometidos a él disfrutan de un nivel adecuado de protección social en comparación con el que tienen los trabajadores directamente empleados.. En la práctica, la respuesta suele ser negativa. A causa de las ambigüedades que existen en la definición de la naturaleza jurídica del trabajo en régimen de subcontratación, los trabajadores sometidos a él se encuentran con frecuencia en un completo vacío legal, despr,ovistosde la protección que proporciona la legislación laboral a los trabajadores directamente empleados. Los subcontratistas suministran a veces trabajadores subcontratados con una tenue cobertura de seguridad social contra los accidentes y el desempleo, y en ocasiones con algún tipo de pensiones, pero aun esta rudimentaria protección suele faltar por completo..Mientras tanto, sigue sin estar claro si las empresas usuarias son responsables de la cobertura de seguridad social. Como la categoría en el empleo de los trabajadores subcontratados está de ordinario mal definida, con frecuencia no tienen derecho al mismo nivel de condiciones de empleo, salarios y beneficios que reciben los empleados permanentes.. El empleo de los trabajadores subcontratados es mucho menos seguro que el de los que pertenecen a la plantilla. Las horas de trabajo suelen ser más largas para los trabajadores que están en régimen de subcontratación, porque su remuneración se basa en lo que han producido y suele estar vinculada a labores específicas, de modo que con frecuencia trabajan más de lo normal, superan la jornada laboral y tienen un tiempo de trabajo (diario y semanal) completamente atípico. Los trabajadores en régimen de subcontratación no suelen tener tampoco derecho a las vacaciones anuales pagadas ni a muchos otros beneficios marginales. El salario de los trabajadores en régimen de subcontratación puede ser inferior al de los trabajadores permanentes, y en todo caso depende de la forma de pago, de las comisiones que cobra el intermediario y del tipo de labor. La reglamentación sobre los salarios mlnimos, cuando existe, puede no ser aplicable a ellos si se supone que son empleados por cuenta propia. En muchos casos, tampoco reciben la misma remuneración que los convenios colectivos señalan para los trabajadores que están directamente empleados.. Una de las formas más socorridas de subcontratación consiste en recurrir a los servicios de los trabajadores nominalmente empleados por cuenta propia en lugar de utilizar los propios empleados. Esto puede dar lugar a abusos o fomentar a la explotación, en especial cuando los subcontratados son en teoría empleados por cuenta propia y tienen que aportar su propio equipo, materiales, etc. La mayoría de ellos no suelen disfrutar de pensiones ni se benefician de los acuerdos de permiso retribuido por enfermedad. La intensa presión de trabajo, la ambigüedad de las responsabilidades en la observancia de las condiciones de trabajo, comprendidas las reglamentaciones de seguridad y salud y su supervisión, así como la falta general de formación, convierten en algunos casos el trabajo en régimen de subcontratación en una z,ona de alto riesgo para toda clase de accidentes y enfermedades profesionales. Por ejemplo, en la 24 Trabajo en régimen de subcontratación industria de la celulosa y papelera, en la que el trabajo en régimen de subcontratación se utiliza mucho, los elevados índices de inseguridad están con frecuencia vinculados a este modelo de empleo25 Un estudio dirigido por el Seguro Nacional de Enfermedad de Francia mantiene que la extensión de estas formas de empleo es responsable de gran parte del aumento de los índices de accidente en los últimos años Los empleados temporeros facilitados por empresas de suministro de mano de obra sufren el doble de accidentes que el promedio general de los trabajadores. Aproximadamente, la mitad de la diferencia puede atribuirse a la composición de la mano de obra temporera y al tipo de trabajo que realiza, pero la otra mitad parece deber se a la naturaleza temporal de su situación. Hay poca información en materia de seguridad, y la formación que reciben los trabajadores es deficiente a este respecto. Con frecuencia se descuida incluso comprobar si un trabajador es apto para un puesto concreto26 Por la propia naturaleza de la relación de trabajo en régimen de subcontratación, las tasas de sindicación entre los trabajadores subcontratados son a menudo mucho más bajas que las correspondientes a los trabajadores permanentes Por último, los trabajadores en régimen de subcontratación cuyo estatuto como empleados no queda claramente definido pueden tener también dificultades para la protección de sus derechos en los procesos judiciales Por ejemplo, en Australia los trabajadores que no están reconocidos como empleados no tienen acceso a los tribunales establecidos para resolver los conflictos laborales Y si no se puede acceder a estas instancias, la solución de los conflictos, directamente ante la magistratura de trabajo u otros tribunales parecidos, suele ser muy cara. La ponderación de los pros y contras que presenta el trabajo en régimen de subcontratación puede ser muy distinta según las circunstancias económicas, sociales y jurídicas de cada país concreto Puede también depender de las características que presenta cada ramo industrial o cada una de las empresas en cuestión. En términos generales, la extensión del trabajo en régimen de subcontr atación viene determinada por la interrelación de un cierto número de variables que intervienen en el mercado de trabajo, entre ellas la oferta y la demanda, la competitividad, los precios, la productividad, la producción y los costos sociales. Empleadores y sindicatos mantienen distintas actitudes respecto al trabajo en régimen de subcontratación, según la incidencia que estos acuerdos de mercado de trabajo puedan tener en sus respectivos intereses En general, los empleadores están a favor de este modelo de utilización de la fuerza de trabajo, que consideran un instrumento importante para incrementar la competitividad y la eficiencia de la producción Ponen de relieve la naturaleza intermitente de determinados empleos y el hecho de que muchos de estos empleos están fuera del alcance normal («nuclear ») de las actividades de las empresas No debe, pues, sorprendernos que las organizaciones que representan a las empresas subcontratistas se muestren muy entusiastas acerca de las perspectivas de futuro de este régimen laboral En cambio, las empresas que actúan en el ámbito de la tecnología más avanzada, como la tecnología informática, expresan ciertas reservas sobre la calidad y la eficiencia de algunos de los subcontratistas El contexto del mercado de trabajo 25 Los empleadores del sector público, en especial las autoridades locales (que con frecuencia incluyen entre sus miembros cargos sujetos a elección), aportan respuestas mucho más matizadas, porque la subcontratación es a veces un tema político sensible Los cargos responsables de la subcontratación externa de los servicios públicos muestran también algunas reticencias, relacionadas con las dificultades a las que con frecuencia tienen que enfrentarse en su gestión de la labor que llevan a cabo los subcontr atistas Los empleadores se muestran también reticentes sobre la medida en que conviene regular los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación Les preocupa la posibilidad de un exceso de reglamentación que pudiera tener efectos negativos sobre las oportunidades empresariales y sobre el progreso económico Sin embargo, ciertos empleadores reconocen que algún tipo de intervención legislativa, en particular respecto a la subcontratación de mano de obra, puede ser deseable para establecer unas «reglas del juego» claramente definidas, eliminando a los empresarios poco escrupulosos y legitimando a los que actúan con honradez. Hay que reconocer que el crecimiento de la subcontratación ha alarmado a los sindicatos Con frecuencia, las reacciones más fuertes provienen de los sindicatos que representan a los trabajadores menos retribuidos y, por lo tanto, más vulnerables Otra fuente de preocupaciones proviene de la fragmentación de las relaciones de trabajo y de la baja en la afiliación de los sindicatos que trae consigo la subcontratación Muchos sindicatos tienen la impresión de que las empresas de subcontratación son, en general, hostiles al sindicalismo Los sindicatos están también preocupados por la necesidad de controlar y de reglamentar este fenómeno, para dar a los trabajadores que están en esa situación una protección jurídica y social adecuada Su desconfianza tradicional respecto al trabajo en régimen de subcontratación se ha visto aumentada por el hecho de que su influencia en las empresas de subcontratación es muy escasa, porque resulta difícil reclutar y mantener afiliados en dichas empresas Las reticencias de las empresas para reconocer a los sindicatos y para participar en la negociación colectiva no facilitan, por otra parte, una actitud más positiva por parte de los sindicatos en relación con el trabajo en régimen de subcontratación Sin embargo, cuando los subcontratistas adoptan una actitud más positiva respecto de los sindicatos, éstos suelen reaccionar de la misma manera Hay ejemplos de sindicatos que se han esforzado por organizar a los trabajadores en régimen de subcontratación y por negociar sus condiciones de trabajo (comprendidos los salarios) con los empleadores. Por ejemplo, los empleados de las agencias de trabajo temporal se han sindicado en Dinamarca, Finlandia y Suecia En Suecia, un acuerdo colectivo sobre las agencias de trabajo temporal que actúan en el sector de los servicios y de las oficinas se concluyó en 1988 Hay también casos de sindicatos que han puesto en marcha iniciativas de reclutamiento y de reconocimiento con los subcontratistas (por ejemplo, en los servicios de limpieza del Reino Unido) En muchos países, el debate entre los interlocutores sociales sobre el futuro del trabajo en régimen de subcontratación suele concentrarse en temas tales como el grado en que debería tolerar se y reconocerse, la manera de hacer compatibles los intereses de los trabajadores y de los empleadores, y la medida en que las autoridades públicas pueden intervenir en este ámbito. Por ejemplo, en el Pakistán los sindicatos consideran que el trabajo en régimen de subcontratación debería ser abolido, y la razón que dan es que se emplea abusivamente para evitar la adecuada protección de los trabajadores Los empleadores no son de la misma opinión, y pretenden que la falta de protección de 26 Trabajo en r é ~ i r n e nde subcontratación los trabajadores sometidos a este régimen procede principalmente de que no se han urgido muchos de los derechos que la legislación había otorgado ya a dichos trabajado re^^^.. En 1988, este tema fiie uno de los puntos sometidos a la consideración de la Conferencia Tripartita del Trabajo del Pakistán.. Una subcomisión tripartita establecida en 1989 aprobó el proyecto de ley sobre el trabajo en régimen de subcontrataciónpreparado por el Ministerio de Trabajo, Mano de Obra y Emigración. Unas nuevas discusiones sobre este tema, que tuvieron lugar en 1994 en el seno del Grupo de Trabajo sobre Mano de Obra establecido por el Gobierno y en la subcomisión especial constituida para tratar del trabajo en régimen de subcontratación, terminaron dando una serie de recomendaciones sobre la conveniencia de la presentación de una ley específica sobre el trabajo en régimen de subcontratación. Esta ley se aplicaría tanto a las empresas públicas como a las pertenecientes al sector privado, y dispondría el registro de las empresas que emplean trabajadores en régimen de subcontratación, daría las correspondientes licencias a los subcontratistas y establecería las responsabilidades que corresponden tanto a las empresas usuarias como a los subcontratistas.. Notas ' Para más detalles, véanse E Córdova: «Del empleo total al trabajo atípico: &Haciaun viraje en la evolución de las relaciones laborales?», en Revista Internaclonal del Trabajo, vol 108, núm 4, octubre-diciembre de 1986, págs 431-449 ;European Industrial Relatlonr Review « Non-standard forms of employment in Europe: Part-time work, fixed-term contracts and temporary work contracts», Informe núrn 3 (Londres, Eclipse Pubiications, julio de 1990); B Veneziani: «The new Labour Force», en R Blanpain y C Engels (directores de la publicación): Comparative Labour and Industrial Relationr in Industrialized Market Economies (Deventer, Países Bajos, Kluwer Law and Taxation Publishers, 1993), págs 203-225; IDS European Report, octubre de 1993, núm 382 Véase Lee Kiong Hock y A Sivananthiran: Contract labour in plantations, constructlon and saw milling in Malaysia A survey report, documento de trabajo SAP 2 42íWP 81 del Programa de Actividades Sectoriales (Oficina Internacional del Trabajo, Ginebra, 1995), pág 1 Para más detalles, véase P Egger y P Poschen (directores de la publicación) : Labour contracting and employment in construction, forestry, plantations and manufacturing (Ginebra, OIT), de próxima publicación Para más detalles, véase OIT: Situacidn reclente del trabajo en las plantaciones, Informe 1 presentado a la décima reunión de la Comisión del Trabajo en las Plantaciones, Ginebra, 1994, pág 60 5Lee Kiong Hock y A Sivananthiran, op c i t , pág 15 J Breman: «Even dogs are better off: the ongoing battle between capital and labour in the cane-fields of Gujaratn, en Journal of Peasant Sudles (Londres), vol 17, núm 4, julio de 1990, págs 546-608; A -R F Ali Taha: ~Employmentproblems in Kenyan plantations with particular reference to seasonal labour tecruitment*, documento de trabajo OITPECTA (Addis Abeba, 1975) E Astorga Lira y S Commander: «México: Comercialización de los productos agrícolas e incremento del trabajo itinerante en el campo», en Revlsta Internaclonal del Trabajo, vol 109, 1990, núm 1, págs 35-58 3 Collins: «Gender, contracts and wage work: Agricultural restructuring in Brazil's SZio Francisco Valley », en Development and Change, vol 24, núrn 1, enero de 1993, pág 68 9Congreso de los Estados Unidos: Informe de la Comisión sobre Trabaladores Agrlcolas (US Government Printing Office, 1993), anexo 1, cuadro 8, pág 862 loOIT : Informe general (Informe 1) presentado a la segunda reunión de la Comisión de la Silvicultura y de las Industrias de la Madera (Ginebra, 1991), págs 127-135 Véase también P Egger y P Poschen, op cit , pág 4 El contexto del mercado de trabajo 27 " Véase OIT : Seguridad del trabajo en lnstalaclones petrolferas en el mar y asuntos conexos, Programa de Actividades Sectoriales, documento TMOPIí193, presentado a la Reunión trlpartita (Ginebra, 1993), págs 11-14 y 31-32 l2 Lee Kiong Hock y A Sivananthiran, op cit , págs 15-16 y 33 l 3 J Birch: Employed or self-employed 7 Contract labour m tke Brrtlsk constructlon zndustry, documento de trabajo del Programa de Actividades Sectoriales, SAP 2 38íWP 63 (Ginebra, 1993) págs 1-3 '% B Batel: « Contract labour in India: Pattern and issues », en P Egger y P Poschen (directores de la publicación), op cit , pág 6 l 5 V F S Sit y S H Ng: «Ambulatory labour in Hong Kong», en International Labour Revlew, vol 119, núm 4, julio-agosto de 1980, págs 505-514 G Standing: Tke growtk oj externa1 labour jlexlbhy 1n a nascent NIC Malayslan labour flexibhty survey Plan de análisis del mercado de trabajo y del empleo del Programa mundial de investigación sobre el empleo, documento de trabajo núm 35 (Ginebta, OIT), 1989 l7 S Diesenhouse: «In a shaky economy, even professionals are 'temps' », en New York Times, 16 de mayo de 1993 l 8 E Silverstein: Contract labor in tke Unlted States, informe presentado a un proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontrataci6r1, julio de 1995, pág 6 l9 W Daubler : Contract labour German report, informe presentado a un ptoyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, julio de 1995, pág 8 20 P E Leighton: Contract labour In UK Law and practlce, informe presentado a un proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, mayo de 1995, págs 5-8 2' OIT: El trabajo en el mundo 1995 (Ginebra, 1995), núm 8, pág 78 22 Véanse J -Y Lesueur y P Plane: Les serv~cespubllcs afrlcains d l'épreuve de la rékabdttat~on une évaluatlon économlque et soelale, estudio llevado a cabo a petición de la Oficina Internacional del Trabajo y del Ministerio de Cooperación y Desarrollo de Francia en marzo de 1993, págs 89-94; C. Oestmann: Prwatlzation o f p u b l ~servlces andpublic utdltles, documento de trabajo SAP 4 251WP 70 del Programa de Actividades Sectoriales de la OIT (Ginebra, 1994), pág 12; La incidencia del ajuste estructural en los servmos públicos (eficac~a,mejora de la calldad y condiciones de trabajo), documento JMPSl1995 presentado a la Reunión paritaria de la OIT (Ginebra, 1995), págs 28-30 23 Para más detalles, véase J Atkinson: «The changing corporation »,en D Clutterbuck (director de la publicación): New patterns oj work (Aldershot, Gower, 1985) 24 Por ejemplo, véase G. Anderson, P Brosnan y P Walsh: ~Flexibility, casualization and externalization in the New Zealand workforce», en Tke Journal of Industrial Relations, vol 36, núm 4, diciembre de 1994, págs 491-518 25 OIT: Cuestiones sociales y laborales en la industria de la celulosa y papelera, Programa de Actividades sectoriales, documento TMPPIí1992 (Ginebra), págs 64 y 65 26 «Le précarité en questionn, en Travad y Sicurlté, 211992, núm 497, págs 97-102 27 Para más detalles, véase Contract labour, capítulo 11 del informe del Grupo de Trabajo sobre mano de obra publicado el 19 de julio de 1994 por el Ministerio de Trabajo, Mano de Obra y Emigración (Dirección General de Mano de Obra) del Pakistán, págs 21-50 CAPITULO 111 COBERTURA POR LA LEGISLACION GENERAL DEL TRABAJO Y LOS CONVENIOS COLECTIVOS El recurso a la mayoría de las modalidades de trabajo en régimen de subcontratación responde al propósito de una o de ambas partes de no someter la relación entre la empresa usuaria y los trabajadores de que se trate a la legislación laboral general Por consiguiente, la primera medida por la que muchos países pueden tratar de proporcionar protección a los trabajadores interesados consiste en extender la aplicación de la legislación laboral general a los trabajadores subcontratados para los que tal protección se considere necesaria. Esto se ha hecho en muchos países por medio de la ampliación de la definición del término de «empleados », que significa trabajadores cubiertos por la legislación laboral general, para incluir en ella a determinadas categorías de trabajadores subcontratados, ya sea basándose en la jurisprudencia de los tribunales o a consecuencia de la extensión reglamentaria explícita de la legislación a tales personas Las normas generales aplicables a la relación de empleo, que se derivan tanto del derecho consuetudinario como del derecho codificado, definen su campo de aplicación por medio de una referencia general a la relación de empleo, es decir, la relación entre el empleador y su empleado. El contenido de esta relación y la definición de « empleador >> y « empleado » se han dejado por lo general en manos de los tribunales para que puedan adoptar decisiones al respecto basándose en la jurisprudencia, a causa de la gran variedad de situaciones concretas que pueden producirse. Como resultado del desarrollo de esta jurisprudencia, así como de los criterios que permiten a los tribunales definir una relación de empleo, los tribunales de muchos países han podido extender el ámbito de la protección consuetudinaria y reglamentaria de la relación de empleo a ciertos tipos de trabajo en régimen de subcontratación Así, el principio general de la libertad de celebrar un contrato, que constituye uno de los pilares del derecho general de contratación, ha sido sometido a ciertas condiciones por los tribunales, que no permiten que las partes den un carácter comercial al contrato si ellos consideran que se trata fundamentalmente de un contrato de trabajo Por consiguiente, la intención de las partes no es necesariamente determinante, y los tribunales examinan las condiciones específicas de la relación existente entre la empresa y el trabajador para determinar el tipo de relación En general, este análisis de la situación de hecho evoluciona simultáneamente en dos direcciones, ambas de gran trascendencia Por una parte, se examina a fondo la relación que mantienen las empresas usuarias y los trabajadores subcontratados para saber de cuánta autonomía disponen estos últimos. Por otra, los órganos judiciales Cobertura por la legzslaczón general del trabajo y los convenlos colectwos 29 analizan también la naturaleza de la relación que realmente mantienen los trabajadores interesados, tanto con las empresas usuarias como con los subcontratistas Respecto al reconocimiento de la existencia de una relación de empleo, el derecho consuetudinario sobre este asunto, que tiene sus orígenes históricos en la jurisprudencia inglesa del siglo XIX, consideraba que la relación de subordinación constituía una rama del derecho de contratación fundada en una consideración jurídica de igualdad entre las partes El hecho de que esta relación tuviese su origen en el derecho de contratación significaba que los derechos y obligaciones mutuos entre las partes eran de la mayor importancia para la definición de la naturaleza de la relación La condición fundamental de un contrato era la ejecución de un trabajo a cambio de un salario La desobediencia a las órdenes razonables del patrón se consideraba una ruptura fundamental de contrato y autorizaba al empleador a poner término a la relación de empleo. Por consiguiente, el criterio de la dependencia de una de las partes . (el trabajador) respecto a la otra (el empleador) era de gran importancia para caracterizar un contrato de empleo Al principio, esta dependencia se interpretaba simplemente como un control directo ejercido por el empleador sobre el trabajo desempeñado por sus empleados: en los casos en que las empresas usuarias establecían un contrato para una determinada tarea o servicio, los subcontratistas se consideraban autónomos; en cambio, cuando las empresas usuarias dirigían la realización del trabajo, éstas eran consideradas como empleadores Pero los grandes adelantos tecnológicos y de organización tuvieron como consecuencia que muchos empleadores no pudiesen ya supervisar directamente a sus asalariados más capacitados o especializados Además, se pensaba que si no se producía este tipo de control, ello no era necesariamente prueba de la celebración de un contrato independiente o de otra índole, sino más bien del buen funcionamiento de la empresa y de que los incentivos financieros y las buenas relaciones con un personal responsable y bien seleccionado eran preferibles al rígido control anterior A consecuencia de ello, el criterio del ejercicio propiamente dicho de supervisión de la labor de los asalariados ha dejado paso al criterio del derecho de control, es decir, la legitimidad de dar órdenes en la medida en que haya margen para ello1 Un ejemplo especialmente expresivo de la dificultad que plantea la aplicación de este criterio es el caso de los trabajadores a domicilio, cuyas condiciones de empleo se han apartado mucho de lo que tradicionalmente se considera una relación de empleo2, porque el control y la subordinación quedan muy restringidos por las distancias físicas, a veces muy grandes, que existen entre las empresas usuarias y los lugares en que el trabajo se lleva realmente a cabo Esto ha obligado a que las magistraturas de los distintos países reconsideren el criterio de control y de subordinación en relación con los trabajadores a domicilio, ya sea interpretando este criterio de manera mucho más amplia (como se ha hecho en Italia, donde ha sido sustituido por el criterio de « parasubordinación ») o utilizando otros criterios Todo ello ha conducido a que el criterio de «actividad» (si el trabajador desempeña una actividad autónoma) y el de << integración B u G organización » (si el trabajador ejerce sus tareas como parte integrante de las actividades de la empresa usuaria) hayan tenido cierta aceptación en algunos momentos El primero de estos criterios se basa en las actividades de los trabajadores y el segundo en las actividades de los empleadores Por consiguiente, el control y la subordinación, por importantes que sean no constituyen criterios exclusivos para las magistraturas de muchos países con vistas a 30 Trabajo en réxirnen de subcontraraclón determinar si se trata o no de una relación de empleo..Los progresos realizados en cuanto a la organización del trabajo, el aumento de la especialización en materia de producción y la diversidad cada vez mayor de los acuerdos contractuales entre los actores comerciales han tenido como resultado la evolución de la doctrina judicial sobre esta cuestión.. A lo largo de los años han ido tomándose en consideración, en diferentes paises, otros varios indicadores, además (o como expresión concreta) de los criterios de «control », «actividad » e «integración » (u «organización ») arriba mencionados, para establecer si un determinado acuerdo contractual es un contrato comercial o de empleo. En la Argentina, Australia, Bélgica, Canadá, Estados Unidos, Filipinas, Italia, Japón, Por.tuga1, Reino Unido, Suecia y Tailandia se utilizan de forma muy diversa los criterios siguientes, de acuerdo con los informes por países sobre el trabajo en régimen de subcontratación elaborados en fecha reciente para la OIT: i) si el trabajador subcontratado trabaja únicamente para una determinada empresa usuaria ; ii) si la empresa usuaria es el proveedor exclusivo de los recursos, instrumentos y equipo necesarios; iii) si la empresa usuaria da instrucciones a los trabajadores subcontratados sobre la manera de efectuar el trabajo ; iv) si es la empresa usuaria o el trabajador subcontratado quien escoge el lugar en que deben desempeñarse las tareas o prestarse los servicios ; v) si el subcontratista asume algún riesgo desde el punto de vista comercial, o bien si tiene alguna expectativa de obtener algún beneficio vinculado al suministro de sus servicios que no consista en el cobro de una comisión fija; vi) cuál es el nivel de integración de la labor efectuada por los trabajadores subcontratados en la actividad de la empresa usuaria ;vii) en qué medida las funciones desempeñadas por.-lostrabajadores mbcontratados exigen conocimientos especializados ;viii) si es la empresa usuaria o el subcontratista quien paga las contribuciones fiscales y de la seguridad social ;ix) si los trabajadores subcontratados hacen el mismo trabajo que el realizado normalmente por el personal de plantilla de la empresa usuaria; x) si las fiinciones desempeñadas por los trabajadores subcontratados o los servicios prestados por los mismos están definidos como una actividad o como un resultado («producto final »); xi) si es la empresa usuaria o el subcontratista quien remunera a los trabajadores subcontratados ; xii) quién establece el horario de trabajo y el tiempo de descanso de la mano de obra subcontratada ;xiii) cuál es la regularidad y la continuidad en el desempeño del trabajo ;xiv) ante quién responden los trabajadores subcontratados; xv) si la empresa usuaria imparte formación a los trabajadores subcontratados, y xvi) si la empresa usuaria puede imponer sanciones a los trabajadores subcontr atados. Ninguno de esos factores es en sí mismo decisivo porque, en general, los indicadores utilizados en un determinado país se evalúan conjuntamente. Ahora bien, con frecuencia se suele dar prioridad al indicador de «control » (o de esubordinación ») porque en muchos países se considera que ese indicador constituye la principal característica de la relación de empleo. Cuanto mayor es el control por la empresa usuaria de la manera en que se efectúa el trabajo, más probable es que se reconozca la condición de asalariados de los trabajadores de que se trate, aunque el subcontratista asuma un riesgo importante en relación con las ganancias De todos modos, algunos expertos no se muestran demasiado convencidos de la eficacia de este planteamiento « multifactorial» y ponen de relieve que, en caso de aplicarse, la relación propiamente dicha seguiría sin recibir una definición jurídica, porque la importancia relativa de los criterios utilizados seria muy distinta según las 32 Trabajo en régzmen de subcontrataczón Aunque en casi todos los países los tribunales han extendido de hecho la protección de las leyes de empleo a ciertos tipos de trabajo en régimen de subcontratación a los que se puede aplicar un concepto de dependencia parecido al que caracteriza la relación de empleo, algunas legislaciones han incorporado además explícitamente ciertos tipos de trabajo en régimen de subcontratación a la definición de las personas o relaciones cubiertas, con frecuencia refiriéndose también al concepto de dependencia En los casos en que el régimen jurídico trata, por diversas razones, de asimilar los trabajadores subcontratados a los empleados, se utilizan normalmente dos tipos de procedimiento jurídico para incluirlos en la definición de «empleados» o para proporcionarles, de otra forma, la protección facilitada a éstos. Dichos procedimientos consisten en establecer unos criterios por los que también se concede a los trabajadores subcontratados la condición de empleados y en prever una lista de acuerdos contractuales en virtud de los cuales se consideran empleados.. Así, la ley de normas laborales de Quebec (Canadá) de 1990 define como empleados a «las personas que trabajan para un empleador y que tienen derecho a percibir un salario » ; esa definición incluye : i) a quienes se encargan de ejecutar un trabajo específico para una persona dentro del ámbito y en función de los métodos y medios deter minados por esta persona ;ii) a quienes se encargan de proporcionar ,para ejecutar el contrato, el material, equipo, materias primas y mercancías elegidas por dicha persona y de utilizarlas de la manera indicada por ésta, y iii) a quienes se reservan, como remuneración, la suma que resta de la cantidad percibida en virtud del contrato, una vez deducidos los gastos en que se ha incurrido durante el desempeño del mismo (artículo 2) A veces, se hace una distinción entre la definición de «empleado» y de «trabajador »,y se da a esta Última una interpretación más amplia, con arreglo a la cual se incluye no sólo a quienes trabajan en virtud de un contrato laboral, sino también a los que están sujetos a cualquier otro tipo de contrato por el que se comprometen a ejecutar o a desempeñar personalmente algún trabajo o servicio para otra parte en el contrato que no sea un cliente profesional suyo (artículo 296 de la ley de 1992 de sindicatos y relaciones de trabajo (codificación) del Reino Unido). La ley orgánica del trabajo de 1990 de Venezuela da prioridad a la cuestión de la dependencia y define al trabajador no dependiente como la «persona que vive habitualmente de su trabajo sin estar en situación de dependencia respecto de uno o varios patronos» (artículo 40). Ahora bien, la confusión frecuente entre la subcontratación de mano de obra y la subcontratación de obras y servicios parece haber constituido, en la práctica, un importante escollo que ha impedido al poder legislativo de muchos otros países dar una definición más precisa del término «empleado» en comparación con el de «subcontratista independiente» o de persona «realmente» autónoma Además, algunos expertos consideran incluso que la legislación constituye, a este respecto, un recurso muy limitado Por consiguiente, se ha propuesto que, en lugar de tratar de definir exhaustivamente a un «empleado », el poder legislativo indique a la magistratura que «tome en consideración la esencia y el funcionamiento en la práctica de la relación entre Ias partes y no simplemente los términos contractuales (si los hubiera) convenidos entre las mismas »6 Cobertura por la leglslaczón general del trabajo y los convenzos colectzvos 33 La cobertura de los trabajadores subcontratados por la legislación sobre negociación colectiva y por las disposiciones de los convenios colectivos pertinentes depende de la situación en el empleo de tales trabajadores..Para los que no reúnen la condición de asalariados según los criterios estatutarios o consuetudinarios tradicionales pero que tampoco pueden asimilarse completamente a subcontratistas económicamente independientes, la legislación sobre negociación colectiva de algunos países ha previsto la definición de « subcontratista dependiente» El Código del Trabajo del Canadá ilustra claramente esa situación..Dicho Código incluye a los subcontratistas dependientes en la definición de asalariados en lo que se refiere a los derechos de negociación colectiva y contiene una lista no exhaustiva de los que deberían caer dentro de la categoría de subcontratistas dependientes. Cabría incluir dentro de esta categoría a las personas siguientes : «a)al propietario, comprador o arrendatario de un vehículo utilizado para el transporte, que no sea por ferrocarril u otro tipo de raíl, de ganado, líquidos, bienes, mercancías u otros materiales, que sea parte en un contrato, oral o escrito, en virtud del cual: i) se le exija que se procure el vehículo por medio del cual ejecuta el contrato y que lo utilice de acuerdo con lo estipulado en el contrato, y ii) tenga derecho a quedarse, periódicamente, para su propio uso, la suma de dinero que haya sobrado después de haber deducido el costo resultante de la ejecución del contrato de la cantidad que percibe, conforme al contrato, para esta ejecución ; b) al pescador que, de conformidad con un acuerdo en el que es parte, tenga derecho a un porcentaje o a otra cantidad de las ganancias resultantes de una actividad pesquera conjunta en la que participe con otras personas, y c) a cualquier otra persona que, ya esté o no empleada en virtud de un contrato de trabajo, ejecute un trabajo para otra persona o le preste servicios en condiciones tales que, en relación con esa otra persona, esté en situación de dependencia económica y sujeta a la obligación de desempeñar tareas para la misma» (artículo 3). En algunos otros países, la legislación sobre negociación colectiva, si bien no utiliza la expresión de «subcontratistas dependientes», extiende la definición de «trabajador» a tales subcontratistas y, por consiguiente, les concede derechos de negociación colectiva..Un ejemplo de ello lo constituye el articulo 1 de la ley de 1976 sobre la participación en las decisiones en el trabajo, de Suecia, a cuyos efectos el término «trabajador » se extiende a toda persona que ejecuta un trabajo para otra persona sin haber celebrado con ésta un contrato de arrendamiento de servicios, pero cuya condición jurídica esencialmente sea la misma que la de un asalariado. La persona para la cual se ejecuta el trabajo será considerada, en tal caso, como el empleador . Las disposiciones de este tipo son principalmente pertinentes en los casos en que un grupo de tales « subcontratistas dependientes » se reúne y negocia con las empresas usuarias las condiciones en que se hace el trabajo o se prestan los servicios. Ahora bien, la dependencia económica por sí sola no determina la situación en el empleo de los subcontratistas. Hay muchas empresas de buena fe que dependen de otras empresas, pero de las que no puede decirse verdaderamente que hayan 34 Trabajo en réglmen de subcontratación establecido una relación de empleo Es preciso analizar con cuidado todas las condiciones económicas de una determinada relación contractual En este tipo de examen para decidir «de quién depende la empresa», es decir, del subcontratista o de la empresa usuaria, la legislación deja con frecuencia que esta cuestión se resuelva por jurisprudencia Los trabajadores subcontratados también pueden disfrutar de la condición de empleados y de esta forma estar cubiertos por la legislación general del trabajo y por los convenios colectivos en vigor en las empresas usuarias, si se determina que el empleador es parte en una relación de trabajo en régimen de subcontratación. La legislación de algunos países contiene varias definiciones destinadas a esclarecer la condición de empleador de las empresas usuarias, de los subcontratistas y de los intermediarios, o a asignarles las responsabilidades propias de los empleadores Por lo que se refiere a las empresas usuarias, que figuran con frecuencia en la legislación como «principales contratistas » o «usuarios », se definen en general como entidades o personas jurídicas que durante sus actividades u ocupaciones, o a efectos de ellas, encomiendan al exterior la totalidad de sus tareas o una parte de las mismas En la ley sobre empleo de 1955 de Malasia (en su forma enmendada en 1981) se define al «principal contratista » como la «persona que en el desempeño de su actividad u ocupación, o para los fines de la misma, encomienda a un subcontratista la ejecución por éste o bajo sus órdenes de la totalidad o de una parte de cualquier tarea emprendida por el principal contratista» (artículo 2) Algunas veces, tales definiciones se ocupan directamente de la relación existente entre la empresa usuaria y los trabajadores subcontratados Así, las leyes sobre discriminación sexual y discriminación por motivos de incapacidad de Australia a que se ha hecho referencia más arriba definen al principal contratista, en relación con un trabajador subcontratado, como la persona para la que este último trabaja en virtud de un contrato entre el empleador del trabajador subcontratado y el principal contratista7 Los términos «contratista » y « subcontratista » también han sido definidos de diferentes maneras, ya se apliquen a acuerdos comerciales de subcontratación o a la subcontratación de mano de obra. Por ejemplo, la ley orgánica del trabajo de 1990 de Venezuela define al contratista como «la persona natural o jurídica que mediante contrato se encargue de ejecutar obras o servicios con sus propios elementos B (artículo 55) Algunas veces esas definiciones se acoplan entre sí A este respecto, la ley sobre empleo de Malasia de 1955 (en su tenor enmendada de 1981) contiene un ejemplo de una amplia serie de definiciones relacionadas con los acuerdos sobre trabajo en régimen de subcontratación Esta ley contiene las siguientes definiciones: i) el «contratista principal » es la persona que celebra un contrato con un contratista para la ejecución por este último o bajo las órdenes del mismo de la totalidad o de una parte de la labor que se le ha encomendado al contratista principal; ii) el «contratista» es la persona que celebra un contrato con un contratista principal para realizar la totalidad o una parte de cualquier tarea de que se encarga este último en el curso de la actividad u ocupación desempeñadas por el contratista principal o para los fines de las mismas ; iii) el « subcontratista» es la persona que celebra un contrato con un contratista para la ejecución por el subcontratista o bajo las órdenes del mismo de la totalidad o de una parte de cualquier tarea desempeñada por el contratista para su contratista principal ; en esta definición queda incluida cualquier persona que celebre un contrato con un subcontratista para realizar la totalidad o una parte de la tarea emprendida por el Cobertura por la legislación general del trabajo y los convenios colectzvos 35 subcontratista para un contratista, y iv) el csubcontratista de mano de obra» es la persona que celebra un contrato con un contratista o un subcontratista para suministrar la mano de obra necesaria para la ejecución de la totalidad o de una parte de la tarea que un contratista o un subcontratista se haya comprometido a realizar para un contratista principal o para un subcontratista, según sea el caso (artículo 2) El Código del Trabajo de Haití interpreta de manera diferente los términos «contratista» y « subcontratista» por lo que se refiere a la condición de empleador de las personas a quienes esos términos se refieren El Código considera que el «contratista» es la persona que contrata a trabajadores para la ejecución de un trabajo por cuenta de una empresa usuaria «con o sin los recursos proporcionados » por esta última y que, por consiguiente, actúa como empleador (artículo 19) ; en cambio, el «subcontratista» se define como un «intermediario», es decir, como «un tercero a quien un contratista confía una tarea, cuya realización ordena a otra u otras personas con los recursos proporcionados por el contratista y bajo la dirección o el control de éste » (artículo 26) Las legislaciones de otros países se esfuerzan por definir a los subcontratistas independientes y, de esta forma, distinguirlos de los que deberían ser considerados como asalariados El Código Sustantivo del Trabajo de Colombia define a los «contratistas independientes », a los que considera como verdaderos patronos y no como representantes o intermediarios de los empleador es, como las personas que contratan la ejecución de una o varias obras o labores en beneficio ajeno, por un precio determinado, asumiendo todos los riesgos, para realizarlas con sus propios medios y con libertad o autonomía técnica y directiva (artículo 34) Uno de los pocos intentos que se han hecho recientemente por establecer una distinción entre los diferentes contratistas independientes y los asalariados lo constituye la ley francesa de 11 de febrero de 1994 sobre la iniciativa y la empresa individual (loi relative a l'znitiatzve et a l'entreprlse zndividuelle - « loi Madelin Esta ley parte del supuesto de que las personas que están debidamente registradas, en especial a efectos de la cobertura de la seguridad social y de las prestaciones familiares, no están sujetas a una relación de empleo en lo que se refiere a las actividades para las que han sido registradas Ahora bien, la existencia de una relación de empleo puede reconocerse si esas personas, directamente o por medio de un intermediario, proporcionan trabajos o prestan servicios a las empresas usuarias, en condiciones tales que esos subcontratistas están legalmente en una situación de subordinación permanente con respecto a dichas empresas (artículo L 120-3 del Código del Trabajo, en su forma enmendada el 11 de febrero de 1994) La legislación de algunos otros países contiene ejemplos de definiciones del «intermediario » Por ejemplo, el Código Sustantivo del Trabajo de Colombia considera como «intermediarios» a las personas que coordinan los servicios de los trabajadores para la ejecución de trabajos para beneficio de un empleador (artículo 35). Dicho Código define a los «simples intermediarios » como las «personas que contratan servicios de otras para ejecutar trabajos en beneficio y por cuenta exclusiva de un empleador » En caso de que la persona que celebra un contrato de trabajo no señale que está actuando como «simple intermediario» y no facilite el nombre del empleador, responde solidariamente con el empleador de las obligaciones respectivas (artículo 35) La ley federal del trabajo de 1969 de México define al «intermediario» como la persona que contrata o interviene en la contratación de otra u otras para que presten 36 Trabajo en régimen de subcontrataci6n servicios a un patrón Estos intermediarios no podrán recibir ninguna retribución o comisión con cargo a los salarios de los trabajadores Las empresas usuarias que utilicen intermediarios para la contratación de trabajadores tienen que asumir todas las obligaciones que resulten de dicha ley con respecto a esos trabajadores Esto tiene como resultado que la condición de los intermediarios sea diferente de la condición de las empresas establecidas que contratan trabajos para ejecutarlos con elementos propios, «suficientes para cumplir las obligaciones que deriven de las relaciones con sus trabajadores», ya que la ley considera a éstas como empleadores de tales trabajadores (artículos 12 a 14) Por consiguiente, las empresas contratantes que no disponen de elementos suficientes para cumplir con sus obligaciones laborales respecto de los trabajadores vinculados por acuerdos de subcontratación con las empresas usuarias no son reconocidas como empleadores de tales trabajadores Aquí, el objetivo de la legislación es, sin duda, evitar que los trabajadores se encuentren sin un empleador claramente especificado, que puede ser tanto la empresa usuaria (cuando la fuerza de trabajo se contrate por medio de intermediarios o de las empresas «que no dispongan de elementos propios suficientes ») como las empresas subcontratistas que tengan elementos suficientes para cumplir con las obligaciones de los empleadores respecto de los trabajadores subcontratados. La ley orgánica del trabajo de 1990 de Venezuela contiene una interpretación diferente del término «intermediario» A diferencia del Código del Trabajo de México, dicha ley estipula que cuando una empresa, establecimiento, explotación o faena es explotada por un intermediario, se considerarán patronos tanto el intermediario como la persona por cuya cuenta se efectúa la actividad de que se trate (artículo 49) Se entiende por intermediario la persona que en nombre propio y en beneficio de otra utilice los servicios de uno o más trabajadores ;el intermediario será responsable de las obligaciones que a favor de esos trabajadores se deriven de la ley y de los contratos (articulo 54)9 Otras legislaciones aplican el término de «subcontratista» a los intermediarios individuales. Así, el código de trabajo para los territorios y los territorios asociados dependientes del Ministerio de la Francia de Ultramar, que fue adoptado en 1952 y que repercutió de forma importante en la legislación cuando estos países alcanzaron su independencia, define al tacheron como un « subempresario que recluta él mismo la mano de obra necesaria y concierta con un empresario [que aquí significa la empresa usuaria] un contrato escrito o verbal para la ejecución de cierto trabajo o la prestación de determinados servicios a cambio de un precio alzado » (artículo 64) Ahora bien, en la legislación nacional, la definición de tdcheron figura de forma más explícita Así, el Código del Trabajo de Mauritania lo describe como un intermediario al que la empresa usuaria le confía «que contrate a obreros y les facilite eventualmente las herramientas y las materias primas para realizar una obra determinada» El tacheron, si bien es considerado por el Código como un empleador, tiene prohibida la explotación de los obreros, por lo cual se entiende el hecho de que «cobre directa o indirectamente una remuneración a los trabajadores por haberlos contratado o el hecho de contratarlos para ejecutar un trabajo sabiendo que éste deberá efectuarse en condiciones contrarias a la legislación, a los reglamentos, a los convenios colectivos y a la costumbre» (artículos 34a y 34b) El Código del Trabajo del Senegal define al tacheron como un maestro de obras que recluta a título ocasional la mano de obra necesaria y le proporciona la herramienta y materias primas precisas para realizar una obra Cobertura por la legislación general del trabajo y los convenlos colectwos 37 determinada, ya sea directamente para el dueño de la obra o como subempresario (artículo 75).. La cobertura de los trabajadores subcontratados por las disposiciones de los convenios colectivos en vigor en las empresas usuarias depende en gran medida de si estas últimas son consideradas o no como empleadores de tales trabajadores En los países en que los conflictos relacionados con la interpretación y aplicación de los convenios colectivos son examinados por árbitros o por órganos de arbitraje, se han elaborado a tales efectos ciertos criterios basándose en las prácticas de arbitraje Los criterios a que se hace referencia con más frecuencia son los siguientes: i) a quién corresponde el control y la dirección efectivos de las actividades de los trabajadores ; ii) quién soporta la carga de la remuneración ;iii) si la remuneración se paga en función de la labor desempeñada o de los servicios prestados, o más bien de acuerdo con las calificaciones y la situación en el empleo de los trabajadores de que se trate ;iv) quién tiene un poder de decisión efectivo en lo que se refiere a la contratación, las medidas disciplinarias y los despidos ; v) a quién consideran los trabajadores subcontratados como su empleador, y vi) quién pretende ser el empleador legítimo, la empresa usuaria o el subcontratista. Cuando deciden reconocer a la empresa usuaria como empleador, los órganos de arbitraje también toman en consideración la repercusión que tal decisión podría tener en los trabajadores afectados Esa repercusión no siempre es necesariamente positiva para esos trabajadores Así, al ser reconocidos como asalariados de las empresas usuarias, los trabajadores pueden correr el riesgo de perder importantes prestaciones reglamentarias de las que disfrutarían a condición de trabajar de manera continua con el mismo empleador (como sucede, por ejemplo, en el Canadá) En tales casos, los órganos de arbitraje pueden dejar de considerar a las empresas usuarias como empleadores de los trabajadores subcontratados o calificar a éstas de empleadores y reconocer de forma simultánea un empleo de facto de duración indefinida de los trabajadores interesados, lo cual difiere poco de la posición en que se encuentran los asalariados ordinarios de las empresas usuarias; tales trabajadores subcontratados pueden esperar acumular una antigüedad significativa con fines reglamentarios10 Además, aunque los trabajadores subcontratados reciban la consideración de empleados del subcontratista, pueden estar cubiertos por el convenio colectivo de las empresas usuarias en virtud de las disposiciones sobre el « empleador común » que figuran en diversas legislaciones sobre la negociación colectiva En el Canadá, por ejemplo, los consejos de relaciones laborales tienen la facultad discrecional de considerar a dos o más empleadores independientes como un empleador único a efectos de los convenios colectivos y de la legislación en caso de que «las ocupaciones, negocios, actividades o tareas asociadas o conexas sean o fueran realizadas, bajo el mismo control o dirección, ya sea o no de manera simultánea por o mediante una corporación, individuo, empresa, agrupación o asociación, o por una combinación de éstos»" Tales disposiciones permiten potencialmente que la empresa usuaria y el subcontratista sean considerados como un empleador único para que el subcontratista esté obligado a cumplir el convenio colectivo de la empresa usuaria en sus relaciones con sus propios asalariados asignados a dicha empresa La jurisprudencia de los órganos de arbitraje sobre cuestiones de trabajo ha tenido como 38 Trabajo en régimen de subcontratación resultado la adopción de ciertos criterios para la aplicación de las disposiciones relativas a la declaración de empleador común, entre los que figuran los siguientes : i) los trabajadores subcontratados realizan tareas relacionadas con una actividad esencial de la empresa usuaria; ii) el contratista no ejerce un control real sobre sus asalariados; iii) el contratista no tiene autoridad efectiva respecto de los tipos de servicios que se proporcionan, y iv) existe una relación corporativa entre el subcontratista y la empresa usuaria En los Estados Unidos, el Consejo Nacional de Relaciones Laborales y los tribunales han adoptado un planteamiento muy parecido para la aplicación de la legislación que regula la negociación colectiva En primer lugar, se elaboró el concepto de «empleador asimilado » con el fin de excluir a un sindicato que representa a los asalariados de un subcontratista de la prohibición general de realizar boicoteos secundarios l2 De acuerdo con este concepto, un sindicato puede recur~ira un boicoteo secundario contra una empresa usuaria si esta última es reconocida por el Consejo Nacional de Relaciones Laborales y por los tribunales federales como «empleador asimilado» en relación con el subcontratista. Este reconocimiento se basa en la consideración de la medida en que las dos empresas actúan con : i) una interrelación en cuanto al funcionamiento ;ii) un control centralizado de las relaciones de trabajo ;iii) una gestión común, y iv) un sistema de propiedad o de control financiero comunes. En segundo lugar, los tribunales también han declarado, aplicando el mismo criterio de cuatro factores, que un subcontratista y una empresa usuaria son, de hecho, una «misma empresa». Esto permite a un sindicato negociar en nombre de un grupo reducido de asalariados subcontratados aun en el caso de que el establecimiento del subcontratista sea demasiado pequeño para que éste pueda ser considerado como empleador de conformidad con la ley sobre relaciones de trabajo nacionales de 1935 Por último, los tribunales han definido las circunstancias en que la empresa usuaria ejerce un control suficiente sobre la relación de empleador a empleado de un subcontratista para considerar a la empresa usuaria y al subcontratista como << empleadores conjuntos » a efectos de la negociación colectiva. Por medio de la aplicación de un criterio menos restrictivo que el utilizado para definir a los « empleadores asimilados » o a una « empresa única », los tribunales formulan la pregunta de si la empresa usuaria posee un control suficiente sobre la labor desempeñada por los asalariados del subcontratista para que pueda ser considerada como «empleador conjunto» Entre los factores que se tienen en cuenta para la encuesta figuran el grado de control de la empresa usuaria sobre : i) la contratación y el despido ; ii) las medidas disciplinarias en relación con los asalariados ; iii) el salario, los seguros y los expedientes; iv) la supervisión, y v) la participación en el procedimiento de negociación colectiva13 Algunas veces, la cobertura de los trabajadores subcontratados por los convenios colectivos también puede resultar afectada por las disposiciones sobre los «derechos de sucesor » incorporadas en la legislación sobre negociación colectiva de algunos países (por ejemplo, Canadá) Esas disposiciones, cuyo objetivo es preservar los derechos de negociación de los trabajadores afectados, preven que si una empresa vende, transfiere o traspasa de otra manera la totalidad o una parte de sus actividades a otra empresa, esta última está obligada a respetar el convenio colectivo en vigor en la primera En lo que se refiere a la aplicación de las normas sobre sucesión a los acuerdos sobre el trabajo en régimen de subcontratación, esto significa que cuanto más depende el subcontratista de la empresa usuaria más probable es que los trabajadores Cobertura por la legtslaclón general del trabajo y los convenlos colectivos 39 de este subcontratista estén cubiertos por las disposiciones del convenio colectivo en vigor en la empresa usuaria. Ahora bien, la politica general de los consejos laborales del Canadá es aplicar de forma moderada las disposiciones sobre sucesión a la subcontratación de mano de obra.. Esto se debe a que tales disposiciones no tenían específicamente como finalidad reglamentar la subcontratación y a la interpretación general por los círculos canadienses involucrados en las relaciones de trabajo de que la subcontratación de mano de obra se supone que se reglamenta exiraoficialmente por medio de la negociación colectiva y no por conducto de los consejos laborales. Por consiguiente, la aplicación de las normas sobre sucesión constituye la excepción, pero no la norma, en lo que concierne a la ~ubcontratación~~. DEFINICIONES ESTABLECIDAS CON FINES ESTAD~STICOS La Clasificación Internacional de la Situación en el Empleo (CISE-93), elaborada por la decimoquinta Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo, convocada por el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del Trabajo y celebrada en Ginebra del 19 al 28 de enero de 1993, contiene varias definiciones que difieren de las normas reguladoras que ya hemos examinado por su finalidad específicamente estadística No obstante, las definiciones de la CISE-93 l5 pueden ser muy útiles para una posible elaboración de definiciones internacionalmente aceptadas que resulten adecuadas para los acuerdos sobre el trabajo en régimen de subcontratación, especialmente en vista de la posible adopción de una norma o normas internacionales sobre este asunto En primer lugar, la CISE define a los «empleados » como aquellos trabajadores que tienen «empleos asalariados» en que los titulares tienen contratos de trabajo implícitos o explícitos (orales o escritos) por los que reciben una remuneración básica que no depende directamente de los ingresos de la unidad para la que trabajan (esta unidad puede ser una corporación, una institución sin fines de lucro, una unidad gubernamental o un hogar) Algunos o todos los instrumentos, bienes de capital, sistemas de información y10 locales utilizados por los titulares son propiedad de terceras personas, y los titulares pueden trabajar bajo la supervisión directa de, o de acuerdo con directrices estrictas establecidas por, el(1os) propietario(s) o las empresas empleadas por el(1os) propietario(s) Las personas con «empleos asalariados» se remuneran típicamente con sueldos y salarios, pero también pueden remunerarse por medio de comisiones de ventas, pagos a destajo, primas o pagos en especie, tales como comida, habitación o formación. Los «empleados regulares» se definen como aquellos empleados con contratos estables ante quienes la organización empleadora es responsable por el pago de las cargas fiscales y de las contribuciones de la seguridad social y10 aquellos cuya relación contractual se rige por la legislación general del trabajo (párrafos 6 y 8 1) La CISE-93 también define a los «trabajadores fuera del establecimiento » como los trabajadores que : i) tienen contratos de trabajo implícitos o explícitos en virtud de los cuales trabajan para una empresa determinada, o suministran una cierta cantidad de bienes y servicios a una empresa determinada, de acuerdo con un arreglo previo o con un contrato con dicha empresa, pero ii) cuyo lugar de trabajo no se encuentra dentro de ningún establecimiento de la empresa Estos trabajadores pueden clasificarse en «empleos asalariados » o en «empleos independientes», de acuerdo con las condiciones específicas de sus contratos También 40 7rabajo en régimen de subcontrataczón pueden clasificarse como «empleadores» si contratan otros trabajadores (párrafo 14, h)) En segundo lugar, la CISE-93 define como «trabajadores por cuenta propia» a aquellos trabajadores que, trabajando por su cuenta o con uno o más socios, tienen «empleos independientes » (es decir, empleos en los que la remuneración depende directamente de los beneficios y en que los titulares toman las decisiones operacionales que afectan a la empresa, o delegan tales decisiones, pero mantienen la responsabilidad por el bienestar de la empresa) y no han contratado a ningún «empleado » de manera continua (párrafos 7 y 10 3) En tercer lugar, la CISE-93 define a los « empleadores », en el contexto del empleo independiente, como aquellos trabajadores que, trabajando por su cuenta o con uno o más socios, tienen el tipo de empleo definido como «empleo independiente » (véase más arriba) y que, en virtud de su condición de tales, han contratado a una o a varias personas para que trabajen para ellos en su empresa como empleados a lo largo de un período continuo (párrafo 9 2) Por último, la CISE-93 también define a los «contratistas » como aquellos trabajadores que: i) se hallan inscritos ante las autoridades fiscales (y10 ante otros organismos competentes) en calidad de unidad económica autónoma sujeta a imposición, y10 de modo tal que la empresa empleadora no es responsable del pago de la cotización pertinente de la seguridad social y10 la relación contractual no está regida por la legislación general del trabajo aplicable, por ejemplo, a los «empleados regulares», pero que ii) tienen contratos de «empleo asalariado» implícitos o explícitos (véase más arriba) De acuerdo con las circunstancias nacionales, los «contratistas » pueden clasificase en «empleos independientes » o en «empleos asalariados» (párrafo 14 i) La adopción de la CISE-93 ha tenido como resultado el reconocimiento de la diversidad cada vez mayor que existe en cuanto a la situación laboral de los trabajadores y de la necesidad de elaborar directrices técnicas que sirvan de base para fortalecer los programas nacionales de estadísticas y facilitar la comparabilidad internacional de las estadísticas También se ha reconocido que, con base en la experiencia acumulada, podrían introducirse nuevas modificaciones en la CISE-93 con el fin de adaptar esta clasificación a la situación del mercado de trabajo, que está evolucionando rápidamente Notas ' Véase Loretta de Plevitz : Contract labour in Australla, informe presentado para la investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, marzo de 1995, pág 13 Véanse m& detalles en OIT: Trabajo a dornulzo, Informe V (l), Conferencia Internacional del Trabajo, 82 " reunión, Ginebra, 1995, págs 30-53 Véanse más detalles en E Underhill y D Kelly : « Eliminating traditional employment : Troubleshooters Available in the building and meat industries~,en Journal of Industrial Relations (The Journal of the Industrial Relations Society of Australia), vol 35, núm 3, septiembre de 1993, págs 398-423 Véanse m& detalles en OIT : Trabajo a dorniczllo, Informe V (2), Conferencia Internacional del Trabajo, 82 "eunión, Ginebra, 1995, págs 18-42 Cobertura por la legislaczón general del trabajo y los convenios colectivos 41 Véase G England : Contract labour in Canada, informe presentado para el proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, primavera de 1995, págs 23-26 Véase A Stewart: Atyplcal employment and the future oj labour law, documento presentado a la conferencia de la Asociación de Profesores de Derecho de Australia celebrada en julio de 1992, QUT, Brisbane, Australia, pág 17 Loretta de Plevitz, op clt , pág 22 Para un análisis detallado de esta ley, véanse, por ejemplo, M Laroque: ~Présentationintroductive de la loi du 11 février 1994 relative A l'initiative et 2 l'entreprise individuelle» ;.J.-E Ray : «De Germina1A Internet Une nécessaise évolution du critkre du contrat de travailx ;F Dosoy : «La vérité sur le faux travail indépendant~,y G .Lyon-Caen: « 0 h mknent les mauvais chemins~,en Droit Social, núm 718, julio-agosto de 1995, págs 631-633, 634-637, 638-641, 647-650, respectivamente OIT : Documentos de Derecho Social, 199112, pág 76. loG . England, op cit , págs 21-23 ' Ibíd, pág. 23 l 2 El «boicoteo secundario» significa el boicoteo «que tiene como objetivo obligar a un empleador segundo o secundario a abstenerse de mantener relaciones comerciales con un empleador principal con el que el sindicato tiene un conflicto laboral » (William B Gould: A primer of American Labour Law, segunda edición, editorial del Instituto Tecnológico de Massachusetts, Cambridge, Massachusetts, 1986, págs 14-19, 53-54) j 3 Véase E Silverstein : Contract labour m the United States, informe presentado para el proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, julio de 1995, págs 45-47 l4 G England, op clt , págs 26-29 IS Boletín Oj~czal(Ginebra, OIT), vol LXXVI, 1993, serie A, núm 3, págs 178-203 CAPITULO IV REGLAMENTACION ESPECIFICA DEL TRABAJO EN REGIMEN DE SUBCONTRATACION Se han empleado varios métodos para reglamentar las prácticas del trabajo en régimen de subcontratación, con el fin de proteger los intereses de los trabajadores interesados. En el capítulo anterior se ha analizado en qué medida se aplican la legislación laboral general y los convenios correspondientes colectivos a ciertas formas de contrato de trabajo, por medio de la ampliación de las definiciones por los tribunales o por los propios acuerdos. Ahora, este capítulo se propone examinar las normas especiales desarrolladas por la legislación y los convenios colectivos para regular determinadas formas de trabajo en régimen de subcontratación El trabajo en régimen de subcontratación constituye una forma de relación que se sitúa jurídicamente en los límites entre la legislación laboral y la legislación comercial, que son ambas aplicables a este modelo específico de relación contractual La legislación comercial (civil) contempla normalmente las cuestiones que se refieren a la subcontratación de obras y servicios, en la medida en que afectan a una relación comercial entre empresas no subordinadas y económicamente autónomas Por otra parte, la legislación laboral se centra en la característica principal de la relación de empleador a empleado, que es la de subordinación y dependencia entre las partes implicadas Pero mientras la legislación comercial tiende a establecer un marco jurídico para las actividades empresariales en las que intervienen entidades económicas autónomas, la legislación laboral (tanto si se refiere al empleo como a la negociación colectiva) se dirige principalmente a proteger los intereses de los empleados, cuya dependencia de los empleadores se deriva de la naturaleza misma de la relación de empleo En el caso del trabajo en régimen de subcontratación, el principal problema es si hay que reglamentar - y cómo - un fenómeno que puede tener características de ambos tipos de relación o que, aunque mantenga las características fundamentales de la segunda, incorpora también algunos atributos formales de la primera Esta reglamentación tiene que llevarse a cabo de manera que no quede perjudicada la viabilidad de ninguno de los tipos de relación El problema es que las características del trabajo en régimen de subcontratación no quedan del todo claras (cuando no resultan francamente ambiguas) y que hay que formular unas definiciones que delimiten claramente el fenómeno que se desea proteger y lo distingan de otros fenómenos comerciales más amplios, que no requieren este tipo de protección Si no se hace como es debido, se cene el peligro de que no se brinde una protección adecuada a las personas cuyo estado de dependencia lo hace preciso o que los acuerdos comerciales normales sufran un innecesario perjuicio Hay también ejemplos del papel que han desempeñado los convenios de negociación colectiva y los acuerdos contractuales entre las empresas usuarias y los subcontratistas Las autoridades públicas tienen un papel que desempeñar en el control de estas prácticas, en las que deben intervenir para potenciar los aspectos Reglamentaczón espec@ca del trabajo en régzmen de subcontratacu5n 43 positivos del trabajo en régimen de subcontratación y eliminar posibles abusos En algunos países, los empleadores que se han comprometido en acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación han ido elaborando unas normas de conducta por el procedimiento de desarrollar determinadas normas que rigen sus actividades Un buen ejemplo de ello es la normativa ética de conducta elaborada por las agencias temporales de empleo que actúan en el sector del comercio y las oficinas de Dinamarca y Noruega. El objetivo principal que hay que alcanzar por medio de la reglamentación de las distintas formas de trabajo en régimen de subcontratación es doble: mantener los elementos del trabajo en régimen de subcontratación que se consideren positivos y brindar a los asalariados empleados en este régimen la necesaria protección social A este respecto, se han adoptado diversas medidas en algunos países La reglamentación de los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación trata sobre todo de excluir la posibilidad de explotación de los trabajadores interesados y de evitar que los que de hecho están dando empleo a estos trabajadores, es decir, las empresas usuarias y los subcontratistas, eludan las responsabilidades que tienen como empleadores en virtud de la legislación laboral y de seguridad social En algunos países se han hecho intentos para defender los empleos y las condiciones de trabajo de los empleados permanentes de las empresas usuarias y evitar que sean perjudicados por los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación Estos intentos se basan en las medidas siguientes: i) prohibición jurídica y eliminación práctica de ciertos tipos de acuerdos de contrato de trabajo; ii) autorización, registro o licencia de determinadas actividades de mercado de trabajo que comprenden elementos del trabajo en régimen de subcontratación ;iii) control administrativo sobre los acuerdos de contrato de trabajo por medio de la inspección de trabajo; iv) garantía de igualdad de trato entre los trabajadores subcontratados y los empleados de las empresas usuarias ;v) exigir que los contratos entre los subcontratistas y las empresas usuarias declaren claramente las condiciones de trabajo de los trabajadores implicados ;vi) asignación de responsabilidades legales a las obligaciones del empleador respecto a los salarios, las condiciones de trabajo, la seguridad y salud y la seguridad social, tanto en el caso de las empresas usuarias como en el de los subcontratistas, o en ambos Estas medidas se contemplan tanto en la legislación (legislación sobre empleo y negociación colectiva) como en los acuerdos voluntarios entre las partes implicadas (consulta bipartita o tripartita y acuerdos negociados entre los interlocutores sociales, negociación colectiva en general y contratos entre las empresas usuarias, los subcontratistas y los trabajadores implicados) Prohibición o restricción legal Un planteamiento que se hace en algunos países para regular determinados tipos de acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación es, sencillamente, prohibirlos Estas prohibiciones suelen referirse (implícita o explícitamente) a la subcontratación de mano de obra Pero a veces las prohibiciones legales se formulan de manera más general, lo que supone que son aplicables a los dos tipos principales de acuerdos de subcontratación laboral, es decir, a la subcontratación de mano de obra y también a determinadas clases de subcontratación de obras y servicios 44 Trabajo en régimen de subcontrataczón Estas prohibiciones se dirigen a evitar que los trabajadores sean explotados por los subcontratistas, y tienen ya una larga historia en el derecho laboral Su aparición se produjo a mediados del siglo pasado, cuando la legislación francesa procedió a la abolición de los subcontratistas de trabajo (marchandeurs o t6cherons), considerándolos desleales y explotadores' El Código del Trabajo de Francia mantiene aún hoy día este principio e implícitamente excluye toda subcontratación de mano de obra que redunde en la explotación de los trabajadores reclutados, considerando además como desleales «las operaciones con fines lucrativos de suministro de mano de obra que causen un perjuicio al asalariado concernido o permitan eludir la aplicación de las disposiciones de las leyes, reglamentos o convenios colectivos de trabajo, o el ajuste a destajo por un subcontratista (marchandage)>> (artículo L 125-1) En Italia, la ley núm 1369, de 23 de octubre de 1960,dirigida a poner en evidencia y a neutralizar la tentativa de hacer pasar la subcontratación laboral como una subcontratación comercial para la ejecución de servicios, prohibe la subcontratación externa de cualquier tipo de trabajo a subcontratistas si la empresa usuaria facilita capitales, máquinas o aparejos suministrados para la ejecución del trabajo encargado, aunque ésta perciba una suma con motivo de su uso Los subcontratistas legítimos son los que asumen plena responsabilidad en la organización y supervisión del trabajo Por lo tanto, los subcontratistas de mano de obra quedan implícitamente prohibidos La ley impone determinadas obligaciones específicas a los subcontratistas legítimos, que se refieren sobre todo a la protección y bienestar de los trabajadores así empleados. Se imponen multas por infracción tanto a las empresas usuarias como a los subcontratistas ;si se descubre que un trabajador ha sido empleado infringiendo lo dispuesto en esta ley, es considerado como empleado de la empresa que de hecho se beneficia de su trabajo, es decir, la empresa usuaria La legislación de Filipinas da un ejemplo poco frecuente de distinción jurídica de las dos figuras, la subcontratación de mano de obra («actividad para proporcionar exclusivamente la mano de obra») y la subcontratación de obras y servicios («actividades encaminadas a proporcionar mano de obra y materiales D), que se identifican y delimitan, pero prohíbe explícztamente los acuerdos de subcontratación de mano de obra Sin embargo, el Código del Trabajo de Filipinas prevé que la actividad para proporcionar exclusivamente mano de obra, que se define como el suministro de trabajadores a un empleador por medio de un intermediario, sea aplicable cuando : i) la persona que proporcione los trabajadores a un empleador no disponga de suficiente capital o activo en circulación en forma de herramientas, equipo, máquinas, locales de trabajo, etc , y ii) cuando los trabajadores contratados y colocados por dicha persona ejecuten un trabajo directamente vinculado a la actividad principal del empleador Los intermediarios que intervienen en este tipo de subcontratación de mano de obra tendrán la consideración de simples agentes del empleador, el cual será responsable con respecto de los trabajadores de la misma forma y en la misma medida que si el empleador los ocupare directamente (artículo 9 del reglamento de aplicación) La legitimidad de la subcontratación de obras y servicios se reconoce cuando se cumplen las condiciones siguientes: i) si el subcontratista tiene a su cargo una empresa autónoma y procede a la contratación de trabajo bajo su responsabilidad, según su propia manera de proceder y con su método, libre de todo control y dirección del empleador o empresa principal en todas las cuestiones que dicen relación con la eficacia del trabajo, excepto los resultados del mismo, y ii) si el subcontratista posee un capital importante o inversiones en forma de Reglamentación especqica del trabajo en régzmen de subcontrataczón 45 herramientas, equipos, maquinarias, locales de trabajo y otros materiales que son necesarios para la buena marcha de los negocios (artículo 8 del reglamento de aplicación) En julio de 1994, el Centro de Investigación y Estudios Especiales (CRSS) de Filipinas sometió al Secretario de Trabajo un informe, que había sido encargado por el Departamento de Trabajo y Empleo, sobre una revisión general del Código del Trabajo en vigor Este informe contiene algunas novedades importantes en el caso de las disposiciones que regulan los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación En primer lugar, propone declarar fuera de la ley la subcontratación de mano de obra En segundo lugar, confiere al Departamento de Trabajo y Empleo el poder de dar una autorización a los subcontratistas de obras y servicios En tercer lugar, el proyecto de propuesta enumera una lista de actividades que pueden estar sujetas a subcontratación de obras y servicios: i) los servicios que no estén directamente relacionados con el negocio principal de la empresa usuaria o no entren plenamente en su negocio o actividades principales ; ii) los trabajos especializados en determinadas industrias «que supongan la utilización de alguna destreza o experiencia especial, poco usual y peculiar >> ; iii) los seTvicios que se necesiten temporalmente para labores específicas como la mercadotecnia y la programación informática o para responder a un incremento inesperado de la cantidad de trabajo, que no pueda ejecutarse sólo con los empleados de la plantilla, y iv) los servicios de sustitución de los empleados permanentes que estén ausentes2 En la India, la ley de 1970 sobre mano de obra contractual (reglamentación y abolición), en su tenor enmendada en 1990, es un ejemplo de prohibición legal bastante amplia, potencialmente aplicable tanto a los acuerdos de subcontratación de mano de obra como a ciertas clases de subcontratación de obras y servicios La ley define al «contratista>>como «una persona que se encarga de conseguir determinados resultados para el establecimiento, fuera del simple suministro de mercancías, artículos utilizando mano de obra contractual [es decir, «cuando un contratista alquile sus servicios para dicho trabajo o en relación con éste, esté o no el empleador principal informado de ello »] o que proporciona mano de obra subcontratada para cualquier trabajo que concierna al establecimiento, y se aplica a un << subcontratista» (artículo 2,b) y c)) La citada ley confiere a los gobiernos de los Estados federados el derecho a prohibir el empleo de mano de obra subcontratada, habida cuenta de las condiciones de trabajo y de las prestaciones que se brinden a los trabajadores subcontratados y otros factores importantes, entre los que cabe citar: i) si la manipulación, operación o cualquier otra labor que estos trabajadores lleven a cabo en las empresas usuarias «tienen carácter contingente en la industria, comercio, negocio, manufactura u ocupación >> a los que se dedique el establecimiento en cuestión, o son necesarios para estos fines; ii) si esta labor «es de índole permanente, es decir, si su duración es suficiente, habida cuenta de la naturaleza de la industria, comercio, negocio, manufactura u ocupación >> a los que se dedique dicho establecimiento ;iii) si los efectúan normalmente trabajadores regulares del establecimiento en cuestión ; iv) si son suficientes para emplear en jornadas completas a un número considerable de trabajadores (artículo 10) Un proyecto de Código del Trabajo de la India, publicado en 1994 por la National Labour Law Association, se propone desarrollar ampliamente estas disposiciones En caso de aprobarse, prohibiría el empleo de trabajadores subcontratados si concurriesen los factores negativos mencionados, en lugar de limitarse a delegar en los Estados federados la facultad de proceder a esta prohibición, 46 Trabajo en régzrnen de subcontrataczón como se contempla actualmente en la ley de 1970 sobre mano de obra contractual (reglamentación y abolición (artículo 2 1, 1))' En Malasia, la legislación dispone que el Ministro de Recursos Humanos tenga derecho de prohibir, por orden ministerial, el empleo de cualquier persona o grupo de personas para llevar a cabo labores en un régimen distinto del de una subcontratación para la ejecución de servicios (articulo 2 A de la ley de empleo de 1955) Cuando dichas órdenes ministeriales surtan debido efecto, estos acuerdos se consideran simplemente relaciones de empleo. Una disposición parecida se contiene en el Código del Trabajo de Filipinas (artículo 106) Recientemente, han tenido lugar cambios bastante significativos en la reglamentación de las actividades de las agencias que suministran mano de obra, como las agencias de trabajo temporal (ATT) antes mencionadas y otras entidades parecidas que actúan en los mercados de trabajo, como pueden ser las agencias de cesión de personal, que emplean trabajadores con el exclusivo propósito de ponerlos a disposición, a menudo temporalmente pero a veces también de modo permanente, para que trabajen para las empresas beneficiarias con las que estos trabajadores no establecen una relación contractual formal Estas empresas reciben la consideración específica de empleadoras, y a causa de las mencionadas interpretaciones contradictorias han recibido diverso trato legal en los distintos países Mientras que en algunos países las actividades de estas agencias se consideraban como una subcontratación de mano de obra, y por consiguiente quedaban prohibidas, en otros países estas instituciones de mercado de trabajo han sido legalmente aceptadas De todos modos, la tendencia a una mayor flexibilidad en la reglamentación de sus actividades se hace cada día más clara y el número de países en los que se prohíben las actividades de estas entidades va en disminución Esto no hace más que reflejar el reconocimiento del importante papel que desempeñan en el funcionamiento real de los mercados de trabajo contemporáneos. En muchos países el suministro de mano de obra a través de agencias de trabajo temporal está permitido y la legislación garantiza a estas actividades la misma libertad que a otros negocios «normales» En otros, estas actividades quedan cubiertas por disposiciones legislativas especiales, y están sujetas a determinadas limitaciones, que se dirigen a: i) garantizar que sólo las empresas respetables y solventes participen en estos acuerdos ;ii) brindar a los trabajadores la protección apropiada ;iii) proteger los puestos de trabajo de los empleados permanentes de las empresas usuarias4 En relación con el ámbito de esta actividad, algunos paises han impuesto ciertas restricciones por medio de una legislación que determina las circunstancias en las que un empleador puede reclutar temporalmente trabajadores a través de dichas agencias Por ejemplo, la ley belga de 24 de julio de 1987 sobre el trabajo temporero, el trabajo temporal y la puesta de trabajadores a disposición de los empleadores prohíbe, en principio, suministrar trabajadores a las empresas usuarias, a menos que se necesiten para la ejecución de un trabajo temporal -como la sustitución de un trabajador cuyo contrato de trabajo ha sido suspendido (con algunas excepciones) o ha llegado a su terminación, un incremento extraordinario de trabajo o la necesidad de llevar a cabo un trabajo inesperado -, y a menos que se utilice una agencia de trabajo temporal (artículos 1, 7, 21 y 31). En el Japón, la ley de 1985 por la que se regula el funcionamiento de las agencias de trabajo temporal y se mejoran las condiciones laborales de los trabajadores temporeros establece dos criterios para autorizar el reclutamiento de trabajadores temporeros : i) la necesidad de emprender trabajos que, Reglamentaczón especzpca del trabajo en régimen de subcontrataczón 47 por la rapidez y precisión con que deban realizarse, requieran la posesión de conocimientos técnicos o de experiencia especial, o ii) los trabajos que requieran una dirección especial de los trabajadores (artículo 4) En la actualidad, una orden de la Presidencia del Gobierno enumera dieciséis categorías de trabajo que pueden ser realizadas por trabajadores cedidos, entre ellas la programación informática, el diseño y proyecto de maquinaria, la manipulación de maquinaria para la producción de imagen y sonido para la emisión radiofónica y televisiva, la producción de programas radiofónicos, la manipulación de maquinaria de oficina, la interpretación, traducción y taquigrafía, los trabajos de secretaría y archivo, la investigación de mercadotecnia, la dirección de asuntos financieros, la redacción de documentos destinados al comercio exterior, la presentación y explicación de productos manufacturados, las actividades de guía turística, la limpieza de edificios, la manipulación y mantenimiento del equipo del edificio, la recepción en los edificios y la gestión de las plantas de aparcamiento. Como formalmente son empleados de las agencias de trabajo temporal, los trabajadores que están en esta situación tienen derecho a todas las medidas de protección establecidas por la legislación laboral general y por la legislación de la seguridad social Además, en la legislación de varios países se han introducido diversas disposiciones específicas sobre las responsabilidades de las empresas usuarias Por ejemplo, la ley española núm 1411994, por la que se regulan las empresas de trabajo temporal, contiene diversas disposiciones que definen la relación del trabajador con la empresa usuaria (capítulo IV) Con carácter previo al inicio de la prestación de servicios, la empresa usuaria deberá informar al trabajador de los riesgos derivados de su puesto de trabajo, así como de las medidas de protección y prevención contra los mismos (artículo 16) Los trabajador es puestos a disposición tendrán derecho a la utilización de transporte e instalaciones colectivas de la empresa usuaria, así como a presentar a través de los representantes de los trabajadores de la empresa usuaria reclamaciones en relación con las condiciones de ejecución de su actividad laboral (artículo 17). Respecto a las posibles acciones disciplinarias, la ley faculta a la empresa usuaria para la dirección y control de la actividad laboral de dichos trabajadores, y estipula además que cuando una empresa usuaria considere que por parte del trabajador se hubiera producido un incumplimiento contractual, lo pondrá en conocimiento de la empresa de trabajo temporal a fin de que se adopten por ésta las medidas sancionadoras correspondientes (artículo 15) Una característica específica del suministro temporal de empleados de una empresa a otra es la «cesión », por la cual se establece una relación triangular, como se contempla ya en la legislación reciente de Luxemburgo En efecto, la ley de 19 de mayo de 1994 reglamentaria del trabajo temporal y del préstamo temporal de mano de obra (artículos 25-29) estipula que los empleadores que no sean los empresarios de trabajo temporal pueden ser también autorizados por el Ministro de Trabajo a poner sus trabajadores a disposición provisoria de otros empleadores, en casos: i) de amenaza de despido o de subempleo; ii) de ejecución de un trabajo ocasional; iii) de reestructuración en el seno de un grupo de empresas En estos casos, los contratos de empleo de los trabajadores cedidos se mantendrán sin pérdida de salario ni de las prestaciones correspondientes En algunos países, la legislación sobre negociación colectiva desempeña también un papel importante para determinar qué acuerdos de subcontratación de mano de obra son realmente legítimos, a través de la aplicación (por parte de los cor~espondientes 48 Trabajo en régzmen de subcontratación organismos de arbitraje laboral) de las disposiciones legales que prohíben las prácticas desleales de trabajo A causa de sus efectos potencialmente negativos sobre la posición negociadora de los sindicatos, tales acuerdos pueden ser considerados como realidad laborales de carácter desleal, aunque este mecanismo jurídico se aplica en la práctica con mucha cautela. Por ejemplo, en el Canadá los órganos de arbitraje laboral suelen eludir la espinosa elección entre la eficiencia en relación con los costos (que los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación pueden suponer para el empleador) y el perjuicio que causan a los trabajadores y a sus sindicatos Estos órganos (conscientes de que su función no es decidir el nivel más adecuado de eficiencia en relación con los costos, ni organizar los procesos de trabajo) tratan, sin embargo, de evitar que los empleadores vayan sin freno por este camino Han elaborado dos criterios para determinar las prácticas desleales en relación con los acuerdos de subcontratación de mano de obra. En primer lugar, se da una práctica laboral desleal cuando los empleadores tratan de obtener beneficios económicos no cuantificables por medio de los acuerdos de subcontratación, porque esto es un indicio de que el único objetivo del empleador es perjudicar a los sindicatos que actúan en su empresa En segundo lugar, hay práctica laboral desleal si el objetivo primarlo del empleador es perjudicar a los sindicatos, aunque esta actitud coexista con el deseo de obtener algún tipo de beneficios secundarios de los acuerdos de subcontratación5 En los casos de violación de las mencionadas disposiciones, la legislación de varios países estipula diversas disposiciones según las circunstancias, entre las que se contemplan las siguientes : i) el contrato entre el subcontratista y la empresa usuaria, según el cual los empleadores del primero son suministrados al segundo, se considera nulo de todo derecho pero no afecta a los contratos de empleo de estos trabajadores con el subcontratista que los emplea (por ejemplo, en Bélgica) ; ii) la relación entre un trabajador así reclutado y la empresa usuaria se contempla como un contrato de empleo sin límite temporal, que empieza con la propia ejecución del trabajo encomendado ;la empresa usuaria tiene, pues, que asumir todas las responsabilidades y obligaciones previstas en la legislación laboral ;el trabajador es libre de terminar su contrato en cualquier momento sin que tenga que dar preaviso alguno ni esté sujeto a indemnización (por ejemplo, en Alemania, Bélgica e Italia) ; iii) en algunos casos se prevé una responsabilidad conjunta del subcontratista y de la empresa usuaria (por ejemplo, en Bélgica) ;iv) también está prevista una penalización en forma de multa, y aun de prisión, que puede afectar tanto a la empresa usuaria como al subcontratista (por ejemplo, en Alemania, Austria, Francia, India, Italia y Japón) Autorización del trabajo en régimen de subcontratación Algunos textos legislativos se han concentrado en las medidas de organización que se dirigen a poner la subcontratación bajo el control de las autoridades públicas para proteger los intereses de los trabajadores implicados..El principal instrumento que se ha usado con este fin es la autorización, por la que un acuerdo de subcontratación recibe un reconocimiento legal si se cumplen determinadas condiciones, como el establecimiento de la personalidad jurldica de las empresas implicadas y el envío por correo de una carta de obligación. Estas condiciones se dirigen a garantizar. el cumplimiento de las obligaciones del empleador por las partes contratantes respecto a los trabajadores interesados..Pueden estar en relación tanto con la subcontratación por obras y servicios como con la subcontratación de mano de obra. Reglamentaccón especllfica del trabajo en régimen de subcontrataczón 49 En la India, por ejemplo, la ley de 1970 sobre mano de obra contractual (reglamentación y abolición) dispone el obligado registro de un empleador principal como condición necesaria para la utilización de mano de obra subcontratada, cuando esta subcontratación no se prohíbe expresamente Esta ley contempla también la posibilidad de la anulación del registro por parte del funcionario encargado del registro si comprobare que «ha sido obtenido merced a la relación inexacta de un hecho importante o a la disimulación de éste » (artículo 8) Cuando se conceda autorización a los subcontratistas, la autoridad pública competente podrá fijar las condiciones, «incluidas, en particular, las relativas a la duración del trabajo, salario y otras comodidades esenciales para la mano de obra contractual » La autorización «será otorgada una vez satisfecho el pago de los derechos y efectuado el depósito de las sumas que podrán ser prescritas, llegado el caso, para garantizar la debida observancia de dichas condiciones » (artículo 12,2)) No obstante, si una autorización ha sido obtenida merced a la relación inexacta de un hecho importante o a la disimulación de éste o si el beneficiario de la autorización no se ha conformado a las condiciones que acompañaban a la autorización concedida, el funcionario encargado de conceder las autorizaciones podrá anular o suspender la autorización o incautarse de la suma, si la hubiere, o de toda fracción de la suma depositada como fianza para garantizar la debida observancia de las condiciones que acompañaban la concesión de la autorización Toda persona que se considere perjudicada podrá, dentro del término de treinta días, interponer recurso ante el funcionario competente (artículos 14 Y 15) De conformidad con la ley de 1972 por la que se reglamentan las actividades de los empresarios de trabajo temporal, en la República Federal de Alemania la autorización de suministro temporal de mano de obra a titulo de operación comercial no se concederá a ningún solicitante que no observe «las disposiciones de la legislación sobre seguridad social, sobre deducción y pago del impuesto sobre salarios, sobre la colocación, sobre la contratación de trabajadores en el extranjero o sobre los permisos de trabajo», y no aplique «las disposiciones de la legislación sobre protección del trabajo» ni cumpla «sus obligaciones legales en materia de trabajo » (artículo 3, 1)) La autoridad pública competente puede anular la autorización concedida si ha sido obtenida por fraude, intimidación o delito contra la ley (artículos 4 (2) 1 Hay también ejemplos de un planteamiento más flexible en la relación entre las agencias de trabajo temporal y las autoridades públicas En algunos países estas agencias se consideran ante el derecho comercial común como una agencia de servicios corriente, de modo que quedan acreditadas simplemente inscribiendo su nombre en el registro comercial y haciendo la correspondiente declaración de impuestos Por ejemplo, en el Reino Unido la ley de desreglamentación y subcontratación externa («Deregulation and Contracting Out Act » -DCOA), que se adoptó en 1994, derogó las condiciones para la autorización que se habían introducido en 1973 en relación con todas las agencias y empresas de empleo6, pero mantuvo intactas las normas legales mínimas de conducta de estas agencias, así como el derecho de los inspectores de trabajo a investigarlas Este cambio de actitud se justifica porque las autorizaciones ya no cumplen la función de salvaguardia de las normas, y tener autorización no garantiza que su titular vaya a ser siempre honrado y digno de confianza En lugar de las autorizaciones, la ley procede ahora a reforzar el poder de las instancias de control, de modo que las autoridades públicas competentes puedan recurrir a la magistratura de trabajo para obtener que la actuación de personas 50 Trabaio en réazmen de subcontratación indeseables sea prohibida, con el fin de evitar que actúen a través de agencias o empresas de empleo. En el Canadá, la ley de normas de empleo de 1980 de la provincia de Columbia Británica establece un sistema obligatorio de autorización para los subcontratistas de trabajo agrícola ;este sistema presenta la particularidad de que un usuario que recuna conscientemente a los servicios de un subcontratista no autorizado pasa a ser responsable de todos los salarios y prestaciones que este último deba a sus empleados Los criterios que sirven de referencia para otorgar las licencias se dirigen sobre todo a que sólo los subcontratistas honestos y viables tengan derecho a actuar, garantizando además que actúen de modo profesional y responsable respecto a sus empleados (artículos 60 al 70). La ley japonesa de 1985 por la que se regula el funcionamiento de las agencias de trabajo temporal permite dos tipos de empresas de cesión y establece, en consecuencia, dos sistemas de control estatal sobre estas actividades El primero de ellos se basa en empresas de cesión de mano de obra con empleo permanente («agencias especializadas de trabajo temporal »), en las que el trabajador cedido recibe un contrato permanente y tiene que ponerlo en conocimiento del Ministro de Trabajo (artículo 16). El segundo tipo de cesión de mano de obra (« agencias generales de trabajo temporal») supone que la agencia tiene un registro de trabajadores que se inscriben por adelantado y celebra un contrato de empleo con el trabajador a requerimiento de una empresa cliente, y requiere la concesión de una licencia por el Ministro de Trabajo (la simple notificación no es suficiente) porque ese tipo de cesión de mano de obra es más inestable (artículo 5) Inspección de trabajo La función de la inspección de trabajo (u organismos similares), que tiene la responsabilidad principal del fomento de la observancia de la legislación laboral y de seguridad social, es de importancia vital para la erradicación de las prácticas abusivas y para la protección de los trabajadores subcontratados Esta función se refuerza con las medidas legales que exigen que las autoridades públicas sean informadas de las condiciones del contrato celebrado entre un subcontratista y la empresa usuaria Por ejemplo, en el Congo el subcontratista tiene que informar al inspector de trabajo de la naturaleza y duración probable de trabajo, así como del lugar en donde ha de llevarse a cabo. En Mauritania, la empresa usuaria tiene que depositar una copia del contrato en la inspección de trabajo, y el subcontratista tiene que enviar también copia de la comunicación, con indicación del nombre y dirección de los lugares de trabajo, así como del número de operarios necesarios En Italia, el Ministro de Trabajo es responsable (por medio de la inspección de trabajo) de la aplicación de la ya mencionada ley de 23 de octubre de 1960 (artículo 7) La legislación de algunos países exige que las empresas usuarias o los subcontratistas (o ambos) informen a la inspección competente, antes de que el contrato se ejecute, de sus nombres, direcciones y categoría del negocio, así como de los títulos correspondientes y de la ubicación de cada uno de los lugares de trabajo (artículo 77 del Código del Trabajo del Senegal, por ejemplo) o que envíen a la inspección de trabajo una copia del contrato (artículo 36 del Código del Trabajo de Mauritania y artículo 61 del Código del Trabajo del Gabón) Reglamentaczón especljFica del trabajo en régzmen de subcontratación 51 Requisitos de información, consulta o negociación con los representantes de los trabajadores En muchos países, la legislación establece taxativamente que los representantes de los empleados permanentes de las empresas usuarias tienen derecho a ser informados o consultados sobre la posible utilización de mano de obra externa por parte del empleador Por ejemplo, esta disposición se establece en la ley de cooperación dentro de las empresas, de 1978, de Finlandia (artículo 9) La legislación sueca ha ido aún más allá y ha facultado a los sindicatos a interponer su veto, entre otras cosas, en el caso de que los empleadores recurran a mano de obra externa De conformidad con los artículos 38 y 39 de la ley de codeterminación de 1976, antes de decidir que alguien venga a ejecutar algún tipo de trabajo sin iniciar una relación laboral, el empleador tiene que negociar con la organización de los empleados a la que el empleador esté vinculado por convenio colectivo Si los sindicatos correspondientes llegan a la conclusión de que los acuerdos propuestos suponen la no consideración de la ley o del convenio colectivo en vigor, los acuerdos propuestos pueden no llevarse a término. En el caso de que este derecho de veto se use de modo abusivo, el sindicato será responsable de cualquier perjuicio causado al empléador (artículo 57)7 Garantía de igualdad de trato respecto de los empleados permanentes de las empresas usuarias Una de las maneras de regular la subcontratación es la aplicación del principio de igual trato entre los trabajadores subcontratados y los empleados permanentes de las empresas usuarias La legislación de algunos países europeos (Austria, Bélgica, Dinamarca, Francia y Portugal, por ejemplo) garantiza a los trabajadores suminstrados por las agencias de empleo temporal el mismo trato que a los empleados regulares de las empresas usuarias, con el mismo salario y demás condiciones de empleo Se han hecho excepciones en algunas cuestiones respecto de las cuales la naturaleza del trabajo temporal puede requerir normas distintas, como un período de prueba, períodos de notificación, procedimientos, determinación de empleo y derecho de representacións En el Código del Trabajo de Arabia Saudita esta igualdad de trato condiciona la naturaleza del trabajo llevado a cabo por el subcontratista, determinando si es «nuclear » o «periférico », puesto que «si el empleador confía a una persona física o jurídica una de sus principales actividades o parte de ella, esta persona dará a sus empleados todos los derechos y privilegios que había concedido el empleador a sus propios empleados » (artículo 8). En México, la ley federal del trabajo de 1969 introduce una distinción entre los subcontratistas establecidos que tienen recursos suficientes para hacer frente a sus obligaciones ante los trabajadores que emplean y los que no tienen estos recursos («intermediarios»), y dispone que los trabajadores reclutados por medio de este segundo tipo de subcontratistas tengan derecho al disfrute de las mismas condiciones de trabajo que los trabajadores de las empresas usuarias que llevan a cabo tareas parecidas (articulo 15-11) El derecho de subcontratar trabajadores con el mismo tratamiento supone también protegerlos de la discriminación Aunque en la mayoría de los países la cuestión de si 52 Trabajo en régzmen de subcontrataczón estos trabajadores pueden disfrutar de la protección que disponen para ellos las leyes respectivas depende de que sean reconocidos como empleados, en algunos otros países se han adoptado medidas especiales para proteger de la discriminación a los trabajadores contratados Por ejemplo, en el Reino Unido la ley contra la discriminación entre los sexos («Sex Discrimination Act») de 1975 contiene una disposición especial relativa a los trabajadores subcontratados (entendidos como individuos empleados no por las empresas usuarias, sino por otras personas que los ponen a disposición, en virtud de un contrato celebrado con las empresas usuarias) Dispone que, si hay trabajo para los trabajadores subcontratados, las empresas usuarias no pueden discriminar a una mujer (salvo en casos muy concretos) en ninguna de las situaciones siguientes : i) en la propia definición por la que se le permite emprender este trabajo ; ii) no permitiéndole que lo realice o que lo siga realizando ; iii) en la manera en que se le da acceso a cualquier tipo de beneficio como facilidades o servicios, rehusando u omitiendo deliberadamente darle acceso a ello ;iv) sometiéndola a cualquier otra desventaja comparativa (artículo 9) En un caso reciente, la jurisprudencia del Reino Unido se ha referido a esta disposición para proteger los derechos al empleo de una mujer cuya reintegración en el puesto de trabajo que tenía como trabajadora subcontratada antes de su permiso por maternidad era rechazada por el empleador La ley italiana de 23 de octubre de 1960, ya mencionada, dispone que los obreros subcontratados que lleven a cabo obras o servicios, inclusive los trabajos de porte, limpieza o conservación normal de las instalaciones, que hayan de ejecutarse en el interior de propiedades bajo la organización y gestión del arrendador (es decir, conjuntamente entre la empresa usuaria y el subcontratista) tendrán aseguradas unas condiciones laborales «no inferiores al salario y condiciones de trabajo» de que disfruten los trabajadores permanentes de la empresa usuaria La misma disposición será aplicable a los arrendamientos de obras y servicios concertados por empresas de servicios públicos por lo que respecta al cobro de recibos, conservación de redes de distribución y de transporte e instalación de acometidas (ar.tículo 3) La aplicación de este principio de igualdad de trato entre los trabajadores permanentes de la empresa usuaria y los trabajadores subcontratados, por lo que respecta al tratamiento legal y a las disposiciones de los convenios colectivos, se limita a los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación que se refieren a las «actividades fundamentales de la empresa» o al «ciclo normal de producción» de la empresa usuaria Un método que ha demostrado ser eficaz y que ha sido ampliamente utilizado para facilitar trabajadores subcontratados con la misma protección en virtud de la legislación laboral y de seguridad social, consiste en su asimilación a la condición de empleados permanentes de las empresas usuarias Esto se puede hacer por medio de una interpretación más amplia del término «empleados D, como ya se ha explicado en el capítulo 11 Esta asimilación, tanto si tiene lugar a través de la legislación general como en virtud de los convenios colectivos, al extender todo el conjunto de las disposiciones existentes en la legislación y en los convenios colectivos a los trabajadores subcontratados, puede referirse sólo a determinados aspectos de la relación de empleo o a toda la negociación colectiva y a los derechos de representación de tales trabajadores Reglamentación específica del trabajo en régzmen de subcontrataczón 53 Exigencia de que los contratos entre subcontratzstas y empresas usuarias especifiquen las condzczones de trabajo de los trabajadores subcontratados En algunos paises, la legislación exige que los contratos en las empresas usuarias y los subcontratistas que suministran trabajadores al usuario se formulen de modo que queden claramente estipuladas las condiciones en las que haya que llevar a cabo las labores acordadas El Código del Trabajo de Mauritania, por ejemplo, exige que cada contrato entre la empresa usuaria y el tacheron (una figura específica de intermediario subcontratista que existe en algunos paises africanos de expresión francesa, como se ha dicho ya en el capitulo primero) se celebre por escrito y especifique : i) el objetivo y duración del contrato y el lugar en donde se llevará a cabo; ii) el número aproximado de trabajadores que han de ser reclutados y sus destrezas, horas de trabajo y niveles salariales; iii) los nombres y direcciones de la empresa usuaria y del tdcheron, así como todos los detalles necesarios sobre su estado civil (artículo 34, c ) ) La legislación belga ha avanzado más hacia la solución de este problema, disponiendo que se celebren contratos especiales tripartitos (triangulares) entre las empresas usuarias, los subcontratistas y los trabajadores implicados, con objeto de definir las condiciones y la duración del trabajolo. En otros países, la legislación estipula unos requisitos parecidos para la relación contractual entre las agencias de trabajo temporal y las empresas usuarias Según la ley japonesa de 1985 por la que se regula el funcionamiento de las agencias de trabajo temporal y se mejoran las condiciones laborales de los trabajadores temporeros, el contrato entre la empresa usuaria y la agencia debe determinar : i) la especificación del trabajo en que serán ocupados el o los trabajadores temporeros ; ii) la ubicación de los locales y otros lugares de trabajo; iii) los asuntos referentes a la persona que directamente dirija y supervise a los trabajadores temporeros ;iv) el período durante el cual se proporcionen los servicios de los trabajadores temporeros y los días en que trabajen ;v) las horas de comienzo, terminación del trabajo y los asuntos relativos a la seguridad e higiene, y vi) el número de trabajadores temporeros afectados (artículo 26) En Italia se han establecido normas especiales para los acuerdos de subcontratación externa en los servicios postales, ferrocarriles y monopolios del Estado Estas agencias públicas están obligadas a incluir en los acuerdos de subcontratación unas cláusulas que garantizan a los trabajadores subcontratados los salarios y las condiciones de trabajo previstos por los convenios colectivos del sector en el que actúa el subcontratista. Si en el sector de que se trate hay más de un acuerdo colectivo, se aplicarán a los trabajadores implicados las condiciones más favorables'' Otros textos legales disponen también la obligación del subcontratista a informar a los trabajadores que haya reclutado acerca del estatuto legal del subcontratista, su nombre y dirección, el nombre y dirección de la empresa usuaria y las fechas de pago de los salarios por medio de anuncios públicos que se colocarán en un lugar visible de los talleres y locales de trabajo utilizados Se enviará una copia de este anuncio a la empresa usuaria (artículos 77 y 78 del Código del Trabajo del Senegal y artículo 50 del Código del Trabajo del Camerún, por ejemplo) 54 Trabajo en régcmen de subtontrataccón Distrlbuclón de la responsabdidad legal del empleador en materia de salarios, condiciones de trabajo, seguridad y salud y seguridad social entre empresas usuarias, subcontratzstas o ambas El hecho mismo de que en el curso de los acuerdos de subcontratación los trabajadores implicados vengan a ser dependientes de ambos actores de la subcontratación implica una coordinación de funciones entre ellos, en la medida en que pueda interesar a la protección de las condiciones de empleo de estos trabajadores El grado de esta coordinación dependerá sobre todo de hasta qué punto las empresas usuarias controlan la eficacia del trabajo subcontratado. Cuanto más intervengan para dirigir y supervisar a los trabajadores subcontratados, más coordinación se requerirá entre las empresas usuarias y los subcontratistas para proteger adecuadamente a estos trabajadores. La doctrina de derecho social ha desarrollado determinadas formulas y técnicas por medio de las cuales puede conseguirse este tipo de coordinación. Estas formas y técnicas han variado pero siguen dirigiéndose al mismo objetivo, que no es otro que excluir la posibilidad de dejar a los trabajadores implicados (que son los trabajadores dependientes) sin una contrapar.tecontractual claramente identificada, responsable de sus condiciones de empleo. A veces, aunque la responsabilidad recaiga claramente sobre una empresa, el peligro de que la empresa no pueda asumirla ha llevado a ejercer presión para asegurar la protección de los trabajadores implicados Responsabilidad solidarla y múltiple respecto a los salarios y a las condiciones de trabajo En muchos países, los métodos para determinar los salarios y demás condiciones de trabajo de las personas subcontratadas no se derivan de manera demasiado significativa de un empleo considerado como «dentro de la norma» Esto suele dejarse a las propias partes o a los acuerdos colectivos, negociados por trabajadores subcontratados sindicados con sus empresas (que siguen siendo muy escasas) o concluidos en un sector económico concreto y que son después aplicables a los empleador es implicados en acuerdos de trabajo en régimen de subcontr atación En las situaciones en que la categoría en el empleo de los trabajadores subcontratados se reconoce como la de los empleados «dentro de la norma», su remuneración está protegida por las mismas disposiciones de derecho social aplicables al empleo «dentro de la norma» Si estos trabajadores no han tenido la categoría de «empleados», o no han recibido el mismo trato que los empleados «dentro de la norma», o no han sido asimilados a ellos, la protección legal de los salarios que dispone la legislación laboral se hace muy difícil de aplicar. Además, a causa de la todavía escasa sindicación de los trabajadores subcontratados y de las dificultades que suelen presentarse para determinar quién es su contraparte en la negociación de los salarios (es decir, quiénes son sus empleadores), los mecanismos de negociación colectiva no desempeñan el mismo papel de fijación de salarios que tenían en la situación de empleo «dentro de la norma» Los salarios de los trabajadores subcontratados se establecen con frecuencia independientemente de los convenios colectivos aplicables a los empleados «dentro de la norma »,y pueden ser mucho más bajos que los de estos Últimos Por lo tanto, otros instrumentos de fijación de salarios, como determinados textos legislativos o decisiones de las autoridades públicas, pueden tener una importante función complementaria para dar a Reglamentaczón especifica del trabajo en régzmen de subcontrataczón 55 los trabajadores la protección adecuada de sus salarios Estos instrumentos se han puesto ya en marcha en algunos paises en relación con determinadas categorías de trabajadores que pueden ser empleados por medio de acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación, como los trabajadores domésticos por ejemplo12 La información de que disponemos sobre este tema es escasa y dispersa, lo que contribuye a corroborar que la legislación, cuando existe, suele limitarse a garantizar el pago de los salarios de los trabajadores subcontratados, determinando las funciones y responsabilidades respectivas de las empresas usuarias y de los subcontratistas respecto de los trabajadores implicados La responsabilidad solidaria y múltiple es la característica más frecuente de la coordinación de las responsabilidades del empleador entre las partes para subcontratar acuerdos sobre salarios y otras condiciones laborales de los trabajadores implicados Ello supone una responsabilidad «impuesta a cada una de las diversas partes conjuntamente, y también de manera múltiple, de modo que una de las partes pueda reclamar contra todas o contra cada una de ellas, dejando a esta última que busque alivio en las demás»13..Puede también aplicarse tanto a todo el conjunto de condiciones de empleo de los trabajadores así reclutados como a algunas (e incluso una) de ellas. Por ejemplo, la mencionada ley de empleo de Malasia prevé, respecto a los salarios adeudados a los trabajadores, una responsabilidad conjunta y múltiple para las empresas usuarias y los subcontratistas En agosto de 1994, el Senado del Estado de California, en los Estados Unidos, aprobó el proyecto de ley AB 3046 sobre << legislación de la responsabilidad solidaria» como reacción a las infracciones de las leyes sobre salarios, tiempo de trabajo y trabajo infantil que habían sido reveladas por los hallazgos de una encuesta sobre las actividades de sesenta y nueve talleres subcontratistas de confección. Aunque en virtud de la legislación previamente adoptada, las empresas usuarias eran ya responsables de algunas infracciones de la ley por par.te de sus subcontratistas en el caso de que éstos no tuvieran la correspondiente autorización del Estado o no cumplieran con las demás disposiciones, en virtud de la nueva legislación las empresas usuarias tendrán que controlar incluso a los subcontratistas que estén debidamente registrados, o bien resignarse a pagar por las infracciones de la ley laboral que hayan podido cometer l4 A veces, la responsabilidad solidaria y múltiple se limita a los acuerdos de subcontratación que se relacionan con las actividades «normales » («nucleares B o «principales D)de las empresas usuarias El Código del Trabajo de la Arabia Saudita, por ejemplo, dispone que si la empresa usuaria confía a una persona física o a una entidad jurídica una de sus operaciones principales, o parte de ella, esta última tendrá que dar a los trabajadores así reclutados todos los derechos y privilegios concedidos por la empresa usuaria a sus propios empleados y ambos serán responsables, de manera solidaria y múltiple, de dichos derechos y privilegios (artículo 8) En la India, por ejemplo, la ley de 1970 sobre mano de obra contractual (reglamentación y abolición) transfiere a los subcontratistas la responsabilidad del pago de salarios a los trabajadores subcontratados, aunque las empresas usuarias conservan algunas funciones De conformidad con esta ley, cada empresa usuaria tiene que nombrar a un representante para que esté presente en el momento del pago de los salarios por parte del subcontratista, y este representante tiene el cometido de certificar, en la forma prescrita, las sumas abonadas en concepto de salarios El subcontratista será responsable del pago de los salarios en presencia de un 56 Trabajo en régimen de subcontratación representante autorizado del empleador principal En caso de que el subcontratista no pague los salarios dentro del plazo prescrito o que se limite a pagar anticipos de salarios, la empresa usuaria será responsable del pago de los salarios completos o el saldo de los mismos a los trabajadores empleados por el subcontratista, y podrá cargar al subcontratista el pago de estas cantidades, deduciéndolas directamente de los pagos que haya de efectuar al subcontratista o considerándolos como deuda pagadera por el subcontratista (artículo 21) La decisión de si un acuerdo concreto de subcontratación se relaciona con las actividades «normales » («nucleares » o «principales ») de la empresa usuaria suele ser de la competencia de los organismos judiciales A continuación vamos a citar unos ejemplos de la jurisprudencia argentina acerca de las actividades consideradas como «normales» y que, de este modo, preparan el camino al reconocimiento de una responsabilidad conjunta y múltiple de las partes contratantes: i) los servicios de cocina en los hospitales ; ii) los servicios de seguridad llevados a cabo por diversas empresas y servicios industriales, como la empresa que suministra agua potable; iii) los servicios de mantenimiento en las empresas industriales Hay también ejemplos de trabajo que ha sido llevado a cabo por los subcontratistas y que no ha sido considerado como una de las actividades «normales» de las empresas usuarias : i) cargar las mercancías que han de ser exportadas por una empresa exportadora; ii) los servicios de limpieza facilitados por el subcontratista para quien tales servicios constituyen su principal actividad La práctica judicial sigue siendo escasamente consecuente, de modo que hay casos en que unas actividades parecidas son consideradas como pertenecientes a distintas categorías (algunos servicios de seguridad y restauración, por ejemplo, se consideraron como «periféricos »)15 A veces la legislación garantiza a las empresas usuarias el derecho de exigir al subcontratista que deposite una caución de una cuantía igual al costo del trabajo objeto del contrato como garantía del pago de los salarios debidos a los trabajadores para el caso en que el subcontratista omita pagar dicho salario (artículo 7 del reglamento de aplicación del Código del Trabajo de Filipinas) En los países en donde la legislación ha trazado una clara distinción entre los intermediarios que actúan en nombre de las empresas usuarias y los subcontratistas independientes que actúan por su propia cuenta y riesgo (Venezuela, por ejemplo), los trabajadores reclutados por medio de estos intermediarios se consideran como empleados tanto de las empresas usuarias como de los intermediarios Como resultado de ello, ambas partes contratantes se consideran conjuntamente responsables de todas las obligaciones estipuladas en la legislación laboral y de seguridad social Por otra parte, los subcontratistas independientes se consideran como personas que llevan a cabo el trabajo en nombre de otros, asumen todos los riesgos implicados, llevan a cabo el trabajo con sus propios recursos y disfrutan de libertad técnica y administrativa (autonomía) en su actuación ;en calidad de tales son considerados como empleadores de los trabajador es r eclutados (artículos 4 1 y 54 al 56 de la ley orgánica del trabajo de 1990 de Venezuela) Responsabilidad respecto a la seguridad y salud Como ya se ha mencionado en el capítulo 11,la protección de la salud y seguridad de los trabajadores constituye una de las zonas que presentan problemas más importantes, generados por el reciente recurso a los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación. A causa de la constante incertidumbre respecto a la categoría del Reglamentación especljCica del trabajo en régmen de subcontrataclón 57 empleo, los trabajador es implicados pueden encontrar se fuera de la protección que la legislación laboral brinda a los empleados «dentro de la norma» Por lo tanto, en algunos países se han adoptado diversas medidas, tanto por medio de la legislación como voluntariamente por parte de las propias contratantes, para garantizar la protección adecuada a los trabajadores implicados Respecto a la legislación, en algunos países la aplicación de las cor~espondientes disposiciones de protección que proceden de la legislación laboral se ha extendido a todos los trabajadores, independientemente de su categoría en el empleo («dentro de la norma» o «fuera de la norma») Por ejemplo, en el Canadá se exige a los empleadores que tengan un cuidado razonable en salvaguardar la salud y seguridad de todos los trabajadores en los lugares de tr abajo, inclusive las personas que trabajan por cuenta propia, y en algunas provincias los subcontratistas tienen que garantizar que cada trabajador reclutado en un lugar de trabajo del cual el subcontratista sea «primariamenteresponsable >> o propietario cumple con los deberes que se derivan de la legislación l6 En Luxemburgo, por ejemplo, la ley de 1994 reglamentaria del trabajo temporal y del préstamo temporario de mano de obra dispone que las empresas usuarias sean las responsables exclusivas de la seguridad, higiene, salud y condiciones laborales de los trabajadores suministrados, así como la aplicación a éstos «de las disposiciones legales, reglamentarias, administrativas y convencionales relativas a las condiciones de trabajo y a la protección de los trabajadores en el ejercicio de su profesión» (artículo 12) En Australia, la protección de la seguridad y salud de los trabajadores subcontratados se hace de dos maneras. En primer lugar, se hace responsables a todas las personas que de hecho estén presentes en el lugar de trabajo (comprendidos visitantes y espectadores), cualquiera que sea su condición. La legislación sobre salud y seguridad profesional impone una serie de obligaciones generales a los empleadores, empleados, productores, contratistas principales, patronos y personas que ejerzan cualquier tipo de control de los lugares de trabajo para garantizar el cumplimiento de las normas de seguridad. Dispone también que si una persona está al cargo, será el responsable de cualquier infracción, por más que la acción u omisión infractora sea contraria a sus instrucciones o que seala acción u omisión de otra persona En segundo lugar, la cobertura que la legislación brinda a los trabajadores respecto de las compensaciones por lesiones relacionadas con su trabajo se hace jurídicamente extensiva a los trabajadores subcontratados. Los textos legales definen al trabajador de manera que este concepto comprenda también a personas que no se considerarían como empleados según los textos de derecho común Por ejemplo, un subcontratista independiente puede ser considerado como un trabajador, aun en el caso de que dé trabajo a otro, si labora junto a sus empleados Esta legislación cubre también la situación en la que el trabajador es «cedido» o puesto a disposición por otro empleador o por una agencia de trabajo temporal Cuando haya duda en la interpretación de esas disposiciones, la jurisprudencia suele favorecer al trabajador perjudicado l7 Hay también datos que permiten llegar a la conclusión de que las empresas adoptan voluntariamente las medidas de seguridad que consideran más apropiadas respecto de los trabajadores subcontratados Podemos citar el ejemplo de la industria de la celulosa y papelera, en la que, como se ha dicho antes, la incidencia de accidentes entre los trabajadores subcontratados ha sido muy elevada Cierta fábrica de tamaño 58 Trabajo en régimen de subcontratación medio en el sudoeste de Francia solía tener unos 1.50trabajadores externos, para una plantilla de 615 asalariados. La media de accidentes entre los trabajadores subcontratados era dos veces mayor que entre los trabajadores de plantilla, pero ninguna de las dos partes se sentía responsable de instruir a los trabajadores y velar por la observancia de las medidas de seguridad. Aunque la fábrica dejó clara la responsabilidad de la empresa subcontratista a este respecto en una nueva cláusula que introdujo en el contrato, el problema real estaba en la falta de coordinación y de supervisión de los talleres por parte de los subcontratistas..Esta situación se solucionó por medio de la creación de una asociación de subcontratados, a iniciativa de la propia fábrica y con la participación de su comité de seguridad y salud. El director de la asociación (creada en 1990) actúa como jefe ejecutivo en relación con todo el trabajo que llevan a cabo los subcontratistas por encargo de la fabrica En los dos años siguientes, los índices de accidentes entre los trabajadores subcontratados bajaron en un 50 por ciento, pero siguieron siendo más altos que entre los trabajadores de plantilla 18. Responsabilidad respecto a la cobertura de la seguridad social La falta de cobertura de la seguridad social constituye también un problema que surge con frecuencia en el curso de los acuerdos para el trabajo en régimen de subcontratación Contribuyen a ello varias razones Una de ellas es la ya mencionada incertidumbre de la situación de empleo de los trabajadores implicados En muchos países, los derechos a las prestaciones de la seguridad social están condicionadas a un empleo, puesto que las contribuciones las pagan los empleadores o los asalariados, de modo que dependen de la existencia de una relación de empleo Otra razón es que algunos subcontratistas no cumplen sus obligaciones respecto a los seguros sociales de sus empleados, ya sea por arbitrariedad, por negligencia o por insolvencia, de modo que si la responsabilidad de la cober.tura de la seguridad social recae en ellos, los trabajadores quedan al descubierto La asimilación de determinados subcontratados a empleados de las empresas usuarias o de los subcontratistas (cuando esto ocurre) resuelve este problema, por lo menos a nivel jurídico Finalmente, algunos individuos y grupos subcontratistas, es decir, los «empleados por cuenta propia» y las «cuadrillas », no pueden o no quieren a veces hacer sus contribuciones, de modo que se encuentran fuera de la cobertura de la seguridad social Se han tomado diversas medidas en la legislación de diversos países para hacer frente a este problema En algunos países, la cobertura total o parcial de la seguridad social ha sido ya concedida a determinadas categorías de trabajadores subcontratados, como las personas «que trabajan por cuenta propia» o los trabajadores doméstico^'^ En otros países, la legislación laboral indica claramente a los responsables del pago de las contribuciones de la seguridad social para proteger a los trabajadores subcontratados. Por ejemplo, la legislación de muchos países, cuando se refiere a las actividades de las agencias de trabajo temporal, define a estas agencias como empleadoras de los trabajadores que les han suministrado y, por lo tanto, exige que sean ellas las que paguen estas contribuciones (como ocurre, por ejemplo, en el artículo 12 de la ley 14J1994, de 1P de junio, por la que se regulan las empresas de trabajo temporal en España) La mencionada ley italiana de arrendamiento de obra, de 23 de octubre de 1960, dispone la responsabilidad solidaria de la empresa usuaria y del subcontratista en el Reglamentación especljrlca del trabajo en régzmen de subcontrataczón 59 cumplimiento de todas las obligaciones derivadas de la ley de prohibición y existencia (artículo 3) A veces, la legislación de seguridad social contiene disposiciones especiales sobre los trabajadores subcontratados; por ejemplo, la ley de seguridad social de 1990 (artículo 52) y la ley de compensación de los trabajadores de 1994 (artículos 10 y 11) de Tailandia definen las responsabilidades respectivas de las empresas usuarias y de los subcontratistas respecto a las contribuciones que hay que pagar a la seguridad social para poder brindar a los trabajadores implicados la necesaria cobertura de la seguridad social En algunos paises, la cobertura jurídica de la seguridad social ha sido ampliada a los trabajadores subcontratados, reconociéndolos como «empleados D En Australia, por ejemplo, el texto que reglamenta el plan de pensiones de jubilación obliga a todos los empleadores a pagar las contribuciones de todos sus empleados La ley de administración de la garantía de pensiones (<<Superannuation Guarantee (Administration) Act») de 1992 dispone que la expresión «empleado» comprenda también a las personas que trabajen en virtud de un contrato que se refiera en todo o en parte al trabajo de la persona (artículo 12, 3)) División de responsabzlzdades Las responsabilidades pueden también dividirse o « r e p a r t i r ~ e »entre ~ ~ las empresas usuarias y los subcontratistas, según el grado de control que cada uno de ellos ejerce sobre los trabajadores implicados ;en este caso cada una de las partes tiene sus propias obligaciones en relación con un campo concreto de relaciones laborales (salarios, salud y seguridad, seguridad en el empleo, etc ) En el caso de la subcontratación de trabajo a través de agencias de trabajo temporal, por ejemplo, la legislación de algunos países dispone que los trabajadores implicados se consideren como empleados de estas agencias y que todas las obligaciones del empleador y las responsabilidades estipuladas en la legislación laboral y de seguridad social sigan estando en vigor para ello Las empresas usuarias se consideran responsables de la aplicación de las disposiciones de la legislación laboral respecto a las horas de trabajo y de descanso, al trabajo de las mujeres y de los jóvenes, al trabajo nocturno y a la reglamentación de seguridad y salud en relación con la mano de obra suministrada por las agencias de trabajo temporal El artículo 28 de la ley de 1994 reglamentaria del trabajo temporal y del préstamo temporal de mano de obra de Luxemburgo estipula, por ejemplo, que las empresas usuarias son responsables exclusivas de la seguridad, higiene y condiciones de salud en el trabajo, así como de la aplicación a los trabajadores prestados de todas las disposiciones legales, reglamentarias, administrativas y de los convenios colectivos, y el empleador es el único responsable de la remuneración del trabajador prestado como mano de obra y de las cargas sociales y fiscales correspondientes Responsabzlidad vicaria En algunos países, la legislación laboral prevé la existencia de una responsabilidad vicaria (responsabilidad jurídica indirecta que contrae una persona como resultado de la acción de otra; por ejemplo, la «responsabilidad de un empleador por las acciones de un empleado o la de un poderdante por los daños causados a las obligaciones contraídas por su apoderado», «responsabilidad por los derechos de 60 7rabajo en régimen de subcontrataczón otro») de la empresa usuaria respecto a las obligaciones de su contratista hacia los trabajadores implicados, en caso de insolvencia del subcontratista Por ejemplo, el Código del Trabajo del Brasil estipula que el subcontratista se considerará como responsable primario de las obligaciones derivadas del contrato de empleo, mientras que los empleadores tienen derecho a actuar contra la empresa usuaria si ésta no cumple con dichas obligaciones Al mismo tiempo, las empresas usuarias tienen derecho a actuar en virtud de las disposiciones del derecho civil contra el subcontratista para recuperar las cantidades pagadas, y tienen también el derecho de retener las cantidades debidas a los subcontratistas como garantía del cumplimiento por parte de este último de sus obligaciones hacia los trabajadores reclutados (artículo 455) Otros textos legislativos introducen una distinción en esta clase de responsabilidad, según el lugar en que se lleva a cabo el trabajo subcontratado Por ejemplo, en Francia la responsabilidad de las empresas usuarias es distinta según el lugar en que los trabajadores subcontratados lleven a cabo el trabajo acordado entre la empresa y el subcontratista El Código del Trabajo dispone que : i) si los trabajos fueren ejecutados o los servicios fueren suministrados en el establecimiento o en las dependencias de la empresa, en caso de insolvencia del contratista, la empresa asumirá el lugar de éste, por lo que respecta a los trabajadores que emplee, a efectos del pago de los salarios y de las vacaciones pagadas y a efectos de las obligaciones que dimanan de la legislación sobre seguros sociales, sobre accidentes del trabajo y enfermedades profesionales, y sobre prestaciones familiares ;ii) tratándose de trabajos ejecutados en establecimientos distintos de los del jefe de empresa o de trabajos ejecutados por asalariados que trabajen a domicilio, el jefe de empresa se sustituirá, en caso de insolvencia del contratista, en lugar de éste a efectos del pago de los salarios y vacaciones pagadas y a efectos del pago de las cuotas contributivas de las prestaciones familiares y de la doble cotización de los seguros sociales (artículo L 125-2) El Código del Trabajo del Senegal, en su tenor enmendado en 1987, dispone que cuando el trabajo se lleve a cabo en las instalaciones de la empresa usuaria, la empresa usuaria será sustituida por el subcontratista en las obligaciones del subcontratista hacia los trabajadores, en caso de insolvencia de este último Pero cuando el trabajo se ejecuta fuera de las instalaciones de la empresa usuaria, dicha empresa es responsable sólo del pago de los salarios, vacaciones pagadas y obligaciones de la seguridad social en caso de insolvencia del subcontratista (ar.tículo 76) Normas europeas La Unión Europea (UE) no ha establecido ningún instrumento jurídico general que regule los acuerdos relativos al trabajo en régimen de subcontratación, pero ha preparado directivas para la protección de los trabajadores reclutados en diversos modelos de empleo fuera de la norma («atípico» o precario), comprendido el trabajo temporal, que pueden tener algunos efectos marginales sobre los acuerdos de contrato de trabajo Las labores para la elaboración de una legislación sobre el trabajo temporal y las ATT terminaron en 1984, cuando la Comunidad dejó de adoptar directivas sobre estas cuestiones Desde entonces, la Unión ha llevado a cabo otros cuatro intentos para Reglamentación especljcica del trabajo en régimen de subcontratación 61 elaborar normas sobre esta cuestión Así, en virtud del Programa de Acción de la Carta Social se publicaron en 1990 tres proyectos de directiva con vistas a tratar varios aspectos del empleo atípico La primera garantiza a los trabajadores temporales, comprendidos los empleados por las propias ATT, una protección de seguridad y salud equivalente a la que se brinda a los empleados de plantilla de las empresas usuarias, y fue adoptada por el Consejo en junio de 1991 con el título de directiva 91/383/CEE, que entró en vigor en diciembre de 1992 El segundo proyecto da igual acceso al personal a tiempo parcial y al personal temporero, si está empleado por lo menos ocho horas por semana, a la formación profesional y a los servicios sociales de la empresa, garantizándole además un trato igual respecto a las prestaciones de asistencia social y a los planes de seguridad social no contribuyente, así como una consideración prioritaria para las vacantes que puedan producirse entre el personal a tiempo completo Conforme al tercer proyecto de directiva, que se presenta como una medida de mercado único para evitar la distorsión de la competitividad entre los Estados a causa de sus diferencias nacionales en materia de costos de protección social, deberían aplicarse unas normas mínimas al empleo de trabajadores atípicos que trabajen por lo menos ocho horas por semana En vista de que estos dos últimos proyectos no progresan, la presidencia belga de la Unión Europea emitió en 1993 un texto único refundido sobre los contratos de empleo fuera de la norma, en el que se incorporan muchos elementos de estos proyectos iniciales Sin embargo, es muy significativo que este esfuerzo no recibiese tampoco más apoyo que sus predecesores. En julio de 1994, la presidencia alemana revisó todos estos proyectos, presentándolos en forma de una medida para favorecer la generación de empleo Este nuevo texto se dirige a establecer un trato igual en las condiciones de trabajo entre los empleados a tiempo parcial y los empleados a tiempo completo, así como entre el personal temporero y permanente, excepto cuando las diferencias de trato estén objetivamente justificadas No se establecen criterios sobre las horas semanales en el ámbito de aplicación de este proyecto de directiva. Las cuestiones relativas a la seguridad social se eliminaron de este texto Las agencias de trabajo temporal y los acuerdos de subcontratación quedaron también excluidos de su ámbito de aplicación Este proyecto de directiva se presentó en diciembre de 1994 al Consejo de Asuntos Sociales, donde no recibió el apoyo unánime que se requiere a causa de la oposición del Reino Unido Esta cuestión sigue ahora adelante a través del Acuerdo sobre Política Social (más conocido como «Carta Social D), que desde 1995 reúne a catorce Estados de la Unión Europea; de este grupo no forma parte el Reino Unido, pero en cambio cuenta entre sus miembros a Austria, Finlandia y Suecia2' El cuarto proyecto de directiva que empezó a elaborarse en 1991 se refiere a los puestos de trabajo temporero de los trabajadores dentro de la Comunidad Europea Se dirige a armonizar las contradicciones de la normativa jurídica que se usa para determinar qué régimen de derecho laboral nacional se aplica a los trabajadores que ocupan un puesto de trabajo temporal en otro Estado de la Comunidad Europea. La propuesta abarca a todas las empresas que ejercen sus actividades en el marco de la provisión de servicios, sin tener en cuenta dónde se han establecido Sus obligaciones se aplican en tres circunstancias específicas : i) cuando el subcontratista que lleva a cabo un contrato para ejecución de servicios coloca a un trabajador temporalmente en 62 Trabajo en régimen de subcontratación otro Estado miembro ;ii) cuando una agencia de trabajo temporal sitúa a un trabajador en otro Estado miembro para llevar a cabo un trabajo temporal en una empresa usuaria; iii) cuando una empresa sitúa a un trabajador temporero en uno de sus establecimientos o en otra empresa en otro Estado En 1994, el Consejo de Asuntos Sociales no aprobó una «posición común» sobre el texto revisado, y la oposición provino principalmente de Grecia, Portugal y el Reino Unido Francia aprobó su propio texto legislativo sobre este tema en 199323Bélgica, Dinamarca y los Países Bajos ya han puesto en marcha unos acuerdos bastante parecidos Por lo tanto, un creciente número de países del norte de Europa - y precisamente los que tienen unos costos laborales más altos -están tomando medidas dirigidas a asegurar que las empresas que se están estableciendo en estos países no puedan distorsionar la competitividad a causa de las diferencias en sus legislaciones nacionales respecto a los costos laborales. En la reunión que se celebró en marzo de 1995 del Consejo de Asuntos Sociales, la presidencia francesa sometió un nuevo texto de propuesta Este texto era más riguroso que los anteriores, en el sentido de que preveía la aplicación de retribuciones adaptadas al nivel del país huésped y unas condiciones generales que daban comienzo ya desde el primer día en que se ocupase el puesto de trabajo, en lugar del periodo de varios meses de espera que se usaba anteriormente No obstante, esto ha resultado ser un obstáculo al acuerdo entre los miembros del Consejo y, en consecuencia, se ha reconocido la necesidad de proceder a nuevas deliberaciones sobre esta cuestión24 El último proyecto de directiva está hasta cierto punto interrelacionado con la directiva que trata de la obligación de un empleador de informar a sus empleados de las condiciones aplicables al contrato o a la relación de empleo (directiva 91/533/CEE, que está en vigor en la Unión Europea desde junio de 1993). El proyecto dispone que los empleadores han de facilitar a sus empleados detalles escritos de los principales términos y condiciones de trabajo en el plazo de dos meses a partir del inicio de su empleo. También se dará información adicional a los empleados que sean enviados a trabajar, por un período de un mes o más, fuera del Estado miembro cuya legislación regule el contrato de empleo Esto incluye detalles (comprendidas referencias a las correspondientes leyes o acuerdos acerca de la extensión de este trabajo en el extranjero) de las condiciones que regulan la repatriaci6n del empleado, de la moneda que se usa para el pago del salario y de las prestaciones en metálico o en especie a las que se pueda acceder por medio de este empleo en el extranjero. Las consecuencias del creciente recurso a los diversos modelos de empleo atípico, comprendido el trabajo en régimen de subcontratación en la legislación de la Unión Europea, no se limitan al problema de legislar nuevas normas sobre esta cuestión, sino que han contribuido también a agudizar el problema de la ejecución de las normas ya existentes Buen ejemplo de ello son las diferencias de interpretación que han aparecido con motivo de la revisión de la directiva de 1967 sobre la aproximación de las leyes de los Estados miembros a la salvaguardia de los derechos de los empleadores en caso de transferencia de empresas, negocios o partes de un de negocio (directiva 771187lCEE). La directiva inicial se dirigía a la protección de los términos contractuales de los trabajadores empleados en los negocios que se transfieren a un nuevo propietario De conformidad con ella, cuando se produce dicha transferencia, todos los derechos del transferente y las obligaciones que se derivan de un contrato de empleo o de una relación de empleo ya existente en la fecha de la transferencia, se transfieren también al propietario que los recibe La revisión de la directiva, iniciada Reglamentación especljcica del trabajo en régimen de subcontratación 63 por la Comisión de la Unión Europea, se propone clarificar qué es lo que hay que entender por transferencia. Para ello, se ha propuesto incluir una nueva cláusula, que indique que si bien la transferencia de una entidad económica que retenga su identidad se considerará efectivamente una transferencia, la transferencia exclusiva de la actividad de la empresa no podrá recibir la misma consideración. Sin embargo, la distinción propuesta entre «entidad económica » y «actividad » ha resultado un tanto ambigua y ha generado interpretaciones contradictorias, especialmente sobre si el ámbito de aplicación de la directiva abarca los acuerdos de contratación externa o noz5.. Por ejemplo, la Unión de Confederaciones de Industria y de Empleadores de Europa (UNICE), en el documento en el que fija su posición, dirigido a la Comisión de Asuntos Sociales del Parlamento Europeo en diciembre de 1994, manifestaba su preocupación ante la posible aplicación de esta directiva a los acuerdos de subcontratación externa, en caso de adoptarse la mencionada enmiendaz6. Jurisprudencia de la Unión Europea El creciente recurso a los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación, las dificultades en la interpretación de las directivas ya existentes y los abundantes medios que todavía existen para eludir una norma sin contradecir formalmente su formulación escrita, especialmente respecto a esta cuestión, han tenido como consecuencia que el órgano judicial de la Unión Europea, es decir, el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (TJCE), haya tenido que entender cada vez más en cuestiones relacionadas con el trabajo en régimen de subcontratación Por ejemplo, una de las recientes decisiones del TJCE clarificaba el ámbito de aplicación de la mencionada directiva 771187/CEE sobre la transferencia de empresas, en relación con la salvaguardia de los derechos de los empleadores en caso de transferencia de una empresa. Confirmaba que, en principio, sus disposiciones se aplican cuando los servicios se subcontratan al exterior, a otra empresa, aun en el caso de que los servicios sean facilitados por un solo empleado antes de la transferencia, si el negocio retiene su identidad El caso, presentado ante el TJCE por un tribunal alemán, se refería a una caja de ahorros cuyas actividades de limpieza - llevadas a cabo por una sola operaria - fueron subcontratadas al exterior, dando así lugar al despido de la empleada. La empresa subcontratista se ofreció a emplear a la trabajador a, que r echazó la pr opuesta diciendo que si aceptaba sería pagada a un precio por hora más bajo que antes El TJCE fue requerido a decidir si la directiva se aplicaba en estas circunstancias y decidió que, si efectivamente se estaba llevando a cabo la misma actividad después de la transferencia, es decir, si el negocio en cuestión retenía su identidad, se había de aplicar la directiva, por más que los hechos afectasen sólo a una empleada (caso núm. C-392192 Christel Schmidt v Spar-und Leihkasse der r Kiel und Cron~hagen)~~. früeren ~ m t e Bordesholm, Esta sentencia ha fomentado la evolución de la jurisprudencia nacional de los Estados miembros de la Unión Europea sobre esta cuestión Por ejemplo, en el Reino Unido la ejecución de las normas de transferencia de empresas para proteger el empleo («Transfer of Undertakings (Protection of Employment) Regulations ») de 1981, que se había promulgado para dar efecto nacional a la directiva 771187/CEE, tiene dificultades para definir su ámbito de aplicación en relación con el problema de si estas normas han de aplicarse a los acuerdos de subcontratación externa o de subcontratación interna, o si no ha lugar a ello La judicatura ha puesto a punto una 64 Trabajo en régzmen de subcontratación prueba especial (la prueba de «mantenimiento de identidad ») para examinar si estos acuerdos dan lugar a una transferencia y pueden ser abarcados por las normas28.Se ha insistido mucho en que la identificación de una «entidad económica» debería basarse en la evaluación de todos los hechos que están en relación con la identidad de esta empresa y en la correspondiente transacción, evaluando su efecto acumulativo y examinando la sustancia y no la forma de la actividad El problema fundamental que hay que resolver en estos casos es si, con una visión realista de las actividades en las que los asalariados están empleados, existe una «entidad económica » que, a pesar de los cambios, permanezca identificable, aunque no necesariamente idéntica, después de la pretendida transferencia Si a pesar de los cambios que se derivan de la pretendida transferencia, el trabajo sigue estando presente, aunque se ejecute para un empleador distinto, los tribunales del Reino Unido le aplican las normas Znteracciones entre los interlocutores sociales En los países que cuentan con unos sistemas bien establecidos de acuerdos a nivel nacional y de ramo industrial, o de consulta y negociación bipartita o tripartita a nivel nacional, el trabajo en régimen de subcontratación se ha convertido en una cuestión del mayor interés para los interlocutores sociales y para los propios gobiernos Por ejemplo, en Suecia se concluyó (ya en 1964) un acuerdo tripartito entre el Consejo Nacional del Mercado de Trabajo -que era el organismo responsable de la ejecución de la política de empleo del Gobierno - y las organizaciones nacionales de empleadores y de trabajadores que actuaban en la industria de la ingeniería naval Este acuerdo recomendaba la observancia de determinadas normas que se refieren a las actividades de las empresas exteriores en las dársenas, por ejemplo en el sentido de que los subcontratistas tuviesen talleres propios y dispusiesen de sus propios capataces. Para poner en ejecución este acuerdo, los sindicatos de este ramo industrial celebraron acuerdos con determinados intermediarios para asegurar a los trabajadores de estos últimos las mismas condiciones de trabajo que tienen los empleados de plantilla de las dársenas portuaria^^^. En Bélgica, el Consejo Nacional del Trabajo, que es el-órgano encargado de la consulta bipartita y de la negociación interprofesional, reconoció en su dictamen núm 450 que, en caso de subcontratación de mano de obra por parte de un subcontratista que emprenda un trabajo para una empresa usuaria, los trabajadores siguen siendo asalariados por cuenta del subcontratista El Consejo puso también de relieve que la subcontr atación de obras y ser vicios no requiere ninguna reglamentación par ticular en relación con el derecho 1aboral3O También en Bélgica, de conformidad con la mencionada ley de 24 de julio de 1987, se estableció un comité mixto para tratar de la colocación de trabajadores a disposición de los empleadores por medio de agencias de trabajo temporal (Commission paritaire pour le travail intérimaire) La parte empresarial de esta Comisión está formada por representantes de las organizaciones de las agencias de trabajo temporal, y también por representantes de las organizaciones de empresas usuarias (artículo 27) Este comité mixto se estableció para constituir un fondo de garantía de los ingresos (Fonds de sécurité d'existence) dirigido a apoyar a los Reglamentaczón especzjrlca del trabajo en régimen de subcontratación 6.5 trabajadores cuando las agencias que los suministran no les pagan los salarios o las prestaciones que les adeudan, según la ley, los contratos de empleo o los convenios colectivos (artículo 29). En Filipinas, el Consejo Tripartito de Cuestiones Laborales, establecido en 1990, está presidido por el Ministro de Trabajo y se compone de doce representantes, todos procedentes de los mandantes tripartitos; este Consejo ha discutido hace poco la cuestión del trabajo en régimen de subcontratación con vistas a obtener unas normas de ejecución más claras y definidas en relación con las principales disposiciones del Código del Trabajo.. Negoczación colectiva La negociación colectiva ofrece un medio flexible para regular determinados aspectos del contrato laboral que interesan a los trabajadores sindicados Pero este mecanismo queda en la práctica limitado a las industrias que presentan un índice de sindicación elevado; en las empresas en que este índice es más bajo, disminuye también la incidencia de la negociación colectiva en las prácticas reales del trabajo en régimen de subcontratación. La eficacia de la reglamentación del trabajo en régimen de subcontratación por medio de la negociación colectiva sigue siendo desigual..Los convenios colectivos parecen haber sido muy útiles para aumentar el control de los abusos en determinadas zonas, sobre todo en las grandes empresas, que suelen ser los actores principales de los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación Pero hay que decir que la regulación del contrato de trabajo por medio de la negociación colectiva, aunque constituya un instrumento de la mayor importancia y pueda ser un complemento muy útil, no puede sin embargo reemplazar el control legislativo En algunos países, la negociación colectiva ha tratado ya de regular los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación En el Canadá, por ejemplo, un 67,4 por ciento de los convenios colectivos, que afectaban a quinientos o más empleados, contenían, en 1989, disposiciones que regulaban los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación (con un incremento de un 56,3 por ciento en 1980)31 La escasez de limitaciones colectivamente negociadas en los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación, que se sigue observando en la actualidad en otros muchos países, se atribuye más que nada a la resistencia de los empleadores, que no desean abandonar una práctica que les permite importantes ahorros en los costos, cosa especialmente interesante en unos tiempos de constantes dificultades económicas Otra razón puede que esté en relación con las disposiciones llamadas «compromiso de paz » que estipula la legislación sobre la negociación colectiva de varios países, según las cuales se prohíben las huelgas durante todo el tiempo en que esté en vigor el convenio colectivo, así como durante los procedimientos de solución del conflicto, como el acto de conciliación que sigue a la conclusión de un convenio colectivo Por lo tanto, la dirección de las empresas tiene las manos libres para iniciar acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación durante el período de vigencia del acuerdo sin peligro de conflicto laboral, mientras que el sindicato tiene que esperar hasta la siguiente ronda de negociaciones, que puede celebrarse varios años más tarde, cuando el problema puede haberse convertido ya en una cuestión de hecho Algunos observadores han propuesto incluir en la legislación relativa a la negociación colectiva unas disposiciones que permitan al sindicato replantear los convenios colectivos, llegando hasta la huelga si es necesario, para hacer que los empleadores accedan a 66 Trabajo en régimen de subcontratac ión negociar sus intenciones de iniciar, tan pronto como puedan, unos acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación Sobre ello hay frecuentes referencias en la legislación de algunos países, en los que los sindicatos pueden replantear los convenios colectivos y negociar acerca de cambios tecnológicos definidos Como medio para regular el mercado de trabajo, las prácticas de la negociación colectiva han evolucionado en dos direcciones fundamentales En primer lugar, se pueden aducir ejemplos de cómo los sindicatos obtienen por negociación la introducción en los convenios colectivos de determinadas cláusulas que les permiten ejercer un cierto control sobre los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación que celebran los empleadores, facilitando además a los trabajadores subcontratados las mismas condiciones de empleo y de prestaciones legales y contractuales que las que disfrutan los trabajadores que han sido directamente empleados Los convenios colectivos sobre esta cuestión suelen indicar la influencia, directa o indirecta, que ejercen los sindicatos sobre los acuerdos de subcontratación. Si la influencia es indirecta (que es lo más frecuente), el empleador facilita a los sindicatos informaciones acerca de los acuerdos de subcontratación. Por ejemplo, en Italia, a mediados del decenio de 1970, la mayoría de los convenios nacionales de industria empezaban introduciendo diversas cláusulas sobre el deber de los empleadores de informar a los sindicatos (tanto en el plano territorial como en el de la propia empresa) sobre determinados aspectos de sus estrategias y de sus prácticas, comprendidos los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación. A veces, estas cláusulas llegaban a ser muy específicas y disponían que la cuestión se examinase conjuntamente (por ejemplo, en las industrias textiles, del calzado y de la c o n s t r ~ c c i ó n ) ~ ~ Por lo que se refiere a la influencia «directa» de los sindicatos sobre las actividades de subcontratación de los empleadores, hay que advertir que las disposiciones de algunos convenios colectivos condicionan la subcontratación interna de mano de obra exterior a la empresa, o la subcontratación externa de una parte del trabajo a realizar, a la exigencia de que el empleador proceda a una notificación previa o a una consulta con el sindicato Un buen ejemplo de ese tipo de prácticas es el convenio colectivo que se llevó a cabo en marzo de 1995, tras una interrupción del trabajo, entre la MacMillan Bloedel Ltd Mil1 (Alberni Specialities Division) de Port Alberni y las secciones sindicales locales 592 y 686 del ramo de comunicaciones, energía y trabajadores del papel del Congreso del Trabajo del Canadá, que dispone la constitución de un comité mixto para examinar todas las peticiones de subcontratación exterior que ha hecho el empleador Este comité se reunirá una vez por trimestre para hacer recomendaciones respecto a la utilización de la mano de obra para el mantenimiento de la fábrica, dirigidas a reducir al mínimo la utilización de subcontratistas, tanto dentro como fuera de la fábrica El acuerdo estipula que el empleador puede subcontratar trabajo al exterior a empresas que tengan sindicato de empresa o a subcontratistas que empleen trabajadores que no sean miembros de un sindicato «legítimo », si cumplen (como mínimo) las condiciones siguientes : i) que los índices salariales de los trabajadores subcontratados no sean inferiores a los de los empleados de plantilla de la fábrica ;ii) que los subcontratistas respeten las normas del sindicato y las normas de seguridad de la empresa; iii) que el empleador pague al sindicato una cantidad equivalente al 1 por ciento del total de los salarios (sin contar las horas extraordinarias) devengados a los empleados del subcontratista, en sustitución de la correspondiente cuota social ; iv) que el empleador pague también unas contribuciones de pensión equivalentes a la contribución habitual de los Reglamentación especljClca del trabajo en régimen de subcontrataczón 6'7 empleadores por todas las horas que trabajen los empleados de cualquier subcontratista que lleve a cabo un trabajo en la fábrica3?. Las disposiciones de sindicación obligatoria que se contienen en la legislación o en los convenios colectivos de algunos países pueden desempeñar también un papel restrictivo en la utilización de trabajo en régimen de subcontratación Por ejemplo, en México la ley federal del trabajo de 1969 dispone que un convenio colectivo puede estipular que el empleador sólo dé empleo a personas que sean miembros del sindicato que es parte en el convenio (artículo 395) Como resultado de ello, en este país han empezado a desarrollarse unas prácticas conforme a las cuales las agencias subcontratadoras facilitan toda la mano de obra en función de sus propios acuerdos con los sindicatos para evitar los conflictos colectivos en la empresa usuaria, puesto que el convenio colectivo se celebra con la agencia que suministra la mano de obra Sin embargo, la característica más importante de la intervención directa de los sindicatos en las prácticas de subcontratación a través de la negociación colectiva se produce cuando los convenios colectivos prevén determinadas limitaciones a estas prácticas, limitaciones que van desde diversas prohibiciones - comprendida la simple prohibición de todos los acuerdos de subcontratación durante el tiempo de vigencia de un convenio o la prohibición de la subcontratación interna de mano de obra exterior a la empresa, si ello tiene como consecuencia el despido de trabajadores de plantilla de la empresa usuaria -hasta determinadas restricciones en la utilización del trabajo en régimen de subcontratación, ya sea limitando la subcontratación externa a los ámbitos que se sitúan fuera de las actividades esenciales («nucleares») de la empresa o simplemente imponiendo unos límites cuantitativos En Australia, por ejemplo, el laudo federal que afecta a las industrias del vestido («Federal Clothing Trades A w a r d ~ )de 1982 estipula que el empleador tiene que obtener el consentimiento del sindicato para emplear a más de diez trabajadores externos Estas restricciones se formulan con frecuencia en los convenios colectivos, ya sea determinando cuáles son las actividades esenciales («nucleares») que la empresa no debe dar al exterior o especificando las obras de servicios que pueden ser subcontratadas al exterior, por ser consideradas ocasionales o «periféricas D, o ambas cosas Este tipo de disposiciones puede encontrarse también en algunos convenios colectivos firmados en Italia a partir del decenio de 1950 en las industrias químicas, mecánicas, de impresión y papel, telefónicas y eléctricas Un acuerdo concluido en 1969 entre la compañía mexicana de petróleo y los trabajadores del petróleo afiliados al sindicato STPRM reiteró las disposiciones del Código del Trabajo al efecto de que todo trabajo que pertenezca a las actividades esenciales de la industria debe ser llevado a cabo por trabajadores permanentes y que los trabajadores subcontratados han de ser utilizados sólo en trabajos de duración determinada o para reemplazar temporalmente a los trabajadores permanentes que estén enfermos o ausentes En Venezuela, en virtud de un acuerdo entre la Creole Company y los sindicatos que tenían la representación de sus trabajadores, esta compañía petrolera decidió, entre otras cosas, ser en todos los casos un «garante conjunto y pagador principal» respecto de cualesquiera obligaciones jurídicas o contractuales hacia los trabajadores subcontratados a lo largo de la duración del trabajo subcontratado Este acuerdo prevé también que los trabajadores empleados por los subcontratistas tengan derecho a las mismas condiciones que los directamente empleados por la empresa en la zona en que se lleva a cabo el trabajo Los subcontratistas que aceptaban trabajo para la empresa fueron 68 Trabajo en régimen de subcontratación advertidos de que debían dar preferencia a los solicitantes de empleo cuyos nombres constaban en unas listas que presentaba el sindicato local El acuerdo garantizaba también a los trabajadores subcontratados el derecho a ser representados por sindicatos, especificando que cada una de las empresas subcontratistas debería aceptar cierto número de delegados sindicales por proyecto según la cifra de trabajadores sindicados Se tomaron también disposiciones para comprobar el pago de las cuotas sindicales por parte del subcontratista, a reserva del consentimiento de los trabajador es 34 En los Estados Unidos, el Consejo Nacional de Relaciones Laborales y los tribunales han desarrollado una norma según la cual un empleador, es decir, una empresa usuaria, puede negociar la decisión de subcontratar trabajo cuando los empleados de plantilla de la unidad negociadora sean reemplazados por empleados de un subcontratista y el trabajo de la unidad negociadora siga haciéndose en unas condiciones similares de empleo Sin embargo, cuando esta decisión suponga una inversión importante de capital, un cambio en la naturaleza de las actividades de la empresa usuaria u otros factores, tengan o no relación con los costos laborales, no hay obligación de negociar la decisión de subcontratar, por más que la empresa usuaria tenga que negociar con el sindicato sobre la incidencia de esta decisión en sus empleados permanentes. Esta clase de «negociación sobre la incidencia » comprende cuestiones del tipo de los derechos de transferencia, indemnizaciones por despido, continuidad de las prestaciones a las que tiene derecho un asalariado y estatuto de prioridad para la contratación futura35 Algunas veces, los convenios colectivos limitan la elección de los subcontratistas a los que el empleador puede encargar una subcontratación externa de trabajo a los miembros de la asociación de empleadores que firma los convenios Por ejemplo, el convenio entre la Electrical Contractors' Association of Ontario (Canadá) y la International Br otherhood of Electrical Worker S (AFL-CIOICFL), con efectos de 1P de mayo de 1995, estipula que la subcontratación de trabajo a otro subcontratista que haya firmado el convenio será también reconocida y que el subcontratista no puede contratar, directa o indirectamente, ni subcontratar ningún tipo de trabajo a una parte no firmante del acuerdo3(j El acuerdo entre las organizaciones italianas de empleadores del ramo del metal Federmeccanica y Assistal con los sindicatos Fiom, Fim y Uilm, que se celebró en 1994, puso ciertos límites a la utilización de trabajadores temporeros, límites que afectan incluso a los que han sido reclutados a través de agencias de trabajo temporal, por el procedimiento de terminar las situaciones en las que la subcontratación temporal es permisible: por ejemplo, para acumulaciones temporales de trabajo, lanzamiento de nuevos productos o sustituciones de empleados ausentes La cifra de trabajadores temporalmente subcontr atados no debe pasar de un 10 por ciento del total de la fuerza de trabajo a tiempo completo, o de un 8 por ciento, según el tamaño de la unidad de producción37 Una disposición similar puede encontrarse en el convenio colectivo de 1994 de la industria turística italiana En él se dispone que cuando un contrato a tiempo completo se convierte temporalmente en un contrato a tiempo parcial, las empresas pueden reclutar a un sustituto por medio de un contrato temporal a tiempo parcial38 Otras cláusulas que son ya corrientes en las prácticas de la negociación colectiva son las que permiten diversos acuerdos de subcontratación de mano de obra: i) a reserva de que los trabajadores en régimen de subcontratación interna reciban, por Reglamentación específica del trabajo en réglmen de subcontrataclón 69 parte del subcontratista, un tratamiento y unas condiciones de empleo no menos favorables que los que reciben los empleados de plantilla de la empresa en virtud de su convenio colectivo ;ii) en la medida en que los empleos de los empleados contratados antes de una fecha determinada queden protegidos ;iii) a reserva de que el empleador encuentre, o lleve a cabo esfuerzos razonables para encontrar, unos empleos alternativos para los trabajadores afectados.. A veces, los sindicatos de las empresas usuarias consiguen unas «cláusulas de subcontratación » que no sólo amplían los términos de sus convenios colectivos a los trabajadores subcontratados, sino que también requieren a las empresas usuarias a utilizar sólo los servicios de los subcontratistas cuyos empleados sean miembros de un sindicato, que puede citarse o extenderse a cualquier tipo de organización sindical (esto ocurre, por ejemplo, en la industria de la construcción del Canadá)39. Algunos subcontratistas pagan a los sindicatos la llamada «gratificación por desplazamiento » (partiendo de la base de que los trabajadores que son miembros del sindicato quedan «desplazados » cuando se ponen en su lugar trabajadores de fuera). Estas gratificaciones se ingresan en la cuenta del sindicato, pero no suelen producir beneficios directos a sus miembros..Estos acuerdos se han observado en dos empresas mexicanas, la Comisión Federal de Electricidad y la companía Petróleos Mexicanos40, El análisis que hemos llevado a cabo ilustra los principales instrumentos de regulación de los que se dispone para hacer frente a los problemas que surgen de los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación La reglamentación de la subcontratación de mano de obra trata de limitar esta forma de trabajo en régimen de subcontratación a las situaciones en que resulte objetivamente necesaria y en las que sea beneficiosa tanto para los mercados de trabajo en general como para los intereses de los empleadores y de los trabajadores en particular. Por su parte, la reglamentación de la subcontratación de obras y servicios y la utilización de trabajadores por cuenta propia trata generalmente de limitar esta forma de subcontratación a los verdaderos acuerdos de contrato comercial y de eliminar los abusos que puedan derivarse de intentar disfrazar como una subcontratación de obras y servicios lo que en realidad es una contratación de mano de obra Las condiciones de empleo de los trabajadores subcontratados se regulan a través de dos fuentes distintas de normativa : i) las disposiciones de la legislación laboral y de seguridad social, así como las de los acuerdos colectivos aplicables a una relación de empleo «dentro de la norma » ;ii) las disposiciones específicamente establecidas para regular las condiciones de empleo de los trabajadores «fuera de la norma» o «atípicos», entre los que se cuentan los trabajadores subcontratados El objetivo es brindar a estos trabajadores, cuando sea necesario, una protección similar a la que se facilita a los trabajadores que disfrutan de un empleo «dentro de la norma» o establecer unas normas especiales que se apliquen a las esferas en que, a causa de las características específicas de los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación, las normas que regulan el empleo «dentro de la norma» no puedan aplicarse Las normas que regulan las relaciones de empleo «dentro de la norma » se extienden a los trabajadores contratados, ya sea poniendo en práctica el principio de igualdad de trato respecto a los empleados de plantilla de las empresas usuarias (asimilando así los trabajadores subcontratados a los empleados permanentes de las empresas usuarias) o 70 Trabajo en régimen de subcontratacu5n a través de la aplicación de estas normas a las relaciones de empleo entre los trabajadores subcontratados y sus subcontratistas. La protección de los trabajadores reclutados en régimen de subcontratación se lleva a cabo principalmente determinando con claridad las responsabilidades de los empleadores, tanto de las empresas usuarias como de las empresas de subcontratación, respecto al pago de salarios, a las condiciones de trabajo, a la salud y seguridad, a la cobertura de la seguridad social y a la prestación de servicios de salud. El control administrativo -el registro y concesión de autorizaciones a las empresas usuarias y a las empresas subcontratistas, la obligación de informar a las autoridades competentes acerca de los acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación, el anuncio público en los lugares de trabajo de las condiciones en que estos acuerdos se han llevado a cabo, etcétera - se usa ampliamente como medio de asegurar que la reglamentación existente respecto al trabajo en régimen de subcontratación es respetada, y de que los trabajadores subcontratados saben dónde han de ir a depositar sus quejas en caso de infracción de estas disposiciones reglamentarias. Notas Para más detalles, véase G Lyon-Caen y J Pélissier :Les grands arrets de drolt du travad, segunda edición (Editions Sirey, 1980), págs 246-250 C 1 Torres: Contract labour Law andpractice m the Phdipplner, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, marzo de 1995, págs 13-16 y 34-38 VBase The Indlan Labour Code, 1994 (Draft) (National Labour Law Association, Friedrich Ebert Stiftung, India, 1994), pág 38 Véase B Hepple: «Flexibility and Security of Employmentn, en R Blanpain y C Engels (directores de la publicación) : Comparative labour law and industrial relations in industriallzed market economles (Deventer-Boston, Kluwer Law and Taxation Publishers, 1993), págs 265-266 G England : Contract labour m Canada, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, 1995, págs 29-31 Para más detalles, véase «Deregulation Act affects employment law », en Industrial Relations Law Bulletin, núm 5 11, diciembre de 1994, pág 15 Estas disposiciones, que fueron objeto de una reacción conflictiva por parte de los interlocutores sociales, fueron finalmente abolidas en 1993 (véase el proyecto de ley 1993194:67 para las enmiendas a la ley de protección del empleo de 1982 y a la ley de codeterminación de 1976) Sin embargo, estas mismas disposiciones fueron reintroducidas en 1994 con ligeras modificaciones (véase el proyecto de ley 1994195:76 para el restablecimiento del derecho laboral) Para más detalles, véase «Non-standard forms of employment in Europe Part-time work, fixed-term contracts and temporary work contracts », en European Industrial Relations Review, informe núm 3,1990, págs 45-59 Para más detalles, véase « Contract worker protected by SDA », en IndustrialRelatlons Law Bulletln, núm 51 1, diciembre de 1994, págs 11 y 12 'O B Nyssen: Contract labour . Quandles apparences peuvent é'tre trompeuses, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, enero de 1995, pág 23 ' [ T Treu : Contract labour zn Italy, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, febrero de 1995, pág 24 l2 Para más detalles, véase OIT: Trabajo a domrcilzo, Informe V (l), Conferencia Internacional del Trabajo, 82 a reunión, 1995, págs 36-38 l 3 Véase European employment and zndustrial relatronr glossary Unrted Klngdom (Fundación europea para la mejora de las condiciones de vida, de trabajo, Oficina de Publicaciones Oficiales de las Comunidades Europeas, Sweet and Maxwell, 1991), pág 125 Reglamentación específica del trabajo e n régzmen de subcontratación '7 1 l4 OIT: Effects oj globalrzat~onon employment and working condrtlons in tke textrle, clotkmg and footwear industrles, de próxima publicación l5 A Goldin (en colaboración con F Alimenti) : Contract labour ln Argentina, informe presentado al proyecto de investigación de la OI'I sobre el trabajo en régimen de subcontratación, abril de 1995, págs 52 y 53 l6 G England, op clt , pág 12 l7 L de Plevitz: Contract labour rn Austraka, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, págs 40 y 41 l 8 J P Richez: «Le deuxikme cerclea, en Travarl et Sécurrté (Parls), págs 196-200 y 203 l9 Para más detalles, véase OIT : Promoción del empleo por cuenta propia, Informe VII, Conferencia Internacional del Trabajo, 77 a reunión, 1990, págs 78-86; Trabajo a domicilio, op cit , págs 41 y 42 20 Este tipo de responsabilidad se llama a veces «responsabilidad compartida» (véase, por ejemplo, James B Rebitzer : « Job safety and contract workers in the petrochemical industry S, en Industrial Relatlons A Journal oj Economy and Socrety, vol 34, núm 1, enero de 1995, pág 46 2' Véase IDS European Reports, núrn 395, noviembre de 1994, págs 9-13, núm 397, enero de 1995, P& 3 22 Para más detalles sobre este tema, véase: IDS Employment Report, febrero de 1993, núm 374 23 Véase IDS Employment Report, enero de 1995, núrn 397, págs 18 y 19 24 European Industrral Relatzonr Revlew, núm 255, abril de 1995, pág 2 ; núm 256, mayo de 1995, págs 2 Y 3 25 Para más detalles, véanse Indurtruzl Relatlons Europe, vol XXIII, núrn 276, marzo de 1995, pág 1, y Consejo Económico y Social de la Unión Europea: « Opinion on the proposal for a Council Directive on the approximation of the laws of the Member States relating to the safeguards of employees rights in he event of transfers of undertakings, businesses or parts of businesses~,en Oficial Journal of tke European Communities, C 133, vol 38, 31 de mayo de 1995, págs 13-22 26 Documento COM (94) 300 FINAL, pág 1 27 Para más detalles, vease «Casenotes», en Industrial Relations Law Bulletm, núrn 497, mayo de 1994, págs 11 y 12 28 Para más detalles, véanse John McMullen: «Contracting out and marketing testing - the uncertainty ends?», en Industrzal Law Journal, septiembre de 1994, vol 23, núm 3, págs 230-240, y «Contracting-out and contracting-in covered by TUPE», en Industrral Relatlons Law Bulletln, núrn 5 15, págs 8-13 (IRS Ernployment Revlew, febrero de 1995, núm 578) 29 Véase T Segeman: ((Contract labour in Sweden~,separata de los Annales Academme Reglue Scientiarum Upsaliensis (Estocolmo, Almqvist y Wiksell, 1970), págs 45-50 30 Para más detalles, véase B Nyssen, op clt , pág 19 3' G England, op cit , pág 32 32 T Treu, op crt , pág 26 " Para más detalles, véase Collectrve Bargainrng Revlew, publicado por la Oficina de Información Laboral del Canadá, abril de 1995, págs 47 y 48 34 OIT: Problemas soclales de los trabajadores contratados por empresarros y u.ibcontratlstas y de los trabajadores eventuales en la industria delpetróleo, Informe 11, Comisión del Petróleo, octavareunión, Ginebra, 1973 (Ginebra, 1972), págs 18, 29, 31 y 34 35 Véase E Silverstein: Contract labour in tke Unrted States, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, julio de 1995, págs 33-35 36 Véase Collectrve Bargaining Revlew, publicado por la Oficina de Información Laboral del Canadá, abril de 1995, págs 32 y 33 37 IDS European Report, diciembre de 1994, núrn 396, págs 20 y 21 3"bíd , febrero de 1995, núm 398, pág 21 39 G England, op cit , págs 33 y 34 *O N de Buen: Labour contractlngfirms, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en rkgimen de subcontratación, diciembre de 1994, pág 26 CAPITULO V RELACIONES COLECTIVAS DE TRABAJO La celebración cada vez más frecuente de acuerdos de trabajo en régimen de subcontratación supone, entre otras cosas, que un número en constante aumento de trabajadores podría quedar fuera del ámbito de los tipos habituales de relaciones laborales colectivas. La rápida expansión de las formas de utilización de la mano de obra «fuera de la norma», a consecuencia de los importantes cambios que se han producido en el entorno económico y social, supone de hecho un reto al ejercicio de los derechos sindicales, de negociación colectiva y de representación de estos trabajadores Todo ello ha provocado un cierto reajuste de las normas y prácticas sobre relaciones laborales colectivas para que los trabajadores interesados puedan disfrutar de estos derechos colectivos fundamentales. Este reajuste está actuando en dos direcciones, ambas de la mayor importancia Por una parte, se está tratando de ampliar la esfera de acción del marco institucional y de procedimiento tradicional para abarcar las modalidades de empleo « atípicas » que están surgiendo recientemente Por otra parte, en los casos en que estos instrumentos tradicionales resultan inadecuados, se están adoptando formas nuevas y más flexibles de organización y de representación Este proceso repercute tanto en la legislación como en la práctica Es preciso crear unas condiciones que favorezcan el ejercicio de los derechos colectivos de los trabajadores afectados por la situación económica y social actual, y para ello hay que tener debidamente en cuenta los intereses de los empleadores y de los trabajadores Dado que el trabajo en régimen de subcontratación implica con frecuencia una relación triangular en la que hay dos partes empleadoras, las relaciones laborales colectivas de los trabajadores subcontratados deberían considerarse desde dos puntos de vista fundamentales, a saber, la relación de estos trabajadores con los subcontratistas y su relación con las empresas usuarias. El carácter ambiguo de las relaciones existentes entre los trabajadores subcontratados y las empresas subcontratantes y usuarias induce a plantearse preguntas sobre sus derechos colectivos respecto a los asuntos siguientes: i) si estos trabajadores tienen derecho a establecer sindicatos ;ii) con qué empresa tienen derecho a negociar colectivamente; iii) si tienen derecho a estar representados por órganos representativos (como los consejos de empresa) que puedan establecerse en las empresas subcontratantes o usuarias, y iv) si pueden ejercer el derecho de huelga, y frente a qué empresa. La información sobre estos asuntos es todavía bastante escasa El análisis que se hace más abajo se basa sobre todo, pero no de manera exclusiva, en los informes por países elaborados recientemente para la OIT sobre este asunto Relaczones colectzvas de trabajo '7 3 El derecho de sindicación Según las normas de la OIT, todos los trabajadores, ya sean empleados o no, deberían tener derecho a constituir las organizaciones que estimen convenientes y a afiliarse a las mismas Esto se ha reconocido explícitamente para los trabajadores agrícolas en el Convenio sobre el derecho de asociación (agricultura), 1921 (núm 1l), y en el artículo 2 del Convenio sobre las organizaciones de trabajadores rurales, 1975 (núm. 141), que abarca también a los trabajadores artesanales de las zonas rurales, así como en el reciente Estudio general sobre la libertad sindical de la Comisión de Expertos en Aplicación de Convenios y Recomendaciones1, en relación con los trabajadores del sector no estructurado. En la legislación de varios países, la definición de «trabajador » a quien se concede el derecho de constituir sindicatos parece tener un significado amplio que no se limita a los trabajadores que disfrutan de una relación de empleo Así, la ley de sindicatos y relaciones de trabajo (codificación), de 1992, del Reino Unido, que establece una amplia serie de normas que incluyen las relaciones laborales colectivas en el Reino Unido, define a un «sindicato» como una organización compuesta «totalmente o principalmente de trabajadores cuyos principales objetivos incluyen la reglamentación de las relaciones » entre éstos y los empleadores (artículo 1, a)) El término «trabajador » significa aquí la persona empleada en virtud de un contrato de trabajo o de cualquier otro contrato, y que se compromete a «ejecutar o a desempeñar personalmente algún trabajo o servicio para otra parte en el contrato que no sea un cliente profesional suyo» (artículo 296) Por consiguiente, esta definición parece implicar la posibilidad de ampliar el campo de aplicación de dicha ley a los trabajadores subcontratados La ley prevé también de forma específica su aplicación a los acuerdos de subcontratación exterior En su artículo 288, relativo a la «restricción de la subcontratación exterior », estipula que «cualquier disposición de un acuerdo (ya se trate o no de un contrato de trabajo) es nula en la medida en que pretenda eludir o limitar la aplicación de cualquier disposición de esta ley N De acuerdo con la ley de sindicatos de 1949 del Japón, se concede el derecho de crear un sindicato a las personas reconocidas como «trabajadores », es decir, «aquellas personas que viven de sus sueldos, salarios u otro tipo de remuneración asimilable, cualquiera que sea su tipo de ocupación» (artículo 3)" Para elucidar el significado de esta disposición se han tomado en consideración varios criterios en las decisiones administrativas y judiciales Entre esos criterios figuran los siguientes : i) que dichas personas realicen un trabajo indispensable para la empresa y que constituyan un componente esencial de esta última; ii) que el contenido de sus contratos se decida de forma unilateral; iii) que se ejerza un control sobre esas personas respecto de cuestiones tales como la fecha, el tiempo, las horas y el lugar en que debe efectuarse el trabajo, y el método utilizado para ello, y iv) que no dispongan de libertad para aceptar o rechazar contratos relacionados con la actividad de su empleador que sean presentados a licitación por terceros Cuando responden a uno o varios de estos criterios, dichas personas son consideradas como «trabajadores» cualquiera que sea la naturaleza de su relación contractual, incluido el trabajo en régimen de subcontratación. En cuanto a los poderes de negociación colectiva de los trabajadores subcontratados proporcionados por las agencias de trabajo temporal (suministro de personal), la negociación colectiva tiene lugar normalmente entre estos trabajadores y la agencia de que se trate debido a que los salarios y otras condiciones 74 Trabajo en régimen de subcontratación de trabajo se estipulan, por lo general, en los contratos de trabajo celebrados entre estas dos partes2. Cuando los trabajadores de que se trata son subcontratistas que ejercen individualmente («por cuenta propia D), en algunos países se les autoriza a afiliarse a los sindicatos existentes o a crear sus propios sindicatos frente a las empresas usuarias.. En Australia (Nueva Gales del Sur), por ejemplo, la ley de relaciones de trabajo de 1991 establece que los grupos de conductores de vehículos de su propiedad o transportistas (que no superen las cincuenta personas) pueden inscribirse como asociaciones ante la Comisión Industrial.. Estos grupos pueden constituirse en sindicato. Las asociaciones de personas que celebran contratos con tales conductores o transportistas también pueden registrarse (artículos 666 y 674C, respe~tivamente)~, Ahora bien, los trabajadores «por cuenta propia» se muestran algunas veces especialmente reacios a afiliarse a sindicatos, con lo que se reduce la posibilidad de participación sindical. La sindicación de algunas otras categorías de trabajadores subcontratados, como los trabajadores a domicilio, puede resultar también difícil, por su alto grado de dispersión. El derecho de negociación colectiva Respecto del subcontratista Cuando la relación entre los trabajadores subcontratados y los subcontratistas es una relación de empleo, los trabajadores pueden gozar, en principio, de todo el conjunto de derechos previstos en la legislación sobre las relaciones de trabajo y la negociación colectiva, en particular los derechos fundamentales de los trabajadores, como el derecho de sindicación y el derecho de negociación colectiva. Así, en algunos países (por ejemplo, Alemania, Bélgica, Dinamarca, Finlandia y Países Bajos) los trabajadores suministrados por las agencias de trabajo temporal negocian convenios colectivos con estas agencias4. Evidentemente, este reconocimiento formal por la legislación de los derechos colectivos de los trabajadores subcontratados respecto de sus empleadores inmediatos no garantiza por sí mismo la materialización automática de esos derechos. Esto depende también de varias circunstancias concretas, como el tamaño de la empresa, la presencia sindical y el nivel de sindicación, y el sistema de negociación colectiva de cada país (a nivel sectorial o de empresa), independientemente de si el empleador inmediato es miembro de la asociación de empleadores y está obligado a respetar el convenio colectivo. Respecto de la empresa usuaria La legislación del trabajo no reconoce, en general, el derecho de los trabajadores subcontratados a negociar con las empresas usuarias, a menos que sean sus empleadores. Algunas veces, la legislación contiene disposiciones especiales que impiden que las empresas usuarias se vean obligadas en el curso de los acuerdos de subcontratación a reconocer el derecho de los trabajadores de los subcontratistas a negociar con ellas. En el Reino Unido, por ejemplo, la ley sobre empleo de 1982 prohíbe la inclusión en las licitaciones o contratos de condiciones que exijan la contratación de miembros de sindicatos, el reconocimiento de un sindicato o la negociación con el mismo (artículos 12 y 13).La ley sobre el gobierno local de 1988, Relaciones colectivas de trabajo '7S que prevé la celebración de contratos para el suministro de bienes o ser.vicios a cualquier autoridad pública, exige que esta autoridad excluya las cuestiones «no comerciales» de las licitaciones y de los contratos con los suministradores (artículo 17) En virtud de esta legislación, cualquier procedimiento utilizado por un cliente para exigir condiciones específicas a los subcontratistas respecto a las políticas de empleo, las relaciones laborales, la formación o los procedimientos en materia de salud y de seguridad es nulo La legislación de algunos otros países parece que concede derechos de negociación colectiva a determinadas categorías de trabajadores subcontratados que no son asalariados de las empresas usuarias Esto sucede, por ejemplo, en el caso de los trabajadores suministrados por las agencias de trabajo temporal Así, la ley de 1989 sobre los servicios de empleo de Suiza establece que los trabajadores puestos a disposición por estas agencias deben estar cubiertos por las disposiciones de los convenios colectivos en vigor en las empresas usuarias en lo que se refiere a los salarios y a las horas de trabajo (artículo 20) En el artículo 76 de la ley nacional de empleo de 1991 de la Argentina figura una disposición similar En Australia (Nueva Gales del Sur), el derecho legalmente reconocido, a que se ha hecho referencia más arriba, de los conductores de vehículos de su propiedad o de los transportistas a sindicarse ha resultado ser una condición previa importante para conseguir que tanto las empresas usuarias como los diferentes subcontratistas participen en la negociación colectiva. En la industria del transporte de Nueva Gales del Sur, el Sindicato de Trabajadores del Transporte toma parte en la negociación de convenios para los conductores de vehículos de su propiedad5 El reconocimiento del derecho de los trabajadores subcontratados a negociar con las empresas puede ser también el resultado de decisiones judiciales En el Japón, por ejemplo, los trabajadores suministrados por agencias de trabajo temporal suelen entablar negociaciones colectivas con estas agencias, que son consideradas por la legislación como sus empleadores y que, por consiguiente, son responsables de sus condiciones de trabajo. Ahora bien, en casos excepcionales, como sucede cuando la empresa usuaria ejerce un control considerable, es decir, un poder de decisión, sobre las condiciones laborales de los trabajadores suministrados, los órganos judiciales han reconocido el derecho de los trabajadores de que se trata a negociar con las empresas usuarias6 Sin embargo, en la práctica, los derechos colectivos de los trabajadores subcontratados pueden verse afectados por las condiciones de trabajo existentes en las empresas usuarias Por ejemplo, si en los países en que la negociación colectiva es de alcance sectorial el subcontratista y la empresa usuaria pertenecen al mismo sector industrial, las relaciones laborales colectivas de los asalariados ordinarios de la empresa usuaria y de los trabajadores del subcontratista pueden, de hecho, ser similares Ambos grupos de trabajadores pueden pertenecer al mismo sindicato y, al participar en la misma mesa de negociación de alcance sectorial, pueden declararse en huelga juntos por la misma causa En la Argentina, por ejemplo, los convenios colectivos concertados en las industrias del calzado y del vestido en 1989 y 1990, respectivamente, extendieron su cobertura a los trabajadores a domicilio respecto de las cuestiones siguientes : i) pagos por antigüedad; ii) licencia remunerada en concepto de día festivo en el sector industrial de que se trate ; iii) suministro de ropas de trabajo, y iv) prestaciones en caso de fallecimiento7 76 Trabajo en régimen de subcontratación Como ya se ha mencionado en el capítulo IV, la cobertura de los trabajadores subcontratados por los convenios colectivos en vigor en las empresas usuarias se debe con frecuencia al deseo de los sindicatos que representan a los empleados de plantilla de las empresas usuarias de evitar el deterioro que pudiera afectar a unas condiciones de empleo que hayan sido negociadas recur~iendoa trabajadores subcontratados no sindicados. Ejercicio de otros derechos colectivos En caso de que el subcontratista y la empresa usuaria pertenezcan a industrias diferentes o de que no haya negociación colectiva de alcance sectorial, la condición de los asalariados ordinarios de la empresa usuaria y la de los trabajadores del subcontratista, en lo que se refiere a las relaciones laborales colectivas, puede ser distinta, y pueden surgir controversias respecto del ejercicio de los derechos colectivos de los trabajadores subcontratados que están sujetos al control, la supervisión o las instrucciones de las empresas usuarias Un ejemplo de ello lo constituye el derecho de los trabajadores a celebrar sus reuniones de personal en los locales del empleador, como está previsto en la legislación de algunos países. Así, en Italia los trabajadores tienen derecho a un máximo de diez horas de trabajo al año para celebrar reuniones de personal en los locales del empleador (artículo 20 de la ley núm 300, de 20 de mayo de 1970, que contiene disposiciones sobre la protección de la libertad y la dignidad de los trabajadores, de la libertad sindical y de la libertad de acción en el lugar de trabajo, y en materia de colocación) Respecto al ejercicio de este derecho por los trabajadores subcontratados en los locales de las empresas usuarias, la jurisprudencia no parece haber llegado todavía a una solución universalmente aceptada Si bien algunos órganos judiciales consideran que estos trabajadores deberían disfrutar de este derecho, otros han adoptado la postura opuesta y afirman que este derecho no puede limitar el derecho de propiedad de una persona que no es reconocida como el empleador de esos trabajadores Al igual que sucede respecto de los derechos sindicales y de negociación colectiva de los trabajadores subcontratados, los derechos de representación de éstos, y concretamente el derecho de elegir órganos de representación del tipo de los consejos de empresa y de estar representados por ellos, pueden también ser considerados desde dos puntos de vista fundamentales: en relación con los subcontratistas que los emplean y en relación también con las empresas usuarias En los países en que se prevé la representación de los trabajadores a nivel de empresa por órganos tales como los consejos de empresa, éstos son en general elegidos por los empleados de la empresa y establecimiento de que se trate y tienen diversos derechos de consulta o de cogestión respecto de esos trabajadores Cuando los trabajadores subcontratados no son formalmente empleados de las empresas, se plantea la cuestión de si esos trabajadores pueden participar en la elección de dichos órganos y si éstos pueden representarlos En principio, parecería que sólo los empleados tienen derecho a votar en estas elecciones y a estar representados por los órganos interesados Si la legislación de un país determinado asimila los trabajadores subcontratados a tales empleados, es razonable suponer que disfrutan también de esos derechos. Así, los trabajadores Relaciones colectivas de trabajo 77 subcontratados que sean asalariados de un subcontratista tendrán derechos de representación en la empresa del subcontratista pero no en la empresa usuaria, a menos que sean asimilados a los asalariados de esta última empresa.. En algunos países, la legislación contiene disposiciones expllcitas a este respecto en lo que concierne a las relaciones triangulares. Por ejemplo, en Luxemburgo, el articulo 16 de la ley reglamentaria del trabajo temporal y del préstamo temporal de mano de obra, de 1994, establece que los trabajadores temporeros no tienen derecho a votar a los delegados de personal o a los representantes de los trabajadores, o a ser elegidos para esos cargos, en el comité mixto de empresa o en el consejo de administración de la empresa usuaria.. Ahora bien, dicha ley autoriza a tales trabajadores a presentar una queja y a consultar a los delegados de personal de la empresa usuaria. A C C I ~DIRECTA N La posible participación de los trabajadores subcontratados en acciones laborales directas puede ser considerada desde tres puntos de vista fundamentales : i) el derecho de los trabajadores subcontratados a emprender acciones directas ;ii) la medida en que un empleador puede recurrir a trabajadores subcontratados para atenuar las consecuencias de las acciones laborales directas emprendidas por sus empleados ordinarios, o en caso de cierre patronal, y iii) el derecho de los empleados de las empresas usuarias a emprender acciones laborales directas para que los trabajadores subcontratados sean desplazados de su lugar de trabajo.. El derecho de los trabajadores subcontratados a la acción directa contra los subcontratistas El ejercicio en la práctica del derecho de los trabajadores subcontratados a emprender acciones laborales directas contra los subcontratistas, cuando está legalmente reconocido, depende de varios factores, entre los que destacan el nivel de independencia económica de los subcontratistas respecto a las empresas usuarias y los poderes de negociación de los trabajadores de que se trate Cuanto mayor es la autonomía económica de las firmas subcontratantes en relación con las empresas usuarias más fuerte es la capacidad de organización de los trabajadores afectados La seguridad en el empleo en tales firmas depende menos del comportamiento económico de las empresas usuarias Cuando el temor de que se produzca una interrupción en las actividades del subcontratista (por ejemplo, a consecuencia de la imposibilidad de continuar la relación contractual con la empresa usuaria) no está inmediatamente presente, resulta más fácil establecer un clima sindical que favorezca la afiliación de los trabajadores Esto sucede especialmente en las industrias de alta tecnología en donde las consideraciones cualitativas en materia de producción desempeñan una función primordial y la relación entre las empresas usuarias y los subcontratistas es relativamente estable y se caracteriza por una dependencia mutua También debería prestarse atención al problema de si los trabajadores subcontratados pueden o no ejercer su derecho de emprender acciones laborales directas contra el subcontratista, es decir, contra su empleador inmediato, mientras se 78 Trabajo en régimen de subcontratación encuentran trabajando en los locales de las empresas usuarias. En teoría, en caso de que no exista ninguna disposición legislativa, contrato o convenio colectivo que establezca lo contrario, no hay ninguna razón que les impida formalmente ejercer ese derecho, pero se tienen pocos datos sobre la situación real.. Restricciones sobre el recurso al trabajo en régimen de subcontratación durante las huelgas y los cierres patronales legales Los empleadores pueden tratar de atenuar las consecuencias de una huelga legal recurriendo al trabajo en régimen de subcontratación para mantener en actividad las fábricas en que los trabajadores estén en huelga, o sometidos a un cierre patronal, y también asignando a los trabajadores subcontratados que ya estén en la fábrica las tareas que correspondan a los asalariados que estén en huelga o sometidos a un cierre patronal. La legislación de algunos países en materia de negociación colectiva impone ciertas restricciones respecto de tales prácticas Así, en algunas provincias del Canadá no se reconoce a los empleadores el derecho de contratar a trabajadores suplentes durante la huelga o el cierre patronal lícitos, salvo los que resulten necesarios para realizar las tareas «esenciales» Esta prohibición incluye a los subcontratistas que ejercen individualmente («autónomos») y a los asalariados de un subcontratista cuyos servicios hayan sido contratados Ahora bien, si la decisión de sustituir a los huelguistas o a los empleados afectados por el cierre patronal por trabajadores subcontratados se justificara por razones de eficacia en función de los costos, entonces no podría hablarse de ilegalidad, porque no se puede impedir a los empleadores que adopten decisiones comerciales, que por lo demás serían legítimas, sólo porque da la casualidad de que coinciden con una huelga o con un cierre patronal En este caso, los órganos de arbitraje sobre cuestiones laborales examinan cuidadosamente los motivos por los que el empleador contrata fuerza de trabajo del exterior con el fin de determinar si esa decisión fue tomada por razones de eficacia en función de los costos o por el deseo de penalizar a los asalariados que participaron en la huelga ;en este último caso, se trataría de una práctica laboral desleal, como se ha mencionado más arriba8 En los Estados Unidos, el decreto ejecutivo sobre el reemplazo definitivo de trabajadores en huelga, de fecha 8 de marzo de 1995, establece que los contratos del Gobierno federal no deberían adjudicarse a subcontratistas que reemplazan definitivamente a los trabajadores que están legalmente en huelga9 En las agencias de trabajo temporal de varios países nórdicos, como Dinamarca, Finlandia, Noruega y Suecia, también se ha aceptado ampliamente la práctica de no permitir que los trabajadores proporcionados por éstas desempeñen actividades en las empresas usuarias mientras están llevándose a cabo acciones laborales directas Este tipo de restricción figura, por ejemplo, en el código de conducta de la Asociación de Agencias de Trabajo Temporal de Dinamarcal0 Acción directa encaminada a limitar la utilización de mano de obra subcontratada El sindicato de la empresa usuaria, a condición de que declare una huelga legal, puede tratar de reducir el recurso al trabajo en régimen de subcontratación o reglamentar las condiciones en que podría recurrirse a esta práctica. Ahora bien, si el Relaciones colectivas de trabajo 79 sindicato logra persuadir al empleador de que ponga fin a los acuerdos sobre trabajo en régimen de subcontratación existentes en violación de los términos de estos últimos, el subcontratista puede en algunos países (por ejemplo, en el Canadá) demandar al sindicato por el agravio de alentar el incumplimiento de contrato. Si el sindicato emprende una huelga ilegal o participa en un piquete ilegal para convencer al empleador de que ponga fin a los acuerdos sobre trabajo en régimen de subcontratación y el empleador accede a ello, el subcontratista puede demandar al sindicato por el agravio de injerencia en las relaciones contractuales por medios ilícitosl'.. Notas OIT: Ltbertad slndml y negociación colectiva, Conferencia Internacional del Trabajo, 81 a reunión, Informe 111 (parte 4B), Ginebra, 1994, párrafo 59 Y Mizumachi: Regulations un contract labour m Iapan, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, marzo de 1995, págs 22 y 23 L de Plevitz: Contract labour m Australuz, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, marzo de 1995, pág 57 «Atypical working patterns across the ECD,en IDS European Report, núm 382, octubre de 1993, pág 20; R Eklund: Contract labour in Denmark, Fmland, Norway and Sweden, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, marzo de 1995, págs 40-43 L de Plevitz, op clt , pág 56 Y Mizumachi, op clt , págs 23 y 24 Véase A O Goldin: Contract labour m Argentina, documento presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, abnl de 1995, págs 61 y 62 G England: Contract labour in Canada, informe presentado al proyecto de investigación de la OIT sobre el trabajo en régimen de subcontratación, eneto de 1995, págs 36 y 37 OIT: «Estados Unidos: Reemplazo definitivo de trabajadores en huelgas, en Documentos de Derecho Social, 199512 (1995-USA 1), págs 69 y 70 lo R Eklund, op clt , pág 47 l ' G England, op clt, pág 36 CAPITULO VI ACCION INTERNACIONAL Son contados los instrumentos de la OIT que hacen referencia explícita al trabajo en régimen de subcontratación Por ejemplo, en el Convenio sobre pueblos indígenas y tribales, 1989 (núm 169), se pide que se adopten medidas especiales para garantizar que los trabajadores interesados, incluidos «los empleados por contratistas de mano de obra, gocen de la protección que confieren la legislación y la práctica nacionales a otros trabajadores de estas categorías en los mismos sectores, y sean plenamente informados de sus derechos con arreglo a la legislación laboral y de los recursos de que disponen >> (apartado a ) del párrafo 3 del artículo 20). El Convenio sobre las cláusulas de trabajo (contratos celebrados por las autoridades públicas), 1949 (núm 94), se aplica a los contratos que celebran las autoridades públicas para «las obras ejecutadas por subcontratistas o cesionarios de contratos 9 (párrafo 3 del artículo 1) La finalidad esencial que persigue este Convenio es proteger a los trabajadores interesados de las consecuencias negativas de la competencia entre empresas licitadoras por contratos públicos mediante la inclusión en esos contratos de las cláusulas idóneas En consecuencia, dispone que dichos contratos «deberán contener cláusulas que garanticen a los trabajadores interesados salarios (comprendidas las asignaciones), horas de trabajo y demás condiciones de empleo no menos favorables que las establecidas para un trabajo de igual naturaleza en la profesión o industria interesada de la misma región» (párrafo 1 del artículo 2) Otros instrumentos de la OIT están implícitamente relacionados con el trabajo en régimen de subcontratación, aun cuando no se refieran de manera explícita a él. Entre ellos se cuentan el Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm 96), en la medida en que puede aplicarse a las agencias privadas que suministran mano de obra; el Convenio sobre los trabajadores migrantes (revisado), 1949 (núm. 97), y la Recomendación núm 86 que lo acompaña, por el hecho de que muchos trabajadores migrantes son contratados en el marco de relaciones de subcontratación ;el Convenio sobre las plantaciones, 1958 (núm. 1lo), y el Protocolo de 1982, que fijan las normas aplicables a un sector económico en el que ya hace mucho tiempo se recurre al trabajo en régimen de subcontratación Asimismo, las disposiciones de la parte 111 del Convenio sobre la terminación de la relación de trabajo, 1982 (núm 158), y la Recomendación núm 166 que lo acompaña son pertinentes cuando el recurso a la subcontratación por motivos económicos o estructurales redunda en la supresión de empleos Varios de los instrumentos relativos a la seguridad y la salud se ocupan de los casos en que hay varios empleadores en un mismo lugar de trabajo, en ocasiones refiriéndose de manera explícita a los subcontratistas Dos ejemplos de ello son el párrafo 2 del artículo 6 y los artículos 16 y 17 del Convenio sobre el asbesto, 1986 (núm 162) ;el apartado e) del artículo 2 y, en Acción internacional 81 especial, el artículo 8 del Convenio sobre seguridad y salud en la construcción, 1988 (núm..167), y el artículo 12 del Convenio sobre seguridad y salud en las minas, 1995 (núm.. 176). Conviene también tener en cuenta que se ha inscrito en el orden del día de la 8S.areunión de la Conferencia Internacional del Trabajo (1997) la cuestión de la revisión del Convenio núm. 96. A partir del decenio de 1950, varias comisiones de industria de la OIT han expresado su interés por los problemas relacionados con el trabajo en régimen de subcontratación Se han examinado informes especiales sobre esta cuestión en la segunda Reunión técnica tripartita para la industria del vestido, en 1980, y en la que fue Comisión del Petróleo, en 1973 Hicieron referencia al tema, por ejemplo, la Comisión del Trabajo en las Plantaciones, en 1989 y 1994; la Comisión de la Silvicultura y de las Industrias de la Madera y la Comisión de Industrias de Productos Alimenticios y Bebidas, en 1991 ;la Comisión de Transportes Interiores, la Comisión de Construcción, Ingeniería Civil y Obras Públicas, la Reunión técnica tripartita para la industria del cuero y del calzado y la Comisión del Hierro y del Acero, en 1992; la Comisión de Empleados y de Trabajadores Intelectuales y la Comisión de Industrias Mecánicas, en 1994, y la Comisión de Industrias Químicas, en 1995 Esas comisiones adoptaron varias conclusiones y resoluciones relativas al trabajo en régimen de subcontratación, en las que piden la adopción de medidas para conferir la protección adecuada a los trabajadores interesados Así, la Comisión de Construcción, Ingeniería Civil y Obras Públicas ha estimado que esta cuestión presentaba la máxima prioridad para la OIT Se reproducen algunas de esas conclusiones en el anexo al presente informe CONCLUSIONES EXTRA~DASDEL EXAMEN DE LA LEGISLACI~N Y LA PRACTICA NACIONALES El trabajo en régimen de subcontratación reviste formas muy diversas que surgieron hace mucho tiempo en distintos paíse y lugares del mundo para atender las demandas de mano de obra intermitentes (ocasionales o estacionales).. Con el transcurso del tiempo se ha ido extendiendo progresivamente en diferentes ocupaciones y sectores económicos. Esta tendencia se ha visto facilitada no sólo por los adelantos técnicos y las nuevas formas de organización del trabajo, sino también por la descentralización, la liberalización y la especialización de los mercados económicos y laborales que están ocurriendo en todo el mundo.. Las diversas modalidades de trabajo en régimen de subcontratación van desde la subcontratación de tipo comercial (con objeto de efectuar tareas para una empresa usuaria o de prestarle servicios) hasta la subcontratación de mano de obra (con la finalidad principal o única de suministrar trabajadores a una empresa usuaria a través de un tercero, que suele llamarse «intermediario»' o ~subcontratistade mano de obra»).. Hay además toda una gama de formas de trabajo en régimen de subcontratación que presentan caracterlsticas propias de ambas modalidades principales, combinadas de diversas maneras, sin que puedan clasificarse claramente en una u otra. Se trata con frecuencia de procedimientos oficiosos en donde los intermediarios 82 Trabajo en régimen de subcontratación que suministran los trabajadores a las empresas usuarias no son empresas legalmente reconocidas o se hallan en una situación jurídica muy imprecisa De ahí que los propios trabajadores no tengan una condición jurídica del todo clara y que muchos de ellos no estén amparados por la legislación del trabajo y de la seguridad social A medida que aumenta el recurso al trabajo en régimen de subcontratación, se hace cada vez más patente la necesidad de crear una legislación que responda a las exigencias de flexibilidad de los mercados laborales y que permita proteger a los trabajadores interesados La legislación del trabajo y de la seguridad social, concebida para las modalidades de empleo «clásicas », resulta a menudo ser inadecuada para reglamentar las diversas formas de empleo «atípicas» (entre ellas el trabajo en régimen de subcontratación) en beneficio tanto de los empleadores como de los trabajadores Trátase, pues, no sólo de mejorar la protección de los trabajadores en régimen de subcontratación, sino también de proteger los intereses de los asalariados regulares de las empresas usuarias, sobre todo respecto a su seguridad en el empleo Los intentos que se han hecho por reglamentar el trabajo en régimen de subcontratación, con el fin de eliminar las eventuales consecuencias negativas para los trabajadores interesados y atender debidamente las necesidades del mercado de trabajo, han tenido hasta ahora un éxito limitado Como las prácticas de trabajo en régimen de subcontratación están difundiéndose y diversificándose a un ritmo acelerado, el problema se plantea de manera cada día más evidente y los países procuran cada vez más darle soluciones eficaces y equilibradas La legislación del trabajo desempeña a este respecto una función muy importante, en particular en lo que atañe a la garantía de los derechos y libertades fundamentales de los trabajadores de que se trata No obstante, tiene sus límites, derivados de las características propias del trabajo en régimen de subcontratación, que cabe resumir en cinco puntos : i) diversidad de las modalidades (por ejemplo, relaciones bipartitas y tripartitas o «triangulares» entre los trabajadores subcontratados y quienes los emplean ;subcontratación de la producción de bienes o de la prestación de servicios y subcontratación de mano de obra, o bien formas mixtas; diversas índoles de intermediarios, etc); ii) imprecisión conceptual respecto de la definición del fenómeno que ha de reglamentarse, del alcance de la reglamentación y de las principales maneras de abordarla; iii) dificultad de trazar una distinción clara entre los ámbitos respectivos de la legislación del trabajo y de la legislación comercial; iv) importancia del trabajo en régimen de subcontratación en el sector no estructurado, difícil de reglamentar ; v) necesidad manifiesta de no entorpecer la actividad económica mediante una intervención injustificada en las relaciones auténticamente comerciales Por eso, no sólo hay que formular cuidadosamente las disposiciones legislativas de protección para que tengan en cuenta esas características del trabajo en régimen de subcontratación, sino que es preciso también complementarlas con medios de aplicación más flexibles y dinámicos De ahí que la jurisprudencia, tanto la de los tribunales como la de los órganos de arbitraje (cuando los hay), se ha convertido en un elemento indispensable de este dispositivo La negociación colectiva y otras formas de representación de los trabajadores puede asimismo contribuir a que los interlocutores sociales posean los mecanismos que les permitan establecer un equilibrio entre sus intereses respectivos por cuanto atañe a la reglamentación del trabajo en régimen de subcontratación Acción internacional 83 Dadas las particularidades de ese tipo de trabajo, ha de modificarse también la práctica de la negociación colectiva La organización clásica de la acción sindical por sector de actividad económica, que sigue siendo una de las principales características de los sistemas de relaciones laborales en muchos países del mundo, puede redundar en un alejamiento excesivo de los sindicatos respecto del lugar de trabajo donde se practica efectivamente el trabajo en régimen de subcontratación A este respecto, conviene poner de relieve en especial la función de la negociación colectiva en el plano de la empresa El trabajo en régimen de subcontratación posee características tanto generales como específicas que se derivan de las particularidades de cada país, sector económico, mano de obra considerada, etc La situación de los trabajadores interesados, por cuanto respecta al empleo, suele ser muy precaria.. El problema es triple Atañe en primer lugar a la relación entre esos trabajadores y las empresas usuarias que de hecho los emplean A la vez que esas empresas los consideren como una mano de obra externa que no posee la misma condición que los asalariados regulares, los trabajadores en régimen de subcontratación dependen de ellas en el mismo grado que esos asalariados por lo que respecta a diversos aspectos importantes de sus condiciones de empleo En segundo lugar, la relación entre los trabajador es en régimen de subcontr atación y el tercero (el suministrador de mano de obra o intermediario) que interviene en muchas situaciones de trabajo en régimen de subcontratación suele distar mucho de estar debidamente comprendida y reglamentada, salvo en el caso, en muchos países, de las agencias de trabajo temporal (ATT), que la legislación considera como empleadores de los trabajadores contratados. En tercer lugar, la legislación, la negociación colectiva y los dispositivos de control administrativo no han abordado suficientemente, por lo general, el trabajo en régimen de subcontratación Ha sido hasta ahora poco fructuoso el recurso a la jurisprudencia de los tribunales y de los órganos de arbitraje para superar esas carencias, a causa sobre todo de las dificultades propias de la índole misma del fenómeno, las cuales hacen que esos órganos den interpretaciones contradictorias a una legislación muy incompleta De ahí que sea preciso colmar las lagunas de esa legislación En muchos países se sigue buscando un equilibrio, en la legislación y las relaciones laborales, entre la aplicación al trabajo en régimen de subcontratación de la reglamentación concebida para el empleo «clásico» y la adopción de una reglamentación especial El examen que sigue y las preguntas del cuestionario relativas a la forma, al alcance, a las definiciones y al contenido del instrumento o de los instrumentos internacionales que podrían adoptarse a propósito del trabajo en régimen de subcontratación se basan en informaciones obtenidas a través de una investigación recientemente emprendida por la OIT, así como en el resumen y el análisis de la misma contenidos en el presente informe sobre la legislación y la práctica. Al definir el ámbito de aplicación y el contenido de una norma o normas internacionales sobre el trabajo en régimen de subcontratación se plantean dos grandes problemas: en primer lugar, los criterios que permiten determinar si la relación existente entre los trabajadores interesados y la otra u otras partes (el subcontratista o intermediario y la empresa usuaria, cuando hay otras dos partes) es efectivamente una relación de subcontratación que ha de ser amparada por el o los 84 Trabajo en régimen de subcontratación instrumentos internacionales previstos, y no una relación de empleo o una relación comercial clásicas ;en segundo lugar, la índole de la protección que hay que brindar a los trabajadores de que se trata. En lo que respecta al primer problema, el examen de la legislación y la práctica nacionales referentes al trabajo en régimen de subcontratación ha mostrado cuán difícil es delimitar el fenómeno.El estudio de las definiciones muy diversas que se han dado muestra que tienen en común dos características principales: la ausencia de relación de empleo <<normal»entre el trabajador y la empresa usuaria, y la dependencia económica o de organización, o ambas, respecto de la empresa usuaria. Así, una amplia gama de relaciones que, en principio, podrlan considerarse como relaciones comerciales ordinarias entre la empresa usuaria y el subcontratista se consideran como relaciones de trabajo en régimen de subcontratación que son objeto de una protección especial cuando el subcontratista que suministra mano de obra a la empresa usuaria para que realice un trabajo o preste algún servicio (lo cual corresponde a la modalidad de la subcontratación de la producción de bienes o la prestación de servicios) no posee los medios económicos y financieros para cumplir sus obligaciones para con los trabajadores interesados, o cuando estos trabajadores dependen más, en el plano económico o de organización, o ambos, de la empresa usuaria. Del mismo modo, la protección especial se aplica cuando una empresa usuaria obtiene mano de obra a través de alguno de los múltiples tipos de intermediarios para que realice tareas correspondientes a su actividad normal (subcontratación de mano de obra) y cuando esa mano de obra depende en realidad de la empresa usuaria. El cuestionario apunta a determinar si una definición basada en estos criterios resulta idónea para delimitar el ámbito de aplicación esencial- del instrumento o de los instrumentos (pregunta 5 , apartados 1) a 5)).. La pregunta 5, apartado 6), tiene por objeto ofrecer indicaciones sobre los criterios que tal vez permitan determinar si un trabajador es suficientemente dependiente de una empresa usuaria como para poder beneficiarse de la protección que confieren el instrumento o los instrumentos previstos. Una cuestión conexa es la que versa sobre la relación que existe entre los nuevos instrumentos eventuales sobre el trabajo en régimen de subcontratación y la revisión del Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm..96). Como el informe relativo a la legislación y la práctica en esa materia, basado en las conclusiones sobre el papel de las agencias de empleo privadas que la Conferencia Internacional del Trabajo adoptó en su 81.."reunión (1994), se propone definir los principios generales que regulen dichas agencias, es importante evitar todo conflicto entre la revisión del Convenio núm. 96 y las nuevas normas referentes al trabajo en régimen de subcontratación. El riesgo de traslapo atañe sobre todo al trabajo en régimen de subcontratación con participación de intermediarios. El cuestionario que figura más adelante tiene por objeto evitar duplicaciones con la revisión del Convenio núm. 96, procurando que los intermediarios a que se alude en dicho cuestionario no queden incluidos en la definición que se da de las agencias privadas de colocación en el cuestionario sobre la revisión de ese instrumento.. Así pues, los trabajadores colocados por agencias privadas de empleo en empresas que pasan a ser sus empleadores (y de los que trata la revisión del Convenio núm. 96) no son, por definición, trabajadores en régimen de subcontratación, puesto que no tienen la calidad de asalariados de las empresas usuarias (pregunta 5 , apartado 2), b)). Las agencias de trabajo temporal que se consideran como el empleador de los trabajadores Acción internacional 85 que suministran a las empresas usuarias (agencias sobre las que versa la revisión del Convenio núm 96) tampoco son intermediarios en el sentido del cuestionario sobre el trabajo en régimen de subcontratación, puesto que la definición de la palabra <<intermediario»no abarca a los que poseen la calidad de empleador (pregunta 5 , apartado 4)) Parece justo excluirlos del campo de aplicación del instrumento o de los instrumentos eventuales sobre el trabajo en régimen de subcontratación porque los trabajadores que emplean, al ser inequívocamente asalariados, se benefician de la legislación del trabajo y de la seguridad social, y porque la revisión del Convenio núm 96 permitiría aportarles una protección En el cuestionario que figura a continuación se exponen también diversos modos de brindar protección a los trabajadores en régimen de subcontratación, basados en los sistemas muy diversos que se aplican en distintos países Así, ciertas formas de trabajo en régimen de subcontratación pueden estar prohibidas o requerir una autorización o inscripción previas Otras pueden estar sujetas a una reglamentación que obligue a la empresa usuaria a conferir a los trabajadores en régimen de subcontratación un trato igual al que da a sus propios asalariados o a compartir con el subcontratista o el intermediario la responsabilidad de cumplir con las obligaciones financieras y de cualquier otra índole contraídas respecto de esos trabajadores El objetivo fundamental de esos sistemas diversos es impedir que los trabajadores en régimen de subcontratación se vean privados de la protección indispensable a causa de su situación poco definida, y brindarles una protección básica en una serie de aspectos importantes Como no parece que los países hayan llegado a un consenso sobre la mejor manera de proteger a los trabajadores en régimen de subcontratación, convendría que el o los nuevos instrumentos eventuales sobre el tema fueran muy flexibles y permitieran a los Estados Miembros optar entre diversos métodos Este objetivo guarda también relación con la forma del instrumento o de los instrumentos que podrían adoptarse. Si se trata de dejar cierta libertad a los Estados Miembros, parece ser que hay dos soluciones La primera, que conferiría la máxima flexibilidad, consistiría en adoptar una recomendación Esta podría ofrecer a los Estados Miembros orientaciones importantes sobre la manera de brindar la protección necesaria a los trabajadores en régimen de subcontratación, a la vez que les concedería la máxima libertad para elegir los métodos de aplicación y para adaptarlos a las particularidades de la situación nacional Así, en los cinco o diez años venideros, de las legislaciones y las prácticas nacionales elaboradas a partir de una recomendación se podrían extraer elementos más claros que constituirían una base sólida para adoptar un convenio susceptible de tener una amplia aceptación La segunda solución consistiría en adoptar un convenio que se complementase con una recomendación; el primero definiría los principios básicos aplicables a la protección de los trabajadores en régimen de subcontratación, y la segunda indicaría las distintas maneras de aplicar esos principios en la legislación y la práctica nacionales La adopción de un convenio más detallado o de un convenio que no se acompañara de una recomendación ofrecería menos flexibilidad A causa de la vaguedad del concepto de trabajo en régimen de subcontratación, de las lagunas en las leyes, los reglamentos y las prácticas nacionales, así como de la insuficiencia de los conocimientos actuales sobre el tema, existe el riesgo de que el instrumento que se 86 Trabajo en régimen de subcontratación adopte sea poco ratificado y surta escaso efecto en las legislaciones y prácticas nacionales. El cuestionario que se presenta a continuación ha sido concebido con miras a la redacción de unas conclusiones propuestas que recojan las preocupaciones de los Estados Miembros en lo que atañe a la forma y el fondo de los instrumentos internacionales previstos.. Nota ' En los instxumentos de la OIT, la palabra « intermediario >> se ha aplicado tradicionalmente tanto a las actividades de contratación (colocación) como a las de suministro de mano de obra, como puede verse, p o ~ ejemplo, en el articulo 9 del Convenio sobre la protección del salario, 1949 (núm 95) ;en el apartado a ) del artículo 1 del Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm 96), y en el artículo 32 del Convenio sobre las plantaciones, 1958 (núm 110) CUESTIONARIO De conformidad con el artículo 39 del Reglamento de la Conferencia Internacional del Trabajo, se pide a los gobiernos que consulten a las organizaciones de empleadores y de trabajadores más representativas antes de efectuar la redacción definitiva de sus respuestas a este cuestionario, razonándolas debidamente. Dichas respuestas deberán estar en poder de la Oficina Internacional del Trabajo, en Ginebra, a más tardar el 30 de junio de 1996.. Al preparar sus respuestas, los gobiernos deberían tener presente que la 85.." reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo inscribirá en su orden del día un punto relativo a la revisión del Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm. 96), y que por lo tanto deberían tener en cuenta la necesidad de que los textos de los instrumentos que se adopten sobre uno y otro tema sean compatibles entre sí. 1. Forma del instrumento o de los instrumentos 1. Debería la Conjerencia Znternaclonal del Trabajo adoptar uno o varios instrumentos sobre el trabajo en régimen de subcontratación 3 2 En caso afirmativo, L deberían el instrumento o los instrumentos adoptar la forma de a) un convenio, b) una recomendación, c) un convenio complementado por una recomendación 7 11. Preámbulo 3 L Debería el preámbulo del instrumento o de los instrumentos reconocer que, hablda cuenta de la importancla creciente del trabajo en régimen de subcontratación, sería conveniente adoptar nuevas normas sobre este tema para conferir la debida protección a los trabajadores de que se trata 7 111. Métodos de aplicación 4 L Deberían el instrumento o los instrumentos hacer constar que sus disposiciones habrán de aplicarse a través de leyes, reglamentos, convenios colectivos, laudos arbitrales, sentencias de los tribunales, o de cualquier otra forma que se ajuste a la práctica nacional 7 88 Trabajo en régimen de subcontratación IV. Definiciones 5 A efectos del instrumento o de los instrumentos 1) Debería la expresión «trabajo en régimen de subcontratación» significar el trabajo ejectuado por un trabajador ocupado en régimen de subcontratación para una persona ffsica o moral (en adelante denominada «empresa usuaria ») 7 2 ) Debería la expreszón « trabajador en régimen de subcontratación >> significar una persona que a) realiza un trabajo para una empresa usuaria o le facilita servicios, ya sea i ) directamente, como subcontratista individual, ii) como asalariado de un subcontratuta, ia) a través de un intermediario, y b) que está en una situación de dependencia considerable en el plano económico o de organización, o en ambos planos, respecto a la empresa usuaria, szn tener la calidad de asalarzado de esa empresa 7 3) L Debería el término « subcontratista » significar toda persona física o moral que se compromete por contrato a hacer que se efectúe un trabajo para una empresa usuaria o a hacer que se le proporcione un servicio 7 4 ) Debería el térmmo «intermediario » szgnlfzcar toda persona físzca o moral que suministra un trabajador en régimen de subcontrataczón a una empresa usuarza, salvo cuando el zntermediario tiene la calidad de empleador de ese trabajador 7 ' 5) L Deberían el instrumento o los instrumentos disponer que los Miembros debzeran definir, en relación con el anterzor apartado 2), b), los crzterios que permiten considerar que una persona está en una sztuación de dependencia considerable en el plano económico o de organi~ación,o en ambos planos, respecto a la empresa usuaria 3 6)L Deberían el znstrumento o los instrumentos hacer constar que, para formular la definición prevista en el anterior apartado 5), los Miembros podrían tomar en cuenta alguno o algunos de los crzterios siguzentes. a) la medida en que el trabajo reali~adoo los servicios suministrados por la persona de que se trate forma parte integrante de las actividades normales de la empresa usuarza ; b) la medzda en que la empresa usuaria suministra el capital, la maqumaria, los equzpos o los materzales, o ambos, que se necesitan para llevar a cabo el trabajo o faczlitar los servicios de que se trate, c ) la medzda en que la empresa usuaria decide en qué lugar ha de efectuarse el trabajo o de sumznistrarse los servzczos, d) la medzda en que la empresa usuarza da las instrucczones o proporciona la formación necesarias para reali7ar el trabajo o sumznistrar los servicios de que se trate, 1 Si el intermediario tiene la calidad de empleador del trabajador (por ejemplo, en el caso de una agencia de trabajo temporal) o facilita servicios de colocación a raíz de los cuales el trabajador se convierte en un asalariado de la empresa usuaria, se propone que esta situación sea tratada en el marco de la revisión del Convenio sobre las agencias retribuidas de colocación (revisado), 1949 (núm 96) Cuestionario 89 e) la medida en que la empresa usuarza ejerce una autoridad de supervisión sobre la persona de que se trate, en lo que atañe a la realzzaczón del trabajo o al suministro de los serviczos, f) la medida en que la empresa usuaria fzja los horarios y la duraclón del trabajo y otras condiciones laborales, g) la medida en que la empresa usuaria tiene facultad para ejercer un poder disciplinario sobre la persona de que se trate, en el marco de la realizaczón del trabajo o del suminzstro de los servicios, h) otros criterzos 3 (Sírvase especijicar cuáles ) V. Alcance 6. 1) Deberían el instrumento o los instrumentos aplicarse a todos los sectores de la actividad económica 3 2) Si la respuesta es negativa, deberían el znstrumento o los instrumentos aplicarse a sectores determinados de la actividad económzca 3 En caso afirmativo, sírvase especijicar a qué sectores 3) Si el mstrumento fuese un convenio, debería disponer que los Miembros podrán excluir de su ámbito de aplicación algunos sectores determinados de la actividad económica 7 En caso afirmativo, debería el Miembro zndicar en su primer znjorme, de conformidad con el artículo 22 de la Constituczón de la Organización Internacional del Trabajo, el sector o los sectores que excluye 7 7 Deberían el instrumento o los instrumentos hacer constar que sus disposiciones no afectan a las disposlczones más favorables aplzcables a los trabajadores de que se trata en virtud de otros znstrumentos internacionales 7 VI. Contenido del instrumento o los instrumentos 8 Deberían el instrumento o los znstrumentos dzsponer que los Mlembros debzeran adoptar las medidas oportunas para garantzzar que los trabajadores en régimen de subcontrataczón disfruten de la debzda protección en lo que atañe, por lo menos, a los aspectos siguientes a) el derecho de sindicaczón y de negociaczón colectiva, b) la protecczón contra la discriminación en el empleo y la ocupación, por motlvos de raza, color, sexo, ueliglón, opzniones políticas, ascendencia nacional u orlgen soczal; c) la edad mínima, d) la remuneración, e) los horarios y la duración del trabajo y otras condzciones laborales, f) la segurzdad y la salud en el trabajo, g ) la protección de la maternzdad, h) la protección en materia de segurzdad soczal, donde exista, i) la indemnización en caso de accidente del trabajo o de enfermedad profesional, j ) otros aspectos 3 (Sírvase especlJzcar cuáles ) Trabajo en régimen de subcontratación 90 9.. Deberían el lnstrumento o los instrumentos disponer que cada Estado Miembro debzera recopilar estadístzcas y otras informaciones acerca del trabajo en régimen de subcontratación, mantenerlas al día y hacerlas públicas 7 10 Deberían el instrumento o los instrumentos disponer que debieran adoptarse medidas eficaces para garantizar que los trabajadores en régimen de subcontratación sean informados de modo adecuado y fácilmente inteligible de su remuneraczón ( o de la manera en que será fijada) y de las condiciones de empleo y de trabajo que les serán aplicables 7 11 1) Deberían el instrumento o los znstrumentos dlsponer que el trabajo en régimen de subcontratación podría ser prohibido en las clrcunstanclas que especijlque la legislación nacional 7 2 ) En caso afirmativo, en qué circunstancias podría prohibirse el trabajo en régimen de subcontrataclón 7 3) Podrían dzchas circunstancias inclulr a) las ocupaciones peligrosas, b) el reemplazo de los trabajadores que partlclpan en una huelga legal 7 12 1) L Deberían el instrumento o los znstrumentos dlsponer que el recurso al trabajo en régimen de subcontrataclón debzera, en las circunstanclas que especzjique la legislación nacional, estar sujeto a la obligación por parte del subcontratista, del intermediario, o de ambos, de inscribirse en el reglstro de la autoridad competente o de obtener de ella la licencia correspondiente 3 2 ) En caso ajirmatlvo, L en qué circunstancias 7 3) En caso afirmativo, L debería este regzstro o licencla depender de que el subcontratzsta, el intermediario, o ambos, demuestren que su empresa es viable y que están en condiciones de cumplir con las oblzgaciones contraídas con los trabajadores en régimen de subcontrataclón, o de que depositen una fianza sujiciente para cubrzr las oblzgaciones de que se trata 13 1 ) Deberían el instrumento o los znstrumentos disponer que debieran adoptarse medidas para garantlsar que los trabajadores en régimen de subcontratación, o determinadas categorías de ellos, reclban, en circunstancias especijicadas, el mlsmo trato que los asalariados de la empresa usuarla o sean asimilados a los asalariados de la empresa usuaria, o, según sea el caso, a los trabajadores del subcontratista o del intermedlarlo 7 2) En caso ajirmativo, L en quécircunstanclas (por ejemplo, cuando el trabajo en régimen de subcontrataclón se utilzza principal o exclusivamente para eludir las oblzgaciones en materia de seguridad social o de legislación del trabajo) 7 14 1 ) L Deberían el lnstrumento o los instrumentos disponer que, en clrcunstancias especificadas por la legislación nacional, las oblzgaciones financieras respecto a un trabajador en régimen de subcontratación debieran ser compartidas con responsabilidad solidaria y vnúltlplelpor el subcontratzsta y la empresa usuarla, o, según sea el caso, por el lntermedlario y la empresa usuarla 7 2) En caso afirmativo, L en qué circunstanclas 7 1 Para una explicación del concepto de solidaridad, véase la pág 55 del informe Cuestionario 91 15. 1) En ausencia de una responsabilidad solidaria y múltiple, ¿ deberían el instrumento o los instrumentos disponer que, cuando un trabajador en régimen de subcontratación sea puesto a disposzczón de una empresa usuaria por un subcontratista o un mtermediario, y cuando la parte normalmente responsable del cumplzmiento de las obligaciones financieras respecto de esos trabajadores no cumpla con ellas, la otra parte debería, en czrcunstancias determinadas, asumzr la obligación de cumplir con ellas 7 2 ) En caso afirmativo, en qué circunstancias 7 16 1 ) Deberían el instrumento o los instrumentos disponer que, en czrcunstancias especljficadaspor la legzslación naczonal, ésta y la práctlca nacional pueden repartir entre el subcontratzsta y la empresa usuaria o entre el intermediario y la empresa usuaria, según sea el caso, las responsabilidades respecto de los trabajadores en régimen de subcontratación que incumben normalmente al empleador 7 2 ) En caso afirmativo, L en qué circunstancias 7 17 1 ) Deberían el instrumento o los instrumentos disponer que las obligaciones y responsabilidades que la legislación nacional imponga en materia de seguridad y salud en el trabajo, incluida la obligación de mantener un lugar de trabajo seguro y salubre, debieran recaer en la empresa, ya sea usuarla o subcontratista a) en los locales de la cual se realice el trabajo, o bien b) que sea responsable de la maquinaria, equzpos, herramientas y materiales que se empleen en la realización del trabajo 7 2 ) Deberían el instrumento o los instrumentos disponer que las responsabilidades previstas por la legislación naczonal en materia de zndernnización de los trabajadores en caso de accidentes del trabajo y de enfermedades profesionales (cuando no estén cubiertos por un régimen de seguro social) debieran recaer en la empresa, ya sea usuarza o subcontratzsta . a) en los locales de la cual se reallce el trabajo, o bzen b) que sea responsable de la maqumarza, equipos, herramientas y materiales que se empleen en la reabzación del trabajo 7 18 1 ) Deberían el znstrumento o los instrumentos dzsponer que, en czrcunstancias especificadas por la legislación naczonal, el subcontratista y la empresa usuaria, o el intermedlarzo y la empresa usuaria, según sea el caso, debieran ser responsables de manera solidaria y múltiple del pago de las contribuciones de seguridad social de que se trate 7 2 ) Deberían el znstrumento o los znstrumentos disponer que, en ausencia de una responsabilidad solidaria y múltiple, si la parte normalmente responsable del pago de las contribuciones de seguridad social no cumple con esa obligación, la otra parte debiera tener que cumplirla 7 19. Debería el convenio disponer que la inspección del trabajo debiera velar por el cumplzmiento de la legislación aplicable a los trabajadores en régimen de subcontrataczón 7 92 Trabajo en régimen de subcontratación 20 i Debería el convenio disponer que se prevean y efectivamente se apliquen remedios, con inclusión de sanciones, en los casos de infracción de la legislación ? VII. Problemas especiales 21.. 1) Deberían el znstrumento o los instrumentos disponer que los Miembros debzeran adoptar medidas para suminzstrar protección idónea a los trabajadores en régimen de subcontratación que han de llevar a cabo su trabajo en el extranjero 7 2) En caso afirmativo, 6 qué medidas 7 22 1 ) Hay en la legulaczón o en la práctica naczonalesparticularidades que, en su opinión, puedan plantear dzficultades para la aplicación del instrumento o de los instrumentos internacionales previstos en el presente informe 7 2) En caso afirmativo, cuáles serían sus propuestas para allanar esas dificultades 7 23 (Estados federales.) 6 Conszdera que, en caso de adopción de un convenio, su contenido sería apropiadopara una acción de las autoridades federales o bien, total o parcialmente, para una acción de las autoridades de las unidades constitutivas de la federación 7 24. 1) Existen, a su juicio, otros problemas pertinentes no abarcados por el presente cuestionario y que debzeran tenerse en cuenta al redactar el instrumento o los instrumentos previstos 7 2) En caso afirmativo, sírvase indicar cuáles ANEXO RECOPILACION DE CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES SOBRE EL TRABAJO EN REGIMEN DE SUBCONTRATACION ADOPTADAS EN REUNIONES DE LAS COMISIONES DE INDUSTRIA DE LA OIT COMISION DEL PETROLEO (Quinta reunión, Caracas, abril-mayo de 1955, y Ginebra, abril de 1956) Resolución (núm. 44) sobre las condiciones de empleo de los trabajadores reclutados por contratistas en la industria del petróleo La Comisión del Petróleo de la Organización Internacional del Trabajo: Reconociendo el hecho de que las empresas de la industria del petróleo tienen costumbre de emplear directamente a los trabajadores que efectúan trabajos que normalmente ejecutan las empresas, y que es también práctica de dichas empresas, en algunos países, encargar a otras empresas o a empleadores individuales, a base de contratas, ciertos trabajos que no son parte, o no están directamente relacionados con sus operaciones normales o son de carácter irregular o temporal, es decir, a «contratistas», quienes para llevar a cabo dichos trabajos emplean trabajadores designados como ({trabajadores reclutados por contratistas » ; Reconociendo, además, que algunas empresas, en ciertos países, contratan trabajos de carácter permanente y que existe tendencia general a aumentar el número de estos trabajos que se confían a los contratistas ; Consciente de que los trabajadores empleados por contratistas y los trabajadores empleados directamente por las empresas petroleras ejecutan algunas veces la misma clase de trabajo, directa o indirectamente, para la misma empresa, y que, algunas veces, especialmente en los países menos industrializados, los trabajadores reclutados por contratistas pueden ser empleados en condiciones que son menos favorables que las que gozan los trabajadores directamente empleados por la empresa petrolera; Habiendo observado que donde existe una gran disparidad en las normas de empleo de estos dos grupos de trabajadores, algunas veces se crean graves problemas que propenderían a perjudicar las relaciones normales y armoniosas, produciendo el consiguiente descontento: Considerando que este descontento es perjudicial y que el remedio consiste en lograr que los trabajadores empleados por contratistas gocen de condiciones de empleo decorosas ;y que el contratista, como empleador de sus trabajadores, es principalmente responsable de las condiciones de trabajo de los empleados por él, pero que, al mismo tiempo, las empresas petroleras también deben preocuparse de este problema, ya que el trabajo ejecutado bajo contrata es esencial para la industria del petróleo; Considerando, además, que las condiciones de trabajo de la mano de obra empleada por los contratistas de la industria del petróleo deberían reglamentarse por medio de contratos colectivos negociados libremente entre las organizaciones de empleadores y de trabajadores, pero que cuando esas organizaciones no existan todavía o cuando el desarrollo de las ~elaciones de trabajo no haya alcanzado un nivel que haga posible las negociaciones de tales contratos, la responsabilidad para garantizar condiciones razonables de empleo en los trabajos confiados a contratistas debería corresponder a las autoridades públicas, 94 Trabajo en régimen de subcontratación Adopta, el 13 de abril de 1956, la resolución siguiente Medidas a adoptar por las autoridades públicas 1 Los gobiernos deberían adoptar disposiciones legislativas adecuadas para proteger las condiciones de empleo de los trabajadores reclutados por contratistas Esta legislación podría incluir la concesión de licencias a los contratistas, tomando en consideración las garantías financieras que presenten al extender tales licencias de ejecución 2 A falta de sindicatos o de contratos colectivos, el contratista y sus trabajadores deberían concluir contratos obligatorios de trabajo escritos que indicasen todas las condiciones de empleo y remuneración El contrato no debería contener cláusula alguna que limitara al trabajador en el ejercicio de su derecho a inscribirse en un sindicato de su propia elección 3 Los gobiernos deberían garantizar la aplicación efectiva de las normas mínimas legales de empleo relativas a los trabajadores empleados por contratistas, organizando un sistema adecuado y eficiente de inspección del trabajo 4 Debería asegurarse la aplicación eficaz de sanciones en caso de violación de las disposiciones legales Medidas a adoptar por las empresas petroleras 5 El trabajo directamente asociado a los procedimientos técnicos de las empresas petroleras, para cuya ejecución se encuentran disponibles el equipo y los t~abajadores,no debiera ser objeto de contratos celebrados con personas ajenas a la empresa, salvo en circunstancias excepcionales 6 Los contratos suscritos por las empresas petroleras y los contratistas deberlan contener cláusulas que obligaran a éstos a proporcionar salarios y condicionesde tiabajo equitativospara los trabajadores empleados por los mismos 7 Cuando el trabajo se ejecute en zonas remotas o poco desar~olladas,los contratistas deberían suministrar o adoptar las medidas convenientes, en colaboración con las empresas petroleras en caso necesario, para garantizar asistencia médica y aprovisionamientosadecuados a los trabajadores empleados por ellos 8 Cuando el trabajo para la empresa petrolera sea ejecutado en zonas remotas o aisladas y se disponga de facilidades recreativas para los trabajadores de dicha empresa, el contratista debería concertar los acuerdos necesarios para que algunas de esas facilidades se pongan a disposición de los trabajadores empleados por el contratista y sus familias, a condición de que tales medios recreativos sean suficientes 9 La empresa petrolera debería tomar medidas eficaces para comprobar que las disposicionescontenidasen el contrato, relativas a las condiciones de trabajo de los trabajadores empleados por contratistas, son cumplidas por el contratista 10. En las regiones donde exista desempleo, sería deseable que la empresa estimulase al contratista a tomar medidas para estabilizar el empleo y evitar en todo lo posible el despido arbitrario durante el período en que el contrato esté en vigor COMISION DEL PETROLEO (Octava reunión, Ginebra, abril de 197.3) Conclusiones (núm. 65) relativas a los problemas sociales de los trabajadores contratados por empresarios y subcontratistas y de los trabajadores eventuales en la industria del petróleo La Comisión del Petróleo de la Organización Internacional del Trabajo: Recordandoque la Comisión del Petróleo adoptó por unanimidad durante su quinta reunión en Caracas, en abril-mayo de 1955, y en Ginebra, en abril de 1956, una resolución (núm 44) relativa a la mano de obra empleada por contratistas en la industria del petu5leo; Anexo 95 Tomando nota de que las disposiciones de esta resolución no han sido aplicadas en todo el ámbito de la mencionada industria y que todavía existen en algunas regiones condiciones perjudiciales a los intereses de los trabajadores de la industria; Considerando que existe una tendencia a la expansión de la subcontratación en las empresas petroleras, tanto públicas como privadas, por el hecho de la evolución de técnicas que exigen un personal altamente especializado y un equipo muy especial; teniendo en cuenta, además, que las operaciones de mantenimiento y otras operaciones que están vinculadas a la producción, así como los servicios anexos de trabajos administrativos o de oficina que anteriormente estaban encomendados al personal permanente de las empresas petroleras, son también objeto en forma frecuente de subcontratación ;que se han presentado nuevas formas de subcontratación y que el empleo de personal suministrado por las empresas de trabajo temporal o por otros subcontratistas de mano de obra ha alcanzado considerable extensión en cierto número de países; Reconociendo, además, que la subcontratación es frecuentemente indispensable en esta industria a causa de los imperativos técnicos y que tal práctica puede tener efectos positivos para la creación de empleos y para facilitar la introducción de tecnología moderna en otros países, contribuyendo así al progreso económico y social ; Considerando, igualmente, que el uso creciente de mano de obra empleada por contratistas y subcontratistas puede traer como consecuencia una disminución del personal permanente de las empresas ; Considerando, además, que las condiciones de trabajo de la mano de obra empleada por contratistas y subcontratistas en la industria del petróleo deberían reglamentarse por la legislación o por convenios colectivos libremente negociados, o por ambas vías; - ~eniend'en cuenta que las autoridades públicas, los empleadores y las organizaciones de trabajadores de la industria del petróleo tienen un interés común fundado en razones económicas, sociales y humanitarias en contribuir a que se aseguren al personal de los contratistas y subcontratistas condiciones de empleo satisfactorias y a velar por que las diversas formas de subempresa no socaven las relaciones profesionales ; Tomando nota, por otra parte, de que pueden existir problemas análogos en otras ramas de actividad en lo que concierne al empleo de mano de obra por contratistas y subcontratistas así como de trabajadores eventuales, Adopta, el 13 de abril de 1973, las conclusiones siguientes: 1 Teniendo en cuenta las condiciones nacionales, las autoridades públicas y la industria petrolera deberían realizar esfuerzos para otorgar una mayor protección a aquellos trabajadores de contratistas y subcontratistas, o eventuales, que no estuviesen adecuadamente protegidos por la legislación o convenios colectivos de trabajo, prestando especial atención a la contratación de mano de obra, en cuyo marco el otorgamiento de licencias a los contratistas u otras limitaciones o aun la abolición podrían ser consideradas, de ser adecuadas 2 El trabajo involucrado en los procesos técnicos de la industria para cuya realización el equipo y trabajadores permanentes estén disponibles o puedan ser obtenidos fácilmente en la empresa interesada no debería ser contratado, salvo circunstancias no usuales Tales circunstancias no usuales podrían incluir, por ejemplo, trabajos de instalación o revisión 3 El empleo de trabajadores temporales o eventuales mediante contratistas que emplean mano de obra, o empresas de trabajo temporal, debería limitarse a las necesidades momentáneas o imprevisibles de personal; las empresas petroleras deberian contar, en todo caso, con un número suficiente de trabajadores permanentes para suplir las ausencias normales 4 En los casos en que los intereses de los trabajadores permanentes estén o puedan ser afectados por la contratación o subcontratación, ellos o sus representantes deberían ser informados de antemano por la empresa petrolera; cuando existan procedimientos de consulta o de negociación colectiva que sean aplicables a la empresa, deberían utilizarse dichos procedimientos 5 Los contratos suscritos por las empresas petroleras y los contratistas deberían contener cláusulas que obligaran a éstos a proporcionar salarios y condiciones de trabajo equitativos para los trabajadores empleados por los mismos 6. Los gobiernos deberían asegurarse de que las normas mlnimas legislativas respecto de las condiciones de empleo, seguridad e higiene del trabajo sean aplicables a la mano de obra 96 Trabajo en réglmen de subcontratación contratada y subcontratada, así como a la eventual, y se apliquen efectivamente, incluyendo sanciones por violación a las mismas 7 Cuando el trabajo se ejecuta por contratistas o subcontratistas en zonas remotas o aisladas, las autoridades públicas deberian prestar atención particular a la necesidad de garantizar normas legales respecto de condiciones de trabajo, disposiciones de seguridad e higiene del trabajo y asistencia médica; los contratistas deberían suministrar -o hacer arreglos cuando fuera necesario y conjuntamente con la empresa petrolera - facilidades médicas, alojamiento y aprovisionamiento para los trabajadores de los contratistas que operen en dichas zonas remotas o aisladas 8. Cuando fuere necesario, deberían desplegarse esfuerzos para garantizar a los trabajadores de contratistas y subcontratistas, y eventuales, el pleno ejercicio de sus derechos sindicales 9. Deberlan establecerse disposiciones que protejan contra el despido injustificado a los trabajadores eventuales y a los empleados por contratistas y subcontratistas. 10 Por medio de convenios colectivos de trabajo podría establecerse una limitación a la duración del empleo de trabajadores eventuales o temporeros por parte de la industria petrolera ; estos trabajadores podrían ser integrados al personal permanente después de cierto periodo trabajado en la misma empresa petrolera 11 Siempre que sea apropiado, debería ofrecerse a los trabajadores de contratistas empleados en la construcción de nuevas instalaciones para la empresa petrolera empleo permanente, después de recibir formación adecuada, en esas nuevas instalaciones cuando éstas fueran puestas en funcionamiento 12 Las empresas petroleras deberían proporcionar formación profesional adecuada, formación y readaptación profesional para sus empleados de acuerdo a los requerimientos de personal especializado, y las vacantes deberían llenarse, dentro de lo posible, por promociones o transferencias de los trabajadores permanentes, en lugar de recurrir al uso de personal eventual, o contratistas y subcontratistas SEGUNDA REUNION TECNICA TRIPARTITA PARA LA INDUSTRIA DEL VESTIDO (Gznebra, 23 de septiembre a 2 de octubre de 1980) Conclusiones (núm. 7) relativas a los trabajadores empleados por subcontratistas en la industria del vestido La segunda Reunión técnica tripartita para la industria del vestido, Adopta, el 2 de octubre de 1980, las conclusiones siguientes: Consideraciones generales 1 Tradicionalmente y aun históricamente, la industria del vestido se ha caracterizado por ciclos estacionales y necesidad de flexibilidad para afrontar los cambios de la moda y por ello sujeta a aumentos y disminuciones súbitas de la demanda Consecuentemente, es una de las industrias en las que los trabajadores empleados por subcontratistas, incluidos los trabajadores a domicilio, son relativamente numerosos en muchos países, en particular por ser una industria con gran intensidad de mano de obra Además, la liberación de los intercambios del comercio internacional, observada con posterioridad a la primera Reunión técnica tripartita para la industria del vestido que se celebró en 1964, ha conducido a una internacionalización cada vez mayor de la producción del vestido En consecuencia, la subcontratación se extendió más allá del contexto nacional, incluida la fabricación de vestidos en su totalidad o sólo partes de vestidos, hecha en filiales situadas en países en desarrollo y aun en paises desarrollados de sociedades multinacionales con sede en un país industrializado En cuanto a la subcontratación de mano de obra, centrada más sobre el proporcionamiento de mano de obra que sobre una producción dada, no es posible de identificar Sin embargo, existen casos de intermediarios que proporcionan trabajo a domicilio 2 No siempre es posible definir y delimitar claramente las diferentes formas de subcontratación Se comprueban entrelazamientos en una forma u otra y en conjunto la subcontratación es tanto un concepto económico y de gestión como un concepto jurídico Ciertamente, las simples compras de comerciantes minoristas o mayoristas y otros revendedores del sector comercial continúan siendo puras operaciones de negocios Pero, a veces, algunos minoristas y mayoristas intervienen en el ciclo de producción, en la etapa de creación de modelos, proporcionamiento de géneros y realización del corte, y el resto de la fabricación se da en subcontratación, de acuerdo con una serie de indicaciones técnicas, y finalmente asumen la comercialización En otros casos, ciertos fabricantes subdividen la estructura de su empresa o diversifican sus actividades, y no es fácil distinguir cuándo fabrican, subcontratan o se reducen a comprar y vender Sin embargo, no es raro que la subcontratación abarque varios grados, y que un subcontratista a su vez se convierta en comitente de otros subcontratistas Es común también que a veces la subcontratación (incluyéndose la hecha con intervención de intermediarios) termine en trabajo a domicilio, que es adecuado considerar también dentro del marco de los problemas de la subcontratación 3 Cualquier examen de las cuestiones consideradas se resiente de la falta de estudios correspondientes y de estadísticas completas, fidedignas y actualizadas, y se debe insistir en remediar esta situación lo más pronto posible Esta deficiencia de fiabilidad puede originarse en la mano de obra en subcontratación no declarada por motivos fiscales o para evitar contribuciones para cargos sociales, o la existencia de trabajadores clandestinos o de trabajadores que se encuentran en situación ir.regular, como los migrantes carentes de permiso de residencia o de trabajo Además, cualesquiera que sean las medidas adoptadas, pueden ser de difícil aplicación, en particular debido a que la diversidad y la dispersión de las pequeñas empresas de subcontratación y de los trabajadores a domicilio no facilitan el control ni la sindicación 4 La OIT debería instar a los Estados Miembros a que proporcionen las estadísticas adecuadas, que facilitarían una mayor consideración de estas cuestiones en una futura reunión 5 Como la industria del vestido evoluciona rápidamente, la Reunión considera conveniente que la OIT examine los problemas de la industria del vestido con mayor frecuencia y de manera más completa Contrata a nivel naclonal 6 Debido a la relación, a veces complementaria, entre el sector artesanal o informal (llamado también «no estructurado») y el sector industrial, la subcontratación en el interior de países continúa aumentando Algunas de las razones para ello se mencionan anteriormente Otras razones incluyen la utilización del exceso de capacidad de producción de algunos fabricantes que subcontratan con otras empresas, la ampliación del surtido en una colección gracias a la subcontratación especializada, y los capitales reducidos y el material limitado (a veces comprado o alquilado o de ocasión), que a menudo permiten lanzarse en la fabricación de vestidos, especialmente cuando se trata de hacer una serie limitada de modelos A menudo, la subcontratación representa una parte sustancial de la producción interna de vestidos, con diferencias acentuadas según los países y las categorías de vestidos 7 Aunque la flexibilidad resultante pueda presentar ventajas, y aunque numerosas pequeñas empresas creadoras de empleo funcionan sin particulares dificultades, ciertos problemas se plantean en diversas circunstancias En realidad, en determinadas ocasiones puede conducir acompetencia desleal entre empresas y a desigualdad de trato entre sus trabajadores en cuanto a las normas sociales y de trabajo, a las condiciones de trabajo y de seguridad e higiene, que algunos empleadores aplican y otros tal vez no. Las causas que contribuyen a ello pueden ser la ausencia de convenios colectivos o de legislación, que no siempre cubren a todas las empresas, o el incumplimiento de tales disposiciones, debido a veces a las dificultades de aplicación La falta de observancia de la legislación, de la reglamentación o de los convenios colectivos, por parte de los empleadores, no puede admitirse bajo ningún concepto Además, la inseguridad del empleo, especialmente grave en períodos de crisis económica, perjudica a cierta cantidad de trabajadores empleados por contratistas y subcontratistas, quienes dependen, en gran medida, de los encargos de las firmas principales y que rara vez disponen de sólidas reservas financieras La subcontratación en ciertos casos puede implicar condiciones de trabajo 98 Trabajo en régimen de subcontratación y de remuneración inferiores, agravadas por los apremios de la productividad del trabajador y10 la urgencia de los plazos de entrega que pueden ser desfavorables a los trabajadores, y especialmente a las trabajadoras 8 En principio, las eventuales ventajas de la subcontratación no deberían obtenerse en detrimento de los trabajadores ni tampoco de los empleadores principales, ni de sus subcontratistas ni dar lugar a competencia desleal entre empresas Se tomó nota de que, en algunos países, se han adoptado disposiciones para una responsabilidad solidaria del empleador principal (responsabilidad que a veces puede limitarse), por ejemplo en caso de quiebra, cuando el subcontratista no puede hacer frente a sus obligaciones, especialmente en lo relativo a salarios y cotizaciones de seguridad social Por lo menos deberían aplicarse la legislación y reglamentos del trabajo y de seguridad social a los trabajadores por todos los subcontratistas En caso de celebrarse convenios colectivos, es conveniente que las partes concierten, cuando sea factible, las condiciones de empleo y de trabajo como también las prestaciones y ventajas sociales convenidos a fin de prever su aplicación, sin discriminación, a todos los trabajadores Los empleadores principales deberían utilizar, en la máxima extensión posible, los servicios de los subcontratistas que son parte de tales convenios colectivos Contrata internacional 9 En la actualidad, la subcontratación internacional se extiende a un número cada vez mayor de países y no se limita sólo a algunos nuevos países industrializados Evoluciona en función de las relativas ventajas que resultan de las diferencias de costos salariales (salario básico y suplementos de salario o cargas sociales) entre países del Norte y del Sur, del Oeste y del Este Sin embargo, las estadísticas a este respecto deben interpretarse con cautela teniendo en cuenta, entre otras cosas, los problemas de tasas de cambios y los diferentes costos de vida y condiciones de existencia Bastante a menudo, la subcontratación internacional adopta la forma de «tráfico de perfeccionamiento pasivo», por ejemplo la exportación temporal de tejidos cortados para ser cosidos y después reimportados, no pagándose los derechos de aduana más que sobre el valor agregado Además, dentro del marco de políticas de fomento de las exportaciones y de las ventajas concedidas para atraer las inversiones extranjeras, se asiste a una multiplicación en los países en desarrollo de zonas francas o de regímenes análogos para los fabricantes exportadores El objetivo principal de los países en desarrollo contratistas es el de remediar el desempleo y la escasez de divisas (para realizar adquisiciones en el extranjero) y esto se acentúa con la industria del vestido porque ocupa numerosa mano de obra y exige eventualmente menos capitales y calificaciones que otras industrias. Sin embargo, como estas prácticas a veces implican exenciones (fiscales, por ejemplo) de duración determinada y la competencia es cada vez más dura, pueden llevar a un rápido desplazamiento de ciertas ventajas comparativas de un país a otro Esto ocasiona inseguridad en los empleos creados en los países subcontratistas, que se agrega a la inseguridad en el empleo provocada por la subcontratación internacional en los países industrializados comitentes Este es el efecto del comercio libre 10 La Declaración de Filadelfia, relativa a las finalidades y objetivos de la Organización Internacional del Trabajo, y que forma parte integrante de su Constitución, enuncia, entre otras cosas, que «la pobreza, en cualquier lugar, constituye un peligro para la prosperidad de todos >> Existe el riesgo de un refuerzo del proteccionismo si las tendencias de la subcontratación internacional produjeran excesivas pérdidas de empleo como resultado de las grandes dificultades de adaptación prevalecientes en los paises comitentes Las eventuales ventajas que puede procurar la subcontratación internacional a las empresas también deberían beneficiar al consumidor y, asimismo, traducirse en un mejoramiento de las condiciones de empleo y de trabajo de los trabajadores de esa industria en los países en desarrollo y, como consecuencia, la promoción de la demanda de artículos de vestir en el mercado interno de esos países 11 Con este efecto, los trabajadores subcontratados dentro del marco de la subcontratación internacional, incluidos los de las zonas francas, deberían por lo menos estar cubiertos por la legislación y la reglamentación del trabajo y de la seguridad social de su país, sin ninguna discriminación Deberían también poder ejercer sus derechos fundamentales, tales como el derecho de sindicación, y gozar de normas sobre salarios mínimos y protección social 12 La Reunión tomó nota de la sugerencia relativa al estudio de la OIT sobre la posibilidad de definir un conjunto de normas mínimas internacionales del trabajo que deberían respetarse en todo el mundo y cuya aplicación podría vigilar la OIT Anexo 99 13. La OIT debería emprender un estudio para conocer mejor las cuestiones relativas a las zonas francas y regímenes asimilados, que están dentro de su competencia, así como la legislación y la práctica vigentes en relación con el derecho común o con la situación en vigor en otras partes de los países considerados, la libertad de sindicación y salarios mínimos Contrata de mano de obra excluszvamente 14 Aparte de los intermediarios relacionados con el trabajo industrial a domicilio en diversos países, en la actualidad la contrata de mano de obra exclusivamente es menos corriente en la industria del vestido, y en realidad cierto número de países han prohibido ya la contlata de mano de obra 15 Como esta forma de subcontratación no es ni necesaria ni conveniente en la industria del vestido, deberia tenderse a su abolición, especialmente porque puede favorecer el trabajo clandestino y los tráficos de mano de obra, de los que se tratará más adelante en los párrafos 21 y siguientes Mientras tanto, los trabajadores contratados o empleados por subcontratistas de mano de obra exclusivamente deberían ver definida claramente su condición jurídica de asalariados y también, mientras sea razonablemente factible, beneficiar de la aplicación de la legislación y de la reglamentación del trabajo y de la seguridad social, como asimismo de las disposiciones de los convenios colectivos, eventualmente en vigor en la industria del vestido Trabajo industrial a domicilio 16 El trabajo industrial a domicilio continúa practicándose en la industria del vestido A veces disminuye, como por ejemplo con la modernización de las empresas ;a veces se desarrolla por razones de flexibilidad mencionadas anteriormente, de necesidades de empleo en los países en desar~olloy aun por otras razones más 17 El sistema de trabajo industrial a domicilio, que para algunos trabajadores es la única fuente posible de ingresos o la única posibilidad de contribuir al presupuesto familiar y donde a menudo se encuentra una mayoría de categorías desaventajadas y vulnerables de la población, puede dar lugar a riesgos de abusos, ilegalidades y a competencia desleal A veces puede originar el peligro de peores condiciones de higiene y de seguridad como también el trabajo infantil 18 Por lo menos, sobre la base de la experiencia adquirida en diferentes países, se deberia reglamentar estrictamente el trabajo industrial a domicilio y fijar claramente la situación jurídica de quienes lo ejecutan Esto contribuiria a asegurar, cuando sea factible y en la mayor medida posible, igualdad de trato entre los trabajadores a domicilio y los que realizan un trabajo comparable en la fábrica, sea en particular para las tasas de remuneración, las vacaciones pagadas y la seguridad social (incluidos el seguro de enfermedad, las pensiones y una cobertura de riesgo de desempleo) Es de desear que los trabajadores a domicilio sean también indemnizados equitativamente por los gastos suplementarios vinculados directamente a la ejecución de su trabajo 19 Pese a las dificultades especiales inherentes, deberia hacerse un esfuerzo conjunto con la participación activa de los interlocutores sociales, en cada país en donde existe el trabajo a domicilio para promover la aplicación efectiva de tales medidas de protección Esto debe hacerse tanto en la etapa de los controles e inspecciones adecuados como de las medidas de registro y similares, como también mediante campañas informativas sobre los derechos y obligaciones respectivos de los trabajadores a domicilio y de sus empleadores 20 La Reunión tomó nota con interés y consideró que era de la mayor importancia la propuesta relativa a una serie de estudios sobre trabajo industrial a domicilio que la Oficina intenta lanzar y que pondrán de manifiesto la diversidad de las situaciones nacionales, tanto en los paises industrializados como en los países en desarrollo Trabajadores clandestinos y tráfico de mano de obra 21 Por definición, resulta difícil conocer la amplitud de tales fenómenos y controlar sus consecuencias Aunque resulta evidente que los problemas de la mano de obra clandestina y del tráfico de la mano de obra están lejos de ser exclusivos de la industria del vestido, ésta se resiente 1O0 Trabajo en régimen de subcontratación con esos abusos, especialmente cuando se trata de trabajadores migrantes en situación irregular o carentes de documentación Estas prácticas pueden conducir a un mayor trabajo a domicilio 22 Asimismo, se plantea aquí un problema de competencia desleal, además de las situaciones individuales o familiares sumamente penosas a que puede dar lugar 23 Debelían aplicarse sanciones adecuadas a quienes, a sabiendas, contribuyen a tales situaciones, como los intermediarios que se dedican al tráfico de la mano de obra 24 El trabajo clandestino debería ser objeto de una reunión de expertos y de un informe sobre la legislación y la práctica a fin de, eventualmente, inscribirlo en el orden del día de la Conferencia Inte~nacionaldel Trabajo 25 Con referencia a los trabajadores migrantes en situación irregular o carentes de documentación, una solución de los problemas considerados requiere la adopción de un conjunto coordinado de medidas económicas, sociales y políticas, como también la coope~ación de las autoridades de los países de origen y de países terceros, en consulta con los interlocutores sociales 26. La Reunión tomó nota con interés de la información suplementaria proporcionada por la Oficina sobre sus actividades relativas a los trabajadores migrantes en situación irregular o carentes de documentación, como también sobre la prevista reunión de expertos sobre este tema Consideró que estas actividades deberían continuarse enérgicamente, en cooperación con otras organizaciones internacionales y regionales, y que se debería convocar esta reunión de expertos dentro de la mayor brevedad posible DUODECIMA REUNION DE LA COMISION DE CONSTRUCCION, INGENIERIA CIVIL Y OBRAS PUBLICAS (Ginebra, 2 a 10 de diciembre de 1992) Resolución (núm. 102) sobre la mano de obra subcontratada y otras modalidades de empleo en la construcción La Comisión de Construcción, Ingeniería Civil y Obras Públicas de la Organización Internacional del Trabajo : Adopta, el 10 de diciembre de 1992, la siguiente resolución: La Comisión de Construcción, Ingenieria Civil y Obras Públicas de la Organización Internacional del Trabajo invita al Consejo de Administración de la Oficina Internacional del Trabajo a que: 1) Solicite de los Estados Miembros de la Organización Internacional del Trabajo que: a) velen por el cumplimiento de la legislación laboral apropiada en el caso de todas las modalidades de empleo, incluido el trabajo subcontratado, en sintonia con las normas de la OIT ; b) adopte las medidas necesarias para promover que: i) la legislación sobre condiciones del trabajo abarque también a los trabajadores subcontratados ; ii) las autoridades nacionales apropiadas controlen las condiciones de trabajo de los trabajadores subcontratados y hagan cumplir las leyes nacionales pertinentes; iii) los trabajadores en régimen de subcontratación tengan acceso a las condiciones normales de empleo 2) Solicite del Director General que aplique con diligencia las decisiones de la duodécima reunión de la Comisión de Construcción, Ingenieria Civil y Obras Públicas, y tome nota de lo muy urgente que se considera la cuestión de la mano de obra subcontratada REUNION TRIPARTITA SOBRE SEGURIDAD DEL TRABAJO EN INSTALACIONES PETROLIFERAS EN EL MAR Y ASUNTOS CONEXOS (Ginebra, 20 a 28 de abril de 1993) Conclusiones sobre seguridad del trabajo en instalaciones petrolíferas en el mar y asuntos conexos La Reunión trlpartita sobre seguridad del trabajo en instalaciones petroliferas en el mar y asuntos conexos : Adopta, el 28 de abril de 1993, las siguientes conclusiones Contratistas 10..En diversos grados de un país a otro y dentro de cada país, el trabajo en el mar lo realizan empleados de empresas contratistas. La forma en que éstas atienden a la seguridad viene a ser variable, pero es causa de preocupación, motivada por la índole riesgosa y a menudo itinerante de sus labores, su diversidad y dimensión y el grado de adecuación de la formación de su personal.. 11.. Los empleadores contratistas y sus organizaciones deberían proseguir los esfuerzos ya iniciados para mejorar la forma en que velan por la seguridad, señaladamente elaborando y aplicando directrices apropiadas y buenos usos, así como programas de formación y de certificación (es decir, de garantía de las competencias). Los empleadores que son empresas explotadoras deberian asimismo ponderar debidamente la forma de atender a la seguridad al examinar la conveniencia de recurrir a contratistas y al valorar y seleccionar a aquellos que vayan a utilizar, y deberían colaborar con ellos para mejorar el balance de la seguridad Los gobiernos deberían garantizar que en los sistemas de gestión de la seguridad de las empresas se establezca claramente el deslinde de la responsabilidad en materia de seguridad; la responsabilidad del sistema global de gestión de la seguridad debería incumbir a la empresa explotadora. Precio: 15,OO francos suizos ISBN 92-2-309894-7 If this address is wrong, please return this sheet to the sender or, at least, the part bearing the address Pour tout changement d'adresse, prihre de renvoyer a I'expéditeur cette feuille ou, du moins, la partie comportant I'adresse Sírvase indicar el cambio de dirección del destinatario y enviar esta hoja al remitente, o al menos la parte en que está escrita la dirección