Texto 1.- Actividad repobladora de Ordoño I (850-866). Muerto Ramiro, su hijo Ordoño le sucedió en el reino. Fue éste un varón modesto y paciente. Las ciudades desiertas por sus antepasados, es decir, León, Astorga, Túy y Amaya Patricia, las amuralló y puso puertas. Las pobló con gente tanto de entre los suyos como procedentes de España. Con los caldeos mantuvo guerra frecuentemente y siempre resultó vencedor. En los inicios de su reinado se rebeló la provincia de Vasconia, en donde irrumpió con un ejército. Al instante, desde otra parte, cayeron sobre él de improviso los enemigos sarracenos. Pero, con la ayuda de Dios, puso en fuga a los caldeos y sometió a su autoridad a los vascones. (Crónica de Alfonso III, en A. LOZANO y E. MITRE, Análisis y Comentarios de Textos Históricos. I. Edad Antigua y Media, p. 165). I. CLASIFICACIÓN DEL TEXTO. 1. Naturaleza del texto: Se trata de un fragmento de la Crónica de Alfonso III (publicado por A. LOZANO y E. MITRE en la página 165 del volumen I de su obra Análisis y Comentarios de Textos Históricos) en que se narran los hechos fundamentales del reinado de Ordoño I. Estas crónicas medievales solían escribirse por autores cortesanos para legitimar y exaltar la acción de los reyes. Se trata de un texto que pretende ser historiográfico de contenido político. 2. Circunstancias de tiempo y lugar: Es la última de las tres crónicas escritas durante el reinado de Alfonso III (866-909), inspiradas en la Crónica Profética (883), cuando, fortificada la frontera del Duero, está a punto de trasladarse a León la capital de la monarquía. 3. Calidad del autor: Se trata seguramente de un clérigo mozárabe emigrado de al-Andalus, casi los únicos que en esta época conservan aún la cultura latina y el recuerdo nostálgico de la monarquía de los godos, cuando la Iglesia, asociada al trono, gobernaba a los hombres y mujeres de Hispania. II. ANÁLISIS 1. Identificación, comprensión y explicación de términos • • • • • • Ramiro: Se refiere a Ramiro I (842-850), durante cuyo reinado tuvo lugar la batalla de Clavijo, donde la leyenda mítica cuenta que el apóstol Santiago, montado sobre un caballo blanco, condujo a la victoria a las huestes cristianas. Ordoño: Hijo del anterior, cuyos hechos narra el texto. Ciudades desiertas por sus antepasados: Se trata de las ciudades del limes romano citadas a continuación -León, Astorga, Túy y Amaya Patricia- cuyas defensas desmanteló Alfonso I llevándose luego a su población. Con gente tanto de entre los suyos como procedentes de España: Es decir, con montañeses y con mozárabes traídos de al-Andalus. Caldeos: Se utiliza el nombre bíblico de los enemigos de los israelitas, el pueblo de Dios, para designar a los musulmanes. La provincia de Vasconia: La monarquía asturiana intenta continuamente extender su dominio al territorio de los vascones, en el extremo oriental de la cordillera Cantábrica; pero ellos siguen resistiendo ante cualquier poder político exterior. Con la ayuda de Dios: La Crónica destaca siempre la intervención milagrosa de Dios en favor de las huestes cristianas. 2. Localizar y ordenar sistematicamente todos los conceptos: • • Ordoño ocupó y reconstruyó las ciudades del limes romano, el futuro Camino de Santiago, que su antecesor Alfonso I había destruido y despoblado. Las repobló con montañeses y con mozárabes procedentes de al-Andalus, método este que también había practicado Alfonso I y practicarán otros reyes. • Luchó victoriosamente contra los vascones, rebeldes al imperialismo asturiano, y contra los musulmanes, que atacaban el reino en demanda de tributos y sus victorias se ven favorecidas por el auxilio divino. 3. Resumir la idea fundamental: Se narra la política expansiva de Ordoño I que cuenta con la ayuda de Dios. III. COMENTARIO. 1. Explicar con detalle la situación histórica a que alude el texto. El reino de Asturias nace cuando algunos nobles godos, presumiblemente del partido rodriguista derrotado, se refugian con su comitiva de fieles en las montañas cántabras y establecen relaciones con la nobleza de linaje cántabra, ya en proceso de sedentarización. Acaso la fuerza que se deriva de sus fieles, armamento superior y conocimiento de la guerra los alzan a un caudillaje que les permiten dar forma política a las tradicionales correrías depredatorias de los montañeses y a su expansión demográfica y territorial manifestada en las últimas centurias. Aprovechando la retirada de los bereberes de la Meseta Norte, Alfonso I (739-757) sería el verdadero fundador del reino al desmantelar las ciudades y fortificaciones del viejo limes romano (hecho al que alude el texto), llevándose a los residentes para repoblar sus estados. En una segunda fase, fortalecido ya el reino, Ordoño I sube a la Meseta y ocupa y restaura estas ciudades. Finalmente Alfonso III (866-909), con la ocupación de Simancas, Zamora y Toro, lleva la frontera hasta el Duero, lo que permitió a su hijo García I (909-914) trasladar la capital a León (910), y transforma la monarquía, bajo inspiración mozárabe, adoptando el derecho visigodo, el legitimismo godo y el ideal de reconquista. Paralelamente a este proceso, la nueva nobleza terrateniente ha ido imponiendo unas relaciones de producción feudales a los montañeses libres, que se rebelan durante el reinado de Aurelio (768-774), y a los pueblos limítrofes, según indican las sucesivas rebeliones de galaicos y vascones. 2. Explicar el texto en relación a la situación histórica señalada: La Crónica es un característico instrumento ideológico que trata de legitimar la monarquía asturiana. Para conseguirlo 1) hace derivar su dinastía directamente de las dinastías godas; 2) eleva a hito fundacional la escaramuza de Covadonga, donde el auxilio divino se hace fundamental para la victoria cristiana, ya que los musulmanes son tantos que literalmente no cabrían en aquel angosto valle, manifestando así su apoyo a la causa de la nueva monarquía; 3) le propone como destino la recuperación para la Iglesia el territorio que, por sus pecados, perdieron los reyes godos, lo que da origen al mito de la “Reconquista” que sirve para justificar el imperialismo asturiano, y 4) enfatiza la acción de Alfonso I para destacar por contraste la política expansiva y reconstructora de Ordoño I y de Alfonso III. La inspiración clerical y eclesiástica del mito de la Reconquista se pone de manifiesto al preguntarnos por qué los hispanogodos tienen que recuperar Hispania frente a los moros y, en cambio, no se alzó ninguna voz para que los hispanorromanos recuperasen Hispania de los invasores godos, sino que el pertener al linaje de los godos se convierte en motivo de orgullo. En el presente fragmento se destaca el protagonismo del rey, con lo que se exalta la monarquía y la dinastía; se llama caldeos a los musulmanes, estableciendo así un paralelismo entre los asturianos y los israelitas, pueblo elegido de Dios, cuyo favor para con Ordoño I también se destaca, y se da por supuesta la sumisión debida de los vascones. 3. Conclusión El documento procede de una serie de crónicas que durante el reinado de Alfonso III pretenden demostrar el continuismo del reino Visigodo en el reino de Asturias. De hecho, la obra pretendía haber sido una continuación de la Historia de los godos del obispo Isidoro de Sevilla continuando hasta el final del reinado de Ordoño I. El relato entronca así con Covadonga y la Reconquista como mitos de nuestra historia, mitos que aluden a la recuperación providencial del “reino perdido y a la continuidad en el reino cristiano asturiano de la legitimidad del estado visigodo (el primero independiente en la “historia de España”, tras la interrupción que implica la invasión musulmana de 711.