TEMA 3. CONTRIBUACIÓN DE LAS DESAPARICIÓN DE LA POBREZA POLITICAS PÚBLICAS EN LA REFLEXIONANDO SOBRE LAS ALTERNATIVAS La transformación de una sociedad requiere un largo y profundo proceso que ha de iniciarse en el interior del capitalismo vigente ahora. Una de las preocupaciones principales de TAIFA en este Informe es tratar de proporcionar elementos sobre cómo avanzar hacia una transformación de la sociedad en la que vivimos hacia otra sociedad radicalmente alternativa, teniendo en cuenta donde nos encontramos ahora. Caminar hacia la utopía pero sin sueños falsos, sin esperanzas huecas, partiendo de posiciones muy realistas acerca de la situación actual de los agentes, de las fuerzas transformadoras y de los valores de la ciudadanía. Por ello nuestro interés en este trabajo no es proporcionar grandes modelos completos de lo que se pudiera hacer si se tuviera la fuerza social necesaria para ello construyendo un potente modelo teórico de una sociedad alternativa- sino reflexionar sobre cómo avanzar desde el modesto lugar en que nos encontramos aquí y ahora. En este Informe intentamos proporcionar ideas acerca de los aspectos esenciales de dicho proceso y como avanzar en el mismo. ¿Cómo trabajar desde aquí y ahora en cuestiones que surjan desde la base, respondan a los problemas actuales y sean posibles que, al mismo tiempo, sean genuinamente alternativas? CAUSA Y CONSECUENSIAS DE LA CRISIS La riqueza sostiene que hace 20 o 30 años las desigualdades entre las sociedades desarrolladas y las que no lo eran crecían mientras la desigualdad en el interior de una misma sociedad desarrollada disminuía, y creíamos que nuestro estado de bienestar habíamos solucionado el problema de la desigualdad. Pero, desde entonces, el interior de las sociedades ricas las desigualdades se están disparando. Hay informes que dicen que en EE UU estas desigualdades están llegando a niveles del siglo XIX. Y prosigue: Es 1 evidente que las clases medias se están empobreciendo. Podemos hablar más que de proletariado de precarizado, porque viven en una situación cada vez más precaria. Desde la última crisis, ha desaparecido la certeza de que, teniendo trabajo hoy, puedan tenerlo en el futuro. Finalmente señala que hoy sabemos que la felicidad no se mide tanto por la riqueza que uno acumula como por su distribución. En una sociedad desigual hay más suicidios, más casos de depresión, más criminalidad, más miedo. LOS DERECHOS ECONÓMICOS SOCIALES Y CULTURALES (ONU) En los 15 últimos años ha aumentado el interés por promover y proteger los derechos económicos sociales y culturales. Las organizaciones no gubernamentales (ONG), los medios académicos, los gobiernos y la judicatura están prestando cada vez más atención a la protección de esos derechos en sus programas, políticas y al tiempo que destacan la necesidad de respetarlos ya que ello resulta clave para garantizar un mayor disfrute general de los derechos humanos. El Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales hace surgir la esperanza en un renacimiento de la protección de tales derechos en los planos nacional e internacional. Eso es oportuno, habida cuenta en particular de que prosigue la denegación de los derechos económicos, sociales y culturales e incluso se está intensificando tanto en los países ricos como en los pobres. Lamentablemente la relativa relegación de los derechos en los programas de derechos humanos ha dado lugar a numerosos fallos e ideas erróneas al respecto. Además, si bien han desaparecido muchas de las razones de esa relegación las tensiones de la guerra fría, la incuria de los medios académicos, la falta de claridad sobre el contenido y la falta de un compromiso por parte de la sociedad civil. Persisten muchos de los equívocos. Por ello, el presente folleto informativo pretende desmitificar los derechos económicos, sociales y culturales y responder a algunas de las preguntas más frecuentes que se plantean a los expertos. Aunque en él se dan por sentados ciertos conocimientos básicos sobre los derechos humanos, debería ser de utilidad para la opinión pública en general. 2 HAY POBRES PORQUE HAY MUY, MUY RICOS Está de moda contar pobres. Las más renombradas instituciones públicas —Naciones Unidas, Banco Mundial, la UE— se preocupan de saber cuántos pobres hay, así como importantes instituciones privadas. Curiosamente, hay muchos menos estudios sobre la riqueza que sobre la pobreza. Los ricos ya saben quiénes son, y los pobres no tienen interés ni dinero para saberlo. Lo que es políticamente muy conveniente. Si los ricos son ‘invisibles’, como a veces se dice de los pobres, nadie se meterá con ellos. LA ESTRATEGIA DEL CAPITAL Las transformaciones que la crisis está facilitando en todo el mundo rico, —el ámbito de la ‘economía occidental’, el que hasta hace poco se consideraba dominador del mundo y que ahora ve peligrar su hegemonía frente al crecimiento de otros grandes países—, permiten a los grandes capitales no sólo recuperar sino incluso aumentar su tasa de beneficio así como luchar por sostener su hegemonía mundial. Para ello, frente a las crecientes contradicciones de un capitalismo senil (Samir Amin) se ha dispuesto a asestar un golpe durísimo a las clases populares, con quienes no tiene más remedio que compartir la riqueza que se produce. Al mismo tiempo, más en unos países que en otros, pero en general en todo el mundo desarrollado, las poblaciones están aguantando pasivamente este ataque: unos grupos no sienten todavía con suficiente fuerza su impacto negativo como para rebelarse, otros están anestesiados con las migajas que les llegan de un consumo acrecentado en comparación con sus situaciones anteriores y no quieren hacer nada que pueda ponerlo en peligro, otros, por fin, se debaten en la impotencia y la desesperación; actitudes todas que facilitan la consecución de los objetivos del capital. Hasta ahora la evolución de la crisis está llevando a una gran reestructuración del capitalismo global, que adquiere características específicas en los países ricos y cuyas repercusiones en los países de segundo o tercer nivel dentro de éstos —los denominados PIGS o PIIGS (Portugal, Irlanda, Grecia y España o los mismos más Italia en la segunda versión) y los países del Este de Europa— está arrasando con las condiciones de vida y trabajo y los derechos civiles de sus poblaciones. 3