Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL Tercera Reunión de trabajo REDIMA: modelización de la coordinación macroeconómica en el Grupo Andino y el Mercosur CEPAL, Santiago-Chile 31 de mayo y 1° de junio de 2004 CRECIMIENTO, EXPORTACIONES Y REDUCCIÓN DE LA PROBREZA Y DESIGUALDAD EN PARAGUAY José R. Molinas César Cabello (Paraguay) CRECIMIENTO, EXPORTACIONES y REDUCCIÓN DE POBREZA Y DESIGUALDAD EN PARAGUAY. José R. Molinas 1 César Cabello Con la colaboración de Thomas Otter. RESUMEN EJECUTIVO Este trabajo pretende contribuir a responder dos interrogantes: ¿Cuáles son las medidas de políticas que contribuyen a reactivar la economía y disminuir los niveles de pobreza y desigualdad en Paraguay? ¿Cuáles son las medidas de políticas más sostenibles para lograr estos objetivos? La metodología utilizada se basa en simulaciones contrafácticas realizadas con un modelo de equilibrio general computable (CGE) para el Paraguay, y con procedimientos de microsimulaciones estadísticas realizadas sobre la base de la encuesta integrada de hogares 1997/98. Estas microsimulaciones nos permiten conectar los resultados del modelo CGE con los hogares representativos de los distintos estratos de la población paraguaya. Se analizan un total de 17 escenarios que nos permiten evaluar el impacto de instrumentos de política económica en el área del comercio exterior, del mercado cambiario, del mercado de trabajo y del sector real; así como los ajustes de la economía ante determinados choques exógenos. Los resultados obtenidos señalan que políticas que promuevan los aumentos de productividad tanto en general como las focalizadas en el sector primario, que manejen prudentemente el tipo de cambio, así como la reducción arancelaria y un eventual subsidio a las exportaciones, lograrían disminuir los niveles de pobreza y desigualdad de los hogares paraguayos. Particularmente, medidas tendientes a aumentar la productividad de los sectores primarios parecen ocupar un lugar de privilegio dentro del conjunto de opciones de políticas para promover un crecimiento sostenible de los niveles de bienestar en Paraguay. 1 Miembros del Instituto Desarrollo. Deseamos agradecer la colaboración de Zulma Espínola, Margarita Molinas y a Valeria Piñeiro por su apoyo en todo lo referente a la SAM y el CGE. Agradecemos muy especialmente los comentarios de Sam Morley. Los errores y omisiones son responsabilidad exclusiva de los autores. 1 I. Introducción. ¿Cuáles son las medidas de políticas que contribuyen a reactivar la economía y disminuir los niveles de pobreza y desigualdad en Paraguay? ¿Cuáles son las medidas de políticas más sostenibles para lograr estos objetivos? En este trabajo pretendemos contribuir a responder estas preguntas a través de simulaciones contrafácticas realizadas con un modelo de equilibrio general computable (CGE) para el Paraguay, y con procedimientos de microsimulaciones estadísticas realizadas sobre la base de la encuesta integrada de hogares 1997/98. Estas microsimulaciones nos permiten conectar los resultados del modelo CGE con los hogares representativos de los distintos estratos de la población paraguaya. Se analizan un total de 17 escenarios que nos permiten evaluar el impacto de instrumentos de política económica en el área del comercio exterior, del mercado cambiario, del mercado de trabajo y del sector real; así como los ajustes de la economía ante determinados choques exógenos. Los resultados obtenidos nos señalan que políticas que promuevan los aumentos de productividad tanto en general como las focalizadas en el sector primario, que manejen prudentemente el tipo de cambio, así como la reducción arancelaria y un eventual subsidio a las exportaciones, lograrían disminuir los niveles de pobreza y desigualdad de los hogares paraguayos. Particularmente, medidas tendientes a aumentar la productividad de los sectores primarios parecen ocupar un lugar de privilegio dentro del conjunto de opciones de políticas para promover un crecimiento sostenible de los niveles de bienestar en Paraguay. La construcción del modelo CGE y la identificación de escenarios para realizar las simulaciones se basa en un acabado recuento de las características principales de la economía paraguaya. Para ello se procede a realizar un análisis de las características principales de la política económica en los noventa de los, y de los determinantes del crecimiento económico en el Paraguay tanto por el lado de la oferta como el de la demanda agregada. Se contextualiza igualmente la evolución del empleo y de la productividad del trabajo. Se descompone el crecimiento sectorial por sub-periodos en relación a la contribución de la economía doméstica, el efecto de la substitución de importaciones y el efecto del crecimiento de las exportaciones. Algunos de los elementos que se destacan en este recuento son: la contracción económica a partir de 1995, el papel expansivo de la absorción doméstica en la primera mitad de los noventa, la liberalización comercial y financiera a partir de 1989, el deterioro de los precios relativos de los sectores transables en los noventa, particularmente el del sector agrícola, el nulo aumento en la productividad total de factores de la economía a partir de 1982, la expulsión de trabajo del sector agrícola y la incapacidad de absorber eficientemente este excedente en el sector urbano, entre otros. Este trabajo se organiza de la siguiente forma: en la sección II, se realiza un recuento de la política económica en los noventa, los determinantes del crecimiento, el comportamiento del empleo y del sector exportador. En la sección III, Se presenta las características del modelo de equilibrio general computable utilizado, así como de la matriz de contabilidad social sobre la cual se basa, que fue construida para el presente ejercicio. En la sección IV, se presentan las simulaciones contrafácticas de políticas y choques exógenos. Se concluye en la sección V con algunas reflexiones sobre las implicancias de políticas. 2 II. Política Económica, Crecimiento, Empleo y el Sector Exportador. La tasa de crecimiento promedio en la primera mitad de los años noventa ha sido del 3,2% anual, similar a la prevaleciente en la década del ochenta (3,1%). Posterior a 1995, se produce un estancamiento económico, con niveles de crecimiento del producto del 1% anual, muy por debajo del crecimiento poblacional (2,6% anual). El crecimiento en la primera mitad de la década del noventa fue impulsado por la absorción doméstica (consumo de familias e inversión). En la segunda mitad, el escaso crecimiento se debió principalmente a la contracción de las importaciones. El multiplicador keynesiano promedio, propuesto en Morley y Vos (2000), ha disminuido considerablemente en la década del noventa, debido principalmente al aumento de la propensión a importar. La participación de las exportaciones en el Producto Interno Bruto (PIB) se ha duplicado en los noventa en relación a la década anterior. Cuadro 1 Paraguay: Descomposición del crecimiento por fuente de cambio 1980-99 Periodo Crecimiento % del PIB a.a. Cambio inducido por (E) en % Cambio inducido por (G) en % Cambio inducido por (I) en % Cambio inducido por (s) en % Cambio inducido por (m) en % Cambio inducido por (t) en % 1980-1990 3.1% 129.3% 24.0% 24.8% -57.3% -73.0% 14.3% 1990-95 3.2% 168.6% 35.0% 31.7% 248.8% -175.2% -41.1% 1995-99 1.0% -123.0% 12.0% -17.3% -58.4% 318.2% 19.5% Multiplicador (promedio del periodo) EN VALORES ABSOLUTOS (E-M) (I-S) (G-T) 2.86 1.91 1.86 2% 96% 2% 64.6% 25.0% 10.4% 1990-95 31.1% 8.7% 23.4% -1.0% 42.7% 11.2% 1995-99 31.1% 10.5% 22.0% -8.4% 48.5% 13.4% E/PIB G/PIB I/PIB S M T 44% 26% 30% Valores promedios del periodo 1980-1990 16.2% 7.1% 23.5% 6.8% 20.2% 9.2% Fuente: Elaboración en base a datos de Boletín de Cuentas Nacionales del BCP, 1980-1999, Estadísticas Económicas del BCP, varios números. 2.1. Las principales medidas de políticas y algunos efectos sobre la inflación, el sector externo y el sector financiero La política económica de los noventa ha utilizado la fijación del tipo de cambio como un ancla nominal al nivel de precios. Esta situación produjo una constante apreciación del guaraní que para el periodo 1990-99 alcanzaba aproximadamente el 21%. El control inflacionario fue, no obstante, relativamente exitoso. La inflación promedio entre 1996-1999 fue del 9% frente al 25% del periodo 1990-1992. La política de liberalización económica iniciada en 1989 consistió básicamente en la apertura del sector financiero y del sector externo (disminución de barreras a la importación y a entradas y salidas de capitales). Se produjo una significativa reducción arancelaria que de una tasa promedio del 54% en 1988 pasó paulatinamente a un arancel promedio del 9% en 1992. La liberalización financiera consistió en la reducción 3 del encaje legal, en la liberalización de las tasas de interés activa y pasiva, y en la autorización al sector público de depositar en bancos privados en lugar del banco central. Las medidas en el sector financiero generaron una mayor oferta crediticia, que fue destinada al financiamiento del consumo. El sobrefinanciamiento del consumo provocó un aumento insostenible de las tasas de morosidad en un segmento de la banca nacional, que contribuyó a la generación de una prolongada crisis financiera entre 1995-1997. La participación del comercio exterior como porcentaje del PIB aumentó significativamente en la primera mitad de los noventa, para luego disminuir paulatinamente en la segunda mitad de la década. En todos los años de la década del noventa se ha registrado un déficit comercial. Estos déficit se aceleraron particularmente en la primera mitad de la década. La reducción arancelaria y la sobrevaluación cambiaria desempeñaron sin lugar a dudas un papel importante en el aumento del déficit comercial. Las sostenidas reducciones arancelarias, sumadas a la apreciación del guaraní y a la reasignación crediticia desde el financiamiento de la producción al financiamiento del consumo, han tenido un tremendo impacto en el crecimiento de las importaciones. En efecto, la conjugación de estos tres factores, posibilitó una explosión del consumo de las familias que satisficieron sus demandas con bienes importados en forma creciente. La participación del consumo en el PIB aumentó del 74% en 1990 al 85% en 1995, y se mantenía aún en 82% en 1999. Igualmente, las importaciones como porcentaje del PIB aumentaron sostenidamente su participación del 31% en 1990 al 58% en 1995, para luego disminuir paulatinamente al 34% en 1999. Las exportaciones no se incrementaron al ritmo requerido para eliminar el impacto contractivo de las importaciones. Debido al considerable aumento del consumo, el ahorro de las familias decayó sostenidamente del 5,4% del PIB en 1990 a un ahorro negativo del 9% en 1994 y se mantuvo en niveles negativos por el resto de la década. El financiamiento de la inversión se realizó en gran medida con ahorros externos. La inversión interna bruta en capital fijo se expandió a una tasa del 2,7% anual en el periodo 1990-1995, para luego contraerse en el periodo 1995-99 a tasas anuales del -2,8%. La participación de inversiones en maquinarias y equipos tuvo una fuerte contracción en la inversión en capital fijo en favor a las inversiones edilicias en los noventa. Esta contracción relativa de inversiones en equipos y maquinarias afectaría adversamente la incorporación de nuevas tecnologías en los distintos procesos productivos, con impactos negativos en el aumento de la productividad de los sectores productivos. La inversión extranjera directa en Paraguay no ha jugado un papel preponderante en la economía en las últimas décadas. En el periodo 1990-99, la misma ha alcanzado un promedio de 1,7% del PIB. El destino de la inversión extranjera fue trasladándose desde los sectores productivos (agropecuario e industrial) que en 1991 componían 88% de las inversiones realizadas al de servicios (telecomunicaciones, comercio y finanzas) que en 1999 componían el 69% de las inversiones realizadas. Este cambio de composición de la inversión extranjera afectaría adversamente los niveles de productividad relativa de los bienes transables agrícolas e industriales. 2.2. Los términos de intercambio internos Las medidas de política económica adoptadas, en especial las relacionadas a la apreciación cambiaria, se manifiestan en la evolución de los términos de intercambio interno. Específicamente, los términos de intercambio internos (TII) entre los sectores transables y no transables se han deteriorado en los noventa en relación a la década anterior. El promedio de los TII entre los sectores transables y no transables para el periodo 1995-99 era en 12% inferior al promedio prevaleciente en el periodo 1980-90. Esta situación señala la sobrevaluación cambiaria existente en los noventa que ha afectado adversamente a los sectores de producción de bienes transables. 4 Cuadro 2 Paraguay: Términos de Intercambios Internos 1982=100 SECTORES PERIODOS 1980-1990 1990-1995 1995-1999 1980-1990 1990-1995 1995-1999 1980-1990 1990-1995 1995-1999 Transables/ No Transables Agricultura/ Agricultura/ Agricultura/ Deflactor PIB Transables No Transables 107.0 98.7 93.9 105.4 112.9 109.5 100.5 99.2 99.7 98.1 92.2 94.6 Ganadería / Ganadería / Ganadería/ Deflactor PIB Transables No Transables 93.5 99.9 97 84.7 83.6 84 82.3 77.1 79.2 Industria/ Industria/ No Industria/ Transables Transables Deflactor PIB 96.5 103.2 100.1 107.7 106.2 106.7 109.7 103.1 105.7 Fuente: Elaboración en base a datos de Boletín de Cuentas Nacionales del BCP, 1980-1999, Estadísticas Económicas del BCP, varios números. El sector agrícola presenta un deterioro de los TII en relación a los sectores no transables del 18% al comparar los promedios de los años 1995-99 con los del periodo 1980-90. Los TII del sector agrícola se han deteriorado también en relación al sector transable agregado. Los TII entre el sector ganadero y los no transables presentan un agudo deterioro del 22,8% al comparar los valores promedios en el periodo 1995-99 con los prevalecientes en el periodo 1980-90. Los TII para el sector industrial son los que se encuentran en mejor posición relativa con los demás sectores de la economía presentando en promedio una mejoría en la década del noventa con los observados en la década anterior. Esta situación indicaría que el sector industrial presenta menos flexibilidad de precios que los demás sectores transables, y tal vez el ajuste en el sector a ciertas políticas domésticas como la sobrevaluación cambiaria sea vía ajustes en cantidad y no precios relativos. 2.3. Expansión y contracción de la economía paraguaya: Análisis desde la oferta agregada. Hosono, Molinas y Cabello (2000) analizan econométricamente los determinantes del crecimiento económico utilizando el enfoque de la contabilidad del crecimiento. El modelo econométrico estima una función de producción. Es decir, predice el comportamiento del PIB en base a los cambios en los factores productivos (capital físico, capital humano, tamaño de la fuerza laboral, tierras arables) y en la variación de la tecnología. El capital físico se subdivide en stock de capital en comunicaciones, transporte, maquinarias y edificios. El capital humano en años de educación primaria, secundaria y terciaria por trabajador. La variación tecnológica (aproximada por el residuo de la regresión) ha demostrado depender de la inversión extranjera, de las exportaciones y de la participación del sector industrial en el PIB. En base al modelo estimado, los autores precisan las fuentes de crecimiento económico en Paraguay en distintos periodos. Analizan estas fuentes de crecimiento tanto a lo largo de toda la serie 1963-1997 como para subperiodos caracterizados por el efecto de Itaipú en la economía (1972-1981), el periodo hasta el fin de 5 Itaipú (1963-1981), el periodo post Itaipú y pre-liberalización económica (1982-1989), y el periodo post liberalización económica desde 1989 (Ibid).2 CUADRO 3: CONTRIBUCIONES DE LOS FACTORES ALCRECIMIENTO DEL PIB Periodo Tasa de Crec. Contribución % Promedio % de ∆ K del PIB Contribución Contribución % de ∆ H % de ∆ P Contribución Contribución % de ∆ R % de ∆ Tecnología 1963-1997 1963-1981 1972-1981 1982-1989 1989-1997 4,87% 6,78% 8,69% 2,4% 3,1% 0,31% 0,27% 0,05% 0,78% 0,21% 11,44% 11,73% 16,36% 19,81% 5,42% 71,70% 61,86% 66,15% 119% 79,2% 10,05% 7,32% 6,35% 20,88% 15,10% 6,47% 18,80% 11,07% -61,07% 0,05% K≡Capital físico, H≡Capital Humano, P≡Mano de Obra, R≡Tierra arable Fuente: Hosono, Molinas, Cabello (2000). Observando la última columna del Cuadro 3, constatamos que no ha existido crecimiento en la productividad total de factores en la economía paraguaya desde 1982. Durante los años 1982-1989 el PIB creció a una tasa promedio del 2,4%. En este periodo se observa una aguda involución tecnológica, con una contribución negativa del 61%. Este aumento de la ineficiencia anuló los efectos del crecimiento del capital físico (K) cuya sola contribución hubiese permitido crecer a una tasa superior de la observada. La contribución del crecimiento del capital humano fue del 0,78% y la de la población 21%. La contribución del crecimiento de las tierras de labor fue del 19,8%. Durante los años 1989-1997 el PIB creció a una tasa promedio del 3,1 %. El crecimiento del capital físico (K) contribuyó a este crecimiento del PIB en un 79,2%. La contribución del crecimiento del capital humano fue de sólo 0,21% mientras que la contribución del crecimiento poblacional fue del 15,1%. La contribución del crecimiento de las tierras de labor fue del 5,42% y la del cambio tecnológico fue de sólo 0,05%. Observamos que las contribuciones al crecimiento en los distintos subperiodos nos indican con claridad que es la participación del capital físico la que contribuye en mayor cuantía al crecimiento del PIB, y es el capital humano el que contribuye en menor cuantía. Dentro del capital físico, las inversiones en comunicaciones son las más rentables, socialmente. Por ejemplo, 70 millones de dólares en 1999 invertidos en comunicaciones permiten obtener una tasa de crecimiento del PIB de 0,78%. Para lograr un impacto similar de la inversión de 70 millones de U$S en comunicaciones sobre el crecimiento del PIB, se necesitan: 182 millones de US$ de inversión en transporte, 303 millones de US$ en maquinarias y 1092 millones de US$ en edificios. La escasa contribución del capital humano contrasta la experiencia de las economías del este asiático, donde el capital humano ha contribuido considerablemente al crecimiento. Para contextualizar esta escasa contribución del capital humano al crecimiento económico en el caso paraguayo, tres elementos serían importantes de destacar (Ibid). En primer lugar, esto nos podría estar indicando que la tasa de aumento del capital humano ha sido ínfima en comparación al crecimiento de otros factores y por eso no se refleja en una contribución importante al crecimiento en los periodos considerados Segundo, una economía basada en la agricultura tradicional, con gran parte del empleo urbano absorbido por el sector informal, ciertamente que no presenta las condiciones para aprovechar en todo su potencial productivo las mejoras en capital humano como lo harían economías con mayor componente de producción industrial. Finalmente, si la calidad de la educación no es buena, los aumentos en años de escolaridad promedio de la fuerza laboral no se reflejarían en grandes contribuciones al crecimiento económico. En cuanto a la contribución relativa de los distintos niveles de educación, cabe destacar que la inversión en educación primaria es la más rentable, seguido de la inversión en secundaria y luego en la terciaria. El cambio tecnológico contribuyó en un 6,5% al crecimiento del PIB en promedio en el periodo (19631997). Su contribución fue bastante importante en el periodo 1963-81. A partir de entonces deja de tener un impacto importante para explicar el crecimiento en Paraguay. El modelo estimado para explicar el cambio 2 Itaipú es una de las represas hidroeléctricas más grande del mundo, de propiedad binacional (Brasil y Paraguay) 6 tecnológico nos señala que aumentando la inversión extranjera como proporción de la inversión privada, un proxy de calidad de la inversión privada, se estaría incentivando la incorporación tecnológica. La mayor apertura externa vía exportaciones, induce al cambio tecnológico. Este resultado es consistente con lo observado en los países asiáticos del este, a pesar que la composición de las exportaciones paraguayas son esencialmente materias primas a diferencia de los productos manufacturados que componen principalmente las exportaciones de los países del este asiático. La mayor participación industrial en el PIB es conducente a una mayor innovación tecnológica. Un aspecto preocupante en la economía paraguaya es su inhabilidad de aumentar sus niveles de productividad. Señalamos anteriormente que no ha existido crecimiento en la productividad total de factores en la economía paraguaya desde 1982. Para profundizar el análisis sobre la inhabilidad de la economía paraguaya para aumentar sus niveles de productividad, analizaremos en la siguiente sección la evolución de la productividad del trabajo en los diversos sectores de la economía paraguaya. 2.4. Empleo y Productividad del trabajo. Para contextualizar los cambios en la productividad del trabajo, presentamos brevemente los cambios en la estructura de sectorial del empleo. Los sectores de mayores cambios en la estructura del empleo son: el sector agropecuario, comercio y finanzas. El sector agropecuario ha declinado en su absorción relativa de mano de obra de un 47% en 1982 a 37% en 1992 y 28% en 1997/98 y 1999 respectivamente. En contraste, los sectores de comercio y finanzas han aumentado su participación en la estructura de empleo del 11% en 1982 a 17% en 1992 y 27% en 1997/98. Cuadro 4 Paraguay: Estructura Sectorial del Empleo. (Población ocupada de 12 años y más). 1972 (porcentajes del total) Agricultura, Ganadería, Caza Minería Industrias Manufactureras Electricidad y Agua Construcción Comercio, Hoteles y Restaurantes Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones Financiero, Seguros, Bienes Inmobiliarios Servicios Comunales y Sociales 1982 1992 1995 1997-98 52.0% 47.0% 37.4% 39.1% 0.1% 0.1% 0.2% 0.2% 14.3% 13.0% 13.0% 11.3% 0.3% 0.3% 0.7% 0.4% 4.0% 7.1% 7.4% 5.2% 8.4% 9.0% 15.9% 20.9% 2.8% 3.2% 3.4% 2.9% 0.8% 1.9% 0.9% 2.6% 17.2% 18.3% 21.1% 17.5% 28.5% 0.2% 12.5% 0.6% 5.0% 24.1% 4.0% 3.4% 21.7% 1999 28.9% 0.2% 12.3% 0.5% 6.0% 21.3% 4.4% 3.6% 22.8% Fuentes: Censos Nacionales de Población y Viviendas 1972, 1982, 1992; Encuestas de Hogares 1995, 1997-98 y 1999. El Cuadro 4, nos indica que el sector agropecuario se encontraría expulsando trabajo. Una parte de esta oferta laboral estaría siendo absorbida por el sector comercial. Como veremos seguidamente, esta absorción no sería suficiente. En el cuadro siguiente, observamos un constante retroceso en los aumentos de la productividad global del trabajo a partir de 1982, lo cual es consistente con lo señalado en la sección anterior de estancamiento de la productividad total de factores desde 1982. 7 Cuadro 5: Cambios en la Productividad del Trabajo por Sectores (Tasas interanuales) 1972-82 1982-92 1992-97/98 na 1992-97/98a Total 4.8 -0.4 -5.7 -3.1 Bienes Agropecuarios Minería Industrias Electricidad y Agua Construcciones Comercio Finanzas Transporte Otros Servicios 4.2 14.9 4.8 13.0 9.2 3.1 5.3 4.7 3.4 2.0 -0.7 -0.9 -5.1 -2.9 -5.7 6.2 -0.1 -1.9 0.3 -5.0 -7.1 4.7 1.5 -15.0 -26.7 -8.1 -5.4 3.0 -2.4 -4.6 7.6 4.2 -12.7 -24.8 -5.7 -2.8 Fuente: Cuentas Nacionales, varios números; Censos nacionales y encuestas de hogares. Observación: Los datos de empleo de 1995 y 1997 corresponden a proyecciones realizadas en base a la encuesta integrada de hogares con cobertura y representatividad nacional. Sin embargo, al comparar las estimaciones poblacionales de las encuestas con las de los censos de 1982 y 1992, obtenemos tasas de crecimiento poblacionales exageradamente altas (por ejemplo del 6% anual para el periodo 1992-95). Debido a este motivo, procedimos a ajustar las estimaciones poblacionales de 1995 y 1997 basados en las tasas de crecimiento poblacional reportadas por la DGEEC que son del 2,7% y 2,6% anual para los periodos 1992-95 y 1995-97 respectivamente. Una vez ajustada la población, la población ocupada y el empleo sectorial se obtuvo respetando los ratios registrados en la encuestas de hogares. na= no ajustado, a= ajustado En el Cuadro 5 apreciamos que existen significativas contracciones en la productividad del trabajo en los sectores de servicios e industria, no así en la agricultura. La productividad del trabajo en los sectores industriales y comerciales han disminuido significativamente. La productividad en el sector financiero aumentó en el periodo 1972-92 pero tuvo una drástica reducción en el periodo comprendido entre 1992-97. El sector agropecuario presenta un leve pero sostenido aumento de su productividad a partir de 1972. Las disminuciones en la productividad global, en especial a partir de 1992, se explicarían en parte por la menor incorporación relativa de nuevas maquinarias y equipos. El crecimiento en la productividad agrícola se explicaría, por una parte, por la reducción del empleo en la producción algodonera lo que se traduciría en una menor absorción de la mano de obra campesina, y por otra parte de un aumento en la producción de soja, un cultivo mayormente mecanizado en Paraguay. 2.5. Descomposiciones sectoriales del crecimiento. En los noventa, los cambios en la estructura de la producción sectorial no han sido drásticos. El periodo de crecimiento moderado (1990-1995) tuvo sus motores en los sectores agropecuarios y de comercio y finanzas. Dentro del sector agropecuario, el sector agrícola ha fluctuado considerablemente en cuanto a tasas de crecimiento, en un rango de -4,4% en 1991 a 11,5% en 1995. La sobrevaluación del tipo de cambio afectó negativamente los precios pagados a los productores del algodón. A las dificultades de precios del algodón se le sumó la restricción crediticia a la producción algodonera, especialmente en el mercado informal (SCI, Noviembre 1995) y la plaga del picudo. El volumen de algodón producido para el periodo 1991-97 decreció a una tasa del 22% anual. La soja, el cultivo empresarial aumentó en 17% anual en el mismo periodo, contribuyendo al repunte de las exportaciones arriba mencionado. Las descomposiciones del crecimiento basados en Chenery (1976) y propuesto en Morley y Vos (2000), descomponen el crecimiento del producto en la contribución de la demanda doméstica (D), el efecto de la substitución de importaciones (IS), y el efecto del crecimiento de las exportaciones (E). Al nivel agregado, observamos que el crecimiento promedio del 3,1% anual del periodo 1980-90, se explica principalmente por el componente doméstico y la dinámica exportadora. En el periodo 1990-95, esta tendencia se acentúa, 8 siendo la fuente doméstica la principal fuente de crecimiento. En la segunda mitad de la década del noventa, un periodo de aguda desaceleración del crecimiento, fue la contracción de las importaciones la mayor fuente de crecimiento de la economía en este periodo. Cuadro 6: Descomposición del crecimiento 1980 - 1999 RAMAS Crecimiento a.a del PIB D IS E 1980 – 1990 1990 – 1995 1995 –1999 3.1% 3.2% 1.0% 90.3% 151.3% -23.5% -34.7% -141.4% 397.0% 44.4% 90.1% -273.5% Fuente: Banco Central del Paraguay, 2000. En el periodo 1990-95, el crecimiento del producto en el sector primario fue del 2,9% y el mismo se explica por la dinámica del sector exportador. El sector secundario ha presentado una situación similar, con una tasa de crecimiento del 2,5%, obtenida igualmente gracias a la dinámica del sector exportador. El sector terciario es el que ha presentado la tasa de crecimiento promedio más alta en este periodo (5% anual). Este crecimiento ha tenido un origen doméstico. Cuadro 7: RAMAS Descomposición del crecimiento 1990-1995 Crecimiento a.a del PIB D IS E 2.5% 2.1% 4.1% 3.2% -70.8% 460.3% 95.2% 151.3% -70.9% -551.7% 0.0% -141.4% 241.7% 191.4% 4.8% 90.1% 1. Sector Primario 2. Sector Secundario 3. Sector Terciario 4. PIB Total Fuente: Banco Central del Paraguay, 2000. En el periodo 1995-1999, ha sido el sector primario el que ha presentado la tasa de crecimiento mayor (2,5%). El mismo se ha debido a la expansión de la demanda doméstica y al efecto de substitución de importaciones. En este periodo se observa una aguda contracción de las exportaciones del sector, debido principalmente a la contracción de las exportaciones del algodón. El modesto crecimiento del sector secundario (0,3%), se debió igualmente a la contribución de la demanda doméstica y al efecto de substitución de importaciones, dado que las exportaciones del sector en este periodo se contrajeron. El crecimiento del sector terciario en este periodo (0,5%), se explica igualmente gracias al efecto de la substitución de importaciones. Cuadro 8 RAMAS Descomposición del crecimiento 1995-1999 Crecimiento a.a del PIB 1. Sector Primario 2. Sector Secundario 3. Sector Terciario 4. PIB Total 2.5% 0.3% 0.5% 1.0% D IS E 429.8% 56.0% -385.8% -5965.5% 6710.0% -644.5% 3071.4% -2934.3% -37.0% -23.5% 397.0% -273.5% Fuente: Banco Central del Paraguay, 2000. 9 2.6. La dinámica del sector exportador y las perspectivas de generación de empleo. Los principales productos de exportación en las décadas del ochenta y noventa han sido el algodón y la soja. La participación del algodón en el total de exportación ha descendido considerablemente en el periodo 19802000. La participación de la soja y de las maderas ha tenido un comportamiento más volátil. En el quinquenio 1995-2000 se observa un marcado aumento en la participación de la soja en el total de exportaciones, que contrasta con un agudo descenso en la participación del algodón. La razón principal de la disminución de la participación del algodón en el total de exportaciones es la disminución de los volúmenes de producción de este producto, fundamentalmente debido a la plaga del picudo y a la restricción crediticia mencionada arriba. Los precios internacionales del algodón se han mantenido relativamente estables en promedio durante la primera y segunda mitad de los noventa. Observamos igualmente que el tipo de cambio sectorial (por producto) del algodón ha presentado incluso una leve mejoría, en contraste con el tipo de cambio sectorial de la soja. CUADRO 9: Distribución del total de exportaciones por productos principales Periodo 1980-85 1985-90 1990-95 1995-2000 Algodón Soja 38.8% 34.8% 31.0% 15.1% 25.1% 31.8% 24.6% 35.4% Derivados Ganadería 2.7% 12.1% 13.8% 10.5% Aceites Maderas Otros TOTAL 6.6% 3.8% 6.6% 6.5% 10.8% 4.1% 7.6% 8.5% 15.9% 13.3% 16.4% 23.9% 100.0% 100.0% 100.0% 100.0% Fuente: Banco Central del Paraguay. La pérdida de participación del algodón en el total de exportaciones en contraste con el aumento de participación de la soja, presenta una desalentadora perspectiva de generación de empleos por el sector exportador. Según datos de la encuesta de hogares 1997/98, por cada millón de dólares producido en algodón se absorbe aproximadamente 1870 trabajadores/año, mientras que en soja se absorbe sólo 193 trabajadores/año. Los niveles de escolaridad de los trabajadores empleados en la producción de soja y algodón son similares y rondan en poco más de 4 años de escolaridad promedio por trabajador. III. El Modelo de Equilibrio General Computable. Para analizar el impacto que diferentes medidas de políticas podrían tener sobre los niveles de exportación, empleo y crecimiento del producto, se utilizará un modelo de equilibrio general computable (CGE, por sus siglas en inglés). El CGE utilizado en este ejercicio es una adaptación para Paraguay del modelo estándar del IFPRI (ver Lofgren, Harris y Robinson, 2001). La Matriz de Contabilidad Social (SAM). El modelo se basa en las actividades, los bienes, factores e instituciones de la matriz de contabilidad social (SAM, por sus siglas en inglés) del año 1998 para Paraguay, en millones de guaraníes corrientes. La SAM es una matriz cuadrada en la que cada cuenta se representa por una fila y una columna (Ibid: 3). Cada celda de la matriz señala los pagos de la cuenta de su columna a la cuenta de su fila. La SAM construida para este ejercicio, contiene ocho sectores de actividad e igual número de bienes. Los sectores de actividad que conforman la SAM son: (1) El sector primario (Agricultura, Ganadería, Caza, Minería, Selvicultura y Pesca), (2) Industrias Manufactureras, (3) Construcciones, (4) Electricidad y Agua, (5) Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones, (6) Comercio al por Mayor y Menor, Restaurantes y Hoteles, (7) Establecimientos Financieros, Seguros, Bienes Inmuebles y Servicios Prestados a las Empresas, y (8) Servicios Comunales, Sociales y Personales. Se considera que cada sector de actividad produce un solo bien agregado, por lo que existe igual cantidad y tipo de bienes que los sectores de actividad descriptos. 10 Existen en la SAM dos factores de producción: capital y trabajo. No se considera el factor tierra. Existe un solo tipo de capital y ocho tipos diferentes de trabajo. Los ocho tipos de trabajo se obtienen de la combinación de 3 criterios de segmentación de la fuerza de trabajo: (i) Según sexo: Hombre y Mujer, (ii) Según Calificación: Calificado (más de 9 años de escolaridad) y No Calificado (menor o igual a 9 años de escolaridad), y (iii) Según categoría ocupacional: Formal (obreros público y privado, empleados público y privados, y empleadores), e Informal (familiar no remunerado, empleado doméstico, y trabajador por cuenta propia). En cuanto a las instituciones, la SAM incluye al gobierno, la empresa, los hogares, y el resto del mundo. Existe un solo tipo de gobierno, empresa y resto del mundo, pero existen cuatro tipos diferentes de hogares. Los criterios de segmentación de los hogares son dos: (i) el área: urbano y rural, y (ii) el idioma predominante del hogar: Guaraní y otro idioma (castellano, guaraní y castellano, e idiomas extranjeros). Existen tres grandes categoría impositivas: (i) Los Impuestos Directos: que incluyen el impuesto a las ganancias de empresas, y los aportados por los hogares como ser los pagos por seguro social e impuestos inmobiliarios, tasas, y también se consideran como tales en la SAM las transferencias corrientes de los hogares al gobierno, (ii) Los Impuestos Indirectos: incluyen al Impuesto al Valor Agregado (IVA) y a los impuestos selectivos al consumo, y (iii) Los Aranceles. En la SAM se incluye igualmente al margen de comercialización como costos de transacciones en la economía, relacionados a las ventas domésticas, las importaciones y las exportaciones. Se incluye además, cuentas de ahorro-inversión y de cambios en inventarios. En la construcción de la SAM para este ejercicio, se ha utilizado intensivamente todas las fuentes de datos disponibles que nos permita representar comprensivamente a la economía paraguaya. Estas fuentes incluyen a: (i) La Encuesta integrada de Hogares 1997-98, (ii) La Matriz de Demanda Intermedia (en construcción) del Banco Central (BCP), (iii) La Matriz de Demanda Final-BCP, (iv) La Matriz de Oferta Total-BCP, (v) Los Datos impositivos desagregados por tipo de impuestos y sector, para los grandes contribuyentes del Ministerio de Hacienda, (vi) La Balanza de pagos desagregada, del departamento de Economía Internacional del BCP, y (vii) El Boletín de Cuentas Nacionales del BCP. La metodología de compilación de información ha sido la siguiente: Se consideró como elemento unificador para todas las cuentas, excepto para las del sector externo, al Boletín de Cuentas Nacionales. Para el sector externo, toda la información se ajustó de acuerdo a los datos de la balanza de pagos. Todas las fuentes de información adicional, proveyeron los coeficientes para desagregar las cuentas nacionales agregadas. Para obtener una SAM final, ajustada y balanceada, se utilizó el método de entropía cruzada en la forma sugerida por Robinson et al, 1999. El Modelo de Equilibrio General Computable (CGE). El modelo CGE es un conjunto de ecuaciones simultáneas que define el comportamiento de los distintos actores en una economía y explica todos los pagos registrados en la SAM (Lofgren, Harris y Robinson, 2001: 8). En este trabajo se utiliza el modelo estándar del IFPRI con los cierres del mercado de factores y de los balances macroeconómicos que mejor describen a la economía paraguaya. Estos cierres del modelo, al igual que el conjunto de elasticidades utilizadas se describen en el Anexo. IV. Exportaciones, Empleo y Crecimiento: Simulaciones contra-fácticas de políticas y choques exógenos. Se utiliza el modelo de equilibrio general computable recientemente descrito así como procedimientos de microsimulación estadística para analizar el impacto sobre las variables macroeconómicas, los niveles de pobreza y distribución del ingreso de diversos escenarios alternativos. Macrosimulaciones: Con el modelo CGE, se procedió a simular 14 escenarios contrafácticos, al que diversas políticas alternativas o choques externos podrían conducir. Los escenarios considerados simulan específicamente: 11 Seis tipos de políticas: !" Variación de aranceles (-50%, y +50%). !" Un subsidio a las exportaciones (+10%) !" Plena vigencia de Acuerdos de Libre Comercio (ALCA y OMC) !" Manejo del tipo de cambio (Apreciación y Depreciación del 10%) !" Aumento exógeno de ingresos laborales nominales (+10%) !" Promoción de cambio tecnológico (Productividad Total de Factores (PTF) general +5% y focalizada al sector primario +10%) Choques exógenos: !" Aumento de los precios de importación (+10%) !" Reducción de los precios de exportación (–10%) !" Aumento de ahorros externos (+10%) Simulación Combinada: !" Aumento de aranceles (+500%) + disminución de PTF (-5%). Esta combinación intenta aproximarnos a un escenario pre-liberalización económica (pre-1989). El aumento arancelario de 500% trata de revertir la serie de reducciones arancelarias observadas en el periodo 1989-1992, mencionado arriba. Para cada escenario se reportan los siguientes resultados macroeconómicos: PIB, absorción, los distintos componentes del gasto, los tipos de cambio real y nominal, los ahorros privados, del gobierno y externo, el nivel de actividad doméstica por rama, el empleo por tipo de trabajador, y el consumo por tipo de hogar. Las microsimulaciones: Los resultados de empleo por tipo de trabajador y sector de actividad que resultan del CGE, se utilizan como base para realizar las microsimulaciones que nos permitirán descomponer el impacto de las medidas de políticas y los choques externos sobre los niveles de pobreza y desigualdad, de acuerdo a la metodología explicitada en Vos (2002). Esta técnica de microsimulaciones nos permite identificar que cambio específico en el mercado laboral (como los cambios de la tasa de participación, de empleo, del empleo por sectores, por tipo de ocupación y por nivel educacional) es el que tiene el mayor impacto en los niveles de pobreza y distribución del ingreso al nivel de los hogares. Es decir, nos permite determinar la importancia relativa de los efectos de diversos aspectos del mercado laboral y de las características de los hogares sobre la pobreza y la desigualdad. Estas microsimulaciones utilizan el rango completo de la distribución de ingresos y su relación con los parámetros del mercado laboral. Este ejercicio se realiza utilizando la Encuesta Integrada de Hogares (EIH) 1997/98. La base de datos original de la EIH se transforma de acuerdo a los cambios en la estructura del mercado laboral. Esta estructura se puede definir en términos de la decisión de participar, del desempleo, así como la estructura del empleo sectorial, por nivel de calificación y de las remuneraciones, así como el nivel general de remuneraciones. Sólo para dos escenarios se han simulado cambios en la tasa de participación. En estos dos escenarios (aumento de la productividad total de factores en 5% en todos los sectores y sobrevaluación del 10%), la tasa de empleo aumentaba más allá de la que el número de desempleados podía satisfacer. Por ello se ajustó la tasa de participación de manera tal que pudiesen satisfacer la expansión del empleo consignada por el CGE en estos dos escenarios contrafácticos. El cierre utilizado en el mercado de factores que presume el desempleo de trabajo, implica que la remuneración al trabajo se mantiene constante. Por lo tanto, en este ejercicio no se analiza cambios potenciales en la estructura de remuneración. Las simulaciones contrafácticas se llevan a cabo para obtener una nueva distribución del ingreso en el cuál uno o varios parámetros de la estructura del mercado laboral son alterados (Ibid). El problema básico radica en determinar cuál serían los niveles de pobreza y desigualdad si el mercado de trabajo estuviese 12 determinado por un nivel de empleo, una estructura de empleo sectorial, de categoría ocupacional y de calificación distinta a la observada en la realidad. Los efectos de estos cambios de estructura pueden ser analizados en forma aislada o en forma secuencial (acumulativa). El resultado de las microsimulaciones nos indicará cuáles serían los niveles de pobreza y desigualdad esperados bajo ciertos escenarios de políticas o bajo ciertos choques exógenos. En las microsimulaciones realizadas se estiman, para todos los escenarios, el impacto en los niveles de pobreza y desigualdad producidos por cambios en la tasa de empleo, en la estructura de empleo por sectores, por tipo de ocupación y por nivel educacional que resulten de los escenarios contrafácticos generados por el CGE. Estos cambios se realizan en la secuencia mencionada. La selección de los individuos que cambiarán de situación ocupacional o de un segmento laboral a otro en la base de datos original (para reflejar los cambios en los escenarios contrafácticos), se realiza en forma aleatoria. El método supone que las decisiones de ocupación pueden ser aproximadas por un proceso aleatorio. Se aplica un procedimiento de tipo Monte Carlo, donde se genera los rangos de confianza y se reporta el valor promedio de 30 corridas (repeticiones) con diferentes asignaciones aleatorias. Como resultados de las microsimulaciones se obtienen los índices de incidencia, brecha y severidad de Pobreza, así como índices de Gini tanto con los ingresos familiares per capita como con los ingresos laborales. El índice de incidencia de pobreza (Po) refleja la fracción de la población por debajo de la línea de pobreza. Este índice no considera la severidad de la pobreza y se mantiene inalterada por políticas que puedan volver más pobres a los pobres (Deaton 1997:145). El índice brecha de pobreza (P1) corrige esta situación ponderando la contribución a la pobreza agregada de acuerdo a la severidad de pobreza de cada individuo. Una limitación de esta medida es que las transferencias entre pobres no afecta a este índice (idem: 146). El índice Foster, Greer y Thorbecke –FGT- pondera el grado de pobreza de acuerdo al valor de α elegido. Cuanto mayor sea este valor, el índice penaliza más severamente la brecha de pobreza. Para un valor de α = 0, el resultado es el mismo que el índice de incidencia de pobreza, con un α = 1 se replica los resultados del índice brecha de pobreza y con un valor de α=2, (P2), se obtiene un índice que es sensible a las transferencias entre pobres (idem:147). Los resultados de las microsimulaciones se comentarán en el análisis de cada escenario de política económica a ser simulada. Se identificará la variación relativa del índice de incidencia de pobreza en relación a los índices de brecha y severidad de pobreza, de tal forma de identificar cómo ha afectado esa medida de política a los más pobres entre los pobres. Se analizará también la variación relativa en la distribución del ingreso laboral y del ingreso per cápita, de forma a conocer si los cambios en la distribución del ingreso per cápita se deben principalmente a cambios producidos en el mercado laboral o en los ingresos de capital. Se identificará igualmente cuál es el cambio en el mercado laboral (variación en la tasa de desempleo, en la estructura sectorial del empleo, en la estructura ocupacional y en la estructura por nivel de calificación) que mayor impacto tiene sobre los niveles de pobreza (P0) y desigualdad (Gini del ingreso per cápita). 13 Cuadro 10: Resultados Simulaciones Contrafácticas (Paraguay) Todas las simulaciones se presentan como desviaciones (en porcentaje) de la base. Políticas Reducción aranceles (-50%) Aumento ingresos laborales nominaesl (+10%) Aumento product. total (+5%) Aumento product. de Sectores Primarios (+10%) -3,7 3,5 -6,5 8,7 -9,3 10,2 -6,7 8,8 +10% devaluación del tipo de cambio 0,3 0,5 0,7 -0,5 Escenario ALCA Principales indicadores macroeconómicos - Valores reales PIB 1,1 -1,1 Absorción -1,7 1,8 -10% apreciación del tipo de cambio Escenario OMC Aumento aranceles (+50%) Simulación combinada Choques exógenos Subsidio a exportación (10%) Aumento precio importacione s (+10%) Caída precios de exportación (-10%) 1,9 1,3 -5,0 -1,3 0,8 -15,9 1,9 -0,9 -8,4 0,8 2,1 -19,1 Aumento ahorros externos (+10%) Pre-liberalización (Combinación aranceles +500% y product. -5%) Consumo de hogares 1,9 -1,7 0,7 -0,3 -9,1 9,9 -6,7 8,8 1,8 -0,9 -8,2 0,8 2,0 -19,1 Inversión 1,6 -1,5 0,7 -1,8 -10,5 11,6 -6,6 8,9 2,2 -0,8 -9,7 0,7 2,4 -18,4 Consumo del gobierno 2,7 -2,5 0,8 1,5 -9,1 9,8 -7,7 9,4 2,1 -0,9 -8,2 0,8 2,0 -23,9 Exportaciones 0,1 -0,1 0,0 4,0 11,3 -11,0 -5,5 8,1 1,7 12,0 -0,7 -11,6 -2,3 -8,7 Importaciones 2,4 -2,1 1,0 -0,6 -11,2 13,7 -6,5 8,7 1,8 0,1 -11,4 -0,1 2,7 -20,6 Tipo de cambio real -0,6 0,6 -0,2 5,4 13,7 -13,0 0,1 11,0 -2,6 -2,8 4,3 10,0 -10,0 Tipo de cambio nominal Indice de precios de exportación 4,7 Indice de precios de importación 5,1 Indice de precio domésticos de bienes no transables 0,6 -0,6 0,2 Términos de intercambio -0,4 -2,1 -10,0 10,0 -3,2 3,5 -0,1 -3,2 -0,4 -9,1 -4,1 -10,0 Porcentajes del PBI nominal Inversión 0,2 Ahorro privado (de hogares y empresas) Ahorro externo 1,3 -0,2 0,1 0,3 -0,8 0,5 -0,1 0,1 -0,6 0,5 1,1 0,1 0,1 -0,1 1,7 8,5 -6,9 2,5 -2,8 -0,6 4,0 1,4 -3,3 -1,6 4,6 -1,2 0,6 1,0 -9,3 7,3 -2,3 2,5 0,6 -2,6 -0,5 4,7 1,7 -11,0 -3,6 1,9 0,1 0,5 Déficit en balanza comercial -0,1 0,1 0,2 -0,5 Ahorro del gobierno (negativo del déficit) -1,1 0,9 -0,4 -2,5 Ingresos por derechos de importación -1,2 1,0 -0,4 -2,5 0,1 -0,1 0,1 0,1 -0,1 Ingresos por impuestos directos -0,3 0,1 -0,2 0,3 0,1 -0,1 -1,2 -5,0 3,2 5,7 -2,0 -0,3 -0,3 0,7 0,2 0,1 6,4 0,1 0,1 -0,1 5,5 Nivel de actividad doméstica (valor agregado) – Ramas de Actividad Primario 0,7 -0,7 -0,4 1,2 -3,3 3,9 -7,2 9,1 4,2 1,1 -4,5 -0,9 0,8 -13,2 Manufacturero 0,8 -0,8 0,3 0,7 -2,6 3,0 -5,4 8,1 1,4 1,3 -4,0 -1,3 0,6 -13,0 Construcciones 1,6 -1,5 0,5 0,4 -6,5 7,2 -7,8 9,5 2,0 0,0 -6,5 0,0 1,5 -18,5 Electricidad 1,1 -1,0 0,3 -0,7 -5,9 6,5 -8,5 9,9 2,0 0,4 -6,1 -0,3 1,3 -15,1 Transporte 1,0 -0,9 0,4 -0,4 -4,5 5,0 -7,9 9,5 1,9 0,9 -5,3 -0,8 1,0 -14,6 Comercio 0,9 -0,8 0,5 0,0 -1,6 2,2 -5,7 8,2 1,3 2,1 -3,9 -1,9 0,4 -13,4 Finanzas 1,3 -1,2 0,5 -0,1 -5,5 6,1 -7,9 9,6 1,9 0,6 -6,0 -0,5 1,2 -16,8 Servicios 1,2 -1,1 0,4 0,0 -2,2 3,1 -7,3 9,2 1,7 2,4 -4,7 -1,9 0,6 -16,1 15 Políticas Reducción aranceles (-50%) Aumento aranceles (+50%) Simulación combinada Choques exógenos Escenario ALCA Escenario OMC +10% devaluación del tipo de cambio -10% apreciación del tipo de cambio Aumento ingresos laborales nominaesl (+10%) Aumento product. total (+5%) Aumento product. de Sectores Primarios (+10%) Subsidio a exportación (10%) Aumento precio importacione s (+10%) Caída precios de exportación (-10%) Aumento ahorros externos (+10%) Pre-liberalización (Combinación aranceles +500% y product. -5%) -7,3 9,2 1,7 3,8 -11,1 -3,4 1,8 -23,0 -11,1 -3,3 1,8 -22,9 -21,3 Empleo por tipo de factor (Remuneración) – Factores de Producción Hombre-Calificado-Asalariado 2,5 -2,3 0,8 0,9 -7,4 9,3 Hombre-No Calificado-Asalariado 2,5 -2,3 0,8 0,9 -7,4 9,2 -7,2 9,1 1,7 3,8 Mujer-Calificada-Asalariada 2,3 -2,1 0,7 0,7 -7,2 8,9 -5,9 8,3 1,6 3,1 -10,3 -2,7 1,7 Mujer-No Calificada-Asalariada 2,1 -2,0 0,6 0,5 -7,3 8,7 -4,8 7,6 1,8 2,4 -9,6 -2,1 1,7 -19,8 Hombre-Calificado-No Asalariado 2,1 -2,0 0,6 0,6 -7,1 8,6 -4,9 7,7 1,5 2,6 -9,7 -2,3 1,7 -20,2 Hombre-No Calificado-No Asalariado 2,3 -2,1 0,7 0,7 -7,3 8,9 -6,1 8,4 1,6 3,2 -10,4 -2,8 1,7 -21,5 Mujer-Calificada-No Asalariada 2,2 -2,1 0,6 0,8 -6,8 8,5 -5,9 8,3 0,7 3,3 -10,1 -2,9 1,6 -21,1 2,5 Bienestar a nivel de los hogares - Consumo real total de hogares -2,3 0,7 1,0 -7,2 9,1 -7,5 9,3 1,2 4,1 -11,2 -3,6 1,8 -23,2 Hogares Urbanos: Habla Guaraní 1,9 -1,8 0,7 -0,5 -9,4 10,3 -6,7 8,8 1,8 -0,5 -8,7 0,5 2,1 -19,8 Hogares Rurales: Habla Guaraní 2,0 -1,9 0,7 -0,1 -9,5 10,7 -6,8 8,9 1,7 0,4 -9,3 -0,4 2,2 -20,7 Hogares Urbanos: Habla Hispana 1,7 -1,6 0,7 -0,8 -9,4 10,0 -6,7 8,8 1,9 Mujer-No Calificada-No Asalariada -1,7 -8,0 1,4 2,1 -19,1 1,9 -1,8 0,7 -0,3 -8,7 9,7 -6,5 8,5 1,7 0,0 Microsimulaciones - Efecto final de la secuencia de cambios en el empleo, la estructura sectorial, de tipo de ocupaciones, y de nivel de calificación sobre la pobreza y la desigualdad -8,6 0,0 2,0 -19,5 Incidencia de pobreza (P0) -2,44 1,26 0,71 0,11 4,78 -10,33 12,36 -10,51 -2,80 -4,02 7,28 2,95 -1,51 8,97 Brecha de pobreza (P1) -2,60 1,01 -0,40 -1,42 5,12 -12,55 10,43 -12,64 -2,32 -4,32 7,36 2,39 -1,71 12,22 Severidad de pobreza (P2) -2,72 0,88 -1,06 -1,63 5,17 -13,90 10,49 -14,11 -1,93 -4,69 7,03 2,47 -1,79 14,95 Desigualdad de distrib. de ingreso per cápita (Gini) -0,60 0,32 0,42 -0,30 1,43 -2,98 1,46 -3,02 -0,63 -1,06 2,12 Hogares Rurales: Habla Hispana 0,23 -0,38 1,21 -0,75 -0,21 -0,10 -0,60 0,00 -1,40 -1,42 -1,32 -1,19 -0,81 0,65 Descomposición de las microsimulaciones en efectos secuenciales de cambios en el empleo, la estructura sectorial, de tipo de ocupaciones, y de nivel de calificación sobre la incidencia de la pobreza (P0) -0,81 -0,69 -0,97 U (*) -1,10 1,82 1,23 0,11 5,99 -6,70 13,35 -6,82 -0,74 -2,16 8,53 3,18 -0,47 10,13 U + S (*) -1,52 1,75 1,07 0,42 4,89 -7,57 12,95 -7,46 -1,55 -2,74 7,69 3,04 -0,71 8,95 U + S + O (*) -2,11 1,49 0,81 0,18 4,91 -9,61 12,30 -9,60 -2,66 -3,66 7,74 2,90 -1,25 9,00 U + S + O + M (*) -2,44 1,26 0,71 0,11 4,78 -10,33 12,36 -10,51 -2,80 -4,02 7,28 2,95 -1,51 8,97 Desigualdad de distribución de ingreso laboral (Gini) Descomposición de las microsimulaciones en efectos secuenciales de cambios en el empleo, la estructura sectorial, de tipo de ocupaciones, y de nivel de calificación sobre la desigualdad de la distribución del ingreso per cápita (Gini) U (*) -0,23 0,38 0,25 -0,03 1,71 -1,52 1,88 -1,55 -0,01 -0,52 2,24 0,58 -0,09 2,03 U + S (*) -0,34 0,27 0,38 -0,05 1,36 -1,91 1,56 -1,93 -0,15 -0,62 1,97 0,56 -0,17 1,12 U + S + O (*) -0,49 0,27 0,42 -0,34 1,43 -2,58 1,44 -2,64 -0,32 -0,92 2,10 0,41 -0,31 1,01 -0,63 -1,06 2,12 0,23 -0,38 1,21 U + S + O + M (*) -0,60 0,32 0,42 -0,30 1,43 -2,98 1,46 -3,02 (*) U = tasa de empleo; S = estructura de empleo por sectores; O = estructura ocupacional; M = estructura ocupacional por nivel de educación . 16 El impacto de las variaciones en los niveles arancelarios. Observamos que las reducciones arancelarias expanden el PIB.3 En particular, expanden el consumo privado, la inversión, el consumo del gobierno, y las importaciones. Las exportaciones también se expanden ligeramente. La expansión se produce liderada por el aumento de la absorción interna que prima sobre el efecto contractivo de las exportaciones netas. El índice de precios domésticos de bienes no transables aumenta ligeramente. El tipo de cambio real tiende a apreciarse. Para una disminución arancelaria del 50%, el déficit en balanza comercial disminuye ligeramente como porcentaje del PIB nominal. El ahorro externo aumenta con las disminuciones arancelarias. No se observa variación en la participación del ahorro privado en el PIB, en términos nominales. El ahorro del gobierno disminuye con la reducción arancelaria. El efecto expansivo de la reducción arancelaria se distribuye a través de todos los sectores. Es el sector de construcciones el que mayor expansión presenta. Son las mujeres no calificadas y no asalariadas y los hombres asalariados los que mayor expansión del empleo presentan. Son las mujeres no calificadas pero asalariadas las que menor expansión del empleo presentan conjuntamente con los hombres calificados y no asalariados. En cuanto al consumo real, son los hogares rurales de habla guaraní los que aumentarían en mayor grado sus niveles de consumo a raíz de una disminución arancelaria. Por otra parte, son los hogares urbanos de habla hispana los que aumentarían su consumo en menor medida en caso de una reducción arancelaria. Las reducciones arancelarias disminuyen los niveles de pobreza y mejoran la distribución del ingreso. Los índices de severidad y brecha de pobreza disminuyen en un porcentaje ligeramente mayor que la incidencia de pobreza, indicando que los más pobres entre los pobres se benefician más. El mayor impacto para la reducción de la incidencia de pobreza tiene la reducción del nivel de desempleo.4 La desigualdad en la distribución de los ingresos laborales disminuye en mayor porcentaje que la desigualdad del ingreso per cápita. Igualmente es la disminución del desempleo el factor en el mercado laboral que mayor impacto tiene. El impacto de las variaciones en la productividad total de factores. Un aumento de la productividad total de factores (PTF) expande el PIB. En particular, crecen el consumo privado, la inversión, el consumo del gobierno. Las exportaciones netas se contraen ligeramente. Esta contracción es mayor en el aumento de la productividad total de factores en toda la economía, en comparación con el aumento focalizado en los sectores primarios. El ahorro externo aumenta con el incremento de la PTF. El aumento del ahorro externo es mayor en el escenario de incremento de la PTF en toda la economía en comparación con el escenario de incremento focalizado a los sectores primarios. El ahorro privado se contrae en los escenarios de incremento de la PTF. En el escenario de aumento generalizado de la PTF, es el sector de electricidad el que mayor expansión presenta. En este escenario, son las mujeres no calificadas y no asalariadas las que mayor expansión del empleo presentan. Igualmente, son las mujeres no calificadas pero asalariadas las que menor expansión del empleo presentan. En el escenario de aumento de la PTF focalizado en el sector primario, es lógicamente el sector primario el que mayor expansión presenta. En este escenario de incremento focalizado de la PTF, son las mujeres no calificadas y asalariadas las que mayor expansión del empleo presentan. Por otra parte, son las mujeres calificadas pero no asalariadas las que menor expansión del empleo presentan. En cuanto al consumo real, en el escenario de aumento generalizado de la PTF, son los hogares rurales de habla guaraní los que aumentarían en mayor grado sus niveles de consumo. En este escenario, son los 3 En esta sección se discute las reducciones arancelarias. Los cambios observados en los aumentos arancelarios son muy similares pero con signos cambiados. 4 Por motivos de espacio comentaremos sólo los cambios en la incidencia de pobreza y en la desigualdad de los ingresos per cápita. Los impactos relativos en el mercado laboral tienden a tener efectos ordinales similares entre los distintos índices de pobreza. 17 hogares rurales de habla hispana los que aumentarían su consumo en menor medida en caso de un aumento de la productividad. En el escenario de aumento de la PTF en los sectores primarios, el consumo real de los hogares urbanos de habla hispana es el que aumenta en mayor cuantía. Un aumento de la PTF, tanto en general como focalizado en los sectores primarios, disminuye los niveles de pobreza y mejora la distribución del ingreso tanto per cápita como de los ingresos laborales. Para el caso de un aumento de la PTF generalizado en 5%, los índices de severidad y brecha de pobreza disminuyen en un porcentaje mayor que la incidencia de pobreza. Es decir, los más pobres entre los pobres se benefician más. El mayor impacto para la reducción de la incidencia de pobreza tiene la reducción del nivel de desempleo. La desigualdad en la distribución de los ingresos laborales disminuye en menor porcentaje que la desigualdad del ingreso per cápita, indicando que los retornos al capital estarían contribuyendo significativamente para la menor desigualdad del ingreso observada. Igualmente es la disminución del desempleo el factor en el mercado laboral que mayor impacto tiene sobre la desigualdad. Para el caso de un aumento de la PTF en 10% focalizado en los sectores primarios, los índices de severidad y brecha de pobreza disminuyen en un porcentaje menor que la incidencia de pobreza, indicando que los menos pobres entre los pobres se benefician más. El mayor impacto para la reducción de la incidencia de pobreza tiene los cambios en la estructura ocupacional. La desigualdad en la distribución de los ingresos laborales disminuye en mayor porcentaje que la desigualdad del ingreso per cápita. Son los cambios en la estructura del empleo por nivel de calificación el factor en el mercado laboral que mayor impacto tiene sobre la desigualdad del ingreso per cápita. El impacto de la política cambiaria Observamos que una devaluación es recesiva.5 Una devaluación del 10% tiene el impacto esperado de expandir las exportaciones (11,3%) y de contraer las importaciones (-11,2%). No obstante, la absorción interna se contrae significativamente (-9.3%). Una devaluación impondría un mayor esfuerzo fiscal en una economía endeudada, contrayendo el consumo de gobierno. La inversión privada y el consumo de hogares se contraen significativamente. El efecto neto entre la contracción de la absorción y la expansión de las exportaciones netas es recesivo. El ingreso de los hogares se contrae. Esta situación se reflejaría en una contracción neta de la demanda agregada. El índice de precios de productos no transables disminuye. El ahorro externo disminuye con la devaluación, debido a la mejoría de las exportaciones netas, mientras que el ahorro privado aumenta, debido a la contracción del consumo. El efecto recesivo de la significativa contracción de la absorción que no puede ser compensada por la expansión de las exportaciones netas se refleja a través de todos los sectores económicos. Si bien los sectores transables de bienes primarios y manufacturados expanden sus exportaciones significativamente; la contracción de la absorción hace primar el efecto recesivo aún en los sectores transables. Es decir, la contracción del consumo de los hogares, de la inversión privada y del consumo de gobierno, tendrían un mayor impacto sobre los sectores transables que la expansión en las exportaciones de estos sectores. No obstante la contracción en estos sectores es menor que la contracción promedio de la economía. Con la devaluación, es el sector de construcciones el que mayor contracción presenta. Son los hombres asalariados (calificados y no calificados) los que mayor contracción del empleo presentan. Son las mujeres calificadas pero no asalariadas las que menor contracción del empleo presentan. En cuanto al consumo real, son los hogares rurales de habla guaraní los que reducirían en mayor grado sus niveles de consumo a raíz de una devaluación. Por otra parte, son los hogares rurales de habla hispana los que reducirían su consumo en menor medida en este escenario. Una devaluación aumentaría fuertemente la pobreza y empeoraría la distribución de los ingreso per cápita. No obstante, no tendría efecto sobre la distribución de los ingresos laborales. 5 En esta sección discutiremos los efectos de una devaluación cambiaria. Los cambios observados en la sobrevaluación son muy similares pero con signos cambiados. 18 Los índices de severidad y brecha de pobreza aumentan en un porcentaje mayor que la incidencia de pobreza, indicando que los más pobres entre los pobres se encuentran más afectados. El mayor impacto para el aumento de la incidencia de pobreza tiene el aumento del nivel de desempleo. Igualmente es el aumento del desempleo el factor en el mercado laboral que mayor impacto tiene en el aumento de la desigualdad de los ingresos per cápita. El impacto de los acuerdos de libre comercio. Para estimar el efecto de los posibles acuerdos comerciales del ALCA y de la plena vigencia de los acuerdos de la OMC, se ha calibrado los aranceles que estarían vigentes en el ALCA, y la variación de los precios mundiales por tipo de bienes y servicios. Estas estimaciones parten de las estimaciones desagregadas de variaciones de precios y aranceles proveídos por el IFPRI (obtenidos en base a un modelo de comercio mundial) y ponderados de acuerdo a los tipos de bienes y servicios que participan en el sector externo de la economía paraguaya. Las variaciones previstas se presentan en el cuadro siguiente. Los bienes cuyos niveles arancelarios y de precios internacionales no cambia, no se presentan. Cuadro 11 Variaciones simuladas con plena vigencia de ALCA y OMC Aranceles en ALCA BIENES: PRIMARIOS INDUSTRIAL ELECTRICIDAD 0.18 0.35 0.85 Precios ALCA Precios OMC 1.0 0.99 0.99 1.1 1.0 0.98 Los efectos de la plena vigencia del acuerdo regional de libre comercio (ALCA) o de un acuerdo mundial (OMC) sobre la economía paraguaya son ligeramente expansivos en términos de crecimiento del PIB. En el caso del ALCA, esta expansión se debe principalmente al mercado doméstico, dado que las exportaciones se mantienen en el mismo nivel y las importaciones se expanden ligeramente. En el caso de la OMC, sin embargo, el motor expansivo se encuentra en el sector externo, considerando la expansión de las exportaciones y la ligera contracción de las importaciones. Los términos de intercambio se deteriorarían ligeramente en el escenario OMC, pero el quantum de exportaciones de bienes primarios aumentaría substancialmente. El tipo de cambio real se depreciaría en el escenario OMC y se apreciaría en el ALCA. En ambos escenarios el ahorro del gobierno disminuiría y el ahorro externo aumentaría. El ahorro privado aumentaría en el escenario de la OMC y disminuiría en el ALCA. La rama de actividad de mayor expansión en el escenario OMC es el sector primario, y el sector de construcciones en el ALCA. En el escenario OMC, es el empleo de la mujer no calificada y no asalariada el que mayor expansión registra. En el ALCA, es el empleo de los hombres asalariados (calificados y no calificados) el que mayor expansión presenta. El consumo real de los hogares presenta una ligera expansión en todos los tipos de hogar por igual en el escenario ALCA. En el escenario OMC, el consumo real de los hogares de todos los tipos se contraen. Los hogares urbanos de habla hispana son los que presentan la mayor contracción y los hogares rurales de habla guaraní son los que presentan la menor contracción. En ambos escenarios se observa un aumento de la incidencia de pobreza pero una reducción en los índices de brecha y severidad de pobreza. Esto implica que son los más pobres entre los pobres, quienes más se beneficiarían de estos escenarios comerciales. En el escenario de la OMC, es el cambio en la estructura sectorial del empleo el que mayo impacto tiene para aumentar la incidencia de pobreza. En ambos escenarios mejora la distribución del ingreso laboral. Los resultados en relación a la distribución del ingreso per capita son asimétricos: empeoran en el ALCA y mejoran en el escenario de la OMC. 19 Un aumento exógeno de los ingresos laborales. Un aumento exógeno de los ingresos laborales contrae al PIB. La absorción interna disminuye en mayor cuantía que el PIB; en particular se contraen el consumo privado, la inversión, el consumo del gobierno. Las importaciones disminuyen más que las exportaciones. El tipo de cambio real tiende a depreciarse muy ligeramente. El ahorro externo disminuye con el aumento de los ingresos laborales, al igual que el ahorro del gobierno. Por otra parte, el ahorro privado aumenta. Es el sector de electricidad el que mayor contracción presenta. Son las mujeres no calificadas y no asalariadas las que mayor contracción del empleo presentan. Son las mujeres no calificadas pero asalariadas las que menor contracción del empleo presentan. En cuanto al consumo real, son los hogares rurales de habla guaraní los que reducirían en mayor grado sus niveles de consumo a raíz de un aumento exógeno de los ingresos laborales. Por otra parte, son los hogares rurales de habla hispana los que reducirían su consumo en menor medida en caso de un aumento de los ingresos laborales. Un aumento exógeno de los ingresos laborales aumentaría fuertemente los niveles de pobreza, la brecha de la pobreza y su severidad. La incidencia de pobreza aumentaría en mayor magnitud que los índices de brecha y severidad de pobreza. Es decir, son los sectores menos pobres los que se verían afectados con mayor fuerza. Es el aumento en la tasa de desempleo la que produce el aumento en la incidencia de pobreza. Los cambios observados en la estructura sectorial del empleo, en la estructura ocupacional y por nivel de calificación neutralizan parcialmente el aumento de la incidencia de pobreza. Igualmente aumentaría la desigualdad de la distribución del ingreso per cápita. Sin embargo, reduciría la desigualdad de la distribución de los ingresos laborales. Observamos igualmente en el caso del aumento de la desigualdad del ingreso per cápita que es el aumento del desempleo el factor que produce este resultado, a pesar que los demás factores tienen un impacto en la dirección opuesta. El impacto de un subsidio a las exportaciones. Un subsidio a las exportaciones expande el PIB. La absorción interna se contrae pero las exportaciones netas aumentan, primando el efecto expansivo del aumento de las exportaciones netas sobre el efecto contractivo de la disminución en la absorción. La expansión de las exportaciones se debe principalmente al mayor ingreso percibido por los productores debido al subsidio. Con el cierre utilizado de un tipo de un tipo de cambio nominal fijo y ahorros externos flexibles, el aumento las exportaciones no se debe a variaciones en el tipo de cambio real. De hecho, con el cierre utilizado no se observa cambio alguno en esta variable.6 El ahorro externo y el ahorro del gobierno disminuyen su participación en el PIB nominal. El ahorro privado aumenta. Es el sector de servicios el que mayor expansión presenta. Son las mujeres no calificadas y no asalariadas las que mayor expansión del empleo presentan. Son las mujeres no calificadas pero asalariadas las que menor expansión del empleo presentan. En cuanto al consumo real, los hogares rurales de habla guaraní expandirían su consumo en caso de un subsidio a las exportaciones. Por otra parte, los hogares urbanos de habla hispana son los que reducirían en mayor grado sus niveles de consumo en este escenario. Un subsidio a las exportaciones disminuye los niveles de pobreza y mejora la distribución del ingreso tanto per cápita como de los ingresos laborales. Los índices de severidad y brecha de pobreza disminuyen en un porcentaje mayor que la incidencia de pobreza, indicando que los más pobres entre los pobres se benefician más. El mayor impacto para la reducción de la incidencia de pobreza lo genera la reducción del nivel de desempleo. La desigualdad en la distribución de los ingresos laborales disminuye en menor porcentaje que la desigualdad del ingreso per cápita, indicando que los retornos al capital tienden a mejorar la distribución del ingreso en este escenario. Igualmente es la disminución del desempleo el factor en el mercado laboral que mayor impacto tiene sobre la distribución del ingreso per cápita. 6 Si realizamos el experimento del subsidio a las exportaciones en un contexto de ahorros externos fijos y tipo de cambio flexible, observaríamos una apreciación del tipo de cambio nominal del 2,4% y del tipo de cambio real del 3,2%. Esta apreciación sería el efecto de la expansión de las exportaciones debido al subsidio introducido. 20 El impacto de distintos tipos de choques exógenos. Dentro de los escenarios presentados en la tabla 12, se reportan los resultados de dos tipos de choques exógenos: (i) aquellos que se manifiestan a través de variaciones de los términos de intercambio (variaciones de los precios de exportación e importación) y (ii) las variaciones exógenas del ahorro externo. En esta sección describiremos sólo los choques exógenos que se manifiestan a través de las variaciones de los términos de intercambio. La razón de ello es que una variación exógena del ahorro externo, se manifiesta a través de una apreciación o depreciación del tipo de cambio. Así por ejemplo, un aumento del ahorro externo implica una apreciación del tipo de cambio y una disminución del mismo implicaría una depreciación del tipo de cambio. Este escenario ha sido implícitamente descrito al analizar la devaluación.7 Observamos que los deterioros de los términos de intercambio (TI) (caída de los precios de exportaciones y/o aumentos en los precios de importaciones) se asocian con contracciones del PIB.8 No obstante, dependiendo del origen del deterioro de los TI, los mecanismos de transmisión pueden ser diferentes. Así, un deterioro originado en el aumento de precios de las importaciones, presenta contracciones en el nivel de absorción; mientras que los originados por una caída de los precios de exportación muestran una ligera expansión de la absorción interna. En ambas situaciones, el ahorro del gobierno contrae su participación. No obstante, el comportamiento del ahorro externo y del ahorro privado tienen comportamientos opuestos dependiendo de la fuente que origino los deterioros del los TI. Si los precios de importaciones aumentan, el ahorro privado aumenta su participación y el ahorro externo disminuye. Lo opuesto ocurre si los precios de exportación disminuyen. En caso de un aumento de los precios de importación, es el sector de construcciones el que mayor contracción presenta. En caso de una disminución de los precios de exportación, son los sectores de comercio y servicios los que mayor contracción presentan. En ambos casos, son las mujeres no calificadas y no asalariadas las que mayor contracción del empleo presentan. Son las mujeres no calificadas pero asalariadas las que menor contracción del empleo presentan. En cuanto al consumo real, son los hogares rurales de habla guaraní los que reducirían en mayor grado sus niveles de consumo a raíz de un deterioro de los TI. Por otra parte, son los hogares urbanos de habla hispana los que menos afectados verían su consumo en este escenario. Los deterioros de los TI aumentan los niveles de pobreza y empeoran la distribución del ingreso. No obstante, en el caso de una caída de los precios de exportación, la distribución de los ingresos laborales tiende a mejorar ligeramente; en contraste con lo observado con la distribución del ingreso familiar per cápita. Esto no ocurre cuando el origen del deterioro de los TI es el aumento de los precios de importación. Impacto del aumento de los aranceles en 5 veces y la disminución de la productividad en la economía. En el intento de aproximarnos a un escenario similar al periodo de pre-liberalización comercial, hemos revertido totalmente la liberalización comercial que implicó la reducción de los aranceles a un quinto en 1989 y hemos disminuido en 5% la productividad total de factores. La situación en el periodo de preliberalización comercial se caracterizaba por una menor participación del sector exportador y menores niveles de inversión extranjera directa. Estos dos factores, se han identificado como determinantes importantes del crecimiento de la productividad total de factores, como señalamos anteriormente. En este escenario, observamos que se contrae significativamente el PIB. En particular, contraen el consumo privado, la inversión, el consumo del gobierno, las exportaciones y las importaciones. El tipo de cambio real tiende a devaluarse. El ahorro externo disminuye en este escenario, mientras que el ahorro privado y del gobierno aumentan. 7 El impacto de una sobrevaluación es el opuesto al de la devaluación. En esta sección se discute los cambios asociados a deterioros de los términos de intercambio. Los cambios que mejoran los términos de intercambio son muy similares pero con signos cambiados. 8 21 Es el sector de construcciones el que mayor contracción presenta. Son las mujeres no calificadas y no asalariadas las que mayor contracción del empleo presentan. Son los hombres calificados pero no asalariados los que menor contracción del empleo presentan. En cuanto al consumo real, son los hogares rurales de habla guaraní los que reducirían en mayor grado sus niveles de consumo en este escenario. Por otra parte, son los hogares urbanos de habla hispana los que reducirían su consumo en menor medida en este escenario. Un escenario similar al periodo de pre-liberalización comercial estaría caracterizado por mayores niveles de pobreza y peor distribución del ingreso per cápita. No obstante, la distribución de los ingresos laborales tiende a mejorar ligeramente en este escenario; en contraste con lo observado con la distribución del ingreso familiar per cápita. V. A modo de conclusión: Implicaciones de políticas. El conjunto de simulaciones analizadas nos permite evaluar el impacto potencial de la utilización de instrumentos de política económica en cuatro áreas específicas: en el área comercial, en el mercado cambiario, en el mercado de trabajo y en el sector real. Como criterio principal para el análisis de las políticas consideraremos el impacto sobre el nivel de pobreza de los hogares. Los nueve tipos de medidas consideradas en este ejercicio son: (i) aumento de aranceles, (ii) disminución de los aranceles, (iii) devaluación, (iv) sobrevaluación , (v) disminución de aranceles por la participación en acuerdos de libre comercio, condicionado por acciones recíprocas del resto de la región (ALCA) y del mundo (OMC), (vi) aumento de la productividad en todos los sectores, (vii) aumento de la productividad sólo en los sectores primarios, (viii) aumentos exógenos de los ingresos laborales vía transferencias, y (ix) subsidio para las exportaciones. Entre todas estas medidas son los aumentos en productividad tanto en todos los sectores como sólo en el sector primario, la sobrevaluación , la reducción de aranceles, y el subsidio a las exportaciones las cinco medidas que logran disminuir los niveles de pobreza y desigualdad de los hogares paraguayos. ¿Pero los efectos de reducción de pobreza de estas medidas son igualmente sostenibles? Al comparar las direcciones en los cambios de las demás variables podremos obtener algunas pistas para responder esta pregunta. Todas estas medidas expanden la producción agregada (PIB), el quantum de las importaciones, y el empleo. No obstante, se diferencian en relación a los requisitos de ahorro externos y de ahorros del gobierno. Mientras que la reducción arancelaria y los subsidios a la exportación reducen el ahorro del gobierno (incrementa el déficit fiscal), todas las demás medidas expanden el ahorro del gobierno en relación a la base o lo mantiene en su nivel original. Consideramos que medidas de política que contraen el ahorro del gobierno son menos sostenibles, en particular en una economía como la paraguaya caracterizada por altas tasas de evasión impositiva.9 Considerando que las reducciones arancelarias y los subsidios a las exportaciones pueden no generar una senda de crecimiento sostenible en condiciones similares a las demás opciones de políticas, las excluimos momentáneamente de nuestra búsqueda por opciones de políticas que promuevan sosteniblemente mejoras en el bienestar de la población paraguaya. ¿Son los aumentos de la productividad en toda la economía, focalizado en los sectores primarios y la sobrevaluación igualmente sostenibles? El examen de los requisitos de ahorro externos en cada una de las opciones analizadas puede otorgarnos algunas pistas para responder a esta pregunta. La sobrevaluación exige un tremendo aumento del ahorro externo, lo cual no sería sostenible permanentemente. El aumento de productividad total de factores en 5% en todos los sectores, demanda igualmente un volumen significativo de ahorro externo (aunque en mucha menor cuantía que los requisitos de la sobrevaluación). El aumento de productividad total de factores en un 10% focalizado en los sectores primarios reduce significativamente los 9 Las altas tasas de evasión impositiva se manifiesta en una baja presión tributaria. A este hecho, de baja presión tributara debe sumarse la alta rigidez de los gastos corrientes del gobierno en Paraguay. 22 requerimientos de ahorro externo. A juzgar por estos indicios, parecería ser que la focalización en políticas de aumento de la productividad total de factores en el sector primario sería la opción más sostenible para reducir los niveles de pobreza de las familias paraguayas, en un contexto de restricciones potenciales de ahorro externo. Por lo tanto, medidas tendientes a aumentar la productividad de los sectores primarios parecen ocupar un lugar de marcado privilegio dentro del conjunto de opciones de políticas para promover un crecimiento sostenible de los niveles de bienestar en Paraguay. ¿Cómo promover el aumento de la productividad de los sectores primarios en Paraguay? El análisis de Hosono, Molinas y Cabello (2000), reportado más arriba, señala que la productividad mejoraría aumentando la inversión extranjera como proporción de la inversión privada y promoviendo las exportaciones. Estas dos medidas se aplican al conjunto de la economía. Para aumentar la productividad en los sectores primarios se debería incentivar el aumento de las exportaciones de estos sectores, así como la inversión extranjera directa en los mismos. Existe igualmente un conjunto de políticas que se aplicarían solamente a los sectores primarios. Estas medidas se desarrollan más acabadamente en Molinas y otros (2001), entre ellas se destacan: (i) facilitar el acceso a la tierra de los productores campesinos, (ii) el mejoramiento de la asistencia técnica al productor campesino mediante el seguimiento de extensionistas residentes, (iii) mejorar el sistema de financiamiento a la producción campesina, (iv) potenciar la organización de los productores, (v) el establecimiento de un seguro agrícola, (vi) invertir en investigación agrícola, y (vii) aumentar la inversión en obras rurales. VI. Bibliografía. Deaton, A., 1997, The Analysis of Household Surveys: A Microeconometric Approach to Development Policy, The Johns Hopkins University Press, Baltimore. Hosono, Molinas y Cabello (2000), “Escenarios Alternativos de Crecimiento de la Economía Paraguaya”, Japan International Cooperation Agency, JICA, Tokio. Lofgren, Harris y Robinson, (2001), “A Standard Computable General Equilibrium (CGE) Model in Gams”, TDM Discusión Paper No. 75, Washington DC. Molinas y et. al. (2001), “Paraguay: Hacia una Estrategia de Reducción de Pobreza. Principales ejes de discusión”. SAS-PNUD-Banco Mundial, Agosto 2001. mimeo. Morley y Vos (2000), “Export-Led Growth Economic Strategies: Effects on Poverty and Inequality in Latin America and the Caribbean”, mimeo. Robinson et al, (1999), “Updating and Estimating a Social Accounting Matrix Using Cross Entropy Methods” TDM Discussion Paper No. 58, IFPRI, Washington DC. Vos, R. (2002), “Export-led growth strategies: Effects on poverty, inequality and growth in Latin America and the Caribbean. Micro-simulations methodology”, mimeo. 23 ANEXO: Elasticidades y cierres utilizados en el Modelo de Equilibrio General Computable Estándar del IFPRI. Las elasticidades utilizadas: En relación al sector externo, la producción doméstica de cada bien agregado debe asignarse tanto a las exportaciones como a las ventas domésticas. Se considera que la transformación entre exportación y ventas domésticas es imperfecta, y esto se expresa mediante una función de elasticidad constante de transformación (CET). Además, toda la demanda doméstica es para un solo bien agregado, conformado tanto por la producción doméstica como por las importaciones. La demanda para este bien agregado se deriva bajo el supuesto que los consumidores minimizan costo sujeto a una sustitución imperfecta entre importaciones y bienes domésticos (Función de Armington). El proceso de agregación entre la producción doméstica y las importaciones agregadas se realiza a través de una función de elasticidad constante de substitución (CES). Cuadro A1: Elasticidades Constantes de Transformación y de Substitución CES (Armington) CET Bienes Primarios Bienes Manufacturados Construcción Transporte Electricidad Financieros Comercio Servicios 1.250 0.500 2.000 0.500 0.500 0.500 2.000 2.000 0.900 0.500 2.000 0.500 0.500 0.500 2.000 2.000 El consumo de los hogares se asigna a los diferente bienes de acuerdo a un sistema de gasto lineal (LES) que conforma las funciones de demanda. Este sistema de gasto lineal se define a través de un conjunto de elasticidades de gasto para la demanda del bien “c” por el tipo de hogar “h”; además de un parámetro Frisch. En nuestro caso se considero un parámetro Frisch de –1 y una elasticidad demanda unitaria (Leselas1 (C,H)=1). En cuanto a la tecnología de producción, el valor agregado es una función CES (elasticidad constante de substitución) de los factores primarios (trabajo y capital). Los parámetros considerados (Prodelas) son: Cuadro A2: Parámetros de la función CES Actividad Primaria Transporte Electricidad Construcción Industria Comercio Finanzas Servicios PRODELAS 1.250 1.250 1.250 0.850 1.250 1.250 1.250 0.850 24 Una baja “prodela” significa una alta elasticidad, de la forma en que esta definida la ecuación de elasticidad (roba) en el modelo estándar del IFPRI. Cabe destacar que no existen en forma disponible estimaciones econométricas de las distintas elasticidades utilizadas. Los resultados por ellas generados deben ser interpretados como una aproximación inicial a la realidad de la economía paraguaya, hasta tanto se encuentre un mecanismo consistente de validación de estas hipótesis de elasticidades. Los Cierres utilizados: En cuanto al cierre para el sistema de restricciones macroeconómicas y de funcionamiento del mercado de factores, se optó por las siguientes reglas de cierre como la situación estándar: (i) (ii) (iii) (iv) (v) Gobierno: Las tasas de impuesto directo son fijas, el ahorro de gobierno es flexible. Resto del Mundo: El tipo de cambio nominal es fijo, el ahorro externo es flexible. Excepto en el escenario en el cual se simula un aumento exógeno de ahorros externos, se adoptó el cierre de tipo de cambio flexible y el ahorro externo fijo. Ahorro e Inversión: Proporción fija de inversión y de consumo de gobierno (cantidades flexibles), cambio uniforme en la propensión marginal a ahorrar. El capital es plenamente empleado y es específico a la actividad. El trabajo esta subutilizado y es móvil entre sectores de actividad. 25