Formato de impresión La humillante derrota abre la caja negra de la sociedad brasileña 2014-07-11- Deportes CARLA JIMNEZ, El Pas Flvio Campos era uno de los 200 millones de brasileos que no pudieron dormir el pasado mircoles al intentar entender la amarga derrota de la Seleo ante Alemania. Pero su tristeza iba ms all del 7 a 1. La crueldad colectiva que se inici antes mismo del final del partido en el estadio Mineiro fue uno de los motivos de su insomnio. Las crticas a los jugadores que, segn l, son solo chicos, el vandalismo en algunas ciudades y los insultos a la presidenta Dilma, mientras Brasil era humillado en el campo, eran sntomas de un pas hurfano de otras alegras que no sean el ftbol. Queremos que la seleccin represente la fuerza, la virtud y la creatividad del pas, dice Campos, un socilogo que coordina el Ncleo Interdisciplinar de Estudios sobre el Ftbol. Es perverso y cruel echar la culpa de nuestro fracaso a los chicos. Pregunta. Cmo est usted asimilando la derrota ante Alemania? Respuesta. Tengo dos tristezas, dos sentimientos. Uno con el propio resultado del partido. Es evidente que Alemania era la favorita, por el juego ms consistente y organizado. Pensaba que no iba a ganar Brasil. Pero siempre hay el imponderable en el ftbol, pues ni siempre gana lo mejor. Siempre hay esperanza. Pero lo que hubo fue una masacre. P. Y la otra tristeza? R. Adems de notar la falta de competitividad ante los alemanes, fue el significado que el ftbol tiene como elemento de la cultura brasilea. La humillante derrota abre la caja negra de la sociedad. Vivimos una crisis de representatividad en Brasil, un momento en el que nuestra mirada colectiva es muy frustrante. La percepcin es que el sistema poltico representativo no funciona. Algunos piensan que hay que tirar todo. No es una casualidad que cuando la aficin insulta a Fred [delantero de Brasil], empieza tambin a insultar a Dilma [como en el primer da del Mundial]. Y ese equipo, de chicos Es una crueldad. Queremos que representen la fuerza y las virtudes, la valenta, la habilidad, la creatividad, la belleza que nosotros no tenemos en nuestros espacios sociales. Es como una compensacin. Y queremos que la seleccin sea un remedio, una solucin para las cosas que no logramos resolver en el cotidiano. Es cruel. Nuestros jugadores tienen la edad de mis hijos. Neymar tiene 22 aos. Es perverso y cobarde echar la culpa de nuestro fracaso a esos chicos, para que compensen lo que no entendemos en nuestra sociedad. P. Es mucha presin para tan poca edad, y encima jugando en el Mundial, con la obligacin de ganar? R. Gilberto Marigoni, candidato a gobernador de So Paulo del PSOL, tiene una definicin para los Black Blocs interesante. Dice que son chicos que intentan ser hroes con sus mscaras y armas de destruccin. Es un sentimiento infantil de esa generacin. El discurso de David Luiz, que lloraba al decir que quera ofrecer esa alegra a Brasil, es una misin parecida a de los Black Blocs. Querer salvar el pas es muy malo. No necesitamos un Mesias, necesitamos actitudes colectivas. Menos cobarda y menos hipocresa. Nuestra actitud como ciudadano s nos representa. P. Este intento de encontrar a hroes es tambin un intento de reconstruir un mito como Pel? R. Mira cmo se construy la historia de Pel y de esos chicos. El Mundial de 1958. El mejor jugador de ese ao no fue Pel ni Garrincha. La prensa que acompa el campeonato eligi a Didi como lo mejor jugador de esa poca. En muchos partidos no llega a ser un fenmeno. Pero era un excelente jugador. Cuando Suecia hizo su primer gol, Didi es la persona que anda calmamente y dice: vamos a jugar. l era el lder, el que organizaba. Fue Didi y Gilmar quienes subieron a Pel en sus hombros tras el partido. Lo que quiero decir es que Pel fue uno de los mejores jugadores del mundo. Garrincha tambin. Pero esos equipos tuvieron otros atletas muy importantes. Nosotros necesitamos los reyes, los salvadores de la patria, los fenmenos, los prncipes. Pel fue el rey. Ronaldo, el fenmeno. Y seguro que Neymar ser algo semejante. P. El resultado del Mundial influir las elecciones? R. Ya influy, desde junio de 2013. Deshidrat el apoyo a Dilma. Ella perdi ms del 30% de apoyo en un ao. Lo ms visible no es Petrobras, por ejemplo. Lo ms visible es el Mundial. Y la campaa girar alrededor de ello. Pero mira, la previsin catastrfica no se concretiz. Ningn estadio desmoron. S tumb un viaducto de la oposicin [en Belo Horizonte]. Pero parece que nadie se da cuenta. El alcalde es del PSB y el gobernador es del PSDB. Esta es la cuestin: la percepcin que queda para la sociedad brasilea. El mal intencionado echar la culpa a Dilma. P. Perder apoyo con el 7 a 1? R. Apuesto que s. Esa depresin tiene que ser descargada, y la derrota ser explorada. Directa o indirectamente. Siete goles afectan a la gente. Es un hbito nuestro echar la culpa a alguien. La primera vctima fue Felipo. La siguiente ser Dilma. P. Hasta los que ms estaban en contra al Mundial apoyaron al evento. Nadie resisti? R. Quienes estaban en los estadios eran de una clase media imbcil, reaccionaria, que no saba ni siquiera cmo apoyar al equipo en el estadio. Tuvieron incluso que ensayar una cancin. Esa clase media blanca, muy incmoda al tener que compartir espacios en los aeropuertos, fue claramente contagiada por la fiesta. Se ilusion, y eso no es malo. Muchos aprendieron sobre qu es el ftbol. Y me gustara que ese grupo aprendiera a asumir su responsabilidad social, para que haya una sociedad sin odio ni privilegios. Es un comportamiento que tiene que corregirse. Y ahora empiezan otras elecciones. Es otro partido. No es contra Alemania, sino contra nosotros mismo. Ese es el partido ms importante. Copyright ElPeriodicodeMexico.com