R E F L E X I O N E S ACERCA D E L A P L A T E R I A MAPUCHE (1) C A R L O S A L D U N A T E D E L S. M U S E O C H I L E N O D E A R T E P RE COLOMBINO B A N D E R A 367 SANTIAGO - CHILE INTRODUCCION b Cualquiera que sea la opinión de diferen tes autores sobre la presencia de la metalur gia entre los mapuches de épocas prehis~ány cas, no cabe duda que la orfebrería en plata, que es la que interesa a este trabajo, se de sarrolló en forma intensiva, por artesanos profesionales uue lograron crear una enorme variedad de formas y estilos, a partir de las postrimerias del siglo XVIII. Interesa a este ensayo tratar de comprender las causas del sGbito aparecimiento de la orfebrería ma puche en "gran escala", que lle-a a ser de tal magnitud durante el siglo pasado, aue no hay cacique importante que no tenqa a su es pecial servicio un platero aue le confeccis ne los más ricos aperos para enjaezar su mon tura junto a una gran cantidad de joyas d e diversa índole aue sirvieran de ostentación a sus esposas e hijas, las que también eran usadas para el intercambio que se llevó a efecto con los pueblos de las pampas orienta les de los Andes. La riqueza concentrada en manos de los L a n h a y u l m e n de esta época, nos hacen reflexionar sobre importantes cam bios estructurales sue se producen dentro de CULTURA, HOMBRE, SOCIEDAD 11, 1984 la sociedad mapuche, como consecuencia de los procesos históricos y culturales que tra taremos a continuación. PANORAMA DE LA SOCIEDAD MAPUCHE EX LOS SIGLOS XVIII Y XIX El parlamento de Negrete, ce1ebrad.o en 1726, pone fin a las incesantes actividades bélicas suscitadas con posterioridad al de sastre de Curalaba. El español ya ha consolT dado sus llmites con el Estado de Arauco, al que reconoce una suerte de autonomía, cons truyendo fuertes fronterizos a cargo dei Ejército de Chile, abastecido mediante el mitad Real Situado. Es as5 como la segunda del siglo XVIII esta marcada por la intes ción de indlgenas y españoles que, nercibien do la mayor utilidad que les nofir3an ~ r o c Ü rar relaciones m6s paczficas, deponen sus a< titudes bélicas en pos de buscar los mejores términos para establecer contactos d.e inter cambio (cfr. Villalobos 1982) . De esta forma, se advierte una gradual intensificación en el tráfico d-e mercanchi fles y buhoneros con sus carretas cargadas de botijas de vino y aguardiente, toda suer te de baratijas, tabaco, armas y herramieñ tas de fierro, productos que trocaban por nado vacuno y caballar el que era posterior mente vendido en las plazas comerciales de Los Angeles y Chilldn, para su consumo por la población chilena de la época. Ya a fines de ese siglo, el mapuche comienza a aceptar monedas de plata en pago de sus animales, con el solo propósito de convertirlas en ga rl Aldunatel P L A T E R I A MAPUCHE adornos para sus mujeres y aperos de montar. I L Con el fin de responder a esta intensa demanda los mapuches,cuya incipiente ganade ría de vacunos y crla de caballos no daba abasto, debieron intensificar sus relaciones y correrlas entre los pueblos que habitaban las pampas argentinas, donde estos animales se hablan reproducido de manera asombrosa. Los términos de estas relaciones, ya sea que tomaran forma de intercambio pacifico o de correrías bélicas o malocas, consistlan en que el mapuche aportaba cañas de coliqüe pa ra lanzas y manufacturas tales como tejifios y platerla, regresando de las expediciones con manadas de qanado vacuno y caballar, as? como con numerosas cautivas. En este oriqi nal intercambio el pehuenche, que habitaba ambas faldas de la cordillera de los Andes jugd un papel protagónico, sirviendo como agente de contacto entre las etnlas, permi tiéndoles el tráfico a través del macizo mon tañoso y proporcionándoles la sal, ~roducto que controlaban. Este estado de cosas se ve bruscamente alterado con los sucesos provoca ;dos con la guerra de la independencia. La m yorla de los grupos mapuches hacen filas en defensa de la causa de la corona española aliándose con los ejércitos del rey y ,poste riormente, con los montoneros que mantuvie ron prolongada resistencia en la ~raucanía: Bajo la dirección de los hermanos Pincheira., los pehuenches también sembraban la confu sión entre los patriotas, Sobresalían entre los aliados de la coro o na los valerosos caciques "arribanos" ure,n;teche Mangin y Nahuelhuén y el "abajino" CULTURA, HOMBRE, SOCIEDAD [l, 1 9 8 4 o L e L d u n c h e Mariluan, así como varios "costi nos" o L a d k e n c h e . Los finicos que se comprom~ tieron con la causa revolucionaria fueron los poderosos ~ o l i p íy Coñoepán, junto con sus aliados. Esta situación provocó violen tas confrontaciones entre los grupos antagz nicos, las cuales eran aprovechadas para ob tener cuantiosos botines en las incesantes malocas y contramalocas. Durante esta época, en que la actividad más importante ejercida por los hombres era la guerra, la extremada movilidad impuesta por ese sistema hace uue el ganado sea el producto de más fácil pro tección y aprovechamiento, en desmedro de 15 agricultura. El intercambio pacifico, sin em bargo, se continuó practicando tanto con me7 caderes chilenos que se introducian en la Frontera durante los perlodos de mayor tran quilidad, como los indígenas pampas y ranqug les que habitaban las extensas llanuras del otro lado de los Andes. El general argentino iritere6ante Lucio Mancilla proporciona una descripción de estos peculiares contactos: L O A aucan bokovanod d e C h i l e y Ron aucan m o l u c h e n , pehuenchen o pampa4 d~ e n x e La d o d e l o n Anden, m e z c l a d o n coiz c h i R e n o n T cornehc.Laban ucXivamen.te. De a q u e l Lado v e n x a n p u l u n d e L a n z a 6Lekno punXiagudo y mo h o n h a n , c u c h i l l o n , d k e n o n , Zelan, abaLoh.Lon, b a h a t i j a n d e .toda e s p e c i e y n o b k e .todo .tabaco y a g u a n d i e n 2 e p n o v e n i e n X e d e VuLpana2no y d e C o ~ c e p c i á n . €7 X n á d i c o no pudna n e k mán l u c n a . t i v o . Todo eno n e pehmuXaba pon ganado y c a k n e huma na a h g e n X i n o n . Un c a b u R l o , una v a c a , u¿? LLan mán q u e u n c a u X i v o muchas v e c e n .. . Aldunate] PLATERIA MAPUCHE este metal. Los plateros han desaparecido, a pesar de los esfuerzos de algunas institucio nes por salvar esta artesania la que, indis cutiblemente y en las actuales condiciones~ estd condenada a desaparecer. NOTAS la E l p r e s e n t e t a b a j o s e p r e s e n t ó como ponencia a l a Quinta Semana I n d i g e n i s t a e:n ncviembre de 1983, en l a P o n t i f i c i a Universidad C a t ó l i c a de C h i l e , Sede Te muco, o r i g i n a l m e n t e s e p u b l i c ó en p l a t e r í a ~raucana: Museo C h i l e n o ' d e A r t e Precolombino, b a j o e l a u s p i c i o d e l Banco OUHiggins, en diciembre de 1983. lb Hemos p r e f e r i d o u s a r e l vocablo "mapuche" p a r a de s i g n a r a l grupo é t n i c o que mantiene s u i d e n t i d a d c u y t u r a l h a s t a l a a c t u a l i d a d y cuyos componentes s e id& t i f i c a n b a j o e s t e nombre. La voz "araucano", aunque con p o s i b l e e t i m o l o g í a i n d í g e n a , f u e l a que usó el español p a r a d e s i g n a r a e s t e pueblo. Canals F r a u , Salvador 1946. ~ x p a n s i ó nof t h e Araucanian i n Argentina. Amhcun Washington. D.C. En ííundbaok 04 Suu;tlz 3izd¿a/zir. 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