Los Fantasmas-¿Debemos creer en ellos?

Los Fantasmas:
¿Debemos creer en ellos?
Mateo 14:22-33
Por: Juan Ramón Chávez
Introducción
S
e acerca el 31 de octubre y es imposible no ver en las casas, en las tiendas y
supermercados; adornados de calaveritas, calabazas, vampiros, murciélagos, esqueletos y
fantasmas, etc. Es en este mes que en la televisión pasan películas de terror y espanto. Las
personas toman estas fechas para hacer bromas asustando a sus amigos y familiares. Así como
para contar las historias más escalofriantes. Entre todas las creencias ocultas que existen, esta la
creencia en los fantasmas. De allí que han creado películas y series muy famosas. Como “Los
caza fantasmas”, la de “Ghost, la Sombra del Amor” 1990. Protagonizada por Demi Moore.
“Sexto sentido” 1999 protagonizada por Bruce Willis. “Los Otros” en el 2001. Protagonizada por
Nicole Kidman. El “Aro” en el 2002. Y esto solo por mencionar algunas. Y nos preguntamos,
¿Debemos creer en los fantasmas? ¿Existen realmente? ¿La Biblia aprueba tal creencia?
I). La definición de fantasmas.
A. La palabra fantasma aparece cuatro veces en la Biblia Reina Valera. Dos veces en el
Antiguo Testamento (Job 4:16; Isaías 29:4). Y dos veces en el Nuevo Testamento (Mateo
14:26; Marcos 6:49) En la ocasión cuando Jesús camina sobre el mar y los discípulos se
espantaron y gritaron “Un fantasma”.
B. La palabra fantasma es una transliteración del término griego. “fantasma, de faino,
aparecer” (Dicc. Expositivo de palabras del A.T y del N.T por W. E. Vine). De allí que la versión moderna pone: “un
aparecido”. Por eso la creencia popular es que fantasma es la “Imagen de una persona
muerta que, según algunos, se aparece a los vivos”
espíritu de un difundo que se aparece.
(Dicc. De la Real Academia Española)
. Del alma o del
II). La descripción de fantasmas.
A. Los comentarios de algunos.
Algunos que dicen haberlos visto, los describen como sombras, siluetas que flotan. Que tienen
forma humana o en forma de luz brillante. Que salen en los caminos, carreteras, casas
encantadas o embrujadas. Casi siempre en lugares que en vida frecuentaban o donde sufrieron
una muerte violenta. Dicen que traspasan paredes y pueden mover objetos. Que aparecen
vestidas en relación a su muerte o con la sabana mortuoria. Que aparecen generalmente a
media noche o en las madrugadas. Son las almas de las personas que han muerto y no han
encontrado descanso o reposo porque les falto concluir algo en la tierra o porque reclaman
venganza de quienes les hicieron daño en la tierra.
B. Los posibles orígenes de las descripciones.
Quizás muchas de estas descripciones, las personas las desprenden de la historia de cuando
Jesús camina sobre el mar. Mateo 14:24-27 dice: “Y ya la barca estaba en medio del mar,
azotada por las olas; porque el viento era contrario. 25 Mas a la cuarta vigilia de la noche”
(Según el sistema romano, la noche se dividía en cuatro períodos o vigilias de tres horas cada
una. La cuarta vigilia sería entre las tres y las seis de la mañana) “Jesús vino a ellos andando
sobre el mar. 26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un
fantasma! Y dieron voces de miedo. 27 Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened
ánimo; yo soy, no temáis!” Los discípulos al no poderlo distinguir pues era en la madrugada,
y el hecho que caminase sobre el agua, inmediatamente pensaron que no se trataba de una
persona. Porque era algo no se podía explicar de forma natural el que caminase sobre las
aguas. Por eso inmediatamente pensaron que se trataba de un fantasma. Además, debido a la
tempestad en el mar es probable que los discípulos atribuyeran eso, al supuesto fantasma
malo. No se les ocurre pensar que quizás fuera el maestro. Es por eso que Jesús tuvo que
decir: “¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!” (Mateo 14:27)
Además también, muchas de las descripciones que la gente dice las han sacado de las
películas de Hollywood cuyos productores tienen una imaginación bárbara. Todo con el
propósito de que se venda.
III). La creencia popular en los tiempos bíblicos sobre fantasmas.
Porque los discípulos creían en fantasmas? ¿Jesús enseño la creencia en ellos? Claro que no. Sin
embargo, en la sociedad donde vivían, como en muchos lugares hoy día, estaban inundadas de
supersticiones. Por ejemplo:
A. Los romanos.
“Los romanos ponían un puñado de tierra sobre el cadáver porque si no el alma erraría por
toda la eternidad en la ribera de la Estigia, (Personificaba un río del Hades-el inframundo
griego) y era preciso poner una moneda en la boca para pagar al barquero o el alma no tendría
descanso. Por eso aterraba a los romanos navegar por el mar, ya que los náufragos no
recibirían honras funerarias, y los marineros solían tener un pendiente de oro para pagar su
funeral en caso de que su cuerpo ahogado arribara a la playa. A los suicidas romanos se los
enterraba con la mano cortada y separada del cuerpo, con el fin de desarmar a su espíritu, que
hipotéticamente atormentaría a los vivos. Los fantasmas buenos para los romanos eran los
manes o espíritus de los antepasados; los malvados eran las larvae, almas de hombres
malvados que vagan errantes por las noche y atormentan a los vivos” (http://es.wikipedia.org/wiki/Fantasma).
B. Los griegos.
Los mismos griegos creían en fantasmas. El historiador romano, Plinio el Joven (61 d.C. –
113 d.C.) escribió que el filósofo Atenodoro de Tarso (74 a.C. – 7 d.C.), vio y hablo con un
fantasma. “describe una casa encantada en Atenas donde aparecía un espectro que arrastraba
cadenas; los sucesos cesaron cuando el filósofo Atenodoro alquiló la casa y fue guiado por el
fantasma hasta un esqueleto enterrado y fue vuelto a sepultar con las debidas ceremonias”
(http://es.wikipedia.org/wiki/Fantasma).
C. Los judíos.
Aun los mismos judíos en la época de Jesús y sus discípulos creían en fantasmas. “Aunque no
todos los maestros judíos sancionaban la creencia en fantasmas, esta existía a nivel popular y
contradecía la enseñanza judía (y neo testamentaria) normal de que los muertos justos y
malvados son separados al morir en vistas a la resurrección venidera.” (Com. del contexto cultural de la BibliaNT. Craig S. Keener)
.
En medio de estas tres culturas se desarrolló el cristianismo en el primer siglo. Por tanto, los
mismos discípulos de Jesús, siendo judíos, creían en ellos. Eran supersticiosos todavía como
muchos cristianos en nuestros días. Pero, ¿Debemos creer en los fantasmas porque los
discípulos en un inicio creían en ellos? Claro que no. Pues, Marcos nos da unos detalles muy
interesantes en su historia cuando Jesús anda sobre el mar. Dice: “Y subió a ellos en la barca,
y se calmó el viento; y ellos se asombraron en gran manera, y se maravillaban. 52 Porque
aún no habían entendido lo de los panes, por cuanto estaban endurecidos sus corazones”
(Marcos 6:51-52)
Según Marcos los discípulos hubieran llegado a la conclusión que quien venían caminando
sobre la aguas era el Señor, y no un fantasma, si ellos hubieran comprendido el milagro de los
panes. Habrían inferido según Marcos, que si Jesús tuvo el poder de multiplicar cinco panes y
dos peces (Marcos 6:38), fácil podían caminar sobre las aguas. Luego Marcos dice que la
razón de esta falta de inteligencia por parte de los discípulos fue, porque “estaban endurecidos
sus corazones”. Prefirieron echar manos de las creencias populares en lugar de creer en el
Señor.
En realidad los discípulos comprenderían completamente solo después de la resurrección de
Jesús y del descenso del Espíritu Santo. Jesús les dijo: “Pero cuando venga el Espíritu de
verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que
hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir” (Juan 16:13).
Fomentar la creencia en los fantasmas nunca fue parte de la enseñanza de Jesús a sus
discípulos.
IV). La aparición de los fantasmas.
Ya que la definición de fantasma del diccionario de la Real Academia Española es: “Imagen de
una persona muerta que, según algunos, se aparece a los vivos” Nos preguntamos, ¿Realmente
aparecen los fantasmas a la gente? Es decir, ¿Pueden los muertos aparecer a los vivos? La
respuesta es no.
A. Los muertos no se levantaran.
El salmista pregunta: “¿Manifestarás tus maravillas a los muertos? ¿Se levantarán los
muertos para alabarte?” (Salmos 88:10) ¿Quién necesita las maravillas de Dios, los vivos o
los muertos? ¡Los vivos! Luego el mismo contesta capítulos más tarde: “Los cielos son los
cielos de Jehová; Y ha dado la tierra a los hijos de los hombres. 17 No alabarán los muertos
a JAH, Ni cuantos descienden al silencio; 18 Pero nosotros (El contraste) bendeciremos a
JAH Desde ahora y para siempre. Aleluya”. (Sal 115:16-18) Ellos no cantan con nosotros no
escuchan lo que nosotros cantamos y por tanto no se conmueven por lo que hacemos o
decimos de ellos. No existen vírgenes llorando sangre por la maldad del mundo.
B. Los muertos ya no tienen relación con el mundo de los vivos.
Salomón dijo de ellos: “Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que un mismo
suceso acontece a todos, y también que el corazón de los hijos de los hombres está lleno de
mal y de insensatez en su corazón durante su vida; y después de esto se van a los muertos. 4
Aún hay esperanza para todo aquel que está entre los vivos; porque mejor es perro vivo que
león muerto. 5 Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben,
ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. 6 También su amor y su odio y
su envidia fenecieron ya; y NUNCA MAS TENDRAN PARTE en todo lo que se hace
DEBAJO DEL SOL” (Eclesiastés 9:3-6) Entonces es mentira las apariciones de diferentes
personas a sus familiares o a ciertos religiosos. No hay contacto del mundo de los vivos con
los muertos, ni los muertos con los vivos. A los muertos no se les es permitido ver, ni oír, ni
sentir lo que sucede el su funeral ni en la vida cotidiana de sus familiares. Pues, “Ya no tienen
más parte”.
C. Los muertos no regresan a sus casas en vivían.
Los muertos no regresan a despedirse de sus familiares una vez muertos. Tampoco se les
permite regresar cada año a visitarlos. Job nos da el ejemplo de las nubes con lo que sucede
con los muertos, “Como la nube se desvanece y se va, Así el que desciende al Seol no subirá;
10 No volverá más a su casa, Ni su lugar le conocerá más” (Job 7:9-10) Aunque el altar de
muertos esté listo con su comida y de más cosas que le gustaban al difunto, no volverá más.
V). La explicación sobre las apariciones de los fantasmas.
¿Porque la gente cree ver fantasmas si en realidad estos no existen? Las respuestas pueden ser
varias:
A. Porque tienen información equivocada.
Como ya hemos mencionado la televisión y el cine nos tienen inundados de información
equivocada sobre los que han muerto. Historias de los abuelitos y amigos. Y muchas veces
nosotros estamos más listos para creer eso, que lo que la Palabra de Dios nos dice. Estamos
más influenciados de esas historias fantásticas que de la palabra de Dios. Pero es la palabra de
Dios la fuente confiable de información sobre la muerte no la televisión. La palabra de Dios
enseña, redarguye, corrige e instruye. (2 Timoteo 3:16).
B. Porque están autosugestionados.
Por autosugestión es otra de las razones del porque la gente cree ver fantasmas. Es cuando
creemos haber visto u oído algo que no es cierto, que no existe. Lo creemos ver u oír algo que
no es cierto, porque ya estamos predispuestos hacerlo. Un movimiento visto de reojo puede
ser transformado por nuestras neuronas en una imagen fantasmal. Sobre todo, siendo de
noche, en un lugar tan dado al misterio como lo es un cementerio, después de ver películas u
oír historias de fantasmas o de haber perdido a un ser querido. No sería totalmente
sorprendente que varias personas se imaginaran algo. Pero recordemos lo que la Biblia dice:
“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”
(Jeremías 17:9). Corazón y mente se usan como sinónimos. Engañosa es la mente. Esta es la
razón del porque la gente piensa ver cosas que no existen.
C. Porque tienen miedo.
Por miedo es otra de las razones del porque la gente cree ver fantasmas. El miedo y sugestión
combinados poder hacer que la persona vea, oiga o imagine cosas irreales. Los discípulos de
Jesús cuando lo vieron caminar sobre las aguas se espantaron y gritaron de miedo. “Y los
discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, (se espantaron) diciendo: ¡Un fantasma!
Y dieron voces de miedo” (Mateo 14:26) El miedo es poderoso que nos puede hacer ver, oír
cosas que no existen.
D. Porque han sido objeto de engaño.
Esto puede ser a través de historia de experiencias personales, disfraces o medios
tecnológicos. Hay gente que puede hacer videos donde puestamente aparecen fantasmas. Ya
sea para burlarse, para sacar algún beneficio económico, o simplemente para sembrar la duda.
Recordemos a Simón el mago que había engañado a la gente (Hechos 8:9).
Explicaciones de los textos del Antiguo Testamento sobre el término fantasma
“En imaginaciones de visiones nocturnas, Cuando el sueño cae sobre los hombres, 14 Me
sobrevino un espanto y un temblor, Que estremeció todos mis huesos; 15 Y al pasar un
espíritu por delante de mí, Hizo que se erizara el pelo de mi cuerpo. 16 Paróse delante de
mis ojos un fantasma, Cuyo rostro yo no conocí, Y quedo, oí que decía: 17 ¿Será el hombre
más justo que Dios? ¿Será el varón más limpio que el que lo hizo?” (Job 4:13-17)
1. No habla Job, sino Elifaz. 4:1
2. Fue una visión o un sueño y no la realidad. 4:13
3. Lo que dijo Elifaz no tuvo la aprobación divina. Por tanto, Elifaz no era un profeta de Dios.
42:7
4. La Septuaginta no tiene en este texto la palabra griega para fantasma, φάντασµα.
Isaías 29:4 “Entonces serás humillada, hablarás desde la tierra, y tu habla saldrá del polvo;
y será tu voz de la tierra como la de un fantasma, y tu habla susurrará desde el polvo”
1. El profeta Isaías habla de la humillación de Jerusalén. Jerusalén seria cautiva y humillada
hasta el polvo.
2. Compara sus lamentos como la voz de un fantasma. Apagada, débil, como un susurro
“Susurrará”. “Que las almas de los muertos lanzaban un sonido débil, muy diferente de la
voz humana natural, fue una idea popular entre las naciones, así como entre los Judíos. Esto se
desprende de varios pasajes de sus poetas, Homero, Virgilio, Horacio” (Com. Del A.T y N. T. Por Joseph
Benson's)
. ¿Pero cómo sabía Isaías que los fantasmas susurran, es decir, que hablan entre dientes,
en voz débil? Porque esa era la voz que hacían los que supuestamente invocaban a los
muertos. Por eso el Diccionario de Hebreo Bíblico de Moisés Chávez traduce la palabra como
“Evocador de los muertos”. “La ventriloquia era sin duda la treta empleada para simular que
la voz provenía de la tierra” (Com. Exegético y Explicativo de la Biblia Tomo I). Isaías ya lo había dicho antes: “Y si
os dijeren: Preguntad a los encantadores y a los adivinos, que susurran hablando, responded:
¿No consultará el pueblo a su Dios? ¿Consultará a los muertos por los vivos?” (Isaías 8:19).
3. Así que, no es que Isaías creyera en los fantasmas y que hubiera escuchado sus susurros,
sino que está comparando la desgracia que pasara Jerusalén con la supuesta voz entrecortada
de los fantasmas.
4. Una voz débil que indica extrema penuria. Simplemente era una forma figurada para hablar
de la desgracia de Jerusalén.
Conclusión
Cada quien es libre de creer lo que quiera. Pero no hay apoyo bíblico para creer en los fantasmas.
Debemos estar más dispuestos para creer lo que Dios dice y no lo que los hombres dicen. Así
que, no hay razón para tener miedo a los fantasmas. Porque nadie puede levantarse de la tumba.
La Biblia dice que Jesús tiene las llaves del lugar de los muertos: “Y tengo las llaves de la muerte
y del Hades” (Apocalipsis 1:18). Procuremos dejar las supersticiones atrás y permitamos que la
palabra de Dios vaya despejando toda duda de nuestras mentes. Que Dios nos ayude a poder
hacerlo, para gloria de Él y beneficio nuestro.
Juan Ramón Chávez Torres
E-mail: [email protected]
http://chaveztorres.wordpress.com/