Pedro Izquierdo, un relojero con mucha historia La historia de Pedro Izquierdo es la de un apasionado de la relojería, autodidacta, que ha dedicado toda su vida a estas pequeñas maravillas mecánicas. Tras más de 40 años de profesión, su fama le precede allá donde va y en su taller madrileño recibe relojes de todo el mundo para que, gracias a sus expertas manos, sean restaurados, reparados y vuelvan a su esplendor. E s un placer para mí acercaros la figura de este mítico relojero que, además, es mi padre. Y es que toda mi vida he estado rodeada de la sabiduría relojera de este maestro que, desde muy joven, sintió la necesidad de conocer a fondo estas maquinarias, descubrir su funcionamiento y adentrarse en la magia que encierran. Desde 1965, año en que empezó su andadura profesional, todos son los palos relojeros que Pedro Izquierdo ha tocado: relojería fina (los relojes de pulsera o bolsillo); relojería gruesa (relojes de sobremesa, pared o antesala); relojes de torre, cronometraje; etc. en realidad, cualquier 58• texto POR minerva izquierdo • aproximación a la medición del tiempo ha sido objeto de su conocimiento y profesionalidad. Toda una vida dedicada a la relojería que se plasma de manera física en su Centro Relojero, ubicado en Madrid y que, cualquiera de los que lo conocemos, sabemos que es un auténtico museo a pie de calle. Aquí podemos encontrar todo tipo de maquinarias y tipos de relojes, de manera que es fácil descubrir, mediante un fascinante ­recorrido, toda la historia de la relojería: los antiguos relojes de fichar en el trabajo, piezas que nos muestran los primeros intentos de medir el tiempo en la época medieval; los primitivos relojes para ciegos; relojes de viaje o multitud de piezas únicas de grandes firmas. Este recorrido nos muestra cómo la relojería nació y se ­desarrolló FOTOGRAFÍA POR juan cabanillas www.spend-in.com relojes antes de este mundo digital en el que tan inmersos estamos y donde, a veces, es difícil concebir una precisión mecánica. La pasión de mi padre, Pedro Izquierdo, por la relojería hace que, como autodidacta que es, hace años fuese consciente de la gran carencia en la formación relojera de este país. Prácticamente no encontramos sitios donde aprender esta fascinante profesión, en la que paciencia y conocimiento se unen a un aprendizaje continuo, ya que el relojero nunca deja de aprender su profesión. Tanto es así que hace más de 10 años que decidió crear una escuela de relojería en la capital, un centro donde poder enseñar a todos los que sientan esta pasión relojera, esa necesidad de saber y sentir cómo funciona un reloj, con el fin de que haya un relevo generacional y España pueda contar con relojeros en el futuro. Este trabajo ha dado sus frutos, y desde hace unos años, puedo decir orgullosa que los mejores relojeros de nueva hornada que hoy día están en los talleres de las marcas más importantes en este país, han salido de la escuela de mi padre. Me emociona encontrarlos en algunas tiendas y talleres y que me manden recuerdos para él, parece que un hilo invisible nos une a todos en este pequeño mundo relojero, un engranaje más de tantos que tiene la relojería. En la actualidad, Pedro Izquierdo imparte seminarios de un día donde se aprenden los secretos de la relojería, un día relojero donde desmontar y montar un reloj, lo que supone un divertido acercamiento para los ­aficionados a la relojería que quieran conocer su funcionamiento. Esta trayectoria, y toda una vida dedicada a la relojería, tiene su punto culminante hace unos años cuando, después de escuchar muchas peticiones por parte de clientes y amigos, Pedro Izquierdo lanzó su primer reloj, diseñado y realizado en nuestro país. Dado el carácter español de esta creación y las que seguirían, el deseo fue que cada reloj estuviese estrechamente ligado con algún hecho relevante de la historia de nuestro país, de manera que la colección completa se llama Hispania. El primer reloj de la colección Hispania fue Independencia, un reloj clásico en edición limitada a 150 unidades, con mecanismo de cuerda manual y segundero pequeño. En principio, la caja estaba realizada en oro amarillo si bien luego se sacó una producción especial en acero. El nombre viene dado por la Independencia española y fue un primer ejemplo de la gran relojería que se puede realizar en nuestro país. Ante el éxito alcanzado por el primer reloj, Descubrimiento, en honor al descubrimiento del nuevo continente, fue el segundo modelo lanzado al mercado, un reloj cronógrafo y de cuerda automática, también realizado en edición limitada. Una vez más, la caja estaba realizada en oro y una segunda edición permitió tener el reloj en acero. El tercer modelo que vino a sumarse a la colección fue Reconquista, en el que se optó por una fecha en formato doble y un segundero pequeño. La elegancia de este modelo es única y queda realzada además por el oro rosa en que está fabricado. La mujer fue protagonista en la siguiente pieza del maestro relojero, concretamente con un reloj hiper femenino, automático y en oro, con una esfera nacarada en rosa y números Pedro Izquierdo imparte seminarios de un día donde se aprenden los secretos de la relojería blancos de gran belleza. Una pieza en homenaje a nuestra primera constitución y que recibe el nombre de La Pepa 1812, de la que justamente en 2012 se celebran los 100 años. Otro hito importante fue la Guerra Civil Española y, dentro de ella, fue importante el papel de unos aviones rusos que fueron empleados por el bando republicano. Conocidos en España como Mosca, traducción libre de Mokva, el cuarto reloj de Pedro Izquierdo, el www.spend-in.com 59 • relojes Mosca, se ha convertido ya en todo un clásico gracias a su espectacular caja y diseño de esfera. Siguiendo con el tema de la aviación, el siguiente modelo está centrado en los famosos relojes B-Uhr, los Observadores, es decir, aquellos modelos que, siguiendo unas estrictas guías de estilo y funcionalidad, fueron empleados durante la Segunda Guerra Mundial por los aviadores. El Observador de Pedro Izquierdo, esta vez con cuatro esferas diferentes, reproduce fielmente estos modelos, de gran tamaño, y añade una tapa posterior que permite ver el mecanismo o bien cubrirlo de pequeños golpes. Hasta el día de hoy, Tartessos es la última creación de este relojero y, quizá, una de las más especiales. Partiendo de los primeros moradores de la Península Ibérica, los La línea de relojes lanzada por Pedro Izquierdo se diseña y realiza en nuestro país y está ligado a la historia de España Tartessos, este reloj de estética Bauhaus está realizado en edición limitada a 75 unidades, ya que cuenta con un mecanismo de cuerda manual vintage recuperado por el maestro y empleado en este precioso modelo. Es importante destacar que todos los relojes vienen con una esfera adicional, normalmente en otro color, lo que permite personalizar y cambiar la apariencia de un reloj con sólo un pequeño detalle. Muchos coleccionistas quieren contar con la colección completa, de manera que eligen de antemano el número especial para todas las piezas. Un recorrido por la historia de la relojería, con importantes paradas en cada una de estas piezas mecánicas fabricadas y que, sin embargo, no se aleja de las nuevas tecnologías uniendo sinergias. Tanto es así, que hace ya algún tiempo nació el foro www.foroderelojes.es un punto de encuentro entre aficionados donde Pedro Izquierdo aporta su conocimiento y experiencia personal dentro del mundo de la relojería, pero que, como cualquier foro, principalmente es un nexo de unión entre los apasionados del reloj. En definitiva, una trayectoria impresionante de la que beber y con la que descubrir cada día nuevos retos relojeros, una profesión que nace de los más profundo de su ser y con la que yo he crecido y que, afortunadamente, vivo día a día. 60• www.spend-in.com