PSICOANALISIS DEL HÁBITO por FIDIAS DE FUMAR * R. OESIO Hoy hemos de hablar de un hábito tan común y tan incorporado a nuestras costumbres, que con dificultad logramos tomar la distancia suficiente para ocuparnos de él como de un objeto. Resulta extraño que Freud, fumador de veinte cigarros por día, no haya aportado nada que aclarara el sentido inconsciente de su "adicción". Empleo el término "adicción" para el fumar de Freud, porque Jones [3] considera que para Freud fumar era algo más que un hábito simple. Según J ones, la "adicción" al tabaco explicaría ciertas dificultades de Freud para la comprensión de los toxicómanos. El misma Freud decía que su pasión por el fumar le estorbaba para aclarar algunos problemas psicológicos. La actitud de Freud frente a su "adicción" nos permite comprender que se haya estudiado poco el significado psicológico del cigarrillo. En una carta a J ones [3], refiriéndose a ciertas alteraciones físicas que por entonces estaba padeciendo y que él en parte atribuía al tabaco, habla de una imposibilidad de reconocer los procesos psíquicos de uno mismo, y que para él el lado físico de sus procesos era más evidente; como un ejemplo cita su observación de la brusca intolerancia manifestada por su músculo cardíaco ante el tabaco. Es decir que, aún para un observador de los contenidos psicológicos de nuestros actos tan agudo como Freud, el trastorno físico que le provocaba el tabaco era más evidente que el motivo psicológico. Oonociendo la relación existente entre su "adicción" y el cáncer que le sobrevino en el paladar, podemos suponer los contenidos masoquistas de su hábito de fumar, cuya represión había de condicionar el rechazo del estudio del tema. En unas líneas del ya citado libro de J ones, donde se transcribe una carta de Freud, aparece en forma dramática el carácter de su fijación al tabaco. Dice J ones : "A fines de 1917 tuvo lugar algo que nuestro conocimiento de lo que ocurrió después nos tienta a llamarlo siniestro. Freud había quedado con muy pocos de sus amados cigarros, lo que le afligía. «Ayer fumé mi último cigarro» -transcribe J ones- «y desde entonces me siento de mal humor y cansado. Me han aparecido palpitaciones y una dolorosa hinchazón en el paladar, que he notado desde los días de escasez (¡, cáncer?). Entonces un paciente me trajo cincuenta cigarros, encendí uno, me sentí animado y la afección del paladar desapareció rápidamente. No lo hubiera creído de no haber sido tan llamativo». Esto fué seis años antes que el cáncer lo atacara allí; como sabemos que los cirujanos hablan de un estado precanceroso, la conexión con el fumar es indudable". * Presentado ante la Sociedad de psicología médica, psicoanálisis y medicina psieosomátíen, el 7 de junio de 1956. 369 PSICOANÁLISIS DEL HÁBITO DE FUMAR Las razones que alejaron a Freud del análisis de su "adicción", y que según nuestra suposición habrían estado basadas en la represión de sus tendencias de muerte (masoquismo), nos darían la explicación de por qué han sido tan pocos los trabajos en que se estudia la psicología del hábito de fumar. La costumbre de fumar fué objeto de la atención de algunos psicoanalistas. Fenichel [1] se ha ocupado de ella, revelando cómo al fumar el analista se permite una descarga leve que puede ser beneficiosa para su trabajo. En un trabajo Melanie Klein [5] nos muestra cómo para un paciente el fumar del analista simbolizaba el coito entre los padres. Para M. Langer [4], el fumar representa la satisfacción de un placer instintivo de naturaleza oral. A. Garma [2] interpreta al cigarrillo que aparece en el sueño de un paciente como un símbolo del pecho materno nutricio, cargado con contenidos sadomasoquistas. Veamos cómo se establece este hábito: lo más frecuente es que, próximos a la pubertad o dentro de ésta) un amigo se encarga de nuestra formación como fumadores. La iniciación suele ser traumática. Posteriormente, y luego de un sufrido aprendizaje, el cigarrillo se transforma en una necesidad de la que ya no podemos prescindir. A partir de entonces entra en la personalidad a la manera de una prótesis. Para el "adicto", el cigarrillo aparece mezclado con casi todos los momentos de su vida. Al despertar enciende el primero, alterna sus comidas con cigarrillos, y en medio de la noche, cuando se despierta, recurre al tabaco. El fumar se transforma en una fuente de constante preocupación, y la falta de cigarrillo provoca una seria reacción general. En la vida social del fumador, el cigarrillo está siempre presente. Cuando más importante le es el intercambio con el otro, más se intensifica su necesidad. Es muy frecuente que lo encontremos combinado con el café y el alcohol: dos elementos que cumplen una función social parecida a la del cigarrillo. Otro aspecto de la vida del fumador es la relación existente entre su hábito y sus variaciones somáticas. En primer término se destacan las alteraciones en la boca: la inflamación de mucosas, el ennegrecimiento de las piezas dentarias, el mal gusto y el empastamiento de la boca, etc. Luego están las gastritis, y otros trastornos gastro-intestinales. A nivel de las vías respiratorias aparecen los síntomas de irritación crónica, y todos conocemos,ya que es de actualidad, hasta qué punto se lo ha asociado al cáncer de este aparato. También el aparato circulatorio sufre las consecuencias de la intoxicación tabáquica. La asociación entre el fumar y las tendencias orales es obvia; el cigarrillo entre los labios, el chupar del mismo, la expresión popular "tragar el humo", ya nos la están señalando. De este modo se explica la relación que encontramos entre el fumar y la obesidad; es frecuente que cuando el fumador se abstiene aumenta de peso rápidamente. Si agregamos a estas consideraciones un rasgo que he encontrado regularmente en los " ndíetos " al cigarrillo -una fij ación a la madre internalizada en el inconsciente, y muchas veces una intensa dependencia para con su madre en la realidad- podemos pensar que el hábito de fumar está expresando FIDIAS R. CESIO la existencia en el inconsciente de una marcada fijación es decir, a una representación del pecho materno. 370 a etapas orales, Ahora veremos estos componentes en el historial de un caso estudiado profundamente por el método psicoanalítico. Se trata de un paciente de cuarenta años que llegó al tratamiento por padecer una neurosis de angustia. Además sufría por una gastritis de muchos años de evolución. Su padre, un hombre débil, sometido a la esposa, abandonó el hogar cuando el paciente tenía seis años. Él vivió en el ambiente infernal que la madre creaba a su alrededor. Cuando nuestro paciente tenía doce años la madre falleció por un cáncer de mama. Durante la corta enfermedad de la madre, a nuestro paciente le impresionaba dolorosamente la visión de la prótesis mamaria. A través de una dura lucha logró labrarse una posición económica, ·se casó y tuvo dos hijos. Su hábito de fumar se había desarrollado según la linea clásica. Lo adquirió en la pubertad y pronto alcanzó una gran intensidad (fumaba 50 cigarrillos. por día) que se mantuvo constante. Cuando hablaba de su "adicción", la asociaba a su gastritis. Los médicos que lo trataron por esa enfermedad le señalaron el efecto nocivo que el cigarrillo tenia sobre su estómago, efecto que él mismo había comprobado. También era frecuente que asociara el comienzo de su hábito de fumador con la masturbación de su pubertad y con sus episodios de impotencia. Como resultado de tanto fumar tenía los dientes ennegrecidos y siempre estaba con un desagradable gusto en la boca, y sus trastornos digestivos lo atormentaban. Sentía náuseas y frecuentes dolores de cabeza y sufria de una pertinaz bronquitis. Al margen de su vida matrimonial mantenía relaciones con otras mujeres, le gustaban las de tipo provocativo, las "vamp". Eran mujeres que no le daban nada, sino que lo "chupaban", pues le sacaban dinero y energía. Si bien en un nivel estaban representando el "revenant" de la madre muerta sobre quien había proyectado su voracidad, en un plano más profundo estaban simbolizando su propio "vampirismo". En estas salidas aparecía este "vampirismo" en forma manifiesta, ya que fumaba constantemente hasta que, según sus palabras, le dolían los pulmones, y se sentía mareado y descompuesto; siguiendo una expresión vulgar "fumaba como un vampiro" (recordemos que la palabra "vamp" deriva de "vampiro ", es decir, un espectro que deja la tumba por las noches y chupa la sangre de las personas dormidas). En general, después de estas salidas, se sentía intoxicado por el cigarrillo y sufría por su estómago. El cigarrillo había estado simbolizando a la representación -que él tenia en el inconsciente del pecho materno. Era como una prótesis que nuestro enfermo necesitaba, y que él asociaba con la prótesis que la madre usó después de la mastectomia. El humo aparecía como el sustituto de lo que para él era la leche materna; blanco y tibio, tóxico, 'sin carácter alimenticio. Para este enfermo la "adicción" al cigarrillo estaba simbolizando su fijación al recuerdo de los aspectos malos de la madre. El humo repre- 371 PSICOANÁLISIS DEL HÁBITO DE FJJ:.MAR sentaba lo que había recibido de ésta, la parte nociva que él se tuvo 'que tragar y que luego idealizó. Sus síntomas digestivos ligados a su hábito, su mal gusto en la boca, su gastritis y sus alteraciones intestinales, refuerzan la comparación del humo con un alimento dañino que ingerido provocaría los mismos síntomas. En el cigarrillo encontraba lo mismo que 'en esas mujeres "vamp", una apariencia de placer y en lo profundo JmR frustración y la incorporación de algo nocivo. El carácter frustrante de esa experiencia al dejarlo insatisfecho lo obligaba a repetirla una ..Y otra vez, de ahí su necesidad de fumar un cigarrillo tras otro, ya que en el objeto en el que buscaba la satisfacción, paradójicamente encontraba simbolizada su frustración. La relación entre el fumar y la obesidad en este caso era bien marcada. Cuando en una oportunidad dejó el cigarrillo por un tiempo, compelido por el médico que le trató su gastritis, aumentó rápidamente .de peso, y al retomar su hábito volvió al de costumbre. El contenido psíeológico de la obesidad, según lo que conocemos a través de los trabajns de A. Rascovsky [6], Y por los presentados en el symposium [7]llue sobre ese tema tuvo lugar el año pasado en la Asociación Psieoanalítiea Argentina, corresponde a situaciones sadomasoquistas muy ligadas R los niveles orales del desarrollo, y podemos comparar el contenido psieológíeo de su obesidad con el de su "adicción" al cigarrillo. Para el paciente, volverse obeso ere, volverse homosexual, y por .eso pensaba que si abandonaba el cigarrillo perdería su virilidad. El análi~ sis de sus fantasías homosexuales manifiestas nos permitió comprender que de ese modo estaba enmascarando el sometimiento pasivo a la madre'; el cigarrillo representaba al pene, que a su vez aparecía como el símbolo del pecho materno. . Nuestro enfermo tenía necesidad de fumar especialmente en las OpD~ tunidades en que estaba tratando asuntos que le importaban mucho, sea a solas o cuando estaba con otras personas. En estas últimas oportnrtidades, fumando lograba sentirse libre de la tensión que le provocaba la dificultad que tenía para entenderse con la gente. Cuando en las sesiones llegaba a un punto en que la situación transferencial se hacía tensa, 'a una relación transferencial en la que predominaban sus angustias homosexuales, sacaba un cigarrillo, y de ese modo, al realizar a través de un acto simbólico su entrega homosexual masoquista neutralizaba su angnstia y se tranquilizaba. Cuando en una de esas oportunidades se encontró sin cigarrillos llegó a sentirse excitado homosexualmente, excitación que inmediatamente se transformó en una crisis de angustia. Es· decir, que cuando no lograba ligar sus tendencias sadomasoquistas al cigarrillo las proyectaba en el ambiente. creando así una difícil relación social. En otro paciente veremos distintos aspectos de los contenidos' psicológicos del hábito que estamos estudiando. Se trata de un enfermo del corazón, a quien el especialista le había prohibido el cigarrillo. Pesa-a esta indicación, nuestro paciente fumaba un cigarrillo tras otro, Y.:no había poder que lo separara del tabaco. Vivía en un estado erepuseular, sin ningún interés por las cosas. Durante las sesiones hablaba poco y fumaba constantemente. No sentía ningún placer con el cigarrillo, pero :FIDIAS R. CESIO 372 sin él se le despertaba una angustia insoportable. De este modo vrvia ..envuelto en un círculo cerrado por el cigarrillo. En el curso de una sesión .estaba sumido en su sopor, cuando por una razón circunstancial tuve que · .levantarme de mi sillón. Mis movimientos lo alarmaron y en medio de · ;una crisis de angustia buscó ávidamente sus cigarrillos para cerrar, fu.mando, el círculo que yo acababa de romper. Como no encontró lo que ', buscaba se vió obligado a cerrar el círculo recurriendo a mí, y en ese -momento estableció una intensa relación de dependencia, que le permitió · .comprender el sentido que para él tenía el cigarrillo. Otras veces, mientras hablaba de situaciones difíciles, al llegar a cierto montante de angustia fumaba y de esa manera neutralizaba la angustia, pero en cambio .entra ba en un estado de sopor que lo paralizaba .: ..':.. El análisis de estos estados nos reveló que estaban en relación al some:·timiento a su madre, quien no le había permitido actitudes que signifi:.t;1:lr;lll posturas dinámicas en la vida, y en cambio lo había tenido bajo ..)5)1 dominio tiránico reduciéndolo a una extrema pasividad. Recostado '. en el diván con el cigarrillo entre los labios, dormitando, me hacía pensar :/~~~un niño con su chupete o mamadera, pero con una mamadera que en . lugar de darle algo que le significara la vida, le estaba dando muerte · -:-:-:noolvidemos que él sabía que por su enfermedad cardíaca el fumar .. .Ie estaba acortando la vida . r. Veamos en otro caso cómo aparece el cigarrillo simbolizando la fijaSe trata de un '. paciente de 22 años, muy fumador, que vivía con la madre en una rela.ción casi simbiótica. El análisis le obligaba a ocuparse críticamente de esa relación, llevándolo, cuando lo enfrentaba con su imposibilidad de " desprenderse de la madre, a situaciones de extrema ansiedad. Cuando '. en una sesión estaba hablando de este problema, al hacérsele intolerable .. 'continuar se interrumpió para fumar, y pudimos comprender que el cigarrillo era un volver a unirse a la madre, recuperando así esa dependencia · .que el análisis había amenazado destruir. También el cigarrillo aparecía . . siempre en sus relaciones sociales, defendiéndolo de la angustia que emer· .gía cada vez que tenía que romper ese intenso ligamen con la madre. . . Nuestro enfermo pensaba que el cigarrillo lo afectaba en su aparato '~respiratorio limitándolo en su capacidad pulmonar, y a este efecto atri·:buía la fatiga que le sobrevenía en cuanto caminaba algunas cuadras. De " este modo el cigarrillo adquiría el contenido simbólico de limitarlo así como había hecho la madre, que nunca le había permitido alejarse del hogar. .... .Si bien fumaba aspirando el humo profundamente, con sorpresa le .... escuché decir que él no tragaba el humo; y él también se sorprendió al observar que lo aspiraba. Analizamos esto y vimos que su ignorancia . respecto a la profundidad de su relación con el humo simbolizaba el reehazo que experimentaba a reconocer la profundidad de su vinculación con " la madre. · -eión a los aspectos malos de una madre internalizada. o. .¡ 373 PSICOANÁLISIS DEL HÁBITO DE FUMAR BIBLIOGRAFíA [1] F.ENICHEL,O.: Problems [2] ['3 ] [4] [5] [6] [7] ot Psychoanalytic Technique. The Psychoanalytie Quarterly, 1939, 8. GARMA, A.: Vicisitudes de la pantalla del s¡¡efío y del [enomcno de Lsakouier. Revista de Psicoanálisis, 1955, 12, 465 . .TONES,E.: Sigmund Ereud : Lif e and Work, Years of Maturity. Loudon, The Hogarth Press, 1955. LANGER, M.: Sobre un detalle insignificante: el fumar durante el análisis. Revista de Psicoanálisis, 1946-47, 4, 220. KLEIN, MELANIE: El psicoanálisis de niños. Buenos Aires. Asociación Psicoanalítica Argentina, 1948. RASCOVSKY,A., RASCOVSKY,M. y SCHLOSSBERG,T.: Basic Psyehic Structure of the Obese. Int . .T. Psyeho-Anal., 1950, 31, 144. Symposium anual 1955, Obesidad y perturbaciones del comer. Revista de Psicoanálisis, 1956, 13, 152. RESUMEN Y CONCLUSIONES Después de citar unas observaciones de E. Jones sobre la "adicción" de Freud al tabaco, el autor aporta el material de tres pacientes relacionado con el hábito de fumar, y llega a las siguientes conclusiones: El fumar es la expresi6n de una dependencia masoquista de una "madre internalizada" dominante y frustradora. El cigarrillo aparece como un símbolo del pecho y del pene, símbolos a la vez que representan a esta imago materna. La relaci6n entre el fumar y las tendencias orales es manifiesta. La ineorporaci6n del humo está representando a lo que da esa madre internalizada, un falso alimento que frustra y daña. La fijación a ese objeto interno condiciona la tenacidad de este hábito. Por otra parte, la presencia en todos nosotros de la imago de una madre mala (que coexiste con su opuesto, la imago de una madre buena), es una condición suficiente para explicar la universalidad de este hábito. SUMMARY AND CONCLUSIONS After quoting some remarks by E. Jones on Freud's addiction to tobaeeo, the writer presents material from three patients that is conneeted with the habit oí smoking, and comes to the following conclusions : Smoking is the expression of a masoehistic dependence on a dominant and f'rustrating "internalized mother". The cigarette appears as a symbol of the: breast and of the penis, whieh are, in their turn, symbols of this mother-imago, The relationship between smoking and oral tendencies is plain. The ineorporation of the smoke represents what this internalized mother gives, namely, false food which frustrates and damages. The fixatíon on this inner object conditions the tenacity of this habito Moreover, the presence in each of us of abad mother-imago (whieh coexista with its opposite, a good mother-imago ) is a sufficient eondition to explain the universality of this habito 374 FIDIAS R. CESIO PSYCHANALYSE DE L'HABITUDE DE FUMER Apres avoir cité quelques observations de E. Jones a propos du goüt de Freud au tabac, l'auteur rapporte le matériel de trois patients au méme sujet et arrive aux conclusions suivantes: le fait de fumer est l'expression d'une dépendance mosoehiste a une mere interne, dominatrice et frustratrice. La cigarrette apparait comme un symbole du pénis et du sein, symboles qui, a leur tour, représentent cette imago maternelle. Le rapport entre le fait de fumer et les tendances orales est manifeste. L'incorporation de la fumée représente ce que cette mere interne donne: un faux aliment qui frustre et fait de mal. La fixation a cet objet interne conditionne la ténacité de cette habitude. D'autre part, la présence chez nous touts de l'imago d'une mere mauvaise (qui coexiste avec son opposé: l'imago d'une mere bonne), est une condition suffisante pour expliquer l'universalité de cette habitude. ZUSAMMENFASSUNG Psychoanalyse der Rauchsucht Naeh Anfuehrung einiger Erwaegungen von E. Jones ueber die "Tabaksucht" Freuds, legt der Verfasser das Material von. drei Patienten in Beziehung auf die Rauchsucht dar und gelangt zu folgenden Schluessen: Das Rauchen ist der Ausdruck einer masoehístischen Abhaengigkeit an eine dominierende und versagende "internalisierte Mutter". Die Zigarette erscheint dabei als das Symbol der Brust und des Penis, die gleichzeitig die Symbole dieser Mutterimago sind. Die Beziehung zwischen dem Rauchen und den oralen Tendenzen ist off ensiehlieh. Die Einverleibung des Rauches vertritt das was diese internalisierte Mutter gibt, also eine falsche Ernaehrung die versagt und schaedigt. Die Fixierung an dieses interne Objekt bedingt die Zehigkeit dieser Gewohnheit. Andrerseits ist ihre Allgemeinheit zur Genuege erklaert durch das Vorhandensein, in allen Mensehen, einer Imago der boesen Mutter die zusammen mit ihrem Gegenstueck, der Imago einer guten Mutter, besteht.