Servus! Esto es lo que puedes decir en Donrbirn para saludar a la

Servus!
Esto es lo que puedes decir en Donrbirn para saludar a la gente. Soy Izaskun, y me
gustaría transmitirte parte de lo que he vivido en Austria durante los cuatro meses en los que
ha consistido mi estancia. Me imagino que si lees ésto, es porque la idea de Erasmus ronda en
tu cabeza, o incluso hasta sólo te falta definir el destino. Optes por un destino u otro, que nada
te eche para atrás. Yo opte por Austria y la Facchoschule Vorarlberg fue mi universidad de
acogida.
Austria es un país precioso. El hecho de que se encuentre en el centro de Europa
brinda unas oportunidades culturales increíbles, dado a que la posibilidad de desplazamiento
entre países es muy sencilla. Vorarlberg es la región de Austria más occidental. Se encuentra
muy cerca de las fronteras con Alemania, Suiza y Liechtenstein. El Lago Constanza se
encuentra a escasos kilómetros.
Dornbirn es una ciudad de unos 40.000 habitantes y tiene la universidad de toda la
región. Es una ciudad muy acogedora, la mayoría de las casas son unifamiliares y se respira
mucha tranquilidad. Está equipada con todo tipo de servicios; desde gimnasios, piscina, centro
comercial, hospital, hoteles, cines, museos, supermercados… Tiene un teleférico que llega
hasta la cima del Karren y desde la cual tienes unas vistas panorámicas de Dornbirn y del Lago
Constanza. El servicio ferroviario y de autobuses es excelente.
En cuanto a la universidad, en la Oficina Internacional trabajan cuatro personas
continuamente, lo que refleja la gran cantidad de estudiantes internacionales que acapara. La
primera semana que estuvimos allí tuvimos un Orientation Program, una semana llena de
actividades y excursiones con todos los erasmus, para conocerse mejor y conocer mejor la
zona en la que vas a estar. Están continuamente pendientes de ti y se ponen en contacto
contigo antes de llegar allí para organizarte la estancia. Así, te envían un formulario para que
elijas el tipo de alojamiento que quieres. También te ponen en contacto con el tutor del
proyecto, te asignan un alumno-tutor, ofrecen a los erasmus un curso de alemán y se encargan
de matricularte en otras asignaturas si así lo deseas. Tienes acceso a las salas de ordenadores
las 24 horas del día con una clave particular. El restaurante ofrece unos cuantos menús a
diferente precio.
Es esencial poder desenvolverse en inglés. En la universidad todo el mundo habla
inglés, además de alemán. Es muy raro encontrar a alguien en Austria que no sepa nada de
inglés, por lo que no tienes apenas problemas en la mayoría de situaciones cotidianas, como ir
al supermercado.
La relación con el resto de alumnos erasmus es muy especial. Se establecen unos
lazos de amistad muy fuertes porque son tu nueva familia. Las fiestas son continuas y la
diversidad cultural es muy interesante. Es muy curioso darse cuenta de los caracteres de la
gente por países. Compartes muchísimas cosas con ellos y llega un punto que te parece que a
algunos los conoces de toda la vida.
Yo opté por una residencia como alojamiento, la Kolpinhaus. Tienes tu habitación
individual con baño. Tienes dos cocinas para utilizar diariamente y otra destinada sólo a las
fiestas, lavandería con lavadoras y secadoras y salón con televisión. Allí vivíamos unos cuantos
alumnos erasmus lo que te da la posibilidad de contactar con ellos más fácilmente. Puedes
entrar y salir las 24 horas del día, te limpian la habitación y tienes conexión a Internet gratis. Se
trata de una especie de centro cultural por lo que se organizan un montón de actividades y
tiene restaurante propio.
En cuanto a la forma de vida en Dornbirn, son muy diferentes los horarios en relación
con los de aquí. Se dedica muy poco tiempo a comer, por lo que el bocadillo es muy socorrido.
Las tiendas cierran sobre las 6 de la tarde, por lo que todo se adelanta. Cenan sobre las 7 de la
tarde, por lo que es normal encontrarse a muy poca gente paseando por la calle a esas horas.
El resto de Europa también tiene éstos horarios, por lo que nosotras éramos las que peor lo
llevábamos. Pero, como no teníamos demasiadas clases, nos permitíamos comer bien y
echarnos la siesta. La gente es muy amable.
Como llegamos a finales de agosto y nos marchamos a finales de diciembre, hemos
podido disfrutar del buen tiempo, del frío, de la lluvia y de mucha nieve. El paisaje es precioso
de todas formas, pero un buen abrigo y unas buenas botas son esenciales.
A modo orientativo, me habré gastado unos 800 euros al mes, contando la residencia,
la comida y los gastos habituales.
Espero haberte ayudado un poquito en tu decisión, pero no me gustaría despedirme sin
decirte que quizá éste sea el único momento de tu vida en el que puedas vivir ésta experiencia
de ésta manera.
Mucha suerte,
Izaskun