ASAMBLEA PARLAMENTARIA PARITARIA ACP-UE Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente 17.2.2012 PROYECTO DE INFORME El impacto social y medioambiental de la minería en los países ACP Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente Coponentes: Job Ndugai (Tanzania) y Michèle Rivasi PARTE A: PROYECTO DE PROPUESTA DE RESOLUCIÓN DR\892444ES.doc ES AP101.156/A ES Página EXPOSICIÓN DE MOTIVOS (Publicada por separado) ........................................... 2 PÁGINA REGLAMENTARIA ................................................................................. 3 PROYECTO DE PROPUESTA DE RESOLUCIÓN ................................................. 4 EXPOSICIÓN DE MOTIVOS (Publicada por separado) AP101.156/A ES 2/8 DR\892444ES.doc PÁGINA REGLAMENTARIA En su reunión de 15 de mayo de 2011, la Mesa de la Asamblea Parlamentaria Paritaria ACP-UE autorizó a su Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente a elaborar un informe, de conformidad con el artículo 2, apartado 8, de su Reglamento, sobre el impacto social y medioambiental de la minería en los países ACP. En su reunión de 5 de octubre de 2011, la Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente designó coponentes a Job Ndugai (Tanzania) y Michèle Rivasi. La Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente examinó el proyecto de informe en sus reuniones de los días 21 de marzo y 26 de mayo de 2012. En la última de estas reuniones, la Comisión aprobó el proyecto de propuesta de resolución adjunto. Participaron en la votación: ... La resolución se presentó para su aprobación el … DR\892444ES.doc 3/8 AP101.156/A ES PROYECTO DE PROPUESTA DE RESOLUCIÓN El impacto social y medioambiental de la minería en los países ACP La Asamblea Parlamentaria Paritaria ACP-UE, Reunida en Horsens (Dinamarca) del 28 al 30 de mayo de 2012, Visto el artículo 18, apartado 1, de su Reglamento, Visto el Acuerdo de Asociación ACP-CE («Acuerdo de Cotonú») y, en particular, el artículo 8, apartado 4, sobre la no discriminación, Visto el Pacto Mundial de las Naciones Unidas y las Líneas Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales por las que se articulan los principios de conducta empresarial responsable, Vista la Iniciativa Mundial de 2005 para la erradicación del trabajo infantil en la minería y la cantería de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Vista la «Visión de la Minería Africana», adoptada por los Jefes de Estado de la Unión Africana en febrero de 2009, Vista la Declaración de Bruselas sobre desarrollo y gestión sostenibles de la industria de recursos minerales de los Países ACP (ACP/89/008/10), aprobada en la primera Reunión de Ministros ACP responsables de la industria de recursos minerales, celebrada del 13 al 15 de diciembre de 2010 en Bruselas (Bélgica), Vistos el alcance y las actividades del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)/Grupo Internacional sobre Uso Sostenible de los Recursos Naturales, Visto el estudio de la Organización Internacional del Trabajo sobre «El trabajo infantil en las minas de oro: el problema» (junio 2006), Vista la Resolución del PE, de 15 de diciembre de 2010, sobre el futuro de la Asociación estratégica UE-África a raíz de la tercera Cumbre UE-África (P7 TA(2010)0482), Vista la Resolución del PE sobre «una estrategia eficaz para Europa en relación con las materias primas» (P7_TA(2011)0364)), Vista la Resolución del PE, de 25 de noviembre de 2010, sobre la responsabilidad social de las empresas en los acuerdos de comercio internacional (P7_TA(2010)0446), AP101.156/A ES 4/8 DR\892444ES.doc Visto el estudio en materia de explotación mineral, sostenibilidad medioambiental y desarrollo sostenible del Centro de Políticas Comerciales de África en las regiones CAO, SADC y CEDEAO (2009), Visto el informe del Grupo de Expertos de las Naciones Unidas sobre Recursos naturales y conflictos en África: transformación de un obstáculo para la paz en un elemento de paz (2006), Vistas las resoluciones de las Naciones Unidas sobre los «diamantes manchados de sangre», y en particular la Resolución 1459 (2003) del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre el sistema de certificación del proceso de Kimberley, Visto el informe de la Comisión de Asuntos Sociales y Medio Ambiente (ACPEU/100.xxx/xx/A/fin.), A. Considerando que, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), los recursos minerales no renovables se clasifican en tres categorías: minerales energéticos como petróleo, gas, uranio, carbón; minerales metálicos como cobre, cobalto, bauxita y minerales no metálicos como piedras preciosas (diamante), B. Considerando que la mayoría de los países ACP, especialmente en África, poseen recursos minerales abundantes como metales, petróleo, diamantes, oro, hierro, cobalto, uranio, cobre, bauxita o plata y que, a pesar de estas riquezas, la mayoría de la población vive en la pobreza, C. Considerando que la mayoría de los minerales se exportan en granel mineral o concentrados o metales sin que ello suponga mucho valor añadido en los países productores ACP, D. Considerando que la opacidad y confidencialidad de los contratos o acuerdos mineros ha contribuido a la manipulación de Estados débiles y a la anulación del escrutinio parlamentario, E. Considerando que, en ausencia de gobiernos firmes que regulen y controlen el sector de la minería, las actividades de las compañías mineras de los países ACP han provocado importantes daños medioambientales y sociales; F. Considerando que es sabido que los ingresos procedentes de la minería ilegal avivan los conflictos internos; Considerando que la explotación ilegal de recursos naturales en países más expuestos y devastados por conflictos sigue constituyendo una de las causas que contribuye a que estos surjan y se reanuden, como en Angola, la República Democrática del Congo, Sierra Leona y Liberia; DR\892444ES.doc 5/8 AP101.156/A ES G. Considerando que desde la década de 1990 hasta 2008 la producción mundial de los 14 minerales principales ha aumentado de 1 millón de toneladas métricas a alrededor de 2,5 millones de toneladas métricas; Considerando que se espera que la demanda global aumente de forma significativa, dado que la población alcanzará los 9 000 millones de personas para 2050 en un contexto de crecimiento, urbanización y consumo; Considerando que se espera que la demanda de cobre, mineral de hierro y aluminio se duplique en los próximos quince a veinte años, H. Considerando que el Centro de Políticas Comerciales de África ha concluido que «muchas compañías mineras retienen la mayoría de sus ganancias en cuentas extraterritoriales, conservando una porción muy pequeña en cuentas nacionales a fin de cubrir costes operativos locales», 1. Expresa su profunda preocupación por que, a pesar del hecho de que los países en desarrollo, particularmente en África, poseen ricos recursos minerales, el modelo comercial actual por el que los países en desarrollo exportan materias primas y compran productos manufacturados a los países industrializados, los ha sumido en una pobreza permanente; 2. Pide a los gobiernos ACP-EU que pongan fin a la «maldición de los recursos» y que coloquen la riqueza mineral de los países ACP, particularmente de África, en el núcleo de su estrategia de desarrollo en beneficio de toda la población, en lugar de enriquecer a inversores y pequeñas élites sin otorgar beneficios a los ciudadanos de a pie; 3. Pide a los países ACP que renegocien o revisen los contratos existentes con objeto de aumentar los ingresos fiscales de aplicación a los minerales, a fin de permitir a los gobiernos financiar las necesidades básicas de la población; Insta a los países ACP a desplegar un equipo de expertos cualificados y con experiencia a la hora de negociar contratos sobre minerales con las compañías mineras; 4. Destaca el importante papel que los parlamentos nacionales y las organizaciones de la sociedad civil pueden desempeñar en la supervisión de acuerdos o contratos de minería para cumplir con su responsabilidad ante sus ciudadanos y romper con la cultura del secretismo; 5. Destaca que son necesarios marcos legislativos y regulatorios transparentes y de ejecución eficiente que rijan la industria de los recursos minerales en los países ACP; Pide a los gobiernos y parlamentos de los países ACP que adopten políticas y regulen la inversión extranjera en interés público, en consulta con la sociedad civil, de modo que esta inversión beneficie a la economía local, genere valor añadido nacional y fomente el desarrollo; 6. Pide a los gobiernos ACP que pongan fin a las salidas financieras masivas procedentes de sus países, considerando que se estima que, entre 1970 y 2008, el AP101.156/A ES 6/8 DR\892444ES.doc flujo financiero ilícito procedente de África, incluyendo la evasión fiscal, ascendió a 865 000 millones de dólares, según Global Financial Integrity (GFI); 7. Insiste en abordar el asunto del blanqueo de capital que, a tenor del Director del Grupo intergubernamental de tareas contra el blanqueo de dinero en África occidental (GIABA), representa 337 000 millones de euros solo en África occidental, incluyendo una parte importante de evasión fiscal, mientras que el 10 º Fondo Europeo de Desarrollo para países ACP asciende a 22 682 millones de euros y cubre un periodo de cinco años (2008-2013); 8. Recibe con satisfacción la Ley Dodd Frank, que obliga a todas las empresas petroleras, de gas y mineras que cotizan en bolsa en los EE. UU. a publicar lo que pagan al Gobierno y a denunciar la extracción ilegal de minerales; 9. Pide a los Gobiernos ACP y a la Comisión, en sus respectivas capacidades, que presenten una propuesta legislativa sobre la revelación automática de los beneficios y los impuestos abonados por parte de las empresas multinacionales en cada uno de los países en desarrollo, a fin de combatir los excesos ligados a paraísos fiscales, evasión fiscal y fugas ilícitas de capital; 10. Destaca que los países ACP deben garantizar que las licencias mineras incluyan disposiciones jurídicamente vinculantes que incorporen normas sociales y medioambientales; Pide a la UE que incluya obligaciones y deberes a fin de que los inversores extranjeros que operen en los países en desarrollo respeten los derechos humanos, las normas medioambientales y las normas laborales fundamentales de la OIT; Considera que las empresas de la UE deben responsabilizarse jurídicamente en sus países de origen de las violaciones de los mencionados derechos por parte de sus filiales en el extranjero y de las entidades que controlan; 11. Señala que la minería artesanal y a pequeña escala (MAPE) puede desempeñar un papel vital en la vida local, proporcionando empleo e ingresos a un gran número de personas; Pide a los países ACP que regulen este sector, que legislen contra la utilización de sustancias tóxicas prohibidas a nivel internacional, tales como el mercurio y el cianuro, y que ofrezcan unas condiciones de trabajo seguras a los mineros artesanales y a pequeña escala (MAPE), facilitando acceso a los microcréditos para que puedan equiparse con tecnologías inocuas y respetuosas con el medioambiente; 12. Insta a los socios para el desarrollo, incluida la Unión Europea, a que presten asistencia técnica a los países mineros de la ACP para evaluar el impacto medioambiental y social pasado y presente de las actividades mineras, con el propósito de establecer responsabilidades en materia de daños medioambientales y a la salud a todos los niveles, compensar a las víctimas y rehabilitar el ecosistema, de conformidad con el principio «quien contamina, paga»; DR\892444ES.doc 7/8 AP101.156/A ES 13. Hace hincapié en que deben reconocerse los derechos sobre las tierras en sus distintas formas (ya sean individuales o colectivos), a fin de proteger a los miembros de la comunidad y de compensar adecuadamente en caso de inversiones en el sector de la minería o en otros sectores; 14. Anima a los países ACP a crear o fortalecer organismos nacionales dedicados a la ciencia, la tecnología y la innovación, así como la capacidad de supervisión, con el fin de promover el uso de tecnologías ecológicas y la adquisición de conocimientos en la exploración y la minería; 15. Encarga a sus Copresidentes que transmitan la presente Resolución al Consejo de Ministros ACP-UE, al Parlamento Europeo, a la Comisión Europea, a la Presidencia del Consejo de la UE, a la Unión Africana, al Parlamento Panafricano y al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas. AP101.156/A ES 8/8 DR\892444ES.doc