DETERMINACIÓN DE LA COMPOSICIÓN DE ÁCIDOS GRASOS EN GRANOS DE MAÍZ DE USO ESPECIAL Corcuera VR1; Pennisi M3; Kandus MV2; Salerno JC2 1 Com. Inv. Científ. Pcia. Bs. As.; 2 Inst. Genética Ewald A. Favret-INTA C.C. 25 (1712) Castelar; 3 PROPIACampus Tecnológico CIC. Cno Centenario e/505 y 508, 1897 Gonet, La Plata. Correo electrónico= [email protected], [email protected] Abstract The fatty acid composition of the kernels collected from sixteen maize inbreds and thirteen single and double-crosses was determined by means of gas chromatography. The concentration levels found for saturated (SFA´s) and unsaturated fatty acids (MUFA´s and PUFA´s) mostly meet the values published by several authors and organizations. The hybrids termed HC have= 9,2 to 16,4% de palmític acid; 1,1 to 2,5% de stearic acid; 19,3 to 40,1% oleic acid Ω9; 42,6% to 66,5% linoleic acid Ω6 and 0,6% to 1,7% linolenic acid Ω3. The SFA´s level was similar to that reported by ASAGA and ILSI Argentina for corn grains produced in our country. Like in other maizes grown in temperate regions it was found a high correlation between the amount of oleic and linoleic acids both in the inbreds and hybrids (r=0,85 y r= 0,97 respectively). The hybrids HC show an average unsaturated/saturated fatty acids ratio of about 6,0 (range= 4,4 – 7,8) that agrees with the current value published for the species. Most importantly, the analysis performed let detect three inbred materials (CIG15, CIG18 and CIG27) with a very high level of oleic acid and for that reason could be used to develop new high oleic corn hybrids or employed as donors of the high oleic trait. Palabras clave/Keywords maíz ceroso; lisina; ácido oleico; ácidos grasos; cromatografía de gases waxy corn; lysine; oleic acid; fatty acids; gas chromatography Introducción El aceite de maíz juega un rol importante en la dieta humana porque aporta gran cantidad de energía, ácidos grasos (AG) esenciales y vitamina E. Contribuye con AG poliinsaturados (PUFA) que favorecen el control de los niveles de colesterol y la disminución de la presión sanguínea. Es un aceite muy digerible que provee 9 Kcal/gramo. La FAO y la OMS recomiendan incorporar un 2 a 4% de la energía total bajo la forma de AG esenciales. La ingesta de una cucharada diaria de aceite de maíz sería suficiente para satisfacer los requerimientos diarios de AG esenciales de un niño o adulto con buen estado de salud. La calidad del aceite de maíz comienza en el campo porque la semilla empleada, las condiciones de cultivo, el ambiente y el manejo post-cosecha influyen en la misma (Lambert, 2000). Los dos principales factores que afectan el perfil de ácidos grasos del aceite de maíz son el genotipo y el medio ambiente, pero probablemente el empleo de diferentes líneas parentales provocó el mayor cambio en la composición del aceite de maíz en las últimas décadas (Leibovitz y Ruckenstein, 1983; Weber, 1987 y Lambert, 2000). Por lo expuesto, resulta evidente que existe gran diversidad en la calidad de este aceite lo que genera disparidades notorias entre los datos publicados. Por ejemplo, según la FAO tiene reducido nivel de ácidos grasos saturados (SFA)= ácido palmítico y esteárico con niveles medios del 11% y 2% respectivamente. En cambio, FAO también reporta una alta proporción de ácido linoleico con un promedio del 24%. En Argentina, la Secretaria de Agricultura, Ganaderia, Pesca y Alimentos (SAGPyA) en el año 2001 comunicó que la composición promedio de ácidos grasos para el maíz producido en el país es= 45,6% ác. linoleico; 37,2% ác. oleico; 0,6% ác. linolénico; 13,6% ác. palmítico y 1,7% de ác. esteárico. Estos valores fueron corroborados por la Asociación Argentina de Grasas y Aceites (ASAGA) en el año 2003 indicando además que los maíces argentinos tienen en promedio 16% de ácidos grasos saturados (SFA), 37% de ácidos monoinsaturados (MUFA) y 47% de ácidos poli-insaturados (PUFA). Los datos más recientes publicados en Argentina corresponden a ILSI Argentina que en el año 2006 reportó el siguiente perfil de ácidos grasos para el aceite argentino de maíz: ác. palmítico (10,4-14,1%), ác. esteárico (1,5-2,7%), ác. oleico (21,1-40,1%), ác. linoleico (43,1-62,9%) y ác. linolénico (0,8-1,4%). El objetivo de este trabajo fue determinar la composición de ácidos grasos de los aceites crudos del germen de diferentes líneas endogámicas e híbridos de maíz de uso especial o valor aumentado (VEC) desarrollados en Argentina y evaluar la calidad de los mismos. Material y métodos Para realizar este estudio se utilizaron los granos producidos por dieciséis líneas endogámicas de maíz ceroso, maíz de alta lisina y maíz ceroso con alto contenido de lisina. También se emplearon trece cruzas (simples y dobles) derivadas de esas líneas de endocría prolongada. Los materiales genéticos fueron desarrollados en Argentina a partir de la década de 1990 mediante métodos de mejora genética convencional. Durante tres años (2010/11 a 2012/13) se condujeron ensayos de campo en el Instituto de Genética E.A. Favret-INTA Castelar para multiplicar los materiales de estudio mediante polinización controlada y evitar de este modo contaminación con polen foráneo. De cada genotipo se conservó una muestra representativa de granos (10 g) a 4° C hasta la realización de los análisis. Se separaron 10 granos de cada muestra y se les extrajo el germen para obtener la grasa cruda mediante la técnica propuesta por Folch en 1957. La grasa cruda fue utilizada como materia prima del análisis de ácidos grasos mediante cromatografía gaseosa. Se empleó un cromatógrafo Hewlett Packard 6890 provisto con una columna capilar Chrompack CP SIL 88. Las condiciones de análisis fueron: 1temperatura inicial: 185° C durante 3 minutos; 2-Rampa de calentamiento a razón de 3 grados por minuto hasta alcanzar los 230 grados y 3-Mantenimiento de la temperatura de 230 grados durante 25 minutos. El perfil de AG de cada muestra se obtuvo comparando los tiempos de retención relativos de cada uno de ellos respecto de estándares comerciales (NuCheck prep.) analizados previamente en la misma columna. Los contenidos de AG fueron obtenidos del promedio de tres lecturas y expresados en g /100 g del contenido de grasa total. Resultados y discusión La información presentada en la Tabla 1 indica que las líneas endogámicas estudiadas tienen= 9,1 a 32,2% de ác. palmítico; 1,0 a 5,6% de ác. esteárico; 18,3% a 66,6% de ác. oleico Ω9; 8,1% a 60,1% de ác. linoleico Ω6 y 0,4% a 1,3% de ác. linolénico Ω3. Por su parte, los híbridos presentan la siguiente composición de ácidos grasos = 9,2 a 16,4% de ác. palmítico; 1,1 a 2,5% de ác. esteárico; 19,3 a 40,1% de ác. oleico Ω9; 42,6% a 66,5% de ác. linoleico Ω6 y 0,6% a 1,7% de ác. linolénico Ω3. La concentración de AG insaturados resultó similar a la reportada por ASAGA e ILSI Argentina para maíces argentinos. Estos valores son consistentes con otros reportados con anterioridad (Corcuera, 2013; Corcuera et al., 2013). Sin embargo, se detectó un contenido de ácido palmítico algo menor al promedio nacional en el híbrido HC52 (9,2%) y también un contenido bajo de ácido oleico en la cruza simple de maíz ceroso HC62 (Tabla 2). Al igual que en otros maíces cultivados en zonas templadas se halló un alto nivel de asociación entre los niveles de ácido oleico y linoleico tanto en las líneas endogámicas como en los híbridos analizados (r=0,85 y r= 0,97 respectivamente). En los híbridos HC también se observó una asociación significativa entre las concentraciones de ác. esteárico y ác. oleico Ω9 (r= 0,49; p= 0,05) así como entre ác. gadoleico Ω7 y ác. linoleico Ω6 (r= 0,60; p= 0,05). Debe destacarse que se identificaron tres líneas endogámicas con muy alta concentración de ácido oleico= CIG18 (alta lisina), CIG27 (alta lisina y almidón ceroso) y CIG15 (almidón ceroso). Su perfil de AG reveló un contenido de 53,3%, 54,9% y 66,6% de Ω9 respectivamente. Los ácidos grasos más importantes en nutrición humana son: palmítico, esteárico, oleico (Ω9), linoleico (Ω6) y linolénico (Ω3). Los ácidos de las series Ω6 y Ω3 no son fabricados por el cuerpo humano y es imprescindible incorporarlos mediante la dieta. Los ácidos linoleico y linolénico poseen propiedades antiartríticas, antiescleróticas, antiinflamatorias e hipocolesterolímicas. Para un correcto funcionamiento del organismo es necesario que exista una relación adecuada entre los ácidos linoleico Ω6 y linolénico Ω3. A pesar de que se recomienda que la relación Ω6/Ω3 se encuentre en el rango de 4:1, en maíz y otros aceites vegetales de importancia vegetal esta relación está muy desequilibrada (10:1, o más) según indica Olivera Carrión (2006). En los híbridos HC estudiados, esa relación tiene un valor medio de 62,9 (rango= 35,4 – 86,3). Esta relación de ácidos grasos poli-insaturados tan desequilibrada podría derivar en enfermedad coronaria, diabetes, o depresión si sólo se consumiera aceite de maíz (Olivera Carrión, 2006). Sin embargo, la alta concentración de PUFA´s (linoleico y linolénico) parece favorecer la reducción de la concentración sérica de colesterol y de la presión sanguínea, aunque no en la misma proporción que la ingesta de ácido oleico según afirman varios estudios clínicos. La relación normal entre ácidos grasos insaturados y saturados del aceite de maíz tiene un valor medio de 6,7 (Fuente=http:/www.scientificpsychic.com/fitness/fattyacids1.html) a diferencia de la correspondiente a la leche y carne vacunas (0,11-0,15) que es muy perjudicial para la salud humana (Depetris y Santini, 2006). A partir del perfil lipídico se calculó que la razón entre ácidos grasos insaturados y saturados de los híbridos HC tiene un valor medio igual a 6,0 (rango= 4,4 – 7,8). En consecuencia, la relación entre ácidos grasos insaturados y saturados de estos materiales coincide con el valor normal publicado para la especie. Finalmente, el nivel de ácido oleico hallado en los híbridos HC coincide con los reportados por Leibovitz y Ruckenstein (1983), Izquierdo (2007) y Alezones et al. (2010) quienes también señalaron que el aceite producido en zonas cálidas o templadas posee mayor contenido de ácido oleico que el obtenido en zonas de clima más fresco. Los resultados alcanzados también coinciden con otros reportados por Eyherabide et al. (2005) quienes además expresaron que los materiales argentinos tienen mayor nivel de ácido oleico que otros desarrollados en el medio oeste de EE.UU. Conclusiones Mediante estudios de cromatografía gaseosa se pudo establecer la composición de AG de líneas elite y algunos híbridos derivados de ellas y se demostró que los ácidos grasos más importantes para la nutrición humana se encuentran dentro del rango de valores reportados a nivel global y nacional. Los análisis permitieron detectar tres líneas endogámicas (CIG15, CIG18 y CIG27) que se caracterizan por tener una muy elevada concentración de ácido oleico y por ende podrían ser empleadas para desarrollar combinaciones híbridas caracterizadas por el nivel de este componente o bien incorporar el carácter ALTO OLEICO a otros materiales. Agradecimientos Los autores agradecen al Ing. Quím. Luis Perego quien ejerce la dirección del Laboratorio PROPIA por haber facilitado la realización el uso del cromatógrafo de gases y los insumos necesarios. Igualmente hacemos extensivo el agradecimiento al personal del mencionado Laboratorio. Tabla 1. Composición de ácidos grasos correspondiente a dieciséis líneas endogámicas de maíz ceroso y/o de alta lisina. Tabla 2. Composición de ácidos grasos correspondiente a trece híbridos de maíz ceroso y/o de alta lisina. Ref. Tablas 9 y 10= 16:0= ác. palmítico; 18:0= ác. esteárico; 18:1= ác. oleico (Ω9); 16:1= ác. palmitoleico (Ω7); 20:1= ác. gadoleico (Ω9); 18:2= ác. linoleico (Ω6); 18:3= ác. linolénico (Ω3); sat.= saturados; Insat.= insaturados; MUFA= ác. grasos monoinsaturados; PUFA= ác. grasos poli-insaturados. Bibliografía Alezones J.; Ávila M.; Chassaigne A.; Barrientos V. 2010. Caracterización del perfil de ácidos grasos en granos de híbridos de maíz blanco cultivados en Venezuela. Archivos Latinoam. de Nutrición vol. 10(4):397-404. Corcuera V.R. 2013. Mejora Genética del Maíz. Desarrollo de Híbridos de Uso Especial. (Uso de Descriptores Agronómicos, Químicos y Métodos Estadísticos aplicados al Análisis de Ensayos Multiambientales), 521 páginas. Ed. PUBLICIA, AV Akademikerverlag GmbH & Co. KG, Saarbrücken, Alemania. ISSN 978-3-639-55207-2. Corcuera V.R.; Salmoral E.M; Pennisi M.; Kandus M.; Moreno-Ferrero V.; Salerno J.C. 2013. Análisis Proximal del Grano de Maíces de Uso Especial. II. Determinación de la Calidad Proteica, del Aceite y Almidón. Trabajo XIV Congreso Argentino de Ciencia y Tecnología de Alimentos, 5° Simposio Internacional de Nuevas Tecnologías/III Simposio Latinoamericano sobre Higiene y Calidad de Alimentos, Rosario-Sta. Fe, Argentina, CD-ROM del Congreso. Depetris G.J.; Santini F.J. 2006. Particularidades nutricionales del grano de maíz en la alimentación de bovinos de carne. En: Maíz y Nutrición. Informe sobre los usos y las propiedades nutricionales del maíz para la alimentación humana y animal, Recopilación de ILSI Argentina. Serie de Informes Especiales, volmen II, págs: 28-31. Eyherabide G.H.; Percibaldi N.M.; Borrás F.S.; Presello D.A. 2005. Mejoramiento de la calidad nutricional del aceite de maíz mediante el desarrollo y selección recurrente intrapoblacional. Proceedings del VIII Congreso Nacional de Maíz, 16 a 18 de Noviembre de 2005, Rosario-Sta. Fe, Argentina, págs.: 336-339. Lambert R.J. 2000. High oil corn hybrids. En: A.R. Hallauer (Ed.) Specialty corns, 2nd. edition, CRC Press, Boca Raton, FL, USA. ISBN: 0-8493-2377-0. Leibovitz Z.; Ruckenstein C. 1983. Our experiences in processing maize (corn) germ oil. J. Am. Oil Chemists´Soc. 60:395-399. Olivera Carrión M. 2006. Aporte nutricional de las principales formas de consumo del maíz en la alimentación humana. En: Maíz y Nutrición. Informe sobre los usos y las propiedades nutricionales del maíz para la alimentación humana y animal. Recopilación de ILSI Argentina. Serie de Informes Especiales, volumen II, págs: 56-62. Weber E. 1987. Lipids of the kernel. En: S.A. Watson & P.E. Ramstad (Eds.), Corn Chemistry and Technology, pp. 311-343, Am. Assoc. of Cereal Chemistry, St. Paul., MN, USA.