TURISMO en Huesca 84 Las rutas en BTT son muy recomendables. J.C. Los ríos del Bajo Cinca, fuente de riqueza por explotar L A COMARCA del Bajo Cinca está situado al sureste de la provincia de Huesca, limitando con las de Lleida y Zaragoza y con las comarcas oscenses de Monegros, Cinca Medio y La Litera. Está formada por once municipios: Fraga, su capital, Ballobar, Belver de Cinca, Candasnos, Chalamera, Mequinenza, Ontiñena, Osso de Cinca, Torrente de Cinca, Velilla de Cinca y Zaidín. Su población supera los 26.000 habitantes, y es Fraga, con 14.500, la ciudad más importante de la zona, centro de servicios y cabecera comarcal. El Bajo Cinca destaca por su potencial agrícola y ganadero, especial- El Cinca aporta una gran riqueza natural y posibilidades de ocio deportivo, como la pesca o el piragüismo mente en el sector de la fruta dulce, siendo la comarca con más hectáreas de fruta de todo Aragón, con explotaciones modernas y con buenos sistemas de regadío. El sector servicios supone la segunda fuente de ingresos para la población, y destaca el potencial comercial de Fraga, mientras que Mequinenza cuenta con una importante oferta turística, basada en la pesca y los deportes acuáticos, gracias a su embalse, el mayor de Aragón. El Bajo Cinca cuenta con potencial suficiente para convertirse en un referente a nivel nacional del turismo fluvial, aprovechando los cuatro ríos con que cuenta esta comarca. El Cinca es el principal, ya que da nombre a la comarca y la cruza longitudinal- Descenso del Cinca, desde Fraga a Mequinenza. J.C. mente, pero también está presente su afluente el Alcanadre, en la zona norte de la comarca, y ya al sur, en Torrente de Cinca y Mequinenza, aparece el Segre con el que se une el Cinca y el Ebro. El embalse de Mequinenza, y la cola del de Ribarroja, es un centro importante de deportes acuáticos como la pesca deportiva, el remo, el piragüismo, o simplemente los paseos en barca. Especialmente atractiva es la pesca del siluro, especie introducida hace un par de décadas que ha dado lugar al florecimiento de un incipiente sector de empresas que atienden a los muchos pescadores de toda Europa. Esa extensa masa fluvial ha abierto la puerta a la práctica de otros deportes, como el piragüismo. Así, tanto el Cinca, como la zona del Aiguabarreig, son fuente de riqueza y de un incipiente aprovechamiento turístico, a través del contacto con un río de gran riqueza natural y con grandes posibilidades de ocio deportivo, como la pesca y el piragüismo. El Descenso del Cinca, entre Fraga y Mequinenza, que en su última edición superó los mil participantes, y que ya es prueba nacional comparable al Descenso del Sella, ha ayudado a promocionar esta zona, y ha propiciado la aparición de empresas turísticas que ofrecen paseos en todo el trayecto del Cinca, desde Ballobar hasta Mequinenza. El Aiguabarreig es una zona húmeda, donde confluyen los ríos Cinca, Segre y Ebro, formando un espacio de gran valor natural, especialmente por la diversidad animal que presenta. Se calcula que son más de doscientas las especies de aves que nidifican en esta zona. Mequinenza y Torrente de Cinca son puerta a este tesoro natural, que cuenta con su centro de interpretación y sus puntos de observación, ofreciendo una magnífica visita de uno o dos días. Pero el paisaje del Bajo Cinca es diverso y rico. Junto al agua, están las estepas de Monegros. Ese paisaje se puede visitar con la completa red de senderos que ha señalizado el Consejo Comarcal del Bajo Cinca, y que recorren toda la comarca, en coche, bici, a caballo o pie. Para los amantes del deporte, recomendables las rutas de BTT.