07-tu.qxd 10/14/04 12:37 AM Page 1 7 La Plata, jueves 14 de octubre de 2004 Rodolfo Lebreo (35) fue condenado ayer -en juicio oral y público- a la pena de diecisiete años de prisión por el Tribunal en lo Criminal IV de La Plata como autor responsable de los delitos de “abuso sexual reiterado calificado por el uso de arma y abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma” en perjuicio de tres niñas de 8, 11 y 12 años de edad. La sentencia fue dictada en forma unánime por los jueces que integran el Tribunal IV, Emir Caputo Tártara, Juan Carlos Bruni y Gloria Berzosa. Cuando la secretaria del Tribunal -la Dra. Mariana Arreche- finalizó la lectura del fallo, algunos allegados al imputado lanzaron insultos de disconformidad a la vez que los familiares de las víctimas apoyaron la decisión de los magistrados. Según el veredicto, “el 6 de enero de 2002, Lebreo se trasladaba en una bicicleta playera color gris y amenazó con un arma de fuego a las tres menores que caminaban por 516 entre 19 y Camino Belgrano”. Lebreo “obligó a las menores a ingresar a un descampado. Y luego accedió por vía anal a una de ellas, a otra le re- Como agravantes, se computaron sus antecedentes condenatorios y se lo declaró reincidente alizó maniobras de tipo digital en la zona anal y a la tercera procedió a realizarle diversos tocamientos inverecundos, para luego darse a la fuga en bicicleta”, argumentó el tribunal. Durante el juicio que se inició la semana pasada, las tres criaturas declararon en presencia de sus padres y de una psicóloga. Los magistrados dieron precisión de todos las acciones, según aclararon, debido a la necesidad de acreditar la VEREDICTO Y SENTENCIA Condenado a diecisiete años por haber violado a tres nenas El ataque sexual ocurrió en un descampado del camino Belgrano, frente a la zona de los hipermercados. El acusado fue declarado reincidente. Las tres menores aún sufren gravísimas secuelas. El uso del arma incidió como calificante El dato “No salen solas, creen que las siguen” Los jueces evidenciaron durante el debate oral que aún perdura en las las tres menores “un grave daño en la salud psíquica”. Sus padres declararon en el juicio que las niñas “quedaron muy afectadas” por lo que debieron “contar con asistencia psicológica”. “Hasta hoy tienen miedo, cambiaron el carácter y no pueden salir solas a la calle ni estar cerca de desconocidos, y permanentemente se dan vuelta para ver si alguien las sigue”, dijeron los padres ante el tribunal. Además, tres médicos corroboraron las lesiones y las heridas ocasionadas. Tribunal IV. Gloria Berzosa, Emir Caputo Tártara y Juan Carlos Bruni autoría del acusado en los distintos delitos que se le imputaban. Como se sabe, la figura de “violación” fue quitada del Código Penal y por tanto, debe probarse si hubo abuso sexual, y en tal caso, si existió o no acceso carnal. Relatos del horror Una de las nenas dijo que el día del hecho “iba caminando junto a su prima y una amiga por un sendero frente al hipermercado Carrefour, en dirección al Wal Mart”. Y cuando faltaban “algunos metros para llegar al Belgrano” su amiga advirtió que las “seguía un hombre”. El sujeto las alcanzó, sacó un arma y las obligó a que se tiraran al suelo, según recordó sollozando la criatura. “Dijo que nos mataría, y como mi prima levantó la cabeza, nos llevó más adentro del descampado”, donde había pastos altos y cañaverales. En ese lugar, “nos hizo tirar de nuevo al suelo, boca abajo. Yo quedé al medio y a cada lado mi prima y mi amiga”, indicó la menor ante el tribunal. También relató -según se dejó constancia en la sentencia- cuando Lebreo “procedió a bajarle los pantalones a la menor y a su amiga, mientras que a su prima sólo le desabrochó la camisa ya que ésta hacía fuerza para que no le sacara los pantalones”. Lebreo “le ordenó que levantara la cola mientras le decía que no se pusiera dura, para luego accederla analmente. La menor sintió mucho dolor y miedo” subrayó el tribunal. Las tres niñas coincidieron en sus testimonios al señalar que mientras abusaba de la primera menor, “le tocaba a su prima los pechos y a la otra la accedía analmente con un dedo”. El arma Del relato de las víctimas, el tribunal también puso de resalto la descripción que hicieron del arma empuñada por el imputado. Se trató de una pistola que nunca fue hallada por la policía. Pero los jueces dieron por probada su existencia mediante el pormenorizado relato de las tres menores. Mientras las estaba sometiendo sexualmente, una de las niñas “intentó agarrar el arma que Lebreo había dejado apoyada en el piso, y el agresor la tomó del pelo diciéndole que agachara la cabeza porque la mataba”. Luego, lo vieron agarrar la bicicleta y darse a la fuga. La primera de las menores quedó inmovilizada. Pero su prima alcanzó a ponerse de pie y corrió hasta el Carrefour donde le pidió auxilio a un policía que estaba de guardia. El suboficial dio aviso al Comando y Lebreo desde entonces quedó detenido. Ahora, le aguardan más de 14 años tras las rejas. Golpe a la Caja de Psicólogos Peritajes para el alumno salteño El chico de 11 años que hizo varios disparos en el aula, dejó la comisaría del Menor. La jueza cambió la carátula y dispuso que sea asistido psicológicamente. Aún no está decidido si regresará al pequeño pueblo de Cachi ¿Un caso que hizo escuela? El episodio de Cachi se produjo apenas 10 días después de que un adolescente de 15 años asesinara a tres compañeros e hiriera a otros 5 en una escuela de Carmen de Patagones. El niño de 11 años que el viernes pasado realizó dos disparos en una escuela de la localidad salteña de Cachi prestó declaración informativa ante la jueza de Menores Silvia Bustos Rallé, quien dispuso que el chico deje la Comisaría del Menor, se informó ayer. El niño, que concurre a la escuela Victorino de la Plaza, será sometido a partir de hoy a estudios psicológicos por profesionales de la Justicia provincial y se dispondrá si queda en Salta o vuelve a Cachi, informaron fuentes judiciales La causa, que había sido caratulada como “intento de homicidio”, cambió a “portación de armas”. Según el abogado de la familia, Marcelo Arancibia, “la jueza consideró que la declaración informativa de Gonzalo fue clara y dejó a todos satisfechos” y se mostró confiado en que la jueza “dispondrá el retorno a Cachi del chico”. En cuanto a las críticas que realizó el Comité Argentino de la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CASACIDN) por el tratamiento que la jueza dio al tema, Bustos Rallé dijo que “jamás se habló de reformatorio porque aquí no hay”. “Tengo 16 años como jueza de Menores, sé que el derecho de los niños tiene rango constitucional y no necesito que ese organismo me enseñe”, se defendió la magistrada. En tanto, las clases se dictaban normalmente ayer en la escuela de Cachi, a la que también asisten los hermanos del niño que realizó los disparos. La Cámara penal analiza la causa La Cámara penal de La Plata comenzó a analizar ayer el planteo de competencia suscitado entre dos jueces de Garantías de La Plata en torno a la causa que investiga la desaparición del medio millón de dólares que la Caja de Psicólogos bonaerenses guardaba en un cofre de seguridad, instalado en el Banco Credicoop de diagonal 80 y 5. Tal como anticipó, los jueces César Melazo y Federico Atencio no aceptaron la competencia luego de que el fiscal Leandro Heredia pidiera cinco ordenes de detención. La desaparición del dinero fue detectada en agosto del año pasado, aunque luego se estableció que los fondos fueron sustraídos el 20 de marzo de 2003, falsificando la firma del tesorero de la Caja de Psicólogos, Jorge Reartes, uno de los tres únicos directivos autorizados para acceder a los cofres de seguridad del banco. El caso contiene ribetes e intereses encontrados debido a las futuras demandas que podrían entablarse