La responsabilidad civil ilimitada de los auditores dificulta la unión entre firmas La responsabilidad civil ilimitada que tanto preocupa a los auditores es también un importante obstáculo para las firmas cuando se plantean unirse o integrarse en redes nacionales o internacionales. Albert Foliá, presidente del Arco Mediterráneo de Auditores (AMA), denuncia que este factor “está influyendo negativamente” porque cuando se unen dos firmas se produce “una suma de responsabilidad inútil. Si tres firmas buscan una asociación lo que hacen es triplicar el riesgo de tener un incidente, una sanción o cualquier hecho que le pueda poner en grave situación debido a la suma de riesgos”. Algo que a su juicio “está perjudicando la evolución” de las auditoras hacia “un asociacionismo que refuerce al pelotón de firmas que quieren aproximarse a las Cuatro Grandes [PricewaterhouseCoopers, Deloitte, Ernst&Young y KPMG]”. Las quejas por esta responsabilidad ilimitada que sólo se da en nuestro país se dan casi a diario por parte de los auditores. Del mismo modo, Foliá destaca que el Gobierno “tiene una proposición no de ley encima de la mesa para regular esta responsabilidad independientemente de la modificación prevista en la Octava directiva. Lo que queremos es que la responsabilidad no sea un peligro inasumible que incluso ponga en riesgo que una sanción a una firma, también a alguna de las Cuatro Grandes, haga que desaparezca, creando un problema mucho mayor al que se pretende cubrir”. Globalización galopante Para el presidente del AMA la globalización “es un fenómeno que nos envuelve a una velocidad impresionante”, por lo que el “marco de relación se está volviendo internacional y complejo. Por eso hace falta organizarse. La profesión está muy atomizada, muy organizada en pequeños despachos con unas estructuras débiles para atender unos servicios muy amplios, y esto requiere cambios en la profesión”. Foliá propone por tanto “apostar por la integración de firmas pequeñas en medianas, o en una asociación de medianas, o por una red de contacto... Hay muchas posibles soluciones, por lo que cada firma debe reflexionar sobre la estrategia que más le convenga”. En cuanto a la posibilidad de que una firma busque la internacionalización por sí misma, Foliá argumenta que es “una solución mucho más compleja porque este crecimiento no es fácil. Puede ser una vía correcta, pero siempre complementada con otra, porque se pueden tener oficinas en varios países pero no en todos. Y en cualquier país hay que tener contactos puntuales por si surge algún tipo de problema”. Las Cuatro Grandes La necesidad de las firmas pequeñas y medianas de integrarse en otras más grandes e internacionales no amenaza, sin embargo, la hegemonía de las cuatro auditoras que acaparan el mercado mundial. Foliá relaciona esta enorme diferencia con el hecho de que estas “firmas iniciaron su internacionalización hace mucho tiempo. Existe una condición casi establecida en los mercados mundiales por la que cualquier autorización para dar un paso adelante en la cotización a nivel mundial exige la supervisión de este tipo de sociedades, con una estructura más uniforme y extendida a lo largo del mundo”. Algo que en opinión del presidente del AMA no va a cambiar. “Pasarán aún años hasta que este grupo de cuatro se amplíe. Una de las medidas que puede favorecer este tipo de escalada que permita que las firmas sean más grandes es el de la limitación de la responsabilidad. Es un factor que abrirá puertas. Avanzar hacia cinco o seis grandes auditoras sólo se puede conseguir a través de fusiones, pero en este momento con esta medida se incrementan mucho los riesgos”. Concentración en España “En España se está produciendo este proceso de agrupación. Los pequeños despachos van transformándose, van buscando soluciones”. “Se nota por la desaparición de los trabajos individuales que aparecen en la auditoría, hay un estancamiento en el crecimiento de los trabajos individuales y aumentan los de las grandes y medianas firmas. Y es una evolución natural que se irá produciendo”, concluye Albert Foliá. Redes de auditoras para afrontar la globalización Los auditores, como los abogados y otros servicios profesionales que tienen que dar cobertura a sus clientes allá donde vayan, deben amoldarse a la movilidad geográfica de las empresas para sobrevivir. Es por esto que el AMA, asociación que agrupa a 30.000 auditores, reúne hoy en Girona a censores jurados de cuentas españoles, franceses e italianos en el Congreso ‘Trabajar en red: una respuesta’, en el que se quiere discutir sobre las diferentes posibilidades que las firmas pequeñas y medianas pueden acoger en busca de fórmulas asociativas que les permitan acometer esta internacionalización. Para Albert Foliá, presidente de la Asociación y del Instituto de Censores Jurados de Cuentas de Cataluña, este Congreso ha de servir para que los profesionales piensen en “organizarse en red y en trabajar en redes nacionales o internacionales, porque nuestros clientes, las empresas en general, tienen cada vez más necesidades internacionales”. El Congreso, en el que participan auditores de los tres países mencionados, cuenta con la presencia de Jacques Potdevin, presidente de la Federación de Expertos Contables Europeos (FEE), quien, junto a Foliá, clausurará el acto. Fuente: Negocio & Estilo de Vida