Electrónica flexible hasta un 50 % más duro que el acero El disulfuro de molibdeno es un material parecido al grafito, muy abundante en la Tierra y que se ha revelado como una de las claves del futuro de la electrónica flexible, al presentar mejores rendimientos que los semiconductores orgánicos utilizados hasta el momento. Ahora un grupo de investigación español y holandés ha estudiado las propiedades mecánicas de este material en un trabajo pionero publicado en la revista Advanced Materials. Para estudiar este prometedor material los científicos de la Universidad Autónoma de Madrid y la Universidad Tecnológica de Delft (Países Bajos) crearon láminas hasta cien mil veces más delgadas que un folio de papel y estudiaron su comportamiento con un microscopio de fuerzas atómicas. Con él consiguieron determinar la fuerza necesaria para deformar la membrana y romperla. Según el trabajo de los científicos, las nanoláminas de disulfuro de molibdeno son hasta un 50 por ciento más duras que el acero con la peculiaridad de que son "sorprendentemente flexibles". Estas propiedades abren un mundo de posibilidades para la electrónica del futuro, pues utilizando plásticos como sustratos, capas ultrafinas de compuestos como el disulfuro de molibdeno o el grafeno pueden actuar mejor que los semiconductores actuales. Además, como indican desde la Universidad Autónoma, sus aplicaciones no solo se limitan a envases y revistas con pantallas flexibles, sino que también podría utilizarse para crear sensores versátiles como por ejemplo para controlar los daños estructurales de un edificio o adheridos a la ropa para monitorizar pacientes. El disulfuro de molibdeno proviene de la molibdenita, un mineral muy abundante similar al grafito tanto en apariencia como en tacto, que se produce en depósitos minerales hidrotermales de alta temperatura. Publicado por Noticias Científicas en 10/07/2012 ¿Cómo se miden los cambios en el nivel del mar? Los nuevos datos presentados en el simposio "20 años de progresos en altimetría radar", que se celebra estos días en Venecia (Italia) confirman una subida media del nivel del mar de 3 milímetros anuales. Los científicos atribuyen esta subida al aumento de las temperaturas y al derretimiento de los glaciares de las montañas y el hielo de los polos. El tema del congreso es la altimetría radar, una técnica que permite medir desde el espacio la altura de la superficie de los océanos y de las masas de agua dulce, hielo o tierra en prácticamente cualquier punto del planeta. Para ello, estos altímetros registran la topografía de la superficie a lo largo de la trayectoria terrestre del satélite cronometrando el intervalo entre la transmisión y la recepción de impulsos de radar. Esto permite medir la altura de dicho satélite por encima del agua, la tierra o el hielo. El simposio se ha celebrado en Venecia, una ciudad para la que precisamente el aumento del nivel de las aguas es de especial importancia. "Las aplicaciones para la observación de la Tierra son herramientas fundamentales para Venecia", ha destacado Giorgio Orsoni, alcalde de dicha ciudad. El seguimiento de la subida del nivel del mar, así como la evolución de la línea de la costa, las corrientes y los hundimientos son esenciales para conocer el futuro de la `ciudad flotante´. Publicado por Noticias Científicas en 10/07/2012. Un nuevo método para limpiar los vertidos de petróleo Los vertidos de petróleo en el mar suponen un problema ambiental muy importante. Un equipo de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha desarrollado un método para separar el agua del aceite empleando imanes. Esta técnica permitiría que el petróleo fuera después reutilizado, de forma que se compensarían los costes de la limpieza. El método propuesto consiste en añadir a la mezcla nanopartículas con hierro para después separar el aceite usando un imán. Los investigadores indican que se trata de una maniobra muy sencilla pero que deberá, sin embargo, realizarse en un buque para que las nanopartículas no contaminen el océano. En otros trabajos se han propuesto métodos similares pero que tenían el inconveniente de que era necesario conocer de antemano la concentración de agua y aceite en la mezcla. La técnica propuesta, al colocar los imanes dentro de la corriente, y no fuera de ella, como en los métodos anteriores, se puede aplicar siempre con buenos resultados, sin importar la concentración de cada componente en la mezcla. "Aún no se ha tratado lo suficiente el problema de los vertidos de petróleo", opina Ronald Rosensweig, un ex investigador de la empresa Exxon y un pionero en el estudio de ferrofluidos. "Se podría pensar en separar el aceite del agua por centrifugación, pero muchas veces la densidad de ambos fluidos es la misma y esto no es posible. El gancho magnético permitiría hacer una separación más rápida y efectiva". Publicado por Noticias Científicas en 10/07/2012