48 LA VANGUARDIA C U L T U R A Las cartas entre Joan Coromines y su padre iluminan la etapa formativa del lingüista n El voluminoso epistolario que intercambiaron los dos intelectuales puede leerse como la crónica de la Catalunya republicana ROSA MARIA PIÑOL BARCELONA. – Si no se han conservado fotografías del joven Joan Coromines (1905-1997) con su padre, el abogado, escritor y político Pere Coromines (1870-1939), es porque vivieron físicamente alejados durante quince años casi completos. Primero, porque las precoces actividades políticas de Joan Coromines en contra de la dictadura de Primo de Rivera le obligaron a JOSEP MARIA SAGARRA / ARCHIVO exiliarse a Montpellier, y más tar- Pere Coromines, en los años treinta de por la continuación de sus estudios, realizada en el extranjero. Esta separación generó, en camEl intercambio de cartas entre pabio, una copiosa correspondencia dre e hijo abarca desde 1925 hasta entre padre e hijo, de la que se con- 1939, año de la muerte de Pere, y servan 318 cartas. La Fundació Pe- los textos iluminan especialmente re Coromines acaba de publicar un intenso periodo formativo del fu–con el patrocinio de la Fundació turo autor del Diccionari etimològic Caixa Catalunya– este epistolario, de la llengua catalana. Tras estuun tomo de casi mil páginas que diar en Montpellier con los profesohan editado y anotado Josep Ferrer res Georges Millardet y Maurice y Joan Pujadas. Una obra que se su- Grammont, Coromines realizó el ma a otros siete tomos de correspon- doctorado en Madrid (1928) con dencia de Joan Coromines con inte- Ramón Menéndez Pidal (sus cartas lectuales como Fabra, Pla o Fuster. con este maestro también se edita- que Joan realiza de sus vivencias, estudios e inquietudes tienen su contrapunto en el paternal seguimiento y los consejos de Pere, que ya intuía que su hijo estaba llamado a proyectos de envergadura. “A mi m'agrada molt que estudiïs bé el grec, com m'agrada que treballis l'àrab i el sànscrit (...) Però tot això cal orientar-ho, com ja ho fas, en un sentit de mera preparació per a donar a Catalunya la gramàtica històrica de la nostra llengua”, le escribía en febrero de 1928. Y un año más tarde: “No crec que per a un home jove hi hagi estímul tan gran com el de sentir-se capaç de realitzar l'obra que la seva pàtria només pot esperar d'ell”. El artista Perejaume, que ha realizado una obra para la cubierta del libro (Oïor), glosó ayer algunas de las cartas entre ambos intelectuales, que “compartían el espíritu de tener el país en sus FUNDACIÓ PERE COROMINES manos”. El amor por Catalunya Joan Coromines, en 1928 impregna la correspondencia, en la que se descubren las vivencias rán), amplió estudios en Zurich ba- cotidianas, miserias y anhelos de la jo el influjo del lingüista Jakob Jud, familia Coromines, catalanista, culy más tarde residió en París (1929- ta y numerosa. Pero las cartas tam30) becado por instituciones acadé- bién pueden leerse como una crónimicas. Posteriormente, fue Pere Co- ca de la Catalunya republicana. romines quien, por prescripción méEl volumen, en suma, tiene “un dica, tuvo que establecerse cerca de interés poliédrico y múltiple, es una París tras sufrir una hemiplejía joya epistolar”, como sintetizó ayer (1938), antes de exiliarse, en 1939, Max Cahner, presidente de la Funa Buenos Aires, donde murió. dació Pere Coromines, cuya sede de La relación entre padre e hijo que Sant Pol de Mar será inaugurada ofise desprende de las cartas es inten- cialmente a mediados de julio por sa: las minuciosas explicaciones el presidente de la Generalitat.c VIERNES, 2 JUNIO 2006 El escultor Miguel Ortiz Berrocal fallece a los 73 años MÁLAGA. (Efe.) – El escultor Miguel Ortiz Berrocal falleció el miércoles a los 73 años en su localidad natal, Villanueva de Algaidas (Málaga), a causa de un cáncer de próstata. Berrocal se interesó desde joven por un sistema de escultura desmontable, transformable y combinatorio que caracteriza su producción artística. Fue también el diseñador de las estatuillas de los premios Goya. Desde que en 1952 celebró en la galería Xagra de Madrid su primera individual, su obra se encuentra en importantes museos e instituciones europeas y americanas. En 1984 tuvo lugar su primera antológica en España, en el palacio de Velázquez, y en el 2002 trasladó su taller de Verona a su villa natal para establecer su producción y centrar sus obras en el futuro Museo Berrocal. En su escultura hubo una búsqueda constante de nuevos conceptos y espacios desconocidos en el interior de la propia estructura, una búsqueda que abría el camino para que el espectador se adentrara en el mundo del montaje y del desmontaje. Oteiza y Chillida influyeron en la obra de Berrocal, que recurría a temas clásicos como torsos, cabezas o figuras reclinadas y, sobre todo, a un cierto antropomorfismo para evitar un arte demasiado geométrico y abstracto.c