1 Rapoport, Mario (2006). Historia económica, política y social de la Argentina, 1880-2006. Buenos Aires: Editorial Ariel. (Primera parte) Capitulo IV Los gobiernos peronistas (1946-1955). 4,2.- La evolución política: El primer gobierno (1946-1952). El nuevo presidente decidió asegurar su éxito electoral apoyándose en el respaldo mayoritario que le habían dado los sectores populares y , en particular, los trabajadores. Consideraba que su conducción debía desempeñar un rol central que impidiera la desarticulación y la polarización de las distintas fuerzas sociales. Por otra parte, el bloque político que lo acompañaba que aun era frágil y por la constante presión de la oposición, lleva a Perón, en 1946, a la disolución de los partidos que lo acompañaban p ara la creación de un partido provisorio denominado Partido Único de la Revolución Nacional, y más tarde, en 1947, creó el Partido Peronista.El control de la justicia se constituyó en otro objetivo del gobierno peronista Ya que el Poder Judicial estaba vinculado a miembros del antiguo régimen conservador, el presidente de la Nación consideró que la justicia debía acompañar el desenvolvimiento social por lo que promovió el juicio político con la intención de remover a los jueces de la Corte.Fue así que se despertó la protesta de la oposición en las áreas de asociaciones profesionales y colegios de abogados. Pero en 1947, luego que el proyecto pasó por el Congreso, culmino con la destitución de cuatro jueces y del procurador general de la Nación. Luego de este proceso se destituyeron a muchos otros jueces. El gobierno se aseguró, de esta manera, la lealtad política de la justicia.El propósito de acentuar la centralización institucional del aparato gubernamental afecto a las frágiles autonomías provinciales (Durante 19461955 se realizaron quince intervenciones federales). Corrientes había sido la única provincia en el cual el peronismo perdió las elecciones, fue la primera en ser intervenida, las otras intervenciones federales fueron realizadas con l a necesidad de neutralizar los enfrentamientos con otros partidos políticos. Con triunfo electoral de 1946, además de poseer una mayoría de representantes en las Cámaras del Congreso, permitió que a partir de 1948, en particular en 1951, se produzca una burocratización del parlamento, donde el Poder Ejecutivo acentuó su control sobre el Congreso, fue así que proyectos de ley eran elaborados y revisados en diversos ministerios para ser presentados luego en el Congreso.La intensa actividad estatal en los primeros años de contribuyó a superar la crisis de legitimidad política heredada por el régimen conservador. El gobierno consideró que para legitimar el intervensionismo económico y social era necesaria la reforma de la Constitución Liberal de 1853. Es a sí que, la culminación de esta fase intervensionista comenzó a la convocatoria de una Convención Nacional Reformadora.Esta convención se reunió en 1949, con la participación de peronistas en su mayoría y de radicales, la cual dura unos dos meses. Una de las propuestas fue la de reelección presidencial, lo que produjo el retiro de los radicales de la convención.- 2 Entre los puntos de las reformas se encuentran: En lo político: consagraron a un Estado de características autoritarias que expandió sus potestades deteriorando así los derechos individuales y de la autonomía de los movimientos sociales. Por otro lado, se constitucionalizaron principios de la jurisprudencia penal, como el de la aplicación de la ley más favorable al imputado, y recursos procésales, como el hábeas corpus.En lo social: se perfiló un Estado de corte igualitarista. Se impulsaba la redistribución de la riqueza a favor de los sectores asalariados. A su vez, se incorporaron cláusulas que establecían los derechos especiales del trabajador, de la familia, de la ancianidad, de la educación y cultura. Se institucionalizo un conjunto de organismos y de dispositivos sociales, sindicales, saláriales, previsionales, etc., que regulaban el mercado de trabajo. Pero, entre los derechos sociales se excluyó el de la huelga.Con la reforma constitucional se plasmo un Estado económicamente nacionalista e intervensionista en temas de distribución, comercialización y servicios. Fue así que, hubo monopolios estatales del comercio de importación y exportación, y la explotación de los servicios públicos.En un ámbito que coincidió con los limites del crecimiento económico y la crisis del sector externo, el gobierno intento regular la expansión de las fuerzas sociales, por lo que experimento dificultades, fue así que se acentuó sus rasgos autoritarios. El control político buscó reducir la influencia de las fuerzas políticas y sociales opositoras. Con ello se incentivo la división entre peronistas y antiperonistas. El gobierno concentro los medios de comunicación e información a favor de la imagen de Perón . Estas medidas de control político y la imposibilidad de derrotar a Perón en elecciones, llevo a orientar las expectativas de la oposición a favor de un golpe militar.En la relación entre los mili tares y el gobierno peronista se distinguen dos fases. La primera en la que el gobierno trató de neutralizarlas políticamente intentando reavivar el sentido de profesionalismo y restaurando la disciplina. Pero la vinculación entre las autoridades y el ejército comenzó a agrietarse durante la crisis económica de 1949. La fuerza política que había obtenido Eva Perón, llevó a presiones militares en contra de Eva Perón, en relación con su pasado dudoso, que postulaban los militares. Perón se comprometió a limitar las actividades de su esposa en el ámbito social. Por otra parte, se comenzó a replantear la relación del gobierno con las fuerzas armadas.Hacia 1950, se produjo una gran sensación de malestar en las fuerzas armadas debido a que Evita estaba postulada como acompañante de formula de Perón para las elecciones de 1951. Dos grupos de oficiales rivalizaban para conducir un golpe militar. Ellos eran los generales Eduardo Lombardi y Benjamín Menéndez. Ambos jefes no pudieron coordinar sus acciones debido a diferencias personales, tácticas y políticas. Lombardi, a diferencia de Menéndez, consideraba que era necesario preservar muchas de las medidas sociales peronistas, por lo tanto, declinó en la conducción del golpe, contando con la colaboración de importantes figuras de los partidos políticos de la oposición.El golpe se realizo en antes de las elecciones presidenciales de 1951, pero fracaso por distintas razones: la renuncia de Evita a su candidatura, el descontento de algunos militares, la planificación inadecuada y ejecución deficiente del golpe.- 3 El Poder Ejecutivo aprovechó del golpe frustrado para extremar su política represiva a la oposición. Se dispuso el estado de guerra interno, se juzgaron a los conspiradores por el Consejo Superior de las FF.AA. Por otra parte, mediante leyes modificatorias de las disposiciones vigentes para le personal militar se buscó depurar los cuadros superiores de jefes antiperonistas. Hacia fines de 1951, Perón tenía un firme control de la institución militar.Para las elecciones presidenciales de 1951, la formula de Perón-Quijano derroto a la formula opositora del radicalismo de Balbín-Frondizi. Un hecho novedoso, fue la participación de la mujer en el voto, a través de la ley de 1947 que les permitía participar en elecciones. Fue así, que Evita organiza el Partido Peronista Femenino, que ayudo a reforzar el apoyo a Perón para las elecciones de 1951.4,3. El movimiento obrero y los partidos políticos. 4,3,1. El movimiento obrero. El crecimiento del sindicalismo vivió su momento más dinámico durante el gobierno peronista. Desde la Secretaria de Trabajo y Previsión, Perón tuvo éxito en el estímulo de la creación de nuevos sindicatos. Una vez en el gobierno, el peronismo estimuló el papel económico y polític o del movimiento obrero, las organizaciones sindicales y el alto grado de movilización de los trabajadores debido al incremento de las tasas de sindicalización a partir de 1945.Hacia 1947-1948, fueron los años de mayor adhesión a los sindicatos, especialmente de los trabajadores urbanos, que junto a las organizaciones sindicales, auspiciadas por el Estado, permitió un movimiento obrero organizado.La masiva sindicalización de la clase obrera después de 1946, respondió a varios factores: al aporte del estado en crear un marco institucional para las relaciones laborales, el dinamismo de los sindicatos y a la capacidad organizativa de los líderes sindicales al alto grado de movilización obrera. A partir de 1946, el Estado le aseguraba un respaldo político y legal, es así que, intervino en la implementación de un sindicato único por actividad para evitar la formación de agrupaciones rivales. Una de las características innovadoras del modelo organizativo fue el desarrollo de las comisiones internas. Las cuales aseguraron importantes beneficios tanto al obrero como a los sindicatos. Garantizaban la aplicación efectiva de la legislación laboral y de los convenios colectivos y negociaban con los patrones las demandas de los trabajadores.La estructura de poder del movimiento sindical era muy centralizada. La relativa autonomía que poseían las secciones locales fueron con el tiempo absorbidas por los sindicatos nacionales y a su vez estos por la CGT, con lo que se extremo la centralización del poder a nivel nacional. También se modifico el rol de la CGT, la cual asumió la función de mediadora entre los sindicatos y el Estado. La cúpula de la CGT experimento varios cambios en los primeros años del gobierno peronista. En la cual algunos de los altos dirigentes de la CGT pasaron a formar parte del gobierno, como fue el caso del secretario general que renuncio para ocupar una banca en la Cámara de Diputados, y en 1947 Perón puso a la dirección de la CGT a Hernández, el cual estaba dispuesto a vincular estrechamente al gremialismo con el gobierno, etc.- 4 La participación política y social del movimiento sindical dentro del Estado justicialista no sólo puso límites a las políticas del régimen, sino que constituyó un mecanismo correctivo de dichas políticas.4,3,2. Los partidos políticos. El Partido Peronista se constituyó cuando Perón se encontraba en el ejercicio de su primer mandamiento presidencial. Su creación, en 1947, respondió a las necesidades de superar las disputas internas, entre los cuales había apoyado a Perón en las elecciones presidenciales.Para la concepción de Perón, el peronismo fue más que un partido, era un movimiento revolucionario. En la que reproducía la concepción movimientista del nacionalismo popular yrigoyenista. Pero entre su concepción y su práctica política surgió una tensión.El movimiento peronista presento una complejidad y diversidad interna, a su vez, capto ideologías tanto de izquierda como de derecha. A su vez, los sindicatos asumieron muchas de las funciones políticas del peronismo. Por otra parte, las masas apoyaban electoralmente a él, y no al Partido Peronista. Perón no sólo organizó en forma política a al partido, sino que desarrolló los aspectos doctrinarios. Lo fundamentó en el cristianismo y el humanismo propios de la tradición de la civilización occidental. Por otro lado, integro aspectos de diferentes ideologías políticas (fascismo, comunismo, socialismo, anarquismo), y por otro, procuró aplicarlas en un movimiento policlasista. Legitimó las reformas sociales y planteó la justicia social como núcleo de la doctrina. El objetivo era lograr la armonía de interese entre el individuo y la sociedad.Por otra parte, los partidos que formaron la Unión Democrática, debieron enfrentar las consecuencias de haber perdido las elecciones presidenciales de 1946. Entre los sectores de discusión estaban los intransigentes y unionistas. Los intransigentes que consideraban en una reforma del radicalismo. Así planteaban la nacionalización de los servicios públicos, la reforma agraria, la participación de los extranjeros en la participación política, de esta manera, pretendían la recuperación del radicalismo como movimiento popular, a su vez, le reclamaban al peronismo que las medidas que tomaban eran insuficientes. Durante el peronismo, el radicalismo estaba dividido en tres sectores: el MIR (Balbín, Frondizi), el unionismo que proponía el enfrentamiento con el gobierno, y un sector con la dirección del cordobés Sabattini, que terminó adhiriendo a los unionitas.El Partido Socialista se vio muy fuertemente perjudicado durante la etapa del peronismo, ya que no pudieron obtener bancas en el parlamento, al igual que perdieron su control en el gremialismo a la vez que se alejaban cada vez más de las masas obreras. Fueron defensores tenaces de las instituciones demoliberales y, en defensa de la constitución de 1853, por lo que se abstuvieron a concurrir a los comicios para la elección de convencionales constituyentes.En cuanto a los conservadores se sintieron agraviados por los desbordes populares que estimulaba el peronismo. Las modificaciones políticas y sociales hacían soñar en un nuevo golpe de estado. Muchos de sus dirigentes conspiraron junto a líderes radicales y socialistas en contra del gobierno. El Partido Comunista, tras el fracaso de la Unión Democrática, modifico su táctica frente al gobierno, apoyando lo positivo y criticando lo negativo del 5 nuevo gobierno. Al igual que los socialistas dejaron de tener influencia en el gremialismo y entre los trabajadores. Su participación electoral durante la época fue estable.4,4. Las organizaciones empresariales, el Estado y la sociedad civil. 4,4,1. Las organizaciones empresariales. Durante la campaña electoral de 1946, la U.I.A., apoyó un Manifiesto del Comercio y la industria en contra del gobierno, además de estar a favor de la Unión Democrática, por lo que, el gobierno de Farrell dispuso su intervención a la entidad, más tarde hacia 1953, el Poder Ejecutivo decretó la liquidación de la U.I.A. y transfirió su patrimonio a la Escuela Industrial de la Nación.Para 1946, durante el gobierno de Farrell, algunos industriales entre ellos Miranda (ministro de economía) estaban a favor de la campaña de Perón. Miranda y Lagomarsino fundaron la Asociación Argentina para la Industria y el Comercio (A.A.P.I.C.) para cooperar con el nuevo gobierno.Las relaciones entre la Sociedad Rural Argentina y el gobierno peronista fueron también difíciles, ya que por primera vez, desde su creación, que sus dirigentes no participaban directamente en el gobierno. Aunque nunca fue intervenida, en 1947, el predio donde se desarrollaban sus tradicionales exposiciones fue confiscado con fines militares.Entre las quejas que formulo la S.R.A. entre ellas la fijación de precios no remunerativos a sus productos por parte del I.A.P.I., la expropiación de tierras y el congelamiento de los arrendamientos. Sólo después de la crisis económica que afectó particularmente al agro, entre 1949-1952, la política peronista hacia el sector iba a cambiar y, con ella, por lo menos en los formal, la actitud de los sectores rurales.4,4,2. El Estado y la sociedad civil. El Estado justicialista surgió para solucionar la crisis de la hegemonía oligárquica. Debió solventar el vació de poder generado por la incapacidad de los grupos tradicionales. El nuevo Estado asentó su estrategia en la movilización política y social de los trabajadores incorporándolos al sistema político, ampliando su participación e integrándolos a nuevas formas de consumo.El estado amplió su autonomía relativa respecto de las clases y grupos sociales. No sólo medió en las relaciones entre los trabajadores y las organizaciones patronales, sino que también, asumió una función reguladora de las necesidades de los sectores empresariales.Tanto el sector industrial emergente como el tradicional se beneficiaron en parte con la política económica implementada, aunque ambos resistieron o rechazaron la actividad sindical y los costos de las políticas saláriales y el de bienestar social. En consecuencia, el Estado y sus organismos arbitraron los conflictos y condujeron el proceso de industrialización en lugar de los mismos empresarios y del mercado.La industrialización promovida por el Estado justicialista, se basa en parte por la ampliación del mercado interno mediante una fuerte redistribución del ingreso a favor de los asalariados. Este proceso de debió a tres factores: La creciente división entre la expansión del mercado interno y el nivel de consumo de masa, la ausencia de leyes laborales que garantizasen mejores 6 condiciones de vida y de trabajo, el importante grado de intervención estatal del Estado en la economía con la consiguiente ampliación del aparato burocrático. Esta política respondió favorablemente durante los primeros años del gobierno peronista, pero la crisis de 1949 pondrá en tela de juicio la viabilidad de este modelo, lo que determino cambios de rumbos en diversos aspectos de la política social y económica.El fortalecimiento del Estado, basado en una acumulación de capitales orientada hacia el mercado interno y sin recurrir, hasta los últimos años, al capital extranjero, le permitió también al gobierno sostener una política internacional con mayores márgenes de autonomía frente a las grandes potencias.La relativa autonomía del Estado tuvo que ver con las características que asumió el sistema político. Sin necesidad de legitimación, el gobierno tuvo actitudes autoritarias frente a la oposición política.4,5. Población, política social y condiciones de vida. 4,5,1. Población y migración. Los resultados del censo de 1947 y el de 1960, registraron un descenso del crecimiento poblacional. Ello de debió a la baja de las tasas de crecimiento vegetativo y migratorio. Aunque durante esta época la Argentina recibió inmigración europea (italianos-españoles), el impacto de esta nueva inmigración no fue significativo, dado el caudal de la población nativa. Pero se dio un nuevo fenómeno, la inmigración de países limítrofes.Durante este período se acentuó la concentración urbana y la disminución de la población rural. El Gran Buenos Aires paso a reunir casi la mitad de la población urbana total de país. El flujo migratorio interno constituyó un factor fundamental en la concentración urbana.El crecimiento urbano del Gran Buenos Aires estuvo asociado a la expansión de la actividad económica urbana, en particular la industria. Una de sus consecuencias fue la acentuación del proceso de radicación en las zonas suburbanas. Este proceso estovo caracterizado por las migraciones internas bajo dos formas: el desarrollo de barrios de loteo (que permitió la difusión de la pequeña propiedad suburbana) y las villas de emergencia.El cambio de gestión del transporte urbano también favoreció ese proceso. La nacionalización de los FF.CC. implico un drástico cambio en la política de tarifas, que se mantuvieron bajas en relación con el aumento del costo de vida. También se dio la difusión masiva del colectivo.La disminución de la Población Económicamente Activa (P.E.A.) fue uno de los rasgos singulares que dio como resultado los censos de 1947-1960, lo cual se debe a la jubilación.Los datos más significativos, resultados de los censos, fueron que la industria genero el 40% del crecimiento intercensal, los servicios aportaron el 24% y la construcción el 20%. El agro fue el único sector que experimento un descenso de su actividad debido a la profunda recomposición de su perfil productivo y ocupacional.4,5,2. Política social y condiciones de vida. La política social del peronismo contribuyo especialmente al sector popular, en especial a la clase obrera. La justicia social significaba la redistribución del ingreso a favor de los sectores más desposeídos. Esta forma 7 de redistribución se dio en algunos casos a través del gasto social, como la creación de un conjunto de instituciones benéficas, como la Fundación Eva Perón, la ampliación del acceso a la vivienda propia, y la elevación general de la dotación sanitaria y educativa. También opero una política estatal de subsidios a los alimentos, de tarifas de servicios públicos, de congelamiento de los alquileres urbanos, etc.Los salarios reales experimentaron un crecimiento, particularmente, se vieron favorecidos los asalariados urbanos. La participación de los asalariados en el ingreso nacional creció hasta 1949-1950, y luego de una caída en 1951, tendió a ascender y luego estabilizarse hasta 1955.Una contribución al mejoramiento de la calidad de vida, fue la generalización del sistema de jubilación, y en 1948, con la ley 13478, se estableció un fondo para pensionar a personas de escasos recursos, mayores de 70 años con no tuvieran jubilación.La atención social a los desprotegidos estuvo a cargo de la Fundación Eva Perón, financiada por el Estado, aunque no siempre voluntarias de trabajadores y empresarios. La asistencia social abarco diversos aspectos, como la atención a las necesidades individuales (indumentaria, textos escolares, elementos de hogar, etc.). También se crearon distintas instituciones, como hogares para la atención y orientación de mujeres y niños abandonados. Con el fin de atender a la asistencia a la niñez y a la juventud en general, se crearon comedores escolares y hogares-escuelas. A su vez se creo la Escuela de Enfermeras (1950), orientada a la especialización en la atención médica y social. La Fundación Eva Perón constituyo una propaganda política, aunque a su vez, contribuyó al mejoramiento de la calidad de vida de los sectores más desprotegidos de la sociedad.Dado el resultado del Censo Escolar, del Analfabetismo y de la Vivienda en 1943, mostró que le hacinamiento era unos de los más graves problemas de índole social y moral, por lo que se transformo en unos de los objetivos sociales prioritarios para la gestión de las autoridades que asumieron en 1946. Un instrumento importante para la política de vivienda del peronismo fue la nacionalización del Banco Central, el cual facilitó gran parte de recursos al Banco Hipotecario Nacional, para el otorgamiento de créditos con bajos intereses. También intervinieron distintos organismos institucionales, como el Instituto Nacional de Previsión Social, numerosos sindicatos y distintas asociaciones en la construcción de conjuntos residenciales. El resultado fue un incremento de la demanda crediticia y de la construcción de vivien das. La política de viviendas fue una de las realizaciones más significativas del gobierno peronista.Durante la gestión de Perón también se desarrollo la política de salud. La atención sanitaria tuvo su principal inspirador en el primer ministro de Salud Pública de perón, R. Carrillo. En pocos años la infraestructura hospitalaria creció logrando duplicar las camas. También se destacan la creación de los policlínicos de Avellaneda y Lanús. Otro objetivo de lucha fue el de las enfermedades endémicas, en la que se logró erradicar el paludismo.Los recursos destinados a la educación también crecieron, especialmente a través de la construcción de escuelas primarias y secundarias. Hubo un énfasis especial en la enseñanza técnica, para lo que se crearon las escuelasfabricas, escuelas de capacitación obrera para adultos, etc. También la educación universitaria tuvo la atención del gobierno, como la construcción de 8 edificios en las facultades de Medicina, Odontología y Derecho, a su vez se creo la U.T.N.Perón aspiraba a integrar todos los niveles de educación en un sistema único bajo el control directo del Estado. Esta tendencia se profundizo a partir de 1950, donde las escuelas se transformaron en herramientas difusoras y laudatorias de la obra del gobierno mediante la lectura obligatoria de textos que apuntaban al adoctrinamiento político de los niños y jóvenes.4,6. La política económica peronista. 4,6,1. Los debates historiográficos. 4,6,2. La evolución política. La coyuntura macroeconómica tuvo períodos de crecimiento desde los primeros años de Perón hasta 1949, donde surgió un período de turbulencias, producto de una gran recesión. Pero a partir de 1953, se observó una inflexión de la coyuntura, con tres años consecutivos de crecimiento.Con respecto a la oferta y la demanda, la política económica instrumentada por el gobierno y la particular coyuntura de la inmediata posguerra se combinaron para provocar una breve pero intensa etapa de auge entre 1945-1948. Además se observa un crecimiento de la demanda sobre la oferta lo cual influjo notablemente sobre las importaciones.Entre los factores que produjeron el aumento de la demanda están el importante papel de la política salarial, ya que el aumente de los salarios reales incentivaron el consumo de bienes, además, de las facilidades crediticias, los subsidios.Otro factor expansivo fue la creciente participación del Estado, tanto en el consumo como en la inversión, como fue el caso del proceso de nacionalización de los servicios públicos.En la inmediata posguerra, los precios agropecuarios estaban a un alto precio, lo que posibilito a la Argentina, poder acumular reservas. Las exportaciones permitieron financiar el incremento de las importaciones, ya que el país no contaba con bienes de capital, evitando trastornos en la balanza de pago.La evolución del sector externo que se había experimento gracias a la coyuntura internacional favorable, en los primeros años de Perón, hicieron posible la financiación de las importaciones hasta 1949, pero el derrumbe de los precios agropecuarios provoco un deterioro de los términos de intercambio, agravado por las sequías de 1951-1952, lo que significo la reducción sensible de las reservas, al igual que problemas en la balanza de pagos y un descenso de la demanda junto a un cambio de la política cambiaria.La crisis puso de manifiesto las débiles bases del proceso de expansión. Como es el caso de la industria que dependía de la importación de bienes de capital y de una gran cantidad de insumos, en le caso de la producción agropecuaria, las condiciones no habían cambiado, por el contrario, la política del Estado promovía la industria deteriorando al sector rural. Pero dada la ausencia de exportaciones industriales, dicho sector era el único capaz de proveer las divisas necesarias para equilibrar las cuentas externas.Todo esto, llevo a un plan de ajuste en 1952, en el cual se proponía una relación de precios internos no tan desfavorables para el agro, el estímulo de exportaciones tradicionales y un mayor equilibrio en las cuentas públicas. 9 Aunque este plan no respondió por completo a las expectativas, logró superarse la depresión y la economía retomo la senda de crecimiento, aunque con tasas inferiores.4,6,3. El primer Plan Quinquenal de Gobierno (1947-1951). Al llegar a la presidencia, Perón y sus colaboradores no tenían un plan orgánico de gobierno, pero años antes, habían comenzado a formular el Plan Quinquenal de Gobierno, el cual debía establecer la orientación económica del país en el período 1947-1951, teniendo en cuenta ciertas pautas: 1.- Determinar las necesidades previsibles de materias primas de origen nacional, combustibles, energía, maquinarias, transporte, etc.2.- Establecer un programa mínimo de cinco años de las obras de inversiones y necesarias para asegurar un suministro adecuado de materias primas, combustibles, equipos mecánicos y desarrollar racionalmente la industria y la agricultura.3.- Descentralizar la industria, formando nuevas zonas, diversificar la producción y emplazar dichas zonas adecuadamente en función de las fuentes naturales de energía, vías comunicación, transporte, etc.El Primer Plan Quinquenal estableció objetivos ambiciosos y simultáneamente vago, que cumplió de manera parcial: 1.- La transformación de la estructura económica-social por la expansión industrial.2.- La reducción de los factores de vulnerabilidad externa a través del rescate de la deuda externa pública y privada y la nacionalización de los servicios públicos.3.- La elevación del nivel de vida de la población mediante una redistribución de la riqueza y una plan general de obras y servicios públicos referidos a sanidad, educación, y vivienda.4.- El empleo de parte de las ganancias generadas por términos de intercambio muy favorables de que gozaba el país, junto con las reservas de oro y divisas acumuladas durante la guerra, para la financiación del programa. 5.- EL mantenimiento de una política nacionalista frente a los organismos internacionales de la posguerra, aprovechando la coyuntura favorable.6.- Una amplia movilización de los recursos nacionales, la aceleración de la capitalización industrial, el fomento de la creación de un importante mercado interno y máxima utilización de la fluidez brindada al sistema bancario, para independizarse de las fluctuaciones de la balanza de pagos.Por primera vez, un proyecto gubernamental se pronunciaba enfáticamente a favor de la industrialización del país. Pero el proyecto carecía por completo de prioridades y su dinamismo recaía sobre el sector de la industria liviana y sobre el mercado interno, en esta estrategia se encontraba la clave de la expansión económica de los primeros años, pero a su vez jugaría un papel importante en la crisis de 1949.4,6,4.- La expansión del Estado como proveedor de servicios públicos. La nacionalización de múltiples empresas tuvo un papel muy importante sobre la evolución del sector público y del conjunto de la economía. Este proceso genero el agotamiento de algunos fondos, a la vez que produciría su impacto a largo plazo por distintas razones: la ampliación y mejora de los servicios públicos pasaba a depender por completo de las decisiones del 10 gobierno, por el poderosos efecto inductor o disuasivo de la inversión pública sobre la inversión privada y por la influencia directa que cobraba el Estado en la evolución de los agregados macroeconómicos , en la distribución del ingreso y en la generación de empleo.Uno de los ejemplos más tempranos de nacionalización fue el de las empresas de gas, proceso comenzó en 1945. También fue nacionalizado el sector telefónico, en 1946. La adquisición fue acompañada con un convenio que proveería asistencia técnica y materiales de renovación telefónica por el término de 10 años. Entre otras empresas estaban la de los Ferrocarriles franceses y las de origen ingles.La compra de empresas por parte del Estado no fue considerado un proceso compulsivo, sino, que las propias empresas extranjeras estaban interesadas en desprenderse de sus activos en la Argentina.4,6,5.- El problema de las libras bloqueadas y la nacionalización de los ferrocarriles. Las llamadas “libras bloqueadas” fueron los créditos que había tomado Inglaterra a partir 1939. Estos créditos tenían garantía en oro en el Banco de Inglaterra, no disponibles en lo inmediato e inconvertibles en otras divisas. En el caso de Argentina entre 1940-1945 logro tener de esta manera un balance comercial bilateral favorable ante Gran Bretaña, por hacerse cargo de los Frigoríficos y las exportaciones.El fin de la guerra encontró a Gran Bretaña en un estado de extrema debilidad, debido a problemas con los créditos que le otorgaba los Estados Unidos, lo que genero una depreciación de la libra, que a vez hizo quebrar su convertibilidad. En este contexto de escasez de dólares y una aguda crisis en la balanza de pagos, el Reino Unido no estaba dispuesto a desbloquear las libras adeudadas y procuró buscar distintas soluciones.Entre las alternativas que estaban a la mano del problema estaban la de acrecentar las exportaciones y reconquistar los mercados perdidos, vender sus activos en el exterior, etc.Perón tuvo que afrontar el problema de las “libras bloqueadas”, por lo que fue uno de sus primeros pasos comenzar las negociaciones de dicha deuda junto a otras cuestiones, entre ellos el tema de los FFCC.En 1946, se reunieron representantes de ambos países, para solucionar distintas cuestiones que había entre Argentina e Inglaterra. Entre ellos estaban el comercio de carne, en el cual Gran Bretaña se comprometió a la compra durante 4 años; rescatar inversiones de capitales británicos en el país; y la creación de una empresa mixta integrada por capitales argentinos como ingleses en los referente al ferrocarril. La compra del ferrocarril fue realizada en 1948. El precio de adquisición de los ferrocarriles fue motivo de fuertes controversias entre el oficialismo y la oposición.La nacionalización tenía sus razones, defendidas por el gobierno. Una de ellas se sustentaba en el control del sistema tarifario. Otra razón que se daba era que, mediante el proceso de nacionalización, el Estado había incorporado enormes cantidades de tierras, al igual que incorporo una serie de empresas de transportes, eléctricas y de agua corriente, hoteles, frigoríficos, etc. que formaban parte de las compañías ferroviarias.Otras de las nacionalizaciones más importantes fue la de los puertos, esenciales para controlar el sistema de transporte y comunicación del Estado, 11 significo también la incorporación al patrimonio estatal de muelles, embarcaderos, depósitos, etc. Entre los puertos estaban los de Dock Sud, San Nicolás, Zárate, etc.4,6,6.- Otros procesos de nacionalización e intervención del Estado. En el rubro de los transportes, el gobierno procedió además a nacionalizar los servicios urbanos de pasajeros, ya que el gobierno era el mayor accionista debido al proceso deficitario que producían las empresas. Fue así que las nacionalizaciones se produjeron hacia 1952, con la creación de la empresas de “Transportes de Buenos Aires”, de propiedad estatal.La política de nacionalización de los servicios públicos excluyó, a la empresa productora de energía Compañía Argentina de Electricidad (CADE), la cual era próspera durante la época, aunque hubo intentos de nacionalizarla durante la dictadura militar.El papel del Estado como empresario no sólo surgió de las nacionalizaciones, sino que también, de la creación de nuevas empresas y a la expansión de otras ya existentes.El transporte comercial aéreo y naval fue uno de los sectores que concentraron la atención estatal. La Flota Mercante del Estado había sido creada en 1941, con la adquisición de varios barcos italianos. Hacia 1949, se concreto la compra de Compañía Argentina de Navegación Dodero S.A., la cual se desdoblo en la Flota Argentina de Navegación de Ultramar y la Flota Argentina de Navegación Fluvial.En la navegación aérea, la única en el país era la Aeropostal Argentina creada en 1921. Debido a una crisis financiera que afrontaba, el gobierno creó una sociedad mixta que fue dividida en tres: Flota Aérea Mercante Argentina (FAMA), la Sociedad Mixta de Aviación del Litoral Fluvial Argentino y la Sociedad Mixta Zonas Oeste y Norte de Aerolíneas (ZONDA). Debido a los déficit crecientes de estas compañías, el gobierno decidió unificarlas e incorporarlas directamente a la administración estatal, así fue como en 1950 se crea Aerolíneas Argentina, esto ayudo a la creación de distintos aeropuertos en el país como el de Ezeiza, Ushuaia, etc.La principal realización de obras públicas proyectadas por el Plan Quinquenal fue la construcción de Aeropuerto Internacional de Ezeiza, ya que se establecieron a su alrededor esparcimientos compuestos por hoteles, colonias de vacaciones, etc.La movilización de las fuentes naturales de energía desaprovechadas fue, también uno de los objetivos fundamentales del nuevo gobierno. Entre ellas la creación de varios diques en Tucumán, Mendoza, etc, también centrales eléctricas e instalaciones de usinas térmicas en distintos lugares del país. Hacia 1946 comenzaron las exploraciones geológicas en Río Turbio, al descubrirse carbón suficiente para sustituir las importaciones de Gran Bretaña. Fue así como se construyo un ferrocarril paralelo al río Turbio con terminal en Río Gallegos. En cuanto al petróleo, YPF renovó la flota de buques tanques mediante la incorporación de nuevos barcos petroleros. Se emprendieron nuevas exploraciones en Mendoza, Comodoro Rivadavia, Neuquen y Tierra del Fuego, hallándose nuevos yacimientos. Pero debido a la incompetencia del desarrollo de la producción de hidrocarburos, la Argentina siguió siendo dependiente de las importaciones.- 12 4,6,7.- El gasto público y la política fiscal. En su primera etapa, el sector público acompañó y estimuló la expansión económica general a partir de un crecimiento significativo del gasto público, el cual no influyo en el déficit fiscal sino hasta 1948, donde las inversiones aumentaron mientras que los ingresos permanecían estables.Durante el período de 1945-1949, tuvo una especial importancia el gasto en inversiones, ya que era lo que estaba planeado con el Primer Plan Quinquenal, que le otorgaba prioridad a las inversiones en los sectores de producción, transportes, sanidad, etc.El gran crecimiento del empleo en el sector público se debió a la nacionalización y creación de empresas públicas, entre 1940-1947. A su vez este proceso, produjo el aumento del gasto corriente, ya que entre 1945-1955, las remuneraciones representaban entre el 40 y un 50% de los gastos corrientes.La expansión del gasto indujo a la reformulación simultáneamente la estructura de los ingresos fiscales. Existieron tres frentes principales: 1.- La reforma del esquema de impuesto que respondía al principio de “justicia SOCAL”, donde se buscó lograr un sistema tributario más progresivo. De esta manera, intentaba atenderse conjuntamente las nuevas necesidades del tesoro público y el fortalecimiento de la demanda interna.2.- El nuevo sistema previsional también colaboraba con las necesidades fiscales. Con la llegada de Perón el sistema de jubilación y pensión comenzó a ser utilizado por todos los trabajadores, ya que con anterioridad estaba restringido a un pequeño conjunto de actividades.3.- Gracias al superávit generado por el Instituto Argentino para la Promoción del Intercambio (IAPI), el cual fue muy recurrido por el gobierno peronista, era un organismo encargado de regular el comercio exterior. La política fiscal generó en los primeros años del peronismo un creciente déficit, que trató luego de poner bajo control, en especial cuando empezaron a aparecer los síntomas de una crisis entre 1949-1950. El déficit no fue una variable descontrolada y estuvo lejos de ser un factor de descontrol para la evolución macroeconómica.4,6,8.- La nacionalización del Banco Central y la política monetaria. Otro aspecto importante de la política económica del peronismo fue la nacionalización del Banco Central. Se adoptaron de inmediato una serie de disposiciones orientadas a canalizar el crédito a través de bancos especializados, como el Banco de Crédito Industrial, Banco Nación Argentina (orientado a actividades agrarias y comerciales) y el Banco Hipotecario Nacional. La Caja Nacional de Ahorro Postal procuraría captar el pequeño ahorro en todas sus formas, otorgando, sobre todo, préstamos de consumo.Además por decreto se nacionalizaron también todos los depósitos realizados en los bancos privados, buscando poner bajo control del Estado todas las fuentes de la creación de dinero del sistema.Se estableció la garantía del Estado de todos lo depósitos efectuados tanto en bancos oficiales como privados. Fue así que, orientaron la política crediticia hacia las actividades que el Estado consideraba prioritarias y reducir el costo del dinero mediante la disminución de las tasas de interés. Los resultados en su comienzo fueron buenos, obteniéndose un control eficaz. La política monetaria flexible y selectiva a favor de la nacionalización de la 13 economía favoreció el financiamiento bancario a rubros como los transportes, la construcción y la producción de caucho y metales.El Estado paso a ser parte del destino final de los créditos, junto a que poseía una gran influencia sobre la fijación de las tasas de interés, las cuales variaban según el destino. En este punto, la industria paso a ser el sector con mayor apoyo del Estado, beneficiándose con tasas de interés inferiores a las tasas de inflación. De esta forma se favorecía a la actividad productiva desde dos puntos de vistas. Se estimulaba la toma de créditos y, por el otro, se reducía el costo de oportunidad de dichas actividades frente a la alternativa de las colocaciones financieras.Un tema de controversia de estas políticas fue la de los medios de pagos, ya que el descontrol del gasto público fue financiado por la excesiva emisión de moneda lo cual alimentaba al proceso inflacionario.El incremento de la circulación monetaria de debió al peso de las demandas del sector público, el financiamiento industrial y el rescate de la deuda externa sumada la inflación de posguerra que vivía la economía mundial. El IAPI realizo la tarea de absorber el 30% del total de los créditos, la nacionalización de las empresas, la financiación de las economías provinciales y solventar el déficit público.Durante 1949-1950, se reduce notoriamente la emisión de moneda, a la vez que el sector privado incremento su demanda sobre los créditos, a un nivel que los depósitos no alcanzaban para solventar esos créditos.Hacia 1952, la política económica del Estado se vuelve mas ortodoxa, hay restricciones en materia monetaria, relacionada con el descenso de las tasas de inflación y un fuerte proceso recesivo sobre el sector productivo. La política monetaria tuvo más control que años anteriores, a pesar que aumento el gasto público. El proceso inflacionario logró moderarse hacia 1954-1955.4,6,9.- La política de ingresos. La política de ingresos fue tal vez la que se caracterizo con mayor claridad, fomentada por un vasto conjunto de leyes y medidas implementadas desde el inicio de la revolución que derrocó a Castillo. Se apu ntaba a un agresivo programa de industrialización, sin recurrir a la concepción del obrerista (comunismo), sino que era vista como un medio para el crecimiento sostenido de la producción dentro del sistema capitalista. El Estado jugo un rol importante en el establecimiento de un conjunto de medidas para regular las luchas entre empresarios y asalariados en los recursos a distribuir.El interés en la industrialización y en el sostenimiento de la demanda efectiva apuntaba en dos direcciones complementarias: una redistribución del ingreso desde el capital hacia el trabajo y desde el sector agropecuario hacia las actividades urbanas. En ambos casos, las transferencias se instrumentaban tanto de manera directa como por medio de una modificación de los precios relativos.La redistribución de ingresos de capital muestra dos facetas marcadas. La primera con un fuerte incremento de los salarios, el establecimiento de salarios mínimos, la introducción del sueldo anual complementario y la implementación de vacaciones pagas. Y la segunda, con el desarrollo del sistema de jubilación y pensión y las políticas de educación, salud, vivienda, turismo y recreación.- 14 La fijación de los precios máximos y el retraso progresivo del tipo de cambio contribuyeron de manera insignificativa en el proceso de redistribución a favor de los trabajadores. Hubo una gran influencia en el control de los precios de los productos agropecuarios por medio del IAPI, para el control de los precios de los alimentos.Las nuevas condiciones sociales y los mecanismo de regulación estatales permitieron un progresivo incremento de los salarios que superó marcadamente la tasa de inflación.En el período de 1949-1952, el modelo de distribución del ingreso entro en crisis, los salarios cayeron un 25%. Los avances en materia de legislación social se detuvieron. Los controles de precios perdieron su eficacia, contribuyendo al aumento de la inflación. Su así que, los sectores asalariados vieron deteriorado su nivel de vida.La recuperación económica se inició en 1953 permitiendo el alza de los salarios reales, generando el mejoramiento de las condiciones de vida, lo que permitió el fortalecimiento del peronismo y los sindicatos en particular. El mejoramiento de las condiciones de vida de los trabajadores fue mayor al de las clases medias, la cual fue la menos beneficiada. La redistribución del ingreso, permitió una elevación de la calidad de vida y dando a la política económica un contenido social relativamente avanzado en relación con los demás países subdesarrollados.El proceso de redistribución genero controversias, ya que el incremento de los salarios superaba la productividad, disminuyendo así las tasas de rentabilidad, lo que generaba un riesgo para los procesos de inversión y reducir los incentivos de los empresarios.4,7.- La evolución del agro y la creación del IAPI. 4,7,1.- La evolución del agro. El deterioro de la actividad agrícola experimentado en los años del conflicto bélico mundial se proyectó hacia la posguerra, donde tendió a estancarse. Se registro un descenso del cultivo de oleaginosas junto al lino, este último, debido al caer la demanda mundial por el crecimiento de la producción de otros países (Estados Unidos y Canadá), además de ser desplazado por el trigo, el maíz y la ganadería. A todos estos factores se le suman la falta de inversión para herramientas, semillas y mano de obra, ya que los propietarios preferían arrendar las tierras, junto a esto, el número de agricultores dueños de las tierras que cultivaban era relativamente pequeño. Prácticamente nada daría resultado ya que los grandes terrateniente se oponían al cambio.Por otra parte, las producciones cerealeras y de lino continuaron estancadas, no obstante la actividad agropecuaria continuó siendo un importante factor en la determinación de la renta nacional ya que también la ganadería experimento un importante crecimiento.Se observa un aumento del 25% de cultivos destinadas a la industria gracias al desarrollo del Plan Quinquenal. Además la producción del interior aumento considerablemente, gracias a la intención del gobierno de lograr un mayor equilibrio económico regional.- 15 4,7,2. La política agraria y la creación del IAPI. La política económica puesta en marcha a partir de 1946 introdujo importantes innovaciones en la organización tradicional de la producción y el comercio agropecuario. La Argentina creó su propio monopolio estatal de ventas, en relación a lo que sucedía en Europa. El organismo de efectivizar esa política fue el IAPI, el cual absorbió las funciones de la Junta Reguladora de Granos y encaró los problemas específicos que creaba la comercialización externa de las cosechas argentinas. Fue así que el gobierno controlo la producción total del país y el ahorro nacional. La institución fue creada para afrontar las coyunturas internacionales, a la vez que tenía que ser ágil en la compra, venta, distribución y comercialización de los productos protegiendo los intereses nacionales. A través de este organismo el Estado fijaba los precios de adquisición de la producción, y luego separar para el consumo interno y aumentar los saldos exportables.El IAPI fue uno de los principales instrumentos de la política económica del gobierno, ya que el comercio exterior dependía de las exportaciones agropecuarias. Sus recursos sostuvieron el proceso de nacionalización y adquisición de productos importados.El IAPI se encargaba directamente de las ventas al exterior con los gobiernos extranjeros procurando obtener los mayores beneficios para la Nación. También las exportaciones de carnes, cueros, grasas y sebos eran realizadas parcialmente por le instituto.Al transformarse en el único comprador de los bienes esenciales para la economía argentina, combino su operatoria comercial con los convenios y tratados internacionales, especialmente con países latinoamericanos. El IAPI fue un verdadero instrumento de contención inflacionaria, que ayudo a subvencionar los precios del azúcar, la harina, el aceite de combustible, etc con la intención de mantener el poder adquisitivo de los asalariados.Mediante el control del comercio exterior, el IAPI intentaba mantener los términos de intercambio de la Argentina con el resto del mundo. De esta manera, el Estado obtenía las ganancias generadas por las exportaciones agropecuarias que con anterioridad las obtenían los grandes oligopolios internacionales. A través del IAPI, la Argentina produjo una relación excepcionalmente favorable de los términos de intercambio, que fue aprovechada por el gobierno peronista para consolidar otras actividades económicas.El IAPI centralizó también las importaciones de materias primas esenciales y de bienes de capital. Lo que llevo a realizar convenios comerciales entre 1947-1949 con países como Suiza, Italia, Brasil, Holanda, etc, con la finalidad de colocar la producción a precios más ventajosos. A su vez estos proveyeron a la Argentina de maquinarias y bienes indispensables para el sector industrial.El IAPI fue adquiriendo otras funciones distintas tanto internamente como externas. En el ámbito interno, empezó a funcionar como un organismo financiero otorgando fondos para las diversas reparticiones y ente públicos destinados a la compra de bienes de capital. En el ámbito externo, otorgó financiamiento a otros países para que pudieran comprar en el mercado argentino especialmente productos alimenticios.- 16 4,8.- El sector externo: del auge a la crisis. 4,8,1.- Los primeros años: La evolución de las balanzas de comercial y de pagos. En los primeros tres años del peronismo, gracias a los favorab les términos de intercambio y la disponibilidad de mercados de posguerra, el comercio exterior siguió una tendencia positiva, a la vez que se experimentaron diversas alternativas.En 1946, la balanza comercial tuvo un saldo relativamente alto, pero entre 1947-1948 esos saldos disminuyeron considerablemente por el incremento de las importaciones, las cuales se quintuplicaron. Esto se debió a la compra de maquinaria, bienes de capital y materia primas de origen industrial, motivadas por el intenso proceso de industrialización. Es destacable el incremento en la proporción de productos intermedios metálicos, de combustible y lubricantes, de maquinarias industriales y de elementos para el transporte y las comunicaciones. Con la crisis de 1949, se afectara especialmente a los dos últimos.En el tema de los intercambios externos se puede destacar, en primer lugar el triángulo comercial con Gran Bretaña y Estados Unidos, ya que era los principales abastecedores de productos industriales en la posguerra. Las distintas áreas monetarias formo un gran problema para estos intercambios. Ya que en los acuerdo bilaterales, la libra esterlina no podía convertirse, ya que no podían usarse las divisas libremente para la compra con otros países.Uno de los aspectos mas importantes tiene que ver con las importaciones provenientes de Estados Unidos, ya que se había convertido en nuestro principal proveedor, lo que significo un fuerte déficit de la balanza bilateral y de las reservas en oro y divisas. Pero a su vez los saldos con países con monedas inconvertibles habían aumentado.El balance de pagos estuvo vinculado al rescate de la deuda externa y de las nacionalizaciones de los servicios públicos, la balanza de pagos estuvo subsidiada por las exportaciones. Durante esta época se realizaron dos importantes operaciones: el rescate de empréstitos externos y la adquisición de la Unión Telefónica, que se realizaron gracias a los saldos favorables del la balanza comercial. Esto a su vez generó el retroceso de reservas, originadas principalmente por el déficit con Estados Unidos.Este hecho volvió a repetirse en 1948, por le aumento del déficit con Estados Unidos, la nacionalización de los ferrocarriles, otras empresas de servicios públicos y el pago de la deuda externa. La nacionalización de los ferrocarriles fue un hecho prácticamente inevitable, por el consentimiento de las clases políticas y de las empresas inglesas, por los problemas de las libras bloqueadas y la inconvertibilidad inglesa.4,8,2.- La crisis económica y el sector externo. Hacia 1949, la crisis genero desequilibrios en el sector externo, que obedecía también a causas internas. Esto se debió a la recuperación económica de Europa, la caída de reservas y los problemas de estructuración en el agro junto al agotamiento de la política económica, referente a la industria y de redistribución.Si bien en 1950, los intercambios volvieron a ser positivos, habían caído el volumen de exportaciones, y en 1951-1952, existieron un fuerte déficit comercial, por el aumento de las importaciones y un brusco descenso de las 17 exportaciones, a lo que se le agrega la caída de precios internacionales sobre productos primarios.En el orden externo uno de los principales motivos de la crisis fue el Plan Marshall, que discrimino las exportaciones argentinas. El Plan proveía el envío de créditos baratos, equipamiento de capital, combustibles, materias primas y alimentos, favoreciendo los excedentes exportables agrícolas e industriales estadounidenses.Se suponía que a través de la Administración de Cooperación Económica (ECA), produciría en la Argentina una salida para sus exportaciones proveyendo devisas para el equipamiento industrial. Pero la ECA argumentó que los altos precios que los argentinos fijaban para su producción exportab le dificultaban las compras. A esto se le suma el problema de que la producción agrícola era más tecnificada, fuertemente subvencionada y apoyada por las políticas del Estado para proveer fondos a Europa, lo que desplazo así a la Argentina de algunos mercados tradicionales.A la vez que se reducía la demanda también sucedió con la oferta, lo cual fue el resultado del proceso de estancamiento de la producción rural, que se manifestaba con la disminución de las áreas cultivadas y un descenso de la producción de granos. Entre tanto, el crecimiento de población y aumento del poder adquisitivo, generando el aumento de la demanda, producía la disminución de los saldos exportables, por otra parte, la política del gobierno de dirigir los recursos del agro a la industria, el congelar los arrendamiento y tratar de mejorar las condiciones de vida, genero un desaliento hacia el desarrollo de los productos tradicionales.La situación se complico con la graves sequías, entre 1949-1951, que se llegó a cosechar menos de la mitad de la superficie sembrada. La situación fue mas grave para la ganadería, que afectó la capacidad de recepción y engorde del ganado. Para compensar, el gobierno concedió sobre precios a las cosechas y subsidios en las compras de semillas. En la ganadería se subsidio comprando los productos a precios mayores que en Inglaterra.Este problema se traslado a la balanza de pagos, ya que las reservas en oto y divisas y la caída de los precios de las exportaciones, produjeron un deterioro de los términos de intercambio. Hacia 1952, el déficit comercial creció, agotando las reservas de Oro y divisas generando importantes trastornos en la economía.4,9.- La política industrial y el proceso de industrialización. 4,9,1.- La política industrial. La industria ocupaba un lugar central en la concepción económica del peronismo. Su crecimiento era tomado como la base sobre la que se podría avanzar en la redistribución del ingreso, en el logro del pleno empleo y en la independencia del abastecimiento interno. Fue así que, por primera vez se observa en un gobierno argentino una posición firmemente industrial.En la formulación del Primer Plan Quinquenal se hacía hincapié en el desarrollo de las industrias livianas, en especial a aquellas vinculadas a la utilización de insumos agropecuarios. A este tipo de industrias se le reconocían diversas ventajas: La industria liviana no necesitaba gran ayuda tecnológica desde el exterior y no necesitaba grandes aportes de capital. Si bien en algunos planes del gobierno se mencionaba la necesidad de desarrollar las industrias bases, la característica principal del proceso de industrialización, 18 fue el desarrollo de la sustitución de bienes de consumo no durables, conocida como “sustitución de importaciones fácil”.Los instrumentos de política industrial utilizados apuntaban en especial hacia la restricción de las importaciones, la concesión de subsidios y desgravaciones impositivas. Un aspecto destacable en materia arancelaria fue la eliminación de las listas de aforos a partir de 1947, como medida proteccionista. La protección frente a la competencia externa no sólo emanaba de los aranceles aduanero, sino también del régimen de control de cambio, que exigía permisos previos de importación y establecía preferencias para la compra de materias primas y bienes de capital, etc.Mediante una ley, se encargaba al Banco Central todas las operaciones relacionadas con el control de cambios, que se implantó para hacer frente a los fastos de divisas que el país estaba enfrentando debido a la expansión de las importaciones.Hacia 1950, se devaluó oficialmente la moneda debido a la creciente sobrevaluación del peso en relación con su paridad teórica, la cual no puso resistir a la crisis de 1949. La fuerte devaluación encareció el prec io de los productos importados, con lo que la protección a la industria local cobró todavía más fuerza.Los subsidios también tuvieron incidencia en el crecimiento del sector industrial. Se otorgaron subsidios directos para beneficiar especialmente a las grandes empresas. Sin embargo, el elemento más novedoso del peronismo fue la ejecución de una política crediticia específica para el sector industrial. 4,9,2.- El Banco de Crédito Industrial. Uno de los aspectos destacados de la política industrial fue el otorgamiento de una importante corriente de créditos al sector industrial. Estos préstamos fueron adjudicados en su mayor parte por le Banco de Crédito Industrial (BCIA). En este contexto, y de acuerdo con los propósitos iniciales de la institución, las pequeñas y medianas empresas fueron favorecidas con créditos baratos para distintos fines.Las sociedades anónimas y diversas compañías estatales absorbieron durante todo el período una alta proporción de los préstamos del Banco. Entre las principales empresas beneficiadas se encontraban el IAPI, Siam, Di Tella Ltda., además de las grandes empresas de construcción.Hacia 1952-1953, el Banco se esforzó en asegurar la consolidación de las industrias financiadas a la par que incrementó su ayuda a algunos grandes proyectos de inversión con el fin de sustituir importaciones en las ramas más dinámicas.Otro de los rasgos característicos del Banco fue el alto interés de los créditos a instituciones o empresas con actividades no industriales, principalmente el IAPI, y también a las empresas de transporte, comunicación, etc. Entre 1946-1949, el Banco se transformó en el canal de recursos del Banco Central destinados a operaciones que constituían objetivos específicos de la política económica peronista.Los sectores industriales que recibieron mayor apoyo fueron los de alimentos, bebidas, tabaco, textiles, confección, etc. El crédito del Banco se canalizó principalmente a estas actividades, aunque no existió una especialmente favorecida, no hubo una especialización crediticia clara orientada hacia ciertas actividades. El Banco Industrial financió más que a 19 sectores a determinadas empresas, independientemente de su actividad económica, que demandaban créditos baratos según sus necesidades.4,9,3.- La evolución del sector industrial. Las políticas económicas instrumentadas tuvieron un gran impacto en la evolución del sector industrial. La coyuntura favorable de los primeros años produjo un vertiginoso crecimiento, apuntado por un fuerte proceso de inversión. Las inversiones en maquinarias y equipos, clave para cualquier cambio tecnológico y productivo, fue muy importante entre 1946-1948, como resultado de las importaciones, sobre todo de origen norteamericano, para caer luego en 1949 abruptamente. Los cambios en la política económica hicieron posible un repunte en 1954-1955.Para obtener los bienes intermedios y de capital requeridos a fin de iniciar una etapa más compleja de industrialización, que incluyera sectores productivos dinámicos, se abría en la época una disyuntiva: 1.- Alentar las exportaciones agrarias con el propósito de conseguir las divisas necesarias para importar esos bienes.2.- Dar un gran impulso a la producción local, creando mercados externos para bienes industriales con el mismo objeti vo.Pero los problemas del sector agrario, la baja competitividad y el desinterés por promover la colocación de otros productos en el exterior, conspiraban contra ambas alternativas, y recurrir al capital extranjero contrariaba, por otra parte, la orientación adoptada inicialmente por el gobierno. Para complicar el panorama, la favorable coyuntura internacional de posguerra se disipaba, dando lugar a la aparición de crecientes desequilibrios externos. Pero recién para 1952, la industria encontraría un momento favorable a través de los rublos tales como combustibles, productos químicos derivados del petróleo y maquinarias y vehículos.A mediados de 1947, se creaba la Dirección Nacional de Industrias del Estado (DINIE), dependiente de la Secretaria de Industria y Comercio. Su objetivo era hacerse cargo de empresas industriales de propiedad enemiga durante la guerra, pertenecientes a los países del Eje, que habían pasado en bloque a ser propiedad del Estado. Entre ellas se hallaban compañías alemanas de gran importancia, como Thyssen Lametal S.A., Siemens Bauunion S.A., etc.También fue creado un grupo de empresas mixtas, asociadas al capital privado, una de las más importantes fue la Sociedad Mixta Siderúrgica Argentina (SOMISA) en 1947.Otra rama que alcanzó un gran dinamismo fue la mecánica, en gran parte debido a la existencia de fabricaciones militares. Pese a que no pudo lograr una producción masiva, consiguió un alto desarrollo técnico, favoreció incluso la instalación de fábricas de automotores, tractores y equipos ferroviarios. Entre las industrias más dinámicas se encontraban las de metales y las de vehículos y maquinarias, que adquirieron gran impulso durante los últimos tiempos del gobierno y se afianzaron en años posteriores.-