de cimentación del Método Científico, el autor nos va dando los elementos para ubicar ¿por qué el Método Clínico no puede ser científico? Si el tema principal de interés del Método Clínico es la investigación de un caso, el autor dice “Efectivamente, lo que caracteriza al método clínico, en una primera aproximación, es el estudio en profundidad y en extensión de un caso. El ‘caso clínico’ explorado en todas sus variables evoca la situación inversa de la del método experimental donde se intenta explorar las modificaciones de una sola variable en multitud de casos que constituyen ya sea la totalidad de un universo o una muestra representativa de la misma” (Pasternac, 1979, p.146). 10 Al usar esas dos categorías Pasternac nos explica entonces que el investigador deberá profundizar sobre “la historia” del sujeto, y junto con ello ser puntualmente observador de los comportamientos que este va relatando. Hay que subrayar que eso no es todo, en eso histórico está una línea de investigación, la historia cuenta, la historia nos cuenta mucho. Pero como si existiera otra línea que se superpone a esta investigación, nos explica que hay que estar pendientes a las actitudes, acciones, comportamientos, reacciones observables durante el curso de la relación, que se sostiene durante un tiempo determinado, de forma estable con él. Dos líneas de investigación, experimental y clínica, una a profundidad y otra a extensión. La profundidad en el tiempo, que no por ser pasado, o de contenidos históricos, que son acontecimientos lejanos cronológicamente hablando, dejan de ser hechos con fuerza e importancia. No son hechos perdidos, muy por el contrario son hechos vigentes. Esa vigencia, entre otras cosas estará marcada en el presente por las acciones y actitudes que podrán ser observables, en el transcurso de la nueva relación, la relación clínica. Como si fuera una “X”, una línea de la investigación toma uno de los tramos de la x, y trae al presente esos datos añejos con una enorme carga de energía. La otra línea